Identidad e inter 3

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EDUCACIÓN INTERCULTURAL. ANÁLISIS Y PROPUESTAS JOSÉ LUIS GARCÍA LLAMAS* RESUMEN. En la aceptación de una nueva sociedad pluricultural, es preciso reco- nocer la importancia de la educación a la hora de ofrecer unas respuestas adecua- das a las necesidades sociales. Por ello, la educación en la diversidad no ha ser fuente de enfrentamientos, sino un componente que enriquecezca la cultura. Para que un educador se desenvuelva de forma adecuada en las sociedades democrá- ticas, es imprescindible que adquiera unas auténticas competencias intercultura- les. Ello exige que su nivel de formación intercultural sea elevado. El hecho de que los alumnos de los centros escolares procedan de culturas diferentes, lejos de suponer un problema, debe plantearse como una buena oportunidad para edu- car a los sujetos en valores democráticos. ABSTRACT. In accepting a new pluricultural society, it is essential to recognise the role of education as a way of offering solutions to societal needs. For this reason, education in diversity should not be a source of confrontations, but rather some- thing which enriches the culture. In order for an educator to develop appropria- tely in a democratic society, it is essential that they acquire authentic intercultural competencies. This requires an advanced level of intercultural training. Far from being a problem, the fact that students come from different cultural backgrounds should be considered an ideal opportunity for teaching democratic values. La visión del interculturalismo ha evolu-

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EDUCACIÓN INTERCULTURAL. ANÁLISIS Y PROPUESTAS

JOSÉ LUIS GARCÍA LLAMAS*

RESUMEN. En la aceptación de una nueva sociedadpluricultural, es preciso reco- nocer la importanciade la educación a la hora de ofrecer unas respuestasadecua- das a las necesidades sociales. Por ello,la educación en la diversidad no ha ser fuente deenfrentamientos, sino un componente que enriquecezcala cultura. Para que un educador se desenvuelva deforma adecuada en las sociedades democrá- ticas, esimprescindible que adquiera unas auténticascompetencias intercultura- les. Ello exige que sunivel de formación intercultural sea elevado. Elhecho de que los alumnos de los centros escolaresprocedan de culturas diferentes, lejos de suponer unproblema, debe plantearse como una buenaoportunidad para edu- car a los sujetos en valoresdemocráticos.

ABSTRACT. In accepting a new pluricultural society,it is essential to recognise the role of educationas a way of offering solutions to societal needs.For this reason, education in diversity should notbe a source of confrontations, but rather some-thing which enriches the culture. In order for aneducator to develop appropria- tely in a democraticsociety, it is essential that they acquire authenticintercultural competencies. This requires anadvanced level of intercultural training. Far frombeing a problem, the fact that students come fromdifferent cultural backgrounds should be consideredan ideal opportunity for teaching democratic values.

La visión del interculturalismo ha evolu-

cionado de maneraapreciable en la últi- madécada. Así, estamos deacuerdo con Touriñán(2004), quién, tras unalarga disertación sobre eltema, señala que:

Lo que permanece es elintercultura- lismo comotarea, pero ha cambiadode manera muysignificativa el inter-culturalismo comoresultado (Touri- ñán,2004, p. 27).

Esta percepción habríaque entroncar- la con losprofundos cambios que sehan producido en lassociedades modernas comoconsecuencia de losconstantes flu- josmigratorios que estánsuponiendo, en los últimosaños, la incorporación ala Europa comunitaria y,de forma especial, aEspaña de un gran númerode personas. Estefenómeno, marginal enotras épocas, adquiereactualmente un rangouniversal, e implica laaparición de sociedades enlas

(*) Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED)

Revista de Educación, núm. 336 (2005), pp. 89-109.Fecha de entrada: 15-10-2004 Fecha de aceptación: 05-01-2005 89

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que han de convivirpersonas de razas,religiones, creencias ycostumbres dife- rentes.

Aunque se puedeconsiderar que losfactores que generan estosmovimientos de personasson múltiples,probablemen- te ladinámica de la economíamundial y la globalizaciónsean los que más haninfluido. No obstante, nodebemos olvi- dar laimportancia de las nuevastecnolo- gías de lainformación y lacomunicación, que hacenque los hechos se conozcande forma simultánea en loslugares más recónditos delplaneta, al tiempo quetrasladan a los paísessubdesarrollados imágenesque reflejan las formas devida de las sociedadesoccidentales. Esto lleva auna parte importante de lapoblación de estos países,que vive por debajo delumbral de la pobreza, aemprender la aventura, yemigrar a lugares con unacul- tura y forma de vidamuy distinta. Todas estasrazones justifican que la«intercultu- ralidad»ocupe un lugar importante

en la reflexión y elanálisis de las sociedadescontemporáneas.

Nos encontramos ante uncontexto que, según PérezJuste (2004), viene mar-cado por los cambiosconstantes y com- plejosque se producen en lasociedad, los avances delconocimiento, el riesgo demanipulación informativadesde los medios decomunicación social y elpaso de una sociedad conuna cultura cuasidominante a otra conmuchas culturas conviviendoen un espacio físico. Asípues, dada la nuevarealidad social, cabecuestionarse si larespuesta educativa puedeser la misma que se haofrecido en épocas pasadas.En este sentido, creemosque es preciso adaptarse alos nuevos tiempos, perorespetando las tradicionesconsolidadas a lo largo dela historia en la culturaoccidental.

La trascendenciaeducativa de esta situaciónen la Europa occidentaldebe

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conducirnos a poner másinterés en la formaciónde las personas que enlos meros procesos deinformación. Es decir, elestablecimiento delcontexto de los fenómenoseducativos ha de ser lacolum- na vertebral sobrela que se sustente, desdeun enfoque intercultural,la futura educación.

Así pues, los sistemaseducativos de los paísesde acogida debenadaptarse a las nuevasnecesidades de lasociedad, y la escuela vaa ser la encargada dedotar a las personas delas actitudes y lascapacida- des queprecisarán paraintegrarse sin dificultaden esas sociedadescomplejas, plurales, y enconstante cambio y evolu-ción. Esto debe conducira la formación deverdaderos ciudadanos quevivan en comunidad deforma solidaria y aceptenlas reglas de lademocracia occidental.Para que la convivenciaentre culturas seafactible, debe existiruna serie de reglascomunes aceptadas y

compartidas por todos, taly como señala Siguan(1998) cuando indica:

No es posible montar unsistema edu- cativo enel que simultáneamentese exalten culturas convalores contra-dictorios entre sí igualque es imposi- blemontar un sistemaeducativo que renunciea hacer ningún juiciode valor. La educaciónsiempre, explícita oimplícitamente, se apoyaen un sis- tema devalores, en unaresponsabili- dadcompartida, en unosdeberes y derechos quehagan posible la vidasocial (1998, p. 144).

En general, se tiendea considerar comoexpresión multicultural lapropia de aquellassituaciones en las quelos gru- pos o losindividuos proceden dediferen- tes culturaspero viven en un mismoespa- cio físico,independiente de cualsea su estilo de vida.Es decir, que podemosidentificar laexpresión multicultural

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–que supone la convivenciay la acepta- ción depersonas distintas en unmismo espacio geográfico–como una forma de vida enunas condiciones marcadaspor la existencia demúltiples influenciascultu- rales. En unprincipio, elmulticulturalis- mo surgecomo respuesta al«asimilacio- nismo» –que,o bien no reconoce ladife- rencia, o estima quees fruto de atrasos ydesviaciones–, puesto quepropugna el reconocimientode la diversidad cultural,el derecho a la diferenciay la valoración similar detodas las culturas, aunquedesde una perspectivaestática y restringi- dadel propio concepto decultura.

No obstante, estavisión del proble- ma,en cierto sentidorestrictiva, da paso a laexpresión intercultural, que seidentifi- ca más con losprocesos y procedimientosdinámicos de vivenciasen grupo y con aquellasituación en la que losindividuos sonconscientes de suinterdependencia, lo que

debe conducir al respetohacia lo diferente.Evidentemente, sedefienden concepcionesculturales complejas,diná- micas, cambiantes,etc., que tratan deresaltar lasposibilidades deinteracción, flexibilidade intercambio entre losindivi- duos que convivenen una zona determi- nada.El «interculturalismo»configura una forma deintervención que haceespe- cial hincapié en elvalor que las relacionese interacciones tienenpara la convivencia de lasculturas dentro de unmismo espa- ciogeográfico y social.Representa, sin duda, lapropuesta más arriesgada,crítica e inclusiva a lahora de contemplar y abor-dar la temática de lasdiferencias en lacomunidad.

