Critica a P T. Bauer

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ECONOMÍA DEL CRECIMIENTO Y DEL DESARROLLO P.T. BAUER “CRÍTICA A LA TEORÍA DEL DESARROLLO” CURSO 2012-2013 UNIVERSIDAD REY JUAN CARLOS ECONOMÍA DEL CRECIMIENTO Y DEL DESARROLLO: P.T. BAUER: “CRÍTICA A LA TEORÍA DEL DESARROLLO Índice:

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ECONOMÍA DEL CRECIMIENTO YDEL DESARROLLO

P.T. BAUER “CRÍTICA A LATEORÍA DEL DESARROLLO”

CURSO 2012-2013

UNIVERSIDAD REY JUAN CARLOS

ECONOMÍA DEL CRECIMIENTO Y DEL DESARROLLO:

P.T. BAUER: “CRÍTICA A LA TEORÍA DEL DESARROLLO

Índice:

1. INTRODUCCIÓN

2. P. T. BAUER: BIOGRAFÍA Y OBRAS

3. P.T. BAUER: SU LEGADO Y SU OBRA “CRÍTICA A LA TEORÍA DEL DESARROLLO”

4. VALORACIÓN PERSONAL Y CONCLUSIONES

5. BIBLIOGRAFÍA Y ENLACES

1. INTRODUCCIÓN

Este trabajo que aquí se presenta, va a tener como objetivodar a conocer las ideas sobre el Desarrollo del economista

Peter Thomas Bauer. Se va a estudiar una de sus obras másimportantes y con mayor repercusión a lo largo de los años:“Crítica a la Teoría del Desarrollo”.

Se van a analizar las claves que el economista plantea paraque un país sea considerado “Desarrollado” o“Subdesarrollado” y en profundidad, qué es lo que falla ala hora de poder estar en el nivel primero o en el segundo.

Antes de ver su trabajo estrella, hablaremos un poco sobrela vida de Bauer, sus otras obras y las repercusiones queha tenido durante los últimos años.

Posteriormente, se sacarán una serie de conclusionesbásicas que resumirán de una manera precisa y breve lasclaves de su legado y de su principal obra, anteriormentenombrada.

Esperando que el trabajo sea del agrado del lector, pasopues a destacar la grandiosa figura de P. T. Bauer.

2. P. T. BAUER: BIOGRAFÍA Y OBRAS

-Biografía

Peter Thomas Bauer nació en Budapest el 6 de noviembre de1915. Asistió a la famosa Scholae Piae y luego estudióderecho en la Universidad de Budapest. En 1934 partió haciaInglaterra y fue admitido a Gonville and Caius College,Cambridge, donde estudió economía y se graduó en 1937.Bauer entonces regresó a Hungría para completar susestudios de derecho y servir en el ejército. En 1939 volvióa Inglaterra para trabajar en Londres con Guthrie &Company, una casa mercantil que tenía negocios en el LejanoOriente. Bauer empezó su carrera académica en 1943 en laUniversidad de Londres, en donde primero fue investigador yluego catedrático de economía agrícola. En 1948 se trasladóa Cambridge University y permaneció ahí hasta 1960; elresto de su distinguida carrera académica lo pasó comoprofesor en el London School of Economics. En 1982 recibió

de manera vitalicia el título nobiliario de Lord Bauer ofMarket Ward. También fue nombrado miembro de la AcademiaBritánica y de la Mont Pélerin Society.

En reconocimiento por su trabajo pionero en la economía de desarrollo y su compromiso vitalicio a los principios de una sociedad libre, Bauer fue la primera persona en ser galardonada con el Premio Milton Friedman al Avance de la Libertad, un premio de $500.000 presentado cada dos años por el Cato Institute. Bauer recibió el premio de manera póstuma el 9 de mayo durante la celebración del XXV aniversario del Cato Institute. En la ceremonia, Milton Friedman expresó su admiración por Bauer con estas palabras: "Hay pocas cosas más importantes que honrar a quienes han promovido la libertad alrededor del mundo, y Peter se merecía ese premio. Amigo mío durante 50 años, fuesiempre consistente y persistente en la presentación de ideas que no eran populares, pero sí correctas".Durante años, Bauer luchó en contra de los llamados expertos en desarrollo que veían a la planificación centralizada, al proteccionismo y a la ayuda externa como prerrequisitos para el avance económico. El colapso del comunismo en los países del bloque soviético en 1989 y en la Unión Soviética en 1991, y el fin de la planificación centralizada en China y otros países en vías de desarrollo,fueron los momentos definitivos del siglo XX desde una perspectiva de libre mercado. Esos eventos, en parte, han vindicado el trabajo de vida de Bauer.

La muerte de Peter Bauer el 2 de mayo del 2002 a la edad de86 año marcó el deceso de un excelente economista y un héroe de la revolución de mercado que ha barrido el globo.

-Obras y referencias

El legado de Bauer es extenso tanto en publicaciones en revistas, periódicos como en libros, colaborando a veces con otros economistas reconocidos. Por nombrar alguna referencia:

(1946). «The Working of Rubber Regulation». The Economic Journal 56:pp. 391

Peter Thomas Bauer; Basil S. Yamey (1951). «Economic Progress and Occupational Distribution». The Economic Journal 61:  pp. 741–755. 

(1948). The Rubber Industry: A Study in Competition and Monopoly. Longmans, Green & Co..

Peter Thomas Bauer; F. W. Paish (1952). «Reduction in the Fluctuations of Incomes of Primary Producers». The Economic Journal 62:pp. 750–780

(1954). West African Trade: A Study of Competition, Oligopoly and Monopoly in a Changing Economy. Cambridge University Press.

Peter Thomas Bauer; Basil S. Yamey (1957). The Economics of Under-developed Countries. Cambridge University Press.

(1957). Economic Analysis and Policy in Under-developed Countries. Cambridge University Press. 

