La Predicacion del Evangelio y Mundo Globalizado

28
La necesidad de proclamar el evangelio en un mundo globalizado Una perspectiva wesleyana Fernando H. Suárez Resumen: En este ensayo analizaremos las corrientes actuales que están configurando y cambiando nuestro mundo, nuestra sociedad y en particular como incide esto en nuestras iglesias. Y nos preguntaremos como nuestras iglesias están llevando adelante la misión evangelizadora en los presentes tiempos postmodernos caracterizados por la presión globalizadora en los aspectos económico, político, cultural y social. Al intentar responder estas preguntas sobre estos temas, será como estar armando un intrincado rompecabezas de muchas piezas, debido a la complejidad del tema y a las enormes variantes de aproximación al mismo. Pero al hacerlo deberemos tener presente, que nuestras iglesias, están insertas en este contexto complejo y cambiante de los procesos de globalización que afectan todos los ámbitos de la vida y que influirán seguramente en nuestra forma de entender la misión evangelizadora. Corrientes actuales que están configurando nuestro mundo El tema planteado en el título es muy amplio e imposible de abordarlo en su totalidad. Lo que nos proponemos es ofrecer una mirada sobre los aspectos más destacados de esta realidad. La afirmación del título, a su vez, nos despierta otras preguntas: ¿Cuáles son las corrientes actuales que están configurando y cambiando nuestro mundo, nuestra sociedad? ¿Qué características particulares asumen en nuestros países? ¿Cómo nuestras iglesias están proclamando el evangelio en la presente era de tiempos postmodernos caracterizados por la presión globalizadora en la económico, político, cultural y social? Partimos de la premisa que el concepto de misión, incluyendo el aspecto de evangelización, se diferencia del concepto de globalización. Pues es una acción que surge desde la experiencia interna de la iglesia y no de procesos externos a ella. Los cristianos quieren comunicar el plan

Transcript of La Predicacion del Evangelio y Mundo Globalizado

La necesidad de proclamar el evangelio en unmundo globalizado

Una perspectiva wesleyana

Fernando H. Suárez

Resumen: En este ensayo analizaremos las corrientesactuales que están configurando y cambiando nuestro mundo,nuestra sociedad y en particular como incide esto ennuestras iglesias. Y nos preguntaremos como nuestrasiglesias están llevando adelante la misión evangelizadoraen los presentes tiempos postmodernos caracterizados por lapresión globalizadora en los aspectos económico, político,cultural y social. Al intentar responder estas preguntassobre estos temas, será como estar armando un intrincadorompecabezas de muchas piezas, debido a la complejidad deltema y a las enormes variantes de aproximación al mismo.Pero al hacerlo deberemos tener presente, que nuestrasiglesias, están insertas en este contexto complejo ycambiante de los procesos de globalización que afectantodos los ámbitos de la vida y que influirán seguramente ennuestra forma de entender la misión evangelizadora.

Corrientes actuales que están configurando nuestro mundo

El tema planteado en el título es muy amplio eimposible de abordarlo en su totalidad. Lo que nosproponemos es ofrecer una mirada sobre los aspectos másdestacados de esta realidad. La afirmación del título, a suvez, nos despierta otras preguntas: ¿Cuáles son lascorrientes actuales que están configurando y cambiandonuestro mundo, nuestra sociedad? ¿Qué característicasparticulares asumen en nuestros países? ¿Cómo nuestrasiglesias están proclamando el evangelio en la presente erade tiempos postmodernos caracterizados por la presiónglobalizadora en la económico, político, cultural y social?Partimos de la premisa que el concepto de misión,incluyendo el aspecto de evangelización, se diferencia delconcepto de globalización. Pues es una acción que surgedesde la experiencia interna de la iglesia y no de procesosexternos a ella. Los cristianos quieren comunicar el plan

de salvación de Dios en Jesucristo, crucificado yresucitado, bajo la guía del Espíritu Santo, (misióntrinitaria).

Palabra clave: Globalización, evangelización, subjetivización,entusiasmo.

Pero los cristianos siempre están insertos en un contextosocial, cultural, político, económico donde reciben, viveny transmiten su fe. Las características de este mensaje ycomo se interprete, (hermenéutica), afectará a su vez cómoperciban las iglesias la realidad de los procesos deglobalización. A su vez como se perciba el fenómeno de laglobalización afectará las formas de relacionarse con lacultura y la sociedad en la que se encuentran y de la cualforman parte. También esto condicionará su concepción sobrela misión y dentro de ella a la evangelización. Hay unacircularidad de influencias y condicionamientos en larelación entre los procesos globalizadores por un lado y lamisión evangelizadora de la iglesia por el otro.

Cuando hablamos de globalización estamos planteando unadiversidad de enfoques y definiciones: ¿Qué es laglobalización? ¿Qué abarca? ¿Desde dónde se la define?...