Nos encontramos en elmomento más apropiado parafomentar de manera espe-cífica un cambio en laformación intercul- turalen los centros de formacióndel pro- fesorado, puesserán los profesores losque tendrán que afrontar,

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en las aulas, las nuevassituaciones. En loscomienzos del

siglo XXI, se sugiere quese revisen y ade- cuen losprocesos formativos, yaque la labor de educar alos educadores es fun-damental y nos permitirámantener una democraciaproductiva y plural, ytrasla- dar a los centroseducativos esta propues-ta, con el fin de hacerposible que los individuosconozcan mejor suspreferen- cias, susvalores y cómo puedencontri- buir con suesfuerzo a la mejorasocial.

¿QUÉ SE ENTIENDE PORCULTURA?

Podemos encontrarmúltiples definicio- nesde la palabra «cultura»,ya que éstas varían enfunción de las tendenciasde los autores que hantratado de aproximarse aeste concepto. Esto sedebe a que cada autor fijasu atención en aquellosconteni- dos culturalesque considera básicos ensu concepción –convicciones, tradiciones,comportamientos, lenguas,conocimien- tos, formas devida, religiones... Enconse- cuencia, debemosresaltar que, dado quetoda cultura está expuestaal paso del tiempo y a las

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influencias del entornoinmediato, es por lotanto dinámica. Existe unacuerdo entre losdiferentes autoresconsultados respecto alhecho de que cuanto másaislada e inmóvil perma-nece una cultura más seempobrece.

En su sentidotradicional, podríamosdefinir cultura como elconjunto de pro-ducciones que unadeterminada comuni- dadha generadohistóricamente. La cultu-ra se puede identificarcon el universo simbólicoque el individuo une almundo físico natural através de su actividad,para continuarlo,perfeccionarlo y vivir enél. Por su parte, Aguado(2003) nos recuerda quela cultura no perteneceal individuo, sino que escompartida por el grupo.La cultura proporciona algrupo sus líneas deacción, pues sus miembroscomparten ciertascreencias, aceptandeterminados hechos ydefienden una escala devalores

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concreta. Así pues, siaceptamos que la culturaes aquello que se compartey vive con intensidad enun determinado gruposocial –sus valores, susestructuras e insti-tuciones, sus hábitos, susexperiencias compartidas,su organización, supercep- ción de lasociedad y sus símboloscontex- tuales–, debemosaceptar que su defini-ción no puede seruniforme, ya que esta- rácondicionada por elpropio contexto en que sedesarrolla.

Desde la perspectivaetnocéntrica de lacultura, el relativismoconstituye una posturaeficaz a la hora decualquier pre- tensión desuperioridad de una razares- pecto a otra, y nospermite desarrollarprocedimientos objetivosdel conoci- miento encontra del sentido comúnpara poder así superar lasactitudes de rechazo a losotros. El relativismomoral mantiene que losvalores son producto decada cul- tura y de suproceso de evolución, porlo que pueden ser

justificados conforme asus propios criterios. Porotra parte, el relativismoepistemológico señala quela verdad se circunscribeal ámbito local ehistórico. Así pues, estasformas de relati- vismo nosindican que todo vale –ningu- no es mejor queotro–, y llegan a defen-der el principio de la noingerencia, de tal formaque el diálogo y elconsenso cultu- ral entrelos miembros de lacomunidad permiten llegar aestablecer generaliza-ciones científicas.

En muchas de lasdefiniciones, los autoresse fijan más en losdenominados contenidosculturales que en aquellosque como loscomportamientos o las tra-diciones son más complejosy difíciles de discernir.Por este motivo, losconceptos formales tienenmayor aceptación, puestoque los miembros queconfiguran una comunidadtienden a percibir larealidad externa medianteun sistema de significa-dos interiorizados a partirde las vivencias y lasrelaciones sociales

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cotidianas. Así pues, lo más importantede una cultura no es lovisible, sino el conjuntode signi- ficados comunesque nos permite expli- carel por qué de lasconductas, las actitu-des, las vivencias y delos resultados de lainvestigación que generadicho grupo cul- tural.

Hemos de tener en cuentaque la cul- tura actual secaracteriza por sucompleji- dad –no existenmodelos universales quesirvan para todos–, suamplitud –los con- tenidosse enriquecen cada día connue- vas aportaciones–, ladiversidad de fuen- tes –frente a las fuentesorales en la anti- güedad,en la actualidad, no sóloconta- mos las fuentesescritas, sino también conlas que nos aportan lasnuevas tecnolo- gías–, lacontradicción existenteentre los mensajes quetransmite –la escala devalo- res para unacultura puede no ser tanimportante para otras,así que la clave serállegar a consensos y a laaceptación de lo común–,su extensión universal –sepuede y debe transmitir atodos, y, para ello,además de la escuela,existen otros medios de

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comunicación– y lainfluencia de los avancestecnológicos –lo queimpli- ca la extensión delos mensajes y la inme-diatez de los mismos.

Así pues, entendemosque la cultura se ha dedefinir en función de lasactivida- desnormalizadas inherentes aun grupo social y, porello, se puede considerarque la cultura consisteen un conjunto de modelosque nos sirven parapensar, sen- tir yactuar, que configuran lasactividades del individuoen su relación con lanatu- raleza, con otrossujetos y con lo trascen-dente. Nos encontramosante una forma de ser yactuar consensuada que ungrupo social adopta paraque, mediante lainterpretación, laplanificación y la actua-ción, sus actividadesfaciliten la adapta- ciónal medio y lasupervivencia del grupo.

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EL RECONOCIMIENTODE LA IDENTIDAD Y LADIVERSIDAD

En la sociedad europeaoccidental, convi- ven enel mismo espaciogeográfico gru- pos depersonas entre los que, enocasio- nes, se generangraves desequilibrios decarácter económico,demográfico y social. Estoocurre, sobre todo, cuandose adop- tan actitudesextremistas que tienden aidealizar la posturapropia y desechar todaslas demás. Probablemente,la mejor manera deenfrentarse a estosproblemas sea recurrir ala experiencia acumuladaen el trato con losdiferentes, y aceptar yres- petar los hábitos ylas costumbres de cadagrupo social desdeposturas tolerantes yreceptivas que no exijanla superioridad de unosobre los demás.

Desde posturasliberales, se defiende quela identidad consiste enel conoci- miento de unomismo. Por lo tanto, no sedebe privar al individuode su dignidad humana si

no se quiere que seresienta. Esto, contempladodesde la perspectiva delindividuo, implica laigualdad de dere- chos, esdecir, la aplicaciónuniforme de las reglas deconvivencia, lo que crea uncontexto que permite que elsujeto tome sus decisioneslibremente. Ahora bien, sitenemos en cuenta el gruposocial (comu- nidad,nación, cultura,religión...) y el res- petoa su procedencia y al lugarque ocupa en el entramadosocial, se debe garantizarel estricto cumplimiento delos derechos fundamentalesreconocidos en los orga-nismos nacionales einternacionales.

Ante esta perspectiva, sehace necesa- rio situar alindividuo ante un contextoen el que los cambios ensu experiencia de vida vana ser constantes, ya quedebe estar preparado paraafrontar estos retos. Pues,si hay alguna seña deidentidad que sea propia delas sociedades modernas, esla multiplicidad dediferencias que estánpresentes en ellas, yante las cuales el

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sujeto debe adoptardistintas posicionessubjetivas en función desu propia escala devalores y sus creencias.Por ello, el grupopermanece unido cuando searticu- la debidamenteesa multiplicidad. Encon- secuencia, hemos dereconocer que laestructura de laidentidad no es estable,sino dinámica, dado quepermanece abierta y espermeable a lasaportaciones del entorno.