(1959). United States Aid and Indian Economic Development. American Enterprise Association.

(1961). Indian Economic Policy and Development. Allen & Unwin. (1971). «Economic History as Theory». Economica] 38:  pp. 163–179. (1972). Dissent on Development. Harvard University Press.  (1981). Equality, the Third World, and Economic Delusion. Harvard University

Press.  (1991). The Development Frontier: Essays in Applied Economics. Harvester

Wheatsheaf.  Peter Thomas Bauer; Amartya Sen (2004). From Subsistence to

Exchange. Princeton University Press. 

Una vez nombrado su legado, pasamos a analizarlo e indicar con cada una de sus aportaciones, lo más característico sobre el Desarrollo.

3. P. T. BAUER: SU LEGADO Y SU “CRÍTICA A LA TEORÍA DEL DESARROLLO”

Este apartado es el nervio del trabajo que hemos presentado. P. T. Bauer publica en 1981 una de sus obras estrella: “Crítica de la teoría del desarrollo”. (Equality, the Third World, and Economic Delusion)

Como resumen inicial hay que decir, que en esta obra Bauer,afirma que la teoría económica es una sola y que no hay tres teorías para tres mundos, y que los problemas del

subdesarrollo se deben a la ineficiencia y las distorsionescreadas por la presencia del sector público en la economía.

También vamos a indicar las referencias de otras obras paraque junto con la que aquí tratamos saquemos unas conclusiones de mayor importancia, y se vea claramente su pensamiento.

Paso a analizar de una manera más precisa las ideas principales:

a) El Fin y el Criterio del Desarrollo: Extendiendo lasOpciones del Individuo

Para Bauer, la esencia del desarrollo es la expansión delas opciones individuales y el papel del Estado es protegerla vida, libertad y propiedad para que los individuospuedan seguir sus propios deseos y metas. Gobiernolimitado, no planificación centralizada, fue siempre sulema. En 1957, Bauer escribió lo siguiente en EconomicAnalysis and Policy in Underdeveloped Countries (Análisis yPolítica Económica en los Países Subdesarrollados):

Yo veo la extensión del rango de opciones, es decir, elincremento en el rango de alternativas efectivas abiertas ala gente, como el principal objetivo y criterio deldesarrollo económico; y juzgo una medida basándomeprimordialmente en sus efectos probables sobre el rango dealternativas que presenta a los individuos... La acogida deeste objetivo significa que le doy importancia,significado, y valor a los actos individuales de tomardecisiones y valoraciones, incluyendo la preferenciaindividual entre el tiempo futuro y el presente.

Luego dijo que su posición "ha sido influenciada en granparte por mi aversión a políticas o medidas queprobablemente incrementen el poder del hombre sobre elhombre; es decir, que incrementen el control de grupos o deindividuos sobre su prójimo".

La visión de Bauer del desarrollo económico como un procesoconsistente con, y dependiente de, la propiedad privada yla libertad de hacer contratos lo colocó firmemente en la

tradición de los liberales clásicos. Su adherencia a losprincipios de libre comercio y pueblos libres reflejó suprofundo respeto por la dignidad, racionalidad y capacidadde la gente pobre alrededor del mundo.

Si el desarrollo económico ha de ser maximizado, entoncesla libertad debe ser maximizada, lo cual significa que lacoerción debe ser minimizada. Para lograrlo, los poderesdel gobierno deben limitarse a la protección de laspersonas y la propiedad. Entonces la gente será libre deescoger y expandir sus opciones, siempre y cuando respetenlos derechos iguales de otros. Las reglas del juego eranimportantes para Bauer porque ayudan a definir las opcionespresentadas ante los individuos. Mucho antes de que sepusiera de moda, Bauer aplicó la teoría de derechos depropiedad y opción pública al campo del desarrolloeconómico.

El orden espontáneo del mercado es consistente con lalibertad. Cualquier incremento en el alcance delintercambio del mercado naturalmente incrementa el rangoefectivo de las alternativas abiertas a los individuos. Deigual forma, cualquier restricción a la libertad económicareduce el rango efectivo de alternativas abiertas a losindividuos e impide el desarrollo, como era entendido porBauer. Tanto ricos como pobres se benefician de la libertadeconómica. Cuando la ley resguarda los derechos depropiedad privada, la gente se especializará en el manejode sus posesiones y en la propensión al riesgo, losmercados florecerán y los intercambios voluntarios seránmutuamente beneficiosos.

En su ensayo titulado "El Orden del Mercado y la Planificación Estatal"escribe que:

El orden del mercado minimiza el poder de los individuos ygrupos para restringir forzosamente las opciones de otragente. La restricción forzosa de las opciones de otros eslo que se define como coerción. La posesión de riqueza noconfiere por sí sola el poder a los ricos. De hecho, en laseconomías modernas de mercado, los ricos—especialmente losmuy ricos—usualmente deben su prosperidad a actividades quehan ampliado las opciones de su prójimo, incluyendo las delos pobres.

Según Bauer, los pobres se benefician de la libertad deescoger para quién y dónde trabajar, a diferencia de laseconomías planificadas en donde los trabajadores no tienenesa libertad. El poder en manos de autoridades del gobiernoes más peligroso que el dinero en manos de gente rica. Larestricción del flujo de capitales y de transporte tambiéndaña a los pobres. Es por eso que Bauer enfatiza que "en elTercer Mundo, al igual que en Occidente, la extensión delas oportunidades presentadas por el mercado ha sido y esde gran importancia para los pobres"; "la pobreza no es lomismo que la falta de libertad en el sentido de estarsujeto a la coerción de otros"; y "un orden de mercado esuna condición necesaria para la libertad personal".