En general, la mayoría de los autores que han tratado eltema de la globalización concuerdan en que es un procesosumamente complejo que incluyen paradigmas todavía nodebidamente analizados, compuestos de muchas dimensionesque conforman un nuevo fenómeno social y que tiene muchasvariantes de acuerdo a la dimensión que prioriza en eldesarrollo de su proceso. En este sentido la globalizaciónes el proceso por el cual se abren los espacios cerrados,las formas económicas, políticas, culturales seentremezclan por la aparición de redes de relacionesregionales y globales. Los datos macrosociales muestran quela globalización se configura históricamente a partir demediados del siglo XX, en la cual la convergencia deprocesos económicos, financieros, comunicacionales, detransporte, migratorios, etc, acentúan la interdependenciaentre vastos sectores de numerosas sociedades generandonuevos flujos y estructuras de interconexión supranacional.La globalización significa la perceptible apertura defronteras del quehacer cotidiano en todas las dimensionesde la vida. Los capitales, las mercancías, las

informaciones, la violencia, las migraciones legales eilegales, las drogas, las tecnologías, las ideologías,religiones, traspasan las fronteras como si estas noexistieran. Todos nos vemos influidos por formas de vidatransnacionales, queridas o no queridas, comprendidas o nocomprendidas, aceptadas o rechazadas que se originan enotros países, regiones o continentes.

Para Zygmunt Bauman el proceso de globalización con laaparición de redes de relaciones regionales y globalesproduce fenómenos distintos según el sector social en elque actúen.

“La globalización divide en la medida que une: las causas de la división son lasmismas que promueven la uniformidad del globo. Juntamente con lasdimensiones planetarias emergentes de los negocios, las finanzas, el comercioy el flujo de información, se pone en marcha un proceso localizador de fijacióndel espacio. Estos procesos estrechamente interconectados introducen unatajante línea divisoria entre las condiciones de existencias de poblacionesenteras…” “…lo que para algunos aparece como globalización es localizaciónpara otros; lo que para algunos es señal de una nueva libertad cae sobremuchos más como un hado cruel e inesperado. La movilidad ascendente alprimer lugar entre valores codiciados, la libertad de movimientos, unamercancía siempre escasa y distribuida de manera desigual, se convierterápidamente en el factor de estratificación en nuestra época moderna tardía ypostmoderna.” “…ser local en un mundo globalizado es una señal de penuria ydegradación social.” “Los procesos globalizadores incluyen una segregación,separación y marginación socia l progresiva. Las tendencias neotribales yfundamentalistas, que reflejan y

articulan las vivencias de los beneficiarios de la globalización, son hijos tanlegítimos de ésta como la tan festejada “hibridación” de la cultura superior, dela cima globalizada…”.1

De esta manera Bauman señala una preocupación por lainterrupción progresiva de las comunicaciones entre elitescada vez más globales y extraterritoriales y el resto de lapoblación que está localizada. Denuncia que en laactualidad los centros de producción de significados yvalores son extraterritoriales emancipados de lasrestricciones locales. Resumiendo, la globalización acentúala estratificación de la población mundial entre las clases

1 Bauman Zygmunt, La globalización, Consecuencias humanas, Ed Fondo de Cultura Económica Argentina, 1999 pag 8 ssg

altas globalizadas que dominan el espacio y el tiempo y lasclases bajas localizadas que están inmovilizadas en elespacio y el tiempo. El resto de la población, la clasemedia sobrelleva el peso de estos problemas, luchando pormantenerse en su sector para no ser excluida de lamodernidad y por ello padece incertidumbre, ansiedad ymiedo.

Este proceso globalizador ha contribuido a reforzar elpoder absolutizador del mercado mundial en detrimento de lapluridimensionalidad del mismo proceso globalizador,profundizando una sola dimensión: la económica. Esta últimasubordina a todas las demás dimensiones, legitimada através de la ideología neoliberal (la política, la cultura,lo social, lo estético, la ecológico, etc) produciendo elfenómeno llamado Globalismo.

En este sentido la imposición de la dimensión económicasobre todas las demás ha fortalecido el proyecto dedominación mundial, el cual está intimamente relacionadocon el poder comunicacional. Poder comunicacional cuyo fines colonizar la subjetividad, someter la conciencia de lagente a los fines de suplantarla por otra más funcional almodelo absoluto de mercado de consumo. Su objetivo esuniformar el pensamiento buscando debilitar o anularla capacidad de crítica, denegación y diferenciacióndel sujeto a los fines de consolidar el “Imperio” delcapitalismo industrial y financiero tardio2.

2 Entendemos “Imperio” como lo conceptualiza muy bien Richard AHorsley en su libro, “Jesús and Empire; The Kingdom of God andthe New World Disorder”,Fortress Press, USA,2003 . (Laglobalización romana era política. La conquista militar hacíaposible la explotación económica de los pueblos sometidos. Elpoder imperial Americano moderno es preponderantementeeconómico, jurídico y cultural, pero condicionado por el poderde las corporaciones multinacionales. El gobierno americano,solo tiene una leve ventaja sobre ellas. Las relaciones depoder entre gobiernos y multinacionales se ha revertido, ahoralos gobiernos realizan los mandatos de las vastas corporaciones.El poder del capital de la economía globalizada determina lasrelaciones políticas. El Imperio Americano que tocó su pináculode poder después de la segunda guerra mundial, ha sidotransformado por su propia globalización. El Imperio es elcapitalismo globalizado, con el gobierno de USA y su militarismocomo su brazo ejecutor. Pero por supuesto, mientras crece la

Como bien describe el filósofo Argentino Pablo Feinmann:

