Fernández Fernández A., Morais, R. 2012, Terra Sigillata Bracarense Tardía (TSBT), en D. Bernal y...

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Cerámicas hispanorromanas II Producciones regionales DARÍO BERNAL CASASOLA ALBERT RIBERA I LACOMBA (Eds.) Servicio de Publicaciones

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Cerámicas hispanorromanas IIProducciones regionales

DARÍO BERNAL CASASOLAALBERT RIBERA I LACOMBA (Eds.)

Servicio de PublicacionesServicio de Publicaciones

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(Ed

s.)En la misma serie

El ajuar de las viviendas jerezanas en época de Isabel Ide Castilla (1474-1504)Juan Abellán Pérez

Las primeras ocupaciones humanas de Los Barrios(Cádiz). El ejemplo proporcionado por el río PalmonesVicente Castañeda Fernández (coord.)

Cerámicas hispanorromanas. Un estado de la cuestiónDarío Bernal Casasola y Albert Ribera i Lacomba

Gadir y el Círculo del Estrecho revisados. Propuestasde la Arqueología desde un enfoque socialJuan Carlos Domínguez Pérez (Ed. Cient.)

Personajes, poderes, fortalezas y otros temas de laHistoria de Andalucía (siglos XIV y XVI)Alfonso Franco Silva

Linajes gaditanos en la Baja Edad Media. Breveestudio de la oligarquía local (siglos XIII-XV)Francisco Javier Fornell Fernández

Cultos y ritos de la Gadir feniciaMaría Cruz Marín Ceballos (Coord.)

El castillo de San Romualdo. Historia y documentosde la ciudad de San Fernando (Cádiz)Fernando Mósig Pérez

El Theatrum Balbi de GadesDarío Bernal y Alicia Arévalo

Darío Bernal Casasola

Doctor en Filosofía y Letras —especialidad Geografíae Historia— por la Universidad Autónoma de Madrid(1997), es actualmente profesor titular deArqueología de la Universidad de Cádiz, adscrito alDepartamento de Historia, Geografía y Filosofía.Arqueólogo y especialista en Historia Económicadel Mundo Antiguo, ha dirigido varias decenas deexcavaciones arqueológicas en alfares romanos yen ciudades de la antigua Baetica y en Pompeya, yha publicado varios centenares de estudios sobreánforas, contextos cerámicos y la importancia de lacultura material para las temáticas de Arqueologíade la Producción, tanto en Andalucía como en laantigua Tingitana, el denominado Círculo delEstrecho. Es miembro correspondiente de la RealAcademia de la Historia en Cádiz, y vicepresidentede la SECAH.

Albert Ribera i Lacomba

Doctor en Geografía e Historia —especialidadPrehistoria y Arqueología— por la Universidad deValencia (1993), es actualmente jefe de Sección deArqueología y director del Centro Arqueológico del’Almoina del Ayuntamiento de Valencia.Arqueólogo y especialista en Urbanismo,Arquitectura y Cultura Material del Mundo AntiguoMediterráneo, ha dirigido más de cincuentacampañas de excavaciones urbanas en Valencia ynueve en Pompeya, y ha publicado más de uncentenar de estudios, entre los que hay varios deánforas, producciones de barniz negro, contextoscerámicos y la importancia de la cultura materialpara las temáticas de Arqueología del Consumo yel Comercio, tanto en Valencia e Italia como en el Mediterráneo.

Cerámicas hispanorromanas IIProducciones regionales

Esta segunda entrega de las Cerámicas hispanorromanas trata de profundizar en elconocimiento de las producciones alfareras fabricadas en la Península Ibérica y lasBaleares entre el siglo III a.C. e inicios del mundo medieval. Debido al éxito editorial ya la gran acogida en la comunidad científica del primer volumen se ha decididocontinuar sintetizando aquellos estudios e investigaciones desarrollados porarqueólogos en torno a las cerámicas de manufactura local a imitación de lasromanas, siguiendo tradiciones prerromanas o aquellas con personalidad propia.Casi cincuenta investigadores, plumas consagradas y noveles, procedentes de unaveintena de instituciones distribuidas por toda la geografía española y portuguesa— entre ellas quince universidades —, han reunido en treinta y cinco capítulos tantosíntesis como novedades de la vajilla fina (Bloque I), de las ánforas (II), de las lucernas(III), de las cerámicas comunes (IV) o de otras producciones (V), ilustrando el notabledinamismo actual de la investigación sobre ceramología hispanorromana.

Con la colaboración de

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Cerámicas hispanorromanas II Producciones regionales

DARÍO BERNAL CASASOLA

ALBERT RIBERA I LACOMBA

(Eds. científicos)

Servicio de Publicaciones

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 04/06/12 10:18 Página 5

Imagen de cubierta: Lucerna tardorromana con cruz enjoyada en disco y asazoomórfica, de Carteia (según F. Presedo et alii, 1982: Carteia I, ExcavacionesArqueológicas en España 120, Madrid, figura 125, nº 9), de posible producciónlocal/regional

Esta obra es resultado del Proyecto de Investigación HAR2011-28244 del Plan Nacional de I+D+i del Ministerio de Economía y Competitividad/Feder del Gobierno de España, titulado Amphorae ex Hispania. Paisajes de producción y consumo, con la colaboración del proyecto HAR2010-15733

Esta obra ha superado un proceso de evaluación ciega por pares

Esta Editorial es miembro de la UNE, lo que garantiza la difusión ycomercialización de sus publicaciones a nivel nacional e internacional

EditaServicio de Publicaciones de la Universidad de Cádizc/ Doctor Gregorio Marañón, 3 – 11002 Cádiz (España)www.uca.es/[email protected]

© Servicio de Publicaciones de la Universidad de Cádiz© De cada capítulo su autor

Maquetación: Trébede Ediciones, S.L.Imprime:ISBN: 978-84-9828-364-8Depósito Legal: CA 247-2012

Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación públicao transformación de esta obra puede ser realizada con la autorización desus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO(Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesitafotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra.

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Introducción ............................................................................................................................................................ 15Darío Bernal Casasola y Albert Ribera i Lacomba

BLOQUE I. VAJILLA FINA

Imitaciones de campaniense en el mediodía peninsular. La cerámica gris bruñida republicana ............................ 23Andrés Mª Adroher Auroux y Alejandro Caballero Cobos

Cerámicas tipo Peñaflor del Alto Guadalquivir ....................................................................................................... 39Pablo Ruiz Montes

Los alfares isturgitanos: ¿un posible modelo de control productivo inicial? ........................................................... 49Mª Isabel Fernández-García

Las producciones de sigillata hispánica locales y regionales del Municipium Augusta Bilbilis

(Calatayud-Zaragoza) ............................................................................................................................................... 63Jesús Carlos Sáenz Preciado

La fabricación de vasos para beber de paredes finas en el valle medio del Ebro .................................................... 83José Antonio Mínguez Morales

Las cerámicas imitación de sigillata en el occidente de la Península Ibérica durante el siglo V d.C. ..................... 97Luis Carlos Juan Tovar

Terra Sigillata Bracarense Tardía (Tsbt). O Grupo II das Cerâmicas de engobe vermelho não vitrificavel

(Delgado 1993-94). O Cerâmicas de Engobe Vermelho. Grupo II (Delgado y Morais, 2009) .................................. 131Adolfo Fernández Fernández y Rui Morais

BLOQUE II ÁNFORAS

Producciones anfóricas tardorrepublicanas y tempranoaugusteas del valle del Guadalquivir. Formas y ritmos

de la romanización en Turdetania a través del artesanado cerámico ...................................................................... 177Enrique García Vargas

Ánforas tarraconenses para el limes germano: una nueva visión de las Oberaden 74 ............................................ 207César Carreras Monfort y Horacio González Cesteros

¿Ánforas Tipo Segobriga/Oberaden 74 similis? Bases para una producción singular en la Tarraconense interior ....... 231Rui Roberto de Almeida y Jorge Morín de Pablos

Índice

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Las ánforas del tipo Puerto Real 3. Un nuevo envase de salazones gaditanas de época antonino-severiana .......... 247Darío Bernal Casasola y Enrique García Vargas

Producciones anfóricas en la costa meridional de Carthago-Spartaria ................................................................. 255Mª del Carmen Berrocal Caparrós

Las ánforas onubenses de época tardorromana ...................................................................................................... 279Jessica O’Kelly Sendrós

BLOQUE III LUCERNAS

Una nueva producción de lucernas de canal en terra sigillata hispánica en el norte de la Península .................. 299Ángel Morillo Cerdán

Producción de lucernas altoimperiales en Hispalis: el taller de la plaza de la Encarnación de Sevilla ................... 309Jacobo Vázquez Paz

Lucernas a torno de época imperial: una producción singular de Carthago Noua (Cartagena) ........................... 325Alejandro Quevedo Sánchez

La producción de lucernas en el sureste peninsular: primeros datos ..................................................................... 353Antonio Manuel Poveda Navarro

Las lucernas de producción regional de Bracara Augusta .................................................................................... 369Rui Morais

BLOQUE IV CERÁMICAS COMUNES

Las cerámicas de cocina en el Alto Guadalquivir,siglos I-II d.C. ............................................................................... 395Mª Victoria Peinado Espinosa

Las cerámicas comunes altoimperiales de Augusta Emerita ................................................................................. 407Macarena Bustamante Álvarez

Cerámica regional reductora de cocina altoimperial en la fachada mediterránea .................................................. 435Esperança Huguet Enguita

La cerámica común tarraconense (COM.OX.TARR./COM.RED.TARR) y su variante con decoración pintada (CMG) ........ 453Ramon Járrega Domínguez y Loïc Buffat

Cerámica común altoimperial en el nordeste peninsular ....................................................................................... 469Josep Casas Genover y Josep Mª Nolla Brufau

La cerámica común tardía en Sevilla (siglos IV al VI d.C.) ........................................................................................ 487Cinta Maestre Borge

Las cerámicas comunes del nordeste peninsular y las Baleares (siglos V-VIII): balance y perspectivas de la

investigación ........................................................................................................................................................... 511Josep Mª Macias Solé y Miguel Ángel Cau Ontiveros

La cerámica común Golfo de Bizkaia ...................................................................................................................... 543Lorea Amondarain Gangoiti y Mª Mercedes Urteaga Artigas

Las cerámicas comunes no torneadas de difusión aquitano tarraconense (AQTA): estado de la cuestión ............. 561Milagros Esteban Delgado, Mª Teresa Izquierdo Marculeta, Ana Martínez Salcedo y François Réchin

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:15 Página 10

BLOQUE V OTRAS PRODUCCIONES HISPANORROMANAS

La cerámica púnico-ebusitana en época tardía (siglos III-I a.C.) .............................................................................. 583Joan Ramon Torres

Cerámicas negras bruñidas del oriente vacceo ....................................................................................................... 619Fernando Romero Carnicero, Carlos Sanz Mínguez, Cristina Górriz Gañán y Roberto De Pablo Martínez

La cerámica gris (y oxidada) ampuritana ................................................................................................................ 639Josep Casas Genover y Josep Mª Nolla Brufau

La cerámica de engobe blanco ................................................................................................................................ 655Josep Casas Genover y Josep Mª Nolla Brufau

Cerámica gris romana del Noroeste. Los vasa potoria ........................................................................................... 661Esperanza Martín Hernández

A cerâmica cinzenta grosseira do Algarve ............................................................................................................... 681Catarina Viegas

Muestras de cerámica engobada romana de producción local de Lucus Augusti (Lugo) ....................................... 699Enrique J. Alcorta Irastorza y Roberto Bartolomé Abraira

Colmenas cerámicas en el territorio de Segobriga. Nuevos datos para la apicultura en época romana en Hispania ... 725Rui Roberto de Almeida y Jorge Morín de Pablos

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:15 Página 11

origen de la producción, en este caso sin mayores pro-

blemas, al conocer —gracias al análisis de pastas— que

al menos, una mayor parte de los productos han salido

de los talleres alfareros de la capital provincial de Bracara

Augusta. Por último, distinguimos cronológicamente a

la producción —evitando la incorrecta identificación de

esta producción con la Alto Imperial bracarense— al in-

cluir el término Tardía puesto que su arco temporal se

concentra en los siglos IV y V d.C.

Esta producción, bautizada por M. Delgado como

Grupo II de Imitación de engobe vermelho não vitrifica-

vel (Delgado, 1993-94), no es más que una parte de la pro-

ducción local de cerámicas tardías de Bracara Augusta. En

los talleres alfareros de la capital —algunos de ellos si-

tuados posiblemente en la zona del Prado— se producían

varios productos como sucedía en la mayor parte de los

talleres cerámicos en época tardía. El ejemplo más claro lo

encontramos en los alfares africanos de Oudhna (Barraud

et alii, 1998) o de Sidi Khalifa (Ben Moussa, 2007) donde

se fabricaban en los mismos centros y se cocían en los

mismos hornos cerámicas comunes y sigillata. Lo normal

es pensar que en un determinado momento (¿finales del

siglo III-inicios del siglo IV?), uno o más talleres decidie-

ron producir junto a las cerámicas comunes piezas de mesa

que imitasen a las sigillatas importadas —africanas e his-

pánicas tardías— que llegaban a los mercados de la ciu-

dad. En ningún momento cambian la técnica productiva

ni la materia prima —utilizan las mismas arcillas que para

las «comunes» pero más depuradas—, lo que ahora pro-

ducen son formas más o menos idénticas a las formas co-

mercializadas en sigillata y sobre todo sus decoraciones,

acabando las piezas mediante un recubrimiento a base de

un engobe rojo —una técnica utilizada en la producción

bracarense desde al Alto Imperio— y que le daban a las

piezas cierto aire a sigillata. La pieza no busca engañar al

Terra Sigillata Bracarense Tardía (TSBT)O Grupo II das Cerâmicas de engobe vermelho não vitrificavel (Delgado 1993-94)O Cerâmicas de Engobe Vermelho. Grupo II (Delgado y Morais, 2009)

Adolfo Fernández FernándezFundação para a Ciência e Tecnologia, Universidade de Coimbra-I&D-CECH

Rui MoraisUniversidade do Minho (Braga) Universidade de Coimbra-I&D-CECH

Definición y características de la producción

Los autores de este trabajo hemos optado por proponer

aquí una nueva terminología para esta cerámica de pro-

ducción bracarense ya que las nomenclaturas en uso

hasta el momento la englobaban dentro de una realidad

heterogénea y más amplia: la cerámica de engobe rojo,

con las que comparte únicamente el acabado mediante

el recubrimiento a base de un engobe en tonos rojizos.

La cerámica que aquí tratamos, analizamos y ordenamos

apoyándonos en datos crono-estratigráficos y compara-

tivos es una vajilla de mesa —cuencos, escudillas, platos

y fuentes— que podríamos definir como «fina» y a un

nivel de mercado similar —quizás a un escalón inferior—

al de otras vajillas tardías en «sigillata» como las africanas

o las hispánicas, aunque reducida a un ámbito de distri-

bución regional (sur de la Gallaecia). No encontramos im-

pedimento alguno en incluir estos productos dentro de

la categoría de sigillata, una vez que esta acepción ha

perdido en cierto modo su antigua definición —uso de

moldes, presencia de sellos y modo de cocción C de

Picon (2002, 143)— utilizándose actualmente de manera

convencional (Uscatescu et alii, 1994, 186) debido a la ne-

cesidad de una uniformidad terminológica a la hora de

referirnos al diverso grupo de las vajillas finas tardías.

