La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de...

20
El equipo de investigación al que pertenecen los autores de este trabajo está compuesto por investigadores especializados en diferentes ámbitos de las ciencias sociales (antropología social y cultural, derecho, turismo, investigación social aplicada al medio ambiente, investigación cuantitativa, etc.). Fundamentalmente desarrolla proyectos de investigación aplicada, analítica y sobre todo de campo relacionadas con el turismo, el medio ambiente, los procesos de patrimonialización y sus efectos sobre las poblaciones locales. Entre los proyectos en los que han estado vinculados se encuentran “Estudio para el Plan de ordenación de los Recursos Naturales de la propuesta de Parque Nacional de Fuerteventura en su primera fase” (2008-2010), “Proyecto estructurante de investigación e innovación en turismo” (2009-2010), El análisis de gobernabilidad aplicado al proceso de creación e áreas marinas protegidas” (2009-2011) y “Red Iberoamericana para el uso turístico responsable de los recursos naturales” (RITA). Esta tarea de investigación se combina con otras de transferencia de conocimiento tales como la coordinación y participación en el proyecto de teleformación/sensibilidación “expertos en Tenerife” o el asesoramiento a diversas instituciones, foros de participación y empresas.

Transcript of La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de...

El equipo de investigación al que pertenecen los autores de este trabajo está compuesto por investigadores especializados en diferentes ámbitos de las ciencias sociales (antropología social y cultural, derecho, turismo, investigación social aplicada al medio ambiente, investigación cuantitativa, etc.). Fundamentalmente desarrolla proyectos de investigación aplicada, analítica y sobre todo de campo relacionadas con el turismo, el medio ambiente, los procesos de patrimonialización y sus efectos sobre las poblaciones locales. Entre los proyectos en los que han estado vinculados se encuentran “Estudio para el Plan de ordenación de los Recursos Naturales de la propuesta de Parque Nacional de Fuerteventura en su primera fase” (2008-2010), “Proyecto estructurante de investigación e innovación en turismo” (2009-2010), “El análisis de gobernabilidad aplicado al proceso de creación e áreas marinas protegidas” (2009-2011) y “Red Iberoamericana para el uso turístico responsable de los recursos naturales” (RITA). Esta tarea de investigación se combina con otras de transferencia de conocimiento tales como la coordinación y participación en el proyecto de teleformación/sensibilidación “expertos en Tenerife” o el asesoramiento a diversas instituciones, foros de participación y empresas.

Agustín Santana Talavera1

Alberto Jonay Rodríguez Darias1

Pablo Díaz Rodríguez2

1 Instituto Universitario de Ciencias Políticas y Sociales. Universidad de La Laguna2 Departamento de Ecología. Universidad Complutense de Madrid

La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de Fuerteventura

Palabras clave:Áreas naturales protegidas, conservación, percepcióndel paisaje

La percepción del paisaje en la declaraciónde un parque nacional en las zonas

áridas de Fuerteventura

1. MARCO TEÓRICO

El paisaje es una construcción sociocultural, generalmente considerada en positivo y de carácter estético (Bertrand y Bertrand, 2002), del territorio, conformado por una selección no neutral y flexible de elementos que en él se encuentren insertos. Mirado a través de las lentes que la cultura, establece una relación recíproca con los individuos (aporte de normas, valores, pautas de conducta, planificación y gestión de la vida cotidiana y su futuro), lo que podría implicar que sobre un territorio encontraremos tantos paisajes como miradas o perspectivas (Abad y García, 2006). Las más obvias serán aquellas divisiones entre locales, residentes no locales y foráneos (visitantes, turistas y trabajadores temporeros), pero puede indagarse y concretarse hasta llegar a los subgrupos culturales que continuamente están en relación y conflicto dentro de cualquier sociedad. La influencia de estas visiones, más o menos compartidas o enfrentadas, sobre un territorio dado, sobre un paisaje dado, incidirá sobre las evaluaciones sociales de impacto ambiental, sobre los usos que de él se hagan y sobre la tolerancia sociocultural al deterioro o tendencia a la conservación de espacios y ecosistemas incluidos.

Así, las transformaciones de los sistemas y procesos de uso y explotación del territorio conllevan, de manera general, una modificación importante de los paisajes. Ello no sólo por la incidencia de los medios y formas de producción sobre el mismo (alteraciones físicas o medioambientales) sino también por las acontecidas en procesos socioculturales vinculados al tiempo libre y las relaciones entre los individuos (alteraciones simbólicas o de percepción). La demanda de espacios de características concretas para su disfrute en el desarrollo de actividades deportivas, culturales, educativas, de vínculos sociales o religiosos, entre otros, pueden variar las significaciones sobre el territorio, su conformación, los bienes naturales o culturales en aquél inscritos, y con ello la percepción del mismo como paisaje. De esta manera, se postula que la percepción del paisaje estará condicionada por los usos y las actividades presentes y expectativas futuras (Bell, 2001) que los individuos proyecten para si mismos y para los miembros

76

Agustín Santana Talavera, Alberto Jonay Rodríguez Darias & Pablo Díaz Rodríguez

afines de su grupo sobre un territorio. Ello justificaría las evidentes diferencias entre turistas demandantes de paisajes estéticamente incluidos en una imagen estereotipada de un territorio concreto (elementos icónicos del territorio), de aquella que podrían tener especuladores inmobiliarios, instituciones gubernamentales, pobladores locales o grupos pro conservación de la naturaleza. En cualquier caso habrá que determinar hasta que punto esa posición subjetiva contribuye a una valoración más positiva o negativa frente a la conservación (Beza, 2010), o si se dan tendencias más o menos homogeneizantes.