Bauer se enfoca en el proceso del desarrollo, medido por laextensión de la libertad económica, no en el crecimientodel ingreso nacional. Claro que ambos están relacionados,pero hay diferencias importantes. Una economía planificadacentralmente puede tener una tasa alta de crecimientoeconómico (ignorando problemas de medición), pero la genteno es libre de escoger; un gobierno opresivo limita surango de alternativas efectivas. Ese aspecto del desarrollono puede ignorarse, afirma Bauer (1957: 125-26).

En resumen, lo que realmente le importa a Bauer es lalibertad de escoger, incluyendo la libertad de decidircuánto ahorrar e invertir.

Si a la gente se le respeta su libertad de escoger, susderechos de propiedad deben ser protegidos por la ley.Bauer hizo mucho énfasis en la primacía de la propiedad enun orden liberal de mercado y en el proceso de desarrollo.La transición de la subsistencia al intercambio requiere deun sistema legal que provea títulos de propiedad seguros,haga cumplir contratos, y adjudique justa y eficientementelas disputas. Bauer tenía claro que las restricciones a lapropiedad privada erosionan no sólo la libertad económica,sino también la libertad personal.

En una época en la que la mayoría de los "expertos" endesarrollo apoyaban medidas anti-mercado y estatales, Bauerse encontraba muy por delante de su tiempo en elreconocimiento de la importancia de la libertad económica—especialmente derechos de propiedad—como un determinante

clave del desarrollo económico así como de la libertadpersonal.

b) La Quimera del Desarrollo Guiado por el Estado

El desarrollo guiado por el Estado es una fantasíaimposible o ilusa, una quimera. Una vez que el poder delgobierno va más allá de su papel legítimo de proteger a laspersonas y a la propiedad, la libertad perderá terreno. Lasalternativas abiertas a los individuos estaránconsiderablemente restringidas en comparación con un ordenliberal constitucional basado en el gobierno limitado y losderechos privados de propiedad. Lo que importa para Bauer(1957: 113) es "el proceso por el cual el desarrollo espromovido". Un proceso espontáneo de libre mercado queamplía la opción individual es el verdadero significado deldesarrollo. Una política de desarrollo guiada por el Estadoque niega a los individuos la libertad de tomar sus propiasdecisiones es tan sólo un seudo desarrollo.

Dada su visión de lo deben ser que el fin y el criterio deldesarrollo, Bauer reaccionó fuertemente ante los promotoresde la planificación centralizada. Estudió minuciosamentelos argumentos de la planificación y expuso las falacias delos expertos en desarrollo que argumentaban que los pobreseran incapaces de salir por sí mismos de la pobreza debidoa fallas del mercado.

c) El Atractivo de la Planificación Centralizada

Bajo la planificación económica centralizada, la toma dedecisiones por parte del gobierno desplaza la toma dedecisiones privada. Por esa razón, dice Bauer (1978: 185),"la planificación es especialmente atractiva parapolíticos, intelectuales y administradores, ya que creaposiciones de poder que miembros de estos grupos esperanocupar, con las ventajas políticas, emocionales yfinancieras que implican". Más aún, la planificación atraea la gente porque equivocadamente perciben el sistema demercado como "irracional y confuso", mientras que laplanificación aparenta estar "basada en la metodología, larazón y la ciencia." La tercera razón que Bauer da sobre el

atractivo de la planificación es su unión al "todo poderosoy mesiánico credo del marxismo-leninismo".

La idea de que planificadores socialistas pueden solucionarel problema de la pobreza mejor que el libre mercado fuegeneralmente aceptada en el Tercer Mundo hasta hace poco. Ylos principales promotores de la idea fueron los expertosOccidentales en desarrollo. En 1957, Paul A. Baran, unrespetado economista de Stanford University escribió que"El establecimiento de una economía socialista planificadaes una condición esencial, de hecho indispensable, para elalcance del progreso económico y social en los paísessubdesarrollados" (Baran 1957: 261). Un año antes, GunnarMyrdal había escrito que "los asesores especiales de lospaíses subdesarrollados que se han tomado el tiempo paraconocer el problema... han recomendado la planificacióncentralizada como la primera condición para el progreso"(Myrdal 1956a: 201). Esa mentalidad socialista y la visiónde desarrollo guiado por el Estado estaban tan integradasque en 1985, tras años de fracaso, el Primer Ministro de laIndia, Rajiv Gandhi, escribió:

Aunque existe un problema en la colección, coordinación,clasificación y análisis de la tremenda cantidad deinformación necesaria para la planificación del desarrolloen el ámbito nacional, la solución tal vez yace en mejorarlas herramientas de colección y análisis de los datos, y noen el abandono de los esfuerzos de planificación.

Hoy, incluso el Banco Mundial (1997: 1-2) admite que lanoción de que "buenos asesores y expertos técnicosformularían buenas políticas, que podrían ser luegoimplementadas por buenos gobiernos para el bien de lasociedad" era ingenua. "Los gobiernos se embarcaron enplanes caprichosos. Los inversionistas privados, al carecerde confianza en las políticas públicas o en la integridadde los líderes, se abstuvieron. Los gobernantes poderososactuaron arbitrariamente. La corrupción se volvió endémica.El desarrollo fracasó y la pobreza perduró". Tal y comoBauer lo había predicho.

d) Planificación Centralizada y Libertad

La planificación centralizada extiende el poder del Estadoal convertir al gobierno en el supervisor que dicta todoaspecto de la vida económica. Cuando la gente sólo tiene unempleador, cuando carece de derechos de propiedad y notiene mercados privados para intercambiar bienes yservicios, cuando no tiene opciones para invertir, y cuandoel libre comercio es un crimen, el espacio para eldesarrollo humano es minúsculo. Todas las decisioneseconómicas se politizan y la corrupción se vuelve común.Como dijo Bauer (1976: 84), "Al continuar y extender elcontrol estatal sobre las vidas de la población, laplanificación centralizada refuerza la sumisión delindividuo a las autoridades. Tal desarrollo desmotiva laautosuficiencia, la previsión personal para el futuro, lacuriosidad sostenida y un marco mental propenso a laexperimentación".