“La globalización del tercer milenio busca encadenar no ya los cuerpos, sino lossujetos. Sujetar los sujetos. Sus principales armas no son tanques, ni misiles, nineutrones. Es la Televisión, el cine, el periodismo, los magazines, las radios, loscanales de cable y formidablemente Internet, donde algunos creyeron, muyingenuamente que iba a instalarse la “sociedad transparente” que pregonabaGianni Vattimo a comienzos de los noventa(…) “(…) “el poder comunicacionalradica en que todos pensemos lo mismo que el poder. El poder impone el “se”.(“Man” en Heidegger,”On dit” en Sastre) caer bajo el poder del “se” es caer bajoel señorío de otro, (Ser y Tiempo, parágrafo 27). Quien así cae, “no es elmismo”, los otros le han arrebatado el ser. El poder al someter mi subjetividad,elimina mis proyectos, mi futuro más propio, lo que hubiera querido hacer conmi vida, mis posibilidades al caer bajo el dominio del “se”, son las del Otro, lasdel poder, las que me vienen de afuera. Ya no soy yo quien decide, soy decidido.Escribe Heidegger “Disfrutamos y gozamos como se goza; leemos, vemos yjuzgamos de literatura y arte como se ve y se juzga, encontramos sublevante loque se encuentra sublevante. Todo pierde su misterio. (¿No define este conceptola explicitez, la obscenidad del poder comunicacional? Todo es directo, todo esbanal, todo es explícito. El misterio, lo que sugiere, lo que lleva a pensar arevisar, a ir más allá, lo que no se ve de entrada, lo que impone una búsquedaha muerto)”.3

Feinmann nos dice en su artículo que en los últimostiempos se han cuestionado conceptos filosóficoscentrales de lo que se ha dado en llamar Modernidad. Sedecretaron muchas muertes: la de la historia, la delsujeto, la de las ideologías. Desmontar el andamiaje delracionalismo moderno fue una tarea emprendida por lasfilosofías postmodernas. Pero desmontar la razón eradesmontar a quien la poseía: el hombre. De aquí lareconstrucción, porque ya no existe un sujeto centralizadodesde el cual el mundo se torna intelegible. Así, Foucault

descentralización, el capital global y sus instrumentoshabilitados, (FMI y Banco Mundial, etc) siguen teniendo susbases en EE. UU y la cultura que venden al mundo espredominantemente americana. Aquellos que atacaron las TorresGemelas el 11 de Septiembre, 2001, sabían del simbolismo delreal centro del poder imperial: The World Trade Center and theUnited States Pentagon).

3 Pablo Feinmann, La colonización de la subjetividad, Pagina 12,23-02-04. http/www.pagina 12 web.com.ar

proclama la muerte del hombre, Barthes la muerte del autor,Derrida la muerte del sujeto.

En otro de sus ensayos Feinmann nos aclara cual es elsujeto que se quiere descentralizar, desconstruir.

(…)Deconstruir es, entonces, descentralizar. Es negar las filosofías de laconciencia, que iban de Descartes a Husserl y Sartre. Ya no hay sujeto, hay unaenorme pluralidad de sujetos que son los sujetos de la sociedad abierta,democrática. Ya no hay historia, ya no hay una historia que tenga un sentido,muere el famoso sentido de la historia –que tanto había exaltado a Hegel yMarx–, la historia no es ya un concepto totalizador sino una serie defragmentos. Ya no hay hombre, se acabó el humanismo. Ya no se parte delhombre para entender lo real sino del lenguaje, que epistemológicamenteprecede a la conciencia. (…)Así, el posmodernismo se convirtió en elfundamento filosófico del capitalismo de absolutización del mercado. Elmercado es libre y es plural. Es fragmentado. La democracia rechaza todocentro. Todo centro es totalitario. Todo centro es estatal. La idea del sujeto esparalela a la idea del Estado. El Estado también es deconstruido.(…) EnArgentina se pulverizó al Estado y se lo entregó a sujetos diferenciados, libres,tan libres como libre es el mercado. Aparece el concepto de globalización. ¿Quésignifica esto? Significa la descarada confesión de que hay, sí, un sujeto quetotaliza, un sujeto centralizado, un sujeto que niega las diversidades, queabomina de la fragmentación y de las sociedades transparentes. Es el sujetomass-mediático. Las revoluciones habían muerto, pero ellos hablan de larevolución comunicacional. Y la revolución comunicacional está al servicio de lasubjetividad del Poder. Hay un solo sujeto. El sujeto de la globalización. Elsujeto del Poder. Entre tanto, nosotros estamos inermes. Nos han dicho que elsujeto murió, que el hombre murió, que la historia murió, que la totalidad essiempre estatal y totalitaria, pero ellos globalizan. Nos dijeron que vivimos laera posrevolucionaria, que las revoluciones han muerto, pero ellos hacen surevolución. Ellos se han adueñado de la razón instrumental, dominadora. Elloshan centralizado el logos en la Warner, en American Online -principalproveedor de Internet– y en la CNN.4

Nuestro trabajo trata de sostener que a partir de nuestraFe cristiana, los creyentes y la humanidad toda, tiene lainmensa posibilidad de transformar esta realidad y derevertir el estado de indefensión al cual se ve sometidapor el proceso globalizador en su forma negativa,(supremacía de lo económico fundamentada en la ideologíaneoliberal), como fue descripta anteriormente.