La capacidad queposeen los sujetos paraidentificar y definir supropia identi- dad deformas diferentes para asílograr un funcionamientoefectivo y eficaz encontex- tos culturalesdistintos está muyrelaciona- da con labúsqueda del éxitoacadémico y profesional, yla supervivencia de sucultu- ra. Así, cuandodeterminados grupo socia-les soportan privacionesy desafíos en la vidacotidiana, mejoran susposibilidades defuncionamiento en losnuevos contex- tossociales, culturales,lingüísticos y eco-nómicos. La aparición deidentidades simultáneasrequiere de la persona

destre- za y flexibilidadpara enfrentarse a estassituaciones y superarlas.

La diversidad se refierea la identifica- ción dela persona que hace queésta sea y se manifiestecomo realmente es, y nocomo nos gustaría quefuese, y esto es fielreflejo de la identidad.En este sentido, ladiferencia radica en lavaloración de ladiversidad, que puede darlugar a distin- tasmanifestaciones, tanto derechazo, co- mo decomprensión. Por ello, enlas so- ciedades modernas,se hace necesario concebirla diversidad como unvalor de suma importancia.

Quizá uno de losproblemas más importantesen este comienzo delsiglo XXI vaya a ser cómoarticular lo común de lacondición humana con lagran variedad de formasculturales en que semanifiesta. Así pues, sehace necesario combinar loindividual y lo colectivode tal forma que se puedaestablecer una distinciónentre

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lo común a todos y lodiferente y propio de cadauna de las culturas. Ahorabien, hay que serconscientes de ladificultad que entrañamantener unos elementosbásicos comunes, pues lafacilidad para losdesplazamientos físicos yla influencia constante delos medios de comunicaciónhacen que el individuopueda modificar su propiaidentidad a lo largo de suciclo vital.

Las personas nos vamosidentificando a travésde un largo proceso deinte- riorización congrupos y rasgos que nosdefinen, y quedescubrimos como propiosy definitorios denuestro ser personal...la identidad no es solouna autopercepción,sino una relacióndinámica e interactivacon los otros(Bartolomé, 2004, p.69).

En la misma línea, PérezJuste (2004) señala que laidentidad no es algoinnato y fijo en el serhumano, al contrario, esuna realidad que seacomoda al contexto y queel hecho de compartir un

mismo espacio geográficocon otras personas, gruposo culturas puede modificar.Nos encontramos ante unaconcepción diná- mica dela identidad, ya que éstase va construyendo y, eneste proceso, el con-tacto entre las diferentesculturas tiene un papel,repercute directamente enel marco generado por laeducación inter- culturalen el momento deenfrentarse a estassituaciones.

Por otra parte, hemos detener en cuenta que cuandonos referimos a ladiversidad cultural noestamos enuncian- do unconcepto, sino constatandoel hecho de que puede habertantas culturas comonaciones o etnias. Asípues, la con- frontación devarias culturas y de suspro- cesos detransformación puede poneren entredicho la identidadcultural de los pueblos yde sus componentes.

Esta confrontación puedeproducirse tanto en uncontexto tanto nacional,

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como internacional. Enlos albores del sigloXXI, la inmensa mayoría delas nacio- nes seenfrenta al problema quesupone la convivenciaentre diferentes gruposétnicos –los originariosde la zona y losprocedentes de lainmigración, que llevanconsigo una herenciacultural determina- da,marcada por su propiahistoria y su origengeográfico. Ensituaciones extre- mas,puede desembocar enterrorismo o conflictosbélicos entre lospueblos, como ha ocurridoen el caso de algunastribus africanas, o en laIndia, los Balcanes, etc.

Ante la complejidad delas situaciones que seplantean en laconvivencia cotidia- naen la sociedad occidentaly, de forma más concreta,en la española, losorganis- mos públicos yprivados deben ofreceruna respuesta deintegración que pueda seraceptada y asumida porlas comunida- des que hande convivir en un espaciofísi- co determinado, ysi logramos integrarla enel modelo de accióneducativa, la escuelapuede ser un buen punto

de par- tida para ello, yaque constituye el primernúcleo de convivencia delas personas con elentorno inmediato.Entendemos que laconstatación yreivindicación de lasdiferencias ha de sercompatible con laaceptación de aquellosreferentes comu- nescompartidos por lassociedades democráticas.

En la aceptación de unanueva socie- dadpluricultural, es precisoreconocer la importanciadel papel que laeducación ha de desempeñara la hora de ofrecer unasrespuestas adecuadas a lasnecesida- des sociales.Por ello, el hecho deeducar en la diversidadimplica que el pluralismoresultante de lasdiferencias provenientesde las característicaspersonales o de grupo nopuede ser una fuente deenfren- tamientos, ha deser un componente queenriquezca la cultura. Sedebe conjugar de maneraadecuada la educación enel respeto a la dignidadhumana y contra

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toda forma dediscriminación debida alsexo, la cultura, laetnia, la religión, etc.con una educación que,además, permita ser yactuar de forma toleranteante los demás miembrosdel grupo social.

HACIA UNACLARIFICACIÓNDE LA EDUCACIÓN INTERCULTURAL

En los últimos años, enlos escritos, lasexpresiones«multicultural» e«intercultu- ral» se hanutilizado como sinónimasy, en ocasiones, de formaconfusa y poco clara.Consideramos que mientrasque el térmi- nomulticultural debeemplearse cuando se hacereferencia a layuxtaposición espa- cial ytemporal de unas culturasdetermi- nadas, laexpresión interculturalsugiere la idea de unaintervención que fomenteel dialogo y el dinamismoentre las dife- rentesculturas que nos guiaráhacia una influencia yenriquecimiento mutuos.Por lo tanto, lautilización del segundo de

estos términos nos parece–desde el punto de vistaeducativo– más adecuada yajustada a la realidad.

Ahora bien, podemoscuestionarnos si larespuesta educativa debeser la apuesta por unaeducación intercultural enlos centros escolares.Puesto que trata- mos deadoptar una posturaabierta, con- sideramos queello supone realizar elesfuerzo de tratar deadaptar el modelo deenseñanza a lasnecesidades y las demandasde los diferentes gruposcultu- rales, de formaque entre los distintoscolectivos y grupos étnicosy culturales se produzca unencuentro que genere inter-cambios positivos quefavorezcan el enri-quecimiento mutuo. Portanto, se trata de formularuna propuesta que vayadirigida tanto a los gruposautóctonos, como a losinmigrantes ubicados en unmismo con- texto.

Una de las principalesinnovaciones que seproponen para poderatender debidamente a losgrupos heterogéneos

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tiene como punto departida el aprendi- zajecooperativo. Así, DíazAguado (2003) se inclinapor adaptar la educacióna los cambios que seproducen en la sociedad.En este sentido, señalaque no sólo losprocedimientos educativostradicionales debenadaptarse para favorecerla inclu- sión de losalumnos que se relacionanen contextosheterogéneos, sino que,ade- más, es preciso quelos sujetos adquieranbuenas habilidadessociales que les per-mitan enfrentarse conéxito a las incerti-dumbres de la sociedad.Los contextos en los quees posible laconvivencia entreculturas y etniaspermiten y favorecen latolerancia y la amistadentre los miem- bros delgrupo, por lo que,finalmente, es necesarioque los procesos deenseñanza y aprendizajepermitan que los nivelesde incertidumbre sereduzcan y aumente elprotagonismo del alumnoen la resolu- ción de losconflictos de formapositiva.

Algunas concepcionesde la educa- ción

intercultural ya han sidodesechadas, pero, desdeuna perspectivahistórica, convienetenerlas en cuenta. Así,en un momentodeterminado, se consideróque la educaciónintercultural era aquellaque prestaba, de maneraexclusiva, atencióneducativa, en undeterminado centro, alas minorías que teníanproblemas socia- les. Laasimilación y laintegración de estasminorías en la culturade la mayoría constituíasu objetivo fundamental,pues- to que trataba decompensar esas diferen-cias, si bien mostrabaescasa sensibilidadhacia las culturas deorigen. En el otroextremo, se ubicanaquellas posturas queabogaban por un cultoexcesivo de ladiversidad cultural y elidealismo de lapluralidad. Uno de losprincipales riesgos quepresentaban era queconcedían el mismo valorcurricular y pragmáticoa todo rasgo dediferenciación cultural.Esto puede encubrir loque algunos auto- resdenominan racismodiferencialista,

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que conduce a excluir alas minorías de algunoslogros sociales en aras derespe- tar de maneraradical esas diferencias.