Si el territorio es el espacio visto como recurso, el paisaje se mueve en un gradiente que va desde el bien cultural al meta-recurso de aquel, lo cual lo vuelve especialmente vulnerable a las alteraciones y orienta a las instituciones hacia su protección bajo innumerables figuras legales (desde el Parque Rural hasta el Parque Nacional), con incidencias especiales en la limitación de usos, la proyección y promoción de otros (especialmente lúdicos, deportivos, educativos y, compendiando los anteriores, turísticos), la construcción de ‘jardines’ y ‘patios’ en la naturaleza, la creación de burbujas culturales, etc. con intereses declarados en mayor o menor medida (Conrad y otros, 2011). En resumen, la paralización pretendida del tiempo sobre unos bienes determinados, bien obviando la flexibilidad, la adaptación y el dinamismo de los humanos, su cultura y su entorno; bien abriendo vías de desarrollo económico a través de formas específicas de explotación como el turismo y la educación medio ambiental. Organismos supranacionales como el Consejo de Europa emprendieron esta línea en el año 2000 ratificando e impulsando la Convención Europea del Paisaje (CEP), por la que se comprometen al reconocimiento, protección y ordenación de los mismos, su vinculación a las poblaciones locales y su participación como agentes principales. Esto es, no sólo se registra la importancia de estos agentes, sino que teóricamente se hace prevaler su interpretación (justificada por el uso sociocultural y socioeconómico histórico continuado) y configuración sobre el resto de subjetividades construidas sobre esos bienes. La responsabilidad hacia un paisaje, incluiría así el respeto por las poblaciones y culturas locales, tanto como por sus valores estéticos, ecológicos e, incluyendo los anteriores, económico-turísticos.

Tomando en consideración la CEP, el presente trabajo, enmarcado en el Estudio para el Plan de ordenación de los Recursos Naturales de la propuesta de Parque Nacional de Fuerteventura en su primera fase1 (noviembre 2008 a noviembre 2010), pretende dilucidar cuáles son las variables que condicionan la actitud más o menos favorable a la declaración del citado Parque Nacional. Se entiende que la percepción del territorio como bien paisajístico a conservar o como recurso de base para llevar a cabo determinadas actividades, además de otras características socioeconómicas del individuo en el contexto de su grupo y momento en el tiempo, condicionarán su posición al respecto tal y como se deriva de anteriores estudios llevados a cabo (Díaz Pineda, 2010; Díaz Rodríguez y otros, 2010a; Díaz Rodríguez y otros 2010b; Rodríguez Darias y otros, 2010; Santana Talavera y otros 2010a).

1 El Estudio está coordinado por F. Díaz Pineda (Dirección técnica. Departamento interuniversi-tario de Ecología, Universidades Complutense, Autónoma y Alcalá (Madrid)) y A. Gallardo, (Direc-ción del Cabildo de Fuerteventura). Las Secciones de que consta están dirigidas por: S. Hernández (Diagnóstico); J.P. de Nicolás (Regionalización ecológica); M.L. Tejedor (Edafología); W. Wildpret (Biogeografía); R.J. Haroun Tabraue (Medio marino); A. Santana (Antropología social); M.F. Schmitz (Socioeconomía y Paisaje); J.V. de Lucio (Directrices gestoras y uso público) y C. Bautista (Legis-lación y normativas).

77

La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de Fuerteventura

OBS

ERVA

ND

O E

XPE

RIEN

CIAS

EN G

ESTI

ÓN

DEL

PAI

SAJE

2. METODOLOGÍA

2.1 Unidad de estudio

La isla canaria de Fuerteventura, con 1.731 km2, se caracteriza por su carácter desértico, su aspecto relativamente abierto y ‘vacío’, y sus paisajes volcánicos erosionados. La estructura de la costa es muy variada, destacando sus amplios acantilados en barlovento y extensas playas en sotavento, que junto a la estable temperatura que proporciona su clima subtropical oceánico son los aspectos más valorados por los turistas tradicionales que la visitan (Criado, 1992; Paredes y Rodríguez, 2002; Rodríguez Delgado, 2005; Díaz Rodríguez y otros, 2010a).

Históricamente, sus actividades productivas más relevantes han sido la ganadería caprina extensiva, la pesca artesanal de bajura y el cultivo de leguminosas y hortalizas. Reseñas históricas señalan la importancia agraria de esta isla, que llegó a denominarse “el granero de Canarias” por su volumen de exportación, pero hoy sufre un agotamiento del suelo y el acuífero, con un patente abandono, que en las últimas décadas ha ido paralelo al desarrollo del turismo convencional climático (‘sol y playa’). Estas actividades han dejado una huella patente en la cultura, idiosincrasia y territorio insular. La ganadería sigue manteniéndose, aunque actualmente predomina la producción estabulada. Las actividades rurales ocupan en la actualidad apenas a un 2,3% de los habitantes de Fuerteventura, mientras que más del 86% de los ocupados trabajaban en el sector servicios, a los que habría que añadir el gran número de ocupados en el sector construcción (otro 7,5%; ISTAC 2010). Este fenómeno ha sido fundamentalmente influido por el abandono (y un consecuente traslado de estatus, capital y personal) de la estructura productiva histórica de la isla por el auge de la actividad turística y por la fuerte atracción de mano de obra orientada precisamente a este sector. A su vez, esta circunstancia ha tenido importantes repercusiones en la estructura social de la isla (Ruiz-Labourdette y otros, 2010).

Foto 1. Llanos Antigua. Punto: Lat 28.425, Long -13.979Autor: Agustín Santana (2010)

78

Agustín Santana Talavera, Alberto Jonay Rodríguez Darias & Pablo Díaz Rodríguez

La isla, con 103.492 habitantes (INE, 2010) se organiza administrativamente en seis municipios, dentro de cuyos límites existen unos 80 núcleos de población dispersos, a pesar de lo cual la isla mantiene su mencionado carácter de territorio relativamente ‘vacío’. La evolución histórica reciente revela que el intenso desarrollo turístico que ha tenido lugar en Fuerteventura desde la construcción de sus primeros hoteles en la costa de sotavento (El Matorral, Morro Jable y Corralejo) ha provocado importantes cambios a nivel socioeconómico y sociocultural en toda la isla (Díaz Pineda, 2010).