4 Feinmann Pablo, En busca del Sujeto Crítico, Pagina 12, 06/5/2000. http/www.pagina 12 web.com.ar

Tal vez volver a los clásicos nos ayuden a profundizar lacomprensión de la complejidad de nuestro mundo globalizado.Nuestros tiempos se caracterizan por el malestar de lacultura y de la sociedad en donde impera la falta decohesión social. Esta se manifiesta en la pobrezacreciente, la inequidad de la distribución de la riqueza,en la falta de desarrollo, en la crisis educativa, en lafalta de acceso a la modernidad, falta de garantía a losderechos individuales, en los problemas estructurales yculturales, en la crisis moral y ética de la sociedad, lafalta de solidaridad, falta de representatividad políticadebido a la debilidad de los partidos políticos, etc. Elmundo globalizado de hoy nos invita y desafía a pensarestos temas ético cultural, económico, social y político.

En la sociedad se están produciendo alteraciones en lasformas de construcción de la subjetividad y donde ladebilidad de la narratividad juega un papel esencial. Elvalor evanescente de la palabra es un indicio potente deldesfallecimiento de esta capacidad de narratividad. Tambiénes notoria la supremacía de la imagen respecto delconcepto, de la emoción en desmedro de la razón. Hoy en díaunas de las narrativas que más convocan es el discursodel cine. En este sentido hemos elegido un clásico paradescribir la realidad de nuestros tiempos postmodernos,localizando esta mirada con acotaciones de lo que sucede enArgentina.

En 1936, Charlie Chaplin plasmó su mirada sobre laModernidad en Inglaterra. Han transcurrido setenta y dosaños de esa película que se ha transformado en el clásicoineludible de uno de los discursos vigentes de losmomentos actuales: el cine.

En el inicio de la película se puede ver a una multitud dehombres y mujeres saliendo de un subterráneo;automáticamente, ellos se transforman en una piara decerdos. Es la misma “película” que vive cotidianamentecualquier pasajero en los, subtes, trenes y ómnibus deBuenos Aires en la Argentina del presente.

A continuación vemos las imágenes de hombres trabajando enuna fábrica a ritmo febril, el empresario acelera la cintatransportadora sobre la cual los obreros se ven compelidosa apurar su ritmo de trabajo. (-El taylorismo y el Fordismo

constituyó un enfoque económico de explotación capitalistaque intentaba producir un mayor rendimiento del obreroacelerando los tiempos de trabajo, hoy se han aceleradoestos tiempos con las nuevas tecnologías).

En otra escena el héroe de la película aprieta tuercascada vez más velozmente. No sabe para qué, ni conoce elproducto final de esa acción. Nos muestra una imagen dealienación: el sujeto se ha convertido en el objeto quecrea sin saber cuál es ese objeto.

Carlitos queda atrapado en el interior de una máquina, perocomo es el horario de descanso del personal, ésta sedetiene, con lo cual el protagonista quedará atrapado allípor el tiempo que dura el recreo. El hombre se haconvertido en un engranaje de un sistema donde el sujeto esun mero eslabón de la gran maquinaria de producción. (Hoypodríamos decir el sujeto es un consumidor compulsivo en lagran cadena de consumo exacerbado del mercado global).

Nuestro obrero Carlos no puede dejar de seguir trabajandocompulsivamente, apretando tuercas, su enajenación sigueavanzando. En esos momentos ve a una mujer cuyo vestidotiene dos botones decorativos a la altura de sus pechos ydejando su trabajo comienza a perseguirla paraapretárselos. Se ha transformado en un alienado y por lotanto es encerrado en un psiquiátrico. Luego al serliberado del hospital se va a pasear al puerto, porrecomendación médica, pero en ese momento pasa un camióndel cual se cae una tela roja, Carlitos la levanta y laagita para avisarle al conductor que ha perdido ese trapo,sin darse cuenta que detrás de él marcha una manifestaciónde desocupados. Aparece la policía para reprimir laprotesta y lo detienen a él porque lo consideranerróneamente un “comunista”. (Esto resuena conocido y muyfamiliar para los argentinos, formas de hacer visible laprotesta social: bocinazos, cacerolazos, apagones de luz,piquetes, cortes de calles, de rutas, marchas, huelgas,incendios de estaciones de ferrocarril, de formaciones detrenes, de comisarías, de municipalidades, de legislaturas,tomas de fábricas, universidades, colegios, oficinasestatales. Como reacción la consecuente represión policialque más de una vez se cobra un muerto, por ejemplo, el

asesinato del docente Carlos Fuentealba en Neuquén a manosde la policía.)

Nuestro héroe sale del hospicio neuropsiquiátrico y entraen la cárcel. En Argentina se ha judicializado ycriminalizado la protesta social y hay varios detenidospolíticos desde que se recuperó la democracia.

Al salir de la cárcel, Carlitos conoce a su pareja, (rolprotagonizado por Paulette Goddard), otra excluida ydesgraciada como él y como tantos otros. Las escenas sesuceden teniendo como protagonistas esenciales alinfortunio, la desgracia y la marginación de lospersonajes.

Pero la sustancia de la película es la tragedia del hombrey mujer modernos, deportados del mundo. Sin embargo, elfilm no ha perdido el humor y la esperanza de un futurodistinto. La película muestra en tono de comedia lo que esuna tragedia porque se trata de una parodia.