Las razones por nosotros esgrimidas para la utilización de

terra sigillata no son otras que las anteriormente pro-

puestas por otros autores a la hora de incluir bajo esta no-

menclatura —utilizada como ya hemos señalado de forma

convencional— «vajillas finas» tardías de orígenes diver-

sos: orientales, africanas (Carandini et alii, 1981), hispá-

nicas (Orfila, 1993, 126-127) o gálicas (Mayet, 1984, 268;

Uscatescu et alii, 1994, 186).

Hemos optado igualmente por incluir en la nomen-

clatura el gentilicio Bracarense que refiere la zona de

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132 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

II —nuestra TSBT— recogida en ese trabajo nos puede ser-

vir para la descripción general de la producción:

As far as Group II is concerned, quartz is the dominant

mineral followed by mica; Kfeldspar and plagioclases

are vestigial in most samples. Hematite occurs in most

of the samples. Concerning clay minerals, kaolinite is

present in two samples… Typological Group II is cha-

racterized by a reddish-brown to yellowish brown and

pale brown paste; pores are abundant and usually stret-

ched and some fissures are also present. The non plas-

tic grains are quartz, K-feldspars, muscovite, and biotite,

plagioclase, grog and ferruginous grains (ibid., 162-163).

En general, las pastas son blandas, de color amarro-

nado —en ocasiones sándwich con el interior gris— y la-

minadas (tipo galleta). Los elementos no plásticos a simple

vista son cuarzos aristados finos, mica fina plateada, es-

casas micas doradas, inclusiones negras —posiblemente

piroxenos— y escasos óxidos de hierro. El aspecto ge-

neral de la pasta es una matriz granulosa con pocas in-

clusiones groseras. Los engobes son habitualmente finos

—hay alguna pieza con engobe más denso— tipo aguada,

de colores que van desde el rojo inglés al rojo venecia y

que cubren toda la superficie de las piezas, incluido el

exterior del fondo de los platos/fuentes y caracterizados

por presentar inclusiones de fina mica plateada en su-

perficie. En ocasiones, se observan marcas de pulido que

confieren a las piezas cierto brillo. Ni los individuos de

Braga (Delgado, 1993-94, 121) ni las piezas de Vigo pre-

sentan marcas de exposición al fuego, lo que demuestra

una funcionalidad clara como vajilla de mesa.

Historiografía

La TSBT siempre ha sido tratada en las investigaciones

como parte de la producción de cerámica de engobe rojo.

Por ello, la historiografía de esta vajilla va irremediable-

mente unida a la historia de la investigaciones sobre el he-

terogéneo conjunto conformado por todas las cerámicas

que presentan un acabado mediante la aplicación de un

engobe rojo. Será a principios del siglo XX cuando arran-

quen los primeros estudios sobre un tipo de cerámica que

se diferencia de las producciones de uso común por el

hecho de portar un característico engobe rojo, que ten-

dría por finalidad conseguir piezas impermeables. Las pri-

meras producciones con estas características fueron estu-

diadas por especialistas alemanes que identificaron, entre

consumidor —las diferencias saltan a la vista entre unas y

otras— sino ocupar un lugar en el mercado, en un posi-

ble «escalón inferior» a las vajillas importadas y destinadas

posiblemente a un estrato poblacional concreto. Otro de

los aspectos que caracterizan a la producción —quizás la

más significativa y que la separa definitivamente de otras

producciones regionales de imitación— es la importante

presencia de decoración estampada sobre fondos de pla-

tos y fuentes. La técnica utilizada es únicamente la estam-

pación de motivos mediante punzones —se han docu-

mentado hasta el momento cincuenta y dos motivos—

formando composiciones decorativas en bandas concén-

tricas con una altísima precisión y perfección tanto en los

motivos como en las composiciones. Dicha perfección de

los numerosos punzones — prácticamente idénticos a los

africanos— y de las propias composiciones podrían indi-

car la obtención del negativo a partir de positivos origi-

nales —las propias piezas tunecinas, muy abundantes en

la ciudad—. No obstante, no podemos descartar una com-

pra directa de punzones africanos por parte de los talle-

res bracarenses o incluso la instalación de algún alfarero

tunecino en la ciudad, que trajese consigo la tradición de-

corativa africana.

Los devenires de los mercados llevarán consigo un

aumento progresivo de la producción una vez que las

cerámicas africanas no llegan en las cantidades necesa-

rias para cubrir la demanda. En este momento (cuartos

centrales del siglo V), es posible que la TSBT alcance su

momento álgido —máxima producción y máxima difu-

sión— que decaerá una vez que se recupere el comer-

cio interprovincial. La producción no colapsa sino que

evoluciona hacia un nuevo producto, las Cinzentas tar-

días de Braga y Dume (Gaspar, 2000 y 2003), acorde

con el cambio de tendencia que se produce a finales de

la centuria con la llegada al Noroeste de nuevas pro-

ducciones de vajilla fina —DSP atlántica, LRC, LRD y nue-

vas formas africanas— que modifican el gusto hacia piezas

con acabados grises.

En el trabajo de M. Delgado, la autora distinguía ma-

croscópicamente hasta cinco tipos de pastas (1993-94,

121-122). El posterior trabajo de análisis petrográfico vino

a considerar todas estas pastas —a partir de dieciséis in-

dividuos que se consideraron representativos de la pro-

ducción— eran originarias de un mismo centro productor

localizado en Braga (Oliveira et alii, 2005, 159-164), po-

siblemente en la zona alfarera del Prado, a unos kilóme-

tros de la ciudad. La descripción de las pastas del Grupo

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:16 Página 132

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 133

por M. Delgado, cuando presenta un estudio absoluta-

mente innovador titulado “Notícia sobre cerâmicas de en-

gobe vermelho não vitrificável encontradas em Braga”

(Delgado, 1993-94, 113-149). En este trabajo, la autora da

a conocer dos producciones cerámicas muy abundantes

en Braga, una que imita el tipo de engobe y las formas de

la producción de engobe pompeyano (Grupo I) y otra que

se caracteriza por imitar, con bastante perfección, formas

de la terra sigillata hispánica y africana (Grupo II). Por

primera vez, las piezas de imitación se individualizan y se

separan de las otras producciones cerámicas recubiertas

con una capa de engobe rojo.

Tendrán que pasar más de diez años para que se re-

tomen los estudios sobre estas vajillas, cuando se publi-

que un estudio químico que caracterizaba a la producción

(Oliveira et alii, 2005, 159-164). En este trabajo colectivo,

mencionado aquí, se analizaron numerosas piezas del

Grupo II de las imitaciones llegando a la conclusión de que

conformaban una única producción y, sin lugar a dudas

su origen debía ser Braga y en concreto, un área locali-

zada en la zona alfarera del Prado, a unos 11 kilómetros

de la ciudad (ibid., 164). En el año 2007, se publican cinco

piezas y veinte fondos decorados de imitación de engobe

vermelho localizados en la villa de Toralla-Vigo (Fernán-

dez et alii, 2007). Este trabajo supone la primera atesta-

ción de estos productos fuera de la capital conventual y

su entorno más cercano, y al mismo tiempo llevó con-

sigo una reactivación de los estudios sobre estas vajillas.

A finales del año 2009 sale a la luz la Guia das cerâmicas

de produção local de Bracara Augusta (Delgado y Mo-

rais, 2009) donde las imitaciones de engobe rojo adquie-

ren un papel destacado creándose además un Grupo III

de cerámicas de engobe rojo compuesto por formas de ce-

rámica común (ibid., 54-55). En esta guía se publican,

además de las formas conocidas de 1994 (Delgado, 1993-

94), nuevas piezas que convierten a las imitaciones del

Grupo II en una producción de una riqueza formal y de-

corativa tremendamente importante.

Efectivamente, si nos fijamos en el texto de síntesis

sobre «Las imitaciones de cerámica africana en Hispa-

nia», presentado por Xavier Aquilué (2008, 553-561) en

el artículo del libro Cerámicas hispanorromanas. Un es-

tado de la cuestión (Bernal y Ribera i Lacomba eds.,

2008), fácilmente se desprende que las producciones de

imitación de Braga, en comparación con las produccio-

nes peninsulares allí recogidas, sobresalen por su diver-

sidad, por su fidelidad y por su calidad.

la cerámica romana proveniente de nivles republicanos y

augusteos, platos de fondo plano y paredes oblicuas, que

se caracterizaban por poseer un engobe espeso, bien ali-

sado y de un color rojo característico de los frescos de

Pompeya (Ritterling, 1901; Kruger 1905; Loes chc ke, 1919,

apud Aguarod, 1991, 51-96). Estas producciones bautiza-

das como «Pompejanish-rotenplatten», de origen itálico y

con las pastas típicas volcanicas, fueron exportadas a todo

en Imperio y rápidamente fueron reproducidas en las pro-

vincias. Acababa de adoptarse una nueva tecnología que

tendrá gran éxito durante toda la época romana.

En la segunda mitad del siglo XX, se realizaron otros

estudios sobre las producciones de engobe rojo pom-

peyano, entre las que destacan los trabajos realizados en

la década de los setenta, por Ch. Goudineau (1970, 159-

186) y D.P.S. Peacock (1977, 147-162).

En la Península, los primeros trabajos donde se tratan

e individualizan estas producciones fueron hechos por

Jorge e Adília Alarcão (s/fecha, 18-21), con motivo de una

pequeña exposición sobre algunos de los trabajos ar-

queológicos realizados en Portugal desde 1960 hasta 1969,

organizada en el transcurso del II Congreso Nacional de

Arqueología, que se celebraba en Coimbra. En el breve

texto allí presentado sobre estas producciones los auto-

res hacían alusión a una posible producción con origen en

el conventus bracarensis: «entre as imitações achadas em

Portugal, é interessante mencionar a possibilidade de um

centro de fabrico situado na região de Braga» (ibid., 20).

Más tarde, en un encuentro memorable sobre las ce-

rámicas recuperadas en las excavaciones luso-francesas

de Conimbriga, organizado en marzo de 1975, Adília Alar-

cão hace una breve presentación sobre estas cerámicas

identificadas en aquella ciudad, seguida de una breve dis-

cusión por parte de algunos de los más reputados espe-

cialistas allí presentes (Ch. Goudinau, P.-A. Février, J.-P.

Morel, P. Rouillard, M. Labrousse, N. Lamboglia, H. Con-

fort, A. Carandini, R. Étienne, P. Sillieres, F. Pallarès). En esta

presentación, la autora se refiere, además de a los centros

productores de Conimbriga y a otro de producción alen-

tejana, a un centro productor situado en la región entre

Braga-Guimaraes (Alarcão, 1975, 9-17). En este encuentro,

en el momento reservado a la discusión de estas produc-

ciones, N. Lamboglia llama la atención de la necesidad de

no valorar en exceso el aspecto tecnológico (que abarca-

ría producciones fechables entre en siglo VII a.C. y el siglo

V), pero si el destacar las producciones en relación a los

locales de producción. Y este fue el parámetro adoptado

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:16 Página 133

134 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

pirada en la fuente Hayes 50A/B en TSA C—. En este pri-

mer momento, las piezas se engoban completamente

pero todavía no se decoran con motivos estampados.

También documentamos la existencia de piezas, posi-

blemente de esta producción, pero con pastas ligera-

mente más groseras y sin el típico engobe rojo, en

concreto vasos idénticos a la forma Drag. 27 en TSH tran-

sicional o TSHT (Morais, 2010). Al no portar dicho engobe

rojo —una de las características que definen a la TSBT—

hemos optado por no incluir este ejemplo en la tipolo-

gía. No obstante, somos conscientes que posiblemente

esta pieza y otras similares de vajilla de mesa sin engobe

provengan del mismo taller que comienza a producir los

primeros ejemplos de TSBT a la par de otras cerámicas

comunes y que todavía crea piezas sin la totalidad de las

características que definirán a la producción. Es posible

que estas primeras piezas de experimentación estuviesen

enfocadas al propio mercado de la capital y su entorno

(mínima difusión).

FASE II (segunda mitad del siglo IV-inicios del siglo V)

Se trata de la fase de despegue de la producción, cuando

adquiera la totalidad de las caracterísitcas que definirán

a la TSBT. Durante la segunda mitad del siglo IV se con-

tinúan produciendo ejemplares de la Forma 1 y de la

Forma 4 y deja de producirse la Forma 2 y, posiblemente,

las piezas de vajilla de mesa sin engobar fruto del mo-

mento de experimentación. Será ahora cuando comience

la producción de nuevas formas inspiradas sobre todo

en el repertorio formal de la sigillata africana D y C, tre-

menedamente abundante en el Noroeste —al igual que

por todo el Mediterráneo y el Atlántico— y en menor

medida de la sigillata hispánica. Se fechan en esta fase

las Formas 3-7, los ejemplos más tempranos de la Forma

8 —variante A—, la Forma 9, los individuos de la va-

riante A de la Forma 18, posiblemente la Forma 19 y, ya

en los inicios del siglo V —coincidiendo con el final de

la Fase II y el inicio de la Fase III— probablemente co-

mience a producirse la Forma 16 y los primeros indivi-

duos de la Forma 21, que perdurarán durante la Fase III.

Se observan dos momentos bien definidos en esta fase ca-

racterizados por la presencia o la ausencia de decora-

ción estampada sobre los fondos de los grandes

platos/fuentes: los fechados durante la segunda mitad

del siglo IV no portan decoración estampada —en oca-

Tipología y cronología

Hemos creído necesario el proponer aquí una tipología

de la producción basándonos en los numerosos indivi-

duos recopilados durante las últimas décadas en inter-

venciones localizadas en yacimientos del sur de Galicia

y norte de Portugal. No obstante, la base tipológica de-

viene en su mayoría de piezas de Bracara Augusta, mu-

chas de ellas ya publicadas (Delgado, 1993-94, 113-149;

Delgado y Morais, 2009) y otras inéditas, y de las recu-

peradas en dos intervenciones viguesas, una inédita, la

de Marqués de Valladares y otra parcialmente publicada,

la villa de Toralla (Fernández et alii, 2007, 99-108; Fer-

nández et alii, 2008, 575-585).

A la hora de presentar esta primera propuesta tipoló-

gica hemos optado por la presentación de una cronoti-

pología — frente a la tipología abierta— al estilo de lo

propuesto por otros autores (Hayes, 1972; Bonifay, 2004).

La elección responde a la propia idiosincrasia de la pro-

ducción, una vajilla fina que imita con tremenda fidelidad

los modelos de éxito en los mercados durante los siglos IV

y V, la sigillata africana y la sigillata hispánica tardía. El

buen hacer de los alfareros bracarenses les lleva a fabricar

piezas prácticamente idénticas formal y decorativamente

a las sigillatas importadas lo que nos permite vincular —

en ocasiones con ciertas variaciones— la cronología de

los modelos imitados a las formas en TSBT, convirtiendo

a estas en auténticos fósiles directores en las intervencio-

nes arqueológicas del Noroeste. Además, contamos igual-

mente con importantes datos cronoestratigráficos que le

aportan a las formas dataciones concretas y refuerzan otras

propuestas arrojadas de la comparación con los modelos

imitados. Los datos cronoestratigráficos de Braga y Vigo,

las propias formas y sus decoraciones nos posibillitan

igualmente el proponer una evolución de la producción

de TSBT de engobe rojo desde sus inicios hasta su paula-

tina transformación en vajilla fina gris.