Los enclaves turísticos donde desde la década de los 60 se comenzó a fomentar el turismo de sol y playa que actualmente caracteriza a la isla, hoy siguen constituyendo las principales áreas turísticas de Fuerteventura, aunque su dinámica se haya extendido por toda la costa de sotavento. Sin embargo, si bien las características de estas zonas facilitaron la proyección de una imagen turística fácilmente adaptable a los estereotipos propios del imaginario colectivo sobre destinos costeros ideales (Rodríguez Darias y otros, 2010), el interior y barlovento de la isla ha sido históricamente considerada sólo como complemento, minimizándose con ello los procesos inflacionarios y constructivos sobre el territorio hasta hace menos de una década.

En la actualidad pueden diferenciarse claramente los efectos que el ritmo de crecimiento de influencia turística ha generado en las entidades de población de la isla (Ruiz-Labourdette y otros, 2010; Díaz Rodríguez y otros, 2010a, 2010b). El contraste entre los grandes espacios ociosos destinados al turismo masivo de sol y playa de la costa de sotavento y los núcleos históricamente ‘abandonados’ de interior y barlovento es especialmente llamativo.

Así pues, el turismo climático basado en el sol y la playa ha constituido desde sus inicios la principal fuente de ingresos de Fuerteventura. Sin embargo, investigaciones recientes (Santana y otros, 2010b) señalan que siguiendo la teoría del ciclo de vida de los destinos turísticos revisada por Agarwal (2006) Fuerteventura se encuentra en los últimos años en un momento histórico en el que comienzan a desvelarse las dificultades típicas de un destino en estancamiento, y por tanto con necesidades de renovación. Estos datos se ven respaldados por estudios que han analizado la imagen proyectada por este destino (Rodríguez Darias y otros, 2010), según los cuales en la isla parece existir actualmente una tendencia de reconversión y diferenciación como destino por parte de las administraciones locales, tratando de encaminarla en la combinación del turismo climático con complementos de cultura y naturaleza.

2.2. Hipótesis

El presupuesto de partida que marca el desarrollo del trabajo considera que la valoración personal sobre la idoneidad de la patrimonialización del territorio se encuentra condicionada por las condiciones de vida cotidiana de cada individuo, de manera que su lugar de residencia, su caracterización socioeconómica o las actividades de ocio realizadas favorecerán o no su relación con la protección del territorio. Tomando el caso de la posible declaración de un Parque Nacional en la isla de Fuerteventura como unidad de estudio, la corroboración de la esta hipótesis principal precisa de la confirmación de las siguientes subhipótesis:

79

La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de Fuerteventura

OBS

ERVA

ND

O E

XPE

RIEN

CIAS

EN G

ESTI

ÓN

DEL

PAI

SAJE

A. La valoración de la declaración del Parque Nacional está condicionada por fac-tores sociodemográficos, culturales y económicos como el sexo, procedencia (local o residente), nivel de estudios, sueldo y ocupación.

B. La cercanía de áreas protegidas a la residencia condiciona la valoración de la declaración del Parque Nacional.

C. El hecho de realizar de manera cotidiana ciertas actividades en el territorio condiciona la valoración de la declaración del Parque Nacional.

2.3. Diseño de la investigación

Este trabajo forma parte de los resultados del equipo de antropología social del referido estudio, cuya realización se ha basado en el trabajo de campo y sus técnicas subsidiarias (fundamentalmente observación participante, conversaciones informales, entrevistas en profundidad y análisis de discurso) apoyándose también en encuestas, tratamiento estadístico, registros, inventarios y técnicas de georreferenciación.

Específicamente, para la elaboración de este trabajo se han cruzado resultados cualitativos obtenidos a través de entrevistas y observación participante con el análisis multivariante (con un error estadístico de 2,6% y un nivel de confianza del 95%) de los resultados de una encuesta realizada a un total de 1.319 locales y residentes de la isla de Fuerteventura en cuatro oleadas, entre junio de 2009 y abril de 2010 (tabla 1). Para cumplir los objetivos del trabajo se realizan análisis de correspondencias, componentes principales y correlaciones entre variables.

Tabla 1. Ficha técnica de las cuatro oleadas de la encuestaen Fuerteventura 2009-10.

Fuente: Elaboración propia.

LOCAL RESIDENTE

Muestra inicial por oleada 250

Nº de entrevistas validas (por oleada) 98 / 87 / 83 / 246 164 / 177 / 185 / 279

Fechas (por oleada)

29 junio - 17 julio 200924 septiembre - 15 octubre 2009

11 enero - 28 enero 201029 marzo – 12 abril 2010

Sistema de recogida de datos CATI

Lugares Distribución proporcional por municipio

Método de selecciónde la muestra

Muestreo aleatorio estratificado (municipios 1ª-2ª-3ª)

Muestreo aleatorio estratificado (municipios y núcleos 4ª)

80

Agustín Santana Talavera, Alberto Jonay Rodríguez Darias & Pablo Díaz Rodríguez

3. RESULTADOS

A partir del problema de estudio general que marca el desarrollo de este trabajo, en primer lugar se analizó la asociación entre variables de tipo sociodemográfico y la actitud más o menos favorable a la posibilidad de declarar un Parque Nacional en Fuerteventura. Concretamente se tomarán para ello las variables sexo, nivel de estudios, salario, tipo de ocupación, lugar de residencia en relación a áreas protegidas, lugar de nacimiento y actividades de ocio realizadas.

Dado que tomamos como eje las actividades en el territorio y debido a las grandes diferencias en la distribución de tareas en función del sexo y edad observadas en determinadas poblaciones de la isla, se interpretó que éstas podrían ser variables asociadas a la mayor o menor valoración de la declaración del referido Parque Nacional. Sin embargo, a partir del análisis de los resultados de la encuesta, en el caso de la edad no se ha reflejado asociación significativa mientras en el caso del sexo, ésta presenta un coeficiente de contingencia de 0,129 con un grado de confianza mayor al 95%, habiéndose considerado insuficiente para tomarlo en cuenta en el ámbito de este trabajo (gráfico 1). De manera que no puede afirmarse asociación significativa entre el sexo o la edad y la valoración de la declaración de una Parque Nacional en la isla de Fuerteventura.