A continuación,presentamos diversasacotaciones conceptualesrealizadas por reconocidosexpertos en educacióninter- cultural, quecontribuirán a clarificarla situación:

La orientaciónintercultural constitu-ye un compromiso paraasegurar la convivenciaentre los miembros dediferentes culturas ysubculturas, puesto quetales diferencias son laexpresión de la riquezade una socie- dad en labúsqueda de respuestasa las necesidades de lavida. La com- prensiónde otras culturas ymodos de vida esindispensable para com-prender la cultura y losmodos de vida propios(Escámez, 2002, p. 132).

La educaciónintercultural tiene comoobjetivos proporcionaral alumnado lascompetencias socialesnecesarias para susrelaciones con losdemás, así como elenriquecimiento

multicultu- ralpropiciado porintercambios en los quetiene oportunidadesvariadas de comunicacióny cooperación, tannecesarias hoy en laconvivencia dia- ria(Morales, 2000, p. 9).

La educaciónintercultural pretendeformar en todos losalumnos de todos loscentros una competenciacultural madura; esdecir, un bagaje deaptitu- des y deactitudes que lescapacite para funcionaradecuadamente en nuestrasociedad multicultural ymul- tilingüe (Jordán,2001, p. 49).

Por su parte, Aguado(2003) incide en laimportancia de promoverprácticas educativas quese orienten a todos losintegrantes de unasociedad, en una actuaciónque comprenda lasdiferentes dimensiones delproceso, con el fin delograr una auténticaigualdad de oportu- nidadesque permita superar losbrotes

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de racismo y que todaslas personas que convivenen un mismo espaciofísico adquieran unaadecuada competenciaintercultural. Se trata,pues, de abordar laproblemática que encierrala diversidad cultural enel ámbito de laeducación.

La educaciónintercultural requiereuna actuación que ha deser abordada desde unadoble vertiente: por unaparte, exige el respeto ala propia identidad delas personas y los gruposminoritarios establecidosen una determinada zonageográfica y, por otra,precisa de una voluntadde cooperación, cuyasbases de trabajo puedenestablecerse a partir dela interdependenciamanifiesta que caracte-riza la sociedadoccidental. La escueladebe preparar a losindividuos para que nosólo puedan superar loscondicionan- tes de sugrupo social de origen,sino tam- bién establecercontactos fluidos conotras comunidadesculturales.

Este planteamientoincide en que loimportante debe ser elreconocimiento de que lo

cultural es necesariamenteun fenómeno interactivocuyo propósito esconseguir un marco derelaciones en el queprime la interaccióncultural en un plano deigualdad. Sólo así podrásupe- rarse la meracoexistencia de culturas,basada en el predominio deuna de ellas sobre lasdemás, y se conseguirá unainterdependencia basada enla valoración y elconocimiento mutuos.

Por lo tanto, laeducación intercultu- raldebe fomentar que todoslos indivi- duosdesarrollen un respeto porlas dife- renciasculturales, de manera queel con- siguientesentimiento de igualdadse manifieste en loscentros y en la comuni-dad, y se traduzca en latolerancia, el res- peto,la valoración y el cultivode las dife- renciasculturales, la comprensiónde la legítimas costumbresy creencias, la adap-tación de lasmetodologías de trabajo alos conocimientos y lasexperiencias cul-

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turales previas, lainclusión en el currícu-lum de referenciasculturales específicas delos grupos minoritarios yel estableci- miento de unclima de diálogo ynegocia- ción en lacomunidad educativa.

De acuerdo con lasaportaciones de Soriano(2001) Bartolomé (2002) yAguado (2003), entre losprincipales obje- tivos quedebe proponerse todaeduca- ción interculturalen un contexto socialdeterminado podemos citar:

• Mejorar y potenciarla autoestima de laspersonas, yespecialmente deaquellas quepertenecen a gruposminoritarios. Elloexige la acepta- ciónde todos los alumnos,el reco- nocimiento desus avances acadé-micos, laincorporación deelemen- tos culturalesdiferentes, y laesti- mulación de suparticipación en lavida escolar.

• Promover actitudesinterculturalespositivas entre sus

miembros, es decir,fomentar el respeto yla tole- rancia hacialos demás, mantenerposiciones abiertasrespecto a otrosmodelos culturales,valorar lo posi- tivode cada uno de ellos, eidenti- ficarse con lacultura propia sindejar por ello de serreceptivo a las demás ycapaz de realizarcríticas constructivas.

• Favorecer los procesosde convi- vencia ycooperación entre losindi- viduos. Paralograrlo, es precisoestimular losaprendizajes coopera-tivos, abordar losconflictos de maneraconstructiva, sinimposicio- nes niamenazas, y fomentar eldes- arrollo de lashabilidades cívico-sociales, puesto queéstas permiti- rán unaparticipación másactiva en la vidasocial de la comunidad.

• Potenciar una auténticaigualdad deoportunidades quepermita al sujetoelegir y acceder a losrecur-

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sos sociales,económicos y educati-vos de la sociedad.Para ello, es pre-ciso que alcance elmejor rendi- mientoacadémico posibleconfor- me a susposibilidadespersonales, lo que,en determinadasocasiones, implicarárealizar una seriede adaptacionescurriculares normali-zadas y, además,presentar al grupolas posibilidadesreales de promo- ciónen la escala social.

• Lograr una verdaderareforma de losprocesos educativos,que afecte tanto a laeducación reglada quese recibe en lasinstitucioneseducati- vas, como ala vivida en loscontex- tos socialesen que los sujetosde- sarrollan suproyecto de vida. Deeste modo, sentiránque se ofrece unaeducación equitativay de cali- dad atodos los miembrosdel grupo social.

Por su parte, Banks(1995) vincula losconceptos propios de laeducación inter- cultural

a los procesos de reformaen la educación, ya queconsidera que, en lapráctica, no basta con laincorporación meramenteanecdótica de algunos deellos, deben tenerse encuenta todos. En concreto,señala:

• La integración decontenido, que suponeel empleo de ejemplose informaciónrelacionada con losdiferentes gruposculturales pre- sentesen el aula por partede todos los docentes.

• El proceso deconstrucción delconocimiento, quedescribe y anali- zalos distintosprocedimientos por loscuales las personascrean cono- cimientosegún sus esquemas dereferencia, suspapeles sociales, susenfoques einclinaciones dentrode la disciplina. Estono sólo requiere

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realizarcontribuciones yañadir contenidos,sin también transfor-mación y acciónsocial.

• La reducción delprejuicio, que ha detener en cuenta losestereoti- pos, losprejuicios y lasactitudesdiscriminatorias delos alumnos en lacomunidad educativa,con el objetivo dedesarrollar actitudes,valores ycomportamientos máspositivos ydemocráticos.

• La igualdadpedagógica, que debeaspirar a que todoslos estudiantesobtengan los mayoreslogro acadé- micoposibles. Para ello,el profeso- rado hade emplear una seriede técnicas y métodosy, conforme a losestilos de aprendizajey las vivenciasculturales de losdiferen- tes grupos,las que han mostradoser más efectivas son

las técnicas deaprendizajecooperativo.

• Una cultura escolar queconfiera autoridad alos estudiantes de losdiversos grupossociales, indepen-dientemente de suscaracterísticas. Dichaeducación, debecontemplar aspectosbásicos como: lasprácti- cas deagrupamiento, eletiqueta- do, el climasocial de la escuela ylas expectativas de losdocentes.

Por otra parte, en laobra de Santos Guerra enCuevas y otros (2004) senos advierte acerca de lasdiferencias más reseñablesque existen entre laeducación multicultural yla educación intercultural.Así, al referirse a laúltima, se señala que:

• Ofrece una visióndinámica de larealidad percibida porel individuo.

• Plantea opcioneseducativas diver- sas,aunque en la escuelano estén representados

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alumnos de diferen-tes etnias y culturas.

