" UNIVERSIDAD PRIVADA DE TACNA " INTEGRANTES
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“UNIVERSIDAD PRIVADA DE TACNA”
INTEGRANTES:
Rosario AguirreTicona
María EugeniaCutipachambilla.
Lizbeth Curí Paricahua
Miguel Godínez Liendo
CURSO: Neuroanatomía
TEMA: Nervios craneales (I y VI)
DOCENTE: Dr. Abelardo Rodríguez
FACULTAD: FAEDCOH
CARRERA: Psicología – III ciclo
TACNA – PERÚ
2014
I. Introducción:
Los pares craneales, son nervios que están en comunicación con
el encéfalo y atraviesan los orificios de la base del cráneo con
la finalidad de inervar diferentes estructuras, además de la
cabeza y el cuello.
De acuerdo a su punto de emergencia en la superficie del
encéfalo, se distinguen doce pares de nervios.
Desde el punto de visto fisiológico, los pares craneales pueden
ser divididos en tres grupos o categorías:
a. Nervios sensitivos o sensoriales (olfatorio, óptico y
auditivo)
b. Nervios motores ( óculo-motor, patético ,abductor,
accesorio, hipogloso)
c. Nervios mixtos o sensitivos – motores (trigémino, facial,
glosofaríngeo, vago)
En cada par craneal podemos considerar un origen real y uno
aparente:
Origen aparente: es el sitio de emergencia del nervio en la
superficie de la masa encefálica.
Origen real o verdadero: es el sitio que da origen a las fibras
nerviosas que constituyen el nervio.
En el caso de los nervios sensitivos o aferentes, su origen real
corresponde a las células nerviosas periféricas, que pueden
agruparse formando ganglios anexos a los troncos nerviosos, o
estar situados en los órganos de los sensitivos, por ejemplo las
fosas nasales, ojos u oídos. Los nervios motores o aferentes, se
inician en grupos neuronales situados en el interior del
encéfalo, que constituyen su núcleo de origen.
Los nervios mixtos poseen dos raíces una motora y otra
sensitiva, cada una de las cuales poseen su propio origen real.
Algunos pares craneales poseen fibras vegetativas pertenecientes
al Sistema Parasimpático, este es el caso de los nervios: óculo-
motor, facial, glosofaríngeo y neumogástrico. Estos nervios,
además de su origen sensitivo motor, poseen un núcleo central
donde se originan sus fibras vegetativas.
II. CONSIDERACIONES GENERALES
Hay 12 pares de nervios craneales que constituyen los nervios
periféricos del encéfalo. Estos nervios abandonan el cráneo a
través de fisuras y forámenes para distribuirse en la cabeza y
cuello principalmente (a excepción del décimo nervio craneal que
inerva estructuras torácicas y abdominales).
Los nervios craneales son:
1. Nervio Olfatorio (par craneal I)2. Nervio Óptico (par craneal II)3. Nervio Oculomotor (par craneal III)4. Nervio Troclear (par craneal IV)5. Nervio Trigémino (par craneal V)6. Nervio Abducente (par craneal VI)7. Nervio Facial (par craneal VII)8. Nervio Vestibulococlear (par craneal VIII)9. Nervio Glosofaríngeo (par craneal IX)10. Nervio Vago (par craneal X)11. Nervio Accesorio (par craneal XI)
III. CLASIFICACION DE LOS NERVIOS CRANEALES
Los componentes funcionales de los nervios craneales son:
Aferente somático general (ASG) Aferente somático especial (ASE) Aferente visceral general (AVG) Aferente visceral especial (AVE) Eferente somático general (ESG Eferente visceral general (EVG) Eferente visceral especial (EVE)
Somático se refiere a la cabeza, pared corporal y extremidades;
Visceral a las vísceras; Aferente a la sensibilidad; Eferente a
motor; General a amplias áreas de distribución en la cabeza y el
cuerpo; Especial a funciones especializadas de olfato, gusto,
visión, audición, equilibrio e inervación motora de músculos
originados de los arcos branquiales (branquioméricos).