Gráfico 1. Valoración de la declaración de un Parque Nacional enFuerteventura en función del sexo

Fuente: elaboración propia a partir de explotación de la encuesta.

De igual forma, si bien los estudios de sociología ambiental desarrollados a partir de la década de los 70 del siglo XX suelen asumir que el nivel de estudios está relacionado con el grado de sensibilización ambiental y la postura ante las estrategias de protección y conservación del territorio (entre la que se inserta la declaración de parques nacionales) (Cerrillo Vidal, 2010), en este caso, el grado de asociación entre el nivel de estudios y la valoración de la declaración de un Parque Nacional en la isla no es lo suficientemente alto como para tenerla en cuenta (con un coeficiente de contingencia de 0,121 y un grado de confianza mayor del 95%) (gráfico 2).

81

La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de Fuerteventura

OBS

ERVA

ND

O E

XPE

RIEN

CIAS

EN G

ESTI

ÓN

DEL

PAI

SAJE

Gráfico 2. Valoración de la declaración de un Parque Nacional enFuerteventura en función del nivel de estudios

Fuente: elaboración propia a partir de explotación de la encuesta.

Todo parecía indicar, partiendo de estudios realizados fuera del Archipiélago, que debíamos considerar el nivel de vida medio, medido en función del salario, como otra variante que podía reforzar la tendencia a favor, o su contrario, respecto a la conservación a través de la figura Parque Nacional. Dado que la declaración de áreas protegidas supone la limitación de determinados aprovechamientos del territorio, podría argumentarse que los individuos con mayor poder adquisitivo se mostrarían más favorables a la declaración, variando sus actitudes o desarrollando la actividad de ocio en otras áreas geográficas. En cambio, los resultados obtenidos (gráfico 3) en la explotación de la encuesta muestran que no existe asociación significativa entre ambas variables, de forma que la cuantía del sueldo mensual no condiciona la valoración de la declaración del Parque Nacional referido. Y tampoco arrojó resulta-dos estadísticamente significativos la asociación dada por el tipo de ocupación de la población encuestada (gráfico 4).

Gráfico 3. Valoración de la declaración de un Parque Nacional enFuerteventura en función del salario

Fuente: elaboración propia a partir de explotación de la encuesta.

82

Agustín Santana Talavera, Alberto Jonay Rodríguez Darias & Pablo Díaz Rodríguez

Gráfico 4. Valoración de la declaración de un Parque Nacional enFuerteventura en función del tipo de ocupación

Fuente: elaboración propia a partir de explotación de la encuesta.

El conjunto de variables sociodemográficas básicas (edad, sexo, nivel de estudios, salario y ocupación) homogeneizaban a la población respecto a la actitud más o menos favorable ante la declaración del Parque Nacional. Estos resultados no se veían confirmados en el trabajo de campo, en tanto que los informantes (de diferente sexo, ocupación y nivel económico) si mostraban actitudes diferenciales e incluso algunos situados en extremos opuestos. Esta discrepancia pareció desvanecerse al contrastar las variables que categorizaban a los individuos según su lugar de nacimiento (simplificado en la división del conjunto en los grupos: local, para los nacidos en Fuerteventura, y residente, para los no nacidos en Fuerteventura).

Así, los resultados muestran que los residentes tienden a valorar más positivamente que los locales la posibilidad de la citada patrimonialización (gráfico 5), si bien se trata de una asociación débil (con un coeficiente de contingencia de 0,234 y un grado de confianza mayor del 95%).

Gráfico 5. Valoración de la declaración de un Parque Nacional enFuerteventura en función de tratarse de locales o residentes

Fuente: elaboración propia a partir de explotación de la encuesta.

83

La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de Fuerteventura

OBS

ERVA

ND

O E

XPE

RIEN

CIAS

EN G

ESTI

ÓN

DEL

PAI

SAJE

Tendencia que resulta coherente con los datos obtenidos mediante la investigación de campo, en la que se ha detectado que, además de las posibilidades laborales, es precisamente la percepción del territorio como un paisaje altamente valorado lo que constituye una de las principales motivaciones para establecerse en Fuerteventura.

Dentro del grupo de residentes se ha contrastado que existe un perfil de visitante, principalmente extranjero, que conoció la isla haciendo turismo y, seducido los paisajes y formas de vida, decidió volver a ella como residente. Este grupo de individuos se muestra especialmente favorable a la conservación del paisaje como elemento escénico, lo que facilita que se muestren más favorables a las estrategias de protección territorial.

Entonces los alemanes que viven, o los extranjeros queviven aquí, quieren la isla porque es como es.

Entonces también tienen interés por conservar las cosas como son yhacer cosas buenas para la isla en el aspecto de medioambiente

(Vecina de Betancuria de procedencia belga, 2008)

De igual forma, la existencia de un conjunto importante de áreas protegidas (que se corresponden con el 26,3% de su superficie) declaradas actualmente en Fuerteventura, a las que habría que sumar su consideración general de la isla como Reserva de la Biosfera, determina la perspectiva de la población respecto a los procesos de patrimonialización del territorio, de manera que pueden encontrarse diferencias en función del grado de cotidianeidad de la relación del individuo con estas áreas.

A partir de los estudios de campo realizados, se ha observado que las poblaciones residentes en el interior de las áreas protegidas muestran una clara tendencia a valorar más negativamente los procesos de declaración ambiental que el resto de ciudadanos. Reproduciéndose con frecuencia discursos que relacionan la declaración de áreas protegidas con la imposición de límites a su desarrollo y la trivialización de sus discursos patrimoniales, lo que en última instancia suponen la legitimación de unos grupos frente a otros en la gestión del territorio.

(…) lo que querían era que nos fuéramos y lo que quieren es que nos vayamos… no nos dejan construir, así que… qué nos están diciendo… quieren esto para la foto

(Vecino del Parque Rural de Betancuria, 2008).