FASE I (¿finales del siglo III?-primera mitad del siglo IV)

Se trata de una fase que podríamos designar como de

«experimentación previa» que conlleva la fabricación de

las primeras piezas que imitan a formas en sigillata his-

pánica y africana. El repertorio formal parece reducirse

a los individuos más antiguos de la Forma 1, a la Forma

2 y posiblemente a algun ejemplo de la Forma 4—insi-

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:16 Página 134

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 135

las copas de la Forma 3 substituidas ahora por dos nue-

vos modelos que imitan a exitosas formas africanas, las

Formas 10 y 11, esta segunda probablemente conforme

un servicio con la Forma 12. Aparecen nuevos tipos de

platos/fuentes como las Formas 13 y 14, es posible que

continúe la producción del plato/fuente de la Forma 16,

desapareciendo del repertorio las Formas 4, 5 y la ante-

riormente nombrada Forma 7. Se detecta la aparición de

nuevas formas de platos más o menos profundos (Formas

17 y 18B), de cuencos carenados (Forma 20) y la Forma

21 —imitación de la exitosa forma 37T en TSHT— se

convierte en una de las formas más importantes de la

TSBT. También se observa la aparición de formas poco

comunes como las copas de borde estrellado (Forma 15)

posiblemente inspiradas en modelos metálicos o incluso

en vajilla de madera. En cuanto a la decoración, se in-

corporan nuevos motivos que caracterizarán este perío -

do, entre los que destacan los círculos y palmetas con

orla dentada —de posible inspiración gálica—, las rose-

tas y los galones, y se dejan de utilizar las palmetas ovoi-

des típicas de la Fase II. Se mantiene la disposición en

banda de los motivos documentándose ahora la elabo-

ración de ciertas composiciones decorativas (tipo «guir-

naldas») mediante la unión de dos o más punzones.

La TSBT alcanza su punto álgido productivo y de di-

fusión quizás propiciado por el descenso de las impor-

taciones africanas. El cambio hacia las denominadas

cinzentas tardías debió ser progresivo durante las dé-

cadas finales del siglo V (¿último tercio?) e implicó un

profundo cambio técnico en la producción. Asistimos a

una variación que afecta a buena parte de la producción

cerámica de Braga y que conlleva también que la sub-pro-

ducción de vajilla fina de mesa de dichos centros pro-

ductores también se trasforme. Se continuaron

produciendo vajillas de mesa que imitan a las sigillatas im-

portadas en la Gallaecia desde finales del siglo V (afri-

canas, focenses y gálicas) pero la técnica de cocción pasó

a ser la reductora —aunque mayoritariamente irregu-

lar—, se abandonan las decoraciones estampadas y los

acabados pasan del engobe rojo a un fino engobe gris pu-

lido que dio nombre a la producción. Una fuente recu-

perada en Braga de la Forma 12 (12.14) ejemplifica el

cambio gradual en la producción: la forma más típica de

la Fase III de la TSBT, decorada con galones tardíos — de

grandes dimensiones—, pequeñas palmetas triangula-

res y una gran roseta en el centro —conformando una

composición atípica— y de pasta y acabado gris augu-

siones se decoran a base de acanaladuras— y no será

hasta los inicios del siglo V cuando comience la decora-

ción documentada sobre individuos antiguos de la Forma

7 y sobre individuos transicionales de la Forma 8. Los

motivos decorativos se reducen a palmetas —con ner-

vadura central o sin ella— solas, dispuestas en banda o

alternando con otros motivos como círculos concéntricos,

cuadrados reticulados y motivos variados de pequeño

tamaño (vid. infra). Durante la segunda mitad del siglo

IV, la producción vive un momento de progresivo creci-

miento y de conquista de mercados. No obstante, su prác-

tica ausencia —solo un individuo documentado— en el

contexto de abandono de la villa de Toralla (Vigo) fe-

chado a finales del siglo IV demuestra que la TSBT toda-

vía no ha adquirido el peso que tendrá durante el siglo

siguiente. Por el contrario, la producción —ya con indi-

viduos decorados de la Forma 7— está bien represen-

tada en un contexto vigués del primer tercio del siglo V

lo que indica que será durante las primeras décadas de

la centuria del cuatrocientos cuando las piezas de TSBT

alcancen los mercados más alejados —las Rías Baixas—

de los talleres productivos.

FASE III (inicios del siglo V-tercer cuarto del siglo V)

Se trata de la fase de auge y apogeo de la producción

pero igualmente en su parte final va a vivir la trasforma-

ción tecnológica que marcará el final de la producción de

engobe rojo y el comienzo paulatino de la producción

gris. Se caracteriza por la aparición de nuevas e impor-

tantes formas —las más comunes— y nuevos motivos

decorativos —no así su disposición que se mantiene en

banda— y la desaparición de formas y motivos que ca-

racterizaban el período anterior. El plato/fuente de la

Forma 7 parece evolucionar durante los inicios del siglo

V hacia la Forma 12—autentica forma phare de la pro-

ducción— y que se mantendrá en fabricación hasta la

trasformación tecnológica, como lo demuestra la exis-

tencia de individuos perfectamente encuadrables en la

Forma, decorados con los motivos típicos de la Fase III

de la TSBT pero con pastas y engobes grises semibri-

llantes (vid. Forma 12). La Forma 8, una de las más im-

portantes de la Fase II, evoluciona hacia su variante B,

abandonando la fabricación de los modelos más anti-

guos y ahora sus fondos se decoran profusamente me-

diante motivos estampados en banda. Se dejan de fabricar

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:16 Página 135

136 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

3 Braga/ Carvalheiras/ N.I.: 1991.2275/ complexo 18,

sond. 39, UE 0457/ Ø aprox. 12,4 cm. (Delgado, 1993/94,

123, 132, Est. III, n. 10; Delgado y Morais 2009, 51, n. 133).

4 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna Cristã/ Ø aprox. 12 cm. (Moreira,

2009, Est. CXL, n. 1).

5 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase III,

Praça/ Ø aprox. 13,2 cm. (Moreira, 2009, Est. CXL, n. 2).

El nº 2 proviene de un nivel fechado entre finales del

siglo III y los inicios del siglo IV y debe corresponderse con

los momentos más antiguos de la producción (Delgado

y Morais, 2009, 50-51, nº 132). Una fecha similar ofrece

el individuo nº 5, documentado en los niveles de la Fase

III de Alvarelhos (Moreira, 2009, 374-384), mientras que

los nos 3 y 4—con el perfil más típico de la forma— pue-

den fecharse en el siglo IV. De hecho, el cuenco nº 4 de

Carvalheiras proviene de un contexto fechado en el siglo

IV. El nº 1, que presenta un borde engrosado y pie en

anillo, menos común en estas formas, se fecha igual-

mente en los inicios del siglo IV (Delgado y Morais, 2009,

50-51, nº 134). La forma no se documenta en los con-

textos de abandono de la factoría de salazón de la calle

Marqués de Valladares (Vigo) fechados en el primer ter-

cio del siglo V ni en el contexto de abandono del edifi-

cio secundario de la villa de Toralla fechado en las

décadas centrales del V, lo que posiblemente signifique

un cese de su producción entre finales del siglo IV y los

inicios del siglo V.

Datación propuesta: finales del siglo III-finales del siglo

IV o ¿inicios del siglo V?

Forma 2

Plato hondo que imita fielmente la forma Dragendorff

15/17 tardía producida en sigillata hispánica. Este ejem-

plar (1) recuperado en la insula de las Carvalheiras

(Braga) es un unicum dentro de la producción, aunque

al conservarse completo caracteriza perfectamente la

Forma 2. El plato presenta un perfil semejante a los últi-

mos modelos de la forma 15/17, caracterizada por pre-

sentar unas paredes mucho más exvasadas que los

modelos altoimperiales (Paz 7.1). El pie es bajo y en ani-

llo —como la forma en TSHT— y el exterior del fondo

aunque presenta cierta convexidad en su parte central,

el perfil generado está muy alejado de la típica moldura

rando el final del acabado con engobe rojo y el comienzo

de la TSBT gris que copará un sitio en los mercados de

vajilla fina en el Noroeste desde finales del siglo V y du-

rante el siglo VI. Fechar con certitud el momento en el

que se produce el cambio es por el momento imposible

y solo el estudio de nuevos contextos del último tercio

del siglo V solucionará esta problemática (vid. infra). Los

contextos de la Fase IIB de la factoría de salazón de Mar-

qués de Valladares (Vigo) fechados en la primera mitad

del siglo VI, donde la TSBT gris está presente en un buen

número y la de engobe rojo se considera residual de-

muestra que dicho cambio debió producirse con ante-

rioridad al siglo VI.

La presentación de la tipología sigue el siguiente es-

quema: descripción de la Forma, ejemplos representados

en las figuras —se acompañan de un asterisco— o no

representados pero publicados —acompañados de la

consiguiente referencia bibliográfica— con sus consi-

guientes datos (proveniencia, nº. de inventario, sigla,

datos estratigráficos y diámetro aproximado), discusión

cronológica y datación propuesta.

Catálogo Tipológico (figuras 1-13)

Forma 1

Cuenco semiesférico que imita a la forma Ritterling 8 en

TSHT. Los individuos documentados presentan perfiles

heterogéneos que demuestran una cierta continuidad de

la forma durante buena parte de la vida de la produc-

ción. Los más habituales presentan un borde simple, li-

geramente afilado y reentrante (2-5) y apoyan sobre un

pie en anillo poco destacado (3) o incluso sobre la pro-

pia pared (2). Los más antiguos —poco comunes— pre-

sentan un pie alto y borde ligeramente engrosado (1)

recordando a vasos altoimperiales. Nunca presenta de-

coración a excepción de alguna fina acanaladura (tipo

incisión) marcando exteriormente el paso de la pared al

labio (4).

Dimensiones: 12-14,5 cm.

Ejemplos (figura 1)

*1 Braga/ Carvalheiras/ N.I.: 1991.1766/ Fosa 31/ Ø aprox.

14,4 cm. (Delgado y Morais, 2009, 51, n. 134).

*2 Braga/ Carvalheiras/ N.I.: 1992.0879/ complexo 1, sond.

50, UE 0715/ Ø aprox. 13,5 cm. (Delgado, 1993/94, 123,

132, Est. III, n. 11; Delgado y Morais, 2009, 51, n. 132).

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:16 Página 136

*2 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT06- / Ø 14 cm.

3 Maia/ Necrópolis da Forca/ Ø indet. (Moreira, 2009,

Est. XIX, n. 16).

4 Maia/ Necrópolis das Bicas/ Ø aprox. 23? cm. (Moreira,

2009, Est. XXI, n. 6).

El individuo de Braga (1) se documentó en un estrato

datado en los siglos IV-V. Los recuperados en las necró-

polis de Maia (3-4) no nos aportan datos crono-estrati-

gráficos. El cuenco de Toralla (2) se recuperó en un

contexto de mediados del siglo V aunque podría tratarse

de un elemento residual dado que se trata del único ejem-

plo en un importante conjunto de TSBT. Además, la forma

no está presente en los contextos de destrucción de M.

de Valladares (Vigo) fechados en el primer tercio del siglo

V ni en Alvarelhos, lo que puede indicar que ya no se

produce durante las décadas centrales de la centuria del

cuatrocientos. Si a esto le unimos que la forma en sigillata

africana C3 se documenta en el Noroeste en contextos de

la segunda mitad del siglo IV e inicios del siglo V es pro-

bable que la Forma 4 no sobre pase dicha datación. Se

trata de una de las formas que parece inaugurar la Fase

II de la producción.

Datación propuesta:mediados siglo IV-inicios del siglo V.

Forma 4

Fuente de grandes dimensiones, fondo plano y pie en

anillo de perfil triangular. Las paredes son exvasadas re-

matadas en un labio afilado (1-2). La Forma 4 imita fiel-

mente a la triunfante fuente de la forma Hayes 50

producida en los alfares de la Bizacena (Hayes, 1972,

69-73). En concreto, los individuos recuperados presen-

tan perfiles más próximos de la variante B de Hayes

— fuentes más abiertas y menos profundas— aunque

conservan pies en anillo, mucho más típicos de las pie-

zas de la variante A o de individuos transicionales A/B

(ibid.). El hecho de no documentarse ejemplos de la

forma en la ciudad de Braga —principal mercado para la

producción— levanta ciertas dudas de su atribución a la

producción de TSBT1. No porta decoración.

Dimensiones: 35,2-50 cm.

1. Los autores de este trabajo no hemos podido comprobar deprimera mano si estas piezas pertenecen con seguridad a laproducción bracarense (TSHT).

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 137

hispánica que caracteriza las piezas centro-peninsulares.

No presenta decoración.

Dimensiones: 25,8 cm.

Ejemplos (figura 1)

*1 Braga/ Carvalheiras/ N.I.: 1991.1765/ Fosa 31/ Ø aprox.

25,8 cm. (Delgado y Morais, 2009, 51, n. 137).

El individuo de Braga proviene de un contexto estrati-

gráfico de una fosa (nº 31) fechado entre la segunda

mitad del siglo I y los finales del siglo III (Delgado, 1996-

97, 149-165). No obstante, su tremenda fidelidad con el

prototipo hispánico — fechado en la Fase III (c. 250-c.

330) de la TSHT propuesta por Paz Peralta (2008, 506) —

nos hacen pensar que se trate de un posible elemento

intrusivo, ya que no son escasos los individuos recupe-

rados en contextos incluso del tercer cuarto del siglo IV

(Paz Peralta, 1991, 61), entre los que destaca un ejem-

plar de Numancia decorado con palmetas estampadas

(Paz Peralta, 2008, 525). Por todo ello, se podría llevar la

fecha final de esta Forma 2 hasta la segunda mitad del

siglo IV.

Datación propuesta: finales del siglo III-mediados del

siglo IV

Forma 3

Cuenco de paredes curvilíneas rematadas en un borde de-

sarrollado, plano y con el labio redondeado (1-4). No

presenta pie y el apoyo lo realiza sobre un fondo plano

y macizo (1, 3-4). La decoración se limita a dos acanala-

duras sobre el exterior del borde que marcan el paso de

pared-borde-labio (1-2). La inspiración debe provenir

directamente del cuenco de la forma Hayes 52B produ-

cido en sigillata africana de la Bizacena y decorado con

relieves aplicados o incluso de las Palol 8 hispánicas, a

su vez posibles imitaciones de la forma en TSA. La forma

africana es mucho más habitual en el Noroeste que la

hispánica —también bien atestada en la capital (Morais,

2010, 437-461)— documentándose decenas de ejempla-

res en Vigo y en Braga por lo que nos inclinamos a pen-

sar que es el prototipo tunecino la fuente de inspiración

para la Forma 4 en TSBT.

Dimensiones: 14-20/¿23? cm.

Ejemplos (figura 1)

*1 Braga/ Largo do Paço/ N.I.: 1991.1832/ Ø aprox. 14,1

cm. (Delgado y Morais, 2009, 53, n. 155).

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:16 Página 137

138 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 1. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:16 Página 138

Ejemplos (figura 1)

*1 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna do Golfinho/ Ø aprox. 35,2 cm. (Mo-

reira, 2009, Est. CXLI, n. 14).

2 Vila Nova da Telha (Maia)/ Necrópolis das Bicas/ Ø

aprox. 50 cm. (Moreira, 2009, Est. XXI, n. 5).

El individuo recuperado en el castro de Alvarelhos (1)

se documentó en los niveles de la Fase IV-V, fechados

genéricamente entre inicios del siglo IV y los mediados del

siglo V (Moreira, 2009, 421-432). No obstante, su asocia-

ción con un bol de la forma Hayes 67 pueden centrar su

datación entre finales del siglo IV y la primera mitad del

siglo V (Bonifay, 2004, 171-173). La variante B de la forma

en sigillata se documenta en contextos del siglo IV pero

es habitual documentarla en el Noroeste en contextos

de finales de la centuria y de inicios de la siguiente (P. ej.

villa de Toralla-Vigo).

Datación propuesta: segunda mitad del siglo IV-inicios

del siglo V.

