5.- Derecho Administrativo II

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Derecho Administrativo II Antología Universidad de la Sierra A. C. 1 1. PATRIMONIO Y FINANZAS DEL ESTADO 1.1. NOCIONES GENERALES SOBRE EL PATRIMONIO DEL ESTADO El conjunto de bienes materiales que de modo directo o indirecto sirven al Estado para realizar sus atribuciones constituye el DOMINIO O PATRIMONIO DEL PROPIO ESTADO. CLASIFICACION DE LA PROPIEDAD (BIENES) SEGÚN LA PERSONA (S) A QUIEN (ES) PERTENECEN PUBLICA. Es ejercida por conducto y a través de las autoridades del Estado (propiedad del poder público). SEGÚN L.G.B.N. a) Bienes del dominio público de la Federación *De uso común *Destinados a un servicio público b) Bienes del dominio privado (propios del Estado) SEGÚN LA DOCTRINA Y LA CONSTITUCIÓN FEDERAL a) Dominio Directo b) Dominio Eminente (propiedad originaria) c) Bienes de propiedad nacional o estatal. PRIVADA Cuando la persona a quien se imputa una cosa con facultad de disposición sobre ésta, no es el Estado sino un sujeto particular, privado (Físico o Moral). SOCIAL Cuando el sujeto de la misma, sea una comunidad agraria o un sindicato, que son agrupaciones de naturaleza social, siendo agrupaciones susceptibles legal de ser dueñas de cosas muebles e inmuebles en los términos de la legislación laboral o agraria. RES NULLIUS (COSA DE NADIE) Son aquellas sobre las que ninguna persona pueda ejercer un poder o facultad de disposición por impedirlo su naturaleza física o material, p.e. SOL. BIENES QUE NO TIENEN DUEÑO CIERTO La propiedad originaria de los mismos se imputa a la Nación: A) Vacantes (Inm.) y B) Mostrencos (Mue.) ESTADO Persona Jurídica de Derecho Público PATRIMONIO Conjunto de cargas y derechos estimables en dinero.

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1. PATRIMONIO Y FINANZAS DEL ESTADO

1.1. NOCIONES GENERALES SOBRE EL PATRIMONIO DEL ESTADO

El conjunto de bienes materiales que de modo directo o indirecto sirven al Estado para realizar sus atribuciones

constituye el DOMINIO O PATRIMONIO DEL PROPIO ESTADO.

CLASIFICACION DE LA PROPIEDAD (BIENES) SEGÚN LA PERSONA (S) A QUIEN (ES) PERTENECEN

PUBLICA. Es ejercida por conducto y a través de las autoridades del Estado (propiedad del poder público).

SEGÚN L.G.B.N.

a) Bienes del dominio público de la Federación

*De uso común

*Destinados a un servicio público

b) Bienes del dominio privado (propios del Estado)

SEGÚN LA DOCTRINA Y LA CONSTITUCIÓN FEDERAL

a) Dominio Directo

b) Dominio Eminente (propiedad originaria)

c) Bienes de propiedad nacional o estatal.

PRIVADA Cuando la persona a quien se imputa una cosa con facultad de

disposición sobre ésta, no es el Estado sino un sujeto particular, privado

(Físico o Moral).

SOCIAL Cuando el sujeto de la misma, sea una comunidad agraria o un

sindicato, que son agrupaciones de naturaleza social, siendo

agrupaciones susceptibles legal de ser dueñas de cosas muebles e

inmuebles en los términos de la legislación laboral o agraria.

RES NULLIUS (COSA DE NADIE) Son aquellas sobre las que ninguna persona pueda ejercer un poder o

facultad de disposición por impedirlo su naturaleza física o material, p.e.

SOL.

BIENES QUE NO TIENEN DUEÑO

CIERTO

La propiedad originaria de los mismos se imputa a la Nación: A)

Vacantes (Inm.) y B) Mostrencos (Mue.)

ESTADO

Persona Jurídica de Derecho

Público

PATRIMONIO

Conjunto de cargas y derechos estimables en dinero.

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1.1.1. BIENES DE DOMINIO PUBLICO. SUS CARACTERISTICAS

La Ley General de Bienes Nacionales señala que el patrimonio nacional se compone de:

*Bienes de Dominio Público de la Federación

*Bienes de Dominio Privado de la Federación

BIENES DE DOMINIO PÚBLICO

Son el conjunto de bienes que están destinados a satisfacer necesidades colectivas (atribución del Estado), son

propiedad del Estado o Federación, están sujetos a un régimen adecuado a su finalidad (forma parte del

derecho público).

Las CARACTERISTICAS O REGIMEN JURIDICO de estos bienes son:

Los bienes del dominio público son: inalienables, imprescriptibles y no pueden ser objeto de reivindicación.

Estos bienes son inalienables, es decir, están fuera del comercio jurídico, por lo que respecto de ellos es

inoperante cualquier acto que implique una transferencia de propiedad. Solo estableciendo la prohibición de

enajenar se puede impedir que el Estado deje de cumplir eficazmente sus atribuciones.

Sin embargo, la inalienabilidad de los bienes de dominio público, establecida por el citado ordenamiento, no

implica la ausencia absoluta de la facultad de disposición que caracteriza a la propiedad, puesto que el Estado

Federal, como titular de ese derecho, conserva respecto de los indicados bienes la potestad soberana de

transformar o modificar el régimen jurídico a que están sujetos.

Por ende, si es cierto que, tratándose de bienes de dominio público, el poder de disposición no existe en forma

actual, en cambio potencialmente es operante como capacidad jurídica de que está dotado el Estado Federal,

para hacerlos susceptibles de enajenación.

En cuanto a la imprescriptibilidad, se quiere significar que dichos bienes no pueden salir del patrimonio del

Estado por el mero transcurso de un lapso (prescripción negativa de la propiedad estatal a favor de un

particular) y cuyo desarrollo deba apoyarse en ciertas y determinadas condiciones y circunstancias.

Además estos bienes no pueden ser objeto de reivindicación. Esta prohibición supone el hecho de que, cuando

un bien haya ingresado al patrimonio estatal mediante un acto público imperfecto o mediante prescripción

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adquisitiva en favor de la Federación, el legítimo propietario no lo puede reivindicar desposeyendo de él al

Estado. Sin que tampoco dichos estén sujetos a ninguna acción de posesión definitiva o provisional.

Son bienes de dominio público los comprendidos en el artículo 2 de la Ley General de Bienes Nacionales. Vid.

el citado artículo.

Los Bienes de dominio público de la Federación pueden ser a su vez:

a) Bienes de uso común y

b) Bienes destinados a un servicio público

1.1.2. BIENES DE USO COMUN

Se llaman así porque pueden aprovecharse de ellos todos los habitantes de la República, con las

restricciones establecidas por las leyes y reglamentos administrativos (artículo 29 de la L.G.B.N.).

Son inalienables e imprescriptibles. Por ejemplo: tierras y aguas comprendidas dentro de los límites del

territorio Nacional, minerales, yacimientos de piedras preciosas, las salinas, combustibles minerales sólidos,

petróleo (art. 27, párrafos 1 y 4 de la C.F.)

Pertenecen a la Federación, nunca los Estados o Municipios y para los aprovechamientos especiales de dichos

bienes se necesita concesión o permiso (no crean derechos reales) otorgada con los requisitos que señalan las

leyes respectivas.

BIENES DESTINADOS A UN SERVICIO PÚBLICO

Pueden pertenecer a la Federación, a los Estados o a los Municipios, son inalienables e imprescriptibles,

mientras no se les desafecta del servicio público a que se hallan destinados. Vid. artículo 34 L.G.B.N.

La forma establecida por la ley para afectar un bien propio al servicio público, es la de un decreto, que así lo

determine y que se expida por el Ejecutivo.

BIENES QUE SE EQUIPARAN A LOS DESTINADOS A UN SERVICIO PUBLICO

Cabe aclararse que el artículo 35 de la citada ley regula una categoría de bienes que se equiparán a los

destinados a un servicio público, entre ellos:

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*Los templos y sus anexidades, cuando estén legalmente abiertos al culto público.

*Los afectos, mediante convenio que se publicará en el D.O.F., a actividades de organizaciones internacionales

de que México sea miembro.

1.1.3. DOMINIO DIRECTO

La propiedad originaria es equivalente al Dominio Eminente, es decir, se concibe, en cuanto a los bienes por

ella comprendidos, como un elemento del ser mismo del Estado (territorio), como el objeto sobre el cual éste

despliega su poder soberano, su imperio (artículo 27 de la C.F.).

La propiedad estatal considerada como imputación que determinados bienes se hace a favor del Estado,

equivale al Dominio Directo, traducido en la situación en que está colocada la entidad política soberana para

usar, disfrutar y disponer de ciertos objetos con exclusión de cualquier persona moral o física (artículo 27 de

la C.F.).

La propiedad estatal o nacional está constituida por aquella atribución o afectación genérica que de

determinados bienes se hace al Estado o a la Nación, quien tiene sobre ella la facultad de uso, disfrute y

disposición con exclusión de cualquier sujeto.

El dominio eminente se tiene por la Nación sobre todos los bienes que están sometidos a su jurisdicción,

consiste simplemente en la facultad de legislar sobre determinados bienes, en la facultad de expropiarlos

cuando son necesarios para un fin de utilidad pública.

El dominio eminente no es una forma especial de propiedad, sino un atributo de la soberanía que consiste en

ejercer jurisdicción sobre todos los bienes situados en el territorio en el que se ejercita dicha soberanía.

Los bienes de dominio directo propiedad de la nación, están sujetos a un régimen jurídico DE

INALIENABILIDAD E IMPRESCRIPTIBILIDAD. Ambas características son los medios de que se ha valido la

Constitución Federal para garantizar que esa propiedad se conserve siempre por la Nación, a efecto de que

pueda responder a los fines de interés colectivo a los cuales se encuentra afectada.

Sin embargo, su explotación, uso o aprovechamiento (recursos) puede confiarse a personas físicas o a

sociedades constituidas conforme a las leyes mexicanas, mediante CONCESIONES que puede otorgar el

Ejecutivo Federal, de acuerdo con las reglas y condiciones que establezcan las leyes (art. 27 p. VI de la C.F.).

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La propiedad originaria que la Nación tiene sobre las tierras del territorio de la República se rige actualmente

por la Ley Agraria (D.O.F. 26 Febrero 1992). De acuerdo con esta ley, los terrenos propiedad de la Nación son:

BALDIOS y NACIONALES.

Son baldíos, los que no han salido del dominio de la Nación por título legalmente expedido y que no han sido

deslindados ni medidos.

Son nacionales, los deslindados y medidos.

De la misma manera que la propiedad de las tierras se transmitió con la INDEPENDENCIA A LA NACION

MEXICANA, ésta adquirió la propiedad de las aguas, cuyo régimen estuvo regulado por los Estados de la

Federación, hasta la Constitución de 1857, en donde se estableció la facultad del Poder Federal para legislar

sobre vías generales de comunicación.

La Constitución de 1857 fue reformada en el sentido de autorizar al Congreso para definir cuáles corrientes

deberían ser de jurisdicción federal y con fundamento en tal precepto constitucional se expidió la ley de 13 de

diciembre de 1910, en la que se hizo una clasificación perfectamente determinada de las corrientes que debían

considerarse como federales, siguiéndose el criterio de considerar con ese carácter no solamente las flotables

y navegables que había tomado en cuenta la ley de 1888, sino, además, todas aquellas corrientes o depósitos

de agua que se encontraren en los límites de dos o más Estados de la Federación o que pasasen de uno a otro.

En dicha ley se consideraba que las aguas de jurisdicción federal constituían parte del dominio público y eran

inalienables e imprescriptibles.

Vino, por último, la Constitución de 1917 que en el párrafo quinto de su artículo 27 establece, la propiedad de la

Nación sobre las corrientes y depósitos de agua que el mismo párrafo enumera, no dejando esta tarea, como

lo hizo la Constitución de 1857, a la ley secundaria, y estableciendo que la propiedad de la Nación es

inalienable e imprescriptible y que sólo mediante concesión pueden hacer aprovechamientos los particulares.

Además de ese precepto, el mismo artículo 27, en su párrafo primero establece que la propiedad originaria que

corresponde a la Nación sobre las tierras y aguas de la República y regula que sólo mediante título de aquélla

se puede obtener su propiedad por los particulares.

De aquí se desprende que en nuestro actual sistema legislativo, las aguas están sujetas a dos regímenes: uno

que permite su adquisición por particulares y otro que establece la propiedad de la Nación con el carácter de

inalienable. La misma Constitución se encarga de prevenir que las aguas que no estén dentro de la

enumeración que señala en el párrafo quinto el artículo 27, se consideran como aguas susceptibles de

propiedad privada, (Vid. son inalienables).

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En todo caso, el régimen sobre esta propiedad inalienable de la Nación, es, del mismo modo que la propiedad

sobre las sustancias minerales, un régimen de derecho público, en el que se reconoce que hay una afectación

de los bienes a la satisfacción de necesidades colectivas, afectación que es el fundamento de la inalienabilidad

establecida.

Es muy importante, subrayar que:

A) Tratándose del petróleo y de los carburos de hidrógeno sólidos, líquidos o gaseosos o de minerales

radioactivos y

B) Generación, conducción, transformación, distribución y abastecimiento de energía eléctrica que tenga por

objeto la prestación de servicio público.

C) Aprovechamiento de los combustibles nucleares para la generación de energía nuclear y la regulación de

sus aplicaciones en otros propósitos.

No se otorgarán concesiones ni contratos, ni subsistirán los que en su caso se hayan otorgado, pues es la

Nación la que debe realizar la actividad correspondiente (explotación de esos productos), misma que despliega

a través de organismos descentralizados como PEMEX. y CFE.

La capacidad para adquirir el dominio de las tierras y aguas de la Nación, se regirá por lo siguiente:

1.- Solo tienen derecho para adquirir el dominio de las tierras y aguas o para obtener concesiones de

explotación de minas o aguas, los mexicanos por nacimiento y por naturalización, así como a las sociedades

mexicanas. En el caso de extranjeros siempre y cuando respeten la Cláusula Calvo:

* Convengan ante la S.R.E. en considerarse nacionales respecto de dichos bienes,

* No invocar la protección de sus gobiernos,

* Faja: 100 Km. (fronteras) 50 Km. (playas).

* SANCION: Perder en beneficio de la Nación los bienes de que hubieren adquirido en virtud del mismo

convenio.

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1.1.4. BIENES DE DOMINIO PRIVADO. SUS CARACTERISTICAS

Son el conjunto de bienes propios del Estado que destina o utiliza para el logro de otras actividades o funciones

del mismo. Están sometidos a un régimen jurídico semejante al que rige a los que son objeto de propiedad

particular.

Son bienes propios del Estado que pertenecen a la Federación o bien a los Estados y Municipios, no son

inalienables ni tampoco imprescriptibles, por tanto pueden ser enajenados por el Poder Público y los

particulares pueden asimismo adquirirlos. La Federación, los Estados y los Municipios los adquieren por

diversas causas, entre otras por procedimientos coactivos seguidos en contra de los particulares (que no

cubren impuestos o contribuciones que les corresponden).

Son características de estos bienes, las siguientes:

*Son enajenables (venta en subasta a $ que determine la Comisión de Avalúos de Bienes Nacionales).

*Son inembargables (a. 60 de la L.G.B.N. en el caso de bienes inmuebles y a. 80 para bienes muebles).

*Son imprescriptibles.

*Pueden ser objeto de todos los contratos que regule el derecho común, con excepción de la donación y el

comodato, salvo en los casos en que estos contratos estén autorizados expresamente en esta ley (a. 71

L.G.B.N).

Son bienes de dominio privado de la Federación los comprendidos por el artículo 3 de la L.G.B.N. Véase

también el a. 27 fracción I, primer párrafo de la C.F. (bienes inmuebles necesarios para el servicio directo de

sus embajadas o legaciones).

LOS BIENES DE DOMINIO PRIVADO PASARÁN A FORMAR PARTE DEL DOMINIO PÚBLICO CUANDO

(artículo 4 L.G.B.N.)

*Sean destinados al uso común.

*Sean destinados a un servicio público o

*Sean destinados a alguna de las actividades que se equiparan a los servicios públicos o de hecho se utilicen

en esos fines.

Registro de la Propiedad Inmueble Federal

Registro Público de la Propiedad Federal perteneciente a la SECODAM.

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OTRAS CONSIDERACIONES GENERALES RESPECTO DEL PATRIMONIO

RESPECTO DE LOS BIENES DE DOMINIO PÚBLICO

*Estarán sujetos exclusivamente a la jurisdicción de los poderes federales. Si están ubicados dentro del

territorio de algún Estado será necesario el consentimiento de la legislatura respectiva, salvo que se trate de

bienes destinados al servicio Público o al uso común adquiridos por la Federación con anterioridad al 1º de

Mayo de 1917 o de los señalados en los artículos 2 fracción II y IV y 29 fracción I al XI y XIV L.G.B.N.

Una vez otorgado, el consentimiento será irrevocable (artículo 5 L.G.B.N.). Si la legislatura no da su

consentimiento los inmuebles quedarán en la situación jurídica de los de dominio privado nacional.

BIENES DE DOMINIO PRIVADO

*Con excepción de los comprendidos en fracción I del artículo 3 L.G.B.N., se regirán siempre por la legislación

Federal de tierras, bosques, aguas y demás especiales. Estarán sometidos al Código Civil para el D.F. en

materia común y para toda la República en materia federal, y en las materias que dicho código no regula, a las

disposiciones de carácter general de policía y de desarrollo urbano correspondientes (a. 6 L.G.B.N.).

La Federación, Estados y Municipios los adquieren por procedimientos coactivos seguidos contra particulares

que no cubren impuestos.

Solo los tribunales de la Federación serán competentes para conocer de los juicios civiles, penales o

administrativos, así como de los procedimientos judiciales no contenciosos que se relacionan con BIENES

NACIONALES, sean de dominio público o privado (a. 7 L.G.B.N.).

El Ejecutivo Federal podrá DECLARAR: (artículo 17 L.G.B.N.)

a) Que un bien determinado forma parte del dominio público.

b) Incorporar mediante decreto un bien que forma parte del dominio privado al dominio público y

c) Desincorporar del dominio público (mediante decreto) un bien que haya dejado de ser útil para fines de

servicio público (En cuyo caso podrán ser enajenados).

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1.2. ADQUISICION FORZOSA DE BIENES.

Los medios administrativos de adquisición de la propiedad por parte del Estado se clasifican en los siguientes

criterios:

A) EN ATENCIÓN A UNA NECESIDAD SOCIAL

1. Expropiación (a. 27 C.F.)

2. Nacionalización

3. Requisición (as. 16 y 29 C.F., a. 1 fracción V Ley de Expropiación).

B) COMO RESULTADO DE UNA SANCION IMPUESTA POR EL ESTADO POR DETERMINAR

INFRACCIONES.

1. Decomiso.

2. Confiscación (Prohibida a. 22 C.F.)

1.2.1. EXPROPIACIÓN

El estudio que acabamos de concluir del dominio del Estado, nos demuestra que éste se integra:

1) Por bienes adquiridos originalmente por el soberano por medio de la conquista, que no llegaron a salir de su

patrimonio en virtud de haber sido declarados inalienables.

2) Por aquellos bienes que el Estado va adquiriendo como consecuencia de sus transacciones con los

particulares, y

3) Por los que el propio Estado adquiere por virtud de aplicación de determinadas leyes, como las de

nacionalización y de bienes vacantes.

Pero puede suceder que el propio Estado necesite para algunas de sus atenciones, bienes que forman parte de

la propiedad privada y que no pueda obtenerlos por medio de arreglos contractuales con sus dueños.

Desde tiempos remotos se ha conocido en la legislación una forma por la que el Estado puede unilateralmente

llegar a adquirir esos bienes.

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La institución que para el efecto consagran las leyes es la de la EXPROPIACION por causas de utilidad

pública.

EXPROPIACION POR CAUSA DE UTILIDAD PÚBLICA

EXPROPIACION. Del Latín Ex. y Propio.

*Es desposeer legalmente de una cosa a su propietario, por tal motivo de utilidad pública otorgándole una

indemnización justa.

*Es una operación del Poder Público por la cual éste impone a un particular la cesación de su propiedad

mediante ciertos requisitos, de las cuales el principal es una indemnización, por razones de utilidad pública,

para realizar obras de interés general o de beneficio social.

CONCEPTO

Es un acto de carácter administrativo que viene a ser un medio por el cual el Estado impone a un particular la

CESASION (privación de algo) de su propiedad por existir una causa de utilidad pública y mediante la

COMPENSACION que es la indemnización en dinero, que se le otorga al particular por la privación de su

propiedad.

CARACTERISTICAS DE LA EXPROPIACION

* Causa la Utilidad Pública y

* Mediante Indemnización ($)

MARCO JURIDICO DE LA EXPROPIACION

Art. 27 párrafo segundo y fracción VI párrafo primero de la C.F. Ley de Expropiación de 23 de noviembre de

1936, publicada en el D.O.F. de fecha 25 de noviembre de 1936, con reformas de 22 de diciembre de 1993,

publicadas el día 4 de diciembre de 1997.

Sobre la expropiación por causa de utilidad pública, en cuando a la legislación se han expedido las siguientes

disposiciones:

A) La ley del 31 de Mayo de 1882 que autoriza al Ejecutivo Federal y al Ayuntamiento de México para realizar

expropiaciones por causa de utilidad pública.

B) A partir de la Constitución de 1917 se creó la primera Ley de Expropiación el 23 de Noviembre de 1936, la

cual en su artículo 3 estableció que el Ejecutivo Federal hará la declaración de expropiación.

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AUTORIDADES QUE INTERVIENEN EN LA EXPROPIACION

- Declara causas de utilidad Poder Legislativo

- La declaración Autoridad Administrativa

- Su ejecución Autoridad Administrativa

- Procedimiento de Indemnización Autoridad Judicial

En el caso del procedimiento de indemnización, éste es el único momento en que interviene la autoridad

judicial bien sea por exceso o demérito en el valor del bien, por mejoras o deterioros que sufren los bienes con

posterioridad a la fecha de asignación del valor fiscal. También interviene la autoridad judicial cuando se trate

de objetos cuyo valor no esté fijado en las oficinas rentísticas. Ambos casos quedarán sujetos a juicio pericial y

a resolución judicial.

El ejercicio de las acciones que corresponden a la Nación, por virtud de las disposiciones constitucionales, se

hará efectivo por el procedimiento judicial.

LA CAUSA DE UTILIDAD PÚBLICA

La Suprema Corte de Justicia, en una época estuvo considerando como esenciales para la existencia de la

causa utilidad pública, dos elementos:

a) Que sea impuesta por una necesidad pública, la expropiación que con fundamento en ella se haga, redunde

en provecho común, en beneficio de la colectividad.

b) Que la cosa expropiada pase a ser del goce y de la propiedad del Municipio, Estado o Nación y no ser

simples individuos.

c) Últimamente, se ha adoptado la tesis de que la utilidad pública, en sentido genérico, abarca 3 causas

específicas:

1. La utilidad pública en sentido estricto, o sea, cuando el bien expropiado se destina directamente a un

servicio público.

2. La utilidad social, que se caracteriza por la necesidad de satisfacer de una manera inmediata y directa a una

clase social determinada y mediante ella a todo la colectividad y,

3. La utilidad nacional que exige se satisfaga la necesidad que tiene un país de adoptar medidas para hacer

frente a situaciones que le afecten como entidad política o como entidad.

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SON CAUSAS DE UTILIDAD PÚBLICA

Son causas de utilidad pública las señaladas en el artículo 1 de la Ley de Expropiación y que son las siguientes:

I.- El establecimiento, explotación o conservación de un servicio público.

II.- La apertura, ampliación de calzadas, puentes, caminos y túneles para facilitar el transito urbano y

suburbano.

III.- El embellecimiento, ampliación y saneamiento de las poblaciones y puertos, la construcción de hospitales,

escuelas, parques, jardines, campos deportivos o de aterrizaje, o construcción de oficinas para el gobierno

federal, y de cualquiera otra obra destinada a prestar servicios de beneficio colectivo.

IV.- La conservación de los lugares de belleza panorámica, de la antigüedad y de objetos de arte, de los

edificios y monumentos arqueológicos o históricos y de las cosas que se consideran como características

notables de nuestra cultura.

V.- La satisfacción de necesidades colectivas en caso de guerra o trastornos interiores, el abastecimiento de las

ciudades o centros de población de víveres, de otros artículos de consumo necesario, y los procedimientos

empleados para combatir o impedir la propagación de epidemias, epizootias, incendios, plagas, inundaciones u

otras calamidades publicas.

VI.- Los medios empleados para la defensa nacional o para el mantenimiento de la paz pública.

VII.- La defensa, conservación, desarrollo o aprovechamiento de los elementos naturales susceptibles de

explotación.

VIII.- La equitativa distribución de la riqueza acaparada o monopolizada con ventaja exclusiva de una o varias

personas y con perjuicio de la colectividad en general o de una clase en particular.

IX.- La creación, fomento o conservación de una empresa para beneficio de la colectividad.

X.- Las medidas necesarias para evitar la destrucción de los elementos naturales y los daños que la propiedad

pueda sufrir en perjuicio de la colectividad.

XI.- La creación o mejoramiento de centros de población y de sus fuentes propias de vida.

XII.- Los demás casos previstos por las leyes especiales.

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OBJETOS SUSCEPTIBLES DE LA EXPROPIACION

Alcance

De acuerdo con la Doctrina general en la materia, la expropiación puede tener por objeto o el derecho de

propiedad íntegramente considerado o sólo alguno de sus atributos, o cualquiera otra clase de derechos, según

lo requiera la causa de utilidad pública que pretenda satisfacerse.

Bienes

El Estado no puede proceder a la expropiación del dinero en efectivo, pues por una parte, el medio legal para

obtener los recursos indispensables para el sostenimiento de los gastos públicos es el IMPUESTO y, por la

otra, como la expropiación da lugar a una indemnización en efectivo, si éste se expropiara para compensarse

en la misma especie, la expropiación dejaría de cumplir su objeto.

La anterior enunciación de causas de utilidad pública, no implica que sean todas las que puedan en un

momento dado tener dicho carácter o de que las que allí se encuentran puedan carecer de el. Es una relación

susceptible de modificación a través del órgano legislativo correspondiente y con las formalidades debidas.

Los bienes materia de expropiación pueden ser inmuebles empresas mercantiles y negociaciones industriales,

no obstante que, de acuerdo con la doctrina y en forma tradicional, siempre han sido objeto de ella,

principalmente los inmuebles.

Los bienes muebles al formar también parte de la propiedad privada, son susceptibles de expropiación por

causa de utilidad pública en nuestro derecho, de lo cual dan prueba los términos “ propiedad privada ¨, cosa

expropiada, propiedad particular, objetos cuyo valor no este fijado en las oficinas rentistas y la generalidad del

articulo 27 párrafo II Constitucional.

La indemnización es la cantidad que en dinero, debe pagarse al propietario del bien afectado, para resarcirlo de

los daños que se le causan.

La ley de la materia en sus artículos 19 y 20 establece que el importe de la expropiación, será cubierto por el

estado o por el beneficiario, debiendo la autoridad expropiante fijar la forma y el plazo en que la indemnización

haya de pagarse, lo que no abarcara nunca un periodo mayor de diez años.

Gabino Fraga estima que corresponde a las leyes secundarias determinar la época en que el pago debe

efectuarse, pudiendo establecerlo como previo, como simultáneo o como posterior a la expropiación, pero

siempre que en este ultimo caso haya una justificación irrefutable de la necesidad de que sea posterior.

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El importe de la indemnización debe ser pagado por el Estado en dinero en efectivo con excepción de las

expropiaciones de carácter agrario, cuyo pago la propia Constitución autoriza sea con bonos de la deuda

pública, los que a la postre se traducen en dinero.

El articulo 27 de la Constitución en el párrafo segundo de su fracción VI establece la norma para fijar el monto

de la indemnización, sirviendo de base para el efecto, la cantidad que como valor fiscal del bien expropiado

figure en las oficinas catastrales o recaudadoras y solo en el caso de mejoras o cuando los valores no

estuvieren fijados en las oficinas rentísticas, se sujetara a un juicio pericial y a resolución judicial.

En materia agraria presenta otros aspectos derivados de la inminente e inmediata atención de que precisa el

desarrollo de la política agraria para la dotación y restitución de tierras, cuya ejecución es de tal importancia e

interés nacional, que con o sin elementos el estado debe proseguirla sin interrupción lo que origina un

tratamiento especial para los casos de expropiación que se precisen en este aspecto, los que llegado el

momento no se aplazan por falta de fondos, simplemente declara vencidas sus obligaciones las pasa a la

deuda publica y al afectado le entrega el bono correspondiente que a la postre se convierte en dinero.

EL PROCEDIMIENTO EXPROPIATORIO

1. La autoridad administrativa hará la declaración correspondiente, sin audiencia del afectado ni la intervención

de la autoridad judicial (no garantía de Audiencia). En materia de expropiación, por lo que hace al procedimiento

administrativo no rige la garantía de audiencia prevista en el artículo 14 de la C.F. La autoridad judicial sólo

tiene competencia en los dos casos que ya se han señalado. Sin embargo, cuando la ley ordene que dentro

del procedimiento se dé oportunidad al afectado para que presente sus defensas, hay obligación de seguir ese

procedimiento.

2. El Ejecutivo por conducto de la dependencia competente, tramitará el expediente de expropiación, de

ocupación temporal o limitación de dominio y hará la declaratoria respectiva (decreto), se publicará en el Diario

Oficial y se notificará personalmente a los interesados.

3. Los afectados, dentro de los 15 días hábiles siguientes a la notificación del acuerdo podrán interponer

RECURSO administrativo de REVOCACION (proceso administrativo). Vid. Reforma de la L.F.P.A.

4. Una vez que éste se hubiese resuelto negativamente o no interpuesto, la autoridad administrativa,

procederá a la ejecución de la declaratoria (excepto en guerra, trastornos interiores, epidemias, incendios,

plagas, epizootias, calamidades públicas), pues en estos casos, la ejecución de la declaratoria respectiva se

hará sin esperar la interposición ni la resolución del recurso de revocación.

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El propietario afectado por un acto expropiatorio, de acuerdo con el artículo 5 de la ley de la materia puede

interponer en contra de la declaratoria de expropiación, recurso administrativo de revocación, dentro de los

quince días siguientes a la notificación personal de declaratoria o al de la segunda publicación de la misma en

el Diario Oficial de la Federación.

Otro recurso que asiste al propietario de un bien afectado por un acto expropiatorio, es el que le otorga el

artículo nueve de esa ley que es el siguiente:

LA REVERSION O INSUBSISTENCIA DE LA EXPROPIACION.

Cuando no se destine el bien al fin que dio causa a la declaratoria respectiva, dentro del término de 5 años, el

particular afectado podrá solicitar a la autoridad la reversión o insubsistencia de la expropiación o el pago de los

daños causados, quien resolverá con resolución dentro de los 45 días hábiles siguientes a la solicitud +

Devolver la totalidad o parte de la indemnización cubierta (artículo 9 L.E.). El derecho en comento se debe

ejercer dentro de dos años.

EJECUCION DEL ACTO EXPROPIATORIO

Resuelto negativamente el recurso administrativo de revocación o habiendo transcurrido el termino sin haber

sido interpuesto, puede la autoridad expropiante tomar posesión del bien afectado. Hay casos de expropiación

en los que como excepción a la regla general mencionada puede la autoridad tomar posesión inmediata del

bien, aun sin esperar la resolución del recurso o el transcurso del tiempo previsto para su interposición sin que

este se hubiere hecho valer, son los consignados en las fracciones V, VI, y X antes transcritas, del articulo

primero de la ley de expropiación.

AUTORIDADES QUE INTERVIENEN EN LA FIJACION DE LA INDEMNIZACION

La autoridad judicial interviene en los casos en que haya habido mejoras (exceso) o deterioros (demérito)

posteriores a la fijación del valor fiscal o en el caso de que éste no exista registrado en las oficinas rentísticas,

de tal manera que se puede concluir que la autoridad que ha de fijar la indemnización fuera de esos casos

excepcionales, es la AUTORIDAD ADMINISTRATIVA, por las circunstancias de que la fijación del monto de la

indemnización no implica por su naturaleza, la realización de un acto jurisdiccional.

CUANDO SE CONTROVIERTE MONTO DE LA INDEMNIZACION (artículo 11 de la L.E.)

El monto de la indemnización se controvierte cuando el bien sufre mejoras o deterioros posteriores, que

implican una modificación en su valor. Así mismo, si no esta fijado su valor en las oficinas correspondientes.

Frente a tales situaciones debe tramitarse el juicio pericial y esperar que se dicte la resolución judicial.

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PROCEDIMIENTO

1. Consignación al juez correspondiente.

2. Partes designar peritos en un lapso 3 días.

3. En caso de discordia, se nombra un perito tercero en discordia.

4. Rinden el dictamen (Vista) 60 días. Si hay acuerdo en los dictámenes se fija el monto respectivo. En caso de

inconformidad se llama al tercero en discordia, quien tiene 30 días para rendir el dictamen.

5. El Juez resuelve con vista en los dictámenes, 10 días. No recursos.

6. Debe procederse al otorgamiento en escritura por el afectado o en su rebeldía por el juez.

7. Contra la resolución judicial que fije el monto no cabe ningún recurso.

1.2.2. DECOMISO

El decomiso es una pena accesoria, en coacciones de carácter administrativo, en otras de carácter

jurisdiccional, por virtud de la cual se substraen sin indemnización de la propiedad de las personas,

determinados bienes muebles como consecuencia de un acto jurídico.

El decomiso derivado en su expresión de la palabra latina “commissum”, fue institución contenida en el Derecho

Romano, Escriche, en el Diccionario de Jurisprudencia y Legislación define como “la pena de pedimento de la

cosa en que incurre el que comercia en géneros prohibidos”.

Sanción que se aplica en materia fiscal por violación de las leyes que la regulan, reteniendo el Estado para si

los objetos que fueron materia de la infracción, ya en materia penal respecto a los instrumentos relacionados a

la comisión de un delito o de una falta, con tal carácter de pena accesoria, conservando hasta la época

moderna , existe como justificada medida para privar de los elementos que constituyen ya el hecho, ya el medio

de la infracción, a los infractores de normas fiscales o penales.

El decomiso, para su aplicación debe estar expresamente consignado en la legislación como sanción.

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1.2.3 OTRAS FORMAS

CONFISCACION

Es una medida arbitraria de carácter administrativo, que simboliza el abuso de la autoridad, la que investida de

su representación legal, desposee sin derecho, sin fundamento legal de sus propiedades, derechos o

posesiones a un particular; el Doctor Andrés Serra Rojas estima que “Es la adjudicación que se hace el Estado,

de los bienes de una persona y sin ningún apoyo legal”.