En nuestro país el neoliberalismo globalizador se instalaen la Argentina de la mano de la Doctrina de la SeguridadNacional, la cual alentó el cruento golpe militarperpetrado en 19765 Este produjo un endeudamiento externousurario que ha hipotecado la soberanía económica, destruyóla industria nacional y las economías regionales, privatizó5 La Doctrina de la Seguridad Nacional, que se implementóprácticamente en toda América Latina, proclamaba que el Estadoestaba en una situación de guerra interna contra la“infiltración comunista y terrorista”. Esta no podía ser unaguerra convencional porque no se hacía contra un agresor externoni contra una fuerza armada regular; consiguientemente, secalificó de “enemigo subversivo” a todos aquellos que seopusieron intelectualmente e ideológicamente al sistemaneoliberal, (docentes, gremialistas, estudiantes, periodistas,militantes políticos, sociales y religiosos). Los militares, lasfuerzas de seguridad y los grupos paramilitares apoyados por lasclases altas, la jerarquía religiosa católica, la indiferenciade muchos dirigentes evangélicos y un sector minoritario de lasociedad llevaron adelante una represión sobre la clase políticadirigente, la cual se constituyó en una flagrante violación delos Derechos Humanos, llamándosela por parte del Estado Militarcomo “guerra sucia”, una expresión eufemística del “terrorismode Estado” que torturó y desapareció alrededor de 30.000personas, además de provocar miles de exiliados.

corruptamente las empresas públicas habilitando en loshechos la existencia de verdaderos oligopolios,extranjerizó la banca y dio lugar a la voracidad de losmercados financieros mundiales dedicados a obtener enormesrentabilidades mediante inversiones puramente especulativasy extremadamente volátiles. La sentencia del Juez FederalJ. Ballesteros pone en evidencia la estrecha complicidadentre los acreedores y las autoridades del régimen de factoque imperó entre 1976 y 1983. Recordemos que durante ladictadura se cometieron los más graves crímenes de lesahumanidad. (Por este hecho, y debido a que existió unaestrecha relación entre los acreedores internacionales y ladictadura militar, la responsabilidad de estos últimospuede ser legalmente invocada a partir del derecho penalinternacional. Esta situación abre la vía para los reclamosy reparaciones, lo mismo que acciones por la vía penalcontra los dirigentes de entidades acreedoras porcomplicidad en crímenes contra la humanidad).

El correlato social de este desastre económico y políticoprovocado por el neoliberalismo, es que pauperizó a laclase baja y media, imponiendo una concentración de lariqueza sin precedentes y provocó una escandalosa expansiónde la pobreza (elementos propios de una sociedad dual),además de endeudar al país.*En la actualidad en la Argentina hay 10,3 millones depobres, de los cuales 3,3 millones son indigentes. Estascifras surgen de proyectar a todo el país los datos quedifundió el INDEC, (Instituto Nacional de Estadísticas yCensos, INDEC), sobre la evolución de la pobreza y laindigencia en el segundo semestre de 2006. (No hemostomado las actuales mediciones del INDEC del año 2007,debido a la injerencia del Estado en la manipulación de losdatos estadísticos a partir de la intervención en elInstituto, cuya consecuencia es la falta de confiabilidaden las estadísticas emitidas)

A pesar de este contexto de injusticia y sufrimiento elpueblo argentino está experimentando una superación lentade este modelo de alta exclusión social debido alcrecimiento que experimenta su economía. Las políticas queimpulsan la reindustrialización con inversiones productivasen las áreas agropecuaria, minera, energética, metalífera,exportadora, más el apoyo a la educación y las

investigaciones en el campo de la ciencia y la tecnologíatratan de sostener esta mejora experimentada en el ámbitoeconómico.

Tiempos Modernos es un verdadero relato de anticipación,una película premonitoria, pletórica de significados tanvigentes en 1936 como en el año que estamos transitando ennuestro país y planeta globalizado. No es un relato viejo,sino clásico, por su fuerte vigencia y porque abordatemáticas que sobreviven al paso del tiempo. Carlos Chaplinhabla de la tragedia del ser humano, en tono de parodia.Chaplin refleja el mundo capitalista, espeja la alienación,muestra el malestar de la cultura capitalista, exhibe cómoeste malestar se puede transformar en enfermedad mental yespiritual de las personas y de la sociedades,( lasneurosis, las conductas psicóticas se han incrementadomanifestándose en estados de ansiedad producto de lassensaciones de inseguridad que vive la población comoconsecuencia de las relaciones “líquidas” en las relacioneslaborales, afectivas y sociales, que se pone en evidenciaen la falta de cohesión social. Las patologías actuales denuestra sociedad moderna muestran la permanente discordiaentre el sujeto y el objeto. Testimonia, al fin y al cabo,el desasosiego propio de los “Tiempos Modernos”.

Pero hay una última escena, la más significativa del film.Carlitos y su pareja expulsados de la ciudad, se alejanabrazados por un camino de campo, avanzan dando la espaldaa un espacio y un tiempo presente que los deporta, hacia unfuturo incierto, pero sin perder la esperanza de lafelicidad que brinda el amor compartido.

El futuro abierto e incierto de esta última escena, ¿No esquizás la esperanza del potencial nacimiento de nuevasmodalidades de subjetividad? Y si hablamos deconstrucciones de nueva subjetividad ¿Los cristianos notenemos acaso la sabiduría del amor manifestada enJesucristo Crucificado y Resucitado para aportar a estaempresa?