Forma 5

Fuente con base plana —ligeramente convexa— de pa-

redes curvas y borde plano festonado en dos zonas en-

frentadas y decorado con una fina acanaladura marcando

el paso al labio (1). El festón es dentado y podría servir

como elemento de aprehensión. En el exterior del fondo

conserva parte de un grafito que indicaría un elevado valor

de la pieza. La inspiración de la Forma 5 debe buscarse en

los platos de la forma Hayes 51B = Salomonson c de la

Bizacena decorados con relieves aplicados (Hayes, 1972,

73). A pesar de ser una forma poco común, en el Noroeste

se documentan con seguridad tres individuos, dos en Braga

y un tercero en la villa de Toralla (Fernández et alii, 2008,

575-585) por lo que la forma sería bien conocida por los

alfareros bracarenses. No obstante, la Forma 5 no porta

ningún tipo de decoración —a excepción del propio fes-

tón y la acanaladura— y sus dimensiones —34, 5 cm. en

el borde y 38,4 desde el festón— lo alejan de las piezas tu-

necinas (platos) de menor tamaño (c. 22-25 cm.).

Dimensiones: borde: 34,5 cm.; festón: 38,4 cm.

Ejemplos (figura 2)

*1 Braga/ Carvalheiras/ N.I.: 1992.0441/ complexo 11,

sond. 50, UE 0715/ Ø aprox. 34,5 cm. (Delgado y Mo-

rais, 2009, 51, n. 141).

El individuo recuperado en la insula de las Carvalheiras

(1) se documentó en un nivel con numerosas numismas

del siglo IV. Si aceptamos la inspiración en la Hayes 51B

(parece fuera de toda duda) su cronología debe ser coin-

cidente a la que arrojan los individuos africanos recupe-

rados en contextos del Noroeste. Para ello contamos con

el individuo tunecino de la villa de Toralla atestado en el

contexto de abandono del edificio principal fechado a

finales del siglo IV. Se trata de una de las formas de la

Fase II de la producción.

Datación propuesta: segunda mitad del siglo IV.

Forma 6

Fuente de fondo plano, paredes curvas y borde corto

más o menos plano (1-4). La Forma 6 parece imitar a los

modelos africanos de la forma Hayes 58B (Hayes, 1972,

92-96). Se trata de una forma bastante heterogénea en

sus bordes, que pueden aparecer ligeramente curvos y

con labio afilado (1, 4), planos y decorados con una fina

acanaladura (2) o planos y con labio engrosado (3) y

también en sus fondos, con pie en anillo (1) —como los

ejemplos LRP 58.1, 8, 11—, totalmente planos (3-4) —LRP

58.19— o con un falso pie (2) —el más típico en las for-

mas Hayes 58, 59, 60 y 61, LRP 58.9, 15—. La decoración

se limita a acanaladuras sobre el borde (2) o sobre el

fondo (3). Es una forma poco común.

Dimensiones: 26,6-49,5 cm.

Ejemplos (figura 3)

*1 Braga/ Carvalheiras/ N.I.: 1993.1110/ complexo 2256/

Ø aprox. 29,4 cm. (Delgado y Morais, 2009, 53, n. 143).

*2 Braga/ Hospital/ N.I.: 1995.0321/ Ø aprox. 35,1 cm.

(Delgado, 1993/94, 124 y 133, Est. IV, n 17; Delgado y

Morais, 2009, 53, n. 142).

*3 Braga?/ proveniencia indeterminada/ 1995/ Ø aprox.

49,5 cm.

4 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase V, Domus

do Tesouro/ Ø aprox. 26,6 cm. (Moreira, 2009, Est. CXL,

n. 3).

Los ejemplares nº 1 y 2de Braga se recuperaron en contextos

de finales del siglo IV y los inicios del siglo V (Delgado y

Morais, 2009, 52-53). La fuente nº 4 se recuperó en la Fase

V de la Domus do Tesouro (Alvarelhos) fechada entre fina-

les del siglo IV y los mediados del siglo V (Moreira, 2009,

468). No obstante podría tratarse de un elemento residual

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 139

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:16 Página 139

140 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 2. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:16 Página 140

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 141

Figura 3. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 141

142 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

*8 Vigo/ Marqués de Valladares/ UE 161/ Ø aprox. 28,6 cm.

*9 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT93-3746/ Ø

aprox. 24 cm. (Fernández et alii, 2007, 106, figura 4, n. 1).

*10 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT03-3879 ss./

Ø aprox. 33 cm. (Fernández et alii, 2007, 106, figura 4,

n. 2).

La fuente nº 1, más profunda que el resto de piezas y que

presenta un fondo sin decoración podría corresponderse

con los primeros momentos productivos de la forma (¿2ª

mitad del siglo IV?). En Braga, esta forma está presente en

estratos de finales del siglo IV y los inicios del siglo V (6)

mientras que en Vigo, está presente también en contex-

tos de la primera mitad y mediados del siglo V (8-10) al

igual que en el castro de Alvarelhos (2). No obstante, la

ausencia de ejemplos de la Forma 7 decorados con pun-

zones de la Fase III (galones, palmetas y círculos denta-

dos…, etc.) indica que deja de producirse con anterioridad

a mediados del siglo V. El individuo nº 10 de Toralla fue

recuperado en el contexto de abandono del Edificio se-

cundario junto a la fuente de la Forma 8.15 decorada con

galones. Su perfil, a caballo entre la Forma 7 y la Forma

12, puede estar marcando una posible evolución formal,

aunque todavía conserva la típica decoración de la Fase

II de la producción.

Datación propuesta: finales del siglo IV-primer tercio del

siglo V (nº 11, ¿mediados del siglo V?).

Forma 8

Fuente de fondo plano y borde triangular más o menos

reentrante. La Forma 8 imita claramente a las fuentes de

la forma Hayes 61 en sigillata africana (Hayes, 1972, 100-

107). Distinguimos tres variantes principales:

A. Poco profunda y con borde triangular reentrante y

plano en su parte exterior (1-11). La mayoría de los

ejemplares no portan decoración sobre el fondo a ex-

cepción del individuo nº 8 con un perfil a caballo entre

ambas variantes. Esta variante imita a la propia va-

riante A de la forma Hayes 61.

B. Más profunda y con borde vertical de perfil triangular

—en su parte exterior convexa— del que destaca un

engrosamiento en la unión exterior con la pared (12-

15). La mayoría de los individuos de esta variante por-

tan decoración estampada en banda sobre el fondo.

Esta variante imita a la propia variante B de la forma

ya que la forma no se documenta en los contextos del siglo

V de Vigo. Habitualmente la forma en sigillata africana se

documenta en contextos del siglo IV pudiendo detectarse

también en contextos del cambio de centuria. Se trata de una

de las formas de la Fase II de la producción.

Datación propuesta: segunda mitad del siglo IV-inicios

siglo V.

Forma 7

Plato/fuente de fondo plano, paredes curvas y borde

largo plano o curvo. La Forma 7 copia fielmente los pla-

tos/fuentes de la forma Hayes 59B en sigillata africana y

su decoración (Hayes, 1972, 96). Los bordes de los indi-

viduos de la forma son muy variables, documentándose

los planos horizontales (2-4) rematados en un labio en-

grosado (1), y sobre todo, los levantados (6-10). Los bor-

des suelen presentar una o dos acanaladuras que marcan

el paso de pared-borde-labio, que aparece redondeado

y ligeramente engrosado en su parte superior. La fuente

nº 10 presenta un borde curvado en su parte inferior y es-

calonado en su parte superior —la acanaladura es subs-

tituida por una zona plana— que parece inaugurar el

paso a la Forma 12. Los fondos son siempre planos, sin

pie, y pueden ser lisos (1, ¿6?) o portar decoración es-

tampada en banda y delimitada por varias acanaladuras

(7-10). Se trata de una de las formas más habituales de

la Fase II de la producción.

Dimensiones: 21,4-36,6 cm.

Ejemplos (figuras 3-5)

*1 Braga/ Misericórdia/ N.I.: 1996.0924/ Ø aprox. 36 cm.

(Delgado y Morais, 2009, 53, n. 144).

2 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase V,

Domus do Tesouro/ Ø aprox. 36,6 cm. (Moreira, 2009,

Est. CXLII, n. 19).

3 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna Cristã/ Ø aprox. 35,8 cm. (Moreira,

2009, Est. CXLII, n. 20).

*4 Braga/ Misericordia / MIS 67 = 24/ Ø aprox. 21,4 cm.

*5 Braga/ Carvalheiras /N.I.: 1984.1024.1347/Ø aprox. 28 cm.

*6 Braga/ Carvalheiras/ N.I.: 1992.0862/ complexo 7,

sond 50, UE 714/ Ø aprox. 34,5 cm. (Delgado, 1993/94,

124 y 133, Est. IV, n 18; Delgado y Morais, 2009, 53, n.

145).

*7 Frazão (Paços de Ferreira)/ Necrópolis de Boavista/ Ø

aprox. 21,4 cm.

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 142

Figura 4. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 143

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 143

144 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 5. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 144

Hayes 61 o más concretamente a la sub-variante B2

propuesta por M. Bonifay (2004, 168).

C. De grandes dimensiones, poco profunda y con borde

triangular vertical, plano en su parte exterior y con el

típico engrosamiento en la unión con la pared (16). El

único ejemplar documentado no conserva el fondo

por lo que desconocemos si portaría decoración es-

tampada. Esta variante parece inspirarse directamente

en la fuente Hayes 61B en su sub-variante B1 (Boni-

fay, 2004, 168).

Dimensiones: 16,4-46,5 cm.

Ejemplos Variante A (figura 6)

*1 Matosinhos/ Castro de Guifões /sin referencia/ Ø aprox.

36 cm.

*2 Vigo/ Marqués de Valladares/ UE 16/ MV43.02.2506/

Ø indet.

3 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna Cristã/ Ø aprox. 38,8 cm. (Moreira,

2009, Est. CXLII, n. 22).

4 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna Cristã/ Ø aprox. 36,6 cm. (Moreira,

2009, Est. CXLIII, n. 23).

5 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna do Cavalo/ Ø aprox. 37,4 cm. (Mo-

reira, 2009, Est. CXLIII, n. 24).

6 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna do Cavalo/ Ø aprox. 36,8 cm. (Mo-

reira, 2009, Est. CXLIII, n. 25).

7 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna Cristã/ Ø aprox. 24,6 cm. (Moreira,

2007, 86, MNAP n. 157; 2009, Est. CXLII, n. 27).

*8 Braga/ Teatro, Colina da Cividade / N.I.: 2007.0009/ Ø

aprox. 35,1 cm. (Delgado y Morais, 2009, 53, n. 147).

*9 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 920-94/ complexo 7, sond.

50, UE 714/ Ø aprox. 31 cm. (Delgado, 1993/94, 124 y 134,

Est. V, n. 21).

10 Braga/ povoado do Lago/ N.I.: 442-94/ Ø aprox. 16,4

cm. (Delgado, 1993/94, 124-125 y 134, Est. IV, n. 20).

*11 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 1995.1219/ complexo 1035/

Ø aprox. 27,6 cm. (Delgado, 1993/94, 124-125 y 134, Est.

V, n. 22; Delgado y Morais, 2009, 53, n. 148).

Ejemplos Variante B (figuras 6-7)

*12 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 909-94/ complexo 11,

sond. 50, UE 715/ Ø aprox. 35,7 cm. (Delgado, 1993/94,

124 y 134, Est. V, n. 23).

*13 Vigo/ Marqués de Valladares/ Pileta E44/ Ø aprox.

32,8 cm.

*14 Braga/ Teatro, Colina da Cividade / N.I.: 2007.0001/

Ø aprox. 31,8 cm.

*15 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT07/ Ø aprox.

33,2 cm.

Ejemplos Variante C (figura 7)

*16 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 1993.0687/ Ø aprox. 46,5

cm. (Delgado, 1993/94, 124 y 134, Est. V, n. 24; Delgado

y Morais, 2009, 53, n. 149).

Los individuos de la variante A sin decoración, como los

recogidos en Alvarelhos (4, 6-7) o Guifões (1) deben ser

los ejemplares más antiguos de la forma (¿segunda mitad

del siglo IV?). El plato nº 9, recuperado en la insula de

las Carvalheiras proviene de un contexto del siglo IV. El

individuo nº 8, profusamente decorado con motivos pro-

pios de la Fase III con el borde ligeramente más vertical

podría tratarse de un ejemplo final de la variante a o tran-

sicional (¿inicios del siglo V?). Los individuos de la va-

riante B deben fecharse con posterioridad a los inicios del

siglo V, ya que la propia variante en sigillata africana a la

que imita no parece producirse hasta ese momento (Bo-

nifay, 2004, 171). La fuente nº 13 proviene de un con-

texto del primer tercio del siglo V, mientras que el nº 15,

decorado ya con galones, se documentó en un contexto

de mediados del siglo V (Toralla). Es posible que la va-

riante B de la Forma 8 se produzca hasta el tercer cuarto

de la centuria del cuatrocientos. De la variante C (16)

— forma poco común — no contamos con datos crono-

estratigráficos, aunque debe fecharse con seguridad en

el siglo V y posiblemente en las mismas fechas que la va-

riante B.

Datación propuesta:

• Variante A: segunda mitad del siglo IV-inicios del siglo V.

• Variante B: segundo y tercer cuarto del siglo V.

• Variante C: segundo y tercer cuarto del siglo V.

Forma 9

Plato/fuente poco profundo/a con la pared más o menos

recta que se curva en la unión con el fondo. El borde

puede aparecer redondeado (2), engrosado (3-4) y/o bi-

selado hacia el interior (1, 3-4). Dos acanaladuras deco-

ran el exterior de la pared como los individuos de la

forma Hayes 63 en sigillata africana D, a la que clara-

mente imita la Forma 9 (Hayes 1972, 109). El interior del

fondo puede aparecer decorado con motivos estampa-

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 145

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 145

146 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 6. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 146

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 147

Figura 7. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 147

148 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

*1 Braga/ Teatro/ UE 712-5348/ Ø aprox. 12,9 cm.

2 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna Cristã/ Ø aprox. 11,8 cm. (Moreira,

2009, Est. CXLI, n. 9).

3 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna do Cavalo/ Ø aprox. 13 cm. (Mo-

reira, 2009, Est. CXLI, n. 12).

4 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna do Cavalo/ Ø aprox. 13 cm. (Mo-

reira, 2009, Est. CXLI, n. 13).

Variante

5 Trofa (Oporto)/ Necrópolis de Rodrigo Velho/ Ø aprox.

¿17,5? cm. (Moreira, 2009, Est. XXII, n. 19).

La forma no se ha documentado por el momento en ya-

cimientos de Vigo. Tres de los ejemplares documenta-

dos (2-4) provienen de las fases tardías del castro de

Alvarelhos (siglo IV-primera mitad del siglo V) y no nos

aportan datos cronológicos muy concretos. No obstante,

la forma en sigillata africana (Hayes 73) —una de las for-

mas más comunes en Bracara Augusta con unos cien

individuos— no aparece hasta el segundo cuarto del siglo

V, documentándose sobre todo en contextos de media-

dos de la centuria. Posiblemente deba encuadrarse en la

Fase III de la producción, ¿substituyendo al cuenco de la

Forma 4?

Datación propuesta: ¿segundo y tercer cuarto del siglo V?

Forma 11

Cuenco de perfil semejante al de las Formas 3 y 10. La di-

ferencia radica en el borde que ahora, en la Forma 11, apa-

rece levantado, curvado en su parte inferior y escalonado

en su parte superior —una zona plana da paso a una

parte curva— y rematado en un labio redondeado y en-

grosado en su parte superior (1-2). Estos cuencos se ins-

piran directamente en los cuencos en sigillata africana C

de la forma Delgado 1968 (figura 3.1) —muy comunes en

el Noroeste— y en sigillata africana D de la forma EM.