• Se inclina porenfoques globaliza-dores y losdesarrolla.

• Tiende a centrarse enaquellas rela- cionesque se identifican conla igualdad de tratoentre las diversasculturas.

• Fomenta y promueve almáximo aquellosprocedimientos quefavo- recen elintercambio, lainteracción y lacooperación entre lasculturas.

• Destaca más los puntosen los que hay acuerdoque aquellos en los nolo hay.

• Contempla el procesoeducativo como algoque une a los miembrosde una comunidadsocial y no como algoque los disgrega.

• Defiende laformulación decríticas constructivasa la hora de analizary valorar lasdiferentes culturasque han de convivir enun mismo espa- ciogeográfico.

• Adopta enfoques quefavorecen lainteracción y lainterrelación entrelas culturas.

Todas estas

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consideraciones nos con-ducen –como ya señalamosen García Llamas y otros(2004)– a la descripciónde aquellos elementos quedeben ser con- templadossi, desde unaperspectiva didáctica ypedagógica, queremos de-sarrollar un adecuadotrabajo en educa- ciónintercultural:

• El docente debeconocer la reali- dadintercultural, pluraly emergen- te de laintegración deminorías étnicas, asícomo las pautas yorien- taciones aseguir.

• La definición de lasformas de actuar enlas aulas y en losdiferen- tes centroseducativos ha de serclara y concisa.

• Hay que conocer afondo las priori-dades, los requisitosy las exigen- ciasde la prácticadiaria con los

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alumnos que proceden de minorías étnicas.

• La formación,sensibilización einformación delprofesor en loreferente a aquellascaracterísticasbásicas relacionadascon la configu- racióndel grupo esnecesaria.

• Se requiere lautilización deestrate- giasdidácticas de trabajoadecua- das yoportunas en cadasituación concreta.

En síntesis, podemosdecir que la edu- caciónintercultural da unarespuesta efi- caz a lanecesidad de formarciudadanos que puedanvivir e integrarse en unasociedad en que estánpresentes múltiplesculturas. Naturalmente,ello será posible en lamedida en que los alumnosadquie- ran en sus centrosescolares una adecuadacompetencia cultural(aptitudes y actitu- des)que les permita desarrollarsu proyec- to personal devida en el marco de unasociedad pluricultural y

plurilingüe. Por lo tanto,la educación interculturaldebe ocu- parse más de laadquisición de un conjun-to de capacidades quepermitan afrontar estaproblemática, que defacilitar el cono- cimientode los diferentes aspectosde las culturas. Laperspectiva interculturalimplica no sólo unainteracción basada en eldiálogo y elestablecimiento depolíticas sociales depromoción y participación,sino también una mejora enla convivencia interétnicaque se verá plasmada enlas propuestas educativas.Todas estas consi-deraciones permitirán alindividuo afron- tar losproblemas de convivenciadesde la críticaconstructiva, y adoptarposturas más abiertas yreceptivas, sin olvidar porello su propia cultura.

EL PAPEL DE LA ESCUELAANTE LA EDUCACIÓN INTERCULTURAL

En relación con este tema, es posible adoptar dos posturas claramente contra-

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puestas pero que, dealguna forma, refle- jande forma fiel lo queocurre en la pro- piasociedad. Así, la líneapositiva defien- de quela escuela es el lugarmás adecua- do para quese produzcan cambiostanto en el planopersonal y como en elsocial, mientras que lanegativa sostiene queésta apenas ejerceinfluencia sobre losniños, puesto que es unainstitución que tiende areproducir los valoressociales domi- nantes enel grupo, y considera queen las sociedadesmodernas están presentesuna serie de agentes noformales cuya influen-cia resulta difícil decuantificar –como, porejemplo, los medios decomunicación social.

Así pues, no nos debeextrañar que la mayorparte de los profesoresopine que su influenciaen los estudiantes y elcon- trol que ejercensobre ellos son escasos,dado que los mediosneutralizan gran parte delas enseñanzas impartidasen los centroseducativos. En estascircunstan- cias, resultadifícil aceptar que laescuela, por sí sola,

pueda hacer frente aldesafío que suponepretender formar en losvalo- res de convivenciay tolerancia, cuando fueradel ámbito escolar losestudiantes están sujetosa la influencia de losmedios de comunicación.Algunas de las escuelasubicadas en contextosmulticulturales preconizanla estrecha colaboracióncon las familias, otrosprofesionales socioedu-cativos y los servicios delas administracio- nesimplicadas en la tareaeducativa.

Por otra parte, lapropia organización de laescuela, en gran medidajerarquiza- da, hace quemuchos de estos plantea-mientos choquen con larealidad que se vive enlos centros educativos,donde una serie deprescripciones y reglasde tipo legal o técnicocondicionan la conviven-cia. Además, en no pocasocasiones, pare- ce quepadres, profesores yalumnos caminan endirecciones opuestas, yesto da lugar a choquesy enfrentamientos

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entre ellos. Asimismo,conviene tener en cuentaque existe una granpresión social sobre laescuela, y que ésta puedeparali- zar o ralentizarlas propuestas innovado-ras de los equiposdocentes. Se hace puesnecesario lograr escuelasmás democráti- cas yparticipativas que seocupen de la verdaderaeducación en lassociedadespluriculturales.

La escuela inclusiva y orientada a la

diversidad debe tratar deque los alumnos aprendanestrategias que lespermitan resolver losproblemas de la vidadiaria de formacooperativa y solidaria,creando auténticos gruposde aprendizaje, y mejo-rar los procesos deaprendizaje («autoa-prendizaje») permanenteque habrán de utilizar alo largo de toda la vida.Por ello, se resalta másla importancia de laadqui- sición de técnicasy estrategias que deconocimientos. El objetivoes que la escuela actualevolucione hacia formaseducativas en las que

todos los estudian- testengan cabida y que,además, reconoz- can quetodos somos diferentes yque esa característica delos seres humaos es real-mente valiosa.

En línea con esta defensa de la inter-

culturalidad en la escuela,Viñas (Essom- ba, 1999)indica cinco campos en losque se puede y se debeintervenir:

• El ámbito institucional: Enlos proyectoselaborados en elcentro, debe primarla filosofía de lainclu- sión, de talforma que lasprácticas realizadasrespeten lasdiferencias.

• El ámbito administrativo:Las tare- asadministrativasdesarrolladas en elcentro o en el entornode éste deben serejecutadas condiligencia parafavorecer la plenaintegración en lacomunidad.

• El ámbito curricular: Lalabor que ha dedesarrollarse en elentorno inmediato delaula debe contem-plar la diversidad delos alumnos que

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conviven en la misma. • El ámbito de los servicios:Los ser- viciosvinculados a lasactividadesextracurricularesdeben integrar yrespetar a todos losalumnos.

• El ámbito de los recursoshuma- nos: Padres,profesores y alumnosdeben mostraractitudes de respetohacia los demás, deforma que lasrelacionesinterpersonales enla comunidadeducativa se veanfavo- recidas.

Algunas de las posturasmás críticas con la laborde la escuela señalan queésta se inclina por latransmisión, casi enexclusiva, de la culturadominante, es decir, deaquella con la que seidentifica la mayoría delos sujetos, lo queimplica, por consiguiente,la defensa de posturasetnocéntricas, puesto queapenas se men- ciona alresto de las culturaspresentes en el contexto.Mientras, otrosprofesionales, másimplicados en lapluralidad cultural en laque desempeñan su tarea,opinan que las culturas delas minorías deben ser

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incluidas en la ofertaeducativa del cen- tro.Ahora bien, si losalumnos proceden de másde cinco culturasdiferentes, resul- tacomplejo poder prestar ladebida aten- ción a todasellas en un plano deigual- dad. Por estemotivo, se preconizanofer- tas académicasfuncionales semejantes,que han de ir acompañadasde una mayor sensibilidaden otras esferas derelación y convivencia.