(¿Qué opina usted del PN?) Que no está bien eso. Para mí no está bien.Porque ¿qué sacamos los majoreros que hemos vivido siempre de estos animales

[las cabras] de que pongan un Parque? ¿Y para dónde van los animales? Eso tienen que quitarlo.Esas montañas no valen para Parque. ¿Para tenerlas de vistas?

(Vecino de Tefía, 2009)

Esta tendencia observada en el trabajo de campo se ha reflejado en los resultados de la explotación de la encuesta, mostrándose asociación entre residir o no en el interior de un área protegida y la valoración respecto a la posible declaración de un Parque Nacional (con un coeficiente de contingencia de 0,359 y un grado de confianza mayor del 95%) (gráfico 6).

85

La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de Fuerteventura

OBS

ERVA

ND

O E

XPE

RIEN

CIAS

EN G

ESTI

ÓN

DEL

PAI

SAJE

Gráfico 6. Valoración de la declaración de un Parque Nacionalen Fuerteventura en función de residir o no en el interior

de un área protegida

Fuente: elaboración propia a partir de explotación de la encuesta.

El análisis contrastado hace pensar que la baja valoración de los procesos de declaración de áreas protegidas por la población residente en su interior en el caso de la isla de Fuerteventura puede estar condicionada por la ausencia de gestión específica en el Parque Rural de Betancuria, que declarada por primera vez en el año 1987 (por medio de la Ley 12/1987, de 19 de junio, de declaración de Espacios Naturales de Canarias) no contó con normativa específica hasta la aprobación de su Plan Rector de Uso y Gestión hasta 2009 (Resolución de 16 de abril, por la que se hace público el Acuerdo de la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias de 26 de marzo, relativo a Memoria Ambiental y aprobación definitiva del Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Rural de Betancuria). Ello se traduce en la materialización de un ejemplo claro de ‘parque de papel’ (Buckley, 2002) durante casi veintidós años2, circunstancia en la que todavía se encuentra, en tanto que no cuenta con dotación infraestructural o personal para la gestión específica, ni con un nuevo plan urbanístico aprobado.

Sin embargo, excluyendo los casos en los que los individuos residen en el interior de un área protegida, la distancia de la vivienda a estos espacios presenta un nivel tan bajo de correlación con la valoración de la posibilidad de la declaración referida que no se ha querido tomar en cuenta (el coeficiente de correlación de Spearman es de 0,063 con un grado de confianza mayor al 95%). De tal forma que si bien residir en el interior de un área protegida condiciona negativamente la valoración de la posible declaración de un Parque Nacional en Fuerteventura, la distancia relativa a estas áreas no está tan rela-cionada con esta postura.

Partiendo de la hipótesis principal planteada, las actividades realizadas en el territorio pueden también condicionar la postura respecto a su patrimonialización, principal-mente debido a que ésta conlleva potencialmente una gestión orientada a limitar algu-nos usos y beneficiar otros.

En este caso de estudio, teniendo en cuenta que la encuesta realizada reflejaba un total de 42 actividades posibles, se procedió a reducirlas variables mediante un análisis de componentes principales; dando como resultado 13 factores (que explican el 55,13% de la varianza con un KMO de 0,81).

2 Expresión utilizada para denominar a aquellas áreas protegidas sin dotación económica, infraes-tructural, personal y normativa para su gestión.

86

Agustín Santana Talavera, Alberto Jonay Rodríguez Darias & Pablo Díaz Rodríguez

En la tabla 2 se muestran las principales actividades que explican los diferentes factores con su correspondiente carga factorial. Esta agrupación de variables permite distinguir entre diferentes tipos de habitantes de la isla: a) aquellos que realizan principalmente actividades de observación del medio (factores 1, 4 y 5); b) los que preferentemente interaccionan más con el entorno y/o practican deportes en él (factores 6, 8, 9, 10, 11 y 12); c) otros que realizan principalmente actividades de carácter más cultural (factores 2 y 13); y d) aquellos que prefieren dedicar su tiempo a actividades más relacionadas con la fiesta y otras formas de ocio (factores 3 y 7).

A partir de estos resultados, se procedió a determinar la existencia de correlaciones entre la identificación de los individuos entrevistados con los 13 grupos obtenidos (a través de su carga factorial) y la valoración respecto a la posible declaración del Parque Nacional. Obteniendo correlación estadísticamente significativa en los siguientes casos:

• El factor 1, principalmente relacionado con la observación de la naturaleza, cor-relaciona positivamente con la valoración respecto a la declaración del Parque Nacional (con un coeficiente de correlación de Spearman de 0,28 con un grado de confianza mayor del 95%),

• El factor 5, relacionado fundamentalmente con la realización de camping y picnic, correlaciona de manera positiva con la valoración de la posible patrimonialización referida (con un coeficiente de correlación de Spearman de 0,33 con un grado de confianza mayor de un 95%),

• El factor 8, relacionada de manera esencial con la práctica de bicicleta de montaña y deportes acuáticos, también correlaciona positivamente con la declaración (con un coeficiente de correlación de Spearman de 0,28 con un grado de confianza mayor del 95%),

• El factor 13, que se define en base al disfrute de la gastronomía local, correlaciona con la declaración del Parque Nacional referido (con un coeficiente de correlación de Spearman de 0,36 con un grado de confianza mayor del 95%) y

• El factor 10, practicar pesca o caza, correlaciona de manera inversa con la citada declaración (con un coeficiente de correlación de Spearman de -0,36 con un grado de confianza mayor del 95%).