14 (Mackensen, 1993, tafel 60, 9-12). Esta copa podría

forma un servicio con los platos/fuentes de las Formas 12

y 13 en TSBT —parece su versión de pequeño tamaño—

como la EM. 14 = Hayes 67/71 lo conforma junto a los

grandes boles EM. 9 = Hayes 67. Forma poco común.

Dimensiones: 14,2-20 cm.

Ejemplos (figura 8)

dos en banda delimitados por acanaladuras (4). Se trata

de una de las formas de la Fase II de la producción. Poco

frecuente, documentándose hasta el momento ejemplos

exclusivamente en Bracara Augusta.

Dimensiones: 27,6-47 cm.

Ejemplos (figura 8)

*1 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 1995.1223/ complexo 1238/

Ø aprox. 27,6 cm. (Delgado, 1993/94, 125 y 135, Est. VI,

n. 26; Delgado y Morais, 2009, 53, n. 152).

*2 Braga/ sin contexto/ 0056.C8 = 90 = 1186/ Ø aprox.

33 cm.

*3 Braga/ sin contexto/ A02506 F08D001/ Ø aprox.

42 cm.

*4 Braga/ Maximinos/ N.I.: 1995.0538/ Ø aprox. 47 cm.

(Delgado, 1993/94, 125 y 135, Est. VI, n. 27; Delgado y

Morais, 2009, 53, n. 151).

El ejemplar nº 1 proviene de un nivel de finales del siglo

IV y de los inicios del siglo V. También contamos a la hora

de fechar la forma con la cronología del modelo en sigi-

llata africana —último cuarto del siglo IV (Hayes, 1972,

109)— y que esta forma se documenta en contextos del

Noroeste fechados desde finales del siglo IV y los inicios

del siglo V. Además, los motivos que decoran la fuente nº

4 (palmetas con nervadura central alternadas con estre-

llas) son propios de la Fase II de la producción.

Datación propuesta: finales del siglo IV-primer tercio del

siglo V.

Forma 10

Cuenco de cuerpo y fondo semejante a la Forma 3. El

borde es plano (2) o ligeramente levantado (1, 3, 6) y el

labio, de perfil triangular, se destaca en su parte supe-

rior e inferior presentando la cara externa plana (1-3, 5).

En algunos ejemplares, la parte superior del borde puede

aparecer decorada con dos acanaladuras (1, 3) marcando

el paso de pared-borde-labio. La Forma 10 parece ins-

pirarse en los cuencos de la forma Hayes 73 producidos

en sigillata africana C y D (Hayes, 1972, 121-124). El in-

dividuo nº 4, del castro de Alvarelhos, presenta un borde

curvo rematado en un labio de perfil triangular solamente

destacado en su parte superior situándose a caballo entre

las Formas 10 y 11.

Dimensiones: 11,8-13 cm.

Ejemplos (figura 8)

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 148

Figura 8. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 149

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 149

150 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

sición de la producción oxidante y con engobes rojos a

la producción reductora con engobes negruzcos (Cin-

zentas Tardías). Según su borde podemos agruparlos

en dos variantes principales:

A. Borde escalonado en su parte superior —parte plana

que da paso a una parte curva— sin correspondencia

en su parte inferior donde aparece totalmente curvo

(1-5). Una acanaladura en la parte superior del borde

marca el paso a un labio redondeado y engrosado.

B. Parte superior del borde idéntico al de la variante A

pero ahora el escalón tiene correspondencia —más o

menos acentuada— en la parte inferior del borde. De

nuevo, una acanaladura marca el paso al labio que

ahora puede parecer redondeado (6-7, 12-13) o plano

en su cara externa (8-11). En los individuos nos 12 y 13,

el borde aparece mucho más largo y con la zona su-

perior normalmente curva-recta.

El individuo nº 14 puede considerarse un unicum, de

pasta y engobe gris, presenta un perfil poco profundo,

paredes curvas muy cortas y un borde muy desarrollado

—de grandes dimensiones— escalonado en su parte su-

perior y curvo en su parte inferior —como la Variante

A—. Conserva decoración estampada en dos bandas en

torno a una gran roseta, una formada por palmetas trian-

gulares complejas y una segunda más exterior a base de

galones conformando una composición atípica.

Dimensiones: 31-36 cm. Ejemplares más grandes poco

comunes (c. 46 cm.)

Ejemplos Variante A (figura 9)

*1 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT03-3840/ Ø

aprox. 38,8 cm. (Fernández et alii, 2007, 106, figura 4,

n. 3).

*2 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT06-/ Ø aprox.

36 cm.

*3 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT06/- Ø aprox.

36 cm.

*4 Matosinhos/ Castro de Guifões/GUI99-1681/ Ø aprox.

31 cm.

*5 Matosinhos/ Castro de Guifões /GUI97-1050/ Ø aprox.

33 cm.

Ejemplos Variante B (figuras 9-10)

*6 Braga/ Sin referencia / N.I.: 2703-91/ Ø aprox. 34,6

cm. (Delgado, 1993/94, 126 y 136, Est. VII, n. 32; Del-

gado y Morais, 2009, 53, n. 151).

*7 Matosinhos / Castro de Guifões /GUI95, K11.61/ Ø

aprox. 32,4 cm. Pasta gris y engobe gris oscuro semibri-

llante.

*1 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 1992.0875/ complexo 7,

sond. 50, UE 714/ Ø aprox. 14,2 cm. (Delgado, 1993/94,

125 y 135, Est. VI, n. 29; Delgado y Morais, 2009, 53, n.

154).

*2 Vigo/ Marqués de Valladares/ UE 2/ Ø aprox. 20 cm.

La forma en sigillata debe ser coetánea a su versión de

mayor tamaño (finales del siglo IV-primera mitad del siglo

V) y una datación similar debe arrojar los individuos de

la Forma 11. El cuenco de Braga (1) se fecha en los siglos

IV-V (Delgado y Morais, 2009, 52-53), mientras que la

pieza de Vigo (2) es considerado un elemento residual

en un contexto de la primera mitad y mediados del siglo

VI de Marqués de Valladares. Posiblemente este indivi-

duo provenga de los contextos de la Fase precedente fe-

chada en el primer tercio del siglo V. No obstante, la

forma debe comenzar a producirse junto a los platos/fuen-

tes de la Forma 12 —forman posiblemente un servicio—

y estos parecen inaugurar la Fase III de la producción, ¿en

torno al segundo cuarto del siglo V?

Datación propuesta: ¿segundo y tercer cuarto del siglo V?

Forma 12

Plato/fuente poco profundo/a, de fondo plano y pared

curva. La forma 12 parece evolucionar directamente desde

los platos/fuentes de la Forma 7 substituyendo el borde

anterior por un borde escalonado —¿imitando los bordes

de la Hayes 67?— pero el resultado es una forma híbrida

a caballo entre la forma Hayes 59 —ya que son platos

poco profundos y no boles— y 67 —borde escalonado

en su parte superior—, una circunstancia advertida ya

por M. Delgado, quien bautizó a estas piezas como imi-

taciones de la forma «batarde» 59/67 (Delgado, 1993-94,

126) a partir de un ejemplar en TSA recuperado en Les-

trade (Francia) y que presenta un perfil similar (Martin,

1977, 99-103, figura 3, nº 2, figura 5, nº 1). Una buena

parte de los ejemplares parece que portarían decoración

estampada en banda sobre el fondo delimitada por va-

rias acanaladuras. Se trata de la forma más característica

de la Fase III de la producción y perdura hasta el final de

la producción roja y el comienzo de la producción gris.

El plato nº 7, proveniente de Guifoes (Oporto), y la fuente

nº 14 recuperada en las excavaciones de la catedral de

Braga presentan pastas grises —cocción reductora— y en-

gobes negruzcos semi-brillantes que ejemplifican la tran-

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 150

Figura 9. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 151

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 151

152 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 10. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 152

*8 Vigo/ Marqués de Valladares/ UE 115 y 126/ Ø aprox.

33 cm.

*9 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 1992.0867/ complexo 5,

sond. 68, UE 849/ Ø aprox. 36 cm. (Delgado, 1993/94, 126

y 136, Est. VII, n. 33; Delgado y Morais, 2009, 53, n. 146).

*10 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 670-94/ complexo 27, sond.

98, UE 723/ Ø aprox. 35,5 cm. (Delgado, 1993/94, 126 y

136, Est. VII, n. 30).

11 Braga/ P.L. / N.I.: 1111-93/ Ø aprox. 36,2 cm. (Delgado,

1993/94, 126 y 136, Est. VII, n. 31).

*12 Braga/ Carvalheiras / 3066 = 5221/ Ø aprox. 46 cm.

13 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase V,

Domus do Tesouro/ Ø aprox. 32,3 cm. (Moreira, 2009,

Est. CXLIII, n. 28).

Variante (figura 10)

*14 Braga/ Sé / N.I.: 1997.0090/ Ø aprox. 41,1 cm.

La forma no está presente en los contextos de la Fase IIA

de Marqués de Valladares fechados en el primer tercio del

siglo V. Por el contrario, la forma está bien representada

(cinco individuos, 1-3) en el contexto de abandono del

edificio secundario de la villa de Toralla fechado a me-

diados del siglo V. Los individuos de la variante A (1-5)

podrían ser los ejemplos más antiguos de la forma ya

que su perfil encaja con los individuos más recientes de

la Forma 7 (7.11), de la que parece evolucionar. La forma

parece perdurar hasta el ocaso de la producción de en-

gobe rojo (último cuarto del siglo V) como lo demuestran

los individuos documentados con pasta y engobe gris

(7, 14). Estas piezas deben fecharse con seguridad en la

segunda mitad del siglo V, posiblemente a finales de la

centuria. Los individuos con bordes largos de la variante

B (12-13) podrían igualmente tratarse de piezas más re-

cientes (¿tercer cuarto del siglo V?). Además, los fondos

decorados conservados presentan motivos propios de

las décadas centrales del siglo V —ausentes en la Fase

II— como galones (9, 14), pequeñas y grandes rosetas (3,

9, 14) y palmetas triangulares (14).

Datación propuesta: Variantes A y B: segundo y tercer

cuarto del siglo V o posterior.

Forma 13

¿Gran bol? de paredes curvas y borde escalonado. La

Forma 13 imita fielmente a los boles de la forma Hayes

67 en TSA D. El individuo nº 1 presenta unas paredes

gruesas que recuerda en cierto modo al aspecto «tosco»

de los platos/fuentes de la Forma 12. Por el contrario, el

individuo de Braga (2) presenta un perfil «fino» y equili-

brado idéntico a los individuos en sigillata tunecina. Es

una forma de la Fase III poco común. Por el momento,

desconocemos si portaría decoración estampada en el

fondo.

Dimensiones: 34-40 cm.

Ejemplos (figura 11)

*1 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT06-/ Ø aprox.

34 cm.

*2 Braga/ Carvalheiras / Sond.65 = 2,7; Sond71 = 4/ Ø

aprox. 40 cm.

Contamos por el momento con pocos datos —no tene-

mos ejemplos decorados— para proponer una datación

concreta de la forma. Además, no parece ser una de las

formas más producidas —solo conocemos estos dos

ejemplares— por lo que su presencia o ausencia en un

contexto puede no ser determinante. No obstante, la

forma no está presente en la Fase IIA de Marqués de Va-

lladares (primer tercio del siglo V) y sí en Toralla (me-

diados del siglo V) por lo que podría tratarse de una forma

exclusiva de la ¿Fase III? Su prototipo en sigillata arranca

ya a finales del siglo IV, aunque en el Noroeste no pa-

rece documentarse hasta los inicios del siglo V, lo que

podría refrendar la datación más tardía —en las décadas

centrales de la centuria (Fase III)— para la Forma 13 en

TSBT.

Datación propuesta: ¿segundo y tercer cuarto del siglo V?

Forma 14

Fuente de fondo plano poco profunda, de paredes cur-

vas y borde largo plano rematado en un borde redon-

deado y engrosado en su parte superior (1). La Forma

14 parece inspirada en la gran fuente de la forma Hayes

76 (p. ej. LRP 76.4) producida en sigillata tunecina. Se

trata de una forma poco común documentándose por el

momento un solo individuo recuperado en Braga. Forma

de la Fase III de la producción.

Dimensiones: 34,5 cm.

Ejemplos (figura11)

*1 Braga/ Cavalariças / N.I.: 1995.1224/ Ø aprox. 34,5

cm. (Delgado, 1993/94, 125 y 135, Est. VI, n. 26; Delgado

y Morais, 2009, 53, n. 153).

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 153

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 153

154 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Palol 1 — quizás también se inspiren en la forma Palol 2 — ,

muy abundante en Bracara Augusta (Morais, 2010, 437-

461). Se documentan ejemplos de pequeño tamaño, tipo

plato (1) de grandes dimensiones (2-3), tipo fuente. No

parece portar decoración.

Dimensiones: 20-39,6 cm.

Ejemplos (figura 11)

*1 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 1994.0922/ complexo 12,

sond. 50, UE 718/ Ø aprox. 20 cm. (Delgado, 1993/94, 124

y 133, Est. III, n. 15; Delgado y Morais, 2009, 55, n. 162).

*2 Braga/ Misericórdia / 67 = 90/ Ø aprox. 39,6 cm.

3 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna do Cavalo/ Ø aprox. 36,8 cm. (Mo-

reira, 2009, Est. CXLIII, n. 30).

El ejemplar nº 1 proveniente de Braga, se fecha en los si-

glos IV y V. La forma está ausente en Vigo. Un ejemplar

en TSHT recuperado en Zaragoza (Paz Peralta 8.2) y con

un perfil muy similar a nuestro nº 2 pero de dimensiones

más reducidas (considerado como un individuo de la

forma Palol 2) se fecha en el último cuarto del siglo V

(Paz Peralta, 2008, 525). En general, estos grandes platos

en TSHT se fechan en el siglo V (ibid.).

Datación propuesta: ¿inicios del siglo V-tercer cuarto siglo V?

Forma 17

Plato profundo de paredes curvas rematadas en un borde

triangular recto (1) o reentrante (2) ligeramente engro-

sado (baquetón) en la unión exterior con la pared (1-2).

El fondo es ligeramente cóncavo y apoya sobre un pie

bajo de perfil triangular (1). La Forma 17 parece copiar

los platos en sigillata hispánica de la forma Paz 83B =

Paz 8.8-9 (Paz Peralta, 2008, 525) también documentados

en Braga (Morais, 2010, 448, nº 66-68). No parece portar

decoración estampada.

Dimensiones: 16-16,2 cm.

Ejemplos (figura 12)

*1 Braga/ Cardoso da Saudade / N.I.: 1991.1407/ Ø aprox.

16,2 cm. (Delgado, 1993/94, 124-125 y 133, Est. V, n. 25;

Delgado y Morais, 2009, 53, n. 150).

*2 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT07-988/ Ø

aprox. 16 cm.

La forma está ausente de los contextos vigueses del primer

tercio del siglo V. El individuo nº 2 proviene de un contexto

La forma en TSA se fecha en los dos cuartos centrales

del siglo V (Hayes, 1972, 124-125). La forma en TSBT, tre-

mendamente fiel a la Hayes 76, aporta una cronología

similar al prototipo tunecino (Delgado y Morais, 2009,

52-53).

Datación propuesta:mediados y tercer cuarto del siglo V.

Forma 15

Cuenco de paredes semiesféricas en las partes internas

y carenadas en el exterior con borde levantado largo y es-

trellado (1). Presenta un pie bajo en anillo y decoración

en el borde a base de una o dos finas acanaladuras (1-2).