Nervios aferentes especiales
Son nervios sensitivos relacionados con los sentidos especiales:
olfato, visión, audición, gusto y equilibrio:
1) Nervio óptico (ASE)
2) Nervio Vestibulococlear (ASE)
3) Nervio olfatorio (AVE)
Nervios eferentes somáticos generales
Son nervios motores que contienen fibras que inervan músculos
voluntarios derivados de somitos embrionarios, o sea, músculos
esqueléticos exceptuando los branquioméricos. Estos son los
músculos extraoculares del ojo y los músculos de la lengua. El
nervio Oculomotor contiene además fibras parasimpáticas (EVG)
que inervan los músculos involuntarios intraoculares:
1) Nervio Oculomotor (ESG, EVG)
2) Nervio Troclear (ESG)
3) Nervio Abducente (ESG)
4) Nervio hipogloso (ESG)
III. NERVIOS CRANEALES:
I. PAR CRANEAL I: “NERVIO OLFATORIO”
El epitelio olfatorio se localiza en el techo de la cavidad
nasal, extendiéndose al tabique. Está constituido por 3 tipos de
células: las neuronas olfatorias (bipolares, presentan
receptores moleculares dendríticos, se proyectan atravez de la
lámina cribiforme del hueso etmoides para hacer sinapsis con las
neuronas secundarias en el bulbo olfatorio), células de sostén,
células basales (se regeneran cada 60 días). Las neuronas
primarias hacen sinapsis directamente con las neuronas
secundarias sin hacer sinapsis con el tálamo como lo hacen el
resto de las neuronas sensoriales. Las vías olfatorias son
ipsilaterales. El bulbo olfatorio y sus vías son parte del
cerebro que se evaginan desde el teleencefalo y contiene los
cuerpos celulares de la segundas neuronas sensoriales que
transmiten el olor al cerebro, está constituido por 5 capas a
nivel de la lámina cribiforme.
Los nervios olfatorio y óptico emergen del cerebro, mientras el
resto lo hace del tronco encefálico. Algunos pares craneales
sólo contienen fibras aferentes, otros sólo eferentes y algunos
ambos tipos de fibras. Las fibras aferentes se originan en somas
de ganglios periféricos, cuyos axones entran al tronco
encefálico para sinaptar con un núcleo sensitivo de relevo. Las
fibras eferentes se originan en somas de núcleos motores del
tronco encefálico.
a) CLASIFICACIÓN: sensitivob) ORIGEN REAL: mucosa olfatoria de la cavidad nasalc) ORIGEN APARENTE: extremo posterior del bulbo
olfatoriod) AGUJERO DE ENTRADA O SALIDA: lámina cribosa del
etmoidese) TERRITORIO DE INERVACIÓN: -----
Anatomía
Este nervio es una extensión especializada del cerebro, siendo
la única vía sensorial que alcanza la corteza sin hacer sinapsis
en el tálamo.
Recoge la sensibilidad olfatoria de los receptores de la mucosa
nasal, la conduce a través de sus axones (nervio olfatorio) que
atraviesa la lámina del etmoides para llegar al bulbo olfatorio
y, desde allí, el tracto olfatorio viaja hasta el núcleo
olfatorio posterior del rinencéfalo, que junto con el claustro y
la ínsula constituyen el área de integración de la información
olfatoria.
Exploración
No suele realizarse su examen de rutina, sólo cuando hay
circunstancias que nos hagan sospechar una lesión de este nervio
(fractura de lámina etmoidal, hipertensión intracraneal,
aracnoiditis, trastornos conductuales sugestivos de tumor
frontobasal, etc.). La disfunción olfatoria puede deberse a un
proceso local (nasal) o neurógeno (tracto olfatorio), por eso es
importante descartar anomalías en la cavidad nasal.
La exploración clínica consiste en determinar si el paciente
percibe olores de sustancias conocidas (café, jabón, chocolate),
evitando sustancias irritantes (alcohol, ácidos), en cada fosa
nasal por separado, comprobando que ambas estén permeables, y
estando los ojos y la boca del paciente cerrados. Se solicitará
al paciente si percibe algún olor, y si la respuesta es positiva
que lo identifique.