En los Estados modernos, la confiscación esta proscrita, aun cuando pudiera hacerse aparecer con otro nombre

u otra figura jurídica. Nuestra legislación en su articulo 14 Constitucional establece que nadie podrá ser privado

de la vida, de la libertad, o de sus propiedades, posesiones o derechos sino mediante juicio seguido ante los

tribunales previamente establecidos, en el que se cumplan las formalidades esenciales del procedimiento y

conforme a las leyes expedidas con anterioridad al hecho. Y en su articulo 22, al señalar las penas que quedan

prohibidas enuncia la multa excesiva, la confiscación de bienes y de cualesquiera otras inusitadas y

trascendentales y en el segundo párrafo del mismo articulo 22 establece que “no se considera como

confiscación de bienes, la aplicación total o parcial de los bienes de una persona hecha por la autoridad

judicial para el pago de la responsabilidad civil resultante de la comisión de un delito, o para el pago de

impuestos o multas. Tampoco se considerará confiscación el decomiso que ordene la autoridad judicial, de los

bienes en caso del enriquecimiento ilícito, en los términos del articulo 109; ni el decomiso de los bienes del

sentenciado, por los delitos de los previstos como delincuencia organizada, o el de aquellos respecto de los

cuales este se conduzca como dueño, si no acredita la legitima procedencia de dichos bienes.

No se considerará confiscación la aplicación a favor del Estado de bienes asegurados que causen abandono en

los términos de las disposiciones aplicables. La autoridad judicial resolverá que se apliquen a favor del Estado

los bienes que hayan sido asegurados con motivo de investigación o proceso que se sigan por delitos de

delincuencia organizada, cuado se pongan fin a dicha investigación o proceso, sin que haya un

pronunciamiento sobre los bienes asegurados. La resolución judicial se dictará previo procedimiento en que se

otorgue audiencia a terceros y se acredite plenamente el cuerpo del delito previsto por la ley como de

delincuencia organizada, siempre y cuando se trate de bienes respecto de los cuales el inculpado en la

investigación o proceso citados haya sido poseedor, propietario o se haya conducido como tales,

independientemente de que hubieran sido transferidos a terceros, salvo que estos acrediten que son

poseedores o adquirentes de buena fe”.

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NACIONALIZACION

En el aspecto económico es el acto unilateral del Estado por el cual, en ejercicio de su soberanía incorpora a la

Nación determinados bienes o medios de producción de capital privado, sustituyéndose en el carácter de

empresario.

Andrés Serra Rojas la entiende como una forma de explotación de una empresa privada bajo un régimen

publico exorbitante. Estamos en presencia de la sustitución de una empresa capitalista por una empresa de

Estado.

Si la nacionalización es usada moderadamente y en forma acorde con las necesidades de un país sus

resultados serán positivos; sin embargo; un abuso en su utilización puede ser perjudicial en el aspecto

económico.

La nacionalización con grandes puntos de similitud con la expropiación, paralelamente presentan diferencias

especificas con esta. La traslación de la propiedad en la nacionalización, estima Serra Rojas, “es obra directa

de la ley, pero es mas amplia en la expropiación y de carácter general, en tanto que la nacionalización obedece

a reglas especiales”.

REQUISICION

Es el acto unilateral por el cual el Estado transfiere a su favor la propiedad o el uso de bienes muebles, el uso

temporal de bienes inmuebles, o una prestación de servicios, para satisfacer intereses generales, y mediante

indemnización.

La requisición es otro medio de carácter administrativo que transfiere la propiedad de bienes a favor del Estado,

generalmente de los que se consumen como víveres, alimentos, forrajes, etc. O en ocasiones implica la

transferencia temporal del uso, para el caso de inmuebles.

Para Serra Rojas requisición es una operación unilateral de gestión publica por la cual la administración exige

de una persona sea la prestación de la actividad, la provisión de objetos inmobiliarios, el abandono temporal del

goce de un inmueble, o de empresas para hacer con un fin determinado, un uso conforme al interés general.

La requisición tiene su justificación principalmente en tiempos de guerra, pero es dable en tiempos de paz,

como consecuencia de situaciones extraordinarias que obliguen al Estado a tomar medidas extremas y

decisiones rápidas.

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Su fundamento en el articulo 16 y 29 Constitucional que dicen: “En tiempos de paz ningún miembro del ejercito

podrá alojarse en casa particular, contra la voluntad del dueño, ni interponer prestación alguna. En tiempos de

guerra los militares podrán exigir alimentos, bagajes, alojamiento y otras prestaciones, en los términos que

establezca la Ley Marcial correspondiente”.

Por su parte el articulo 29 establece que: en los casos de invasión , perturbación grave de la paz publica o

cualquier otro que ponga ala sociedad en grave peligro o conflicto solamente el presidente de la República

Mexicana de acuerdo con los titulares de las Secretarias de Estado, los departamentos administrativos y la

Procuraduría General de la República y con aprobación del Congreso de la Unión y en los recesos de este, de

la comisión permanente, podrán suspenden en todo el país o en lugar determinado , las garantías que fuesen

obstáculo para hacer frente, rápida y fácilmente , a la situación, pero deberá hacerlo por un tiempo limitado por

medio de prevención general y sin que la suspensión contraiga a determinado individuo...”

La justificación legal de esta disposición que solo en apariencia vulnera las garantías consignadas en los

artículos 14 y 16 Constitucionales, se encuentra en el párrafo tercero del articulo 27 Constitucional que declara

”la nación tendrá en todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad privada las modalidades que dicte el

interés público...”

1.3. CONTRATOS ADMINISTRATIVOS

El Código Civil para el Distrito Federal en materia común en su articulo 1792 define al convenio como el

acuerdo de dos o mas personas para crear, transferir, modificar, o extinguir obligaciones y en su articulo 1793

precisa: “ los convenios que producen o transfieren las obligaciones y derechos, forman el nombre de

contratos”.

El artículo 1859 establece que las disposiciones legales sobre contratos serán aplicables a todos los convenios,

pierde relevancia la distinción entre unos y otros, “lo cual según Ramón Sánchez Medal hace que en realidad

resulte ya bizantina la diferencia entre convenio y contrato”.

Cuasi contrato: es todo acto lícito voluntario que, sin existir convención que lo acuerde, produce obligaciones,

ya respecto de uno de los interesados o reciprocas entre las partes, bien en beneficio de un tercero. Se suelen

considerar como cuasi contratos el pago indebido, el enriquecimiento sin causa, la gestión de negocios y la

promesa publica de recompensa.

Contrato Administrativo: es la totalidad de las normas positivas destinadas a regular la actividad del Estado y de

los demás órganos públicos, en cuanto se refiere al establecimiento y realización de los servicios de esta

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naturaleza, así como a regir las relaciones entre la administración y los particulares y las entidades

administrativas entre sí.

Son contratos administrativos: Aquellos celebrados por la administración pública con un fin publico circunstancia

por la cual pueden conferir al cocontratante derechos y obligaciones frente a terceros, o que en su ejecución,

puede afectar la satisfacción de una necesidad pública colectiva, razón por la cual están sujetos a reglas de

derecho público, exorbitantes del derecho privado que colocan al cocontratante de la administración pública en

una situación de subordinación jurídica.

Marienhoff dice que contrato administrativo: es el acuerdo de voluntades generador de obligaciones, celebrado

entre un órgano del estado en ejercicio de las funciones administrativas que el competen con otro órgano

administrativo o con un particular o administrado para satisfacer finalidades públicas.

De acuerdo con la naturaleza de los ordenamientos jurídicos los contratos se dividen en contratos civiles,

mercantiles, laborales y administrativos.

La doctrina ha llegado a poner en duda la posibilidad jurídica de que la administración pública celebre

auténticos contratos; mas, superada tal inquietud, discute cual es su naturaleza para poder establecer si

existen un tipo especial de contrato, diferente al derecho privado, o sea, si existe contrato administrativo.

Así, como apunta Fiorini “mientras los juristas polemizaban sobre la posibilidad de que el poder público pudiera

realizar contratos, la realidad cotidiana patentizaba la presencia de las relaciones contractuales entre el Estado

y los particulares”.

En ese descenso doctrinal se advierten dos corrientes, una negativa que rechaza la existencia de contratos

administrativos, constitutivos de una categoría diferente las de los derechos privados; y otra corriente positiva

que sostiene la existencia de los contratos administrativos, diferentes a los celebrados entre particulares

sometidos a un régimen jurídico exorbitante del derecho privado, a causa de un interés público implícito en el

objeto del contrato.

La corriente negativa casi desaparecida en la actualidad fue sostenida por juristas tan destacados como Ottor

Mare, Fritz Fleiner y León Duguit, los cuales son los argumentos siguientes:

“La negación de los contratos administrativos supone que los ejemplos que normalmente se manejan bajo tal

denominación habrían de ser clasificados, bien como contratos civiles de la administración, bien como actos

administrativos, necesitados del consentimiento de los particulares destinatarios y con frecuentes efectos

jurídicos de acto condición

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En la corriente positivista figuran algunos autores como Gabino Fraga, Fernando J. López de Zavalia, el cual

dice que los contratos administrativos se caracterizan por ser celebrados por la administración pública, por lo

general con un particular, con un fin publico relativo a la satisfacción de una necesidad pública, sometidos al

derecho publico con cláusulas exorbitantes del derecho privado, en los que el particular queda en una situación

de subordinación jurídica respecto de la administración pública.

El autor de esta obra comparte la tesis de la corriente positiva que sostiene la existencia del contrato

administrativo como categoría diferente al contrato del derecho privado. Empero, considera que solo una parte

de los celebrados por la administración pública son contratos administrativos, habida cuenta que también

celebra otros de derecho privado. En este sentido, Miguel Acosta Romero afirma que:

“Aun cuando la doctrina a discutido mucho sobre el particular, creemos que en la actualidad si se acepta

teóricamente esta clase de contratos, y se explica la intervención del estado en vista de una auto limitación a

su soberanía y a su poder de mando, función de los objetivos que persigue con la celebración del contrato y

que son los de cumplir con sus cometidos”.

CRITERIOS PARA DIFERENCIAR EL CONTRATO ADMINISTRATIVO.

Estos criterios se han postulado de acuerdo a la doctrina en subjetivo, el de jurisdicción, el de la cláusula

exorbitante, el legalista, el de los servicios públicos, el de la finalidad y el mixto.

CRITERIO SUBJETIVO

Conforme a este criterio un contrato es administrativo si uno de los contratantes forma de la administración

publica; no obstante para los promotores de este criterio “un contrato es administrativo por el hecho de que es

celebrado por la administración publica, obrando como tal y relacionándose, por este conducto con los

particulares”.

Es indiscutible los contratos administrativos celebrados entre particulares no pueden ser de naturaleza

administrativa, pero ello no implica que todo contrato celebrado por la administración pública sea administrativo,

ya que muchos de los que ella es parte son contratos de derecho privado, como lo demuestran, entre otros los

contratos de compraventa que el instituto de seguridad y servicios sociales de los trabajadores del estado

celebrado por los clientes de sus tiendas.

La teoría de la doble personalidad ha sido descartada, entre otras razones por comprobarse con facilidad que el

Estado no es sino uno solo y único sujeto de derecho; por ello, si caprichosamente se le dividiere en dos

personalidades, una publica y otra privada, se tendría que admitir que, como persona de derecho público no

seria responsable de los actos que efectuare como persona de derecho privado y a la inversa seria absurdo.

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CRITERIO DE LA JURISDICCIÓN.

A causa de sus débiles fundamentos, este criterio hace radicar en la competencia de los tribunales de lo

contencioso administrativo el carácter administrativo de un contrato.

Pretende convertir lo objetivo en lo sustantivo, y accidental en lo esencial de los contratos, siendo inaceptable

que el accidente jurisdiccional altere la esencia contractual como inadmisible resulta que la voluntad del

legislador, del juez o de las partes, haga variar de manera artificial la esencia o naturaleza de un contrato, por

supeditarla a su competencia jurisdiccional.

CRITERIO FORMAL.

La caracterización de un contrato como administrativo se determina, conforme a un criterio formal, por la

observancia de ciertas formalidades específicas predeterminadas, tales como la licitación previa o el apego a

bases o condiciones preestablecidas, entre otras. Este criterio es objetado porque las formalidades no son

exclusivas de los contratos administrativos, los cuales por cierto, en ocasiones quedan exentos de su

cumplimiento.

CRITERIO DE LA CLAUSULA EXORBITANTE.

Como dice el profesor Lector Jorge Escola: La nota propia de este tipo de contratos radica la existencia, en

ellos, la cláusula exorbitante del derecho privado, es decir, de cláusulas que no tendría cabida dentro del

derecho común y que ponen de manifiesto la existencia de un régimen en especial del derecho público.

Se objeta dicho criterio porque en los contratos administrativos pudiera ser innecesaria dichas cláusula para

alcanzar los mismos objetos, porque la administración publica disfrute de especiales prerrogativas establecidas

en las leyes y reglamentos.

CRITERIO TELEOLOGICO

Acorde con este criterio teleológico, el carácter público de un contrato lo determina su telas, su finalidad; de

suerte que un contrato será administrativo si tiene determinados fines distintos a los propios de los contratos de

derecho privado, como pudiera ser la satisfacción, de la necesidad de carácter general o del interés público, o el

logro de la utilidad publica. Este criterio teleológico registra en la doctrina versiones diferentes; entre ellas

destacan las de los servicios públicos, la del interés publicó y la de la utilidad pública.

Conforme a este criterio en su modalidad de los servicios públicos, es administrativo todo contrato cuya

finalidad consista en la prestación de un servicio público.

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La utilidad pública es otra versión del criterio teológico de diferenciación de los contratos administrativos, los

cuales se identifican por ser los celebrados por la administración pública con fines de utilidad pública.

Otra modalidad de este criterio para diferenciar los contratos administrativos es la del interés público, conforme

a la cual dicho interés representa la finalidad de los mismos, como explica Héctor Jorge Escola.

Todas esas singularidades características, todas las peculiaridades que le son asignadas y contribuyen a

perfilar los contratos administrativos nacen de su especifica finalidad de interés público, por lo que es ese

propósito de alcanzar de manera directa e inmediata la satisfacción de ese interés público el que define de

manera contundente e irrefutable un contrato como contrato administrativo.

CRITERIO LEGAL

El más pragmático de los criterios para establecer el carácter administrativo de un contrato es el criterio legal,

conforme al cual solo serán administrativos los contratos que la ley determine como tales.

Este criterio es objetable porque el legislador podría llegar a considerar como administrativos contratos

estrictamente de derecho privado celebrados por la administración pública, sin que por ello adquiera, en rigor tal

carácter.

CRITERIO MIXTO

Los contratos administrativos son aquellos en los que, cuando menos una de las parte es una persona de

derecho público, en el ejercicio de una función administrativa con observancia de formalidades especiales y

posibles contenidos de cláusulas exorbitantes del derecho privado y no contratarlas al derecho publico

destinados a la satisfacción de necesidades de carácter general o del interés público, al logro de la utilidad

pública y cuyas controversias que pudieran suscitarse deberán ser de la competencia del órgano jurisdiccional

facultado para conocer de asuntos de derecho administrativo.

PRINCIPIOS RECTORES DEL CONTRATO ADMINISTRATIVO.

PRINCIPIO DE LEGALIDAD

De acuerdo con este principio el contrato administrativo debe sujetarse a un régimen jurídico determinado con

precisión porque, según dice Jean Rivero la administración es una función esencialmente ejecutiva, ella tiene

en la ley el fundamento y el límite de su acción.

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PRICIPIO DE CONTINUIDAD

Conforme a este principio la ejecución de contratos administrativos no debe interrumpirse ni retrasarse, a efecto

de que puedan alcanzar cabal y oportunamente su finalidad.

PRINCIPIO DE MUTABILIDAD

La administración no puede renunciar a sus potestades ni cercenar su voluntad en la gestione del interés

general. Su responsabilidad privativa del interés general no puede verse condicionada por los contratos que

vaya celebrando. De ahí su potestad de introducir modificaciones en el objeto mismo del contrato, que aseguren

una mejor realización de aquel o una mejor adaptación a sus fines. Potestad cuya renuncia aun declara en el

contrato seria nula y sin valor. La inmutabilidad del contrato se ve así matizada, coloreada administrativamente

por la inmutabilidad del fin.

PRINCIPIO DEL EQUILIBRIO FINANCIERO

Conocido también como el principio de la ecuación financiera, en el contrato administrativo se debe mantener el

equilibrio financiero establecido en su celebración, a efecto de que las partes no resulten perjudicadas, por una

relación que se torna inequitativamente, ya por causas imputables al estado o a la administración pública, bien

por causas no imputables al estado, para ello se emplean mecanismos diversos como aquellos a que se refiere

el llamado hecho del príncipe.

Ya que este suele entenderse como la alteración de las condiciones de un contrato, imprevisible para el

gobernado contratante, no como parte del contrato, sino en ejercicio de las atribuciones derivadas de su

carácter de autoridad pública, Escola explica el hecho del príncipe como: Toda decisión o conducta que emane

de la misma autoridad publica que celebro el contrato y que esta realiza en su carácter y condición de tal, que

ocasione un perjuicio real, cierto, directo y especial al contratante particular , que este no haya podido prever al

tiempo de celebrar el contrato y que produzca una alteración anormal de su ecuación económica financiera.

ELEMENTOS DEL CONTRATO ADMINISTRATIVO

Empezaremos primeramente por mencionar la diferencia entre requisito y elemento siendo el primero toda

condición indispensable para la validez del contrato, y elemento se entiende como cada una de las partes

integrantes del contrato, alguna de las cuales reciben la denominación de esenciales por ser indispensables

para su existencia, a diferencia de las no esenciales, así llamadas porque el contrato puede existir aun si carece

de ellas.

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La doctrina mencionada con insistencia a los sujetos, el consentimiento, el objeto, y la causa como elementos

esenciales del contrato administrativo, aun cuando de manera aislada y poco frecuente, también se postulan

como elementos esenciales la forma, la competencia y capacidad, la finalidad, el régimen jurídico especial, y la

licitación. Y como elementos no esenciales se señalan el plazo de duración, las garantías y las sanciones.

LOS SUJETOS

Todo contrato es imposible sin los sujetos o partes que lo celebran. En los contratos administrativos uno de los

sujetos debe ser un órgano del poder publicó en cumplimiento de una función administrativa y el otro sujeto

será un particular.

El órgano del poder público puede ser un órgano administrativo, lo mismo que uno legislativo o uno

jurisdiccional. Pero siempre en cumplimiento de una función administrativa, y dotados de competencia para la

celebración del contrato respectivo. Por tal razón la competencia es un requisito que debe satisfacer el órgano

publicó contratante y no un elemento del contrato.

EL CONSENTIMIENTO

Doctrina, legislación y jurisprudencia se unificaron para considerar el consentimiento como causa esencial del

contrato administrativo, creador de derechos y obligaciones, para cuya existencia se requiere de la voluntad de

los sujetos o partes y de su coincidencia para generar el consentimiento y con el, el contrato mismo.

La voluntad administrativa representa su determinación deliberada de producir un acto bilateral específico,

generador de derechos y obligaciones, en concurrencia con su cocóntratante realizada en la forma señalada en

la norma jurídica aplicable.

En consecuencia la forma no es un elemento del contrato, sino un requisito que habrá de satisfacer tanto

respecto al consentimiento y en particular a la manifestación de la voluntad, como a la instrumentación del

contrato.

Es importante recordar la necesidad de preservar la voluntad contra todo vicio que la violente o deforme, el

error, el dolo y la violencia son los vicios más señalados en la doctrina, que afectan el consentimiento respecto

de los contratos administrativos.

EL OBJETO

Este es esencial y Basoco de todo contrato, el cual debe ser cierto, posible, licito y determinado o determinable

en cuanto a su especie, y consiste en la creación o transmisión de derechos y obligaciones.

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A diferencia del contrato de derecho privado, la cosa objeto del contrato administrativo puede no estar en el

comercio, como ocurre en el contrato de obras publicas relativo a la conservación o mantenimiento del edificio

del Museo Nacional de Antropología.

LA CAUSA

Se entiende como causa el móvil o principio impulsor de la voluntad de las partes para su celebración, la causa

del órgano público es diferente de la de su cocontratante. De tal magnitud que si desaparece el contrato

administrativo se extingue, lo cual significa que es la causa impulsora de la voluntad del órgano público.

La causa suele considerarse como un elemento esencial presupuesto o implícito en el objeto, en tal sentido

Héctor Jorge Escola afirma: La existencia del objeto a su vez implica la de una causa y la de una finalidad

implícitos en el y condicionados, en cuanto a su ser, por los mismos sujetos.

LA FINALIDAD

La finalidad explica el porque de tal objeto, es por lo cual que dice Miguel S. Marienhoff, la finalidad constituye

la razón que justifica la emisión del acto. De modo que la finalidad en relación al objeto o contenido del acto,

actúa teleologicamente.

OTROS PRESUNTOS ELEMENTOS ESENCIALES

Aceptados por la doctrina son la forma, la competencia, la capacidad, el régimen jurídico especial y la licitación.

Quienes ven el régimen jurídico especial como un elemento esencial del contrato administrativo, señalan que

este es regido por reglas exorbitantes del derecho privado, de tal suerte que aunque determinados privilegios

del órgano publico contratante no consten en forma expresa en el contrato, deberán hacerse valer cuando sea

necesario, entre ellos destacan su posible modificación y aun su rescisión unilateral, así como su ejecución

directa.

Pedro Guillermo Altamira estima que un contrato celebrado por la administración pública será administrativo si

establece estas tres posibilidades de lo contrario será un contrato común. Ellas tienen a su vez como

presupuesto ineludible: a) un régimen de interpretación especial, b) el privilegio de la decisión unilateral, c) el

privilegio de la ejecución directa.

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LA LICITACIÓN

La acción de licitar se ha usado en nuestros ordenamientos jurídicos como sinónimo de subastar, concursar y

rematar; así, por ejemplo el texto vigente del articulo 134 constitucional habla de licitaciones para la

adjudicación de los contratos del gobierno, en tanto que su texto original utilizo el termino subasta.

La licitación no constituye siquiera un elemento no esencial de contrato administrativo, sino un requisito previo a

su celebración que se satisface mediante un procedimiento administrativo, especifico para seleccionar al

cocóntratante que haya presentado la mejor oferta, que no necesariamente este la mas baja o la mas alta.

MODIFICACIÓN Y TERMINACIÓN DE LOS CONTRATO

Consecuencia también de la primacía que en el contrato administrativo tiene el eficaz cumplimiento de las

atribuciones del estado, es la de que cuando para lograr esa eficacia rehaga indispensable la modificación de

las prestaciones convenidas, aumentándolas, disminuyéndolas, poniéndoles fin, debe la administración poder

hacerlo, pues como dice Jesé seria absurdo que la administración continuase haciendo funcionar durante años

un servicio publico que se ha hecho inútil, o que tuviese una organización que se ha vuelto inadecuada, o

recibiese prestaciones que se han hecho inútiles para el servicio público.

El reconocimiento de las facultades de modificación y conclusión de los contratos administrativos no significan

que el ejercicio de ella pueda realizarse en una forma absolutamente discrecional por parte de la

administración, pues , además de que las propias facultades están, subordinadas al cumplimiento de las

atribuciones del estado y debe ser por lo tanto evidente que ese cumplimiento exija la modificación o conclusión

de las cláusulas del contrato, el particular que ha celebrado el contrato debe, salvo convenio en contrario, ser

indemnizado por las variaciones o extinción de las obligaciones contractuales en virtud de los principios de

igualdad, de los individuos frente a las cargas públicas.

Algunas modalidades de estos contratos son por ejemplo: contrato de arrendamiento, de obra pública, de

adquisiciones.

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1.3.1. ADQUISICIONES Y ARRENDAMIENTOS

En la Ley de adquisiciones, arrendamientos de bienes muebles y almacenes de la administración pública

Federal, se contiene igualmente disposiciones que configuran un régimen para los contratos que con aquellos

objetos se celebren y que no este el de los contratos de derecho común sino excepcional de derecho público o

sea el que los caracteriza como contratos administrativos.

En efecto, en los contratos civiles no seria admisible la intervención de una de las partes para exigir la

restitución de lo pagado en exceso de los precios registrados por la secretaria de comercio o del convenido con

otros adquirentes de la misma administración pública o para exigir por la propia secretaria las correcciones

necesarias respecto de la calidad pactada o el ajuste a la ley o a las normas que de ella deriven.

Se establece además que los pedidos y contratos celebrados con proveedores no registrados en el Patrón de

proveedores, que la propia ley establece, o cuyo registro no se encuentre vigente o haya sido suspendido serán

nulos de pleno derecho y no surtirán efecto legal alguno.

1.3.2. OBRA PÚBLICA

Tiene por objeto regular al gasto, la planeación, programación, presupuestación, conservación y mantenimiento,

demolición, y control de las obras públicas que realicen los diversos organismos que integran la administración

pública.

Se establece que el gasto de las obras públicas se sujetara en su caso, a los presupuestos anuales de egresos,

a la Ley de Presupuesto, Contabilidad y Gasto Público Federal y a la propia Ley de Obras Públicas.

La aplicación de la ley se encomienda a la secretaria de programación y presupuesto sin perjuicio de la

intervención que se atribuya a otras dependencias del propio ejecutivo.

Se establece que la ejecución de las obras se harán por contrato o por administración directa.

Sobre este punto debe tenerse presente el articulo 134 de la Constitución Federal segundo párrafo donde

dispone que todos los contratos que el gobierno tenga que celebrar para la ejecución de obras públicas serán

adjudicados en subastas, mediante convocatoria, y para que se presenten proposiciones en sobre cerrado que

será abierto en junta pública. Esta disposición es reproducida en sus términos textuales en el articulo tres de la

Ley, estableciéndose además que los contratos solo podrán celebrarse con las personas registradas en el

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 29

patrón contratista de obras públicas, y esto a pesar de que otro precepto de la misma ley previene que todo

interesado que satisfaga los términos de la convocatoria tendrá derecho a presentar proposiciones.

La ley declara que los contratos que se celebren con base en ella se consideraran de derecho público, siendo

los tribunales federales los competentes para resolver las controversias que ellos susciten.

Como consecuencia del carácter que se da a los contratos de obras públicas la ley establece que ellos podrán

ser modificados cuando no se impliquen alteraciones de mas de un 20% en el plazo o en el monto ni

variaciones sustanciales en el proyecto que podrán ser revisados cuando durante su vigencia por circunstancias

imprevistas y sin que haya dolo, culpa o negligencia o ineptitud de cualquiera de las partes, se origine un

aumento o reducción en un 5% o mas en los costos de los trabajos aun no ejecutados que por causa justificada

podrá suspenderse en todo o en parte la obra contratada y que podrán ser rescindidos administrativamente.

La ley establece varias excepciones al régimen general que establece cuando existan razones de seguridad

nacional, o circunstancias extraordinarias o imprevisibles o cuando el costo de la obra no justifique el

procedimiento ordinario, casos en cuales previa resolución fundada, la convocatoria se hará alas personas que

cuenten con la capacidad y recursos para la respuesta inmediata. También se exceptúa el caso de que el

contrato solo pueda celebrarse con una determinada persona por ser el titular de las patentes necesarias para

realizar la obra.

Se autoriza la ejecución de las obras por administración directa cuando ellas estén comprendidas en el

programa de inversiones autorizado por la secretaria de Programación y Presupuesto, cuando se tenga los

estudios, proyectos, programas etc., y siempre que las dependencias y entidades que las vaya ha ejecutar

posean la capacidad técnica y los elementos necesarios para el caso.

1.3.3 OTROS CONTRATOS

Miguel Montoro señala: Contrato típico es aquel que tiene una disciplina concreta y detallada en la ley,

disciplina que no es óbice para que las partes contratantes introduzcan cláusulas para siempre y cuando tales

cláusulas no modifiquen sustancialmente aquella disciplina legal.

Contrato nominado, será aquel que tenga un nombre, pudiendo tener además de tal nombre una disciplina

legal o carácter de ella.

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Contrato atípico es aquel que carece de regulación legal, o también aquel que carece de regulación especifica

en el ordenamiento jurídico. En suma este contrato seria fundado en la realidad social que se anticipa a la

realidad legal.

CONTRATOS ADMINISTRATIVOS NOMINADOS

En México la Ley vigente de Adquisiciones y Obras Públicas nombra cuatro tipos de contratos nominados,

todos ellos principales, sinalagmáticos, onerosos, conmutativos, y formales, y que son los de adquisición de

bienes muebles, de arrendamiento de bienes muebles, de servicios relativos a bienes muebles y de obra

pública.

Tales contratos son principales por subsistir por si mismos y tener fin propio, son sinalagmáticos ,porque

generan obligaciones reciprocas tanto para la administración pública como para su cocontratante, son a titulo

oneroso ya que cada una de las partes obtiene sendas prestaciones a cambio de otras que han de realizar,

consideras como equivalentes, son conmutativas, por ser ciertas, desde su celebración las prestaciones a cargo

de las partes, y son formales porque deben constar por escrito y la administración pública debe cubrir varias

formalidades para suscribirlos.

CONTRATO DE ADQUISICIÓN DE BIENES MUEBLES: O de suministro es uno de los mas usuales contratos

administrativos nominados, mediante el la administración pública se provee de los bienes muebles necesarios

para el desempeño de sus actividades.

CONTRATO DE ARRENDAMIENTO DE BIENES MUEBLES: Regulado en nuestro país por los principales

ordenamientos jurídicos relativos al de adquisición de bienes muebles, dicho contrato lo celebra la

administración publica para tener el uso temporal de ciertos equipos, al concluir el plazo forzoso puede adquirir

los bienes arrendados pagando un precio simbólico.

CONTRATO DE SERVICIOS RELATIVOS A BIENES MUEBLES: Es el que versa básicamente sobre seguros,

maquila, transportación, reconstrucción, reparación, conservación, limpieza y vigilancia de la maquinaria, el

equipo los vehículos y, en general, los bienes muebles propiedad de la administración publica, así como los

estudios técnicos relativos a la adquisición de los mismos.

CONTRATO DE OBRA PUBLICA: Es el contrato administrativo, mediante el, un sujeto a quien se denomina

contratista, se obliga a construir, reconstruir, reformar, reparar, mantener, demoler un bien inmueble, mediante

el pago de un precio al que se obliga otro sujeto que siempre será un órgano de la administración pública.

Rafael Sánchez lo define como aquel tipo de contrato administrativo por virtud del cual una de las partes

llamadas contratista o empresario se obliga a realizar, con organización y medios propios, una obra inmobiliaria

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 31

destinada a satisfacer un interés público, a cambio de un precio cierto en dinero que se compromete a pagarle

una administración pública.

Los contratos de obra pública podrán ser de dos tipos:

I.-Sobre la base de precios unitarios, en cuyo caso el importe de la remuneración o pago total que deba cubrirse

al contratista se hará por unidad de concepto de trabajo terminado.

II.- A precio alzado, en cuyo caso el importe de la remuneración o pago total fijo que deba cubrirse al contratista

para la celebración de estos contratos, tanto en sus aspectos técnicos como económicos deberá estar

desglosado por actividades principales. No podrán ser modificados en su monto o plazo, ni estarán sujetos de

costos.

Los contratos administrativos es un hecho indiscutible que el estado en el desarrollo de su actividad obtiene de

los particulares prestaciones voluntarias de bienes o servicios personales.

En los contratos administrativos el objeto es diferente al de los civiles, que en aquellos lo constituye una obra

pública o en servicio publico que es en definitiva, el interés social.

1.4. EL REGIMEN FINANCIERO DEL ESTADO

INTRODUCCION

El sostenimiento de la organización y funcionamiento del Estado implica necesariamente gastos que éste debe

atender procurándose los recursos indispensables o ingresos.

La regularización de esta materia constituye el Derecho Financiero o Derecho de las finanzas públicas como

una rama especial y autónoma del Derecho Público.

Como indudablemente la ACTIVIDAD FINANCIERA DEL ESTADO está íntimamente vinculada con el

desarrollo de las funciones públicas y como la forma que la propia actividad reviste la coloca principalmente

dentro de la competencia del Poder Administrativo, no podemos prescindir de estudiarlas, aunque sea a

grandes rasgos.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 32

ACTIVIDAD FINANCIERA DEL ESTADO

*Ingresos del Estado

*Gastos del mismo (egresos)

*La contabilidad pública (cuenta pública) y el control sobre la actividad financiera

PODER DE BOLSA. El ejecutivo no podrá recaudar ni gastar un centavo si previamente no ha sido autorizado

por el órgano legislativo.

LEY DE INGRESOS. Realiza una enumeración de las materias sobre las cuáles se puede cobrar impuestos,

pero no especifica las cuotas, los sujetos del impuesto, la manera de cobrarse, etc. sino que estos aspectos

están contenidos en las leyes específicas.

Duración: Anual. Si se omite mencionar una materia sobre ella no se podrán cobrar impuestos.

PRESUPUESTOS DE EGRESOS. Es la relación de gastos que se autorizan a los poderes legislativo, judicial

y ejecutivo, así como el cálculo de las erogaciones que se realizaron por concepto de inversiones y deuda

pública.

Duración: Anual a partir del primero de Enero.

1.4.1. LOS INGRESOS DEL ESTADO. LA LEY DE INGRESOS

FUENTES DE INGRESO

Los ingresos del Estado se originan normalmente por los IMPUESTOS que decreta, por los DERECHOS, los

PRODUCTOS Y APROVECAMIENTOS que obtiene por sus actividades y excepcionalmente por los

FINANCIAMIENTOS que contrata dentro o fuera del país.

Véanse los artículos 2 y 3 del C.F.F.

CONCEPTO CONSTITUCIONAL DEL IMPUESTO (Art. 31 fracción IV C.F.)

Son obligaciones de los mexicanos:

Contribuir por los gastos públicos, así de la Federación, como de D.F. o del Estado y Municipio en que residan,

de la manera proporcional y equitativa que disponga las leyes.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 33

ELEMENTOS DEL IMPUESTO

1.- Es una obligación de derecho público (carga)

2.- Debe ser establecido por una Ley (a. 72 h)

3.- Debe ser proporcional y equitativo

4.- Debe establecerse para cubrir gastos públicos (finalidad)

PROCEDIMIENTO DE ELABORACION DE LA LEY DE INGRESOS Y PRESUPUESTO DE EGRESOS

Las etapas son:

1.- Iniciativa: Ejecutivo Federal por conducto del titular de la S.H.C.P. (según artículo 31 fracciones II y XIV de

la L.O.A.P.F.) ante la Cámara Diputados. 15 de Noviembre o hasta el 15 de Diciembre (cuando inicie su

encargo 1 Diciembre).

2.- Aprobación Cámara de Diputados

3.- Ejecución: S.H.C.P.

4.- Recauda, concentra los ingresos en la Tesorería de la Federación. Deposita Banco de México S.A. para

abono en cuenta general de cheques.

En el caso del presupuestos de egresos: Se siguen las etapas 1, 2,3 igual que el anterior.

4.-Ejecuta, Inversión Pública.

Por lo que hace a la CUENTA PUBLICA ANUAL DEL AÑO ANTERIOR

1.- Presentada por el Ejecutivo Federal a la Cámara de Diputados, en los 10 primeros días del mes de junio.

Ampliación del plazo cuando medie solicitud justificada del Poder Ejecutivo.