De esta manera, en sentido general, se argumenta que tienden a valorar más positi-vamente la declaración del Parque Nacional de Fuerteventura aquellos individuos que realizan (1) actividades relacionadas con la observación y contemplación del entorno, (2) determinados deportes al aire libre, (3) los que más refieren consumir gastronomía local y (4) los que no practican pesca y/o caza. Un análisis detallado de este último fac-tor definió a estos individuos como mayoritariamente hombres, de nivel de estudios, condición económica y residencia muy heterogénea. A partir del trabajo de campo se ha puesto de manifiesto que, si bien cuantitativamente no destacan en demasía, este grupo obtiene importantes apoyos de asociaciones de intereses similares de otras islas del Archipiélago y se posiciona de forma notoria en los distintos partidos políticos, mu-nicipios y medios de comunicación locales. Ello les permite ostentar un papel impor-tante en la construcción sociocultural del territorio como paisaje, determinar o limitar algunos de sus usos y condicionar decisiones institucionales sobre aquel (tabla 2).

87

La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de Fuerteventura

OBS

ERVA

ND

O E

XPE

RIEN

CIAS

EN G

ESTI

ÓN

DEL

PAI

SAJE

Tabla 2. Factores resultantes del análisis de componentes principales y sus principales variables sobre las actividades no productivas

desarrolladas en el territorio.

Fuente: elaboración propia a partir de explotación de la encuesta.

FACTORES

ACTIVIDADES 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13

Pesca recreativa de costa ,082 -,058 -,002 ,178 ,166 ,006 ,063 ,036 -,084 ,762 ,035 ,018 ,067Pesca recreativa desde barco ,054 ,039 -,039 ,303 ,055 ,064 ,009 ,043 -,010 ,683 ,132 ,085 ,087Submarinismo ,061 ,039 ,128 ,617 ,029 ,034 -,080 ,031 ,008 ,227 -,172 ,118 ,023Buceo -,004 ,050 ,026 ,723 ,015 ,010 ,043 ,031 ,024 -,007 ,082 ,030 ,066Caza -,023 ,064 ,147 -,198 -,051 -,032 ,070 -,031 ,185 ,514 -,070 ,083 -,123Picnic ,343 ,102 ,020 ,041 ,563 ,073 -,086 -,017 ,117 ,062 ,094 ,066 ,091Camping o roulotte ,051 ,063 ,130 ,080 ,612 -,022 ,166 ,025 ,049 ,126 -,055 ,194 ,013Contemplación de la naturaleza ,795 ,097 ,013 ,028 ,111 ,057 ,009 ,052 ,098 ,056 ,068 ,006 ,058Fotografía o vídeo naturaleza ,729 ,182 ,075 ,034 ,213 -,042 ,030 ,105 ,000 -,064 -,008 ,054 ,068Fotografía o vídeo en general ,672 ,188 ,106 ,070 ,326 -,052 ,032 ,064 -,034 -,091 -,014 ,030 ,019Participación en actividades rurales ,232 ,037 ,070 ,101 ,299 ,155 ,049 -,032 ,498 ,030 ,086 -,030 -,047Participar en deportes tradicionales ,049 ,117 ,034 -,041 ,364 -,050 ,154 ,222 ,128 ,249 ,253 -,235 -,389Deportes acuáticos ,054 ,300 ,081 ,424 ,117 -,003 -,124 ,428 ,121 ,091 -,054 ,015 -,087Senderismo -,007 ,185 -,066 ,038 ,119 ,033 ,208 ,232 ,459 -,063 ,082 ,025 ,188Rutas urbanas o culturales ,011 ,180 -,043 ,048 ,284 ,128 ,228 -,110 ,370 -,022 ,074 ,014 ,191Rutas marinas ,061 -,017 ,011 ,575 ,075 ,067 ,074 ,039 ,125 ,066 ,265 -,009Participar en fiestas tradicionales ,107 ,161 ,144 ,078 ,087 -,040 ,703 ,062 ,000 ,076 -,071 ,043 -,158Montañismo, alpinismo ,142 ,031 ,013 ,300 -,103 -,064 ,173 ,274 ,444 ,045 ,012 -,022 -,080Observación de fauna ,851 -,052 ,000 ,015 -,109 ,006 ,163 -,017 ,172 ,106 ,041 ,012 ,046Observación de vegetación ,855 -,041 -,004 ,021 -,097 ,035 ,155 -,035 ,190 ,090 ,046 ,003 ,026Observación de fiestas tradicionales ,136 ,139 ,037 -,025 ,004 ,001 ,706 -,010 ,090 ,063 ,041 ,010 ,179Recolección en la naturaleza ,232 ,024 ,021 ,013 -,075 -,106 -,094 ,018 ,512 ,045 -,121 ,108 ,014Mountainbike ,036 ,105 ,068 ,069 -,081 ,062 ,108 ,710 ,109 ,028 ,093 ,176 -,052Rutas ecuestres ,002 -,014 ,038 ,050 ,055 ,821 -,032 ,135 -,007 ,029 -,089 ,078 ,045Equitación ,006 ,065 -,013 ,016 -,045 ,828 -,012 ,062 ,009 ,019 ,026 ,010 ,020Parapente, Skateboard ,042 -,088 ,065 ,297 ,215 ,334 ,132 -,010 ,050 -,141 ,268 ,083 -,243Vuelo, ultraligeros ,073 -,082 -,127 ,115 ,190 -,093 ,065 ,060 -,030 -,094 ,443 ,454 ,065Rutas en vehículo 4x4 ,072 ,067 -,004 ,113 ,197 ,223 -,042 ,026 ,228 ,047 ,143 ,586 -,079Motocross, trial -,006 -,037 ,077 ,019 -,008 ,004 ,048 ,121 -,046 ,148 -,098 ,777 -,006Gastronomía local ,159 ,195 ,133 ,041 ,024 ,031 ,150 ,019 ,076 ,054 ,152 -,027 ,652Clubes nocturnos, bares ,071 ,101 ,810 ,034 ,039 ,029 ,086 ,067 ,012 ,068 ,026 -,004 ,112Discotecas ,032 ,045 ,840 ,104 ,104 ,007 ,047 ,059 -,039 ,017 ,064 ,038 -,003Casinos ,103 -,018 ,448 ,051 ,045 -,010 ,053 -,211 ,153 -,036 ,427 -,004 ,075Espectáculos, Conciertos ,016 ,696 ,304 ,070 ,088 ,038 ,161 ,076 ,010 ,057 ,025 ,040 ,044Museos, exposiciones ,122 ,799 ,031 ,045 ,049 -,021 ,053 -,007 ,065 -,035 ,015 -,028 ,008Ciclos culturales, conferencias ,082 ,740 -,082 ,013 ,006 ,027 ,119 -,005 ,107 ,026 ,084 -,019 ,125Compras artesanía ,194 ,344 ,009 -,060 ,191 ,041 ,325 ,026 ,109 ,007 -,026 -,014 ,330Playa ,018 ,023 ,107 ,051 ,284 -,053 ,269 ,290 -,266 -,026 -,114 -,045 ,246Naturismo, nudismo ,068 ,094 ,080 ,010 ,184 -,130 ,185 ,397 ,041 -,161 -,043 ,388Golf ,039 ,062 ,040 ,081 -,010 -,017 -,093 ,089 -,078 ,056 ,677 -,072 -,006Tenis, squash ,007 ,169 ,217 ,014 -,056 ,030 ,036 ,287 ,036 ,117 ,480 ,184 ,044