Aunque estas preguntas sobreviven en la latencia de susrespuestas, Tiempos Modernos, premonitoriamente, anticipalas posibilidades de su hallazgo: se trata de un exilioesperanzado donde podamos volver a una concepción de la

conciencia y de la razón, del saber como ruptura, comoescisión. Como negación del Poder, de la dominación, deldiscurso omnipresente de los Otros. Hay que construir alsujeto crítico, a la nueva criatura, ir en su busca. Porqueel sujeto imperial, el sujeto del Poder, el sujeto de ladominación está centralizado, hace la historia, unahistoria que nos niega, que nos excluye, una historia a laque confunde, con total lucidez y total impunidad, con laabsolutización o idolatración del mercado. Y ese sujeto, elde ellos, nada sabe de Derrida, ni de Lyotard, ni delCristo crucificado y resucitado y de su Reino, no sólo nopiensa deconstruirse sino que goza de una “salud plena ytotal”.

La gente en nuestro país, al igual que Carlos y su parejaen la película, transitan el exilio esperanzado a través denumerosas formas de lucha solidaria: trabajando,educándose, formando cooperativas, pequeñosemprendimientos, banco de los pobres, comedores populares,campañas de alfabetización, a través de paros, piquetes,marchas, tomas de lugares, la desobediencia civil, elboicot, el amparo judicial, el acoso a diputados ysenadores, el escrache a los militares responsables decrímenes de lesa humanidad, la recuperación de la Justicia,(Corte Suprema dicta la abolición de los indultos a losresponsables del terrorismo de Estado que vivió laArgentina), desde la entrevista personal, hasta el correoelectrónico, los graffiti, la agitación ‘relámpago’…Perotambién en los sindicatos, partidos políticos, gobiernos:comunales, provinciales y nacional que buscan en el diálogolos acuerdos entre todos los sectores sociales quebenefician al conjunto de la sociedad. En las iglesias queejercen un rol profético en su misión evangelizadora,en los encuentros, manifestaciones, concentracionesy procesiones ecuménicas e interreligiosas, en laparticipación en miles de ONG,(Organismos NoGubernamentales), en las fiestas populares, como las murgasen el carnaval o los festivales de música y bailes, elteatro, el cine, la pintura y el arte en general…En losfuncionarios en el gobierno que ejercen sus ministerios alservicio del pueblo en su conjunto a través de políticas deinclusión, integración y distribución equitativa de lariqueza que producen todos los argentinos, etc.

La Fe de los Argentinos

En los últimos 16 años se registraron en el RegistroNacional de Cultos aproximadamente 1000 nuevos cultos, delos cuales el 75% son evangélicos. Las Federaciones deIglesias Evangélicas estiman en unos 5 millones la cantidadde fieles. Esto demuestra que la búsqueda de un sentidotrascendente atraviesa todo el tejido social. Según unaencuesta realizada en el 2005 por la consultora Gallup6,solo 2 de cada 100 argentinos dijeron no creer en Dios. Másallá de su apariencia laica en nuestro país hay una vidareligiosa muy importante y diversa. Hay una gran movilidadentre los distintos cultos y en muchos se nota un grancrecimiento. Hoy en día hay una gran variedad de gruposreligiosos y múltiples formas de creer. Desde el retorno dela democracia hay una mayor libertad para exhibir lascreencias y eso ayudó a potenciar la diversidad. Losespecialistas abocados al tema sostienen que la gente seanima más a buscar contención y sostén emocional en credosminoritarios, ya que quiere una relación con Dios con menosintermediarios. La gente busca en la fe, lo que siemprebuscó, que Dios con su dimensión sobrenatural y lacomunidad le ayude con su vida en el mundo cotidiano.

Hoy los grupos que más crecen son los que enfatizan elcontacto personal con el mundo espiritual en los que la fecontempla la vida cotidiana con todas sus implicacionesemocionales, los que tienen una identidad firme y donde elquehacer intelectual no se muestra distante ni frío conrespecto a la grey. Y aquellas otras que sostienen teologías funcionalistas conel sistema imperial, (teologías mágicas, teologías de laprosperidad, teologías de la guerra espiritual, que todasellas rozan lo patológico). En esta línea son los gruposcarismáticos los que más crecen ya que sostienen este tipode teologías, pero acompañadas de una activa misiónevangelizadora, utilizando los medios masivos decomunicación y un cuidado pastoral basados en vínculosafectivos. También la religiosidad popular está en plenocrecimiento.En Argentina las recurrentes crisis políticas y económicashan impulsado un profundo cambio cultural en las creencias

6 Consultora Gallup, Consulta religiosa, Diario La Nación 20 Noviembre 2005

y prácticas religiosas. La gente vive su fe a partir de suspropias necesidades e intereses y construye así su propiabúsqueda. En la experiencia de este proceso de individuación religiosa hay como unapluralidad de identidades en un mismo individuo.