2.- Revisa Cámara de Diputados por medio de la Contaduría Mayor de Hacienda, que es el órgano técnico

administrativo para realizar el examen o revisión contable, legal y económica del gasto público. La Ley

Suprema prevé que el objeto de la revisión es conocer los resultados de la gestión financiera, comprobar si se

ha ajustado a los criterios señalados por el presupuesto y comprobar el cumplimiento de los objetivos

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 34

contenidos en los programas. No deben existir discrepancias, entre las partidas de ingreso y las partidas o

cantidades gastadas, las que deben estar plenamente justificadas. En caso contrario, se determinarán las

responsabilidades de ley.

Vid. artículo 79 CONSTITUCION FEDERAL MEXICANA SECCION V FISCALIZACIÓN SUPERIOR DE LA

FEDERACIÓN.

Pero actualmente por virtud de la reforma publicada en el D.O.F. de fecha 30 de julio de 1999 se creó la

Fiscalización Superior de la Federación que es un Órgano Superior de la Federación y de la Cámara de

Diputados que tendrá autonomía técnica y de gestión en el ejercicio de sus atribuciones y para decidir sobre su

organización interna, funcionamiento y resoluciones, en los términos que disponga la ley, siendo sus

atribuciones entre otras:

I.- Fiscalizar en forma superior los ingresos y egresos ; el manejo, la custodia y la aplicación de fondos y

recursos de los poderes de la Unión y de los entes públicos federales, así como el cumplimiento de los objetivos

contenidos en los programas federales, a través de los informes que se rendirán en los términos que dispongan

la ley .

También fiscalizara los recursos federales que ejerzan las entidades federativas, los municipios y los

particulares.

MARCO CONSTITUCIONAL Y LEGAL DE LOS INGRESOS Y EGRESOS DEL ESTADO

Al respecto veásen los artículos 73 fracciones VII, VIII, artículo 74 fracciones II, IV de la C.F. y Ley General de

Deuda Pública, así como Ley de Presupuesto, Contabilidad y Gasto Público Federal.

LA INICIATIVA DE LA LEY DE INGRESOS

Para la expedición de la Ley de ingresos se requiere un estudio de las condiciones particulares económicas del

país y de las posibilidades que haya de satisfacer la carga del impuesto, haciendo una estimación probable de

su rendimiento ya que dichos ingresos deben ser bastantes para cubrir el presupuesto de egresos.

Las Cámaras no tienen la preparación técnica ni los medios adecuados para realizar todos los actos previos

para la formación del proyecto de ley de ingresos. Por esa razón la C. de 1857 otorgaba al Ejecutivo el

derecho de iniciativa de dicha ley, considerándola que el poder administrativo, si estaba dotado de todos los

medios y elementos para poder hacer los cálculos y estimaciones que forzosamente implica el proyecto de

ley. De tal modo que, para que el Congreso procediera a la discusión y aprobación de la ley de ingresos, se

requería en dicha Constitución la iniciativa del Poder Ejecutivo.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 35

Este precepto desapareció en la C. de 1917 y no quedó sino la facultad general de iniciar leyes, que se otorgan

al Ejecutivo en la frac. I del art. 71 de la C.F., pero sin que el Congreso esté obligado a esperar la iniciativa de

Ley de ingresos para proceder a decretar las contribuciones necesarias a cubrir el presupuesto.

Sin embargo, la reforma del primero de diciembre de 1977 establece claramente que el Ejecutivo Federal

hará llegar a la Cámara de Diputados la iniciativa de la Ley de Ingresos a mas tardar el día último del mes de

Noviembre, lo que indica que se reserva a dicho Poder Ejecutivo la facultad de iniciar la Ley de ingresos.

Véase la Ley de Ingresos de la Federación para el ejercicio fiscal 2003

Capítulo I

De los Ingresos y el Endeudamiento Público

En el ejercicio fiscal de 2003, la Federación percibirá los ingresos provenientes de los conceptos y en las

cantidades estimadas que a continuación se enumeran:

Concepto millones de pesos.

A. INGRESOS DEL GOBIERNO FEDERAL 1, 039,751.7

I. Impuestos: 798,051.8

1. Impuesto sobre la renta. 349,569.0

2. Impuesto al activo. 11,500.1

3. Impuesto al valor agregado. 226,593.3

4. Impuesto especial sobre producción y servicios: 157,178.6

A. Gasolina, diesel, gas natural y gas licuado de petróleo, para combustión automotriz. 129,273.7

B. Bebidas alcohólicas. 3,098.7

C. Cervezas y bebidas refrescantes. 11,590.9

D. Tabacos labrados. 11,249.3

E. Telecomunicaciones. 1,387.0

F. Aguas, refrescos y sus concentrados. 579.0

5. Impuesto sobre tenencia o uso de vehículos. 12,707.8

6. Impuesto sobre automóviles nuevos. 5,030.8

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 36

1.4.2. EGRESOS DEL ESTADO. LA LEY DEL PRESUPUESTO

VEASE LA LEY DE EGRESOS DE LA FEDERACIÓN PARA EL EJERCICIO FISCAL 2003,

ASIGNACIONES DEL PRESUPUESTO DE EGRESOS DE LA FEDERACIÓN

El ejercicio, control y la evaluación del gasto público federal para el año 2003, se realizará conforme a las

disposiciones de este Decreto y las demás aplicables en la materia.

En la ejecución del gasto público federal, las dependencias y entidades deberán realizar sus actividades con

sujeción a los objetivos, estrategias y prioridades establecidos en el Plan Nacional de Desarrollo, así como a los

objetivos y metas de los programas aprobados en este Presupuesto.

Los titulares de las dependencias y de sus órganos administrativos desconcentrados, los miembros de los

órganos de gobierno y los directores generales o sus equivalentes de las entidades, así como los servidores

públicos de las dependencias y entidades facultados para ejercer recursos públicos, en el ámbito de sus

respectivas competencias, serán responsables de que se cumplan las disposiciones para el ejercicio del gasto

público federal emitidas y aquéllas que se emitan en el presente ejercicio fiscal por la Secretaría en los términos

de los artículos 5o. y 38 de la Ley de Presupuesto, Contabilidad y Gasto Público Federal.

Los Poderes Legislativo y Judicial, así como los entes públicos federales, se sujetarán a las disposiciones de

este Decreto en lo que no se contraponga a los ordenamientos legales que los rigen.

El incumplimiento a lo dispuesto en este artículo será sancionado en los términos de la Ley Federal de

Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos y las demás disposiciones aplicables.

Para efectos del presente Decreto se entenderá por:

Entes públicos federales: a las personas de derecho público de carácter federal con autonomía derivada de la

Constitución;

Dependencias: a las Secretarías de Estado incluyendo a sus respectivos órganos administrativos

desconcentrados, y a la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal.

La Presidencia de la República se sujetará a las mismas disposiciones que rigen a las dependencias.

Asimismo, la Procuraduría General de la República y los tribunales administrativos se sujetarán a las

disposiciones aplicables a las dependencias, en lo que no se contraponga a sus leyes específicas.

Las atribuciones en materia presupuestaria de los servidores públicos de las Secretarías de Estado, se

entenderán conferidas a los servidores públicos equivalentes de la Presidencia de la República, la Procuraduría

General de la República y los tribunales administrativos;

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 37

Entidades: a los organismos descentralizados; a las empresas de participación estatal mayoritaria, incluyendo a

las sociedades nacionales de crédito, instituciones nacionales de seguros, instituciones nacionales de fianzas y

las organizaciones auxiliares nacionales de crédito; así como a los fideicomisos públicos en los que el

fideicomitente sea la Secretaría o alguna entidad de las señaladas en esta fracción, que de conformidad con las

disposiciones aplicables sean considerados entidades paraestatales.

Se entenderán como comprendidas en esta fracción las entidades a que se refiere el Anexo 1.D. de este

Decreto, así como aquéllas incluidas en los Tomos de este Presupuesto;

Entidades apoyadas presupuestariamente: a las entidades a que se refiere la fracción III de este artículo, que

reciben transferencias y subsidios con cargo al Presupuesto;

Entidades no apoyadas presupuestariamente: a las entidades a que se refiere la fracción III de este artículo,

que no reciben transferencias y subsidios con cargo al Presupuesto;

Secretaría: a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público;

Contraloría: a la Secretaría de Contraloría y Desarrollo Administrativo;

Cámara: a la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión;

Entidades federativas: a los estados de la Federación y al Distrito Federal;

Presupuesto: al contenido en el Decreto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio fiscal

2003, incluyendo sus 14 anexos; así como los Tomos II.A. Ramos Autónomos; II.B. Ramos Administrativos; II.C.

Ramos Generales; III. Analíticos; IV. Entidades de Control Presupuestario Directo; V. Entidades de Control

Presupuestario Indirecto, y VI. Programas y Proyectos de Inversión.

LA LEY DE PRESUPUESTO

Para tal efecto la ley determina que el Presupuesto de Egresos de la Federación es el que aprueba la Cámara

de Diputados a iniciativa del Ejecutivo, para expensar durante el periodo de un año a partir del primero de enero

las actividades, las obras y los servicios públicos que respectivamente correspondan al Poder Legislativo, al

Poder Judicial, a la Presidencia de la República, a las Secretarías de Estado, a los Departamentos

Administrativos, a la P.G.R., a los organismos descentralizados, Empresas de Participación Estatal mayoritaria,

y fideicomisos que se determine incluir en dichos presupuesto (art. 15 L.P.C. y G.P.F.).

TRANSITORIOS

ASIGNACIONES PRESUPUESTALES DE LA FEDERACION

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 38

El presente Decreto entrará en vigor el primero de enero del año 2003.

Los recursos del Programa de Separación Voluntaria, a que se refiere el artículo 7, fracción III, de este Decreto,

deberán depositarse en una cuenta en la Tesorería de la Federación, la cual se integrará con:

I. Los recursos previstos para tal efecto en el Anexo 6 de este Decreto;

II. Los recursos que sean restituidos al Programa, conforme a lo dispuesto en el artículo 7, fracción III, de este

Decreto, y

III. Los rendimientos que se obtengan por la inversión de los recursos.

Los recursos a que se refiere el artículo 9, fracción I, inciso c) de este Decreto, serán transferidos a los órganos

técnicos de fiscalización de las legislaturas locales, siempre y cuando la Auditoria Superior de la Federación

haya celebrado con éstos los convenios de coordinación para la fiscalización del ejercicio de recursos públicos

federales por parte de las entidades federativas y, en su caso, sus municipios, de conformidad con la Ley de

Fiscalización Superior de la Federación.

Las erogaciones de este Presupuesto incluyen la cantidad de $215, 819,142.00, para el Instituto Federal de

Acceso a la Información Pública, observando las siguientes disposiciones:

I. Los recursos del Instituto serán traspasados en su totalidad al mismo, una vez que éste entre en operación,

conforme a lo previsto en los artículos 33 y undécimo transitorio de la Ley Federal de Transparencia y Acceso a

la Información Pública Gubernamental. El presupuesto del Instituto incluye la totalidad de los recursos para la

creación de las plazas necesarias para su adecuado funcionamiento.

Para tal efecto, el Ejecutivo Federal deberá crear el órgano a que se refiere el citado artículo 33,

preferentemente adoptando la figura de un organismo descentralizado en los términos de las leyes Orgánica de

la Administración Pública Federal, y Federal de las Entidades Paraestatales, garantizando la autonomía

operativa, presupuestaria y de decisión del Instituto;

II. Para efectos de este Decreto el Instituto recibirá un tratamiento presupuestario equivalente al de una entidad

no apoyada presupuestariamente, y

III. Los recursos autorizados al Instituto en este Presupuesto no podrán ser traspasados a las dependencias o a

otras entidades.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 39

Los recursos previstos en el Ramo Administrativo 38 Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, a que se

refiere el Anexo 1.B. de este Decreto, que correspondan a las entidades que, en los términos de la Ley

Orgánica del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, formen parte del Sistema de Centros Públicos

CONACYT, podrán ser ministrados a dichas entidades una vez que, en los términos del artículo Tercero

transitorio de la ley citada, el Decreto de sectorización respectivo sea publicado en el Diario Oficial de la

Federación.

El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología deberá, con la autorización de la Secretaría, a más tardar el último

día hábil de junio, traspasar del Capítulo 4000 al Capítulo 1000 del Clasificador por Objeto del Gasto para la

Administración Pública Federal, los recursos previstos en el Ramo Administrativo 38 correspondientes a las

erogaciones de servicios personales de dicho Consejo.

ANEXO 1. GASTO NETO TOTAL

A: RAMOS AUTÓNOMOS $34,978,964,477

Gasto Programable

01 Poder Legislativo $5,575,986,417

Cámara de

Senadores

$1,712,431,830

Cámara de

Diputados

$3,275,553,340

Auditoria Superior

de la Federación

$588,001,247

03 Poder Judicial $17,732,064,509

Suprema Corte de

Justicia de la

Nación

$1,869,232,025

Consejo de la

Judicatura Federal

$14,858,663,531

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 40

Tribunal Electoral

del Poder Judicial

de la Federación

$1,004,168,953

22 Instituto Federal

Electoral

$11,095,945,771

35 Comisión Nacional

de los Derechos

Humanos

$574,967,780

B: RAMOS ADMINISTRATIVOS $346,200,730,021

Gasto Programable

02 Presidencia de la

República

$1,661,780,000

04 Gobernación $3,990,376,868

05 Relaciones

Exteriores

$3,444,219,319

06 Hacienda y Crédito

Público

$21,785,196,894

07 Defensa Nacional $22,831,496,500

08 Agricultura,

Ganadería,

Desarrollo Rural,

Pesca y

Alimentación

$41,782,679,672

09 Comunicaciones y $23,124,305,335

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Transportes

10 Economía $5,403,508,549

11 Educación Pública $106,355,088,005

12 Salud $20,866,971,465

13 Marina $8,899,171,701

14 Trabajo y Previsión

Social

$3,150,708,379

15 Reforma Agraria $2,758,759,556

16 Medio Ambiente y

Recursos Naturales

$17,404,217,059

17 Procuraduría

General de la

República

$7,154,274,950

18 Energía $17,569,043,293

20 Desarrollo Social $18,977,482,033

21 Turismo $1,458,896,071

27 Contraloría y

Desarrollo

Administrativo

$1,164,407,270

31 Tribunales Agrarios $533,610,000

32 Tribunal Federal de

Justicia Fiscal y

$814,600,000

Derecho Administrativo II Antología

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Administrativa

36 Seguridad Pública $7,067,231,446

37 Consejería Jurídica

del Ejecutivo

Federal

$66,862,020

38 Consejo Nacional

de Ciencia y

Tecnología

$7,935,843,636

C: RAMOS GENERALES $785,385,196,595

Gasto Programable

. 19 Aportaciones a

Seguridad Social

$114,365,390,700

23 Provisiones

Saláriales y

Económicas

$3,297,177,387

25 Previsiones y

Aportaciones para

los Sistemas de

Educación Básica,

Normal,

Tecnológica y de

Adultos

$23,915,742,205

33 Aportaciones

Federales para

Entidades

Federativas y

Municipios

$234,618,811,609

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 43

39 Programa de

Apoyos para el

Fortalecimiento de

las Entidades

Federativas

$17,000,000,000

Gasto No

Programable

24 Deuda Pública $128,235,408,794

28 Participaciones a

Entidades

Federativas y

Municipios

$226,676,800,000

29 Erogaciones para

las Operaciones y

Programas de

Saneamiento

Financiero

$0

30 Adeudos de

ejercicios Fiscales

Anteriores

$7,037,200,000

34 Erogaciones para

los Programas de

Apoyo a

Ahorradores y

Deudores de la

Banca

$30,238,665,900

D: ENTIDADES SUJETAS A CONTROL

PRESUPUESTARIO DIRECTO

$492,603,503,382

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 44

Gasto Programable

00637 Instituto de

Seguridad y

Servicios Sociales

de los Trabajadores

del Estado

$54,580,194,777

00641 Instituto Mexicano

del Seguro Social

$168,785,785,251

06750 Lotería Nacional

para la Asistencia

Pública

$1,089,264,000

09120 Caminos y Puentes

Federales de

Ingresos y Servicios

Conexos

$2,533,759,648

18164 Comisión Federal

de Electricidad

$106,825,649,364

18500 Luz y Fuerza del

Centro

$20,582,310,435

Petróleos Mexicanos

Consolidado

$111,798,100,000

18572 Petróleos

Mexicanos

$13,464,252,718

18575 PEMEX Exploración

y Producción

$45,555,064,251

18576 PEMEX Refinación $34,860,607,991

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 45

18577 PEMEX Gas y

Petroquímica

Básica

$9,818,263,013

PEMEX

Petroquímica

Consolidado, que

se distribuye para

erogaciones de:

18578 Petroquímica

Corporativo

$2,249,987,911

18579 Petroquímica

Camargo, S.A. de

C.V.

$159,940,951

18580 Petroquímica

Cangrejera, S.A. de

C.V.

$2,096,308,551

18581 Petroquímica

Cosoleacaque, S.A.

de C.V.

$1,057,868,485

18582 Petroquímica Escolín,

S.A. de C.V.

$671,973,437

18584 Petroquímica Tula,

S.A. de C.V.

$262,786,890

18585 Petroquímica

Pajaritos, S.A. de

C.V.

$1,601,045,802

Gasto No

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 46

Programable

Costo Financiero,

que se distribuye

para erogaciones

de:

18164 Comisión Federal de Electricidad $6,219,777,654

Petróleos Mexicanos Consolidado $20,188,662,253

Resta por concepto de

subsidios, transferencias y

aportaciones a seguridad

social incluidas en el gasto

de la Administración Pública

Centralizada y que cubren

parcialmente los

presupuestos de las

entidades a que se refiere el

Anexo 1.D.

$134,322,694,475

GASTO NETO TOTAL $1,524,845,700,000

ANEXO 2. EROGACIONES PARA ATENDER A LA POBLACIÓN INDÍGENA

Erogaciones de las dependencias y entidades para atender a la población

indígena

$17,447,777,724

ANEXO 3. PROGRAMA DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA

Erogaciones de las dependencias y entidades destinadas al Programa de

Ciencia

y Tecnología

$22,308,411,002

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 47

ANEXO 4. PROYECTOS EN EL PROGRAMA PARA EL DESARROLLO DE LA REGIÓN SUR-SURESTE

ANEXO 8A. RAMO 39 PROGRAMA DE APOYOS PARA EL FORTALECIMIENTO DE LAS ENTIDADES

FEDERATIVAS

Entidad Federativa Cantidad

Totales 17,000,000,000

Aguascalientes 163,828,084.0

Baja California 752,833,753.0

Baja California Sur 109,511,516.0

Campeche 196,942,516.0

Chiapas 682,909,616.0

Chihuahua 716,036,992.0

Coahuila 404,027,361.0

Colima 133,775,616.0

Distrito Federal 1,400,910,367.0

Durango 314,322,416.0

Guanajuato 635,996,416.0

Guerrero 454,093,016.0

Hidalgo 347,230,100.0

Jalisco 1,195,337,346.0

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México 2,059,969,508.0

Michoacán 579,315,539.0

Morelos 191,322,184.0

Nayarit 202,976,208.0

Nuevo León 777,989,308.0

Oaxaca 400,306,323.0

Puebla 750,934,461.0

Querétaro 263,636,523.0

Quintana Roo 158,763,261.0

. San Luis Potosí 334,787,931.0

Sinaloa 492,078,339.0

Sonora 539,107,923.0

Tabasco 413,446,147.0

Tamaulipas 509,572,384.0

Tlaxcala 154,861,369.0

Veracruz 1,064,791,731.0

Yucatán 352,217,377.0

Zacatecas 246,168,369.0

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 49

2. CONCESIÓN

2.1. CONCEPTO. CLASES DE CONCESIONES

VARIABILIDAD SEGÚN LA POSTURA POLÍTICA DEL ESTADO

El concepto de concesión ha tenido diversas variantes, tanto en la Doctrina, como en la práctica administrativa

de los Estados. Su naturaleza jurídica, según Acosta Romero varía de acuerdo con las tendencias que puedan

apreciarse en la Actividad del Estado.

En un Estado Liberal, la concesión aparecerá como un contrato y otorgará al particular determinados privilegios.

En un Estado Intervencionista, la concesión no será un contrato, sino un acto administrativo y paulatinamente

se restringirá al régimen de concesión para que el Estado se haga cargo de actividades que en otros Estados

se reconocían como parte de la esfera de actividad de los particulares.

EVOLUCIÓN HISTÓRICA

Los orígenes de la concesión son remotos, se hablaba antiguamente de privilegios que otorgaban los

soberanos para premiar a sus servidores, por servicios recibidos, generalmente consistían en otorgarles ciertas

partes del territorio (concesiones territoriales).

Durante el siglo pasado, la mayor parte de las concesiones se otorgaban a través de contratos, sin embargo la

evolución de los principios que regulan estos conceptos a través del tiempo, han ido cambiando los mismos, al

grado de que, es posible afirmar actualmente que en los E.U.M., la concesión ya no tiene ningún elemento

contractual, sino que es un acto administrativo discrecional por parte de la autoridad administrativa y en ciertos

casos, no solo se ha eliminado ya el concepto de contrato en esta materia, sino que el Estado se ha reservado

para sí la realización de determinadas actividades que se consideran de interés público y que antes eran

realizadas por los particulares a través de concesiones.

En México no habrá concesiones a particulares en las siguientes materias: (Art. 25 p.4 y 28 p. 4 C.F. Emisión

de Billetes

Correos

Telégrafos

Radio telegrafía

Petróleo

Hidrocarburos

Petroquímica básica

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Minerales radioactivos

Energía Nuclear

Electricidad

BASES CONSTITUCIONALES PARA LAS CONCESIONES

1) Art. 27 párrafo 3, 6, 7

2) Art. 28 párrafo 4 y 10

EL SISTEMA LEGAL MEXICANO RESPECTO DE LAS CONCESIONES

En México, existen numerosas leyes que prevén a nivel federal, el otorgamiento de concesiones tanto de

servicio público, como de explotación de bienes del Estado.

Sin pretender hacer una enumeración exhaustiva y considerando desde el punto de vista teórico, que existen

numerosas leyes que a lo que la teoría determina concesión, las leyes denominan en sus textos con los más

variados nombres, tales como permisos, licencias o autorizaciones, sin que exista sistematización ni técnica al

respecto, lo que evidencia que el legislador en uso de su competencia no toma en cuenta ni los antecedentes ni

la doctrina sobre este particular, pero que desde el punto de vista teórico, podemos encuadrarlos en el concepto

de concesión. Esas leyes son las siguientes. Ley Federal de Pesca, Ley Federal de Mar, Ley Reglamentaria del

Servicio Público de Banca y Crédito.

En materia educativa, la Ley Federal de Educación llama, autorizaciones o incorporaciones a los actos del

Estado que permiten prestar el servicio público educativo, y que debería ser concesión.

CONCEPTO DE CONCESIÓN

El término concesión puede significar varios contenidos:

1) Es el acto administrativo discrecional por medio del cual la Autoridad Administrativa, faculta a un particular:

- Para utilizar bienes del Estado dentro de los límites y condiciones que señale la ley.

- Para establecer y explotar un servicio público, también dentro de los límites y condiciones que señale la ley.

2) El procedimiento a través del cual se otorga la concesión, o a través del que se regula la utilización de la

misma, aún frente a los usuarios.

3) El documento formal, que contiene el acto administrativo en el que se otorga la con cesión.

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I. CLASES DE CONCESIONES.

Existen dos tipos de concesión:

1.- Para uso, explotación o aprovechamiento de bienes del Estado y

2.- Para explotación de un servicio público

II. ELEMENTOS SUBJETIVOS DE LA CONCESION.

Son:

A) La Autoridad Concedente (quien otorga la concesión, sea autoridad administrativa Federal, Local o

Municipal).

B) El Concesionario (Persona física o jurídica a quien se otorga y que es el titular de la concesión).

C) Los Usuarios (beneficiarios por la prestación del servicio público, motivo de la concesión).

En la utilización de bienes del Estado habrá relaciones entre el concesionario y los particulares pero no bajo el

concepto de usuarios. El elemento usuario solo es propio para la concesiones sobre explotación de servicios

públicos.

2.2 NATURALEZA JURÍDICA

Es nuestra Constitución Mexicana y sus leyes reglamentarias respecto a la Concesión dependiendo que tipo de

esta sea.

2.2.1. TESIS CONTRACTUALISTA

Hay cierta imprecisión para fijar su naturaleza jurídica hay quienes afirman: Que se trata de contratos. La

doctrina administrativa (Serra Rojas y Fraga) precisa que se trata de un acto mixto: parte de contrato, parte

de acto administrativo y parte de acto reglamentario.

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2.2.2. TESIS DE DERECHO PÚBLICO

Al respecto Acosta Romero manifiesta que el régimen jurídico que regula la concesión y las relaciones entre la

administración y el concesionario, es de Derecho Público y está constituido por el conjunto de normas

establecidas en las leyes, los reglamentos, decretos, circulares y acuerdos que fijan precisamente el régimen al

que están sometidos la concesión, el concesionario y su actividad.

PRINCIPIOS QUE RIGEN LA CONCESIÓN

Se refiere a:

*Capacidad jurídica técnica y financiera.

*Plazo

*Derechos y Obligaciones

*Rescate

*Reversión

*Procedimiento

*Extinción

CAPACIDAD DEL CONCESIONARIO

Hay Estados que no señalan ningún límite de capacidad a los concesionarios o establecen un mínimo de

requisitos, por ejemplo: ser nacional etc.

En otros regímenes se señalan una serie de limitaciones a las actividades sujetas a concesión, por ejemplo,

en México, no puede otorgarse concesiones sobre la explotación de hidrocarburos y petróleo, actividad que en

otros países si pueden desarrollar los particulares. Otra limitación es la que establece el Art. 27 fracc. I de la

C.F. en cuánto a que para obtener concesiones de EXPLOTACION DE MINAS O AGUAS, solo se otorgarán a:

*Los mexicanos por nacimiento o por naturalización.

*Y a Sociedades Mexicanas

*En cuanto a las Extranjeros solo cuando den cumplimiento a la Cláusula Calvo.

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CAPACIDAD TECNICA. ASPECTOS PERSONAL - MATERIAL

PERSONAL. El concesionario debe reunir ciertos requisitos mínimos de capacidad técnica, ya sea en lo

particular o mediante el personal que contrate para desarrollar la actividad concedida. Por ejemplo, la concesión

de servicio público transporte aéreo, el concesionario debe contar con pilotos, mecánicos y demás auxiliares

que tengan los conocimientos adecuados en esa materia. En la concesión minera, se debe contar con técnicos

en explotación de yacimientos.

MATERIAL. Los medios necesarios para prestar la concesión consiste en el conjunto de elementos materiales,

especialmente de equipo, necesarios para realizar esa actividad. Por ejemplo, concesión de transporte aéreo

debe tener el equipo de vuelo adecuado. En la concesión minera, las instalaciones de extracción y beneficio del

mineral.

CAPACIDAD FINANCIERA

Consiste en que el concesionario debe tener el capital necesario que le permita contar al personal que va a

prestar el servicio, el que va a dedicar a la explotación de los bienes del Estado y adquirir el equipo y los bienes

que también se destinarán a ese efecto.

PLAZO

Generalmente las concesiones se otorgan por un plazo determinado, es decir, por un lapso más o menos largo

durante el cual, el concesionario disfruta de los derechos privados de este acto. No todas las concesiones

(materia) se otorgan a plazos iguales.

Hay otras que no tienen plazo, por ejemplo: concesiones bancarias.

DERECHOS

Nacen y se generan con el acto de la concesión desde este punto de vista, la concesión es constitutiva y esa

característica la distingue del régimen de permisos, licencias y autorizaciones y en el que en particular tiene

derechos previos que han sido sometidos a limitaciones o modalidades por razones de salubridad, seguridad y

orden público y que sujetan al particular al cumplimiento de una serie de requisitos que una vez satisfechos le

permitan realizar esa actividad.

Una vez otorgada la concesión, ésta genera una serie de derechos y obligaciones al particular. En la de

Servicio Público, el de establecerlo y explotarlo. En la de bienes del Estado, el de utilizarlos.

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Los derechos privados de la concesión. Generalmente son PERSONALISIMOS y el concesionario debe, si no

ejecutarlos todos por el mismo, ya que sería imposible, si vigilar personalmente su ejercicio.

Las concesiones amplían el ámbito patrimonial del concesionario y le permiten obtener una utilidad derivada de

su actividad personal y un rendimiento a sus inversiones, que es el incentivo que tiene para dedicarse a esa

actividad.

Anteriormente se decía que el plazo y los derechos formaban parte del elemento contractual, sin embargo, ya

no se celebran contratos sobre este aspecto, sino que el concesionario calcula previamente cuál podría ser el

rendimiento que obtendría de una concesión y si el cálculo le es favorable, la solicitará, pero no entra en un

convenio con la administración, sobre este aspecto, tampoco el plazo se discute, sino que ya está previamente

fijado por las disposiciones legales que rigen las distintas materias.

Se reconoce que el concesionario es propietario de los bienes afectados a la explotación de la concesión,

aunque sujetos a ciertas modalidades ya que no puede gravarlos, ni cederlos, sin permiso de la autoridad y

estarán sujetos a la reversión.

Son el conjunto de elementos materiales que se destinan a la explotación de la concesión, por ejemplo:

equipo de transporte, plantas de beneficio de mineral etc.

La tarifa constituye el precio que paga el usuario por la prestación del servicio público. Son fijadas

unilateralmente por el Estado ya sea a través de leyes, de reglamentos, decretos o acuerdos, generalmente se

escucha a los concesionarios en la fijación de las tarifas. Se calculan sobre bases técnicas, que permitan al

concesionario no sólo obtener utilidades, sino realizar nuevas inversiones en equipo moderno y adecuado para

prestar el servicio.

La doctrina considera que cuando el Estado agrava las condiciones de prestación del servicio debe indemnizar

el concesionario y otorgarle subsidios fiscales, así como permitir la elevación de las tarifas.

OBLIGACIONES

Son:

A) Ejercitar personalmente los derechos derivados de la concesión.

B) No transferir, enajenar o gravar los derechos derivados de la concesión, sin consentimiento de la autoridad

concedente.

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C) Contar con los elementos personales, materiales y financieros para prestar el servicio público, o efectuar la

explotación de los bienes en condiciones óptimas.

D) No ceder, traspasar o gravar, el equipo o los bienes destinados a la concesión, sin consentimiento de la

autoridad concedente.

E) Realizar las obras necesarias para prestar el servicio público o explotar los bienes.

F) Prestar el servicio público o explotar los bienes, en los términos y condiciones que señalan las

disposiciones legales.

RESCATE

(Es un principio aplicable a las concesiones de explotación de bienes del Estado).

Es un acto administrativo mediante el cual la autoridad administrativa, recupera los bienes que había

concedido previamente por causas de utilidad pública. La doctrina, generalmente se orienta a precisar que en

este caso, el Estado debe indemnizar al concesionario por las inversiones que hubiere efectuado y por la

privación que se le hace del plazo de explotación. Miguel Acosta señala que este rescate es un caso típico de

revocación administrativa.

Se dice que es Rescate, porque los bienes nunca salieron del dominio del Estado, sólo se permitió el uso

temporal de ellos al concesionario.

DERECHO DE REVERSIÓN

Consiste en que una vez transcurrido el plazo de la concesión, los bienes a efecto ya sea al servicio público o a

la explotación de bienes del Estado, pasan a ser propiedad de éste sin necesidad de contraprestación alguna.

PROCEDIMIENTO PARA OTORGAR LA CONCESIÓN

-Inicia con una solicitud del particular, llena todos los requisitos exigidos por las disposiciones legales.

-Generalmente se publica un extracto de la misma en el D.O.F.

-Procedimiento de oposición a su otorgamiento, anteriores concesionarios o personas que tengan interés.

A) Si la autoridad administrativa declara procedente la oposición NO SE OTORGA LA CONCESION.

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B) Si se rechaza, se continúa el procedimiento para el efecto de que si se cumplen los demás requisitos y lo

estima conveniente la autoridad, se otorgue la concesión.

C) La última fase del procedimiento para otorgar la concesión es que la autoridad administrativa aprecie si el

solicitante cumplió con todos los requisitos, si tiene capacidad general, técnica y financiera, haya otorgado las

garantías previstas , y si lo estima conveniente al interés general, otorgará la concesión mediante una

DECISIÓN ADMINISTRATIVA que se expresa a través de un ACUERDO ESCRITO, el que generalmente se

publica en el D.O.F. (Hay casos en que no se publica sino simplemente se notifica personalmente, como en

las concesiones de educación, caza y pesca).

EL TITULO de concesión, contiene el acuerdo firmado por el titular de la dependencia que la expide y otros

requisitos exigidos por la ley según la materia.

EXTINCION DE LA CONCESION

Los modos de extinción de la concesión son varios, el más normal es el cumplimiento del plazo. Luego

tenemos, la falta de objeto o materia de la concesión, la revocación, la caducidad, la rescisión, el rescate,

quiebra del concesionario y renuncia.

Cumplimiento del plazo. Al terminarse el periodo previsto en la concesión, termina ésta, salvo en aquellos

casos en que puede prorrogarse mediante un nuevo acto administrativo.

Falta de objeto o materia de la concesión. Si se hace imposible la prestación del servicio público, o se agotan

los minerales en la concesión minera, la consecuencia será que la concesión se extinga por falta de objeto o

materia.

Rescisión. Es la facultad de una de las partes en un contrato o convenio para darlo por terminado si la otra

parte incurre en el incumplimiento de sus obligaciones.

Revocación. La práctica administrativa en México se ha orientado a considerar como causa de revocación de

las concesiones, la falta de cumplimiento del concesionario a las obligaciones que le impone el régimen jurídico

de la misma.

Un acto administrativo, como la concesión no puede ser rescindido, sino más bien revocado por la autoridad

que lo otorgó, en los supuestos de incumplimiento que prevén la leyes, los reglamentos y el propio acto de la

concesión.

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Caducidad. Opera cuándo el concesionario está obligado a cumplir ciertos requisitos establecidos en la ley,

reglamento o en el acto de la concesión, dentro de determinado plazo, y no cumple con ellos, por ejemplo:

cuando no adquiere el equipo necesario para prestar el servicio público, o no inicia la prestación de éste en el

plazo previsto, o cuando no realiza las inversiones a que está obligado en cierto tiempo, opera la caducidad.

Renuncia. Cuando el concesionario haga renuncia de los derechos que tenga a su favor. Miguel Acosta

considera que NO puede haber una renuncia lisa y llana, sino que dependerá de la importancia del servicio

público o de las necesidades que el Estado, tenga de explotar determinados bienes para que se pueda

aceptar la renuncia de la concesión. En algunas ocasiones puede tratarse de un SERVICIO PUBLICO

ABSOLETO, o que la explotación de bien no sea económica, en cuyo caso parece ser que no habría interés

público en que continuará forzosamente la concesión. Habrá otros supuestos en que la necesidad o el interés

público imponga la conveniencia de que la Administración Pública no acepte la renuncia mientras tanto no se

asegure, o bien la transmisión de la empresa (Económicamente considerada), a terceros que prestan el servicio

o exploten los bienes del Estado y aseguren la continuidad normal de esas actividades, o bien, que la propia

administración se haga cargo de ellas.