El objetivo de los planificadores de desarrollo no era sólocontrolar la economía sino controlar a la gente y rehacerla sociedad. De hecho, Bauer nos dice (1976:188) que latesis principal de Myrdal era que "la conducta personal ylas actitudes sociales han de ser reestructuradas en elinterés, o al menos el interés declarado, de ingresos percápita más altos". A los pobres no se les podía confiar lalibertad: se asume que el futuro les es indiferente y queno responden a los precios del mercado. Por lo tanto, porsu bien, hay que tratarlos como peones en un tablero deajedrez con el que juegan los iluminados planificadores.Esa mentalidad anti-mercado perturbó a Bauer. Él no veía alos pobres como "ladrillos sin vida que han de ser movidospor un constructor maestro" (Bauer 1984: 5). Los pobres noson indiferentes hacia sus futuros ni apáticos a losincentivos del mercado. Si se les da libertad yresponsabilidad, la gente pobre es muy capaz de sacarse así misma y a sus familias de la pobreza.

e) La Mentalidad Anti-Mercado de los Expertos deDesarrollo

La letanía de los expertos de desarrollo era "el círculovicioso de pobreza", del cual los pobres no podían escaparsin la asistencia de planificadores centrales y ayuda

externa. El ahorro obligatorio, políticas comercialesproteccionistas, agencias oficiales de mercadeo, produccióne inversión dirigidas por el Estado, y transferencias degobierno a gobierno eran la norma. Bauer (2000: 6)argumentó lo contrario: "Tener dinero es el resultado delos logros económicos, no su precondición... La verdad esque si la noción del círculo vicioso de pobreza fuesecierta, la humanidad jamás hubiese salido de la Edad dePiedra".

La experiencia de Bauer en Malaya (hoy Malasia) a finalesde los cuarenta y en África Occidental lo llevó a reconocerla importancia de los esfuerzos individuales por parte depequeños terratenientes y comerciantes en la transición dela subsistencia a niveles de vida más altos. Como escribióen The Development Frontier (La Frontera del Desarrollo),

Una infraestructura desarrollada no fue una precondiciónpara el surgimiento de grandes cosechas rentables en elSureste de Asia y en África Occidental. Como ha sido amenudo el caso en otros lugares, las facilidades conocidascomo infraestructura fueron desarrolladas a medida que laeconomía se expandió... Lo sucedido fue en gran medida elresultado de respuestas voluntarias individuales demillones de personas a oportunidades emergentes creadas engran parte por contactos externos, y que fueron puestas asu atención de maneras variadas, primariamente a través dela operación del mercado. Estos avances fueron posiblesgracias a gobiernos firmes pero limitados, sin grandesgastos de fondos públicos y sin recibir grandes donacionesexternas (Bauer 1991: 190-91).

Bauer fue uno de los primeros en ver claramente que elverdadero problema de los países subdesarrollados no es unfracaso del mercado sino del gobierno—es decir, el fracasodel gobierno en la protección de los derechos de propiedad,cumplimiento de contratos y en dejar a los mercadosfuncionar libremente:

La literatura del fracaso del mercado ha sido usada en granparte como una colección de palos con la cual se golpea alsistema de mercado. Los críticos que proponen reemplazar elsistema de mercado con decisiones políticas rara vezconsideran temas cruciales como la concentración del poder

económico en manos políticas, las implicaciones de larestricción de opciones, los objetivos de los políticos yadministradores, y la calidad y extensión del conocimientoen una sociedad y sus métodos de transmisión. (Bauer 1984:30).

La politización de la vida económica, la pérdida delibertad, y el daño hecho a la sociedad civil bajo laplanificación económica son ahora bien conocidos. Por estarazón finalmente se está prestando atención a la naturalezade las instituciones y al papel del gobierno en lafomentación de procesos espontáneos de mercado. Como notóel Banco Mundial (1997: 1), "La intervención dirigida porel Estado enfatizó fallas del mercado y le asignó al Estadoun papel central en su corrección. Pero las suposicionesinstitucionales implícitas en esta cosmovisión fueron, comopodemos darnos cuenta hoy, demasiado simplistas".

Bauer (1978: 184) apunta a "la creencia de que loscontroles económicos son necesarios para proteger a lagente de los riesgos del mercado, especialmente de lasfluctuaciones de precios de las cosechas de exportación".Para reducir ese riesgo, muchos países menos desarrollados(PMDs) en Asia y África establecieron monopoliosgubernamentales con el derecho exclusivo de comprarcosechas para la exportación. Los agricultores recibíanprecios menores a los del mercado por sus cosechas y losmonopolios estatales de exportación capturaban lasganancias. El gravamen resultante sobre los ingresos de losagricultores "retardó la expansión de la economía deintercambio y restringió el volumen de ahorro privado,inhibiendo la emergencia de una clase capitalista local".En vez de reducir los riesgos para los agricultores, loscontroles incrementaron el riesgo al politizar la vida:

Los controles estatales no han asegurado la estabilidad enun sentido significativo para los agricultores o para otrosagentes económicos sujetos a ellos. Tanto los controles yla consecuente politización de la vida involucran peligrosmucho más severos y menos predecibles que los de losmercados. Después de todo, si los precios agrícolasfluctúan, es posible para los productores (o, en tal casopara los gobiernos) hacer a un lado reservas. Ante la

revocación de una licencia, la confiscación del ingreso ola propiedad, o la deportación, no existe tal protección.(Bauer 1978: 185).