Conviene señalar que aunque no se identifique el olor, su
apreciación es suficiente para descartar anosmia.
Interpretación Las alteraciones en la percepción olfativa pueden
ser:
Cuantitativas: hiposmia (disminución), anosmia (ausencia) e
hiperosmia (aumento).
Cualitativas: parosmia/disosmia (ilusión), cacosmia
(percepción desagradable), alucinaciones y agnosia Olfatoria
(incapacidad discriminativa).
Para estudiar el nervio óptico es preciso examinar el fondo de
ojo, la agudeza visual y los campos visuales.
Fondo de ojo
Se realiza con el oftalmoscopio. Es aconsejable que, para la
exploración neurológica, la visualización del fondo de ojo se
realice, preferentemente, con el ojo sin dilatar, especialmente
en los enfermos estuporosos. Se deben examinar la retina y la
papila. En cuanto a la exploración de la retina, es preciso
observar el aspecto de los vasos (arteriolas y venas) y si
existen o no depósitos pigmentarios o exudados algodonosos.
Además, se debe intentar observar el aspecto de la mácula, que
es el punto de visión central, mientras que el resto de la
retina se encarga de la visión periférica. Las capas internas de
la retina en el área macular quedan separadas, lo que forma la
fóvea central, una pequeña depresión central que es el punto
donde la visión y la discriminación del color son más agudas.
El examen de la papila o disco óptico (el punto de salida del
nervio óptico en la retina) es de interés clínico. Es preciso
examinar la coloración, los bordes y su elevación o depresión.
Tiene valor saber si existe dilatación venosa y la presencia o
no de pulso venoso, así como la existencia de edema de papila o
atrofia óptica. Puesto que en la papila no existen conos ni
bastones, es un punto ciego en cada ojo (llamado mancha ciega en
el estudio de los campos visuales por perimetría).
Agudeza visual
Se examina cada ojo por separado. Para analizar la agudeza
visual de forma grosera, se solicita al paciente que lea letras
de distintos tamaños (por ejemplo, con un periódico). Si se
observa alguna alteración, se debe utilizar una carta de Snellen
para analizar la visión lejana y tratar de precisar la
intensidad del defecto visual. La prueba de conteo de dedos se
utiliza en aquellos sujetos con visión subnormal, y la de la
visión cercana con cartas estándar para leer.
Campos visuales
El examen del campo visual se puede llevar a cabo, bien por
confrontación, bien mediante perimetría.
1. Por confrontación. El médico se coloca frente al paciente a
la distancia de un metro y se mueven los dedos de cada mano,
alternativamente, solicitando al paciente que indique cuándo y
de qué lado ve moverse dichos dedos. La valoración se hará por
comparación por lo observado por el propio examinador.
2. Por perimetría. Para trazar los campos en el perímetro, se
mueven lentamente pequeños objetos blancos.
I. PAR CRANEAL VI: “NERVIO ABDUCTOR O MOTOR OCULAR EXTERNO”
Nervio motor ocular común (III par craneal), nervio Troclear o
patético (IV par craneal) y nervio motor ocular externo (VI par
craneal) Se comentan en conjunto, ya que todos ellos inervan
músculos que intervienen en el movimiento ocular.
a) CLASIFICACIÓN: motor
b) ORIGEN REAL: núcleo motor somático (en el puente)
c) ORIGEN APARENTE: surco protuberancial inferior
d) AGUJERO DE ENTRADA O SALIDA: fisura orbitaria
superior
e) TERRITORIO DE INERVACIÓN: recto lateral (músculo)
Anatomía
El III par, o nervio motor ocular común, procede de un núcleo
par localizado en el mesencéfalo, por delante del acueducto de
Silvio; sale del tronco cerebral pasando entre la arteria
cerebelosa superior y la arteria cerebral posterior, atraviesa
el espacio subaracnoideo y se sitúa en la pared lateral del seno
cavernoso, alcanzando la órbita correspondiente en donde inerva
los músculos recto interno (adducción), recto inferior
(depresión), recto superior y oblicuo inferior (elevación) y el
elevador del párpado, mientras que a través de las fibras
parasimpáticas inerva el músculo constrictor de la pupila
(miosis).