Quiebra del Concesionario. Se estima que cuándo se trate de servicios públicos de gran trascendencia para la

colectividad, las autoridades deben asegurar la continuidad de los mismos. Cuando se presentan las causas de

incumplimiento que dan origen a la revocación o a las causas que provocan la caducidad, se sigue por lo

regular un PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO en el que la autoridad determina la existencia de esas

causas, notifica al concesionario para que manifieste lo que a derecho convenga, o exhiba pruebas que

acreditan que no incurrió en falta, y posteriormente se dicta un acto administrativo, declarando la revocación o

la caducidad de la concesión, este acto en la mayoría de los procedimientos, también se publica en el D.O.F.

De acuerdo con la práctica administrativa de México, cuándo se trata de caducidad, al procedimiento le llaman

de incurso en caducidad.

El efecto de la revocación por incumplimiento, o caducidad, además de extinguir la concesión, es de fincar,

responsabilidades administrativas, a cargo del concesionario, que generalmente, se hacen efectivas,

ejecutando las garantías que éste hubiere otorgado.

PRINCIPIOS QUE RIGEN LAS CONCESIONES SOBRE BIENES DE DOMINIO PUBLICO DEL ESTADO

CONFORME A LA L.G.B.N. (artículos 20-27)

*Las concesiones sobre bienes de dominio público no crean derechos reales, solo otorgan el derecho a realizar

los usos, aprovechamientos o explotaciones, de acuerdo con las reglas y condiciones que establezcan las leyes

y el acto o título de la concesión.

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Universidad de la Sierra A. C. 58

*Podrán otorgarse hasta por un plazo de 50 años, el cuál podrá ser prorrogado hasta por plazos equivalentes a

los señalados originalmente, atendiendo tanto para el otorgamiento como para la prórroga de la concesión, a lo

siguiente.

El monto de la inversión a aplicar.

El plazo de amortización de la inversión realizada.

El beneficio social y económico que signifique para la región o localidad.

La necesidad de la actividad o servicio que se preste.

El cumplimiento de las obligaciones a su cargo.

La reinversión que se haga para el mejoramiento de las instalaciones o del servicio prestado.

El titular de una concesión gozará de un plazo de 5 años, previo al vencimiento de la concesión, para solicitar la

prórroga correspondiente, respecto de la cual tendrá preferencia cualquier solicitante.

Al término del plazo de la concesión, o de la última prórroga en su caso, las obras e instalaciones adheridas de

manera permanente al inmueble concesionado REVERTIRAN en favor de la Nación.

Las concesiones sobre inmuebles de Dominio Público se EXTINGUEN por las siguientes causas:

*Vencimiento del término por el que se hayan otorgado.

*Renuncia del concesionario.

*Desaparición de su finalidad o del bien objeto de la concesión.

*Nulidad, revocación y caducidad.

*Declaración de rescate.

*Cualquiera otra prevista en las leyes, reglamentos, disposiciones administrativas o en la concesión misma.

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Universidad de la Sierra A. C. 59

Las concesiones sobre inmuebles de dominio público podrán ser revocados por cualquiera de estas causas:

*Dejar de cumplir con el fin para el que fue otorgada la concesión, o dar al bien objeto de la misma un uso

distinto al autorizado; o no usar el bien de acuerdo con lo dispuesto por esta ley los reglamentos y el propio

titulo de concesión.

*Dejar de cumplir con las condiciones a que se sujete el otorgamiento de la concesión o infringir lo dispuesto

en esta ley y sus reglamentos.

*Dejar de pagar en forma oportuna los productos que se hayan fijado en la concesión.

*Realizar obras no autorizadas.

*Dañar ecosistemas como consecuencia del uso, aprovechamiento o explotación.

*Las demás previstas en esta ley, en sus reglamentos o en las propias concesiones.

La nulidad, la revocación y la caducidad de las concesiones sobre los bienes de dominio público, cuando

procedan conforme a la ley, se dictarán por la autoridad administrativa a que por ley corresponda el ramo, sin

perjuicio de lo dispuesto por el artículo 18 de la L.G.B.N., previa audiencia que se conceda a los interesados

para que rindan pruebas y aleguen lo que a su derecho convenga.

Cuando la nulidad se funde en error, y no en la violación de la ley o en la falta de los supuestos para el

otorgamiento de la concesión, ésta podrá ser confirmada por la autoridad administrativa tan pronto como cese

tal circunstancia. En los casos de nulidad de la concesión sobre bienes de dominio público, la autoridad queda

facultada para limitar los efectos de la resolución, cuando, a su juicio, el concesionario haya procedido de

buena fe.

En el caso de que la autoridad declare la nulidad, revocación o caducidad de una concesión por causa

imputable al concesionario, los bienes materia de la concesión sus mejoras y acciones revertirán de plano

derecho al control y administración del gobierno federal, sin pago de indemnización alguna al concesionario.

*LA INTRANSFERENCIA DE LOS DERECHOS DE LAS CONCESIONES

Las concesiones sobre inmuebles de dominio público no podrá ser objeto, en todo o en parte, de

subconcesión, arrendamiento, comodato, gravamen o cualquier acto o contrato por virtud del cual una persona

distinta al concesionario goce d los derechos derivados de tales concesiones y en su caso de las instalaciones

o construcciones autorizadas en el titulo respectivo.

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Universidad de la Sierra A. C. 60

Los derechos y obligaciones derivados de las concesiones sobre inmuebles de dominio público, sólo podrá

cederse, con la autorización previa y expresa de la autoridad que las hubiere otorgado, exigiendo al cesionario

que reúne los mismos requisitos y condiciones que se tuvieron en cuenta para el otorgamiento de la concesión

respectiva.

Cualquier operación que se realice en contra del tenor de este artículo será nula de pleno derecho y el

concesionario perderá a favor de la Nación los derechos que deriven de la concesión y los bienes afectos a

ella.

Sin perjuicio de las sanciones a que se hagan acreedores los concesionarios por permitir que un tercero

aproveche o explote bienes de dominio público, las cantidades que éstos obtengan, se considerarán créditos

fiscales.

*RESCATE

Las concesiones sobre bienes de dominio público podrán rescatarse por causa de utilidad o interés público,

mediante indemnización, cuyo monto será fijado por peritos.

La declaratoria de rescate hará que los bienes materia de la concesión vuelvan, de pleno derecho, desde la

fecha de la declaratoria, a la posesión, control y administración del Gobierno Federal, y que ingresen al

patrimonio de la Nación los bienes, equipo e instalaciones destinados directa o inmediatamente a los fines de la

concesión. Podrá autorizarse al concesionario a retirar y a disponer de los bienes, equipo e instalaciones de su

propiedad afectos a la concesión, cuando los mismos no fueren útiles al Gobierno Federal y puedan ser

aprovechados por el concesionario, pero en este caso, su valor real actual no se incluirá en el monto de la

indemnización. En la declaratoria de rescate se establecerán las bases generales que servirán para fijar el

monto de la indemnización que haya de cubrirse al concesionario, pero en ningún caso podrá tomarse como

base para fijarlo el valor intrínseco de los bienes concesionados.

Si el efecto estuviese conforme con el monto de la indemnización, la cantidad que se señale por este concepto

tendrá carácter definitivo. Si no estuviere conforme, el importe de la indemnización se determinará por la

autoridad judicial, a petición del interesado quién deberá formularla dentro del plazo de 15 días, contados a

partir de la fecha en que se le notifique la resolución que determine el monto de la indemnización.

*Las concesiones sobre bienes de dominio directo, cuyo otorgamiento autoriza el artículo 27 C.F., se regirán por

lo dispuesto en las leyes reglamentarias respectivas.

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Sin embargo, el Ejecutivo Federal tendrá facultad para NEGAR LA CONCESION en los siguientes casos:

-Si el solicitante no cumple con lo que tales leyes dispongan.

-Si se crea un acaparamiento contrario al interés social.

-Si la Federación decide emprender una explotación directa de los recursos de que se trate.

-Si los bienes de que se trate están programados para la creación de reservas nacionales o

-Si existe algún motivo fundado de interés público.

CONCEPTO DE REVERSION Y RESCATE, SEGÚN ENRIQUE PEREZ DE LEON

LA REVERSION

Tiene por objeto hacer que todas las instalaciones y obras efectuadas con motivo de la concesión, pasen a ser

propiedad del Estado. La ley regulará en qué casos opera la reversión pudiéndose citar como ej. El

cumplimiento del término para el que fue otorgada la concesión.

SU JUSTIFICACION. Sirve al Estado para impedir que un servicio público se vea interrumpido en su prestación,

o que la falta de explotación de un bien propiedad de la Nación afecte en forma directa los intereses de la

colectividad.

Al momento de efectuarse, el concesionario habrá recuperado en forma total las inversiones que haya hecho,

pero en caso de no ser así, el Estado equitativamente deberá indemnizarlo, de acuerdo con la cantidad no

recuperada.

EL RESCATE

Es la institución que (permite) consiste en la posibilidad que tiene el Estado, de dar fin a la concesión antes de

que se venza el término por el que fue otorgada.

Para el caso de que el concesionario sea ajeno a los motivos que tuvo la autoridad para hacer valer el rescate,

tendrá derecho a una indemnización en cantidad suficiente para cubrir los beneficios que no percibirá durante

el tiempo que reste de vigencia a la concesión normalmente.

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2.3. LA CONCESION PARA EL ESTABLECIMIENTO Y EXPLOTACION DE SERVICIOS

PUBLICOS

La concesión del servicio público es el acto por el cual un particular se compromete a asegurar a sus

expensas, riesgos y peligros, el funcionamiento de un servicio público, mediante una remuneración que

consiste normalmente en los beneficios que el derivará de la explotación de la explotación del servicio

general, de las tasas que quede autorizado para percibir de los usuarios del servicio.

La concesión administrativa es el acto por el cual se concede a un particular el manejo y explotación de:

1) Un servicio público, o

2) La explotación y aprovechamiento de bienes del dominio del Estado.

CONCEPTO DE SERVICIO PÚBLICO. Es la actividad creada con el fin de dar satisfacción a una necesidad de

interés general que de otro modo quedaría insatisfecha.

*Actividad concreta que el Estado realiza, a través de un personal competente, encaminada a satisfacer una

necesidad del grupo social en forma CONTINUA Y UNIFORME.

CARACTERÍSTICAS. Lo que distingue al servicio público es que la satisfacción del interés general constituye el

fin exclusivo de su creación. Por ejemplo: En México, las vías de comunicación y los transportes públicos.

PRINCIPIOS

1) Continuidad. Es razón de la permanencia de la necesidad que se pretende satisfacer.

2) Adaptación. O sea la posibilidad de modificarlo a medida que vaya variando dicha necesidad.

3) Igualdad. No debe discriminarse el goce del servicio en ningún particular que llene las condiciones legales.

NATURALEZA JURIDICA DE LA CONCESION DEL SERVICIO PÚBLICO

Por mucho tiempo se ha considerado que la concesión del servicio público tiene la naturaleza de un simple acto

contractual.

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Sin embargo, a pesar de las cláusulas contractuales de la concesión, del Estado, se consideró facultado para

adoptar medidas de policía que a veces significaban variaciones en la explotación del servicio, pero que eran

necesarias para proteger la seguridad y el orden públicos.

De la misma manera, el propio Estado, multiplicando las causas de caducidad, tenía un arma para obligar al

concesionario a aceptar frecuentes modificaciones a su concesión para que pudiera conservarla.

La Doctrina jurídica contemporánea considera que la concesión es:

Un acto Mixto, compuesto de tres elementos:

-Un Acto reglamentario.

-Un Acto condición.

-Y un contrato.

EL ACTO REGLAMENTARIO. Fija las normas a que (debe) ha de sujetarse la organización y funcionamiento

del servicio y dentro de él quedan comprendidas las disposiciones referentes a horarios, tarifas, modalidades

de prestación del servicio, derechos de los usuarios. Teniendo el carácter de un acto reglamentario, este

primer elemento de la concesión, la Administración puede variarlo en cualquier instante, de acuerdo con las

necesidades que se satisfacen con el servicio, sin que sea necesario el consentimiento del concesionario, pues

no se trata de modificar una situación contractual.

EL SEGUNDO ELEMENTO DE LA CONCESION, EL ACTO CONDICION, es el que condiciona la atribución al

concesionario de las facultades que la ley establece para expropiar, para gozar de ciertas franquicias fiscales.

Finalmente, existe en la concesión, un tercer elemento cuya FINALIDAD es proteger los intereses legítimos

del particular concesionario, creando a su favor una situación jurídica individual que no puede ser modificado

unilateralmente por la Administración.

Así, el ELEMENTO CONTRACTUAL de la concesión, está constituido, además de las cláusulas que conceden

ciertas ventajas peculiares al concesionario, pero las cuales pueden dejar de existir, en un derecho para el

concesionario de mucha mayor importancia jurídica, puesto que representa para él la verdadera protección

de sus intereses y la garantía más firme para sus inversiones. Ese derecho es el que el concesionario tiene a

que se mantenga el equilibrio financiero de la empresa.

EL OTORGAMIENTO DE LA CONCESIÓN

Para el otorgamiento de la concesión, el régimen legal relativo se inspira en ciertos principios que tienden a

garantizar por una parte que el Poder Público puede ejercer sin tropiezos el control que le corresponde sobre el

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objeto de la concesión, y por la otra, a asegurar que el concesionario tenga la competencia y los medios

adecuados para la explotación de la concesión.

Existen, para algunas concesiones, preceptos que tienden a evitar que con su otorgamiento puedan causarse

prejuicios a terceros.

Por ejemplo, la Ley sobre Vías Generales de Comunicación y la Ley Minera, disponen que las concesiones solo

pueden otorgarse a mexicanos o a sociedad mexicanas, y exigen que las sociedades tengan la mayoría de su

capital suscrito por mexicanos.

PUBLICACION DE CONCESION

Surten efectos, una vez otorgadas se deben publicar en el DIARIO OFICIAL.

LA EJECUCION DE LA CONCESION

Importa hacer hincapié en la obligación estricta del concesionario de 1) Ejecutar personalmente las

obligaciones impuestas por el acto, o sean las de construir las obras autorizadas y 2) las de encargarse de la

gestión del servicio. Esta obligación debe entenderse como la consecuencia natural del cuidado que el

legislador impone a la administración para seleccionar al concesionario, con las condiciones de idoneidad moral

y económica exigidos por la seriedad e importancia del objeto de la concesión.

Esa obligación impone la necesidad de que la autoridad apruebe todo traspaso o cesión de la concesión y de

que se considere como causa de caducidad, el traspaso que se haga sin esa autorización o la circunstancia de

que se haga a favor de un gobierno o Estado extranjero.

Existen, sin embargo, casos en los cuales la misma ley reconoce la posibilidad de que el concesionario

traspase la concesión a una sociedad organizada conforme a las leyes del país.

La obligación del concesionario de ejecutar personalmente la concesión, implica además la de aportar todos

los elementos pecuniarios indispensables para la ejecución de las obras y explotación del servicio.

El Estado también puede concurrir en la aportación de elementos para la empresa. Esto lo hace por vía de

SUBVENCIONES, garantizando determinado interés a los capitales invertidos o concediendo otra clase de

ayuda como son FRANQUICIAS FISCALES.

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Universidad de la Sierra A. C. 65

Sin embargo, el Estado estimando de utilidad pública el objeto de la concesión ha considerado casi en todos

los casos que es procedente la expropiación forzosa de los bienes necesarios para la instalación de las obras

autorizadas.

La justificación del sistema reposa en la circunstancia de que el concesionario no puede ni debe considerarse

como un EMPRESARIO PRIVADO que esté en la misma condición que el que ejerce su libertar de

contratación y de comercio. El concesionario viene a ser un colaborador de Poder Público en la realización del

servicio autorizado por la concesión.

Las diversas leyes sobre concesiones organizan el procedimiento para la expropiación. Fundamentalmente

consiste en la determinación de los bienes necesarios, en la práctica del avalúo de los mismos, en el depósito

o afianzamiento previo del monto de la indemnización y en la declaración de la autoridad concedente acerca de

la procedencia de la expropiación.

Esas mismas leyes también por regla general, establecen el derecho del expropiado para reivindicar la cosa

expropiada, cuando no se utilizare en el uso para el que se expropió o cuando la concesión respectiva ha sido

declarada en estado de caducidad.

LA PROPIEDAD DEL CONCESIONARIO

El concesionario es el propietario de los bienes afectados a la explotación del servicio concesionado (Las Vías

Generales de comunicación).

Sin embargo, existen tantas limitaciones a ese derecho del concesionario que en realidad se ha dudado que

pueda ser un verdadero derecho de propiedad. En efecto, el derecho del concesionario sobre los bienes

afectados a la concesión tiene no una duración indefinida, sino que por virtud del llamado DERECHO DE

REVERSION, pasan al Estado sin compensación alguna al término de la concesión.

De igual manera las hipotecas y demás gravámenes que lleguen a afectar dicha propiedad, sólo pueden

establecerse con la aprobación de la autoridad concedente y subordinados al derecho de reversión, de tal

manera que dichos gravámenes se extinguirán al pasar los bienes al Estado.

Finalmente, el concesionario está obligado a mantener en buen estado los bienes durante el plazo de la

concesión, llegándose hasta autorizar al gobierno para intervenir la empresa si durante la última parte de la

vigencia de la concesión el concesionario no mantiene los bienes en buen estado.

EL REGIMEN FINANCIERO DE LA CONCESION

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 66

El régimen financiero del servicio concesionado, es independiente del régimen financiero del Estado, de tal

manera que el concesionario debe obtener los fondos indispensables para la instalación del propio servicio y

mantener para éste un presupuesto fuera del control de la administración concedente.

Sin embargo, a pesar de que el concesionario soporta el riesgo de la empresa, él no controla ni las cargas ni

los provechos de la misma, ya que por una parte, es la administración la que regula unilateralmente el

funcionamiento del servicio y por la otra, es la propia administración la que debe también aprobar las tarifas que

constituyen la remuneración de los gastos de organización y funcionamiento.

Las tarifas del servicio y la forma de compensar la agravación de las cargas en la ejecución de la concesión.

Las tarifas constituyen el elemento esencial de la economía financiera de la explotación.

Su naturaleza jurídica es muy discutida. Se ha sostenido que la regulación de las tarifas constituye uno de los

elementos contractuales de la concesión, de tal manera de considerar que el concesionario tiene un verdadero

derecho para percibir las cuotas que se fijen convencionalmente y para que aquella regulación no se modifique

sino por medio de otro acto contractual.

Según Fraga, las tarifas no forman parte de las cláusulas contractuales de la concesión, porque ellas

constituyen un elemento esencial de la reglamentación del servicio público concedido; pero tampoco podemos

admitir que las cuotas que las mismas consignan sean establecidas en forma arbitraria y discrecional que sólo

haya de guiarse por el propósito de hacer más barato el uso del servicio, sino que tiene que considerarse

controlado o limitado por la necesidad de mantener el equilibrio financiero de la concesión y,

consecuentemente, por la necesidad de que el servicio subsista, y de que subsista en las mejores condiciones

para beneficio del público.

LA LEGISLACION MEXICANA. El sistema de la legislación mexicana vigente es el de considerar el régimen de

las tarifas cómo ajeno al elemento contractual de la concesión.

La Ley de Vías Generales de Comunicación establece que las TARIFAS:

A) Deberán ser aprobadas por la S.C.T., de la misma manera que los itinerarios, horarios y reglamentos del

servicio y que todas las

B) Tarifas, ya sea que señales o no el término de su vigencia, estarán sujetas a ser revisadas o canceladas en

los términos que ordena la misma S.C.T. (autoridad que establece y modifica las tarifas de los servicios

concesionados).

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 67

LA FUERZA MAYOR. Es necesario estudiar los casos en los cuales la ejecución se hace imposible y aquellos

en que las cargas de la ejecución se encuentran agravadas.

En el caso de una imposibilidad por causas de fuerza mayor es aplicable el principio general en materia de

obligaciones, a saber que a lo imposible nadie está obligado. Por lo tanto, cuando tal ocurrencia se presenta

CESAN las obligaciones del concesionario.

La agravación de las cargas de la ejecución puede provenir de diversas causas:

a) De actos de la autoridad concedente relacionados directamente con la concesión.

b) De medidas generales de orden legislativo o reglamentario

c) De acontecimientos exteriores y anormales ajenos al concedente y al concesionario.

La agravación de las cargas por la autoridad concedente. La agravación por medidas legislativas.

La primera causa. Se refiere fundamentalmente a modificaciones unilaterales de la concesión hechas por la

autoridad concedente y que vengan a hacer más gravosa la ejecución.

La Doctrina Jurídica Moderna ha considerado indudable que el concesionario está obligado a aceptar esa

situación más onerosa, pero al mismo tiempo ha considerado que la carga no debe recaer exclusivamente

sobre él pues la administración está obligada por la concesión a mantener el equilibrio financiero del servicio.

La compensación, puede hacerse, bien por una elevación de tarifas, por el otorgamiento de una subvención, o

bien el Estado, toma directamente a su cargo la instalación o explotación suplementaria.

Una segunda causa de agravación de las cargas del concesionario se hace consistir en medidas generales de

orden legislativo o reglamentario que afecten por igual al concesionario y a los demás individuos.

Para este caso la DOCTRINA ha llegado a la conclusión de que el concesionario debe seguir ejecutando la

concesión, pero sólo tendrá derecho a ser compensado si la medida general de que se trata equivale "a una

modificación directa del acto de concesión, porque las condiciones de ésta han sido establecidas teniendo en

cuenta y tomando, entre otras, por elemento la situación legal o reglamentaria que ha sido modificada".

LA AGRAVACION POR CAUSAS ANORMALES. LA TEORIA DE LA IMPREVISION.

Finalmente, puede ocurrir que acontecimientos externos, que no dependan de ninguna manera de las partes,

vengan a hacer más onerosa la situación del concesionario.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 68

La solución que impone la tesis contractual cuando se produce la ocurrencia señalada, es la de que el

concesionario, no estando frente a una causa de fuerza mayor, continúa obligado a la ejecución de sus

compromisos sin ningún derecho a compensación por las pérdidas sufridas.

Sin embargo, el nuevo concepto de la concesión y principios bien claros de equidad han hecho que sobre todo

la Doctrina y la jurisprudencia francesas constituyen para el evento que se examina toda una teoría que ha

sido llamada "la teoría de la imprevisión". Conforme a ella, cuando ocurren acontecimientos excepcionales y

anormales, imprevisibles y extraños a las partes, que vienen a hacer más onerosa la situación del

concesionario al grado de romper la economía de la concesión, entonces se produce propiamente un estado

extracontractual, es decir, que ya no es la situación prevista por la concesión, y que produce las siguientes

consecuencias:

Obligar al concesionario a continuar haciendo funcionar el servicio y a darle derecho a cierta compensación de

parte de la administración, no por la ganancia omitida, sino por las pérdidas sufridas por él a consecuencia del

trastorno de la economía de la concesión, pero sin que sea la administración, la única que reporte las cargas

excepcionales, bastando sólo con que haya una repartición razonable de ellas.

De acuerdo con la misma doctrina, esta teoría se justifica jurídicamente porque, por una parte, el concesionario

no puede dejar la explotación del servicio sino por una causa de fuerza mayor, y por la otra, porque no podría

evidentemente ser la intención de las partes la de que si esos acontecimientos externos y anormales se

verifican, subsistiera íntegramente el régimen de la concesión primitiva.

LAS RELACIONES DEL CONCESIONARIO CON EL PÚBLICO. LA TESIS DE LA LEGISLACION MEXICANA

El concesionario de un servicio público tiene relaciones jurídicas no sólo con la administración concedente

sino también con el público que ese aprovecha de las prestaciones de dicho servicio.

La tesis de nuestra legislación no es muy clara al respecto. Por una parte, existen disposiciones que

establecen expresamente la obligación del concesionario de prestar el servicio a todo el que lo solicite, sin

preferencia alguna, y la de prestarlo en términos uniformes a todos los que se encuentran en las mismas

condiciones, pero, por otra parte, también existen disposiciones que parecen admitir que las relaciones del

concesionario con el usuario se regulan por los contratos privados que celebran.

Por ejemplo, la Ley de Vías Generales de Comunicación previene que las tarifas se aplicarán observando

perfecta igualdad de tratamiento, quedando obligadas las empresas a aplicarlas sin variación alguna.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 69

Una vez que una empresa haya sido autorizada para iniciar la explotación y tenga aprobados sus horarios,

tarifas y demás documentos relativos, NO podrá rehusarse a prestar el servicio solicitado, en el concepto de

que no debe dar preferencias que no estén autorizadas por la ley.

LA DURACION DE LAS CONCESIONES. EL RESCATE.

La concesión es, por su misma naturaleza, de un carácter temporal. Ya se trate de las concesiones para

aprovechamiento de bienes nacionales, o bien de las de servicio, ellas se conceden salvo algunos casos

excepcionales por tiempo determinado.

El principio fundamental que domina la fijación de un término de duración de las concesiones, sobre todo las de

servicio público es el de que durante su vigencia pueda el concesionario no sólo obtener una utilidad

razonable sobre sus inversiones, sino también recuperar el importe de éstas por medio de las cuotas que los

usuarios paguen por el servicio.

Habiendo, pues, una íntima relación entre la recuperación de los capitales invertidos y la duración de la

concesión, ocurre preguntar si este elemento forma parte de las estipulaciones contractuales que no pueden

ser modificadas sino por otro acto también de naturaleza contractual, o si, por el contrario, es uno de los

elementos reglamentarios de la concesión que puede ser modificado en cualquier instante por un acto

unilateral.

Creemos que la duración de la concesión puede ser un pacto contractual, y sin embargo, reconocerse la

posibilidad del rescate de las concesiones.

En efecto, nos parece indudable que el Poder Público tiene la facultad de cambiar el procedimiento de la

concesión como medio de explotar un servicio público y sustituirlo por otro que considere más adecuado. En tal

caso, creemos que la concesión puede terminar anticipadamente, pero precisamente porque se reconoce al

concesionario un derecho al plazo de la concesión, procede que se le indemnice tal y como si se tratara de una

expropiación.

EL DERECHO DE REVERSION

Como el plazo señalado para la duración de la concesión es fijado para que el concesionario recupere sus

inversiones, es un principio admitido casi universalmente, el de que a la expiración de dicho plazo el Estado

pasa a ser propietario de todas las instalaciones y obras efectuadas, en virtud del llamado "Derecho de

Reversión".

El derecho de reversión se halla consignado en nuestra legislación para diversos públicos, como son los de

comunicación.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 70

LA CESACION DEL OBJETO DE LA CONCESION

Las concesiones pueden concluir antes de la expropiación del término que en ellos se estipula, cuando cesa el

objeto para que fuere otorgadas, o cuando el concesionario deja de cumplir algunas de las obligaciones que

impone la propia concesión.

LA CADUCIDAD Y LA RESCISION

Sin embargo, no todas las faltas de cumplimiento dan lugar a la extinción de la concesión. Algunas puedan

provocar únicamente la imposición de una sanción administrativa o penal, o bien dar lugar a una

responsabilidad civil, Otras pueden constituir causas de rescisión o de caducidad.

Sin embargo, parece bien fundada la teoría que considera que en realidad la autoridad tiene en sus manos el

poder de sanción que le es indispensable para asegurar el funcionamiento de los servicios públicos y que entre

las posibles sanciones por la falta de cumplimiento de las obligaciones del concesionario está precisamente la

declaración de caducidad de la concesión.

Aparte existe el poder de rescisión que "no es sino un aspecto del poder de modificación unilateral del contrato.

Su fundamento es el interés público que, en un momento dado puede no tener necesidad de las prestaciones

convenidas.

2.3.1. TRANSPORTACION AEREA, TERRESTRE Y MARITIMA.

TRANSPORTACIÓN AEREA, VEASE LA LEY DE AEROPUERTOS, CAPITULO III AL VII.

TRANSPORTACIÓN TERRESTRE, VEASE LA LEY GENERAL DE VIAS DE COMUNICACION, CAPITULO III,

ARTICULOS DEL 6 AL 18.

TRANSPORTACIÓN MARÍTIMA, VEASE LA LEY DE PUERTOS, CAPITULO IV, ARTICULOS 20 AL 37.

2.3.2. TELECOMUNICACIONES

VEASE LA LEY FEDERAL DE RADIO Y TELEVISIÓN, TITULO TERCERO CONCESIONES.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 71

2.3.3. OTROS SERVICIOS PUBLICOS:

Tenemos por ejemplo los siguientes

LAS EMPRESAS DE MENSAJERIA.

LOS PRODUCTORES INDEPENDIENTES DE ELECTRICIDAD.

2.4. CONCESIÓN PARA EXPLOTACIÓN DE BIENES DEL ESTADO

En la concesión de explotación solo se producen relaciones entre el estado y el concesionario en tanto que en

la de servicio público existe un tercer elemento los usuarios del servicio.

La explotación de una riqueza publica y la otra de instalación y gestión de un servicio publico.

En primer lugar examinamos los efectos que legalmente producen las concesiones de explotación.

Que el derecho que otorga la concesión no esta establecido en interés exclusivo del beneficiario es fácil e

inmediatamente perceptible si se tiene encuenta que la propiedad del estado sobre los bienes concesionados,

que la llamada nacionalización de tales bienes ha obedecido a la importancia que tiene para la vida económica

del país la explotación efectiva de esos bienes lo cual solo puede lograrse que un régimen de propiedad privada

deje al arbitrio.

La obligación de explotar que impone la concesión se regula no solo por las estimulaciones del acto de

concesión sino por la ley y por los reglamentos sobre la materia.

2.4.1. MINAS

Vid Ley de Minas.

La Ley en materia minera es reglamentaria del artículo 27 constitucional y sus disposiciones son de orden

público y de observancia en todo el territorio nacional. Su aplicación corresponde al Ejecutivo Federal por

conducto de la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial, a quien en lo sucesivo se le denominará la

Secretaría.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 72

2.4.2. AGUAS

Vid Ley de Aguas.

La concesión del agua nacionales es reglamentaria por el artículo 27 de la Constitución Política de los Estados

Unidos Mexicanos; es de observancia general en todo el territorio nacional, sus disposiciones son de orden

público e interés social y tiene por objeto regular la explotación, uso o aprovechamiento de dichas aguas, su

distribución y control, así como la preservación de su cantidad y calidad para lograr su desarrollo integral

sustentable.

Las disposiciones de la ley son aplicables a todas las aguas nacionales, sean superficiales o del subsuelo.

Estas disposiciones también son aplicables a los bienes nacionales que la presente ley señala.

2.4.4. RECURSOS FORESTALES

Véase Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Medio Ambiente.

La presente ley es reglamentaria del artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, es

de observancia general en todo el territorio nacional, sus disposiciones son de orden público e interés social y

tiene por objeto regular y fomentar la conservación, protección, restauración, aprovechamiento, manejo, cultivo

y producción de los recursos forestales del país, a fin de propiciar el desarrollo sustentable.

La política forestal y las normas y medidas que se observarán en la regulación y fomento de las actividades

forestales deberán sujetarse a los principios, criterios y disposiciones previstas en la Ley General del Equilibrio

Ecológico y la Protección al Ambiente.

2.5. LOS PERMISOS

Permiso: es el consentimiento que otorga quien tiene potestad también para hacer algo.

Jurídicamente puede tener los siguientes contenidos:

PERMISO, LICENCIA O AUTORIZACIÓN es el acto administrativo por medio del cual se otorga por un órgano

de la administración o un particular, la facultad o derecho para realizar una conducta o para hacer alguna

cosa.

Puede constituir también el documento formal por escrito donde se hace constar el acto administrativo, por

ejemplo: la licencia de manejar, el permiso de importación.

NOTA:

Permiso: caza, de pesca, de radio y televisión, de importación, para filmación, vídeo grabación y tomas

fotográficas de monumentos arqueológicos, históricos y artísticos (bienes del Estado).

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 73

2.5.1. DIFERENCIAS CON LA CONCESION.

1.- La concesión no tiene ningún derecho preestablecido, ni tampoco la autoridad tiene obligación de otorgarla

cumpliendo los requisitos.

Se señala que en el régimen de permisos, licencias y autorizaciones se reconoce al particular un derecho

preestablecido, cuyo ejercicio está sujeto a modalidades y limitaciones que, a través de requisitos, se

establecen en vista de fines de seguridad, salubridad, orden público, urbanismo y aun hay autores que hablan

de estética urbana, en este aspecto.

Así, al particular se le reconoce ese derecho, pero para su ejercicio, necesita cumplir una serie de requisitos

señalados en el régimen jurídico, cumplidos las cuáles se les otorga la licencia, el permiso o la autorización,

por ejemplo: las licencias de manejo, licencias sanitarias, permisos de importación, licencias de construcción

(propiedad) y licencias para apertura de cierta clase de comercios.

2.- En el régimen de licencias, permisos y autorizaciones, no se exige capacidad financiera y técnica del

solicitante, ni garantía en el procedimiento para otorgarlos, no hay usuarios, no rigen los principios de rescate,

ni de reversión. En la concesión, sí se exigen.

3.- El procedimiento para el otorgamiento de licencias, permisos y autorizaciones es más sencillo que el

relativo a la concesión, no se da la oposición de terceros. Generalmente se reduce a la solicitud, a que se

cumplan los requisitos establecidos por la ley y el acto administrativo que los otorga, que no se publica en el

D.O.F., sino que se notifica personalmente al interesado, entregándosele el documento en donde consta ese

acto.

4.- Por lo que hace al plazo. El régimen de licencias, permisos y autorizaciones generalmente no está sujeto a

un plazo forzoso, las licencias por lo regular son indefinidas en su duración o de plazos largos, por ejemplo:

una licencia de manejo dura 3 años, los permisos y las autorizaciones pueden tener distintos plazos de duración

que generalmente son periodos cortos o que se agotan con el ejercicio de los mismos, por ejemplo: el permiso

de internación al país de un extranjero (6 meses refrendables), el permiso de importación temporal de una

mercancía (6 meses), el permiso para importar definitivamente una mercancía, se agota con su ejercicio, el

permiso o autorización para celebrar festividades es por períodos cortos y su ejercicio lo extingue.

En la Ley General de Salud, se regulan PERMISOS para abrir al público hoteles, casas de huéspedes,

escuelas, salones de espectáculos, fábricas, hospitales.

AUTORIZACIONES: para elaborar, transportar y vender al público comestibles y bebidas envasadas.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 74

LICENCIAS: para dedicarse a la fabricación, elaboración o introducción de los mismos productos.

LICENCIA: para construcción, para manejar, sanitarias, apertura de comercio (otras actividades).

2.5.2. LAS AUTORIZACIONES.

La autorización, licencia o permiso es un acto administrativo por el cual se levanta o remueve un obstáculo o

impedimento que la norma legal ha establecido para el ejercicio de un derecho de un particular (Gabino Fraga).

En la generalidad de los casos, en que la legislación positiva ha adoptado el régimen de autorizaciones,

licencias o permisos, hay un derecho preexistente del particular, pero su ejercicio se encuentra restringida

porque puede efectuar la tranquilidad, la seguridad o la salubridad públicas o la economía del país, y sólo hasta

que se satisfacen determinados requisitos que dejan a salvo tales intereses es cuando la administración

permite el ejercicio de aquel derecho previo.

Así es, pues, que la autorización, la licencia y el permiso constituyen actos que condicionan para un particular el

ejercicio de algunos de sus derechos.