Quienes critican al mercado por sus imperfecciones noconsideran que "los participantes del mercado son personas.Los seres humanos y sus arreglos no pueden ser infalibles"(Bauer 1984: 29). La suposición implícita de los pesimistasdel mercado es que la gente en el gobierno es de algunamanera mejor que la gente que participa dentro del mercado.Sin embargo, como advierte Bauer, la gente en el gobiernotiene el poder de coercer, algo que los participantes delmercado no tienen: "En años recientes los detractores delorden del mercado han hecho un gran escándalo de los casosde presión política o fraude por parte de los participantesdel mercado. ¿Tendríamos una mejor sociedad si más gentecon esos hábitos estuviese en el gobierno y por lo tantocontara con el poder coercitivo que éste implica?"

Algunos critican al mercado porque no trae el progresomaterial tan rápido como ellos quisieran. Pero Bauer (1984:29) enfatiza que:

El no garantizar el progreso material no es un defecto delmercado, mucho menos el que no garantice satisfacción ofelicidad. Un corolario de los arreglos voluntarios es quele permiten a la gente permanecer sin ambiciones oconsiderar que el costo de la mejoría económica esexcesivo, si así lo desean. El orden de mercado les permitededicarse a lo que ellos quieran.

La mayor crítica al mercado es que conlleva a desigualdadesen la distribución del ingreso y de la riqueza. Bauerrespondió de frente a esas críticas. Primero, hizo unadistinción entre "desigualdad" y "diferencias", dandopreferencia al último término ya que es más analítico ymenos emotivo. La gente difiere con respecto a sushabilidades, carácter y conducta; estas diferenciasresultan en ingresos y niveles de riqueza distintos.Segundo, en el orden del mercado uno se hace rico sirviendolas necesidades de otros—es decir, satisfaciendo laspreferencias de los consumidores. Usualmente le va mejor alos individuos que dirigen recursos a usos más valoradosque a quienes hacen lo contrario.

Tercero, hay dos maneras para alcanzar ingresos más altos:a la fuerza o a través de intercambios voluntarios. Elorden del mercado se respalda sobre la igualdad ante la leyy el gobierno limitado; al usar al gobierno para realizartransferencias forzosas se violan los derechos de propiedady se atenúa la libertad económica. La justicia, entendidapropiamente, requiere de un gobierno limitado, no de unEstado redistribuidor. Por lo tanto, los críticos delmercado ponen de cabeza la justicia. No son los empresariosexitosos en las economías Occidentales de mercado quienesexplotan a los pobres del Tercer Mundo, sino sus propiosgobiernos corruptos.[

Dado que los intentos de los gobiernos por eliminar lasdiferencias en el ingreso ("desigualdad") necesariamenterequieren del uso de la fuerza, Bauer (1981: 8) vio "unacontradicción subyacente en el igualitarismo en lassociedades abiertas". De hecho,

En una sociedad abierta y libre, la acción política quedeliberadamente se dirige a la minimización o eliminaciónde las diferencias económicas (es decir, diferencias en elingreso y la riqueza) requeriría una coerción tan ampliaque la sociedad dejaría de ser libre y abierta. La búsquedaexitosa del Grial Impío de la igualdad económica cambiaríala prometida reducción o eliminación de las diferencias deingreso y riqueza por una verdadera y mucho mayordesigualdad de poder entre gobernantes y gobernados.

Al dictar la igualdad de resultados no sólo se destruye lalibertad, discriminando contra individuos o grupos que sonexitosos, sino que también se destruyen las facultadescreadoras de riqueza del proceso competitivo del mercado—unproceso que se apoya en la inviolabilidad de la propiedadprivada y en la libertad de contratación. Bauer, como losgrandes liberales clásicos del siglo XVIII, reconoció elimportante vínculo entre el marco institucional de losderechos de propiedad y la creación de riqueza. Loscríticos del mercado que ignoran ese vínculo desprecian larealidad.

f) Sobre los Determinantes del Desarrollo Económico

Luego de estudiar una cantidad de PMDs, Bauer concluyó queel desarrollo económico depende de las instituciones, lacultura, y la conducta, no de la planificación, lainversión estatal de gran escala, o los recursos naturales:

El desempeño económico depende de factores personales,culturales y políticos, de las aptitudes y motivaciones delas personas, y de instituciones políticas y sociales. Endonde éstas son favorables, el capital va a generarselocalmente o será atraído del extranjero, y si la tierra esescasa, la comida se obtendrá a través de la agriculturaintensiva o de la exportación de otros bienes (Bauer 2000:29).

Una población grande y creciente no es un detrimento parael progreso económico, al igual que no lo es una altadensidad poblacional, siempre y cuando el escenarioinstitucional sea favorable a la libertad y laresponsabilidad. De manera que, para Bauer, "el éxitoeconómico y el progreso depende de la conducta de la gente,no de su número". Criticó el uso del ingreso nacional percápita como medida del bienestar personal, ya que "ignorala satisfacción que la gente deriva de tener hijos o vivirmás tiempo... Irónicamente, el nacimiento de un niño seregistra como una reducción en el ingreso nacional porcabeza, mientras que el nacimiento de un ternero figuracomo una mejoría". (Bauer 2000: 30-31).

g) El Fetichismo de la Inversión y el Ahorro Obligatorio

Bauer fue especialmente crítico del argumento, ampliamenteaceptado por expertos en desarrollo, de que las inversionesgubernamentales a gran escala eran necesarias para aliviarla pobreza. Primero, la inversión en sí es solo un factorque influye en el crecimiento económico:

Es engañoso pensar que la inversión es el único o principaldeterminante del desarrollo. Otros factores e influencias,tales como las fuerzas institucionales y políticas, lascualidades y actitudes de la población, y la provisión derecursos complementarios son a menudo de igual, o inclusomayor, importancia... Es más significativo decir que el

capital es creado en el proceso de desarrollo, y no que eldesarrollo es una función del capital. (Bauer 1957: 119).