El IV par o nervio patético se origina en un núcleo pareado
situado en el mesencéfalo, transcurre por el lado del pedúnculo
cerebral y sigue un trayecto largo por debajo de la tienda del
cerebelo, perfora la duramadre y entra en el seno cavernoso
hasta alcanzar el músculo oblicuo superior (rota y deprime en
adducción).
El VI par o nervio motor ocular externo procede de un grupo de
neuronas situadas a nivel medial en la parte baja de la
protuberancia. Este núcleo contiene neuronas que se proyectan a
través del fascículo longitudinal medial (FLM) hasta las
neuronas motoras del músculo recto interno contralateral (mirada
conjugada horizontal) y fibras, que tras pasar a través del seno
cavernoso, penetran en la órbita para inervar el músculo recto
externo (abducción del ojo).
Exploración
Estos 3 nervios se exploran al mismo tiempo, porque en su
conjunto se encargan de la motilidad extrínseca e intrínseca del
ojo.
– Observe si la apertura de ambos ojos es simétrica.
– Observe si hay estrabismo (desviación del globo ocular) o
desviación lateral de la cabeza.
– Motilidad ocular extrínseca (MOE). Solicite al paciente que
mantenga la cabeza de frente y sin moverla, y pídale que sigua
el dedo del explorador a un lado, a otro, hacia arriba y abajo
(la dirección del dedo formará una H).
Explore la convergencia de la mirada dirigiendo su dedo hacia el
puente nasal del paciente y solicitándole que lo siga. Observe
si la motilidad es normal en cada globo ocular y en los 2 a la
vez (mirada conjugada horizontal, vertical y convergencia).
– Motilidad ocular intrínseca. Explore las pupilas en reposo
anotando su forma y tamaño. Explore el reflejo fotomotor en un
ambiente de luz tenue mediante una linterna potente de foco
fino, ilumine cada pupila por separado y observe si se contrae
ella (reflejo fotomotor) y la otra (reflejo consensual).
Interpretación
La presencia de asimetría en la apertura de los párpados se
denomina ptosis, que supone la afectación del III par. A ella
pueden sumarse otros signos de afectación del III par como
midriasis pupilar y estrabismo divergente (por la acción del
recto externo). La disminución o ausencia del movimiento
asociado a algún músculo extraocular implica la disfunción del
nervio correspondiente (si bien debe tenerse en cuenta que en
condiciones clínicas concretas puede ser el músculo en exclusiva
el que esté afectado). En los casos de paresia del IV par puede
observarse desviación lateral de la cabeza para evitar la visión
doble (diplopía). Las anomalías de los reflejos pupilares puede
deberse a lesión del brazo aferente del reflejo (II par), del
eferente (III par) o de su centro integrador en el mesencéfalo.
Las alteraciones en la mirada conjugada —si la motilidad de cada
uno de los músculos inervados por los pares III, IV y VI es
normal—, se debe a alteración en sus conexiones en el tronco
cerebral.
Patología
Los hallazgos patológicos incluyen: estrabismo, diplopía,
ptosis, oftalmoplejía, nistagmus y alteraciones pupilares.
Estrabismo (bizquera) Es la desviación de uno o ambos ojos. En
el estrabismo interno, los ejes visuales se cruzan entre sí; en
el externo, los ejes visuales divergen el uno del otro. Cuando
ocurre en la edad adulta se suele acompañar de diplopía.
Diplopía (visión doble)
Es un fenómeno subjetivo que se presenta cuando el paciente está
mirando con ambos ojos. Es causada por un defecto en la
alineación de los ejes visuales producido por la afectación de
un músculo ocular, de la placa motora, de los nervios III, IV y
VI o de sus núcleos o conexiones.