La Doctrina ha subrayado los caracteres de la autorización contraponiéndolos a los de la concesión, porque

ésta se emplea para aquellos casos en los que no hay ningún derecho previo del particular a la materia que es

objeto de la concesión, en que ninguna facultad le corresponde, en que (ninguna actividad puede desarrollar si

no es por virtud de la propia concesión que es la que crea directamente tales derechos o facultades).

Esta distinción es fácilmente apreciable, en el ejemplo más comúnmente usado: el de la licencia de

construcción y el de la concesión minera. Mientras que el PRIMER CASO, el propietario por razón misma de

su derecho de propiedad tiene la facultad de elevar en su terreno una construcción y sólo se restringe el

ejercicio de esa facultad hasta el momento en que la licencia se otorga; en el SEGUNDO CASO el que obtiene

una concesión no tiene antes de ella ningún derecho, ni siquiera limitado, a la explotación de la mina.

En nuestra legislación NO existe tan precisa distinción entre las dos instituciones que nos ocupan, pues en

ocasiones se llama PERMISO a lo que, según la Doctrina, es una verdadera concesión (permisos de caza, de

pesca,. entre otros), o bien se llama concesión a lo que no es más que una autorización o bien se le llama

permisos o concesiones indistintamente a actos que tienen el mismo contenido y los mismos efectos jurídicos

(Ley de Vías Generales de Comunicación y de Bienes Nacionales).

Pero prescindiendo de estas anomalías, fácilmente explicables por otra parte, ya que la terminología en el

Derecho Administrativo está todavía bien lejos de ser exacta, lo cierto es que dentro de nuestro régimen legal

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 75

predomina el uso del sistema de licencias, autorizaciones y permisos con el alcance que a él le reconoce la

Doctrina, y así las licencias o permisos son exigidos como medios de restricción o reglamentación de la

propiedad o de la libertad de los individuos, como ocurre, por ejemplo: para la explotación forestal de

propiedades privadas (Ley Forestal).

En todos los casos, la licencia, el permiso y la autorización constituyen MEDIOS ADECUADOS PARA EL

EJERCICIO DE LAS FUNCIONES DE POLICIA, entendiendo por ésta la atribución del Estado que lo faculta

para afectar los derechos de los particulares a fin de asegurar principalmente la tranquilidad, la seguridad y la

salubridad públicas, sin las cuales no es posible la vida en común.

Es indudable, pues, que atendiendo a su finalidad queda plenamente justificado el sistema legal de restringir el

ejercicio de los derechos de propiedad y de libertad por medidas preventivas, como son las licencias, permisos

o autorizaciones.

LICENCIA Y PERMISO

También puede entenderse dentro de la relación de trabajo, como el acto por el cual el superior jerárquico,

permite a los inferiores ausentarse de sus labores por períodos cortos, con o sin goce de sueldo.

ACTOS DE APROBACION

En el régimen administrativo existen también numerosos actos de aprobación, que son aquellos mediante los

cuáles la autoridad administrativa otorga su visto bueno, o de su consentimiento a determinados actos o

procedimientos de los particulares. Por ejemplo: EN MATERIA EDUCATIVA, tenemos la aprobación de

exámenes. EN MATERIA BANCARIA, la aprobación de escrituras constitutivas, la aprobación del

nombramiento de consejeros, directores, gerentes.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 76

3. ORDEN PÚBLICO Y POLICIA ADMINISTRATIVA

3.1. CONCEPTO DE ORDEN PÚBLICO

Estado o situación social derivada del respeto a la legalidad establecida por el legislador.

Cuando se dice que tal o cual ley es de orden público, se ignora o se olvida que todas las leyes lo son, porque

todas ellas tiene como fin principal el mantenimiento de la paz con justicia, que persigue el derecho.

El orden público se perturba cuando el derecho no es respetado. La tranquilidad pública suele confundirse con

el orden público pero en realidad, la tranquilidad pública no es otra cosa que una que produce el orden público.

3.1.1. ELEMENTOS DEL ORDEN PÚBLICO, SEGURIDAD, TRANQUILIDAD,

SALUBRIDAD PÚBLICAS, LA PLANEACION DEMOGRÁFICA, LA ALIMENTACIÓN Y LA

EDUCACIÓN.

ORDEN PUBLICO ELEMENTOS

O

INTERESES

� Seguridad pública

� Tranquilidad pública

� Salubridad pública

� Planeación Demográfica

� Alimentación

� Educación pública

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 77

3.1.2. EL PODER DE POLICIA DEL ESTADO COMO SALVAGUARDIA DEL ORDEN

PÚBLICO

Son las atribuciones de mando de policía o de coacción que comprenden todos los actos necesarios para el

mantenimiento y protección del Estado.

El poder de policía del Estado se considera dentro de algunas legislaciones como el conjunto de atribuciones

que a aquel corresponden para promover el orden y bienestar generales por medio de restricciones y

reglamentaciones de los derechos del individuo, en forma tal que puedan prevenirse o reducirse las

consecuencias perjudiciales que su disposición en términos absolutos acarrearía para la vida en común.

PODER DE POLICIA

El poder es la autoridad en virtud de la cual un apersona ejerce en nombre de la otra los actos jurídicos que

esta le encargue.

La policía va a ser entendiéndose como poder de policía, aquella autoridad que tiene por objeto el

mantenimiento del orden público, el auxilio a la justicia penal para el descubrimiento del delito y del delincuente

y la prevención de las actividades dañosas a la salud pública.

3.2. POLICIA ADMINISTRATIVA

Tiene a su cargo velar prevenir y coactivamente por mantenimiento del orden público con relación a las

actividades privadas.

El régimen de policía se sitúa en la discrecionalidad administrativa, siguiendo la oportunidad de su empleo

sobre bases legales.

Objeto. Limitación de una actividad privada determinada o prescripción de medidas propias para evitar un

desorden particular.

Es la función del Estado que tiene por objeto el mantenimiento del orden público (Policía Gubernativa), el auxilio

a la justicia penal para el descubrimiento de delito y del delincuente (Policía Judicial) y la prevención de las

actividades dañosas a la salud pública (Policía Sanitaria).

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 78

Actualmente se habla de policía fiscal, portuaria, forestal, etc... que como órgano del Estado depende de la

autoridad administrativa.

3.2.1. CONTENIDOS Y ALCANCES DE LA LEGISLACION DE POLICIA

Es aquella que restringe o limita las actividades de los particulares con el fin de mantener el orden público.

Simplemente impide y restringe actividades que intrínsicamente no son reprobables y su limitación obedece a

razones convencionales.

El régimen de policía debe considerarse siempre unitariamente, porque traduce la más importante de las

fuerzas coactivas de que dispone el Estado para regular la actividad de los particulares en sus relaciones con el

poder público.

3.2.2. INFRACCIONES Y SANCIONES

A) DELITO Violación

a una ley penal-

administrativa

SANCION:

Consecuencia

jurídica

desfavorable para

sujetos, que se

aplica en caso de

infracción

Sancionado con la

imposición de una

PENA.

Aplica la sanción : la

AUTORIDAD

JUDICIAL

EL ILÍCITO

B) FALTA Es una infracción a

un reglamento de

policía y buen

gobierno

Sanción: con Multa

o Arresto 36 hrs.

La sanción la aplica

una:

AUTORIDAD

ADMINISTRATIVA.

Art. 21 C.F. Competencia de la autoridad administrativa, para sancionar la falta de cumplimiento de las leyes

administrativas, (reglamentos o bandos) cuya ejecución compete a la misma autoridad. Por ejemplo: Pago

de impuestos o multas.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 79

La ilicitud consiste en la omisión de los actos ordenados y en la ejecución de los actos prohibidos por el

ordenamiento jurídico.

El esquema normativo, señala que cuando a una determinada conducta. le es imputada una consecuencia, el

antecedente es una conducta sancionada por el ordenamiento jurídico como ilícito y la consecuencia sería

siempre una sanción.

Considera Miguel Acosta, que el ilícito es un género de acuerdo con las normas que el propio derecho

establece y que tiene en consecuencia varias especies, pues no todo ilícito es delito.

En el ordenamiento jurídico existen diferentes tipos de hechos y actos que puedan ser ilícitos, pero como

aquellos no son iguales, las sanciones no pueden ser las mismas, así encontramos que para un ilícito, las

sanciones pueden variar, éstas pueden consistir en la privación de la libertad, la nulidad, la rescisión, la

suspensión, una multa, un recargo. La revocación de permisos, licencias y autorizaciones, el pago de una

indemnización, remoción del cargo, etc.

Por lo tanto dentro de un sistema jurídico, el género será una CONDUCTA ILICITA, pero como ésta se

encuentra sancionada de diferente forma, por el mismo ordenamiento, este género ilícito tendrá diferentes

categorías y a cada una de éstas le corresponderá una sanción diferente que será de acuerdo con la MATERIA

específica que regule el ilícito.

Por cada área o materia que forma el ordenamiento jurídico persigue fines específicos que regula y sanciona,

cuándo existe una omisión de lo que está ordenado o se realizan actos prohibidos por el mismo.

Planteando así el esquema de que el ilícito es un género y que tiene varias especies, creemos que dos de ellas

son muy importantes.

1º. El ilícito penal que corresponde al delito.

2º. El ilícito correspondiente a la infracción administrativa. A cada especie corresponden sanciones específicas.

Luego entonces, la realización de cualquier acto ilícito traerá como consecuencia, invariablemente, una

sanción, misma que puede consistir, en diversas especies. La pena es una de ellas.

LAS INFRACCIONES ADMINISTRATIVAS (artículos 21, 122 fracción IV, inciso g de la C.F.)

La Doctrina no ha dado una definición concreta de lo que es la infracción administrativa, siendo el término

bastante amplio. Debemos limitar su objeto al Derecho Administrativo.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 80

El derecho administrativo tiene como fines:

a) Proveer servicios Públicos.

b) Mantener el orden público (salvaguardar las normas de convivencia social).

c) Distribuir el gasto público.

d) Regular la organización, estructura y actividad de la parte del estado que se identifica con la Administración

Pública o Poder Ejecutivo.

Es por éstos fines, que podemos afirmar que la infracción administrativa es, todo acto y hecho de una persona

que viole el orden establecido por la Administración Pública para la consecución de sus fines, tales como

mantener el orden público (en su labor de policía) y prestar un servicio eficiente en la administración de

servicios.

Serra Rojas define a la INFRACCION ADMINISTRATIVA como el acto u omisión que defiende las leyes

administrativas y que no son considerados como delitos por la legislación penal por considerarlos faltas que

ameritan sanciones menores.

Se ha intentado determinar las infracciones de policía, como conductas que en sí mismas no lesionan los

derechos del Estado o de un súbdito, pero que deben ser prohibidas o exigidas bajo una pena, a causa del

peligro que representan por el orden jurídico y para la seguridad.

CONCEPTO GENERAL DE INFRACCION

Alude a la violación de la ley administrativa (reglamento), que se origina por un hecho o abstención declarados

ilegales por una ley, que amerita una sanción administrativa, es decir, que aplica la misma autoridad

administrativa.

COMPETENCIA PARA DEFINIR LAS FALTAS DE INFRACCIONES ADMINISTRATIVAS

Competencia Federal (Congreso de la Unión Art. 73 fracción XXI de la C.F.)

Local (En el D.F. al Poder Ejecutivo con base en los Art. 21 y 89 fracc. I, 116 y 122 de la C.F. ). Con base en

los reglamentos administrativos que se expidan con fundamento en la ley emanada del Congreso de la Unión.

Municipal. (Ayuntamiento Art. 115 fracc. II, segundo párrafo de la C.F., con base en una ley del Congreso

Local.

Según Acosta Romero, la finalidad que se persigue con las infracciones es el buen funcionamiento de la

administración pública y la obtención de resultados eficaces en la misma y obtener una conducta social

ordenada.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 81

El hecho de cometerse una infracción administrativa, da lugar a un PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO,

para determinar la responsabilidad del infractor. El procedimiento administrativo es distinto al procedimiento

penal.

Procedimiento Administrativo Penal

Conoce autoridad administrativa:

JUEZ CALIFICADOR

No hay órgano encargado de integrar E.T. y P.R.

del inculpado

No existe Averiguación previa, sino que el

infractor una vez que es detenido, es puesto a

disposición del Juez calificador, quien

determinará la sanción a que haya lugar.

Infractor

Es un procedimiento jerárquico: 2 partes Juez e

infractor.

Autoridad judicial: JUEZ DE LO PENAL

Si hay, el M.P.

Si hay

Delincuente

3 partes: M.P. / P.R/ Juez

3.2.3. FALTAS DE POLICIA Y BUEN GOBIERNO

Dentro de la doctrina jurídica municipal han sobrevivido varias figuras legales de añeja tradición, como son los

Bandos y las Ordenanzas.

La palabra BANDO deriva del verbo Bandir, que a su vez se origina del vocablo visigodo: BANDWJAN que

significa pregonar o hacer público algo.

En este sentido los antiguos adictos de la municipios o curiales romanos se transformaron en los llamados

Bandos del Antiguo Municipio Medieval español, que implicaban la acción de los cabildos para publicar las

normas a que apegarían su gestión de gobierno y, en su caso, las sanciones por su desacato. La figura

jurídica del Bando ha conservado, hasta la fecha, su fuerte raíz típicamente municipal.

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El término ORDENANZAS a su vez deriva del vocablo latino ORDO, ORDINIS, que significa poner ordenar a

las cosas.

Jurídicamente es un cuerpo normativo, generalmente compilaciones de tipo codificado, que se destinan a

regular legalmente alguna materia específica de las actividades humanas. No son tan exclusivas de la doctrina

municipal, pues muchas otras instancias de gobierno tuvieron la capacidad de expedirlas.

Tanto los bandos como las ordenanzas fueron los principales instrumentos legislativos a través de los cuales

se reguló la vida municipal durante muchos siglos.

Se habla mucho de los bandos Municipales y éstos existen históricamente antes de muchas constituciones.

Según JOAQUIN ESCRICHE

Bando es:

Bandir. Antiguamente publicar, bando contra algún reo ausente con sentencia de muerte en su rebeldía

Bando. La facción, parcialidad o partido de gente que separándose del común o masa general de los demás

ciudadanos forma cuerpo aparte .V.liga.

BANDO. El anuncio público de una cosa, por ejemplo: de un edicto, ley, mandato superior, sentencia, hecho

por persona autorizada o por voz de pregonero, o por fijación de carteles en los parajes más ocurridos del

pueblo.

La palabra bando viene:

De la voz alemana BANN (territorios, facultad de establecer en él)

Dejaron los vándalos: BANER (Bandera, con cuya presentación se declara y publicaba la guerra , dando a la

orden que procedía a este acto el nombre de bando).

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3.2.4. JUSTICIA DE BARANDILLA

Miguel Acosta Romero considera que de acuerdo con la nueva estructura, los Bandos Municipales son

reglamentos tanto de policía y buen gobierno, como de otras leyes administrativas emanadas de los Congresos

locales.

Es importante el Bando de Policía y Buen Gobierno porque en él se basa la JUSTICIA DE BARANDILLA, que

está en grave deterioro a nivel municipal en términos generales, todavía en 1985 algunos bandos municipales

consignaban el arresto hasta por 15 días sin que hubieran tomado la reforma al Art. 21 de la CF. de febrero de

1983, en el sentido de que el arresto por infracciones a los BP. y B.G. no puede exceder de 36 hrs., en este

aspecto (estima Acosta Romero) que todavía los municipios deben hacer un esfuerzo por moralizar y renovar

la justicia de barandilla.

Art. 21 C.F.

"Compete a la AUTORIDAD ADMINISTRATIVA la aplicación de sanciones por las infracciones de los

reglamentos gubernativos y de policía, las que únicamente consistirán en Multa o arresto (hasta por 36 hrs.)”.

BANDO DE POLICIA REGLAMENTOS GUBERNATIVOS

Se refiere a aquellos que tienen por finalidad

mantener el orden, la tranquilidad, paz publica

en las poblaciones y

La de “Policía” se refiere a las infracciones

municipales.

Regulan aquellas actividades sociales que el

Poder Público reglamenta. Sanción.

Organizan y encauzan las actividades

particulares que están vinculadas con los

intereses sociales.

La palabra "gubernativa" está tomada como

sinónimo de "sanción administrativa".

Vid. arts. 97-104 de la Ley Orgánica Municipal y el Bando de Policía y Buen Gobierno del Municipio.

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4. FUNCIÓN PÚBLICA

4.1. TEORIA DE LA FUNCIÓN PÚBLICA

NATURALEZA JURÍDICA Y CONCEPTO

Hemos dicho anteriormente que la administración pública considerada como una de los elementos de la

personalidad del estado requiere personas físicas que formen y exterioricen la voluntad de este.

También hemos indicado que es necesario distinguir entre el órgano y su titular, pues mientras que el primero

representa una unidad abstracta, una esfera de competencia, el titular representa una persona concreta que

puede ir variando sin que se afecte la continuidad del órgano y que tiene, además de la voluntad que ejerce

dentro de la esfera de competencia del órgano, una voluntad dirigida a la satisfacción de sus intereses

personales.

Actualmente la Constitución Federal, en el capitulo denominado de las responsabilidades de los funcionarios

públicos, en el articulo 108 se refiere a los servidores públicos a los representantes de elección popular, a los

miembros de los poderes judicial y federal, y judicial del Distrito Federal, o el presidente, a los funcionarios y

empleados, y, en general a toda persona que desempeñe un empleo, cargo o comisión de cualquier naturaleza

en la administración publica federal o en el distrito federal.

Respecto de los funcionarios y empleados, es una cuestión muy debatida en la doctrina señalar cuales son los

caracteres que lo separan.

Entre las opiniones que se han expresado para hacer la distinción podemos señalar las siguientes:

1.-Se ha considerado que el criterio que distingue a los funcionarios de los empleados es relativo a la duración

del empleo y mientras que los funcionarios son designados por un tiempo determinado, los empleados tienen

un carácter permanente.

Este criterio es en realidad no da ninguna base para ser la distinción, pues bien pueden encontrarse entre los

que se llaman funcionarios algunos que tienen la misma permanencia que los empleados.

2.-Se recurre al criterio de la retribución para fijar la distinción, considerando que los f uncionarios pueden ser

honoríficos en tanto que los empleados son siempre remunerados.

Tampoco este criterio parece decisivo, pues que en un régimen como el nuestro todos los servidores públicos

gozan de una remuneración.

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3.-También se señala como criterio para distinguir a los funcionarios de los empleados la naturaleza de la

relación jurídica que los vincula con el Estado. Si la relaciona es de derecho público entonces se tiene al

funcionario, si es de derecho privado, al empleado.

La relación de función pública de los empleados es por su naturaleza de derecho público, y, por lo tanto el

criterio de distinción es inadmisible.

4.-Se ha dicho que los funcionarios son los que tienen poder de decir y ordenar, en tanto que los empleados

son meros ejecutores.

Sin embargo, creemos que la noción de funcionario no se confunde completamente con la de autoridad pues

tendremos oportunidad de asimilar que mientras que todos los funcionarios son autoridades, no todas las

autoridades son funcionarios.

5.-Se ha recurrido al criterio de considerar como funcionario a aquel que tiene señalas sus facultades en la

constitución o en la ley, y empleado a que las tiene en los reglamentos.

6.-Una distinción entre concepto de funcionario y el de empleado la del que el primero supone un cargo especial

trasmitido en principio por la ley, que crea una relación externa que da al titular un carácter representativo,

mientras que el segundo solo supone una vinculación interna que hace que su titular solo concurra a la

formación de la formación de la función publica.

Mucho se ha discutido en la doctrina a cerca de la naturaleza jurídica de la relación que se establece entre los

funcionarios y empleados por una parte y el estado por la otra, es decir, acerca de la naturaleza jurídica de la

función pública.

Las teorías sobre el particular se a construido, pueden reducirse fundamentalmente, a dos:

Las teorías de derecho privado y las teorías de derecho público.

Las primeras encontrando de que de ambas partes se exige capacidad en consentimiento y que además

existen prestaciones reciprocas al proporcionar el empleado sus servicios a cambio de la compensación

pecuniaria que recibe del estado, pretende encajar las relaciones que surgen de la función publica dentro de los

muebles del derecho civil tradicional y considera que o se trata de un contrato de locución de obras de un

contrato de mandato , según se trate de prestación de servicios materiales o de realizar en nombre y

representación del Estado actos jurídicos.

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Las teorías civilistas sobre la función publica, deben descartarse toda ellas, en primer lugar porque el régimen

que en principio de una manera natural conviene a las relaciones en que el estado interviene es el régimen de

derecho publico y en segundo lugar porque la función pública los empleados y funcionarios son titulares de las

diversas esferas de competencia en las que se divide las atribuciones del estado y por lo mismo el régimen

jurídico de dicha función debe adaptarse a la exigencia de que las referidas atribuciones son realizadas de una

manera eficaz, regular y continua, sin que el interés particular del personal empleado llegue a adquirir

importancia jurídica para obstruir la satisfacción del interés general.

Quedando así definida la rama del derecho a la que corresponde las relaciones entre el estado y sus

empleados, es necesario determinar ya dentro del derecho publico, cual es la naturaleza jurídica del acto

creador de dichas relaciones.

Las tesis que a este respecto se han sostenidos son:

La que afirma que es un acto contractual: Considera que esta nace de un contrato administrativo desde el

momento en que existe un concurso de la voluntad del estado que nombra y la del nombrado que acepta, sin

que importe que no haya una perfecta igualdad entre las partes, puesto que lo mismo ocurre en todos los

contratos administrativos, ni que la función o cargo no sean bienes que estén en el comercio, puesto que el

objeto del contrato son los servicios y la remuneración que así lo están, y sin que importe que el estado fije

previa y unilateralmente los derechos y obligaciones del empleado o que los pueda modificar en la misma

forma durante la presentación del servicio.

La que lo considera como un acto condición.

El artículo 5 Constitucional indico la necesidad del concurso de voluntades para crear la relación del servicio ya

que, estableció que nadie podrá ser obligado a prestar trabajos personales sin la justa retribución y sin su pleno

consentimiento salvo el trabajo impuesto como pena por la autoridad judicial, el cual se ajustara a lo dispuesto

en las fracciones I y II del artículo 123, lo cual señalan:

La duración de la jornada máxima será de ocho horas.

La jornada máxima de trabajo nocturno será de siete horas.

Quedan prohibidas las labores insalubres o peligrosas, el trabajo nocturno industrial y todo otro trabajo después

de las diez de la noche, de los menores de dieciséis años.

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El artículo 32 Constitucional previene que los mexicanos serán preferidos a los extranjeros en igualdad de

circunstancias para toda clase de concesiones y para todos los empleos, cargos o comisiones de gobierno en

que no sea indispensable en la calidad de ciudadano.

Así como el artículo 91 Constitucional menciona que para ser secretario del despacho se requiere: ser

ciudadano mexicano por nacimiento, estar en ejercicio de sus derechos y tener treinta años cumplidos.

También el articulo 102 menciona que para ser procurador se requiere: ser ciudadano mexicano por nacimiento

, tener cuando menos treinta y cinco años cumplidos el día de la designación; contar , con antigüedad mínima

de diez años, con titulo profesional de licenciado en derecho, gozar de buena reputación, de no haber sido

condenado por delito doloso. El procurador podrá ser removido libremente por el ejecutivo.

La Suprema Corte declaro en varias ocasiones que los empleados públicos no estaban ligados con el estado

por un contrato de trabajo y que por lo tanto, no gozaban de las prerrogativas que para los trabajadores

consigno en el articulo 123 de la Constitución, ya que este tendió a buscar un equilibrio entre capital y el trabajo,

con factor de la producción, circunstancias que no concurren el caso de las relaciones que median entre el

poder publico y los empleados que dependen.

4.2. SERVIDORES O FUNCIONARIOS PUBLICOS

De acuerdo a lo establecido en el Diccionario de Derecho de Rafael De Pina Vara el los define como:

SERVIDORES PUBLICOS: En los términos del articulo 108 de la Constitución de los Estados Unidos

Mexicanos, se reputaran como servidores públicos a los representantes de elección popular, a los miembros de

los poderes judicial federal y judicial del DF., a los funcionarios y empelados y, en general, a toda persona que

desempeñe un empleo, cargo o comisión de cualquier naturaleza en la administración publica federal o en el

Distrito Federal.

FUNCIONARIO PUBLICO: Persona que, por disposición inmediata de la ley, por elección popular o por

nombramiento de Autoridad competente, participa en el ejercicio de una función pública.

Por lo que ambos tienen que sujetarse a lo establecido en la Constitución Mexicana y sus leyes reglamentarias.

EMPLEADO PUBLICO: Órgano personal de la actividad administrativa, afecto a un servicio público

determinado, en cuya realización participa, con carácter permanente y profesional, mediante una retribución.

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4.2.1. CLASIFICACION DE LOS SERVIDORES PUBLICOS

Son Servidores Públicos, los Funcionarios y Empleados Públicos.

Titulo Cuarto de Nuestra Constitución Mexicana y sus leyes correspondientes.

4.2.2. REGIMEN DE LOS SERVIDORES PUBLICOS

Es el conjunto de obligaciones y derechos que tiene en razón de su calidad de funcionario o empleado público.

Nuestra Constitución Mexicana en su artículo 128 dispone que todo funcionario público, sin excepción, antes

de tomar posesión de su encargo prestara la protesta de guardar la Constitución y las leyes que de ella

emanen.

La ley reglamentaria impone a los trabajadores al servicio del Estado las siguientes obligaciones:

a) Desempeñar las labores con la intensidad, cuidados apropiados, sujetándose a la dirección de sus jefes y

reglamentos respectivos.

b) Observar buenas costumbres dentro del servicio.

c) Cumplir las obligaciones que les impongan las condiciones generales de trabajo.

d) Guardar reserva de los asuntos que lleguen a su conocimiento con motivo de su trabajo.

e) Evitar la ejecución de actos que pongan en peligro su seguridad y la de sus compañeros.

f) No hacer propaganda de ninguna clase dentro de los edificios o lugares de trabajo.

g) Asistir puntualmente a sus labores.

h) Asistir a los institutos de capacitación para mejorar su preparación y eficiencia.

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4.2.3 REGIMEN APLICABLE A LOS EMPLEADOS

Es el establecido en los Reglamentos a los que se encuentren sujetos de acuerdo al trabajo o empleo que se

encuentren desempeñando.

4.2.4. RESPONSABILIDAD DE LOS SERVIDORES PUBLICOS

La falta de cumplimiento de las obligaciones a las que nos hemos referido produce consecuencias jurídicas. El

funcionario o empleado que no las observe incurre en responsabilidad.

Esa responsabilidad puede ser de tipo política y legal (penal, administrativa o civil).

LA RESPONSABILIDAD PENAL DE LOS FUNCIONARIOS O EMPLEADOS: Esta responsabilidad se encuentra

establecida en el articulo 109 fracción II constitucional, es decir por violación a las leyes penales.

Esta responsabilidad solo es aplicable después de una declaración de procedencia de la Cámara de

Diputados; requisito de procebilidad indispensable para fincar dicha responsabilidad. Una vez agotado el

mismo, puede ejercitarse la acción penal correspondiente y sancionar al servidor publico a través de los

tribunales penales comunes, previa la substanciación de un proceso penal. Lo anterior por lo que hace a los

servidores públicos enunciados en el artículo 111 constitucional, ya que en cuanto al Presidente de la Republica

es aplicable un procedimiento diverso, tal como más adelante se explicara.

SUJETOS

En el artículo 111 de la Constitución Federal dispone que se podrá proceder penalmente por la comisión de

delitos durante el tiempo de su encargo, contra los siguientes servidores públicos:

1. Los Diputados y Senadores al Congreso de la Unió.

2. Los Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

3. Los Magistrados de la Sala Superior del Tribunal Electoral.

4. Los Consejeros de la Judicatura Federal.

5. Los Secretarios del Despacho y Jefes de Departamento Administrativo.

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6. Los Diputados a la Asamblea del Distrito Federal y el Jefe de Gobierno del mismo.

7. El Procurador General de la Republica y el Procurador General de Justicia del Distrito Federal.

8. El Consejero Presidente y los Consejeros Electorales del Consejo General del Instituto Federal Electoral.

9. Los Gobernadores de los Estados, Diputados Locales, Magistrados de los Tribunales Superiores de Justicia

locales y miembros de los Consejeros de las Judicaturas locales por delitos federales.

10. Contra el Presidente de la Republica por los delitos que expresamente determina el articulo 108 segundo

párrafo constitucional.

De lo enunciado por dicho precepto se desprende que no solo estos, sujetos de responsabilidad penal , sino

que son mas bien, los que gozan de la protección constitucional denominada “Declaración de Procedencia”, que

implica que los servidores públicos no podrán ser enjuiciados por la comisión de delitos cometidos durante el

tiempo de su encargo, sino mediante la citada declaración en sentido afirmativo. Luego, al excluirse de dicha

enunciación a los Consejeros de la Judicatura del Distrito Federal, al Secretario Ejecutivo del Instituto Federal

Electoral y a los Directores Generales o sus equivalentes de los organismos descentralizados y empresas de

participación estatal mayoritaria no se quiere significar que estos servidores públicos no pueden ser sujetos de

responsabilidad penal, si su conducta se tipifica en alguno de los delitos previstos en la Ley sino que no gozan

de protección constitucional citada.

La Doctrina Constitucional ha considerado que la finalidad de la Declaración de Procedencia es la protección

del ejercicio de la función pública a desempeñarse por parte de los Servidores Públicos. La apreciación de

cuales funciones merezcan por su importancia la protección, es cuestión que solo a la Constitución incumbe

definir. Por lo tanto, nuestra Constitución Federal ha querido proteger a los servidores públicos, de no ser

detenidos y enjuiciados sin la previa declaración de la Cámara correspondiente, para impedir acefalias

perjudiciales al funcionamiento de los órganos del Estado, así se advierte del articulo 112 constitucional, al

disponer que no se requerirá declaración de procedencia de la Cámara de Diputados cuando alguno de los

servidores públicos a que hace referencia el párrafo primero del articulo 111 cometa un delito durante el tiempo

en que se encuentre separado de su encargo, de este modo, es claro que dicha protección tutela la función

publica , ya que dura mientras estén los servidores públicos en funciones y no cuando se encuentren separados

de su encargo. Pero además el precepto en comento se advierte que se excluye al Presidente de la Republica y

a los servidores públicos de las Entidades Federativas.

En atención a lo dispuesto por el articulo 109 fracción II constitucional, son causas de procedibilidad de la

responsabilidad penal, la comisión de delitos por parte de cualquier servidor publico. En este contexto, son

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delitos cometidos por servidores públicos, aquellos por personas a quienes la ley denomina precisamente

servidores públicos, los que están indicados en el artículo 108 de la Ley Suprema.

La determinación de estos tipos delictivos versan en razón de la idea de que el servidor publico debe

desempeñar su encargo, con honradez, lealtad, imparciabilidad, legalidad y eficacia, sobre todo por lo que

respecta al manejo y aplicación de los recursos económicos federales. La comisión de estos delitos será

perseguida y sancionada en los términos de la legislación penal. El Código Penal en materia Federal para toda

la Republica y en materia común para el Distrito Federal, en el Titulo Décimo, bajo el rubro “Delitos cometidos

por servidores públicos” establece once figuras delictivas, entre ellas tenemos:

1. Ejercicio indebido de servicio público (214)

2. Abuso de Autoridad (215)

3. Coalición de Servidores Publicaos (216)

4. Uso indebido de atribuciones y facultades (217)

5. Concusión (218)

6. Intimidación (219)

7. Ejercicio abusivo de funciones (220)

8. Trafico de influencia (221)

9. Cohecho (222)

10. Peculado (223)

11. Enriquecimiento ilícito (224)

La comisión de los delitos enunciados del artículo 214 al 224 del Código Penal Federal da lugar a la

responsabilidad penal de los servidores públicos, sin embargo del artículo 108, segundo párrafo constitucional,

la persona del Presidente de la Republica, durante el tiempo de su encargo, solo podrá ser acusado por

traición a la Patria y delitos graves del orden común, luego de dicho precepto se desprende:

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**Que el Presidente de la Republica goza de inmunidad por cualquiera otros delitos que cometa durante el

tiempo de su encargo, no quedan comprendidos en ella, los delitos graves del orden común ni la traición a la

patria.

**Que es sujeto de responsabilidad penal exclusivamente por los delitos graves del orden común y por traición a

la patria y,

**Que goza de protección constitucional por los delitos que no abarca su inmunidad.

La inmunidad lo que otorga es irresponsabilidad penal, ya que a consecuencia de ella, ninguna jurisdicción

represiva puede actuar en contra del inmune. La inmunidad, por lo tanto priva de responsabilidad penal.

Recordándose que solo en los regímenes monárquicos, la persona del rey es sagrada y no esta sujeta a

responsabilidad. Por el contrario, las democracias ha sido preocupación establecer la responsabilidad del

Presidente de la Republica. El constitucionalista Miguel Lanz Duret afirma que había que buscar la efectividad

en las responsabilidades para el desenvolvimiento de nuestras prácticas de gobierno.

Durante las sesiones del Congreso Constituyente de 1856-1857, el diputado José Maria Mata se empeño en

someter a juicio publico al presidente de la Republica, situación que no obstante haber sido contemplada en las

anteriores Constituciones, era algo imposible de llevarse a cabo. Además sostenía que de no ser factible exigir

la responsabilidad de este funcionario, habría una confusión entre los principios monárquicos y los

democráticos.

ORGANOS Y PROCEDIMIENTO

El artículo 111 Constitucional y 25 al 29 de la Ley Federal de Responsabilidades regulan el procedimiento a

seguirse en el caso de la comisión de delitos por parte de los servidores públicos durante el tiempo de su

encargo. Dicho procedimiento (para la declaración de procedencia) se inicia de la siguiente manera:

DENUNCIA

Con la formulación de la denuncia por cualquier ciudadano (con pruebas) y bajo su mas estricta responsabilidad

ante la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión (Ofícialia Mayor)respecto de conductas que constituyen

delitos cometidos por los servidores públicos o bien a requerimiento del Ministerio Publico.

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AVERIGUACIÓN

Respecto de este procedimiento, es pertinente señalar que el artículo 25 de la Ley Federal de

Responsabilidades dispone que se actuara en lo pertinente, de acuerdo con el procedimiento previsto en

materia de juicio político ante la Cámara de Diputados. En esta fase, la sección instructora practicara toda las

diligencias conducentes para establecer la existencia del delito y la probable responsabilidad del imputado, así

como la subsistencia del fuero Constitucional, cuya remoción se solicita. Aclaramos que el articulo citado

establece que para proceder penalmente en contra de algunos de los Servidores Publicaos a que se refiere el

primer párrafo del articulo 111 Constitucional, en cuya redacción no se incluye al Presidente de la Republica.