Segundo, cuando el Estado usa impuestos y otras medidaspara reducir el consumo privado, se puede en realidadempeorar la situación de la gente: la inversión privada sereduce y como consecuencia se restringe el crecimiento delsector del mercado; y el ahorro obligatorio reduce lalibertad individual. Es erróneo, dice Bauer, ver "al totalde los réditos del ahorro obligatorio... como una adiciónneta a los recursos". Hay un costo involucrado, es decir,el ingreso neto perdido que se habría podido crear si esosfondos se hubiesen dirigido a la creación privada decapital. Más aún, "la imposición de gravámenes para eldesarrollo [es decir, ahorro obligatorio] normalmente recaesobre actividades en el sector comercial, y es muy probableque tome formas que retrasen el crecimiento de laproducción para mayor intercambio". Finalmente, lainversión dirigida por el Estado y el ahorro obligatoriotienen un impacto negativo sobre la libertad: típicamentellevan a una gran desigualdad en la distribución del poderdentro del país", lo cual "implica una restricción en elrango de alternativas de quienes están sujetos al poder"(Bauer 1957: 116-17, 124). En respuesta a la noción de que"la austeridad forzada es... necesaria para un incrementoen la producción", Bauer (1981: 254) pregunta, "¿Quéderecho tienen los gobernantes para coercer a sus sujetoscon este propósito?"

Tercero, la inversión dirigida por el Estado esnotablemente ineficiente puesto que es guiada porconsideraciones políticas, no económicas. El llamadofetichismo de inversión de los expertos de desarrolloresultó en numerosos proyectos de gran escala que fueronmonumentos para la elite gobernante a expensas de lospobres (Bauer 1981: cap. 14). Más aún, la carencia dederechos privados de propiedad en esas inversiones llevó amal manejo y poco mantenimiento. Uno sólo necesita ver alvertedero de la antigua Unión Soviética y sus paísesclientes.

Pensar que los pobres son incapaces de ahorrar e invertirpara el futuro es ignorar las lecciones de la historia,

dice Bauer. Los pequeños terratenientes de Malaya y loscomerciantes de pequeña escala de África Occidentalclaramente tenían la visión y el incentivo para posponer elconsumo actual y plantar cultivos (árboles de caucho enMalaya y de cacao en África Occidental) que requerían devarios años antes de estar listos para ser cosechados yvendidos en el mercado (Bauer 1948a, 1948b, 1954). Lacoerción no fue necesaria.

En resumen, "Salir de la pobreza... no requiere de laformación de capital a gran escala. Requiere cambios enactitudes y costumbres adversas a la mejoría material,disposición de producir para el mercado en vez de lasubsistencia, y la búsqueda de políticas gubernamentalesapropiadas. Mucha de la formación de capital no es unaprecondición del avance material, sino su consecuencia"(Bauer 1981: 248). Esos cambios son más fáciles de alcanzaral avanzar hacia una sociedad abierta y políticascomerciales liberales, y no a través de la coercióngubernamental, el proteccionismo y la ayuda externa.

h) Las Ganancias Dinámicas del Comercio

Bauer criticó a los economistas de desarrolloconvencionales por descuidar el papel de los comerciantesen la transición de una economía de subsistencia a una deintercambio. El comercio interno, en particular, es unafuente importante de crecimiento para los PMDs, comodescubrió Bauer en su estudio del comercio de ÁfricaOccidental. El surgimiento de una clase mercantil—una clasede pequeños comerciantes y tenderos—ayuda "a crear lasinstituciones y prácticas comerciales y a elevar el niveldel capital humano" (Bauer 2000: 4). Los comerciantespequeños proveen tanto servicios de mercadeo como créditopara sus clientes. Este crédito es el último enlace en unalarga cadena que empieza con grandes institucionesfinancieras en los mercados mundiales de capital.Consecuentemente, "hay un... proceso de división en elmercado financiero; y el campesino en la región más remotatiene de este modo acceso indirecto al mercado mundial decapitales" (Bauer 2000: 10). Los expertos que estabancasados a la idea de que solo la inversión de capital a

gran escala podría terminar con la pobreza en los PMDsignoraron esos vínculos informales y los proyectoscapitalistas de pequeña escala.

La teoría convencional de desarrollo pasó por alto lasganancias dinámicas de la liberalización del comercio: "Loscontactos a través de comerciantes y del comercio en sí sonlos principales agentes en la diseminación de nuevas ideas,formas de conducta y métodos de producción. Frecuentemente,los contactos comerciales externos son los primeros ensugerir la posibilidad de cambio, incluyendo el progresoeconómico" (Bauer 2000: 8). La disponibilidad de bienesOccidentales provee un incentivo para que la gente de losPMDs trabajen duro, ahorren, e inviertan para poder comprarlos nuevos bienes de lujo: "No es un accidente que a travésdel Tercer Mundo las regiones más avanzadas son las quetienen más contactos comerciales con Occidente; y, por elotro lado, las más atrasadas y pobres son las que tienenmenos de esos contactos" (Bauer 2000: 5).

Los países que se aíslan a sí mismos de los beneficios dela división internacional del trabajo pagan un precio muyalto: "La ausencia de vínculos comerciales con el exteriory la carencia de reservas de bienes hacen que infortunioscomo el mal clima se conviertan en desastres; la gente pasade apretarse el cinturón a morir de hambre... Hay unaverdad elemental en el cruel dicho de que el clima sueleser malo en las economías controladas" (Bauer 2000: 7-8).