La escuela orientadahacia la educa- ciónintercultural debe asumirel compro- miso degenerar un clima escolardonde los alumnos,durante su estancia enel centro, vivan de formaintensa, en el transcursode cada jornada escolar,esas formas decomportamiento yactitudes en el trato conlos miembros de lacomuni- dad educativa, yasean docentes o no. Esteenfoque intercultural hade verse reflejado entodos los ámbitos delapren- dizaje, en laorganización delcurrículum

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manifiesto y oculto, enlas tareas del pro- fesory en las relaciones conel entorno. Todos estosfactores, combinados demanera armónica yenfocados hacia unaperspectiva intercultural,harán posible laexistencia de unaverdadera escuela queeduque para la convivenciasocial a través de lostres mecanismos queseñala Márquez (2004): laflexibilidad interna, laapertura al entorno y laresponsabilidadprofesional.

EL CURRÍCULUM INTERCULTURAL

Entendemos que elcurrículum es el ins-trumento básico que laescuela tiene a sudisposición para poder darrespuesta a la realidadcompleja que son lasaulas pre- sentando losconocimientos de maneraque puedan ser asimiladospor los diver- sos tiposde alumnos. Por lo tanto,impli- ca –además deaquello que el sujeto debeaprender– la secuencia deactividades necesariaspara conseguir laintegración social de las

nuevas cohortes. Asimismo,se debe aspirar a lograrla inclusión de todos losindividuos en la vidasocial y académica medianteun currículum abier- to yflexible que sea percibidocomo un espacioprivilegiado para laatención a la diversidad.

Como nos indica LorenzoDelgado (2004), elcurrículum se identificacon la selección yadaptación pedagógicas delas diferentes culturas quelleva a cabo la escuela, detal forma que éstas puedanser asimiladas por todos ycada uno de los sujetosque acuden a sus aulas. Asípues, para ser válida, larespuesta curricular debeatender a la diversidadcultural que se presenta enlos grupos escolares.

Uno de los principalescometidos del currículumintercultural debe ser laense- ñanza de los procesosy las estrategias derazonamiento efectivo quepueden em- plearse en elaprendizaje instructivo yla resolución de problemas.Por ello, el suje-

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to adquiere conocimientosconceptuales,procedimientos de trabajoeficaz y estruc- turaslógicas de pensamientoque le per- mitenafrontar los problemasque se plan- tean en lavida ordinaria paramejorar la integraciónsocial en la comunidad.

Para elaborar un currículum intercul-

tural, hemos de tener encuenta las cues- tionesepistemológicas y éticasque están presentes en lasociedad, hay que selec-cionar aquellos rasgosfundamentales de lacultura que puedencontribuir al mejordesarrollo de la persona.También se de- bencontemplar las cuestionesde tipo sociológico quefavorezcan la integraciónde los individuos en lasociedad y, para ello, esnecesario el aprendizajede aque- llos contenidosy valores que son deutili- dad para laconvivencia. Asimismo, espreciso considerar estetema desde la perspectivatanto de la psicología,como de la pedagogía, yaque ambas contribui- rána lograr aquellosobjetivos educativos queincidan en losconocimientos, losprocedimientos y lasactitudes en los con-

textos interculturales.Ahora bien, todo ello sinolvidar que elprotagonista princi- palde estos procesos es elalumno, y que hay quetomar en consideración lascir- cunstanciasrelacionadas con su edad ysu nivel educativo.

Cuando se aspira a lainclusión social yescolar de todos losindividuos, es pre- cisoconcebir el currículumcomo algo abierto yflexible, para así poderincorpo- rar todo aquelloque pueda contribuir asituarlo en el contexto.Así, se conseguirá que nose produzca la exclusiónde aque- llos alumnos queno responden al canonestablecido y que laescuela pueda perci-birse como un espacioprivilegiado paraalcanzar una adecuadaatención a la diver-sidad, que responde a larealidad social y a laspeculiaridades de losalumnos. La escuela nopuede atender a todoslos alumnos de la mismaforma y con un únicomodelo educativo, sinoque debe

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abrirse a la diversidad.Por este motivo, en laetapa obligatoria de laenseñanza, se propone,como garantía de laigualdad de oportunidades,un currículum común alque deben acceder todoslos alumnos y queconfigura los referentesbásicos en una culturacomún. Ahora bien, alapostar por un currículumabierto y flexible sepersigue lograr laadecuación a la realidadde cada centro y cadaaula, es decir, laadaptación del currículumal contexto.

Aunque existe una ampliavariedad de modelos opropuestas curricularescuya intención es tener encuenta lo intercultu- raly favorecer la integraciónde las mino- rías, enlíneas generales, se sueleconside- rar que loselementos fundamentales ensu configuración son: laintencionalidad educativa–la promoción social y laacep- tación de lasdiferencias–, los sujetosde la educación –el sujetoconsiderado como sujetosocial y dependiente dellugar que ocupa en el

entramado de relaciones dela comunidad–, el agente dela acción educativa –elencargado de facilitar lapro- moción de los sujetosrespetando suspeculiaridades personales–y los conteni- dos y lametodología de trabajo –lasofer- tas culturales de losproyectos educativos debenrecoger la diversidadcultural del grupo, asícomo aquellos de losdiferen- tes recursos ytécnicas disponibles quemejor se adecuen alcontexto de actua- ción.Seguidamente, vamosrealizar un análisis másdetallado de los modelosque tienen una mayoraceptación en nuestro campode estudio:

• Modelo de contribuciones.Las cul- turas de lasminorías se incluyenen el currículum através de referen-cias puntuales apersonajes céle- bresde éstas ycelebraciones im-portantes. Aunqueeste modelo facilitala inclusión deelementosinterculturales, ya

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que todos los alumnos siguen elcurrículum ordi-nario, no facilita laintegración y estasactuaciones secontemplan como algoexótico y esporádico.

• Modelo aditivo. Se añadentemas,lecturas y unidadesal currículum escolar,pero se mantieneintacta su estructuraformal. La principaldife- rencia existenteentre este modelo yel anterior es queéste es más amplio yvariado, y permite,por ejemplo, añadircréditos variables alos obligatorios.Resulta útil paraaumentar la autoestimacultural.

• Modelo detransformación. Per-mite a los alumnosconsiderar losconceptos, temas yproblemas cu-rriculares desdeenfoques diferen- tes,de modo que la culturadomi- nante deja deser la única referen-cia válida. La claveradica en elegir lostemas que despiertanmayor interés en cadaescuela para culti-var las aptitudes yactitudes decomunicación y

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pensamiento crí-tico.

• Modelo de acción socialo recons- trucción social.Este modelo cons-tituye una propuestacomplemen- taria alas anteriores. Serequiere diseñaraquellasactividades quemejor puedancontribuir a que losalumnos seancapaces de tomardecisiones y asumircompromisos ante lavariedad desituaciones a lasque han deenfrentarse en laescue- laintercultural. Asípues, aunque, poruna parte, fomentahabilidades yactitudessocioculturales decom- promiso con elgrupo, por otra, secorre el riesgo decaer en el adoc-trinamientoideológico, sobretodo cuando setrabaja con lossujetos más jóvenes.

La elección de los modelos de trabajo que van a utilizarse con los alumnos va a

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depender de los grupos ylas situacionesconcretas, lo importantees que, una vezidentificados losobjetivos básicos de laeducación intercultural,estos se han de concretaren metas operativas quesean coherentes con lasnecesidades reales de lossujetos y los gruposimplicados en esecontexto específico deconvivencia. Así pues, laatención a la diversidad,se ubica dentro del nuevoconcepto de democra- ciacultural, y parte de laidea de que lasdiferencias han de serconsideradas comodiversidad y no comodesigualdad. Todo elpersonal implicadodebería tener pre- sentesu grado de sensibilidady predispo- sición hacialos sujetos procedentesde otras etnias yculturas.

Es preciso potenciar elpapel de la escuela en eldesarrollo de aquellosvalo- res que son básicosy fundamentales para lasociedad occidental, yentre los que debemos

citar: la igualdad, elrespeto, la tolerancia, elpluralismo, la cooperacióny la corresponsabilidad.Debe poderse garantizar acada sujeto el derecho areci- bir la mejoreducación diferenciada paraformar su identidadpersonal. Además, hay quecontemplar la presencia enla escuela de diversaslenguas y culturas paraasí evitar la segregaciónde indivi- duos o grupos,y esto sólo será posiblemediante la superación delos prejuicios, lacomunicación activa y lainterrelación entre losmiembros de la comunidadedu- cativa. Todo ello, nosconducirá a un incrementodel éxito escolar y a lapromo- ción de todos losalumnos sin exclusiones deningún tipo. Además, seríaconvenien- te que lospadres se comprometieran deforma activa en esta tarea,ya que de esta forma seconseguiría unacomunicación más fluida yun incremento de lasrelacio- nes entre laescuela y los grupossociales presentes en elcontexto geográfico de

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influencia del centroeducativo.