DICTAMEN DE PROCEDENCIA O IMPROCEDENCIA

Una vez agotadas las diligencias, la Secciona dictaminara si da lugar a proceder penalmente en contra del

inculpado, debiendo rendir su dictamen en un plazo de 60 Días hábiles (puede ampliarse), en el caso del juicio

político es de treinta días hábiles. Si a su juicio, la imputación fuese notoriamente improcedente, lo hará saber

de inmediato a la Chamarra, para que esta resuelva si se continua o desecha(hecho que es un absurdo, ya que

debe la misma sección instructora, órgano que realizo las diligencias de la averiguación declara en definitiva

sobre la procedencia o improcedencia de la imputación y no dejar que la Cámara de Diputados intervenga en

esa decisión, sino para que se constituye la Secciona, si en ultima instancia desidia la Cámara de Diputados),

sin perjuicio de reanudar el procedimiento , si posteriormente a parecen motivos que lo justifiquen.

DE LA CONSTITUCIÓN DEL JURADO DE PROCEDENCIA

Dada cuenta del dictamen respectivo el Presidente de la Cámara anunciara a esta que debe erigirse en jurado

de procedencia al día siguiente del depósito del dictamen comunicándose al inculpado (defensor) y al

denunciante.

El día designado, previa declaración al presidente de la Cámara esta conocerá en asamblea del dictamen que

la sección le presente y actuara en los mismos términos previstos por el articulo 20 en manera de juicio político

es decir la Secretaria dará lectura a las Constancias procedimentales y alas conclusiones de la sección

instructora, concediéndose el uso de la palabra al denunciante y al servidor publico (defensor) para que aleguen

lo que a su derecho convenga. Retirados estos, se procederá a discutir y agotar las conclusiones propuestas

por la Sección instructora.

EFECTOS DE LA DECLARACIÓN DE PROCEDENCIA

El articulo 28 de la Ley Federal de Responsabilidades dispone que si la Cámara de Diputados declara por

mayoría absoluta de sus miembros presentes en sesión, que ha lugar a proceder contra el inculpado, este

quedara inmediatamente separado de su empleo, cargo o comisión, y sujeto a la jurisdicción de los Tribunales

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competentes, disposición que resulta incorrecta, toda vez que la Cámara de Diputados solo priva al Servidor

Publico de la protección constitucional del que goza por el hecho de desempeñar funciones publicas, dejándolo

en aptitud de ser sujeto de la acción de las autoridades competentes, es decir de la acción del Ministerio

Publico, para que actué con arreglo a la ley, tal como se corrobora con el articulo 111 párrafo tercero

constitucional.

En caso negativo no habrá lugar a procedimiento ulterior mientras subsista el fuero, pero tal declaración no será

obstáculo para que el procedimiento continué en su curso cuando el servidor publico haya concluido el

desempeño de su encargo, pues la misma no prejuzga los fundamentos de la imputación, es decir la Cámara

no juzga, simplemente se limita a declarar si ha o no lugar a proceder contra el acusado. Si la Cámara

defensora y el juez absuelve, los funcionarios que poseen derecho propio al cargo, están en condiciones de

reasumirlo, si todavía no concluye el periodo para el que fueron designados.

Si la sentencia fuere condenatoria y se trata de un delito cometido durante el ejercicio de su encargo, no se

concederá al reo la gracia del indulto (en términos de la Constitución Norteamericana, articulo 2, sección

segunda, no se concede indulto en los casos de acusaciones por responsabilidades oficiales). Doctrinalmente

en cuanto a los efectos de dicha sentencia con relación al cargo, se ha considerado que si la actuación de la

jurisdicción común concluye con sentencia condenatoria y habiéndose purgado la pena, nada hay que impida al

funcionario reasumir sus funciones ( el efecto de declaración de procedencia es la separación del cargo,

suspensión y no la destitución del funcionario, en tanto este sujeto a proceso penal), exactamente igual que si

hubiere sido absuelto, salvo algunas limitaciones, tales como las que consagra el articulo 95 fracción IV

constitucional, que establece que para ser electo Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se

necesita gozar de buena reputación y no haber sido condenado por delito que amerite pena corporal de mas

de un año de prisión, pero si se tratare de robo, fraude, falsificación, abuso de confianza u otro que lastime

seriamente la buena fama en el concepto público, inhabilitara para el cargo cualquiera que haya sido la pena.

Estas consideraciones son aplicables para cualquier servidor público de los señalados en el articulo 111 párrafo

cuarto constitucional, solo habrá lugar a acusar al Presidente de la Republica ante la Cámara de Senadores,

según el articulo 110, órgano que resolverá con base en la legislación penal aplicable.

Podemos señalar que la comisión de delitos graves del orden común señalados en el articulo 108 segundo

párrafo Constitucional por parte del Presidente de la República da lugar a responsabilidad penal, misma que es

tratada como responsabilidad oficial (política) por lo que hace al procedimiento. Así, para hacer efectiva la

responsabilidad penal de cualquier otro servidor público es necesario emitir una declaración de procedencia en

sentido afirmativo e inmediatamente después, el servidor público quedara a disposición de las autoridades

competentes; pero tratándose del Presidente de la República, los efectos son diferentes, ya que la delación de

la Cámara de Diputados de que ha lugar a proceder, ni suspende al presidente en su encargo, ni lo deja a

disposición de la autoridad competente, si no que hace surgir la necesidad de acusarlo ante el Senado, como si

se tratara de delitos oficiales y al ser declarado culpable por el senado, este lo privara desde luego de su

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encargo, así cuando una autoridad ordinaria absuelve, por estar solamente suspendido el acusado, puede

regresar a la función, lo que no sucedería en el caso del Presidente de la República, pues es a pesar de su

inocencia, quedaría privado de la función.

En este supuesto, ya la Constitución Federal en los artículos 84 y 85 prevé los procedimientos pertinentes de

sustitución del Presidente de la Republica, para determinadas circunstancias.

Para proceder penalmente por delitos federales contra servidores público de las Entidades <federativas

(Gobernadores, Diputados locales, Magistrados de los Tribunales Superiores de Justicia de los Estados y

miembros de los consejos de las Judicaturas locales, estos últimos excluidos de la Ley Federal de

Responsabilidades, según el artículo 28, la de declaración de procedencia que al efecto dicte la Cámara de

Diputados se remitirá a la legislatura local respectiva, para que en ejercicio de sus atribuciones procedan como

corresponda y en su caso ponga al inculpado a disposición del Ministerio Público Federal o del órgano

jurisdiccional respectivo.

La Constitución Política del Estado de Puebla, en su articulo 129, dispone que cuando el Congreso del Estado

reciba la resolución del Senado a que se refieren los artículos 110 párrafo segundo (juicio político) y 111 párrafo

quinto (responsabilidad penal) de la Constitución Federal, proceder a separar de sus funciones al acusado y a

consignarlo a la autoridad competente. De este precepto es de señalarse que es correcto el señalamiento que

hace en materia de juicio político al precisar que la resolución del senado, la recibirá el congreso del Estado,

pero se equivoca al considerar que sea en materia de responsabilidad penal, la resolución del Senado, la que

se comunique ala legislatura local, para los efectos citados, toda vez que no es el Senado, el que emite la

declaración de Procedencia, sino la Cámara de Diputados Federal tal y como lo dispone el articulo 111 párrafo

primero constitucional.

DELA IMPOSICIÓN DE SANCIONES

En el articulo 109 fracción III, segundo párrafo constitucional y 4 de la Ley de Responsabilidades establece que

no podrán imponerse dos veces por una sola conducta sanciones de la misma naturaleza, es decir, no se

puede duplicar un mismo tipo de conducta por una sola conducta, aunque no hay impedimento alguno para esta

ultima, origine dos o mas tipo de responsabilidad, así conforme al Código Penal Federal, todos los delitos por

servidores públicos tienen señaladas sanciones de naturaleza penal (prisión, multa) y de tipo administrativo

(destitución e inhabilitación).

Las sanciones penales se aplicaran de acuerdo con lo dispuesto en la Legislación penal y tratándose de delitos

por cuya comisión el autor obtenga un beneficio económico o cause daños y perjuicios patrimoniales, deberán

graduarse de a cuerdo con el lucro obtenido y con la necesidad de satisfacer daños y perjuicios acusados por

su conducta ilícita. Las sanciones económicas no podrán exceder de tres tantos de los beneficios obtenidos o

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de los daños y perjuicios causados. En el caso de esta responsabilidad por delitos cometidos durante el tiempo

del encargo por cualquier servidor público, será exigible de acuerdo con los plazos de prescripción consignadas

en la ley penal, que nunca serán inferiores a tres años, plazos de prescripción que se interrumpen en tanto el

servidor públicos desempeñe alguno de los encargos a que hace referencia el articulo 111 constitucional.

LA RESPONSABILIDAD ADMINISTRATIVA: Tiene lugar con motivo cualquier falta cometida por el empleado

en el desempeño de sus funciones, pudiendo ser concomitante con la responsabilidad civil y la penal de la que

antes hemos hablado.

Esa responsabilidad puede en unos casos traer como consecuencia la terminación de los efectos del

nombramiento. En otros casos dicha responsabilidad no trasciende fuera de la administración; la falta que la

origina se denomina falta disciplinaria; la sanción que amedita también una pena disciplinaria y la autoridad que

la impone es la jerarquía superior al empleado que ha cometido la falta.

Según el articulo 46 y sus anexos de la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas de los Servidores

Públicos y la Ley Orgánica de la Administración Publica Federal; todo servidor público tendrá las siguientes

obligaciones, para salvaguardar la legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad y eficiencia que deben ser

observadas en el desempeño de su empleo, cargo o comisión, y cuyo incumplimiento dará lugar al

procedimiento y a las sanciones que correspondan sin perjuicio de sus derechos laborales, así como las

normas especificas que al respecto rijan en el servicio de las fuerzas armadas:

I.- Cumplir con la máxima diligencia el servicio que le sea encomendado y abstenerse de cualquier acto u

omisión que cause la suspensión o deficiencia de dicho servicio o implique abuso o ejercicio indebido de un

empleo, cargo o comisión.

II.- Formular y ejecutar legalmente, en su caso los planes, programas y presupuestos correspondientes a su

competencia y cumplir las leyes y o tras leyes que determinen al manejo de recursos económicos públicos.

III.- Utilizar los recursos que tengan asignados para el desempeño de su empleo, cargo o comisión, las

facultades que le sean atribuidas o la información reservada a que tenga acceso por su función exclusivamente

para los fines a que están afectos.

IV.- Custodiar y cuidar la documentación e información que por razón de su empleo, cargo o comisión, conserva

bajo su cuidado o la cual tenga acceso, impidiendo o evitando el uso, la sustracción, destrucción, ocultamiento

o inutilización indebidas de aquellas.

V.- Observar buena conducta en su empleo, cargo o comisión, tratando con respeto, diligencia, imparcialidad y

rectitud en las personas con las que tenga relación con motivo de este.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 97

VI.- Observar en la dirección de sus inferiores jerárquicos las debidas reglas del trato y abstenerse de incurrir en

agravio, desviación o abuso de autoridad.

VII.- Observar respeto y subordinación legitimas con respecto a sus superiores jerárquicos inmediatos o

mediatos, cumpliendo las disposiciones que estos dicten en el ejercicio de sus atribuciones.

VIII.- Comunicar por escrito al titular de la dependencia o entidad en la que presten sus servicios, las dudas

fundadas que le suscite la procedencia de las ordenes que reciba.

IX.- Abstenerse de ejercer las funciones de un empleo, cargo o comisión después de concluido el periodo por el

cual se le designo o de haber cesado por cualquier otra causa, en el ejercicio de sus funciones.

En el artículo 53 y 54 de la misma ley se menciona los elementos para fincar las sanciones administrativas

En el artículo 56 expresa las reglas para aplicar las sanciones antes mencionadas.

LA RESPONSABILIDAD CIVIL: Tiene lugar en los casos en que la falta de cumplimiento de las obligaciones

impuestas al titular del cargo produce un menoscabo en el patrimonio del Estado y es independiente la

imposición de las sanciones que establece la ley de responsabilidad de los empleados y funcionarios de la

federación la fuente de esta responsabilidad esta en la ley, puesto que la requisición del servicio constituye una

situación legal.

Esta responsabilidad tiene de acuerdo con nuestra legislación como principal dominio en que se aplica, entre

las faltas cometidas por los empleados con manejo de fondos. Es para estos empleados un requisito previo al

principio del desempeño de sus funciones, el otorgamiento fianzas que garanticen su manejo. Cuando surge la

responsabilidad civil una vez que ella se constituya por resolución administrativa, se procede hacer efectiva la

indemnización correspondiente directamente sobre los bienes del responsable o sobre la fianza que garantiza

su manejo.

LA RESPONSABILIDAD POLÍTICA: De acuerdo con nuestro sistema jurídico, la expresión Responsabilidad

Política se utiliza como aquella que puede atribuirse a un servidor público, como consecuencia de un juicio

político seguido por presuntas infracciones graves de carácter político (con independencia de que las mismas

configuren o no algún delito sancionado por la legislación penal común), en cuyo caso se aplica una sanción

política (no penal) por conducto de un órgano político (respetando las formalidades esenciales de un

procedimiento jurisdiccional).

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 98

El juicio político entendido como medio para fincar exclusivamente responsabilidad política es producto del

sistema implantado en el derecho de los Estados Unidos de Norteamérica, establecido en el artículo I, sección

tercera de la Constitución Federal de 1787.

Dicho sistema, fue expuesto por Hamilton, quien considero que la finalidad del juicio político es la separación

del servidor indigno del cargo público y no la sanción penal de un acto indebido, aunque después del juicio

político puede proceder esa otra sanción, tal como se fundamenta en el artículo ya citado, que al efecto dispone

que en los casos de responsabilidades oficiales, el alcance de la sentencia no irá mas allá de la destitución del

cargo y la inhabilitación para ocupar o disfrutar de cualquier empleo honorífico, de confianza o remunerado, de

los Estados Unidos; pero el individuo condenado quedará sujeto, no obstante, a que se le acuse, enjuicie,

juzgue y castigue con arreglo a derecho. En nuestro país, el alcance de la resolución del Senado, solo implica

destituir o inhabilitar al servidor público y no se sujeta a la jurisdicción de los tribunales ordinarios, ya que tal

circunstancia sería violatoria del principio de Non bis in idem, consagrado en el artículo 23 de la Constitución

Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Además, el autor citado destacó la importancia de separar la responsabilidad política de los demás tipos de

responsabilidades; debido a que el daño ocasionado por un funcionario inflige a la comunidad política, ésta

debe ser resarcida mediante la remoción del funcionario, después de un procedimiento seguido ante un órgano

político; aunque existe el peligro de que la decisión que dicte esté determinada por la fuerza de los partidos y no

por pruebas efectivas de inocencia o culpabilidad. Luego, el problema radica en encontrar el órgano (tribunal)

idóneo para juzgar en materia de responsabilidades oficiales, con bastante dignidad e independencia.

Hamilton objeta el hecho de que sea el Senado quien juzgue en materia de juicio político, con los siguientes

criterios:

En primer lugar, porque se confunde a las autoridades legislativa y judicial en un mismo cuerpo, violando el

principio de separación de poderes. Además de que contribuye a la acumulación indebida de poder por parte

del Senado.

En segundo lugar, porque supone que será un juez demasiado indulgente de la conducta de individuos en cuya

designación oficial participó. Recuérdese que es el Senado, el órgano que sanciona las designaciones del

Ejecutivo Federal, sea aprobando o ratificando.

La tercera objeción procede de su unión con el Ejecutivo Federal en el poder de concluir tratados. Se ha dicho

que de este modo se constituye a los Senadores en sus propios jueces en todos los casos de corrupción o

traición en el cumplimiento de esta misión, así ¿Qué perspectiva habrá de imponerles el castigo que merecen,

si ellos mismos han de decidir sobre la acusación presentada en su contra con motivo de la deslealtad de que

se hicieron culpables?

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 99

A mayor abundamiento, en el mundo existen tres tipos fundamentales de organismos encargados de la justicia

política, entre ellos:

1) Los delitos políticos pueden ser diferidos a la mas alta jurisdicción del orden judicial, por ejemplo, en Suiza y

Bélgica.

2) O bien a las altas Cortes especiales, es decir, la justicia política se confía a un cuerpo judicial constituido

especialmente.

Existen altas Cortes de tipo monárquico, compuestas de personalidades especialmente investidas de la

confianza del rey o altas Cortes de tipo republicano, integradas por jueces y jurados, independientes del

gobierno.

3) El tercer sistema (inglés) se refiere a la institución del IMPEACHMENT, en el cual la Cámara alta juzga

mientras que la Cámara popular acusa. Por ejemplo: Francia y Estados Unidos de Norteamérica.

Sin embargo, el sistema Americano se diferencia del Europeo, ya que mientras en Europa es un acto judicial

que ha tenido por principal fin, castigar al culpable; en América, es más una medida administrativa que judicial,

que tiene por finalidad retirarle el poder a quien haya hecho mal uso de sus atribuciones e impedir que vuelva a

ser investido de cargo público en el futuro. En este sentido, en Inglaterra y Francia, los tribunales políticos

pueden aplicar todas las disposiciones del Código Penal; en tanto que en Estados Unidos de Norteamérica,

cuando se ha relevado a un culpable del carácter de funcionario público y se le ha declarado indigno de

desempeñar toda función pública, el derecho de las autoridades políticas concluye y se envía al acusado a los

tribunales ordinarios.

El juicio político se presenta como un procedimiento (que implica el ejercicio de una función jurisdiccional sui

generis) para remover a los servidores públicos, pero sin entregar a un órgano político, la potestad para privarlo

del patrimonio o de la libertad, función esta última que exige la imparcialidad de un juez en sentido estricto para

evitar los excesos de la pasión política.

El juicio político mexicano se inspira en el impeachment, tal como se concibió en los Estados Unidos de

Norteamérica y se diferencia de la responsabilidad política en los sistemas parlamentarios, ya que en éstos,

existe la posibilidad de que el parlamento formule un voto de censura al gobierno, en virtud de haberle perdido

la confianza, en cuyo caso los Ministros se encuentran obligados a renunciar; precisamente una vez

consolidado el sistema parlamentario, cayó en desuso el impeachment británico, pues bastaba un voto de

censura para eliminar a los miembros del gabinete sin necesidad de una condena penal del parlamento.

SUJETOS

En México, el artículo 110 constitucional expresamente señala, quienes son sujetos de juicio político.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 100

Por otra parte, y a pesar de que el artículo 114 constitucional, establece que el procedimiento de juicio político

solo podrá iniciarse durante el periodo en que el servidor público desempeñe su cargo y dentro de un año

después.

Al respecto, el artículo 5 de la Ley Federal de Responsabilidades precisa que son sujetos de juicio político, los

servidores públicos que se mencionan en términos del primer párrafo del artículo 110 constitucional.

El artículo 109 fracción I constitucional dispone que mediante juicio político se impondrán las sanciones

indicadas en el artículo 110, a los servidores públicos señalados en el mismo precepto, cuando en el ejercicio

de sus funciones incurran en actos u omisiones que redunden en perjuicio de los intereses públicos

fundamentales o de su buen despacho. Dichas infracciones de carácter político están previstas en la Ley

Federal de Responsabilidades, que son:

a) El ataque a las instituciones democráticas, el ataque a la forma de gobierno republicano, representativo y

federal.

b) Las violaciones graves y sistemáticas a las garantías individuales o sociales (no procede juicio político por la

mera expresión de ideas), el ataque a la libertad de sufragio.

c) La usurpación de atribuciones.

d) Cualquier infracción u omisión (de carácter grave) a la Constitución o a las leyes federales cuando cause

perjuicios graves a la Federación, a uno o varios Estados de la misma o de la sociedad, o motive algún

trastorno en el funcionamiento normal de las instituciones, y

e) Las violaciones sistemáticas o graves a los planes, programas y presupuestos de la Administración Publica

Federa o del Distrito Federal y a las leyes que determinen el manejo de los recursos económicos federales o del

Distrito Federal.

El procedimiento a seguirse entratándose de juicio político se regula de los artículos 9 al 24 de la Ley Federal

de Responsabilidades de los Servidores Públicos, mismo que es biinstancial, seguido primero ante la Cámara

de Diputados (como órgano de instrucción y acusación) y posteriormente ante el Senado (como Jurado de

Sentencia.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 101

PROCEDIMIENTO ANTE LA CAMARA DE DIPUTADOS

ETAPAS:

DENUNCIA

De conformidad con la Ley Suprema (artículo 109) se concede acción popular, para que cualquier Ciudadano

bajo su más estricta responsabilidad y mediante la presentación de pruebas, pueda formular denuncia por

escrito ante la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión (Oficialía Mayor), respecto de las conductas

anteriormente citadas, la cual deberá ratificarse dentro de los tres días naturales siguientes a su presentación.

Cabe aclararse que las denuncias anónimas no producirán ningún efecto. Del artículo 31 de la Ley Federal de

Responsabilidades se desprende que el Ministerio Público también puede presentar denuncia, querella o

requerimiento al respecto.

La Cámara de Diputados substanciará el procedimiento de juicio político por conducto de las Comisiones

Unidas de Gobernación y Puntos Constitucionales y de Justicia, quienes al momento de su instalación

designarán a cinco miembros de cada una de ellas, para que en unión de sus Presidentes y un Secretario por

cada Comisión, integren la Subcomisión de Examen Previo de Denuncias de Juicios Políticos. Al proponer la

Gran Comisión de cada de las Cámaras del Congreso de la Unión, la constitución de comisiones para el

despacho de los asuntos, propondrá la integración de una Comisión para sustanciar los procedimientos

consignados en la Ley Federal de Responsabilidades. Aprobada la propuesta, por cada Cámara se designarán

de cada una de las comisiones, cuatro integrantes para que formen la Sección Instructora en la Cámara de

Diputados y la Sección de Enjuiciamiento en la de Senadores.

La Cámara de Diputados conduce la fase de instrucción del procedimiento, a partir de la ratificación de la

denuncia, una vez cumplido este requisito, la Oficialía Mayor de la Cámara de Diputados, la turnará a la

Subcomisión de Examen Previo para la tramitación correspondiente.

La Subcomisión de Examen Previo procederá (en un plazo de treinta días hábiles) a determinar:

** Si el denunciado se encuentra entre los servidores públicos a que se refiere el artículo 2 de la Ley Federal de

Responsabilidades.

** Si la denuncia contiene elementos de prueba que justifiquen que la conducta atribuida corresponde a las

enumeradas con antelación, y

** Si los propios elementos de prueba permiten presumir la existencia de la infracción y la probable

responsabilidad del denunciado y por tanto, si amerita la incoación del procedimiento. En caso contrario, la

Subcomisión desechará de plano la denuncia presentada.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 102

La resolución que dicte la Subcomisión de Examen Previo declarando procedente la denuncia, será remitida al

Pleno de las Comisiones Unidas de Gobernación y Puntos Constitucionales y de Justicia, para efecto de

formular la resolución correspondiente y ordenar se turne a la Sección Instructora de la Cámara de Diputados.

INSTRUCCION

Inmediatamente la Sección Instructora practicará todas las diligencias necesarias para la comprobación de la

conducta o hecho materia de la denuncia, estableciendo las características y circunstancias del caso,

precisando la intervención que haya tenido el servidor público denunciado e informando a éste (tres días

naturales siguientes a la ratificación) sobre la materia de la denuncia, su garantía de defensa y que deberá

comparecer o informar por escrito, dentro de los siete días naturales siguientes a la notificación.

PRUEBAS

Posteriormente, la Sección Instructora abrirá un periodo de prueba de treinta días naturales, para que ofrezcan

las que estime necesarias tanto el denunciante como el servidor público, así como la misma sección; plazo que

podrá ampliarse en la medida en que resulte necesario.

La citada Sección calificará la pertinencia de las pruebas, desechando las que a su juicio sean improcedentes.

ALEGATOS

Terminada la instrucción del procedimiento, se pondrá el expediente a la vista del denunciante (por un plazo de

tres días naturales), del servidor público y su defensa (por el mismo plazo), a fin de que tomen los datos que

requieran para formular alegatos, los que deberán presentar por escrito, dentro de los seis días naturales

siguientes a la conclusión del segundo plazo mencionado.

CONCLUSIONES

Transcurrido el plazo para la presentación de alegatos, la Sección Instructora formulará sus conclusiones

(sesenta días naturales) en vista de las constancias del procedimiento. Si de las constancias se desprende la

INOCENCIA del encausado, las conclusiones terminarán proponiendo que se declare que no ha lugar a

proceder en su contra por la conducta, materia de la denuncia, que dio origen al procedimiento. Pero si se

desprende la RESPONSABILIDAD del servidor público, terminarán proponiendo la aprobación de lo siguiente:

** Que está legalmente comprobada la conducta o el hecho, materia de la denuncia.

** Que se encuentra acreditada la responsabilidad del encausado y

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 103

** La sanción que deba imponerse; lo cual es un error, ya que la facultad de imponer la sanción política es

competencia del Senado como Jurado de Sentencia. La fase de instrucción debiera circunscribirse a confirmar

o comprobar únicamente los hechos denunciados, a concretar las causales de procedencia de responsabilidad

política alegada y a concluir si existen o no elementos para la continuación del procedimiento ante el Senado.

En caso de ser aprobadas las conclusiones, se envía la declaración correspondiente a la Cámara de

Senadores, en concepto de: acusación.

EL PROCEDIMIENTO PARA APROBAR LAS CONCLUSIONES, es el siguiente:

Una vez emitidas las conclusiones, la Sección Instructora las entregará a los Secretarios de la Cámara de

Diputados para que den cuenta al Presidente de la misma, quién anunciará que dicha Cámara debe reunirse y

resolver sobre la imputación dentro de los tres días naturales siguientes, lo que harán saber a los Secretarios,

denunciante y al servidor público denunciado, a fin de que aleguen lo que convenga a sus derechos. Llegado el

día, la Cámara de Diputados, se erigirá en órgano de acusación, previa declaración de su Presidente, en

seguida la Secretaría dará lectura a las constancias procedimentales, así como a las conclusiones de la

Sección Instructora, se concederá la palabra al denunciante y en seguida al servidor público para que aleguen

lo que a su derecho convenga. El denunciante podrá replicar y el denunciado podrá también hacer uso de la

palabra en último término (se reconoce aún el derecho de réplica y duplica). Retirados el denunciante y el

servidor público, se procederá a discutir y a votar las conclusiones propuestas por la Sección Instructora.

Si la Cámara resuelve que no procede acusar al servidor público, éste continuará en el ejercicio de su cargo. En

caso contrario, se le pondrá a disposición de la Cámara de Senadores, a la que se remitirá la acusación,

designándose una Comisión de tres diputados para que sostengan la misma ante el Senado. Cabe señalarse,

que no se entiende porque la ley no atribuyó a la Sección Instructora (que instrumentó toda la fase) la

presentación del caso ante el Senado.

2) PROCEDIMIENTO ANTE LA CAMARA DE SENADORES

ETAPAS:

INICIO Y ALEGATOS

Recibida la acusación en la Cámara de Senadores, ésta la turnará a la Sección de Enjuiciamiento, la que

emplazará a la Comisión de Diputados encargada de la acusación y al acusado (defensor), para que presenten

por escrito sus alegatos dentro de los cinco días naturales siguientes al emplazamiento.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 104

CONCLUSIONES

Transcurrido el plazo señalado, la Sección de Enjuiciamiento de la Cámara de Senadores, formulará sus

conclusiones en vista de las consideraciones hechas en la acusación y en los alegatos formulados, en su caso,

proponiendo la sanción que en su concepto deba imponerse al servidor público (con fundamentación legal).

Además, la Sección de Enjuiciamiento podrá disponer la práctica de otras diligencias que considere necesarias

para integrar sus propias conclusiones; una vez emitidas, la Sección entregará las conclusiones a la Secretaría

de la Cámara de Senadores.

AUDIENCIA FINAL Y RESOLUCIÓN

Recibidas por la Secretaría, el Presidente de la Cámara de Senadores anunciará que debe erigirse ésta, en

Jurado de Sentencia, dentro de las veinticuatro horas siguientes a la entrega de dichas conclusiones,

procediendo la Secretaría a citar a la Comisión de los tres Diputados y al acusado.

Llegada la fecha y la hora señalada para la audiencia, el Presidente de la Cámara Senadores la declarará

erigida en Jurado de Sentencia y procederá la Secretaría a dar lectura a las conclusiones formuladas por la

Sección de Enjuiciamiento, se concederá el uso de la palabra a la Comisión de Diputados y al servidor público;

retirado éste, pero permaneciendo los Diputados en la sesión, se procederá a discutir y a votar las conclusiones

presentadas para llegar a un fallo definitivo, posteriormente el Presidente hará la declaratoria que corresponda.

Si el fallo es absolutorio, ningún otro tribunal podrá ocuparse del caso.

Por otra parte, el artículo 32 de la Ley Federal de Responsabilidades dispone que en ningún caso podrá

dispensarse un trámite de los establecidos, sea para el procedimiento de juicio político como para la declaración

de procedencia (responsabilidad penal).

Del procedimiento se advierten múltiples deficiencias, entre ellas:

** No hay regulación expresa sobre las características de la acusación.

** Es muy extenso el número de audiencias, alegatos, réplicas, práctica de diligencias y presentación de

conclusiones.

** Son diversos los órganos que intervienen en el procedimiento, esto es, Comisiones, Subcomisión y

Secciones.

** Son más cortos los plazos del procedimiento seguido ante la Cámara de Senadores.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 105

** Al citado procedimiento le faltan bases operativas más detalladas para subsanar lagunas, tales como la

procedencia del amparo por violaciones al procedimiento.

** La Ley Federal de Responsabilidades no precisa expresamente los medios de prueba que se pueden

ofrecer. El artículo 45 establece que en todas las cuestiones relativas al procedimiento no previstas en la ley,

así como en la apreciación de las pruebas se observarán las disposiciones del Código Federal de

Procedimientos Penales y del Código Penal; ordenamientos que son de aplicación supletoria, pero sólo por lo

que hace a la valoración de las pruebas. Al respecto, si la Ley Federal de Responsabilidades regula lo

referente al procedimiento de juicio político (artículos del 9 al 24), resulta ilógico que se disponga la necesidad

de recurrir a otras leyes, desvinculadas o que no guardan relación con el procedimiento de juicio político.

EFECTOS DE LAS RESOLUCIONES: Las declaraciones y resoluciones de las Cámaras de Diputados y

Senadores son inatacables, es decir, respecto de ellas no procede recurso alguno, ni el amparo (artículo 110

último párrafo de la Constitución Federal). Correlativamente el artículo 30 de la Ley Federal de

Responsabilidades establece que las declaraciones y resoluciones DEFINITIVAS de las Cámaras son

inatacables. Corrobora tales disposiciones, el artículo 73 fracción VIII de la Ley de Amparo, que dispone que el

juicio de amparo es improcedente contra las resoluciones o declaraciones del Congreso Federal o de las

Cámaras que lo constituyen, de las legislaturas de los Estados o de sus respectivas Comisiones o Diputaciones

Permanentes, en elección, suspensión o remoción de funcionarios, en los casos en que las Constituciones

correspondientes les confieran la facultad de resolver soberana o discrecionalmente. Bajo este aspecto, las

declaraciones y resoluciones de las Cámaras dictadas en el juicio político no son susceptibles de ser atacadas.

La decisión final puede ser absolutoria o de condena; en el caso de ser absolutoria, el efecto es declarativo,

pero en el caso de ser condenatoria puede tener dos efectos:

**Efectos constitutivos sobre la sanción impuesta al servidor público

En este caso se determinará la pena, se aplicará y se comunicará a la Cámara a la que pertenezca el acusado,

salvo que fuere la misma que hubiese dictado la declaración o resolución; a la Suprema Corte si se tratase de

alguno de los integrantes del Poder Judicial Federal y en todo caso al Ejecutivo para su conocimiento y efectos

legales, y para su publicación en el Diario Oficial de la Federación.

O bien puede tener:

** Efectos declarativos respecto de los servidores públicos de las Entidades Federativas.

En este caso, si el servidor público es responsable, la resolución emitida por el Senado tendrá efectos

declarativos, toda vez que será comunicada a la legislatura local para que proceda como corresponda, esto es,

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 106

el Senado no dicta ninguna sentencia sino que solo declara la responsabilidad correspondiente, misma que

será evaluada por el Congreso local de que se trate. Atento a lo dispuesto por el artículo 129 de la Constitución

del Estado de Puebla, cuando el Congreso del Estado reciba la resolución del Senado a que se refieren los

artículos 110 segundo párrafo (juicio político) y 111 párrafo quinto (responsabilidad penal) de la Constitución

Federal, procederá a separar de sus funciones al acusado y a consignarlo a la autoridad competente; facultad

que posee en razón del carácter del servidor público (local), pero que puede estimarse opuesta a un sistema

federal, ya que se le permite al Congreso del Estado (órgano local) que valorice causales de procedencia

(juicio político) de naturaleza federal (como son las violaciones graves a la Constitución Federal y leyes que de

ella emanen, así como por el manejo indebido de fondos y recursos federales); sin embargo es precisamente en

defensa del sistema federal que se da tal facultad al Congreso local, toda vez que al condicionarse la sanción a

la resolución de este órgano legislativo local, se evita que la Federación cuente con un instrumento para

deshacerse injustificadamente de funcionarios de alguna Entidad Federativa.

De conformidad a lo dispuesto por la Constitución Local, es ilógico que el Congreso local consigne al servidor

público a la autoridad competente, pues se trata de cuestiones políticas que deberían ser sancionadas por el

mismo órgano político (Congreso local), tal como sucede a nivel federal.

La Constitución Federal, en su artículo 110 párrafo tercero, en relación con el 8 de la Ley Federal de

Responsabilidades disponen que las sanciones a imponerse por el Senado, en virtud de una resolución

condenatoria dictada en juicio político.

En nuestra realidad, el escaso uso del juicio político es consecuencia de la debilidad de los órganos del Poder

legislativo, que a su vez ha configurado el sistema denominado Presidencialismo, además de la influencia que

sobre él ha ejercido el sistema político mexicano, caracterizado por la dominación de un partido. Sin embargo,

aún en el sistema constitucional norteamericano, en el que existe alternancia en el poder, el impeachment ha

sido puesto en funcionamiento en muy pocas ocasiones, i.e. en el caso del Presidente Johnson 1868.

En México, en la práctica ha operado contra los Gobernadores de los Estados por violaciones a la Constitución

Federal y leyes federales v.g contra los Gobernadores de Tamaulipas y de Jalisco en 1926 o el intento de

fincársele al ahora Gobernador con licencia indefinida del Estado de Guerrero, Rubén Figueroa Alcocer en el

caso de Aguas Blancas ocurrido el 28 de Junio de 1995; caso en el que el Presidente de la República solicito

con fecha de 4 de Marzo de 1996, a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en observancia al artículo 97

párrafo segundo de la Constitución Federal, que investigará sobre los asesinatos ocurridos en el Municipio de

Coyuca, Estado de Guerrero. Órgano que en Pleno concluyó: “Que existió violación grave a las garantías

individuales de los gobernados en los acontecimientos del 28 de Junio de 1995, en el caso de Aguas Blancas y

en los posteriores relacionados con los primeros y que de dicha violación resultan responsables entre otros el

Licenciado Rubén Figueroa Alcocer...”. Resultados que hasta la fecha no han sido suficientes para motivar la

responsabilidad política correspondiente.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 107

Las sanciones son: destitución e inhabilitación de 1-20 años.