La inspiración o imitación de la forma Hayes 97 africana

no parece posible por motivos cronológicos ya que la

forma del alfar de Oudhna no parece producirse hasta fi-

nales del siglo VI (Hayes, 1972, 150-151), momento en el

que la TSBT de engobe rojo ha dejado ya de producirse.

Por ello, se podría pensar en una copia directa de una

forma en metal o incluso en madera como sucede con la

propia Hayes 97 o la poco común Sétif 1970 en sigillata

argelina (Carandini et alii, 1981, 141, Tav. LXVIII, nº 12).

Solo dos individuos documentados.

Dimensiones: 16,1 cm.

Ejemplos (figura 11)

*1 Braga/ São Geraldo / N.I.: 2003.1557/ Ø aprox. 16,1 cm.

(Delgado y Morais, 2009, 53, n. 156).

*2 Braga/ Teatro, Alto da Cividade/ UE 500-2127/ Ø indet.

La mayoría de las formas en vajilla fina tardía con el borde

estrellado (Hayes 97, Sétif 1970, Rigoir 3b…, etc.) no pa-

recen anteriores al siglo V. Por ello, la Forma 15 podría fe-

charse genéricamente en la última Fase de la producción?

Datación propuesta: ¿segundo y tercer cuarto del siglo V?

Forma 16

Plato/fuente de paredes curvas exvasadas rematadas en un

borde recto (2-3) o ligeramente exvasado (1) y labio re-

dondeado. En el exterior, un baquetón (1-3) marca el paso

de la pared al borde que se decora con acanaladuras en

su parte baja (1-2). El fondo debe ser plano y sin pié como

en el ejemplo documentado en Alvarelhos (3). La Forma

16 parece inspirarse en los platos/fuentes producidos en

TSHT —sobre todo en la zona meseteña— de la forma

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 154

Figura 11. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 155

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 155

156 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 12. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 156

de mediados del siglo V. La forma en TSHT parece exclu-

siva del siglo V (Paz Peralta, 2008, 525). Por todo ello, pa-

rece una forma propia de la Fase III de la producción.

Datación propuesta: ¿segundo y tercer cuarto del siglo V?

Forma 18

Plato/escudilla más o menos profundo/a, de paredes cur-

vas y borde vertical o ligeramente reentrante. Una ca-

rena marca el paso de la pared al borde. El fondo es

plano ligeramente resaltado (4) y no parece portar de-

coración. Distinguimos dos variantes:

A. Forma poco profunda tipo plato (1-3). Podría inspirarse

directamente en los platos de la forma Paz 82A = 8.2-

3 (2008, 525, figura 6).

B. Más pequeña y más profunda tipo plato/escudilla (4-

5). De perfil asimilable igualmente a ciertos ejempla-

res de la forma Paz 82A, también podría inspirarse —en

especial el nº 5— en algunos ejemplos de Ritter. 8T

más bajos y más anchos que lo habitual para la forma.

Dimensiones:

• Variante A: 16,5-20 cm.

• Variante B: 14 cm.

Ejemplos Variante A (figura 12)

*1 Braga/ Termas/ N.I.: 1994.1008/ Ø aprox. 16,5 cm.

(Delgado, 1993/94, 124 y 133, Est. III, n. 14; Delgado y

Morais, 2009, 55, n. 163).

*2 Vigo/ Marqués de Valladares/ Fase IIA/ Pileta E44/ Ø

aprox. 20 cm.

*3 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. principal/ VT93-/

Ø aprox. 17,2 cm.

Ejemplos Variante B (figura12)

*4 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT06- / Ø aprox.

14 cm.

*5 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT06-5178 ss./

Ø aprox. 14 cm.

El plato nº 1 de la variante A se recogió en un estrato fe-

chado en los siglos IV-V (Delgado y Morais, 2009, 54-55).

La variante A de la forma está representada en la Fase

IIA de M. de Valladares (2) y en un contexto de aban-

dono del Edificio principal de la villa de Toralla (3), fe-

chado a finales del siglo IV —¿elemento intrusivo?—. Por

el contrario, la variante A está ausente en el contexto de

mediados de la centuria de la misma villa, en el que se

documentan los dos individuos de la variante B (4-5).

Por ello, es probable que los platos «bajos» sean más an-

tiguos que los más profundos tipo «escudilla», o incluso

que estos substituyan a los primeros entre el primer y el

segundo cuarto de siglo.

Datación propuesta:

• Variante A: finales del siglo IV-inicios del siglo V.

• Variante B: segundo y tercer cuarto del siglo V.

Forma 19

Plato poco profundo de fondo plano y paredes curvas (2-

3) o ligeramente exvasadas (1) rematadas en un labio

afilado (1, 3) o ligeramente engrosado (2). La Forma 19

parece inspirarse directamente en los pequeños platos

en TSHT (formas Paz 8.1 = Hispánica 16) también do-

cumentados en la propia ciudad de Braga (Morais, 2010,

448, nº 67). No porta decoración.

Dimensiones: 18-22 cm.

Ejemplos (figura 12)

*1 Braga/ Carvalheiras / Sond. 58 = 36 = 2204/ Ø aprox.

20,4 cm.

*2 Braga/ Misericórdia/ N.I.: 1996.0908/ Ø 18 cm.

3 Alvarelhos (Trofa)/ Castro de Alvarelhos/ Fase IV-V,

Domus da Lucerna do Cavalo/ Ø aprox. 22 cm. (Mo-

reira, 2009, Est. CXLI, n. 15).

Los individuos de Braga (1-2) no nos aportan datos crono-

estratigráficos y el plato de Alvarelhos (3) proviene de

la Fase IV-V fechada genéricamente entre inicios del siglo

IV y mediados del siglo V (Moreira, 2009, 435-447). La

forma en TSHT —en la cual parece inspirarse nuestra

Forma 19— adolece igualmente de buenas cronologías

(Paz Peralta, 2008, 525). No obstante, un plato similar

asignado a la forma Hispánica 73 se recuperó en un con-

texto de la segunda mitad del siglo IV (Paz Peralta, 1991,

85). Todo parece indicar que podría tratarse de una forma

de la Fase II de la producción.

Datación propuesta: ¿segunda mitad del siglo IV-inicios

del siglo V?

Forma 20

Cuenco carenado de paredes curvas en su parte inferior

y rectas en su parte superior —ligeramente curvas hacia

el interior— rematadas en un labio redondeado (1). Un

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 157

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 157

158 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 13. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Formas

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 158

ligero baquetón marca en paso de la pared curva a la pared

recta, decorada con dos finas acanaladuras en su parte ex-

terior. Desconocemos como sería el fondo. La Forma 20

imita fielmente a los cuencos carenados de la forma Palol

9 —o Palol 9/11— (Palol y Cortés, 1974, 132-134, figura 38,

n. 75-76, figura 43, n. 81) producidos en TSHT —tanto en

los alfares meseteños como en los talleres riojanos— e in-

cluso en TSHT gris (López Rodríguez y Regueras, 1987,

figuras 10, 45-46, 48-49; Paz Peralta, 2008, figura 15, n. 9-

11) y documentados en importantes cantidades (c. 40 in-

dividuos) en Bracara Augusta (Morais, 2010, 445, n. 30;

452, n. 100-102). A excepción de las acanaladuras sobre la

pared, la forma no parece portar otro tipo de decoración.

Dimensiones: 13,8 cm.

Ejemplos (figura 13)

*1 Braga/ Fujacal / H12 = 89 = 2008 = 0632/ Ø aprox. 13,8 cm.

El individuo de Braga (1) proviene de una intervención

por el momento sin contextualizar. De nuevo, debemos

apoyarnos en la datación del modelo en TSHT. En la pro-

pia ciudad, los ejemplares de la forma Palol 9/11 no apa-

recen con anterioridad a la segunda mitad del siglo IV

(Termas) pero sobre todo en contextos del siglo V (Car-

valheiras) (Morais, 2010, 440-441). Los ejemplares de la Ol-

meda parecen provenir de estratos del siglo V—¿posteriores

a mediados del siglo IV?— como un individuo similar al de

Braga y recogido recientemente por J.A. Paz Peralta (2008,

4.12) decorado con motivos estampados sobre la pared.

Por todo ello, la Forma 20 parece propia de la Fase III de

la producción aunque no podemos descartar que aparezca

ya a inicios de la centuria del cuatrocientos.

Datación propuesta: segundo y tercer cuarto del siglo V.

Forma 21

Cuenco de paredes semicirculares y cuello exvasado re-

matado en un labio de perfil muy heterogéneo —en-

grosados, facetados…, etc.—. El apoyo lo realiza mediante

un pie plano y macizo (3). No cabe la menor duda de

que los cuencos de la Forma 21 imitan fielmente al cuenco

37T, la forma más importante producida en sigillata his-

pánica tardía. A diferencia del modelo en TSHT, la forma

en TSBT no porta decoración en la pared. Documenta-

mos dos tipos de vasos atendiendo a sus dimensiones: pe-

queños cuencos (1-2) (posible uso individual) y grandes

cuencos (3-5) (posible uso comunitario).

Dimensiones:

• Pequeños: 13,8-14,1 cm.

• Grandes: 22-23 cm.

Ejemplos (figura 13)

*1 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 1994.0906/ complexo 11,

sond. 50, UE 715/ Ø aprox. 14,1 cm. (Delgado, 1993/94,

123 y 132, Est. III, n. 12; Delgado y Morais, 2009, 51, n.

139).

*2 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT07-/ Ø aprox.

13,8 cm.

*3 Vigo/ Villa de Toralla/ UE 309/ VT03-193 ss./ Ø aprox.

23 cm.

*4 Braga/ Carvalheiras / N.I.: 1996.0155/ complexo 3010,

UE 591/ Ø aprox. 14,1 cm. (Delgado, 1993/94, 123-124

y 132, Est. III, n. 13; Delgado y Morais, 2009, 51, n. 140).

*5 Vigo/ Villa de Toralla/ Nivel C ed. 3/ VT03-3839 ss./

Ø aprox. 22 cm.

La forma no está presente en los contextos de la Fase 2A

de Marqués de Valladares fechados en el primer tercio

del siglo V. Por el contrario, está bien representada en el

contexto de abandono del Edificio secundario de la villa

de Toralla (2, 4) fechado a mediados de la centuria del cua-

trocientos. Una lectura directa de los datos vigueses nos

llevarían a pensar que la Forma 21 no comienza a pro-

ducirse hasta la Fase III de la producción. No obstante, la

forma 37T es bien conocida en Braga —es la forma más

importante de TSHT con c. 263 individuos (Morais, 2010,

461)— desde la segunda mitad del siglo IV y durante la pri-

mera mitad del siglo V. Por todo ello, la forma debió co-

menzar a producirseya durante la Fase II aunque parece

pervivir hasta los momentos finales de la producción.

Datación propuesta: finales del siglo IV-tercer cuarto del

siglo V.

Decoración (figuras 14-15)

La totalidad de las piezas completas con decoración es-

tampada y de los fragmentos decorados de la producción

son fondos de platos/fuentes. Los cuencos, las escudillas

o los platos de pequeñas dimensiones no portan decora-

ción a excepción de acanaladuras. Solo documentamos

en la producción decoración estampada mediante motivos

exentos (punzones) que generan composiciones decora-

tivas sobre la zona central del fondo de fuentes y platos.

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 159

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 159

160 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 14. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Fondos con decoración estampada

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 160

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 161

Figura 15. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Fondos con decoración estampada

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 161

La perfección de los motivos y de su disposición decora-

tiva delata un elevado dominio técnico (Delgado, 1993-

94, 126). La mayoría de los motivos —palmetas, círculos,

cuadrados y galones— se inspiran o copian los motivos es-

tampados de la sigillata africana D, aunque un pequeño

grupo podría imitar motivos que decoran los fondos de

las grandes fuentes hispánicas —rosetas y motivos de pe-

queño tamaño— e incluso otros parecen inspirados en la

DSP gálica —ciertas palmetas—. La composición decora-

tiva puede limitarse a un solo motivo pero lo habitual es

que se combinen de manera alterna dos o tres motivos di-

ferentes. Es muy habitual que un segundo o tercer mo-

tivo se estampe en la parte superior, o en la parte inferior

(figura 14, 11) del motivo principal —normalmente pal-

metas— conformando una especie de «motivo compuesto»

(figura 14, 11-13, 20-22 y figura 15, 37-39, 50; Formas 7.9,

12.3 y 12.9). En determinados fondos decorados con ga-

lones, éstos se estampan uno seguido del otro, generando

una continuidad decorativa que puede ir acompañada de

otros punzones (figura 15, 52) en lo que hemos dado en

llamar composiciones decorativas. Estas composiciones

pueden llegar a alcanzar cierta complejidad como sobre el

fondo nº 46 (figura 15) donde se combinan, en un juego

continuo, hasta tres motivos diferentes —palmetas, rose-

tas y motivos lineales—. Prácticamente todos los punzo-

nes se podrían clasificar dentro de los estilos decorativos

A(ii) y A(iii) —incluso algunos podrían incluirse en el es-

tilo A(i)-(ii) y otros (palmeta triangular) en el estilo B—

de la sigillata tunecina (Hayes, 1972, 217-219). A excep-

ción de los fragmentos muy pequeños —donde solo do-

cumentamos parcialmente la composición— la mayoría

de los motivos se disponen sobre los fondos en una o dos

bandas circulares concéntricas delimitadas por acanala-

duras. El fondo nº 23 se diferencia del resto por presen-

tar los motivos estampados conformando una composición

¿cuadrangular?, lo que podría significar la existencia de

una forma de TSBT cuadrada o rectangular —que no

hemos documentado por el momento— a imagen y se-

mejanza de la fuente Hayes 56 en sigillata africana? (Ca-

randini et alii, 1981, Tav. XL, 6-8).

La disposición de los motivos alternados en banda es

las más típica del estilo A(iii), fechado entre inicios y me-

diados de siglo V (Hayes, 1972, 219), datación que choca

con algunos de los motivos —en principio más antiguos—

pero que nos indica que las piezas no comienzan a deco-

rarse posiblemente hasta finales de la Fase II (finales del siglo

IV-inicios del siglo V?) generalizándose su uso durante la

162 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Fase III. La decoración estampada se mantiene en uso hasta

el final de la producción de engobe rojo como lo demuestra

su presencia en la fuente de pasta y engobe gris de la Forma

12.14. Los motivos estampados —inspirados en los moti-

vos de la DSP atlántica2— continúan decorando piezas de

TSBT gris del siglo VI aunque se convierte en un tipo de de-

coración minoritaria frente a las ruedecillas, las incisiones

o los cordones perlados aplicados. Todos los fondos de-

corados de las figuras 14 y 15 provienen de las interven-

ciones de Braga (BRA) y Vigo (VGO).

Catálogo de punzones (figuras 16-17)

CÍRCULOS CONCÉNTRICOS (1-4)

Tipo 1a y 1b: dos círculos concéntricos de pequeño ta-

maño más (1a) o menos finos (1b). Se documenta ex-

clusivamente sobre la Forma 7 (7.11), pudiendo aparecer

¿solo? (figura 14, 1-2) o alternando con palmetas del Tipo

31a (Forma 7.10, figura 14, 20), del ¿Tipo 34? (figura 14,

18) y del Tipo 43 (figura 15, 45), con cuadrados reticu-

lados del Tipo 12 (figura 14, 22) y del Tipo 15 (figura 14,

23), y con galones (figura 15, 50). Motivo decorativo en

uso durante las Fases II y III.

Tipo 2: tres círculos concéntricos. Se documenta sobre la

Forma 7 (7.8) alternando con palmetas del Tipo 40. Fase

II.