EL PAPEL DEL PROFESOR SU FORMACIÓN

En las nuevas realidadessociales y educa- tivasque venimos describiendo,la tarea del profesorresulta fundamental eimprescindible paraafrontar con posibili-dades de éxito laformación de los alum-nos. En consecuencia, espreciso superar el desfaseque se ha producido en losúlti- mos años entre laformación inicial que seles ofrece en unasuniversidades y escue- lasuniversitarias cuyosplanes de estudio pocoactualizados no están enconsonan- cia con lasdemandas de la escuela yla sociedad y la realidadeducativa a la que han deenfrentarse en su futuropuesto de trabajo. Podemosdecir que los centros deformación del profesoradoenfocan sus tareascurriculares hacia unsistema edu- cativo queestá en constantetransforma- ción, lo queles conduce, en no pocasocasiones, a realizarprocesos de aprendi- zajebasados en el ensayo y elerror.

En diversas

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investigaciones que hemosllevado a cabopersonalmente y en otrostrabajos consultados, seponen de manifiesto laslagunas más notorias dela formación delprofesorado (García Lla-mas, 1999, 2001).Concretamente, pode- mosdestacar el hecho de queaunque el trabajo enequipo se considera muyposi- tivo y se valoracomo tal en lasencuestas, la realidadrefleja que son muy pocoslos que reconocen actuarde esta forma en suscentros de trabajo. En uncontexto de diversidadcomo el que preconiza laedu- caciónintercultural, entendemosque esta forma de trabajoconstituye un recursofundamental, puesto quela tarea desarro- lladade forma solidaria ycooperativa en loscentros educativosconfigura una formaprivilegiada de trabajoen equipo que conducirá avencer el aislacionismo yel individualismo de laacción educadora.

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Asimismo, convieneponer de mani- fiesto quelos problemas de atencióna la diversidad social,cultural y lingüística delos individuos en lasaulas constituyen laprincipal preocupación delprofesorado, y son fuenteconstante de conflictos nosólo entre los docentes ylos alumnos y los padresen el Consejo Escolar,sino también entre lospropios docentes. Asípues, las tareas que elprofesor desempe- ña comolíder natural del grupohacen que su papelconcierna a tres campos:los aprendizajes –es ellíder de la tarea–, laintegración y cohesióndel grupo –es el líderdel grupo– y el desarrollode las capacidades y lashabilidades de los indi-viduos –es el líder de laspersonas.

Por consiguiente, entendemos que

una buena formación delprofesorado para afrontarestos retos debe partirde un conocimientoadecuado tanto de lasfuentes que generan esadiversidad de sujetos,como de los problemas ylas exi- gencias que dicha

diversidad conlleva dentrode un marco educativotradicio- nalmenteorganizado desde launiformi- dad. Así pues,los principales problemasno estarán relacionados conlos conteni- dos deaprendizaje, sino con laactuación didáctica ypedagógica, las actitudes ylos valores delprofesorado, elfuncionamien- to en loscentros. Aunque, noobstante, como ya hemosdicho con anterioridad,también es precisoreestructurar los con-tenidos de aprendizaje.

Ipiña (1997) señala que,en su opi- nión, el perfildel docente en el campointercultural debe incluirciertas actitudes yaptitudes, aunque consideraprioritarias las primeras.Así, entre las actitudesnece- sarias apunta: elcompromiso con las cau- saspropias de su cultura –quepodrá inte- riorizar y lepermitirán asumir un com-promiso de reflexión yejercicio constan- te–, latolerancia activa y laestimación y aceptación delo diferente –queposibilita- rán que evitelos enfrentamientos– y la

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apertura a lasinnovaciones y alprogreso de la sociedadinmediata en la que vivey se encuentra inmerso.Entre las aptitudes,Ipiña destaca: lacompetencia profesional–que no es posible siantes no se propor- cionauna buena ofertaformativa en este campo alos educadores para queestos puedan desempeñarsu tarea adecuada-mente–, la capacidad parallevar a cabo tareas deinvestigación-acción quecontri- buyan a la mejorade la experiencia prác-tica, el dominio de lalengua común a losalumnos –la lenguamayoritaria– y unconocimiento, aunque seasuperficial, de la lenguaespecífica de lasminorías, que le permitaal menos entender losmensa- jes de losindividuos que asisten asu aula y su centroeducativo.

Se precisa de unaformación que con- solideen los docentes actitudesde acepta- ción de ladiversidad y les permitaadqui- rir no sólo laexperiencia necesariapara saber responder a lamisma, sino también unconjunto de estrategias de

trabajo rela- cionadas conla organización, laplanifica- ción y lametodología que les ponganen posesión de un ampliorepertorio pedagó- gicoque les capacite paracomenzar su tarea ydesarrollarseprofesionalmente paraafrontar el reto de ladiversidad. Este objetivono se alcanza solamenteañadien- do contenidos, esnecesario aportar nue- vosenfoques formativos quecontemplen la previsibleheterogeneidad de losestu- diantes y lautilización de los nuevosrecursos tecnológicos.

La adquisición de unasauténticas competenciasinterculturales pareceesen- cial para que uneducador y profesionaldesempeñe sus funcionesen una socie- daddemocrática. Esto pone demanifiesto la necesidad deposeer, en el campo de laformación intercultural,una buena pre- paraciónque facilite el desarrolloy la consolidación detales capacidades en losestudiantes.

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Por competenciasinterculturales delprofesor entendemos lashabilidades que debeadquirir en el campo delos conoci- mientos, laafectividad y lasactividades prácticas. Y,en este contexto, lasdimen- siones que hay quetrabajar son los cono-cimientos, las habilidadeso destrezas y lasactitudes, así como losvalores que dis- tinguen alas sociedadesparticulares a las quepertenecen los sujetos.

RESULTADOS DE LAINVESTIGACIÓN

Para la realización deeste apartado, hemostomado como referencia eltrabajo de investigaciónsobre diversidad culturale inclusión socialllevado a cabo en laComunidad de Madrid conalumnos y profesores decentros educativos de pri-maria y secundariaobligatoria, y cuyasprincipales conclusionesaparecen recogi- das enGarcía Llamas y otros(2004). Hemos de indicarque, en el citado traba-jo, se emplearon

cuestionarios y escalascomo instrumentos paraefectuar la reco- gida deinformación y datos, y deeste modo poder recoger enlos centros esco- laresopiniones sobre diferentesaspectos relacionados conla interculturalidad.

Entre los resultados deltrabajo que guardanrelación con las opinionesy per- cepciones de losalumnos, destacamos algunosde los más interesantes:

• La actitud hacia laescuela como lugar deaprendizaje es buena, yno se aprecianactitudes discriminato-rias hacia los alumnosde otras etnias.Además, el profesorsuele ser tolerante.

• En líneas generales,los estudiantes deprimaria muestran untalante más positivoque los de secundaria,que se aburren en lasaulas y dese- anfinalizar las tareasescolares cuantoantes.

• La integración de los sudamerica-

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nos se percibe comomás fácil ya que seconsidera que susociabili- dad esmayor; por elcontrario, seplantean problemascon los alum- nosmarroquíes y gitanos.

Respecto a lasopiniones y actitudes delos profesores de estosmismos centros convieneseñalar lo siguiente:

• En líneas generales,valoran positi-vamente laincorporación a lasaulas de lasdiferentes minorías,el respeto a lacultura de origen yel enriquecimientoque la diversidadcultural supone paratoda la comu- nidad.

• Desde la perspectivadel profesora- do,los alumnos que mástrabajan, demuestranmayor interés por laescuela y cumplenmejor con los deberescívicos serían losproce- dentes deEuropa del este yChina; en cambio, losgitanos y los marro-quíes estarían entrelos menos in- terés.