4.2.5. LA SEGURIDAD

Articulo 123 Constitucional apartado B fracción XI menciona el derecho que tiene toda persona respecto a su

trabajo, cargo o comisión y a su seguridad social.

Derecho Administrativo II Antología

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5. JUSTICIA ADMINISTRATIVA

5.1 LA SITUACION JURIDICA DEL LOS PARTICULAR FRENTE A LA ADMINISTRACION

INTRODUCCION

La configuración de un sistema de derecho administrativo en un país y en un momento histórico determinados,

sólo puede lograrse conociendo a fondo cuáles son los derechos y garantías de que gozan los administrados

frente a la actuación del poder público.

Ver hasta que punto es real y no sólo aparente el sistema organizado para la protección contra la arbitrariedad

de las autoridades, es llegar a conocer si el Estado está sometido al derecho o si por el contrario, no es sino

una ilusión inspirada por los gobernantes para dar una apariencia de legalidad a sus excesos y a sus atropellos.

5.1.1. DERECHOS. CONCEPTO Y CLASIFICACION.

CONCEPTO: Poder de exigir una prestación (relacionada con el Derecho público)

CLASIFICACION:

Derechos públicos en razón de su contenido, es decir, tomando en cuenta lo que por medio de ellos puede ser

exigido.

a) Derechos de libertad (del hombre y libertades individuales)

b) Derechos sociales

c) Derechos políticos

d) Derechos administrativos

a) Constituyen la esfera de libertad que se encuentra jurídicamente protegida por la obligación que el Estado se

impone de abstenerse de ejecutar cualquier acto que la obstruya.

La libertad por sí sola no constituye un derecho, para que éste exista es necesario que el individuo tenga el

poder de exigir su respeto.

b) En virtud de los cuales se reciben del Estado, prestaciones o beneficios creados a favor de clases sociales

que se encuentran en condiciones desfavorables en la lucha económica, y que protegen y dan seguridad al

individuo en sus relaciones de trabajo y en su situación económica, física, intelectual y moral.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 109

c) Como poderes de los individuos, en su carácter de miembros del Estado con una calidad especial, la de

ciudadanos, para intervenir en las funciones públicas o para participar en la formación de la voluntad del

Estado, bien sea contribuyendo a la creación de los órganos de éste o bien fungiendo como titulares de dichos

órganos.

El artículo 35 de la Constitucional Federal establece son prerrogativas del ciudadano:

- Votar en las elecciones populares

- Poder ser votado para los cargos de elección popular.

- Asociarse para tratar asuntos políticos del país

- Ejercer en toda clase de negocios el derecho de petición.

a) Poder exigir del Estado las prestaciones establecidas por las leyes.

Por ejemplo:

- Sueldo

- Pensión

- Otorgamiento de permisos

- Goce de los servicios públicos establecidos por la administración.

Son demandas del servidor público que se elevan a la categoría de derechos.

5.1.2. OBLIGACIONES, CONCEPTO Y CLASIFICACION.

LA NATURALEZA DE LAS OBLIGACIONES

Es obligación pública el deber impuesto a los particulares por la ley o por un acto especial, de la autoridad, de

ejecutar determinadas prestaciones positivas o negativas. Esta obligación se distingue de la civil por la

diversidad del régimen jurídico a que está sujeta, pues en virtud de su conexión con las atribuciones del Estado,

las normas que le son aplicables son normas de derecho público, es decir, normas diversas de las que se

destinan a regular las relaciones de la vida privada.

Por RAZON de su ORIGEN, las obligaciones públicas pueden ser:

A) Impuestas directamente por la ley

B) Y las que derivan de un acto jurídico especial.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 110

Clasificación de las obligaciones públicas por razón de su contenido:

A) Obligaciones personales

B) Obligaciones reales (servicio militar, modalidades a la propiedad)

C) Obligaciones positivas (pago de impuestos)

D) Obligaciones negativas (abstención de actos que eviten la libre concurrencia y restricciones en materia de

policía).

OTRA CLASIFICACION

A) Obligaciones de policía en general

B) Obligaciones cívicas y de orden administrativo

C) Obligaciones Políticas.

Obligaciones impuestas por la legislación de policía o legislación preventiva.

A) El poder de policía del Estado, se considera dentro de algunas legislaciones como el conjunto de

atribuciones que a aquél corresponden para promover el orden y bienestar generales por medio de restricciones

y reglamentaciones de los derechos del individuo en forma tal que puedan prevenirse o reducirse las

consecuencias perjudiciales que su disposición en términos absolutos acarrearía para la vida en común.

La Policía debe comprender las medidas necesarias para dar ese mínimo de satisfacción a los intereses

primarios para la existencia en común.

INTERESES:

- Seguridad

- Orden

- Salubridad

Las obligaciones que afectan a las libertades individuales son principalmente restricciones que las limitan para

coordinarlas entre sí y hacer posible la vida en sociedad.

ORDEN PÚBLICO

BIENESTAR PÚBLICO

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 111

B) El artículo 31 constitucional señala son obligaciones de los mexicanos:

Hacer que sus hijos o pupilos menores concurran a escuelas públicas o privadas para obtener la educación

obligatoria y militar.

Asistir en días y horas señaladas por el Ayuntamiento del lugar para recibir instrucción cívica o militar.

Alistarse y servir en la guardia nacional, para asegurar y defender la independencia, el territorio, el honor, los

derechos e intereses de la patria, así como la tranquilidad y el orden interior, y

Contribuir para los gastos públicos de la Federación, Estados, municipios y el DF. de la manera proporcional y

equitativa que fijen las leyes.

Artículo 5° constitucional

Prestar servicios personales: Para los servicios públicos de las armas, de jurados, de cargos concejiles, de los

censos y del servicio social de los profesionistas.

Leyes Secundarias:

Obligaciones de prestar servicios personales

- Cuando se trata de la salubridad pública

- De plagas que afecten a la agricultura y a la ganadería

- Construcción de ciertas obras públicas

A) Obligaciones políticas.

Particular en su carácter de CIUDADANO

- Inscribirse en el padrón electoral

- Votar en las elecciones populares

- Desempeñar cargos de elección popular

Se refieren a individuos que tienen un vínculo especial con el Estado que son miembros de él con el carácter de

CIUDADANOS.

También son Derechos Políticos

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 112

5.1.3. RESPONSABILIDADES. CONCEPTO Y CLASIFICACION

Dentro de la categoría de los derechos administrativos quedan comprendidos los derechos de los particulares

frente a la administración.

La doctrina los ha separado en tres grupos:

1° Derechos de los administrados a la reparación de los daños causados por el funcionamiento de la

administración.

2° Derecho de los administrados al funcionamiento de la administración y a las prestaciones de los servicios

administrativos.

3° Derechos de los administrados a la legalidad de los actos de la administración.

EL DERECHO A LA REPARACIÓN DE LOS DAÑOS CAUSADOS POR LA ADMINISTRACION

En nuestro régimen legal, no está aceptado francamente el PRINCIPIO DE LA RESPONSABILIDAD DEL

ESTADO.

Dos ideas fundamentales han sido en nuestro país un OBSTACULO para la admisión del principio de

responsabilidad a que nos referimos.

Por una parte:

a) El concepto de soberanía (derecho de una voluntad jurídicamente superior de actuar sin más limitaciones

que las que el propio Estado se impone, impide considerar al Estado como responsable cuando se mantiene

dentro de dichas limitaciones

Por otra parte:

b) La idea de que el Estado sólo puede actuar dentro de los límites legales, es también un motivo para excluir el

principio de la responsabilidad, pues ésta se basa normalmente en la ilicitud de la actuación dañosa.

Se ha considerado dentro de nuestro sistema, que si alguna actuación pública se desarrolla fuera de los límites

legales, no es ya el Estado el que actúa sino el funcionario personalmente, y por tanto, sobre él debe recaer la

responsabilidad.

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Universidad de la Sierra A. C. 113

Así pues, (en México) se puede asentar que el principio que rige en México, es el de la irresponsabilidad del

Estado y que sólo excepcionalmente y por virtud de una ley expresa, puede el particular obtener una

indemnización del Estado. Entre los casos de excepción, cabe citar:

Por ejemplo: Expropiación (compensación),

- Daños causados por la Revolución en términos de ley.

- Responsabilidad subsidiaria del Estado (artículo 1927 Código Civil Federal)

Según este precepto “El Estado tiene obligación de responder de los daños causados por sus funcionarios en el

ejercicio de las funciones que les están encomendadas”.

Esta responsabilidad es subsidiaria y sólo podrá hacerse efectiva contra el Estado cuando el funcionario

directamente responsable no tenga bienes o los que tenga no sean suficientes para responder del daño

causado.

Responsabilidad principal (directa) Funcionario

Responsabilidad subsidiaria El Estado (Funcionario no bienes o no son suficientes éstos).

Este caso de excepción al principio de la irresponsabilidad del Estado, viene a demostrar, que, de acuerdo con

las bases de nuestra legislación, el Estado NO ASUME una obligación directa de indemnizar los daños

causados por sus funcionarios sino que debe exigirse previamente a éstos en lo personal, la REPARACION

PROCEDENTE. Es decir, se trata de un caso de responsabilidad subsidiaria del Estado.

Además, esa responsabilidad subsidiaria parece no estar establecida más que para el caso de que exista

CULPA de parte del funcionario, puesto que el precepto (1928 Código Civil) se encuentra dentro del capítulo del

Código Civil relativo “a las obligaciones que nacen de los actos ilícitos”.

Ahora bien, de acuerdo con la doctrina que ha inspirado al Código Civil, la ilicitud de los actos consiste en que

ellos se produzcan “sin derecho, intencionalmente o por imprudencia o negligencia” y sólo quedan exceptuados,

por disposición expresa, los casos de “abuso de derecho” a que se refiere el artículo 1912 y las de riesgo

consignados en los artículos 1913 y 1914 del citado código.

Dentro del mismo criterio, la Ley de Responsabilidades de los funcionarios y empleados de la Federación y del

DF. establece en su artículo 5, el derecho de los particulares para exigir ante los Tribunales competentes la

RESPONSABILIDAD PECUNIARIA que hubiese contraído el funcionario o empleado, por daños y perjuicios, al

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Universidad de la Sierra A. C. 114

cometer los hechos u omisiones que se le imputen, aún en el caso de que se absuelva al inculpado en el

procedimiento penal.

Sin embargo, parece que la Ley de 31 de diciembre de 1941 denominada Ley de depuración de créditos a

cargo del Gobierno Federal prescribe ya un principio de admisión de la responsabilidad directa del Estado al

disponer que “cuando la reclamación se funde en actos y omisiones de los que conforme a derecho dan origen

a la RESPONSABILIDAD CIVIL DEL ESTADO, no sería preciso demandar previamente al funcionario o (s)

responsables, siempre que tales actos y omisiones impliquen una culpa en el funcionamiento de los servicios

públicos”.

EL SISTEMA LEGAL MEXICANO EN MATERIA DE RESPONSABILIDAD DEL ESTADO.

La situación que se acaba de exponer hace pensar fundadamente que la legislación mexicana se ha mantenido

en un estado de atraso tal que bien puede decirse que no se ha logrado en nuestro país un verdadero Estado

de Derecho, pues como se ha sostenido “un sistema de responsabilidad de la administración es esencial a la

existencia del Estado de Derecho”

Y es que, en efecto, en todos los Estados Modernos han sido repudiados los principios sobre los que

tradicionalmente se fundaba la irresponsabilidad del Estado, no sólo porque esos principios no resisten un

análisis serio, sino porque es necesario adoptar alguna medida frente al desarrollo incontenible de la vida

estatal que ha creado múltiples riesgos que amenazan los derechos de los particulares con los cuales

frecuentemente se encuentra en contacto.

Es evidente que si bien es cierto que el concepto de soberanía es incompatible con la sumisión a una voluntad

extraña o a limitaciones o restricciones que fueran impuestas por un poder exterior al Estado mismo, no hay

ningún inconveniente de principio en que el propio Estado, auto limitándose, se imponga restricciones y

obligaciones frente a los particulares y que se someta a las reglas de derecho que él crea por su propia

voluntad.

Es también evidente que la Responsabilidad Subsidiaria del Estado respecto de la de sus funcionarios o

empleados, por estimar que el propio Estado debe responder en forma indirecta como lo hacen los patrones

respecto de sus dependientes, no puede sostenerse si se tiene en cuenta que el Estado, sólo manifiesta su

actividad por medio de las personas físicas que desempeñan las funciones públicas y que, consecuentemente

fuera de la falta personal del empleado, aquella que pueda destacarse claramente de su actuación como titular

de un órgano público, cualquiera otra actuación que cause un daño no puede dejar de imputarse al propio

Estado, considerándola como un hecho propio que genera a su cargo una responsabilidad directa, sobre todo

cuando se trata de una irregularidad en el funcionamiento del servicio o de un daño causado por el

funcionamiento normal del propio servicio.

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Además, el establecimiento de una RESPONSABILIDAD DIRECTA DEL EMPLEADO Y SUBSIDIARIA DEL

ESTADO hace nugatoria la garantía para los administrados, pues aparte de que la complejidad de la

organización administrativa con la intervención de varios funcionarios o empleados en el mismo acto hace casi

imposible determinar quien de ellos es el culpable, existe la circunstancia de que normalmente los empleados

públicos son insolventes, razón por la cual se ha criticado el sistema como una supervivencia de las épocas

remotas en el “el Gobierno estaba en manos de personas importantes, independientes y ricas”, a todo lo cual

debe agregarse que el sistema tienda a producir una inhibición a los empleados por temor a incurrir en

responsabilidad.

Por último, establecer la responsabilidad directa del Estado (como lo hace la Ley de Depuración de créditos de

1941) cuando conforme a derecho se dé origen a la responsabilidad civil del estado, siempre que haya culpa en

el funcionamiento de los servicios públicos, aunque indudablemente es un paso hacia adelante, coloca al

Derecho Público en una situación de atraso respecto al Derecho Civil que reconoce la responsabilidad por

riesgo creado. Por tanto, seguir conservando para el Estado un régimen de tan limitada responsabilidad

prácticamente equivale a una inmunidad en su actuación.

Destruidos ya en una forma admitida universalmente los principios que con pretensión de dogmas trataron de

explicar la imposibilidad de que el Estado se hiciera responsable cuando realiza sus funciones soberanas,

demostrada la insuficiencia de la responsabilidad directa del funcionario y la directa del Estado, sólo para los

casos de culpa en el funcionamiento de los servicios públicos, y teniendo en cuenta que el Estado Moderno ha

invadido, todos los campos de la vida social, creando con su actuación y con los servicios que ha tenido

necesidad de establecer una multiplicidad de riesgos, se hace indispensable estructurar un régimen de

responsabilidad que la mismo tiempo que garantice los patrimonios privados contra una carga no proporcional

ni equitativa que resulte de la actuación administrativa, constituya un medio de obligar a la administración a

sujetarse estrictamente a la ley, formando así otra garantía del regular funcionamiento del poder público.

Como se ha considerado que la responsabilidad del Estado NO PUEDE ser regida por los principios

tradicionales del Derecho Civil, en donde la insuficiencia de su teoría fundamental de la culpa, ha obligado

aunque sea en forma casuística a recurrir a la teoría del riesgo, la doctrina del Derecho Público ha tratado de

construir una teoría general que preste un fundamento sólido a la obligación del Estado de resarcir o indemnizar

a los particulares por los daños que pueden sufrir en su patrimonio con motivo de la actuación del poder

público.

Sin duda una de las teorías que ha alcanzado más difusión, es la que adopta como base el principio de la

igualdad de los individuos ante las cargas públicas, principio conforme al cual si una actuación gubernamental

causa un daño a un individuo sobre quien se hace recaer todo el peso de dicha actuación, la ruptura que así se

produce de la igualdad respecto de los demás administrados, obliga al restablecimiento de ella, transfiriendo la

carga del daño al patrimonio público alimentado por la contribución de todos los administrados.

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Ciertamente esa teoría ha sido vigorosamente impugnada y se han formulado otras, como las de “riesgo social”

o el concepto de “lesión” del patrimonio, independientemente de la actitud subjetiva del agente causante del

daño.

Creemos oportuno hacer referencia a una de las más recientes construcciones que se han hecho al respecto

dentro de la legislación positiva. Según datos tomados de la obra de García Enterría, en su país se ha hecho

reposar la responsabilidad del Estado en el concepto de “lesión” es como distinto del de perjuicio que es de

carácter económico material, en tanto que el de lesión es un concepto jurídico.

Por su parte, Garrido Falla sostiene que debe hacerse una separación entre el instituto de la responsabilidad y

la teoría de la indemnización. La primera surge como consecuencia de la actividad ilícita administrativa. La

segunda tiene lugar en el campo de la actividad lícita de la administración.

Por este autor, la tesis de que la responsabilidad se da siempre que alguien soporta un hecho que no está

jurídicamente obligado a soportar, en realidad excluye la obligación de indemnizar los perjuicios que causa la

actividad lícita de la administración, pues sería absurdo que siendo lícita el perjudicado no estuviera obligado a

soportarla.

Gabino Fraga considera que cada día se hace más urgente organizar un sistema de responsabilidad del

Estado, existiendo ya una gran experiencia en otros países que, con las debidas adaptaciones y limitaciones

puede ser una guía para determinar los casos de responsabilidad por falta o sin falta personal del empleado, los

de responsabilidad por falta o sin falta en el servicio y la responsabilidad por riesgos que crea el funcionamiento

normal de la administración.

EL DERECHO DE LOS PARTICULARES AL FUNCIONAMIENTO DE LA ADMINISTRACION Y A LAS

PRESTACIONES DE LOS SERVICIOS PUBLICOS ADMINISTRATIVOS.

Las variantes que impone la legislación positiva obligan a examinar los términos mismos de la ley y el espíritu

que la inspiró, para poder precisar en cada caso la existencia y el alcance del derecho que al administrado se le

reconozca.

Así, desde luego, deberemos poner a un lado las situaciones que se originan cuando la ley impone a la

administración una actividad destinada a satisfacer el interés general y que sólo indirectamente, por acción

refleja, satisface un interés individual. En esos casos, de acuerdo con lo que hemos expresado, el particular no

puede exigir el cumplimiento de la actividad de que se trata, tiene sólo un interés pero no un derecho.

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Universidad de la Sierra A. C. 117

Lo mismo ocurre cuando, aunque la actividad tienda a satisfacer intereses de los individuos considerados

aisladamente, la ley reserva a la administración facultad discrecional para apreciar la oportunidad de la medida

o su alcance y contenido.

Sin embargo, en esos dos casos, aunque no puede hablarse de un derecho subjetivo veremos más adelante

que el INTERES DEL PARTICULAR puede dar motivo para el ejercicio de ciertos medios legales, cuya finalidad

viene a ser la de que la administración respete la ley o sea el derecho objetivo.

Por el momento habremos de referirnos principalmente a aquellos casos en que, se puede hablar de un

verdadero derecho a favor de los individuos.

Cuando la ley previene actividades de la administración directamente encaminadas a satisfacer intereses

particulares, como cuando se establecen los servicios de correos y telégrafos, cuando se crea el servicio de

patentes y marcas, cuando se determina que la administración otorgará concesiones a los particulares para la

explotación de bienes de propiedad nacional, surge la cuestión de determinar cual es el carácter jurídico de las

relaciones de los particulares con la administración.

Para precisarlo hay que distinguir dos momentos:

1) Antes de que el particular haya solicitado la presentación.

2) Cuando el particular la solicita.

En el primer momento, el particular no tiene relación especial con la administración, tiene sí, un poder legal de

exigir la prestación, es decir, tiene una situación jurídica.

Como esta situación jurídica no tiene un carácter individualizado sino que se encuentra establecida en una

forma abstracta e impersonal, constituye propiamente una SITUACION JURIDICA GENERAL.

En el segundo momento, o sea cuando el particular solicita la prestación deben distinguirse dos posibilidades:

a) La administración se rehúsa a cumplir la prestación solicitada: Si la administración niega lo solicitado, y dado

que estamos suponiendo el caso de que ella no goce de facultades discrecionales sino que tenga su

competencia ligada por la ley, surge inmediatamente la sanción del poder de exigir, es decir, la acción para

hacer efectivo el derecho. La naturaleza de esa acción será objeto de estudio por separado.

Derecho Administrativo II Antología

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b) La administración accede a la solicitud: Cuando la administración accede a la solicitud, entonces, interesa

conocer en que situación jurídica se viene a colocar el particular. Sobre esto existen diversas opiniones:

1.- Que corresponde a la tendencia a encajar los fenómenos de la vida administrativa dentro de las instituciones

de Derecho Civil y otra,

2.- Que explica la situación jurídica de que se trata con criterios que reposan sobre la especialidad del Derecho

que rige a la administración.

Dentro de la primera opinión se considera que el particular cuando solicita la actividad prevista por la ley,

cuando realiza los actos que ésta determina para que un servicio público funcione a su favor, está celebrando

con la administración un CONTRATO. Que, por consecuencia, su situación jurídica es una situación jurídica

individual, una situación contractual. La base de que parte esta opinión es la de que, cuando el particular hace

su solicitud y la administración accede a ella, se forma un concurso de voluntades. Se reconoce, además, que

aun cuando los términos de los derechos y obligaciones no se fijan por ese concurso de voluntades, sino que el

Estado unilateralmente los señala, esto no significa otra cosa sino que el contrato es uno de los llamados

contratos de adhesión.

En contra de estas ideas se han esgrimido los siguientes argumentos:

(CRITICA)

1.- Que no siempre que hay concurso de voluntades existe un contrato.

Argumento aceptado por Fraga.

2.- Fundamentalmente, en todo contrato existe, por lo menos, la posibilidad legal de que las partes discutan

libremente las cláusulas que lo integran, lo cual no ocurre entre el particular y la administración, pues ni el uno

ni la otra pueden modificar por un acto de voluntad los derechos y/o las obligaciones que la ley establece.

3.- Y aun admitiendo que el contrato de adhesión tiene lugar cuando existen circunstancias de hecho que dan a

una de las partes una tal superioridad sobre la otra que la prive de la posibilidad legal de discutir las cláusulas

del contrato, aun admitiendo eso, no es posible considerar que en el caso a estudio, exista un contrato de

adhesión, porque éste supone siempre que una de las partes es la que fija las cláusulas del mismo. Ahora

bien, en un sistema constitucional como el nuestro, tanto la administración como el particular están sometidos a

la ley que regularmente emana de otro de los poderes del Estado.

Descartando, pues, por esas razones la tesis civilista, nos encontramos en su lugar con las opiniones basadas

en la naturaleza especial de las instituciones del derecho público.

Derecho Administrativo II Antología

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Dentro de ellas se considera que cuando el particular cumple con los requisitos que la ley establece para

obtener de la administración la prestación que aquella determina, tal cumplimiento es, por sí solo, la condición

para que al caso individual se aplique la situación jurídica general creada por dicha ley, o bien la condición para

que la administración realice un acto especial que es el que coloca al individuo en esa situación jurídica general

o en una situación jurídica individual, pero que en este último caso se opera por la voluntad unilateral de la

administración.

Así, por ejemplo:

- Cuando un particular llena los requisitos que la ley respectiva establece para el funcionamiento del servicio

postal, adquiere por ese motivo los derechos y obligaciones que la propia ley establece en favor, y a cargo de

los remitentes de correspondencia o de los otros usuarios del servicio, según el caso. Aquí, como se ve, no hay

acto especial de la administración que precede a la prestación del servicio.

- Cuando el particular solicita la admisión a un establecimiento de enseñanza sostenido por el Estado, la

administración tiene previamente a la prestación del servicio que realizar el acto jurídico de la admisión, que es

el que condiciona la aplicación al individuo de la norma general que rige al establecimiento.

- Cuando el particular solicita la declaración de improcedencia de una multa impuesta por la autoridad

administrativa fundándose en un motivo legal que obliga a decretar dicha improcedencia y ésta le es concedida,

entonces, por virtud del acto especial que así lo declare, se crea una situación jurídica individual.

Se ve, por lo anterior, que la SOLUCION que corresponde a la cuestión de determinar la situación jurídica del

particular no puede ser dada en términos absolutos, sino que dependerá de las circunstancias de cada caso,

teniendo que variar cuando se demanda de la administración, la ejecución de un acto jurídico, de la naturaleza

especial del acto de que se trate (permiso, concesión, etc.)

Después de que el particular ha satisfecho los requisitos de ley u obtenido la realización del acto que ha

solicitado, su situación jurídica eventual se transforma en una situación jurídica efectiva o, como la denomina la

misma doctrina civilista “una situación jurídica concreta”.

La SITUACION JURIDICA CONCRETA es una manera de ser derivada para una persona determinada de un

acto jurídico o de un hecho jurídico que ha puesto en juego a favor o en su contra las reglas de una institución

jurídica y le ha conferido al propio tiempo las ventajas y las obligaciones inherentes al funcionamiento de una

institución.

NOTA: La situación jurídica concreta es la manera de ser de cada uno con relación a una ley determinada,

de otro modo dicho, mientras la situación jurídica abstracta es una simple manera de ser teórica, una vocación

podría decirse a beneficiar eventualmente de una ley, la situación jurídica concreta es una realidad positiva.

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EL DERECHO DE LOS ADMINISTRADOS A LA LEGALIDAD DE LOS ACTOS DE LA ADMINISTRACION

(V. Protección jurídica de los administrados frente a la administración)

5.2. MEDIOS LEGALES DE DEFENSA DEL PARTICULAR.

El derecho a la legalidad

Al hacer el estudio de los derechos de orden administrativo de que disfrutan los particulares señalamos como

una categoría de ellos, los derechos que tienen los administrados a la LEGALIDAD de dichos actos de la

administración, es decir, los particulares tienen el poder de exigir a la administración que se sujete en su

funcionamiento a las NORMAS LEGALES establecidas al efecto, y que, en consecuencia, los actos que realice

se verifiquen por los órganos competentes, de acuerdo con las formalidades legales, por los motivos que fijen

las leyes, con el contenido que éstas señalen y persiguiendo el fin que las mismas indiquen.

El derecho a la legalidad se descompone en una serie de derechos de los que deben gozar los administrados, a

saber:

- Derecho a la competencia.

- Derecho a la forma.

- Derecho al motivo

- Derecho al objeto

- Derecho al fin prescrito por la ley

Estos derechos del administrado necesitan protegerse en forma de dar a su titular los medios legales para

obtener la reparación debida en caso de violación, es decir, para lograr el retiro, la reforma o la anulación del

acto lesivo.

Para conseguir ese propósito existe una gran diversidad de sistemas en los Estados contemporáneos.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 121

MEDIOS LEGALES DE DEFENSA DEL PARTICULAR

Medios indirectos. Consisten en las garantías que presta un buen régimen de organización administrativa. La

regularidad de la marcha de ésta, su eficiencia, control de autoridad superior / inferior. La autotutela que la

administración desarrolla en su propio seno.

Los medios directos. Están destinados en forma inmediata a satisfacer el interés privado, de manera tal, que la

autoridad ante la cual se hacen valer, está legalmente obligada a intervenir y a examinar nuevamente, en

cuanto a su legalidad o a su oportunidad, la actuación de que el particular se queja.

Los medios directos que la ley establece para la protección de los derechos de los particulares se pueden

clasificar según las autoridades que deben intervenir:

- En remedios o recursos administrativos y en

- Recursos o acciones jurisdiccionales:

1.- Ante los tribunales administrativos, ubicados en la esfera del Poder ejecutivo y

2.- Ante los tribunales comunes pertenecientes al Poder Judicial Federal.

INDIRECTOS: Es la auto tutela que la administración desarrolla en su seno

DIRECTOS:

A) Recursos Administrativos.

No constituye un acto jurisdiccional:

PORQUE:

1) No hay una autoridad distinta de las partes que resuelva la controversia

2) Es una revisión que de sus actos hace la propia administración.

Revocación

Revisión ante autoridad superior

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Oposición o inconformidad

Reconsideración

Finalidad: Revisar la ilegalidad del acto administrativo.

B) Recursos o acciones jurisdiccionales.

1) Ante Tribunales Administrativos

El Contencioso Admvo.

(Por ejemplo Tribunal Federal de Justicia Administrativa y Fiscal, Tribunales Agrarios, Tribunal Federal de

Conciliación y Arbitraje, etc.)

2) Ante Tribunales Judiciales (Comunes)

El particular frente a la administración puede y debe hacer valer los siguientes medios de defensa legal:

a) Agotar el recurso administrativo, según sea optativo u obligatorio

b) Iniciar juicio de nulidad ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo

c) Recurrir a las acciones jurisdiccionales ante los Tribunales Judiciales o Comunes, como el amparo u otros

recursos.

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5.2.1. RECURSO ADMINISTRATIVO

A) CONCEPTO Y ELEMENTOS.

Constituye un medio legal de que dispone el particular, afectado en sus derechos o intereses por un acto

administrativo determinado, para obtener en los términos legales de la autoridad administrativa una revisión del

propio acto, a fin de que dicha autoridad los revoque, lo anule o lo reforme en caso de encontrar comprobada la

ilegalidad o la inoportunidad del mismo.

ELEMENTOS O CARACTERISTICAS

1. La existencia de una resolución administrativa que afecte un derecho o un interés legítimo del particular

recurrente.

2. La fijación en la ley de las autoridades administrativas ante quienes debe presentarse.

3. La fijación de un plazo dentro del cual deba interponerse el recurso (que puede varia , generalmente es de

10, 15 o 45 días)

4. Requisitos de forma y elementos que deben incluirse en el escrito de interposición del recurso.

5. La fijación de un procedimiento para la tramitación del recurso, especificación de pruebas, etc...

6. La obligación de la autoridad revisora de dictar nueva resolución en cuanto al fondo.

EFECTOS

Doctrinalmente y por regla general, la interposición del recurso no suspende la ejecución del acto reclamado.

Sin embargo, hay casos por leyes en los que si se suspende la ejecución, bajo determinados requisitos a

cumplirse.

No se suspende la ejecución del acto reclamado porqué:

Según el Lic. Antonio Carrillo Flores “es un supuesto del cual ha de partirse siempre, el que, entretanto no se

demuestre lo contrario, haya que PRESUMIR que los actos de la administración son legítimos y que han sido

emitidos buscando la tutela de un interés general. Como el recurso administrativo tiende a hacer prevalecer un

interés privado que a juicio del impugnador del acto ha sido ilegalmente lesionado, no puede sostenerse en

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 124

general el efecto suspensivo del recurso... Tampoco, claro está, puede enunciarse el principio opuesto: que

nunca deba suspenderse la ejecución del acto recurrido. La cuestión debe, por ello, ser regulada en el derecho

objetivo...”

EJEMPLOS de recursos administrativos, en cuanto a denominaciones:

Revocación

Revisión

Oposición e inconformidad

Reconsideración

AUTORIDAD ANTE QUIEN SE INTERPONE

La interposición del recurso puede ser ante la misma autoridad que dictó el acto, ante la autoridad jerárquica

superior o bien ante el órgano distinto con facultades que la ley le otorga. En ocasiones por ley

correspondiente, la misma autoridad que conoce del recurso lo resuelve, en otras, es una la autoridad ante

quien se presenta el recurso y es una autoridad diferente a ésta la que lo resuelve.

FORMA DE INTERPOSICION DEL RECURSO

La interposición del recurso puede ser optativa u obligatoria. Si su interposición es obligatoria será necesario

agotarlo para pasar a la siguiente vía jurisdiccional, en el caso de ser optativo el particular no tiene obligación

de interponerlo y puede pasar al juicio correspondiente.

B) REGIMEN LEGAL Y JURISPRUDENCIAL

Al respecto es necesario, analice las diversas leyes administrativas que regulan recurso administrativo en

relación con los artículos primero transitorio, 1° y 83 y siguientes de la Ley Federal de Procedimiento

Administrativo, bajo los siguientes aspectos, nombre del recurso, tiempo para interponerlo, ante quien se

presente y quien lo resuelve, forma de interposición y los efectos que causa.

Por lo que hace a la jurisprudencia realice una búsqueda a los anales de la jurisprudencia respecto de los

recursos administrativos.

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NATURALEZA DEL ACTO QUE DECIDE EL RECURSO

El estudio de la naturaleza del recurso administrativo hace surgir la cuestión de si la autoridad administrativa

que lo resuelve ejecuta al hacerlo un acto jurisdiccional o un acto administrativo.

En pro de la primera solución podrían señalarse las siguientes RAZONES:

1) Que existe una controversia entre el particular afectado y la administración que ha realizado el acto, de tal

manera que esta última tiene que poner fin a esa controversia, decidiendo si el acto recurrido constituye o no

una violación a la ley.

2) Que el recurso está organizado en las leyes como un procedimiento semejante al procedimiento judicial,

pues en él se establecen formalidades especiales para iniciarlo, términos de prueba, audiencia de alegatos,

etc.

3) Que en varias leyes se establece que el particular afectado con una resolución administrativa puede optar,

por reclamarla, entre el procedimiento administrativo y el procedimiento judicial, lo cual indica que ellos son

equivalentes, conclusión que se corrobora con la disposición que esas mismas leyes contienen respecto a que

elegida una vía no puede recurrirse a la otra.

La opinión contraria, que sostiene que el recurso no implica una función jurisdiccional sino simplemente

administrativa, trae también un buen número de razones a su favor.

1) Afirma que en el recurso administrativo no existe una verdadera controversia, pues para ello sería

indispensable que las pretensiones de la administración fueran contradictorias con las del particular.

Ahora bien, esto no sucede, pues mientras no se haya agotado la vía administrativa, dentro de la cual encaja el

recurso, no podrá afirmarse que la administración sostiene un punto de controversia con el particular.

García Oviedo indica que los “Recursos administrativos” (directos o de alzada) no constituyen verdaderos

juicios. Son meras revisiones que de sus actos efectúa la propia administración para deshacer sus errores si

los hubiere. Falta en ellos la verdadera controversia, la discusión. El particular reclama, aduciendo en verdad,

los fundamentos legales pertinentes. La administración penetra asimismo, en el fondo de la reclamación y

resuelve según derecho, más lo proveído por ella es resultado inmediato de una mera labor de revisión, en que

ha faltado la controversia ordenada y profunda del juicio. De aquí su insignificancia.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 126

1) Sostiene que la similitud del procedimiento del recurso administrativo con el procedimiento judicial, no es

bastante para concluir que por medio de aquel se realiza una función jurisdiccional, pues las formalidades no

trascienden a la naturaleza jurídica de la función.

2) Que la ley establezca como paralelos el recurso administrativo y el judicial y que declare que se pierde uno si

se elige el otro, no autoriza para concluir que ambos tengan idéntica naturaleza ya que en el recurso

administrativo no existe propiamente un órgano independiente ante el que se dirima la controversia.

Gabino Fraga considera más fundados los argumentos aducidos por la que sostiene que el recurso

administrativo NO CONSTITUYE UN VERDADERO ACTO JURISDICCIONAL, sobre todo si se considera que

no hay una autoridad distinta de las partes que resuelva la controversia.

5.2.2. ACCIONES JURISDICCIONALES

La insuficiencia del control administrativo. Los sistemas de control jurisdiccional.