Tipo 3: dos círculos concéntricos con punto central. Se do-

cumenta sobre la Forma 7 (7.9) alternando con palmetas

del Tipo 34 y en el fondo nº 12 (figura 14) estampados en

la parte superior de palmetas del Tipo 32 y alternando con

cuadrados reticulados del Tipo 11. Fase II.

Tipo 4:motivo de mayor tamaño formado por tres círculos

concéntricos y un cuarto segmentado en tres partes. Do-

cumentado exclusivamente sobre la Forma 8.14 alter-

nado con palmetas del Tipo 44. Fase III.

OCTÓGONOS CONCÉNTRICOS (5)

Tipo 5:motivo geométrico de gran tamaño conformado

por un cuadrado central rodeado de un círculo y tres oc-

tógonos. Documentado exclusivamente sobre la Forma

7.7 y el fondo nº 19 alternado con palmetas del Tipo 31a-

b (solo probable sobre el fondo nº 19). Fase II.

2. Hemos documentado la presencia de palmetas de bucles, tí-picas de la producción de DSP atlántica (Rigoir, Rigoir y Meffre,1973, 208-263) decorando fondos de piezas grises del siglo VI.

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 162

CÍRCULOS CON ORLA DENTADA (6-10)

Tipo 6: punto central rodeado de un círculo con orla den-

tada. No lo hemos documentado asociado a formas, so-

lamente sobre el fondo nº 44 (figura 15) alternando con

palmetas del Tipo 37. Fase III.

Tipo 7: un círculo con orla dentada. No lo hemos docu-

mentado asociado a formas, solamente sobre el fondo

nº 51 (figura 15) alternando con galones. Fase III.

Tipo 8: dos círculos concéntricos con orla dentada. Mo-

tivo muy común documentado sobre los fondos nº 32-35

y 37 (fig. 15) alternando siempre con la palmeta dentada

del Tipo 45. Fase III.

Tipo 9: motivo como el Tipo 7 pero de mayor tamaño.

Documentado sobre los fondos nº 31 y 40 (figura 15),

en este último alternando con la palmeta del Tipo 41.

Fase III.

Tipo 10: círculo con orla dentada de gran tamaño y en su

interior una estrella de cinco puntas redondeadas. Motivo

documentado sobre el fondo nº 36 (figura 15) alternando

con palmetas dentadas del Tipo 45. Fase III.

CUADRADOS Y RECTÁNGULOS RETICULADOS (11-19)

Tipo 11: cuadrado de pequeño tamaño, contorneado y

con líneas horizontales y verticales. Motivo documen-

tado sobre los fondos nº 11, alternado con palmetas sin

nervadura central indeterminadas —motivo parcial— (fi-

gura 14), y nº 12 alternando con palmetas con nervadura

central del Tipo 32 y círculos concéntricos del Tipo 3 (fi-

gura 14).

Tipo 12: cuadrado de pequeño tamaño, contorneado y

con líneas horizontales y verticales. Documentado sobre

el fondo nº 22 (figura 14), compartiendo composición

con círculos concéntricos del Tipo 1b estampados en su

parte superior. ¿Fase II-III?

Tipo 13: rectángulo (4 × 5) de pequeño tamaño, sin con-

torno y con líneas horizontales y verticales. Documentado

sobre el fondo de la Forma 8.8 alternando con palmetas

del Tipo 38 y sobre los fondos nº 38 y 39 (figura 15) es-

tampados sobre la parte superior de palmetas dentadas

del Tipo 45. Fase III.

Tipo 14: rectángulo (6 × 7) de pequeño tamaño, sin con-

torno y con líneas horizontales y verticales. Documentado

sobre el fondo nº 16 (figura 14) alternando con palme-

tas del ¿Tipo 34? Fase II.

Tipo 15: cuadrado de gran tamaño, contorneado y con

líneas horizontales y verticales. Documentado sobre el

fondo nº 23 (figura 14) compartiendo composición con

círculos concéntricos del Tipo 1b estampados en su parte

superior. ¿Fase II-III?

Tipo 16: cuadrado de pequeño tamaño, contorneado y

con líneas diagonales. Documentado sobre los fondos

nº 13, estampados sobre la parte superior de palmetas del

Tipo 31 o 32 (figura 14) y nº 17 alternando con palme-

tas del Tipo 31a (figura 14). Fase II.

Tipo 17: cuadrado de gran tamaño, contorneado y con líneas

diagonales. Documentado sobre el fondo nº 14 (figura 14)

alternando con palmetas del Tipo 31a (figura 14). Fase II.

Tipo 18: cuadrado de gran tamaño, contorneado, con lí-

neas horizontales y verticales y con puntos entre las líneas.

Documentado sobre el fondo nº 15 (figura 14) alternando

con palmetas con nervadura central del ¿Tipo 31-32? (fi-

gura 14). Fase II.

Tipo 19:motivo parcial. ¿Cuadrado? de gran tamaño, sin

contorno, con líneas horizontales y verticales y con pun-

tos y medias lunas entre las líneas. Documentado sobre

el fondo nº 24 (figura 14) alternando con motivos de pe-

queño tamaño del Tipo 27 (figura 14). ¿Fase II-III?

ROSETAS (20-25)

Tipo 20: roseta de pequeño tamaño (8 pétalos). Motivo

documentado estampado en la parte superior de palme-

tas o ¿galones? sobre el fondo de la Forma 12.3. Fase III.

Tipo 21: roseta de pequeño tamaño (11 pétalos). Motivo

documentado sobre el fondo nº 41 alternando con pal-

metas del Tipo 39 (figura 15). Fase III.

Tipo 22: roseta de pequeño tamaño (7 pétalos) con punto

central. Motivo documentado sobre el fondo de la Forma

12.9 estampado en la parte superior de galones del Tipo

48. Fase III.

Tipo 23: como el Tipo 22 ligeramente de mayor tamaño

(11 pétalos). Motivo documentado sobre el fondo nº 52,

estampado sobre el vértice superior de galones formando

la composición Tipo 52 (figura 15). Fase III.

Tipo 24: ¿roseta? contorneada con círculo central. Mo-

tivo documentado sobre el fondo nº 46, alternando con

palmetas del ¿Tipo 36? y motivos del Tipo 29 (figura 15)

conformando un motivo compuesto (¿guirnalda?) del

Tipo 53. Fase III.

Tipo 25: roseta de gran tamaño (14 pétalos). Motivo do-

cumentado sobre el fondo nº 43, alternando con pal-

metas del Tipo 38 (figura 15) y sobre el fondo de la Forma

12.14 ocupando el centro de la composición compuesta

por una banda de palmetas del Tipo 42 y una segunda

a base de galones imbricados del Tipo 51. Fase III.

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 163

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 163

164 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 16. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Catálogo de punzones

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 164

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 165

Figura 17. Vajilla de Terra Sigillata Bracarense Tardía. Catálogo de punzones

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166 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

fondos nº 15—alternando con motivos del Tipo 18—, nº

20—junto a motivos dispersos del Tipo 1b— y nº 26 al-

ternando con el motivo Tipo 30 (figura 14). Fase II e ¿ini-

cios de la Fase III?

Tipo 33: palmeta triangular de pequeño tamaño y con

nervadura central. Solamente la documentamos sobre el

fondo nº 9 (figura 14). ¿Fase II?

Tipo 34: palmeta romboide dentada en su parte inferior.

Motivo documentado sobre la Forma 7.9 alternando con

motivos del Tipo 3, en solitario sobre el fondo nº 3 (figura

14) y posiblemente alternando con motivos del Tipo 1b

sobre el fondo nº 18 y con motivos del Tipo 14 sobre el

fondo nº 16 (figura 14). Fase II.

Tipo 35: como el nº 34 pero con los bordes aristados

(palmeta más estilizada). Motivo documentado en solitario

sobre el fondo nº 4 (figura 14). ¿Fase II?

Tipo 36: palmeta ovoide sin nervadura central con las

hojas de la parte superior en diagonal y de la parte infe-

rior en sentido inverso. Motivo documentado sobre el

fondo de la Forma 8.13 en solitario y probablemente

sobre el fondo nº 46 (figura 15) formando una compo-

sición Tipo 53 junto a rosetas del Tipo 24 y el motivo

Tipo 29. Fase III.

Tipo 37: palmeta romboide de pequeño tamaño sin ner-

vadura central con la zona inferior dentada. Motivo do-

cumentado sobre el fondo nº 44, alternando con dos

motivos del Tipo 6 (figura 15). Fase III.

Tipo 38: palmeta romboide estilizada sin nervadura cen-

tral conformada por dos palmas inversas. Documentada

sobre el fondo de la Forma 8.8 alternando con motivos del

Tipo 13 y sobre el fondo nº 43 (figura 15) alternando con

rosetas de gran tamaño del Tipo 25. También se docu-

menta como motivo único sobre el fondo nº 42 (figura

15). Posible inspiración en las palmetas de la DSP. Fase III.

Tipo 39: palmeta ovoide estrecha y engrosada en su parte

inferior sin nervadura central. Motivo documentado sobre

el fondo nº 41 alternando con rosetas del Tipo 21 (figura

15). Fase III.

Tipo 40: palmeta ovoide estrecha sin nervadura central

y con las hojas de la zona inferior en sentido inverso.

Motivo documentado sobre el fondo de la Forma 7.8 con

motivos del Tipo 2 estampados en su extremo superior.

Fase II.

Tipo 41: palmeta estrecha, alargada, sin nervadura cen-

tral y con hojas cortas y gruesas. Motivo documentado

sobre el fondo nº 40 alternando con motivos del Tipo 9

(figura 15). Fase III.

MOTIVOS VARIADOS DE PEQUEÑO TAMAÑO (26-30)

Tipo 26:motivo circular de pequeño tamaño compuesto

por una roseta interior rodeada de un círculo segmen-

tado. Motivo documentado sobre el fondo nº 21, estam-

pado sobre la parte superior de una palmeta del Tipo

31-32 (figura 14) conformando un motivo compuesto.

Fase II.

Tipo 27:motivo de pequeño tamaño compuesto por un

rectángulo rodeado de ¿pétalos? Motivo documentado

sobre el fondo nº 24, ¿alternando? con cuadrados del

Tipo 19 (figura 14). ¿Fase II-III?

Tipo 28: motivo de mediano tamaño representando un

sol o una estrella de ¿8 puntas? Motivo documentado

sobre el fondo nº 25 (figura 14) y sobre la Forma 9.4 al-

ternando en ambos casos con palmetas del Tipo 31-32.

¿Fase II-III?

Tipo 29: motivo lineal dentado documentado sobre el

fondo nº 46 (figura 15) junto a rosetas del Tipo 23 y pal-

metas del ¿Tipo 36?, conformando un motivo compuesto

(¿guirnalda?) del Tipo 53 (figura 17). Fase III.

Tipo 30: reverso de moneda tardía de pequeño tamaño

(¿follis?) en el que se aprecia un guerrero con estandarte

en su mano izquierda y escudo en su mano derecha. Mo-

tivo documentado sobre el fondo nº 26 alternando con

palmetas indeterminadas con nervadura central (figura

14). ¿Fase II-III?

PALMETAS (31-45)

Tipo 31a-b: palmeta ovoide con nervadura central de

gran tamaño. Documentado como motivo único sobre

los fondos nº 5-8 (figura 14), alternando con motivos del

Tipo 28 en el fondo nº 25 (figura 14) y en el fondo de la

Forma 9.4, alternando con motivos del Tipo 1a-b sobre

la Forma 7.10, junto a cuadrados del Tipo 16 sobre los

fondos nº 13 y 17, alternando con cuadrados del Tipo

17 sobre el fondo nº 15 y junto al motivo del Tipo 26

sobre el fondo nº 21. En ocasiones, el motivo aparece

mal impreso denotando un continuo uso y desgaste como

en los fondos nº 6 y 7 donde apenas se deja ver la ner-

vadura central. Motivo típico de la Fase II que parece

pervivir durante los inicios de la ¿Fase III?

Tipo 32: como el motivo 31a-b con extremos aristados

(palmeta más estilizada). Documentamos este motivo

sobre el fondo nº 12, conjuntamente con motivos del

Tipo 3—estampados en la parte superior de la palmeta—

y alternando con motivos del Tipo 11 (figura 14). Posi-

blemente también se documente parcialmente sobre los

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 166

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 167

Tipo 49: galón parcial apuntado formado por dos líneas

de gruesos puntos convergentes. Motivo documentado

en solitario sobre el fondo nº 49 y posiblemente sobre los

fondos 50 —junto a motivos del Tipo 1a estampados

sobre el vértice superior del galón— y 51—alternando

con círculos dentados del Tipo 7 (figura 15)—. Fase III.

Tipo 50: galón triangular formado por dos líneas con-

vergentes de finas rayas. Motivo documentado en solitario

sobre el fondo nº 48 (figura 15). Fase III.

COMPOSICIONES (51-53)

Tipo 51: galón triangular de gran tamaño formado por dos

líneas convergentes de puntos. Dos puntos marcan los

vértices de unión de las líneas generando una especie

de motivo continuo como si fuese impreso mediante una

¿ruedecilla? Motivo documentado sobre el fondo de la

Forma 12.14 conformando una banda exterior comple-

mentada con una banda interior a base de motivos del

Tipo 42 y ambos entorno a una roseta de gran tamaño del

Tipo 25.

Tipo 52: galón apuntado formado por dos líneas con-

vergentes de pequeños cuadrados. Cada galón se une

en su parte inferior al siguiente y sobre los vértices su-

periores de cada uno se estampó una roseta del Tipo 23,

generando una composición decorativa (como guirnal-

das). Documentado sobre el fondo nº 52. Fase III.

Tipo 53: composición conformada por parejas de pal-

metas del Tipo 36 y rosetas del Tipo 24 unidas entre sí

por motivos del Tipo 29 ¿semejando guirnaldas? Fase III.

Distribución

La distribución de la TSBT se reduce al ámbito local-re-

gional y en concreto al comercio interno del propio con-

ventus bracaraugustano. Los límites de su difusión parecen

coincidir con los marcados siglos antes por la otra gran

vajilla fina de producción bracarense, la conocida como

«cerámica bracarense» (figura 18B) producida entre me-

diados del siglo I e inicios del siglo II (Morais, 2010, 447).

Sin lugar a dudas, la ciudad romana de Bracara Augusta

y los asentamientos rurales de su entorno (villae como la

de Via Cova, Póvoa de Lanhoso) son su mercado princi-

pal, algo normal al localizarse allí el propio local de pro-

ducción. Hacia el sur, el río Duero parece marcar su límite

de distribución, donde la localizamos en importantes

cantidades en el asentamiento de Guifoes (Matosinhos-

Tipo 42: palmeta triangular compleja. Motivo único do-

cumentado sobre el fondo de la Forma 12.14 confor-

mando una banda entorno a una roseta de gran tamaño

del Tipo 25 y circundada por galones del Tipo 51. ¿Fase

III tardía?

Tipo 43: palmeta conformada en tres partes: una supe-

rior triangular con las hojas en diagonal, una parte cen-

tral rectangular con seis líneas verticales en su interior y

una parte inferior triangular inversa a la superior. Motivo

documentado sobre el fondo nº 45 alternando con cír-

culos concéntricos del Tipo 1b (figura 15). Posible ins-

piración en los punzones que decoran la DSP. ¿Fase III?

Tipo 44: palmeta romboide con nervadura central con

el triángulo superior habitual y el inferior conformado

por un juego de líneas y círculos recordando a ciertas

palmetas de la DSP de producción gálica. Motivo docu-

mentado sobre el fondo de la Forma 8.14 alternando con

el motivo del Tipo 4. Fase III.