Por ejemplo, una persona que se denomina católica, va devez en cuando a misa o a las procesiones de los santuarioscatólicos romanos o populares, pero sintoniza al pastorevangélico en la radio o la televisión, esporádicamenteconcurre a una iglesia evangélica en busca de ayuda osanidad, a la vez recurre al curandero/a de la zona, haceyoga por recomendación médica y asiste a conferencias defilosofía sobre temas cotidianos. Este sincretismo decreencias y prácticas es el signo novedoso de la nuevareligiosidad. Esta apropiación personal de la religiónprovoca un rechazo a todo lo que tenga un énfasisinstitucional. La gente arma su propio sistema simbólico decreencias porque no quiere atarse a la pertenencia de lasreligiones clásicas con sus normas y prácticas,evidenciando de esta manera otra forma de vivir su fe. Enlas diversas encuestas las más proclives a cultivar la feson las mujeres. También nos dicen que la gente cree más enel interior del país que en las grandes ciudades. Y que hayuna relación entre educación, ingreso económico y religión.En general creen menos aquellos que tienen un nivel alto deingresos y educación.

El filósofo Santiago Kovadloff sostiene que: “la actual oferta de credos religiosos acentúa el consuelo y la identidad grupalganada a expensas de la identidad personal…” “Estas expresiones religiosas,alientan la disolución en lo masivo de la responsabilidad subjetiva e individualy, en este sentido, operan con una fuerza compensatoria equivalente a la de lasdoctrinas totalitarias”7.

Lo cierto es que, por un lado asistimos a un fuerte retornode la búsqueda religiosa, relacionada con "lainconsistencia de valores sociales y políticos, que impulsala búsqueda de seguridad en un ámbito trascendente". Peroen una sociedad cada vez más secularizada, globalizada,dual, donde imperan las relaciones líquidas, la falta decohesión social y la idolatría. 7 Kovadloff S., “Cada vez más personas se declaran religiosas” Diario La Nación, 20-10-05 Argentina.

Al recorrer la historia de nuestras iglesias nos damoscuenta de que tenemos mucho para agradecer a Dios: lafidelidad de tantos hermanos y hermanas al llamado de seragentes del Reino de Dios, el rol profético quedesempeñaron muchas laicas y laicos, pastores y pastoras enla lucha por la justicia y la defensa de los derechoshumanos, la permanente vocación ecuménica y disposiciónpara el servicio, y el testimonio de tantas vidastransformadas y sostenidas por el Evangelio. Pero también somos conscientes de que hay mucho porcambiar: hemos caído en una retracción que por momentos nosha paralizado, hemos asumido excusas fáciles que justificannuestra poca pasión evangelizadora, hemos sido bastantegenerosos para el servicio pero egoístas y timoratos paracompartir la Palabra, nos hemos dejado llevar por unatendencia a descuidar la tarea evangelizadora que en untiempo pasado cada uno sentía como un llamado y unprivilegio personal e indeclinable. Esta conciencia denuestras debilidades y de la necesidad de que se produzcancambios se ha manifestado en los últimos años como unacreciente búsqueda de renovación espiritual, como un deseomás ardiente de vivir en esa santidad interior (personal) yexterior (social) a la que llama el Evangelio y que está enlas raíces del movimiento cristiano. También somosconscientes de que estamos ante un momento decisivo en lavida de nuestras iglesias, ya que lo que está en juego essu sobrevivencia; esto se ha reflexionado y explicitado endiversos documentos elaborados en los últimos años.8

No obstante todo lo dicho, coincidimos con el el Dr MiguezBonino que en la XVI Asamblea general de la IglesiaMetodista Argentina preguntaba al auditorio con motivo deltratamiento del documento “Caminos de Misión para el sigloXXI”, (preocupada en su reflexiones por la pérdida de lamisión evangelizadora y su decrecimiento en su membresía): “¿Cuál es nuestra debilidad? Lo que todavía nos falta es entusiasmo. Una de lascríticas a la Iglesia Metodista inicial era que sus miembros eran entusiastas yque se les daba por decir que tenían el Espíritu Santo. Entusiasmo significamuchas cosas, incluso que reconozcamos el poder del Espíritu Santo, esoimplica un verdadero entusiasmo “el cristiano se reconoce” dice Pablo, por su

8 En la Iglesia Evangélica Metodista Argentina en: Proyecto Misionero Nacional de la Iglesia Metodista Argentina .Documento de la Iglesia Metodista Argentina “Caminos de Misión para el siglo XXI y otros.

fidelidad a la Escritura y por el Amor”. Eso lo diferencia del fanatismo. En laIglesia Metodista no nos falta conocimiento ni capacidad para ejecutar lascosas, nos está faltando entusiasmo…”9

Hacia una propuesta de Misión Evangelizadora “Considero el mundo entero como mi parroquia, quiero decir que en cualquier parte de él donde estoy, lo juzgo digno, justo y mi deber declarar las buenas nuevas de salvación a todos los que quieran oír. Esta es la obra a la cual sé que Dios me ha llamado. Estoy seguro que su bendición la acompaña”.10