El control que la administración ejerce sobre sus propios actos, con motivo de los recursos administrativos, es

insuficiente para la debida protección de los derechos de los administrados, puesto que NO existe la

imparcialidad necesaria para llegar a considerar el propio acto o el acto del inferior como ilegal y para dejarlo,

en consecuencia, sin efecto, y más cuando en el seno de la administración los órganos de la misma proceden

normalmente con criterios uniformes.

Por esta razón las legislaciones de los diversos países, se han visto en la necesidad de establecer un control

jurisdiccional de los actos de la administración, considerando que debe haber órganos diferentes de ésta e

independientes de ella que dentro de formas tutelares de procedimiento, puedan juzgar y decidir con autoridad

de cosa juzgada, las controversias que se susciten entre los particulares y la administración.

No existe uniformidad en las legislaciones respecto de los órganos que deben controlar jurisdiccionalmente la

actuación administrativa, pues mientras en unas apenas existe una diferenciación en el seno mismo de la

administración, en otras se encarga el control de que se trata a los tribunales ordinarios que integran el poder

judicial, en tanto que finalmente, en las demás dicho control pertenece a tribunales independientes del poder

judicial pero también desvinculados de la administración activa, o sean los tribunales administrativos.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 127

5.3. EL CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO

El establecimiento del control jurisdiccional de los actos de la administración, ha dado lugar al nacimiento de

una noción de extraordinaria importancia: La del CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO.

El Desde el punto de vista

Contencioso * Formal

Administrativo * Material

Formal. Se define el contencioso administrativo en razón de los órganos competentes para conocer las

controversias que provoca la actuación administrativa, cuando dichos órganos son Tribunales especializados

llamados: TRIBUNALES ADMINISTRATIVOS.

1° Parte del órgano que decide la controversia.

Material. Existe el contencioso administrativo, cuando haya una controversia entre un particular afectado en sus

derechos y la administración, con motivo de un acto de esta última.

2° Toma en cuanta la materia dicha controversia.

De tal modo que, desde este último punto de vista, puede llegar a hablarse de contencioso Administrativo aún

en el caso de que la contienda se someta por la ley al conocimiento del Poder Judicial Ordinario.

EL SISTEMA DE LOS TRIBUNALES ADMINISTRATIVOS

Llamado también de la JUSTICIA ADMINISTRATIVA consiste en la existencia de una jerarquía de tribunales

completamente distinta de la que forma el Poder Judicial.

El contencioso-administrativo (Material)

Surge cuando hay controversia con motivo de un acto administrativo entre un particular afectado por él, y la

administración que lo ha realizado. Por tanto, se necesita examinar el acto que provoca la contención y las

partes que en ella figuran. Pues bien el acto que provoca la controversia debe ser un acto administrativo.

La afirmación procedente pudiera estimarse como de tal evidencia que no pareciera ni necesario asentarla. Sin

embargo, como en la práctica se incurre en serias confusiones, considerando contencioso-administrativa una

controversia por el simple hecho de que la administración intervenga para resolverla, hemos creído necesario

llamar la atención sobre este primer elemento.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 128

No es difícil encontrar en las mismas sentencias de los tribunales, la afirmación de que el procedimiento de

oposición que reglamentan las leyes de tierras, aguas y minas constituye un CONTENCIOSO-

ADMINISTRATIVO, ni tampoco es extraño encontrar la afirmación de que los procedimientos sobre dotación y

restitución de tierras tiene aquel carácter, pero si bien se examinan esos casos, se verá que, aunque son

resueltos por órganos de la administración, falta en ellos el acto administrativo que suscite la controversia, pues

en el caso de la oposición se están resolviendo los derechos del opositor y su preferencia frente a los del

solicitante, precisamente antes de que la administración realice el acto.

De la misma manera, en el procedimiento agrario, la administración resuelve una controversia entre el particular

dueño de tierras y los campesinos que las solicitan en la vía de dotación o de restitución, faltando por tanto un

acto administrativo que sea el que provoque la contienda.

El acto administrativo debe reunir caracteres especiales para que pueda ser la BASE DEL CONTENCIOSO-

ADMINISTRATIVO.

En primer término, es indispensable que el acto tenga respecto a la administración, el carácter de definitivo, es

decir, que ya se haya agotado la vía administrativa y que la última autoridad de ese orden haya dictado su

resolución. Cuando nos ocupamos de los recursos administrativos tratamos de demostrar que ellos no

implicaban el ejercicio de una función jurisdiccional, porqué sólo significan una revisión que de sus actos hace

la propia administración para deshacer los errores que hubiere.

Sin embargo, hay una tendencia a considerar que cuando hay un recurso administrativo, el particular puede

optar entre agotarlo o intentar desde luego juicio ante el Tribunal Contencioso-Administrativo.

En segundo término, el acto administrativo debe ser dictado en uso de una facultad de la administración ligada

por las disposiciones de la ley, es decir, que no constituya un acto discrecional de la autoridad.

EL CARÁCTER CON QUE DEBE INTERVENIR LA ADMINISTRACION Y EL PARTICULAR

Pasando ahora al segundo elemento del contencioso-administrativo, debemos examinar el carácter con el cual

figura en él la administración.

La administración puede realizar sus actos bien con el carácter de poder público, bien sujeta a la legislación

común o a la legislación civil especial.

Desde luego, respecto de los primeros parece indudable que forman materia de la contención administrativa.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 129

Respecto de los segundos, creemos que quedan fuera de ella, pues aunque sea la misma administración la que

intervenga, el régimen legal de los actos respectivos tiene soluciones que bastan para proteger los derechos

que con ellos se estimen lesionados sin que necesiten tener la consideración de un régimen especial como lo

es el del contencioso administrativo.

Por último, la otra parte en la contención es el particular que resulta lesionado por el acto administrativo.

Es evidente que cuando hay una lesión de un derecho, existe lo contencioso, pero también, en un régimen de

legalidad debe admitirse que exista cuando hay violación a un interés, siempre que éste sea personal y directo,

pues de otro modo se llegaría hasta la admisión de la “acción popular” como vía legal para remediar las

ilegalidades de la administración, y bien sabido es que esa acción sólo excepcionalmente se otorga en el

estado actual de la legislación positiva.

EL PRINCIPIO DE SEPARACION DE PODERES Y LOS TRIBUNALES ADMINISTRATIVOS

Desde un punto de vista formal, el contencioso administrativo significa, toda controversia suscitada por un acto

de la administración que entra en la competencia de la jurisdicción administrativa. De tal manera que aquí es el

órgano el que da configuración al sistema.

Sin embargo, para el conocimiento del contencioso administrativo material se pueden clasificar en dos grupos:

a) Los sistemas adoptados en las diversas legislaciones:

- El sistema de los tribunales administrativos y

- El sistema de los tribunales ordinarios.

Lo peculiar del caso, es que la adopción de cada una de esos sistemas ha dependido de la interpretación

diversa que se ha dado al mismo principio: EL DE SEPARACION DE PODERES.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 130

5.3.1. EL TRIBUNAL FISCAL DE LA FEDERACIÓN. ACTUALMENTE TRIBUNAL

FEDERAL DE JUSTICIA FISCAL Y ADMINISTRATIVA

Vid. Ley Orgánica del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa.

El Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa conocerá de los juicios que se promuevan contra las

resoluciones definitivas que se indican a continuación:

I.- Las dictadas por autoridades fiscales federales y organismos fiscales autónomos, en que se determine la

existencia de una obligación fiscal, se fije en cantidad líquida o se den las bases para su liquidación.

II.- Las que nieguen la devolución de un ingreso, de los regulados por el Código Fiscal de la Federación,

indebidamente percibido por el Estado o cuya devolución proceda de conformidad con las leyes fiscales.

III.- Las que impongan multas por infracción a las normas administrativas federales.

IV.- Las que causen un agravio en materia fiscal distinto al que se refieren las fracciones anteriores.

V.- Las que nieguen o reduzcan las pensiones y demás prestaciones sociales que concedan las leyes en favor

de los miembros del Ejército, de la Fuerza Aérea y de la Armada Nacional o de sus familiares o

derechohabientes con cargo a la Dirección de Pensiones Militares o al Erario Federal, así como las que

establezcan obligaciones a cargo de las mismas personas, de acuerdo con las leyes que otorgan dichas

prestaciones.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 131

5.3.2 EL TRIBUNAL DE LO CONTENCIOSO- ADMINISTRATIVO DEL DISTRITO

FEDERAL.

Vid. Ley Orgánica del Tribunal Contencioso Administrativo del Distrito Federal.

El Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal, es un Tribunal Administrativo con la

organización y competencia que esta Ley establece, dotado de plena jurisdicción y autonomía para dictar sus

fallos e independiente de las autoridades administrativas.

Las Salas del Tribunal son competentes para conocer:

I.- De los juicios en contra de actos administrativos que las autoridades de la Administración Pública del

Distrito Federal dicten, ordenen, ejecuten o traten de ejecutar, en agravio de personas físicas o morales;

II.- De los juicios en contra de los actos administrativos de la Administración Pública Paraestatal del Distrito

Federal, cuando actúen con el carácter de autoridades;

III.- De los juicios en contra de las resoluciones definitivas dictadas por la Administración Pública del Distrito

Federal en las que se determine la existencia de una obligación fiscal, se fije ésta en cantidad líquida o se den

las bases para su liquidación, nieguen la devolución de un ingreso indebidamente percibido o cualesquiera

otras que causen agravio en materia fiscal;

IV.- De los juicios en contra de la falta de contestación de las mismas autoridades, dentro de un término de

treinta días naturales, a las promociones presentadas ante ellas por los particulares, a menos que las leyes y

reglamentos fijen otros plazos o la naturaleza del asunto lo requiera;

V.- De los juicios en contra de resoluciones negativas ficta en materia fiscal, que se configurarán transcurridos

cuatro meses a partir de la recepción por parte de las autoridades demandadas competentes de la última

promoción presentada por el o los demandantes, a menos que las leyes fiscales fijen otros plazos;

VI.- De los juicios en que se demande la resolución positiva ficta, cuando la establezca expresamente las

disposiciones legales aplicables y en los plazos en que éstas lo determinen;

VII.- De los juicios en que se impugne la negativa de la autoridad a certificar la configuración de la positiva

ficta, cuando así lo establezcan las leyes;

VIII.- De las quejas por incumplimiento de las sentencias que dicten;

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 132

IX.- Del recurso de reclamación en contra de las resoluciones de trámite de la misma Sala;

Los juicios que se promuevan ante el Tribunal se substanciarán y resolverán con arreglo al procedimiento que

señala esta Ley. A falta de disposición expresa y en cuanto no se oponga a lo que prescribe este ordenamiento,

se estará a lo dispuesto por el Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal; en materia fiscal al

Código Financiero del Distrito Federal. Y en su caso al Código Fiscal de la Federación en lo que resulten

aplicables.

Toda promoción deberá ser firmada por quien la formule, requisito sin el cual se tendrá por no hecha. Cuando el

promovente no sepa o no pueda firmar, firmará otra persona a su ruego y el interesado estampará su huella

digital.

Ante el Tribunal no procederá la gestión oficiosa. Quien promueva a nombre de otro deberá acreditar su

personalidad en términos de Ley, al presentar su demanda.

Las diligencias que deban practicarse en el Distrito Federal, pero fuera del recinto del Tribunal, se

encomendarán a los Secretarios o a los Actuarios del propio Tribunal.

Las demandas, contestaciones, ocursos, informes y en general toda clase de actuaciones, deberán escribirse

en español. Los documentos redactados en otro idioma, deberán acompañarse con la correspondiente

traducción al español, formulada por persona autorizada por el Tribunal. Las fechas y las cantidades se

escribirán con letra.

Cuando las leyes o reglamentos del Distrito Federal establezcan algún recurso u otro medio de defensa, será

optativo para la persona física o moral agotarlo o intentar desde luego el juicio ante el Tribunal. Si está haciendo

uso de dicho recurso o medio de defensa, previo el desistimiento correspondiente, podrá ocurrir a juicio ante el

Tribunal. El ejercicio de la acción ante este Órgano Jurisdiccional, extingue el derecho para promover otro

medio de defensa.

Los Magistrados para hacer cumplir sus determinaciones o para mantener el buen orden en sus salas y en

general, en el recinto del Tribunal, podrán emplear cualquiera de los siguientes medios de apremio y medidas

disciplinarias:

I.- Apercibimiento o amonestación;

II.- Auxilio de la fuerza pública;

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Universidad de la Sierra A. C. 133

III.- Multa hasta por una cantidad equivalente al monto de 180 días del salario mínimo general diario vigente en

el Distrito Federal; que podrá duplicarse en caso de reincidencia; y

IV.- Arresto hasta por 24 horas.

En los juicios que se tramiten ante el Tribunal no habrá lugar a la condenación en costas. Cada parte será

responsable de sus propios gastos.

Las cuestiones que surjan dentro del procedimiento se decidirán de plano y sin forma de substanciación, salvo

las que trasciendan al resultado del juicio que se fallará conjuntamente con el principal.

5.4. TRIBUNALES ADMINISTRATIVOS

(Artículo 73 fracción XXXIX-H de la C.F.)

Son órganos administrativos dotados de plena autonomía para dictar sus fallos, y que tengan a su cargo dirimir

las controversias que se susciten entre la administración publica federal y los particulares, estableciendo las

normas para su organización, su funcionamiento, el procedimiento y los recursos contra sus resoluciones.

Por ejemplo Tribunal Federal de Justicia fiscal y Administrativa, Tribunales Agrarios, Tribunal Federal de

Conciliación y Arbitraje.

Llamado también de la JUSTICIA ADMINISTRATIVA, consiste en la existencia de una jerarquía de tribunales

completamente distinta de la que forma el poder judicial.

De Bonnard, tomamos los siguientes datos relativos al origen de la jurisdicción administrativa en Francia, país

en donde ha llegado a su mayor perfección el sistema.

La jurisdicción administrativa procede, de dos reglas de separación:

- de la que impide a tribunales judiciales intervenir en la administración y

- de la que separa la administración contenciosa.

La primera regla: se sentó como una aplicación del principio de separación de poderes, y en antecedente

inmediato fue “el espíritu de hostilidad de los parlamentos frente al poder real y de sus representantes locales,

los intendentes.

En los últimos años del antiguo régimen, los parlamentos habían tomado una actitud de oposición sistemática

frente a las reformas administrativas y financieras que habían sido intentadas, habiendo hecho fracasar todo lo

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 134

que se había ensayado en ese sentido De allí resultó para quienes eran partidarios de esas reformas, una

desconfianza extrema para los cuerpos judiciales”

Por esa razón, en la ley 16-20 de agosto de 1790, se estableció la separación de las autoridades

administrativas y las judiciales, con prohibición absoluta para éstas “De turbar de cualquier manera las

operaciones de los cuerpos administrativos ni citar ante ellos a los administradores por causa de sus funciones”.

Sin embargo, las razones actuales de la subsistencia de esta primera regla de separación no son ya las de

desconfianza de las autoridades judiciales, sino que han sido sustituidas por razones de aptitud, esto es, se

reconoce indispensable para una justicia adecuada que los jueces tengan un conocimiento profundo de la

administración, lo cual no ocurre por lo regular con jueces comunes que, además están acostumbrados a fallar

con una legislación escrita muy completa que no existe para la administración.

a segunda regla: o sea, la separación de la administración activa de la contenciosa, tuvo su origen en el mismo

principio de separación de poderes que constituye un obstáculo para que la administración activa sea al mismo

tiempo juez de sus propios actos.

Esta regla sigue fundando hasta la fecha la separación de la administración activa y la contenciosa y como

consecuencia de su aplicación se ha pasado desde la separación mitigada en la que el tribunal administrativo

se limita a proponer la decisión jurisdiccional a una autoridad administrativa que tiene así la Justicia retenida”,

hasta la separación completa, en la que el tribunal tiene una “justicia delegada” y puede, por lo mismo, actuar

con independencia de la administración activa.

EL PRINCIPIO DE LA SEPARACION DE PODERES Y LOS TRIBUNALES ORDINARIOS

El segundo sistema señalado, adoptado por otras legislaciones respecto a las autoridades que han de conocer

del contencioso que provocan los actos de la administración, es el sistema judicial.

El sistema de los tribunales administrativos se basa en una interpretación especial del principio de separación

de poderes, a saber: que para que ese principio quede respetado basta que la función jurisdiccional no se

ejercite ni por el legislador ni por el administrador y que, por tanto, no hay inconveniente en establecer una

jerarquía de tribunales, con tal de que esté separado del Poder Judicial y del Administrativo.

Además, ese mismo sistema de la jurisdicción administrativa se funda en que la separación de poderes se logra

más eficazmente si al Poder Judicial se le prohíbe intervenir en las funciones del Poder Administrativo.

Pero contra esta interpretación se ha sostenido en otros países que la separación de poderes debe entenderse

considerando a cada uno de ellos como una unidad, y que, por tanto, cuando a la administración se le agregan

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 135

tribunales independientes del Poder judicial, se rompe la unidad de éste y se invade, en consecuencia, su

esfera de acción.

De allí se ha originado el sistema judicial, cuyo concepto básico es, según afirma Bielsa, “que la autoridad

judicial ha sido creada precisamente para conocer o aplicar la ley, a ella corresponde, impidiendo la violación de

la ley, tutelar los derechos de los ciudadanos, de los administrados en suma”

SON ANTICONSTITUCIONALES O INCONSTITUCIONALES LOS TRIBUNALES ADMINISTRATIVOS.

ARGUMENTOS:

1. Se sostiene que el establecimiento de tribunales administrativos pugna con la prohibición del artículo 13

constitucional, según el cuál “NADIE PUEDE SER JUZGADO....POR TRIBUNALES ESPECIALES......”

2. Se dice que conforme al artículo 49 constitucional se prohíbe la reunión de dos o más de los poderes en un

solo individuo o corporación y que si el ejecutivo juzgará, vendría a violar el principio de separación adoptado.

3. También se deriva un argumento del artículo 14 constitucional, pues de este precepto surge la obligación

para el poder público de seguir un juicio cuando pretenda privar a un particular de algún derecho que esté en el

patrimonio de éste, ya provenga de un acto civil o de reconocimiento u otorgamiento del órgano gubernamental.

4. Por otra parte resulta también violado el artículo 17 constitucional, pues siendo la garantía individual en él

consignada, una limitación para el poder público, éste no puede hacerse justicia a sí mismo, ni ejercer violencia

para reclamar su derecho.

Actualmente los tribunales administrativos son constitucionales ya que encuentran su sustento jurídico en los

artículos 73 y 104 fracción I de la Constitución Federal. El problema de la discusión en torno a su

constitucionalidad se debió a que el nacimiento del primer tribunal administrativo, esto es, el Tribunal Fiscal de

la Federación se creo sin existir las bases constitucionales correspondientes.

En razón de algunas tesis sostenidas por sentencias de la S.C.J. se desprendió que no existe inconveniente

legal alguno para establecer un procedimiento jurisdiccional ante tribunales administrativos si la intervención de

éstos no coarta el derecho de los particulares para ocurrir posteriormente al juicio de amparo que

tradicionalmente ha sido en México el que ha ofrecido el camino para la REVISION de los actos

administrativos.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 136

JURISPRUDENCIA

Las leyes pueden conceder un recurso o medio de defensa para el particular perjudicado, ante autoridades

distintas de la judicial, y que dicho recurso debe agotarse antes de la interposición de la demanda de garantías.

Sobre las bases anteriores, se creó el TRIBUNAL FISCAL DE LA FEDERACION. Vid. Ley Orgánica del mismo

tribunal y artículo 107 fracción IV y V inciso b.

5.5. RESPONSABILIDAD OBJETIVA DEL ESTADO.

Etimológicamente, la voz castellana responsabilidad proviene del latín respondere, traducible como estar

obligado. Entre los muchos conceptos formulados al respecto, se entiende por responsabilidad la capacidad de

un sujeto de derecho de conocer y aceptar las consecuencias de sus actos realizados conciente y libremente.

En otro sentido, es la relación de causalidad existen entre el acto y su actor, o sea, la capacidad de responder

por sus actos. En un sentido mas concreto, la responsabilidad se traduce en el surgimiento de una obligación o

merecimiento de una pena en un caso determinado o determinable, como resultado de la ejecución de un acto

especifico.

Por responsabilidad puede entenderse la obligación que tiene una persona de subsanar el perjuicio producido o

el daño causado a un tercero porque así lo disponga una ley, lo requiera una convención originaria, lo estipule

un contrato, o se desprenda de ciertos hechos ocurridos, con independencia de que en ellos exista o no culpa a

subsanar.

5.5.1. DOCTRINA JURÍDICA DE LA RESPONSABILIDAD OBJETIVA DEL ESTADO.

En el ámbito de responsabilidad se hace la distinción entre responsabilidad moral y responsabilidad jurídica; la

primera es producto de la falta, de la infracción al valor moral. Toda persona como consecuencia necesaria de

la libertad, de la voluntad y de la imputabilidad fundada en ella, debe responder de sus actos ante su

conciencia, ante su entorno ético, y admitir las consecuencias ineludibles de su actuación.

Sin embargo, la persona solo será imputable y por ende responsable, cuando tenga el suficiente conocimiento

moral y su voluntad no se trabe por algún impulso demasiado poderoso o por la sorpresa. Así mismo diferentes

tipos de afecciones mentales producen o cancelan de plano la imputabilidad y la responsabilidad.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 137

En cambio, la responsabilidad jurídica demanda el sometimiento de los hechos a la reacción jurídica frente al

daño. La finalidad de dicha reacción consiste en la represión del mal causado, se alcanza a través del derecho,

mediante el traslado de la carga del perjuicio en un sujeto diferente del agraviado; tal sujeto distinto habrá de

sufrir con , sin y aun contra su voluntad, la referida reacción jurídica por encontrarse en situación de

responsabilidad.

La responsabilidad jurídica tiene como supuesto indispensable la existencia de un daño, mas este puede ser de

diversa índole y afectar ala sociedad entera o una persona en particular, por lo que la responsabilidad puede

ser penal o civil.

Cuando se ofenden o ponen en riesgo los fundamentos que dan sustento a la sociedad, esto reacciona

mediante castigos que impone a quienes realizaron tales atentados, siempre y cuando esas conductas

indebidas sean deliberadas, es decir, que los actores sean penalmente responsables; por tanto , la

responsabilidad penal reclama investigar la culpabilidad del agente antisocial o por menos comprobar el

carácter socialmente peligroso que dicho sujeto a sus actos puede significar, para imponer penas o adoptar

medidas de seguridad en contra de quienes resulten responsables o no la ponen en peligro y en todo caso

procurar la rehabilitación y readaptación de tales personas.

A diferencia de la penal, la responsabilidad civil no tiene como punto de partida un daño social sino un mal

infligido a un individuo o a varios en particular, mas como hace siglos el perjudicado no puede aplicar un castigo

al autor de dicho mal, deberá limitarse a solicitar ante los tribunales competentes la reparación del daño o

perjuicio ocasionado.

En contraste con la responsabilidad penal, cuya comprobación demanda la investigación de la imputabilidad del

autor del daño o por lo menos la acreditación del carácter socialmente peligroso que dicha persona o sus actos

pueden significar, en la responsabilidad civil, tiene escasa relevancia que el acto pernicioso para un particular

ponga o no en riesgo los interese de la sociedad, ni si el autor del daño tiene o no imputabilidad, puesto que lo

único que se necesita es determinar si existe un nexo jurídico de obligación entre dos sujetos, que los pueda

convertir a uno en acreedor y a otro en deudor.

Conviene poner de relieve que la responsabilidad penal no excluye a la civil ni viceversa y, de hecho,

determinados actos delictivos implican para su autor, ambas responsabilidades al mismo tiempo.

La doctrina jurídica no se unifica cerca del concepto y definición de la responsabilidad civil, por que para unos

es la sanción a una conducta indebida, como se entendió en los primeros estudios del derecho en lo que la

respuesta al daño era de índole aflictivo y penal; ese esquema es el de la ley del talion que de represalia

infligida en la persona del reo, se transforma en compensación pecuniaria con propósito aflictivo y no

remuneratorio, mediante el criterio del múltiplo, que generaba una cuantiosa utilidad al perjudicado.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 138

Conforme de otra corriente doctrinaria que puede considerarse predominante en la actualidad, la

responsabilidad civil tiene una finalidad reparatoria y, por tanto, busca garantizar la esfera jurídica de los

sustentos del derecho, con el propósito de establecer la situación patrimonial de la victima del daño antijurídico.

En consecuencia, la indemnización se hará proporcional al daño sufrido.

En este otro esquema la responsabilidad civil carece de carácter unitivo o aflictivo por ser indiscutiblemente

reparatoria y, en consecuencia no se destina a enriquecer a la victima o sus deudos.

ELEMENTOS DE LA RESPONSABILIDAD CIVIL

Suelen admitirse como elementos de la responsabilidad civil:

Una actuación ilícita: implica un obrar doloso o cuando menos culposo, bien por su propósito de causar daño,

ya por ser producto de la imprudencia, negligencia, ignorancia, inadvertencia, por esta razón constituye un

elemento indispensable de la responsabilidad civil.

Dolo: El autor tiene conocimiento del acto u omisión que lleva acabo en contravención a su obligación y de las

consecuencias que acarrea, mediante el elemento volitivo el autor a resuelto de manera voluntaria incumplir su

deber, su obligación.

La culpa: Como el incumplimiento de una obligación sin dolo ni mala fe.

La imprudencia: Como la ausencia de sindéresis, cordura y moderación en las acciones.

La negligencia: Como falta de la debida diligencia o del cuidado indispensable en la ejecución de un acto

determinado.

La ignorancia: Es el desconocimiento de algún hecho.

De acuerdo a la facultad que confiere la fracción VIII del articulo 6 de la ley que la creo La Comisión Nacional de

Derechos humanos , el Estado asume de manera directa y solidaria la responsabilidad derivada a los daños,

tanto materiales como morales, causados dolosamente por sus agentes o representantes; tal responsabilidad

comprende el pago de perjuicios; el daño moral se presume y se aprueba la realización del acto ilícito mediante

el cual se le causo, aun cuando no se apruebe el daño mismo; se establece la obligación de asignar una partida

presupuestal para encontrar tal responsabilidad; se simplifican y amplían los mecanismos legales para lograr el

pago de indemnizaciones por daños derivados de actuaciones ilícitas de servidores públicos pudiendo

reclamarse mediante el ombudsman.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 139

5.2.2 REGIMEN LEGAL Y JURISPRUDENCIAL.

CODIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL Y TODA LA REPUBLICA EN MATERIA FEDERAL.

Artículo 1916.-Por daño moral se entiende la afectación que una persona sufre en sus sentimientos, afectos,

creencias, decoro, honor, reputación, vida privada configuración y aspectos físicos, o bien en la consideración

que de si misma tienen los demás. Se presumirá que hubo daño moral cuando se vulnere o menoscabe

ilegítimamente la liberta o la integridad física o psíquica de las personas.

LEY FEDERAL DE RESPONSABILIDADES DE LOS SERVIDORES PUBLICOS.

Cuando un hecho u omisión ilícitos produzcan un daño moral, el responsable del mismo tendrá la obligación de

repararlo mediante una indemnización en dinero, con independencia de que haya causado daño material, tanto

en responsabilidad contractual como extracontractual, igual obligación de reparar el daño moral tendrá quien

incurre en responsabilidad objetiva conforme al articulo 1913, así como el Estado y sus Servidores Públicos.

Articulo 1927.- El estado tiene obligación de responder del pago de los daños y perjuicios causados por sus

servidores públicos con motivo del ejercicio de sus atribuciones que se les están encomendadas. Esta

responsabilidad será solidaria atándose de actos ilícitos, dolosos y subsidiaria en los demás casos en lo que

solo podrá hacerse efectiva en contra del Estado cuando el Servidor Publico directamente responsable no tenga

bienes a los tenga no sean suficientes para responder de los daños y perjuicios causados por sus servidores

públicos.

Articulo 1928.- El que paga los daños y perjuicios causados por sirvientes, empleados, funcionarios y operarios,

puede repetir de ello lo que hubiere pagado.

LEY FEDERAL DE RESPONSABILIDADES DE SERVIDORES PUBLICOS.

Artículo 77 bis.- Cuando en el procedimiento administrativo disciplinario se haya determinado la responsabilidad

de los servidores públicos y que la falta administrativa haya causado daños y perjuicios a particulares, estos

podrán acudir a las dependencias, entidades o a la Secretaria de la Contraloría de la Federación para que ellas

directamente reconozcan la responsabilidad de indemnizar la reparación del daño en cantidad liquidad y en

consecuencia, ordenar el pago correspondiente sin necesidad de que los particulares acudan a la instancia

judicial o a cualquier otra.

El Estado podrá repetir de los servidores públicos el pago de la indemnización hecha por los particulares.

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 140

Si el órgano del estado niega la indemnización, o si el monto no satisface al reclamante, se tendrá expeditas, a

su elección la vía administrativa o judicial.

Cuando se haya aceptado una recomendación de la comisión Nacional de Derechos Humanos en la que se

proponga la reparación de daños y perjuicios, la autoridad competente se limitara a su determinación en

cantidad liquidad y la orden de pago respectiva.

Artículo 78.- Las facultades del superior jerárquico y de la Secretaria par imponer las sanciones que esta ley

prevé se sujetara a lo siguiente:

III.- El derecho de los particulares a solicitar la indemnización de daños y perjuicios, prescribirá en un año, a

partir de la notificación de la resolución administrativa que haya declarado cometida la falta administrativa.

LEY DEL TRIBUNAL DE LO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO DEL DISTRITO FEDERAL.

Articulo 21.- Las salas del tribunal de lo contencioso administrativo del Distrito Federal son competentes para

reconocer.

Fracción VII.- Las resoluciones que se dicten negando a los particulares la indemnización a que se contrae el

articulo 77 bis de la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos. El particular podrá optar por

esta vía o acudir ante la instancia judicial competente.

LEY ORGANICA DELTRIBUNAL FISCAL DE LA FEDERACION.

Articulo 23 fracción X.- Contiene una disposición similar a la antes transcrita de la Ley del Tribunal de lo

Contencioso Administrativo.

LEY FEDERAL PARA PREVENIR Y SANCIONAR LA TORTURA.

Artículo 10.- El estado estará obligado a la reparación de los daños y perjuicios en los términos den los artículos

1927 y 1928 del Código Civil.

LEY DE PRESUPUESTO, CONTABILIDAD Y GASTO PUBLICO FEDERAL.

Articulo 2.-El gasto público federal comprende las erogaciones por concepto de gasto corriente inversión física,

inversión financiera, así como pagos de pasivo, y por concepto de responsabilidad patrimonial, que realizan...

Derecho Administrativo II Antología

Universidad de la Sierra A. C. 141

JURISPRUDENCIA.

PODER EJECUTIVO

SECRETARIA DE GOBERNACION

DECRETO por el que se aprueba el diverso por el que se modifica la denominación del Título Cuarto y se

adiciona un segundo párrafo al artículo 113 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Al margen un sello con el Escudo Nacional, que dice: Estados Unidos Mexicanos.- Presidencia de la República.

VICENTE FOX QUESADA, Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, a sus habitantes sabed:

Que la Comisión Permanente del Honorable Congreso de la Unión, se ha servido dirigirme el siguiente

DECRETO

"LA COMISION PERMANENTE DEL HONORABLE CONGRESO DE LA UNION, EN USO DE LA FACULTAD

QUE LE CONFIERE EL ARTICULO 135 CONSTITUCIONAL, Y PREVIA LA APROBACION DE LAS CAMARAS

DE DIPUTADOS Y DE SENADORES DEL CONGRESO GENERAL DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS,

ASI COMO LA MAYORIA DE LAS LEGISLATURAS DE LOS ESTADOS, DECRETA:

SE APRUEBA EL DECRETO POR EL QUE SE MODIFICA LA DENOMINACION DEL TITULO CUARTO Y SE

ADICIONA UN SEGUNDO PARRAFO AL ARTICULO 113 DE LA CONSTITUCION POLITICA DE LOS

ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, PARA QUEDAR COMO SIGUE:

ARTICULO UNICO.- Se modifica la denominación del Título Cuarto y se adiciona un segundo párrafo al artículo

113 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, para quedar como sigue:

Titulo Cuarto

De las Responsabilidades de los Servidores Públicos y Patrimonial del Estado.

Las leyes sobre responsabilidades administrativas de los servidores públicos, determinaran sus obligaciones a

fin de salvaguardar la legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad y eficiencia en el desempeño de sus funciones,

empleos, cargos y comisiones, las sanciones aplicables por los actos u omisiones en que incurran, así como los

procedimientos y las autoridades para aplicarlas. Dichas sanciones, además de las que señalen las leyes,

consistirán en suspensión, destitución e inhabilitación, así como sanciones económicas, y deberán establecerse

de acuerdo con los beneficios económicos obtenidos por el responsable y con los daños y perjuicios

patrimoniales causados por sus actos u omisiones a que se refiere la fracción III del articulo 109, pero que no

podrán exceder de tres tantos de los beneficios obtenidos o de los daños y perjuicios causados.

La responsabilidad del Estado por los daños que, con motivo de su actividad administrativa irregular, cause en

los bienes o derechos de los particulares, será objetiva y directa. Los particulares tendrán derecho a una

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Universidad de la Sierra A. C. 142

indemnización conforme a las bases, límites y procedimientos que establezcan las leyes.

TRANSITORIO

UNICO.- El presente Decreto entrara en vigor el primero de enero del segundo año siguiente al de su

publicación en el Diario Oficial de la Federación.

La Federación, las entidades federativas y los municipios contarán con el periodo comprendido entre la

publicación del presente Decreto y su entrada en vigor, para expedir las leyes o realizar las modificaciones

necesarias, según sea el caso, a fin de proveer el debido cumplimiento del mismo, así como para incluir en sus

respectivos presupuestos, una partida para hacer frente a su responsabilidad patrimonial.

La aprobación de la reforma constitucional implicará necesariamente la adecuación a las disposiciones jurídicas

secundarias, tanto en el ámbito federal como en el local, conforme a los criterios siguientes:

a) El pago de la indemnización se efectuaría después de seguir los procedimientos para determinar que al

particular efectivamente le corresponda dicha indemnización, y

c) El pago de la indemnización estará sujeto a la disponibilidad presupuestaria del ejercicio fiscal de que se

trate.

Para la expedición de las leyes o la realización de las modificaciones necesarias para proveer al debido

cumplimiento del decreto, se contaría con el periodo comprendido entre la publicación del decreto y su entrada

en vigor. Según la fecha de aprobación del Decreto y su consiguiente publicación, el citado periodo no sería

menor a un año ni mayor dos.

SALON DE SESIONES DE LA COMISION PERMANENTE DEL HONORABLE CONGRESO DE LA UNION.-

México, D.F., a 15 de mayo de 2002.- Sen. Diego Fernández de Cevallos Ramos, Presidente.- Dip. Manuel

Añorve Baños, Secretario.-Rúbricas".

En cumplimiento de lo dispuesto por la fracción I del Artículo 89 de la Constitución Política de los Estados

Unidos Mexicanos, y para su debida publicación y observancia, expido el presente Decreto en la Residencia del

Poder Ejecutivo Federal, en la Ciudad de México, Distrito Federal, a los trece días del mes de junio de dos mil

dos.- Vicente Fox Quesada.- Rúbrica.- El Secretario de Gobernación, Santiago Creel Miranda.- Rúbrica.

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