Tipo 45a-c: palmeta romboide de contorno dentado sin

nervadura central con hojas alternando entre líneas con-

tinuas y punteadas. Se trata de uno de los motivos más

comunes de la Fase III documentado en solitario sobre

los fondos nº 27-30, alternando o junto a motivos del

Tipo 8 sobre los fondos nº 33-35 y 37, alternando con el

motivo del Tipo 10 en el fondo nº 36 o alternando con

cuadrados reticulados del Tipo 13 sobre los fondos nº

38 y 39 (figura 15). En ocasiones, el motivo aparece mal

impreso denotando un continuo uso y desgaste como

en los fondos nº 28, 36 y 37, donde apenas se mantiene

el contorno. Posible inspiración en las palmetas de la

DSP. Fase III.

GALONES (46-52)

Tipo 46: galón apuntado formado por dos líneas de grue-

sos puntos convergentes. Documentado sobre la Forma

8.15 como motivo único estampado en banda delimi-

tado por acanaladuras. Fase III.

Tipo 47: galón apuntado formado por dos líneas de pun-

tos convergentes. En su parte inferior izquierda presenta

un defecto al reproducir dos puntos en la zona interior.

Motivo único documentado sobre el fondo nº 47 (figura

15). Fase III.

Tipo 48: galón apuntado formado por dos líneas curvas

convergentes de pequeños cuadrados. Motivo docu-

mentado sobre el fondo de la Forma 12.9 junto a rose-

tas del Tipo 22 estampadas sobre el vértice de cada galón

conformando un motivo de tipo compuesto. Fase III.

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 167

Oporto), limite al mismo tiempo del propio convento.

La TSBT no alcanza un importante núcleo de consumo

y redistribución como Conimbriga, donde la demanda de

este tipo de productos parece cubierta por una sigillata

de producción local identificada ya por M. Delgado quién

la bautizó como Imitation Locale de Sigillée Claire D

(1975, 271). Esta producción, detectada en Conimbriga

y en establecimientos próximos como la villa do Raba-

çal, alcanza a su vez los territorios del valle del Duero

—la hemos identificado en Guifoes— donde convive y

compite con la TSBT. De nuevo, el río parece marcar su

168 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

límite más septentrional, al no documentarse por el mo-

mento, en establecimientos más norteños como la pro-

pia Bracara Augusta. Este hecho refuerza la existencia

de una «frontera» económica en el valle del Duero coin-

cidente con la frontera política que marca la separación

de facto entre la Gallaecia y la Lusitania. La TSBT pro-

bablemente alcance los mercados del Duero mediante

la vía XVI que unía por tierra Bracara Augusta con Olis-

sipo pasando por Conimbriga (Naveiro, 1991, 144) como

lo demuestran los hallazgos de estos productos en pun-

tos intermedios —unidos por vías secundarias— como en

Figura 18. A. Mapa de difusión de la TSBT; B. Mapa de difusión de la «cerámica bracarense» del Alto Imperio (Naveiro, 1991, 256-257, mapa 16)

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el aglomerado secundario de Alvarelhos (Castellum Ma-

diae), en castros con ocupaciones tardías como Frazão

o incluso en necrópolis como la de Vila Nova da Telha

(figura 18A). Más problemas presenta por el momento

la correcta identificación de la producción en la ciudad

de Tongobriga (Dias, 1997) situada en el valle del río Tá-

mega, afluente del Duero y que vertebra en la zona in-

terna la región de norte a sur, desde la ciudad de Chaves

(Aquae Flaviae) hasta el propio Portus y Cale (Oporto).

La presencia de al menos un individuo de TSBT en

Ourense3 demuestra que la producción se difunde hacía

la zona nororiental del conventus como dos siglos antes

lo hizo la cerámica bracarense utilizando las importantes

vías terrestres (vías XVII y XVIII) que comunican Braga

con Astorga. Es probable que la producción se docu-

mente en un futuro próximo en importantes estableci-

mientos situados en el área nororiental del convento

como Chaves, Aquis Querquennis (en la zona de la man-

sio tardía), Verín o Xinzo de Limia, muchos de ellos mer-

cados tradicionales de los productos salidos de los talleres

bracarenses. En la zona noroccidental del conventus se

localiza posiblemente en segundo gran mercado para la

producción, como así lo atestiguan los numerosos indi-

viduos recuperados en las intervenciones en la zona de

Vigo, tanto en su núcleo urbano como en establecimientos

del entorno —margen sur de la ría homónima— tipo vi-

llae o factoría. De nuevo, nos encontramos en un local

tradicional de consumo de cerámicas producidas en la ca-

pital, prácticamente desde época augustea. Es posible

que las TSBT alcancen Vigo por tierra, mediante la vía XX

o per loca marítima, pero sobre todo podían alcanzar el

puerto vigués por mar, a partir de algún punto costero pró-

ximo a la capital (¿Esposende?) que facilitase la salida de

la producción local y el abastecimiento de productos im-

portados fruto del dinámico comercio interprovincial del

momento. Los hallazgos de esta producción en estable-

cimientos más norteños de las Rías Baixas como A Lan-

zada o un castro con penetración fluvial como Cotobade

(Pontevedra) demuestran, a nuestro juicio, que la pro-

ducción se difunde en cantidades importantes por vía

marítima y más allá de la ría de Vigo marcando, por el mo-

mento, su límite septentrional en la ría de Arousa.

La TSBT debió alcanzar de manera paulatina esta área

máxima de difusión —en la práctica coincidente con los

límites conventuales—, mediante un fenómeno de pro-

gresiva conquista de mercados más alejados de los talle-

res, beneficiándose en momentos puntuales (inicios de la

Fase III) de los altibajos del comercio interprovincial. En

sus inicios (Fase I), la difusión debió restringirse a la pro-

pia ciudad de Braga y a su entorno más cercano siendo

probable que las áreas más alejadas del centro productor

se alcanzasen en el momento de mayor auge productivo

(Fases II y III), momento que coincide con un descenso

de las importaciones de vajilla fina tunecina (segundo y

tercer cuarto del siglo V) debido a la conquista vándala del

norte de África. La reactivación del comercio inter-pro-

vincial en el Noroeste a partir de finales del siglo V y los

inicios del siglo VI, y que perdurará hasta los mediados del

siglo VII, trae consigo la llegada de masivas cantidades de

vajillas finas importadas (TSA, LRC, LRD y DSP) a los mer-

cados de la Gallaecia—en especial a los costeros como

el puerto de Vigo— que constriñen a los productos lo-

cales salidos de los talleres bracarenses que nunca vol-

verán a alcanzar la importancia que adquirió la TSBT

durante las décadas centrales del siglo V.

Problemática y líneas de investigación

La individualización y caracterización formal de una pro-

ducción cerámica es el resultado de un proceso intui-

tivo, pero también de la conjugación de los datos

históricos, arqueo-gráficos y de laboratorio, siempre su-

jetos a la validación por la comunidad científica de la es-

pecialidad.

En lo que concierne a la individualización y caracteri-

zación de la producción aquí analizada, este mérito se

debe a M. Delgado, investigadora de rara sensibilidad,

modestia y de gran rigor científico, que trató de forma la-

pidaria estas cerámicas. No obstante, en el estado actual

de los conocimientos, el hallazgo de nuevas formas y la in-

dividualización y caracterización formal de otras, exige la

continuación de los estudios. Como tuvimos la oportuni-

dad de exponer, las producciones de cerámica fina de

mesa fabricadas en el ámbito de una región, destinadas a

cubrir las necesidades de consumo de los principales nú-

cleos habitados, imitaron y se inspiraron en las produc-

ciones finas destinadas a un mercado más amplio, y como

tal, difundidas a escala del Imperio. Pero este fenómeno

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 169

3. El individuo de TSBT, posiblemente una fuente de la Forma7 decorada con motivos estampados, se recuperó en las exca-vaciones del Museo Arqueológico Provincial de Ourense (Fa-riña Busto y Xusto Rodríguez, 2008, 65).

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170 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Figura 19. Vajilla fina de imitación del área Conimbrigense (a partir de Delgado, 1975). Formas y fondos decorados provenientes deConimbriga y Guifoes (Matosinhos)

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 170

de las imitaciones fue alcanzando un carácter autónomo,

de acuerdo con las tradiciones de la región, de sus con-

dicionantes naturales y del savoir faire de sus alfareros.

El estudio preliminar de la producción identificada en

Conimbriga por M. Delgado (figura 19), con una pasta

fina — que a simple vista parece idéntica a la pasta de las

cerámicas finas de mesa integradas en las canónicas pro-

ducciones de sigillata— revela que las diferencias de

pasta solamente tienen que ver con las arcillas utilizadas

en cada región. Se trata de otro magnífico ejemplo de va-

jilla fina de mesa local/regional —alcanzan los mercados

del río Duero (Guifoes)— influenciada en sus formas

— Hayes 58, 59 (documentada en la villa de Fuçacal) y

61 (la forma más común de la producción) de TSA, y

Drag. 27 (la forma más abundante en Fuçacal y docu-

mentada también en Guifoes) y 37T en TSHT — y deco-

raciones — mo- ti vos estampados junto a incisiones que

imitan ruedecillas — por las sigillatas dominantes en los

mercados peninsulares durante los siglos IV y V: las de

producción tunecina y las hispánicas tardías4. Es esta cons-

tatación la que nos lleva a integrar las imitaciones de ce-

rámica fina de engobe vermelho não vitrificavel en el ám-

bito de las sigillatas tardías fabricadas en un contexto

regional, como otros ejemplos conocidos en diversas áreas

del Imperio (DSP, TSHTM, Pontic Red Slip Ware, TS de Ar-

gelia…, etc.). No se trata de un fenómeno exclusivo del

período tardoantiguo: un caso singular que ilustra bien

este fenómeno lo representa una cerámica fina de mesa

igualmente producida en el ámbito del conventus braca-

raugustano —la designada como cerámica «bracarense»—

que imita a la perfección las formas y las decoraciones

de la sigillata hispánica, en particular de las oficinas de la

Betica (Morais, 2008, 445-470). Más que la aceptación de

la nomenclatura propuesta para esta producción, fue

nuestra intención la de conseguir su ordenación formal y

cronológica, llamando la atención sobre las tremendas

afinidades con las formas y las decoraciones de las sigi-

llatas hispánicas y africanas del período tardoantiguo y

destacar su originalidad dado su carácter de producción

sujeta a las tradiciones del artesanado local, en el ámbito

de una difusión regional. La complejidad de esta temá-

tica no se agota, como parece sugerir la presencia de imi-

taciones de la forma Sétif 1970 —una forma rara en los pro-

pios locales de producción y raramente exportada— que

nos llevan a considerar la posibilidad que algunas de las

formas de la producción imiten o se inspiren en reci-

pientes de metal o incluso de madera.

Todo indica que es necesario todavía el obtener nue-

vos y mejores contextos datables para asignar a cada

forma una ajustada cronología y comprobar la certitud de

las evoluciones formales y Fases productivas aquí pro-

puestas a partir de los datos existentes. La caracteriza-

ción de la producción debe continuar con un nuevo

proyecto arqueométrico y petrográfico que incluya nue-

vos análisis de pastas y engobes que verifiquen lo ante-

riormente propuesto en 2005 a partir de pocos ejemplos

(Oliveira et alii, 2005) —pueden no ser representativos

de todo el conjunto de TSBT— y que podrían esconder

una producción más compleja, con más de un área pro-

ductiva. Este trabajo puede igualmente servirnos para

verificar la tipología aquí propuesta en base a datos ar-

queológicos y en menor medida, a datos arqueométri-

cos. Así mismo, el mapa de difusión de la producción

no es del todo definitivo. Futuros estudios sobre sitios

del Noroeste con contextos tardíos podrán fijar límites

más concretos de la difusión de la TSBT y al mismo

tiempo propiciarán, sin lugar a dudas, el aumento del

catálogo formal y decorativo de la producción.

Pero sin duda, el camino a seguir —encauzado ya

por los autores de este trabajo— sería la de completar la

tipología de la vajilla fina tardía de producción braca-

rense con las formas grises de TSBT —vajilla fina de la

producción Cizenta Tardía de Braga e Dume (Gaspar,

2000; 2003) o Grupos 1a-c de las Cinzentas Tardías (Del-

gado y Morais, 2009, 60-67)— que substituyen paulati-

namente a las formas con engobe rojo a partir de finales

del siglo V y que van a perdurar durante buena parte del

siglo VI (Terra Sigillata Bracarense Tardía Gris).

TERRA SIGILLATA BRACARENSE TARDÍA (TSBT) 171

4. Estas piezas, posiblemente fabricadas en el entorno de Co-nimbriga, junto a otras producciones de imitación —tambiénla TSBT— han sido abordadas y analizadas por L.C. Juan Tovaren un capítulo de esta obra con el título de «Las cerámicas imi-tación de sigillata en el occidente de la Península Ibérica duranteel siglo V d.C.» que refleja el rico, variado y complejo mundode las producciones de imitación locales/regionales en el te-rritorio hispano durante la Antigüedad Tardía.

HISPANORROMANAS_II_CERAMICAS HISPANORROMANAS 17/05/12 11:17 Página 171

172 CERÁMICAS HISPANORROMANAS II. PRODUCCIONES REGIONALES

Forma Var. Forma imitada=prod. Dec. Estampada Cronología propuesta FASE

Forma 1 Ritterling 8=TSHT No fin. s. III – fin. s. IV o ppos. s. V. FASE I

Forma 2 Drag. 15/17=TSHT No fin. s. III – med. s. IV o + FASE I-II?

Forma 3 Hayes 52=TSAC No med. s. IV – ppos. s. V FASE I?-II

Forma 4 Hayes 50=TSAC No 2ª ½ s. IV – ppos. s. V FASE II

Forma 5 Hayes 51B=TSAC No 2ª ½ s. IV FASE II

Forma 6 Hayes 58B=TSAD No 2ª ½ s. IV o + FASE II

Forma 7 Hayes 59A=TSAD Si fin. s. IV – 1er 1⁄3 s. V o + FASE II

Forma 8

A Hayes 61A=TSAD Si 2ª ½ s. IV – ppos. s. V FASE II

B Hayes 61B2=TSAD Si 2º y 3er ¼ s. V FASE III

C Hayes 59B1=TSAD ? 2º y 3er ¼ s. V FASE III

Forma 9 Hayes 63=TSAD Si fin. s. IV – 1er 1⁄3 s. V FASE II-III

Forma 10 Hayes 73=TSAC y D No 2º y 3er ¼ s. V FASE III

Forma 11Delgado 1968 y/o E.M. 14=TSA C y D

No 2º y 3er ¼ s. V FASE III

Forma 12A Hayes 59/67?=TSA D Si 2º y 3er ¼ s. V o + FASE III

B Hayes 59/67?=TSA D Si 2º y 3er ¼ s. V o + FASE III

Forma 13 Hayes 67=TSA D ? 2º y 3er ¼ s. V FASE III

Forma 14 Hayes 76=TSA D No? 2º y 3er ¼ s. V FASE III

Forma 15 ¿Forma en metal? No 2º y 3er ¼ s. V FASE III

Forma 16 Palol 1=TSHT ? ppos. s. V – 3er ¼ s. V? FASE II-III?

Forma 17 Paz 8.8-9=TSHT No? 2º y 3er ¼ s. V FASE III

Forma 18A Paz 8.2-3=TSHT No fin. s. IV – ppos. s. V FASE II

B Paz 8.2-3 o Ritt.8=TSHT No 2º y 3er ¼ s. V FASE III

Forma 19 Paz 8.1=TSHT No 2ª ½ s. IV – ppos. s. V FASE II

Forma 20 Palol 9=TSHT No 2º y 3er ¼ s. V FASE III

Forma 21 Forma 37T=TSHT No fin. s. IV – 3er ¼ s. V FASE II-III

Tabla 1. Tabla resumen del repertorio tipológico

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