Al abrir los mercados internos y externos a la competencia,los gobiernos pueden proveer una base sana para el progresomaterial. El problema es que los intereses establecidos enmuchos países del Tercer Mundo desean mantener el estatusquo. La disolución de los monopolios gubernamentales y laliberalización del comercio ayudarían a los pobres perolastimaría políticamente a grupos poderosos, de manera queel cambio es difícil. Las políticas proteccionistasretrasan el crecimiento económico y por lo tanto losgobiernos tercermundistas buscan ayuda externa como unafuente alternativa de ayudar a los pobres. Bauer veía eseenfoque como un desvío peligroso y un callejón sin salida.Los pobres son doblemente lastimados: primero por losefectos anticompetitivos de los monopolios estatales y los

aranceles y segundo por la influencia corruptora de lastransferencias de gobierno a gobierno.

i) Ayuda Externa y la Politización de la Vida Económica

A pesar de que el comercio incrementa el rango dealternativas para los pobres, la ayuda externa los hacedepender más del gobierno y politiza la vida económica. Laayuda oficial es mejor vista como un subsidio a gobiernoscorruptos, dijo Bauer, que como un beneficio a los pobres.Desde su punto de vista, la ayuda externa no es necesariani suficiente para el desarrollo económico—y es probableque sea dañina (Bauer 1976: 95-136). Los tecnócratas quearguyen que los PMDs no pueden crecer sin ayuda externa yque la pobreza se auto-perpetúa ignoran el hecho de que"tener dinero es el resultado del avance económico, no suprecondición. La veracidad de esto puede comprobarse contan sólo ver que existen países ricos, los cualesoriginalmente tuvieron que ser subdesarrollados y sinembargo progresaron sin donaciones externas" (Bauer 2000:6).

La historia comprueba que los subsidios externos politizanla vida económica y retrasan la reforma real. Bauerreconoció que, al hacer la transición de la planificaciónal mercado en los antiguos países comunistas es esencialcrear una infraestructura institucional amiga del mercado.En vez de hacer que la gente del Este dependa de la ayudagubernamental, los gobiernos Occidentales deben demostrarsu propia adherencia al orden liberal de mercado, abriendolos mercados al Este y liberalizando las relacionescomerciales (Bauer 1998).

La ayuda externa ha sido utilizada frecuentemente paraincrementar la riqueza de los gobernantes del Tercer Mundoy para apoyar sus ambiciones políticas, no para promovereconomías sanas a largo plazo e independencia de losindividuos dentro de los PMDs. Esta ayuda ha servidotambién para beneficiar a productores domésticos en lospaíses donantes. Por esas y otras razones, Bauer (1984: 40)sostuvo que sin ayuda externa no habría un Tercer Mundo:"El concepto del Tercer Mundo y de la ayuda externa son

inseparables. El uno no podría existir sin el otro... Asíque el Tercer Mundo es un concepto político, no económico".

Bauer veía a las transferencias de gobierno a gobierno como"una fuente independiente de hostilidad al mercado". Loslíderes del Tercer Mundo tienen un incentivo para usar laayuda externa para ganar más control sobre la vidaeconómica: "Dado que la ayuda se da a los gobiernos,refuerza la posición del Estado y lo agranda en comparacióncon el sector privado". Más aún, Bauer argumentó que laayuda externa "provoca y exacerba la tensión política, locual eleva de nuevo la hostilidad al mercado, sobre todo ensociedades multirraciales". De modo que para Bauer, "laayuda oficial es, en la práctica, una fuerza anti-mercadoimportante" (Bauer 1978: 182-83).

Hoy en día se enfatiza el ligar la ayuda externa con laliberalización del mercado. Pero si la ayuda no esnecesaria ni suficiente para el desarrollo económico, elcaso actual para transferencias de gobierno a gobierno essospechoso. Los mercados privados de capitales son capacesde proveer fondos suficientes para el desarrollo económico,dado que esos fondos se usen productivamente en el TercerMundo.

j) El Futuro del Liberalismo de Mercado

El fracaso masivo de la planificación centralizadasignifica que ya no hay una amenaza importante al orden delmercado. El verdadero peligro es la idea de que ladesigualdad de ingreso y riqueza requiere de una accióngubernamental correctiva y que Occidente es responsable oculpable de la pobreza del Tercer Mundo (Bauer 1981: cap4). De hecho, se cree ampliamente que la justicia socialrequiere de más igualdad en la distribución de la riqueza,lo cual implica que las diferencias significativas en elingreso y la riqueza (determinadas por alguna norma socialarbitraria) se deben a "la explotación, opresión,discriminación o privilegios inapropiados; y que laredistribución organizada políticamente es deseable" (Bauer1984: 73). Esta "legitimación de la envidia" es una granamenaza a la sociedad abierta, desde el punto de vista de

Bauer. La igualdad, entendida adecuadamente como igualdadante la ley, en donde las reglas justas proveen igualprotección a las personas y propiedades, es uno de losprincipios básicos de un orden liberal de mercado y escompletamente compatible con la libertad individual. Bauerno se opone al uso de la fuerza para salvaguardar losderechos de propiedad sino al uso del poder del gobiernopara tomar la propiedad privada sin el consentimiento deldueño con tal de alcanzar una equidad en el ingreso dictadapolíticamente. Mientras más avanza un país en el caminohacia el Estado redistribuidor o de beneficencia, mayor esla desigualdad de poder que resultará a medida que lasdecisiones políticas entorpezcan las decisiones delmercado.

Si hay personas que creen que la riqueza de Occidente es elresultado de la explotación de los recursos del TercerMundo y que el comercio hace a los ricos más ricos a costade los pobres, entonces habrá más presión internacionalpara que los gobiernos Occidentales exploten a los ricos ennombre de la justicia social. Cuando esa mentalidadprevalece, la democracia constitucional, el gobiernolimitado y el orden espontáneo del mercado cederán para darlugar a un mayoritarismo crudo y a un socialismo demercado. Ese proceso es aparente hoy en el crecimiento delEstado paternalista y el movimiento anti-globalización.