88

Agustín Santana Talavera, Alberto Jonay Rodríguez Darias & Pablo Díaz Rodríguez

4. DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN

Partiendo de la relevancia de la participación de los diversos actores implicados en las estrategias de gestión del paisaje, las ciencias sociales deben afrontar el reto de generar metodologías, teorías y modelos que ayuden a comprender los condicionantes que se esconden tras las diversas posturas sociales respecto a la protección, gestión y ordenación.

En relación con este objetivo general, y asumiendo que estos desarrollos dependerán del estudio de casos concretos, el trabajo que presentamos trata de determinar la incidencia de factores de tipo sociodemográfico, económico y las formas de interacción con el territorio con la manifestación de posturas más o menos favorables a una propuesta de protección específica: la declaración de un Parque Nacional en la isla de Fuerteventura.

A partir de los análisis realizados, se ha obtenido que las circunstancias de tipo so-ciodemográfico y económico no constituyen en sí mismas condicionantes respecto a la valoración más o menos favorable al proceso de patrimonialización planteado. Si bien determinados estudios han detectado una mayor tendencia a posturas propicias a las estrategias de conservación entre jóvenes urbanos y con alto nivel de estudios (Cerrillo Vidal, 2010), ninguna de estas variables se ha mostrado influyente en el análisis cuantitativo del caso que nos ocupa. Tampoco la ocupación o el nivel de ingresos han servido para explicar el establecimiento de posturas al respecto.

Por otro lado, el grado de implicación en el territorio, sí parece estar relacionado con la valoración de la declaración del Parque Nacional, de forma que la población nacida en la isla tiende a mostrar una postura más desfavorable a esta patrimonialización. De acuerdo con el trabajo de campo realizado, esta circunstancia podría explicarse de una parte en base a la alta valoración del paisaje por parte de un grupo importante de residentes, considerado más en sus aspectos estéticos que funcionales y dependientes de las necesidades de uso más o menos tradicionales. De otra, el paisaje-recurso, área en usufructo, condiciona la baja valoración de las estrategias de conservación del terri-torio por parte de las poblaciones locales.

El trabajo de campo mostró que los habitantes locales de la isla perciben los procesos de declaración y gestión de áreas protegidas como impuestos desde el exterior, mar-cando límites sin contraprestaciones. Sin lugar a dudas, esta percepción se encuentra relacionada con la estrategia de declaración de las áreas protegidas de la isla a través de las consecutivas leyes de espacios naturales protegidos de Canarias (leyes 12/1987, 12/1994 y el Decreto Legislativo 1/2000), desarrolladas de espaldas a la población lo-cal y materializadas sin la adecuada dotación económica, infraestructural y personal (Rodríguez Darias, 2007, 2009). Circunstancia que explica la especial oposición a la declaración de este Parque Nacional por parte de los habitantes que residen en el interior de un área protegida.

El análisis de las prácticas realizadas por los habitantes de la isla muestra ciertas pautas que permiten plantear una tipología de individuos basada en el tipo de actividades que realizan en el territorio. Determinando además que la pertenencia a algunas de estas tipologías, esto es, el desarrollo de unas determinadas actividades, condiciona la postura más o menos favorable respecto a la declaración patrimonial propuesta. Así,

89

La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de Fuerteventura

OBS

ERVA

ND

O E

XPE

RIEN

CIAS

EN G

ESTI

ÓN

DEL

PAI

SAJE

puede mantenerse que la forma en que los habitantes se relacionan con el territorio condiciona su valoración respecto a las estrategias de conservación y, con ello, una conformación diferencial de su concepto y percepción del paisaje.

Los datos muestran que aquellos individuos que realizan actividades más observacionales se muestran más favorables a la patrimonialización que aquéllos que se relacionan de manera más activa con el territorio. Resulta especialmente interesante que la práctica de la caza y la pesca estén relacionadas con la confrontación de la idea de declaración del Parque Nacional. Esto nos indica que existe una preocupación latente por las limitaciones que pueda conllevar la declaración. Mientras para los que sólo desean contemplar el entorno, pasear en bicicleta o realizar picnics, esta declaración puede suponer una cierta garantía de conservación para aquellos valores ambientales con los que desean interactuar (además de que podrán verse favorecidos por el desarrollo de infraestructuras ligadas a la gestión del uso público del parque), otros perciben las estrategias de protección y conservación como una amenaza para la reproducción de sus prácticas favoritas.

Entendiendo que los procesos patrimonializadores del territorio, como el aquí analizado, configuran claramente las políticas del paisaje, parece que establecer un modelo basado en el conocimiento, la información y la participación puede inclinar la balanza hacia la conservación.

Sin embargo, el estudio realizado muestra la enorme dificultad de aplicar criterios de interactividad en la gobernanza enunciada por el CEP que, como tantas normas y convenios, presupone a las poblaciones con mayor homogeneidad, acceso a los órganos de decisión y menor conflicto que el que se puede observar.