• Entre las minorías mejor valoradaspor los profesores

podemos citar a lossudamericanos, loseuropeos del este ylos chinos, sinembargo la percepciónlos gitanos y losmarro- quíes es másnegativa.

• La experienciadocente incide deforma positiva en laeducaciónintercultural, puestoque los profe- soresque llevan más de 10años trabajando encentros escolares sesienten más seguros yse muestran másdispuestos a elegiraquellas aulas en lasque hay alumnos inmi-grantes. Además,estiman que laconvivencia en elmismo espacio físicode varias culturasfomenta la comprensióny el respeto hacia losdemás.

Otra idea interesanteque podemos extraer deltrabajo de investigaciónes que

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hemos encontradodiferencias altamentesignificativas entre lasvaloraciones de losalumnos y de losprofesores. En líneasgenerales, debemosdestacar que son losdocentes que conviven conminorías y desempeñan sutarea académica con estosniños los que tienen unapercep- ción más positivade los estudiantes per-tenecientes a minorías ysus posibilidades deconvivencia; mientras quelos alumnos se muestranuna actitud más negativares- pecto a suscompañeros del aulapertene- cientes a gruposminoritarios.

PROPUESTAS DE ACTUACIÓN FUTURASEN EDUCACIÓN INTERCULTURAL

Parece que, si se quierellevar a cabo unaverdadera educaciónintercultural, lo másadecuado es apostar por unmodelo inte- grador,puesto que ésteproporciona a todos unaserie de conocimientoscultura- les comunes y,además, valora positiva-mente las relaciones entre

culturas y per- mitepromocionar lo específico.Se pre- tende desarrollaruna pedagogía de ladiversidad y la inclusiónsocial encamina- da allogro de una educación decalidad para losindividuos, independientede su etnia, su lugargeográfico de procedencia ysus vivencias culturales.De esta manera, todas lasestrategias didácticas yorganiza- tivas están enfunción de este enfoque,que busca, de formapreferente, una ver- daderaigualdad de oportunidades.

En general, la educaciónintercultural propuesta porel modelo integrador con laintención de fomentar elrespeto por lasdiferencias, los derechos,la formación de ciudadanosy los valores democráticosdebe:

• Partir de lasnecesidades reales ypercibidas del grupo alque se pre- tendeatender. Paracomenzar, es necesarioreflexionar acerca dela

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propia identidad,para así poder llegara conocer al otro yhacer frente a todaforma de exclusión.

• Llevarse a cabomediante una ade-cuada articulaciónentre la educa- ciónformal y no formal.Para ello, se ha dereconocer el carácterper- manente de laeducación y no sedebe utilizar laprocedencia étnicacomo criterio cívicode evaluación. Esnecesario integrarlos diversoscontenidos culturalesen la ense- ñanzaimpartida en el aulay, ade- más, hay quefavorecer laconviven- cia y laparticipación de losalum- nos en laconstrucción de lasocie- dad en la queviven.

• Desarrollar, dentrode los centroseducativos, tantoestrategias orga-nizativas quefavorezcan el diálogoy la identidadcultural, como laapreciación delas diferencias–siempre y cuandoéstas no entren en

conflicto con losvalores demo- cráticosy generendesigualdades ymarginación de gruposo personas.

• Incorporar a losproyectos educati- vosy curricularesaquellos objeti- vosque contribuyan aldesarrollo de laeducaciónintercultural,teniendo en cuenta lasnecesidades de lasminorías.

• Evaluar de formasistemática y con-tinua aquellosprocesos orientados ala formulación derespuestas a ladiversidad cultural,en lo que se refieretanto al ámbitosocial, como grupal.

Así pues, la escueladebe atender por igual alos cambios curriculares yorgani- zativos que seproducen en los centros, yha de evaluar lapersistencia de estos pro-cesos, de las actitudesmanifiestas en el camposociocultural, de aquellosprejui- cios no eliminadosconvenientemente y

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de la insensibilidadhacia los problemasespecíficos de laspoblaciones marginalesque, en ocasiones, puedeapreciarse tanto en losmateriales curriculares,como en la práctica decada día. Es necesariocapaci- tar a la persona,dotarla de la competen-cia comunicativa necesariapara salir del aislamientoque supone no conocer niel idioma del país deacogida, ni las referen-cias culturales de lamayoría. En conse-cuencia, se deben crearlas condiciones adecuadaspara hacer frente con lasufi- ciente preparación ala acción, el senti-miento y la opiniónpropios de un con- textosocial específico.

El profesorado tiene lanecesidad de tener unconocimiento básico perosólido de las distintasculturas que están presen-tes en el contexto escolaren el que traba- ja, y sele deberían ofreceroportunidades pararealizar prácticas ollevar a cabo pe- ríodosde aprendizaje en centrosque tra- bajen con

minorías étnicas.Tanto de la investigación

realizada por nuestroequipo, como de lasconsultas a diversasfuentes, se deduce que losprofe- sores necesitan:recursos, estrategiasmetodológicas, formaciónbásica en técni- casetnográficas sencillas,estímulo y reco- nocimientoafectivo, respeto a lasiniciati- vas voluntarias,difusión de sus experien-cias por los caucesadecuados, incentivos paraponer en marcha proyectosde inves- tigación einnovación desde loscentros educativos, ayudasque favorezcan la for-mación y el reciclajedocente en las uni-versidades o en centrosespecíficos y tiempo paraplanificar, innovar yllevar a cabo una políticaeducativa coherente quepermita coordinardiferentes accio- nes yelementos de actuación.

Asimismo, es necesario que los do-

centes tengan un nivelmínimo de compe- tencia sise quiere que sean capacesde diagnosticar lasnecesidades educativas desus alumnos y

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seleccionar aquellos materiales que son másapropiados para trabajarla educaciónintercultural. Es pre-ciso contar con el apoyode la Adminis- tración,que ésta favorezca laparticipa- ción delprofesorado en losprogramas de formación yconceda incentivos dediver- sa índole.

Sería oportuno destacarla importan- cia de que eldocente reciba una forma-ción adecuada. Esto esfundamental por lo querespecta tanto a lainicial –que se lleva acabo en las Facultades deEduca- ción y Formacióndel Profesorado, y querequeriría la adecuacióny actualización de losplanes de estudio, quetendrían que incorporaralgunas materias que ayu-den al conocimiento deotras culturas y países–,como a la formaciónpermanente teórico-práctica –que se puededesarro- llar en lospropios centros educativosmediante programasespecíficos de for-mación, o en los centrosque incorpora el sistemaeducativo, o a través decursos temáticos deactualidad que se impartendesde las universidades.Todo ello tendría unas

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repercusiones positivas ysupondría una mejora dela acción educativa y eldesarrollo profesional.

Creemos que el hecho deque los alumnos de loscentros escolares proce-dan de culturasdiferentes, no debe supo-ner un problema, sino unabuena oportu- nidad paraeducar a los sujetos envalores democráticos comola tolerancia, el diálo-go, la solidaridad, laresolución de con-flictos y el sentimientode pertenencia al grupo.En este marco social, lacomunica- ción y larelación con las familiases importante paraconseguir que éstas seintegren en lasactividades que organizael centro con el fin delograr un clima deconfianza y respetomutuo.

La apuesta por unaescuela intercultu- ralque favorezca lasdiferentes formas deescolarización y potencieuna construc- ciónpersonal, única eirrepetible que per-

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mita a los alumnosdesempeñar sus tareas enuna comunidad plural exigeuna inte- gración de ladiversidad cultural quecon- tribuya a alcanzar laformación total de laspersonas y les permitaconstruir su propiaidentidad en ladiversidad. En suma, unaescuela que potencie lascapacidades del sujeto taly como es, que acepte lasdife- rencias entre lasculturas y en la que sefomenten las cualidadessingulares y crea- tivasde cada uno es unrequisito impres- cindiblesi lo que se quiere esformar suje- tos que seintegren en la sociedadplural del siglo XXI, dondela identificación con losgrupos diferentes, lavaloración y el respeto ala diversidad étnica ycultural constituyenvalores relevante en losgru- pos y comunidadesoccidentales.

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