Bauer (1984: 35) claramente entendía que el "reemplazo delos procesos del mercado por decisiones políticas da poder,influencia, empleos y dinero a políticos y burócratas". Elreto es limitar el poder del gobierno por medio de una"constitución de libertad", como la que Hayek (1960)describió para que la gente sea libre de escoger. Paralograrlo, sin embargo, debe haber un rasgo de libertad enla sociedad. La persistencia y el valor de Bauer en ladefensa de los principios de una sociedad libre deben sercontinuados hoy si es que el liberalismo de mercado ha desobrevivir y florecer en el siglo XXI. El primer paso esreconocer la necesidad de pensar claramente. Como señalóBauer (1984: 37), "a pesar de su productividad, el ordendel mercado puede derrumbarse a menos que sus participantesy partidarios tengan la claridad de pensamiento y lavoluntad y valor para trabajar por su supervivencia". Bauer

(1984: 89) solía decir que "hay una verdad profunda en lamáxima de Pascal de que trabajar duro para pensar claro esel principio de la conducta moral". Cuando recibió eltítulo nobiliario en 1982, Lord Bauer escogió el lema"Seamos libres de sesgo" para su escudo de armas.

El legado de Bauer es que a través de su persistencia yclaridad de pensamiento nos ayudó a entender mejor lasfuerzas que dan forma al desarrollo económico,especialmente las instituciones de propiedad privada,moneda estable, libre comercio, y gobierno limitado—lascuales sostienen el orden liberal del mercado. Su"discrepancia con el desarrollo", con la cual derribó casipor sí solo el modelo de desarrollo estatista, garantizaque será recordado como uno de los grandes campeones de lalibertad del siglo XX.

4. VALORACIÓN PERSONAL Y CONCLUSIONES

Para cerrar este extenso trabajo, solo queda hacer unavaloración personal hacia todo lo expuesto anteriormente yser lo más crítico posible hacia las ideas generales delautor.

P. T. Bauer sostiene que existen 3 mundos:Desarrollado, en vías de Desarrollo ySubdesarrollados. El problema radica en lasInstituciones Públicas para estar en un rango u otro.

Para Bauter el Estado o el Sector Público, sólo debede intervenir de una manera precisa, protegiendo lapropiedad privada y asegurar los elementos principalespara alcanzar el Desarrollo de una región o país, através de esa protección se conseguirán poner laspautas para que cada individuo sea capaz de superarlas dificultades, prima las opciones individuales porencima de las colectivas.Hay que decir, que se ha demostrado que laintervención pública en las economías de mercado,siempre y cuando las Instituciones sean responsables yfuertes incide en un mayor grado de Desarrollo. Paraconseguirlo habría que sentar unas bases mentalizadascon el paso del Subdesarrollo al Desarrollo.

Siguiendo la idea anterior, Bauer dice que la economíacapitalista se centra en la búsqueda del acceso alpoder corrupto, se mira por alcanzar beneficios que dela política se transmiten. Hay que decir, que Bauer en eso podría tener razónsiempre y cuando se mida el grado de corrupciónexistente en una Economía Subdesarrollada, que mina elproceso de transición. Si este grado fuera elevado, sedebería de tomar medidas alternativas a la forma deGobierno, pero sin desplazar el papel que el SectorPúblico desempeña dentro de ese proceso. Se ha vistoque economías comunistas también siguenSubdesarrolladas, lo que ha de primar son estructurasinstitucionales sólidas y comprometidas.

Para Bauer, el papel del comercio exterior no es tanrelevante como el del propio desarrollo del comerciointerno, el cual consiste en el paso de una economíatradicional de subsistencia a una moderna y conestructuras adecuadas. Para él la FBK no es tanimportante, sino que prefiere que la mano de obra seadecue a los métodos de producción internos.En cuanto a esta teoría, se ha demostrado que el gradode apertura de un país con el resto del Mundo, y elgrado de especialización en un determinado bien, es uncondicionante a veces, necesario para poder seguir elproceso de transición.

Hay que indicar que, Bauer sostiene una de las teoríasquizás más importantes, consistente en que los paísesde Occidente y Desarrollados, ven a los países pobrescomo una oportunidad de aprovechamiento de susrecursos, lo que les haría cada vez más pobres y aellos más ricos; es decir, existen países pobresnecesariamente para que los ricos lo sean aún másEsta idea es básica, que se destinan muchísimosmillones de $ a ayudas al Desarrollo y en pocasocasiones se encuentran con grados de desarrolloimportantes, sí que es cierto que hay que valorar queese dinero que se destina a veces se queda en manos

corruptas de los políticos, como el propio autorindica.

Para finalizar, Bauer dice que uno de los principalesproblemas es el desigual reparto de la renta y riquezaen los países (idea que proviene del resultado delapartado anterior)Si se produjese un reparto equitativo de la misma, sellegaría a concentrar en muchas más manos el dinero yde una manera más eficiente, se llevarían medidas quecondujesen al camino correcto del Desarrollo.

5.BIBLIOGRAFÍA Y ENLACES

P.T. BAUER: “Crítica a las teorías del Desarrollo” (1981) Biblioteca de Economía.

P.T. BAUER: “El orden del Mercado y la planificación estatal” (1957) Biblioteca de Economía.

Apuntes de la asignatura “Economía Española y Mundial I”. Profesor D. Jorge Malfeito Gaviro. Tema 3: Desarrollo y Subdesarrollo. Curso 2006-2007. URJC

Apuntes de la asignatura “Economía del Crecimiento y del Desarrollo”. Profesor D. Miguel Cuerdo Mir. Tema 7: Desarrollo Económico. Curso 2012-2013. URJC

www.ilustracionliberal.com: “P.T. Bauer y la Ilustración liberal”

www.liberalismo.com: “P.T. Bauer: Un disidente aliado de lospobres”

www.pnud.org: “El debate sobre la Economía del Desarrollo”

www.libertaddigital.com/otros/revista/articulos/56320375.htm: “P.T. Bauer contra el cliché del tercermundismo”