Ptosis (parpado caído)
Ocurre por debilidad o parálisis del músculo elevador del
parpado superior a consecuencia de una afectación del músculo,
placa motora (miastenia gravis), III nervio craneal o afectación
del simpático (síndrome de Horner).
Oftalmoplejía
Es la existencia de una parálisis de alguno de los músculos
extraoculares. La oftalmoplejía internuclear afecta a la mirada
conjugada hacia un lado debido a una lesión del fascículo
longitudinal medial. así, por ejemplo, una lesión del fascículo
longitudinal medial izquierdo producirá una oftalmoplejía
internuclear Izquierda que consiste en que, cuando el sujeto
intenta mirar hacia la derecha, el músculo recto interno del ojo
izquierdo no puede realizar la aducción (desviación del ojo
izquierdo hacia adentro), mientras que el recto externo del ojo
derecho presenta nistagmus. Es un signo muy frecuente en
pacientes que presentan una esclerosis múltiple o una lesión
isquémica en el tronco cerebral.
Nistagmus
Es un movimiento involuntario de los ojos en distintas
direcciones de la mirada (arriba y abajo o a derecha o
izquierda). El nistagmus tiene dos componentes: uno rápido y
otro lento, en sentido contrario. Por acuerdo, el nistagmus se
describe de acuerdo al sentido de su componente rápido. La
existencia de nistagmus puede reflejar bien la presencia de una
lesión vestibular periférica, en cuyo caso es horizontal
rotatorio y siempre va acompañada de vértigo, bien una lesión
central (del tronco cerebral o cerebelo) en cuyo caso suele ser
vertical y casi nunca se acompaña de vértigo. El nistagmus
también puede ser debido a una intoxicación farmacológica (por
ejemplo, con fenitoína presencia). El nistagmus también puede
ser de origen congénito, en cuyo caso suele ser de tipo pendular
(tiene la misma velocidad en los dos sentidos). También aparece
nistagmus cuando existe un problema de tipo ocular. Por último,
existe un nistagmus “fisiológico”, que es el llamado nisgmus
optocinético, que ocurre cuando hay un movimiento continuo en el
campo visual como cuando se viaja en tren.
Alteraciones pupilares
Las dos alteraciones pupilares más frecuentes son: la miosis, en
la que la pupila es de un diámetro menor de lo normal, se debe,
habitualmente, a la existencia de ciertas intoxicaciones y la
lesión del simpático cervical. La midriasis aparece como
consecuencia de ciertas intoxicaciones (glutetimida) y por
lesiones del nervio III craneal. En la tabla 1 se resumen las
principales anomalías pupilares según la localización de la
lesión en el nervio óptico o en el par craneal III.
IV. CONCLUSIONES
Es frecuente que al nervio olfatorio no se le preste
la suficiente atención al momento de la exploración
física.
Se debe evaluar el nervio olfatorio en todo paciente
que se sospeche un trastorno del lóbulo frontal.
Es frecuente que los pacientes con alteraciones de la
olfación presenten trastornos del gusto. Las causas
más frecuentes de alteraciones del I par son los
traumatismos craneales o secundarios a intervenciones
quirúrgicas. En algunos tipos de epilepsia se producen
alteraciones olfatorias paroxísticas (crisis
uncinadas) que son verdaderas alucinaciones
olfatorias.
La anosmia transitoria es común y es consecuencia de
resfriados comunes o sinusitis.
Las neuronas que intervienen en la olfación se
encuentran ubicadas en los cornetes superiores, en el
piso de la cavidad nasal y el septum nasal superior.
Interviene en la percepción de los olores.
Se encuentra menos desarrollado en el hombre en
comparación con los animales.
Los trastornos cuantitativos se clasifican en
transmisivos (cualquier alteración que impida la
llegada de odorivectores al epitelio olfativo),
perceptivos (alteraciones a nivel del epitelio, vía
nerviosa o nivel central), mixtos (mezcla de los
anteriores) e idiopáticos.
ANEXOS
V. BIBLIOGRAFÍA
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