90

Agustín Santana Talavera, Alberto Jonay Rodríguez Darias & Pablo Díaz Rodríguez

BIBLIOGRAFÍA

ABAD SORIA, J. Y GARCÍA QUIROGA, F. (2006): “Análisis y valoración del paisaje en las Sierras de la Paramera y La Serrota (Ávila)”, M+A. Revista Electrónica de Medioambiente, nº 1, pp. 97-119.AGARWAL, SHEELA (2006): “Coastal Resort Restructuring and the TALC Model”, en Butler, R.W. (ed.): The tourism area life cycle: conceptual theoretical Issues. Clevedon, Channel View Publications, pp. 201-218.BELL, S. (2001): “Landscape pattern, perception and visualization in the visual management of forests”, Lanscape and Urban Planning, nº 54, pp. 201-211.BERTRAND, C. Y BERTRAND, G. (2002): Une géographie traversière : L’environnement à travers territoires et temporalités. París, Ed.Arguments.BEZA, B.B. (2010): “The aesthetic value of a mountain landscape: A study of the Mt. Everest Trek”, Lanscape and Urban Planning, nº 97, pp. 306-317.BUCKLEY, Ralf. (2002). “Public and private partnerships between tourism and protected areas: The australian situation”, The Journal of Tourism Studies, Vol 13, nº 1, 26-38.CERRILLO VIDAL, J. A. (2010). “Medición de la conciencia ambiental: Una revisión crítica de la obra de riley E. dunlap”. Athenea Digital, nº 17, 33-52.CONRAD. E.; CHRISTIE, M. & FAZEY, I. (2011): “Understanding public perceptions of landscape: A case of study from Gozo, Malta”, Applied Geography, nº 31, pp. 159-170.CRIADO, C. (1992) La evolución del relieve de Fuerteventura. Cabildo Insular de Fuerteventura. Puerto del Rosario.DÍAZ PINEDA, F. (2010): Estudio para el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) de la Propuesta de Parque Nacional de Fuerteventura en su Primera Fase. Islas Canarias, Cabildo de Fuerteventura. (En Prensa).DÍAZ RODRÍGUEZ, P.; RUIZ-LABOURDETTE, D.; RODRÍGUEZ, A. J.; SANTANA, A.; SCHMITZ, M. & PINEDA, F. D. (2010a): “Landscape perception of local population. Relationship between ecological characteristics, local society and visitor preferences”, en Brebbia, C. A. & Pineda F.D. (eds.): Sustainable Tourism IV. WIT Press, Southampton, UK, pp.309-317.DÍAZ RODRÍGUEZ, P.; SANTANA TALAVERA, A. & RODRÍGUEZ DARIAS, A. J. (2010b): “Implicaciones del ritmo de crecimiento e influencia turística en la valoración del paisaje y el desarrollo turístico. El caso de Fuerteventura (Islas Canarias, España)”, Gaudeamus: Hospitalidad y Sostenibilidad. En prensa.PAREDES, R. & RODRÍGUEZ, R. (2002): Fuerteventura. Antigua, RAI Ediciones.RODRÍGUEZ DARIAS, A. J. (2007): “Desarrollo, gestión de áreas protegidas y población local”, Pasos, Revista de Turismo y Patrimonio Cultural, 5(1): 17-29. RODRÍGUEZ DARIAS, A. J. (2009): “¿Áreas protegidas frente a la presión territorial más allá de sus límites? La patrimonialización de los macizos de Anaga y Teno (Tenerife, Islas Canarias, España)”, Estudios y Perspectivas en Turismo, 8(3): 341-356.RODRÍGUEZ DARIAS, A. J.; DÍAZ RODRÍGUEZ, P.; RUIZ-LABOURDETTE, D.; PINEDA, F. D.; SCHMNITZ, M. & SANTANA TALAVERA, A. (2010): “Selection, design and dissemination of Fuerteventura’s projected tourism image (Canary Isles)”, en Favro, S. & C.A. Brebbia (eds.): Island Sustainability. WIT Press, Southampton and Boston, pp, 13-24.RODRÍGUEZ DELGADO, O. (2005) Patrimonio Natural de la isla de Fuerteventura. Cabildo de Fuerteventura / Gobierno de Canarias / Centro de la Cultura Popular Canaria. Santa Cruz de Tenerife.

91

La percepción del paisaje en la declaración de un parque nacional en las zonas áridas de Fuerteventura

OBS

ERVA

ND

O E

XPE

RIEN

CIAS

EN G

ESTI

ÓN

DEL

PAI

SAJE

RUIZ-LABOURDETTE, D.; DÍAZ RODRÍGUEZ, P.; RODRÍGUEZ DARIAS, A. J.; SANTANA, A.; SCHMITZ, M. & PINEDA, F. D. (2010): “Scales and scenarios of change in the anthropology-landscape relationship: models of cultural tourism in Fuerteventura (Canary Isles)”, en Favro, S. & Brebbia, C.A. (eds.): Island Sustainability. WIT Press, Southampton and Boston, pp: 51-64.SANTANA TALAVERA, A.; DÍAZ RODRÍGUEZ, P. & RODRÍGUEZ DARIAS, A. J. (2010a): “Reapropiaciones de un escenario turístico: Chillida, Tindaya y poblaciones locales”, en Romero Macías, E.M. (coord.): Patrimonio Geológico y Minero. Una apuesta por el desarrollo sostenible. Universidad de Huelva, Huelva, pp. 917-928.SANTANA TALAVERA, A.; RODRÍGUEZ DARIAS, A. J.; DÍAZ RODRÍGUEZ, P. & RAMOS, Á. R. (2010b): “Innovación con compromisos. Retos en la renovación de la imagen en destinos turísticos maduros (Fuerteventura, Islas Canarias)”, en Hernández Martín, R. & Santana Talavera, A. (eds.) Destinos maduros ante el cambio. Reflexiones desde Canarias. Instituto Universitario de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de La Laguna, Santa Cruz de Tenerife, pp. 137-156.