Así describió Juan Wesley su vocación y responsabilidadpastoral, cuando la jerarquía del clero anglicano puso entela de juicio su ministerio al predicar en “otrasparroquias”. Aunque era un ministro anglicano sin parroquiaalguna a su cargo, Wesley servía como pastor a numerososgrupos que respondían a su predicación evangélica, llamandoal arrepentimiento y a la fe. Nótese cómo Wesley definió suresponsabilidad pastoral más allá de la comunidad de losfieles. Es decir para él, el mundo, además de la comunidadde fe, era el lugar ministerial.Pero si analizamos a fondo la expresión, descubrimos algomás profundo que una disputa eclesiástica sobre elterritorio, vemos que en el centro mismo de lo que Wesleyentiende por el llamado de Dios está el predicar elevangelio de salvación para todos. Este es el significadoque caracteriza la identidad del movimiento metodista detodos los tiempos. Este enfoque de la vocación ministerial de Wesley pone derelieve las características fundamentales de la teologíabíblica de la misión. A la vez, representa uno de loslegados más importantes del movimiento evangélico pietistadel siglo XVIII de la cual los evangélicos latinoamericanossomos herederos. Este legado recupera al mundo como objetodel llamado de la Iglesia, porque es hacia él a donde seorienta la misión redentora de Dios. “De esta forma Wesley introduce una tensión con los moldeseclesiológicos clásicos, católico y protestante, ya quecoloca la totalidad de lo que constituye a la iglesia alservicio de la misión evangelizadora. “Wesley en un sentido9 Actas de la XVI Asamblea General de la Iglesia Evangélica Metodista Argentina 1999 Bs. As., pag 19-20. 10 Juan Wesley Letter to James Hervey 28 de Marzo 1739.

proclama en la práctica una instrumentalidad de la iglesiaa la misión”. 11

Esta perspectiva bíblica y wesleyana, es una de lascaracterísticas fundamentales de la identidad metodista ensu forma de considerar la misión.Pero para entender nuestro mundo, sumamos a estaperspectiva wesleyana, la perspectiva de la teologíaLatinoamericana, (ver, juzgar, hacer y celebrar), esta secaracteriza por una referencia constante a la realidadmotivada por una indignación ética fruto de nuestra fe antela injusticia reinante. Se trata de una doble referencia,tanto de origen como de finalidad. Toda reflexión partede la realidad y vuelve a la realidad paratransformarla y volver a partir desde esa realidadtransformada en un nuevo proceso cíclico en torno a larealidad. En este sentido la teología latinoamericana se basa en unametodología que utiliza a las ciencias en general perodando un lugar prioritario a las ciencias sociales parallevar adelante el análisis, la reflexión y el trabajosobre la cambiante realidad.12

Realidad que se nos presenta muy compleja y que la entendemos según la describe Jung Mo Sung :

“Reconocer la complejidad de la realidad social es reconocer los límiteshumanos. El ser humano es incapaz de conocer plenamente la realidad, comotambién es incapaz de controlar todos los efectos de sus acciones y de produciruna sociedad según sus proyectos y deseos. Pero al mismo tiempo, reconocer lacomplejidad del propio ser humano, es reconocer también que somos capacesde desear un mundo más allá del existente, de crear símbolos que nominen eindiquen ese mundo deseado, de elaborar utopías que expresen mássistemáticamente nuestros horizontes de esperanzas, de comprometernos con

11 Miguez Bonino José, “Hacia una Eclesiología Evangelizadora” Una perspectiva Wesleyana, Editeo-Ciemal 2003 pag 49ssg.12 “Sí asociamos la reflexión teológica a las tareas históricas por la mediación de las ciencias de lo social es porque queremosevitar el peligro de una teología “pura” que acabaría siendo inevitablemente una superproducción gratuita de significaciones,en otras palabras, una “hemorragia de sentido” debida a la “infinitud de las palabras” de su incontinencia”. Cfr C. Boff, Teología de lo político. Sus mediaciones. Sígueme, Salamanca 1980, pag. 44

causas bellas y justas que dan un sentido más humano para nuestroexistencia”13

Como dijimos, la misión de la iglesia es la de ser uninstrumento de la misión de Dios en el mundo. Dios tiene unpropósito de renovación que abarca la totalidad de lahumanidad y el universo invitándonos a participar de suplan. Pero cuando hablamos de misión y evangelización engeneral, si miramos la historia del protestantismo, estetuvo la tendencia a reducir la totalidad de la misión deDios a la tarea de evangelización con un enfoqueindividualista desdibujando su unidad intrínseca con lacomunidad. Así entendida la evangelización, se introdujouna confusión con el amplio sentido de la misión la cualabarca, la adoración, el cuidado pastoral, el servicio, elrol profético que busca la justicia, la denuncia de laidolatría, etc. Nosotros entendemos a la misiónevangelizadora como bien la conceptualiza Miguez Boninocomo una misión Trinitaria:

“Si la misión es participación en la plenitud de la “misión de Dios”, todaevangelización debe ser-junto a la proclamación de la reconciliación obrada enla vida, muerte y resurrección de Jesucristo- testimonio de la creación buena deDios y llamado a cultivarla y cuidar de ella, anuncio de la justicia de Dios yllamado a practicarla y servirla. Un mensaje que en medio de la represión y latortura, habla del Crucificado como si no tuviera nada que ver con los pobrescrucificados de la historia o que, en la creciente destrucción y marginación de grandes sectores de la población,presenta a Jesucristo como si nada hubiera dicho de ese tema, como si elEspíritu Santo no hubiera sido el que descendió sobre Amós, Oseas y Santiago,como si los que sufren y mueren no fueran “imagen y semejanza” del Creador,no merece ser llamado evangélico. Pero una evangelización que dijese todo loque hay que decir al respecto sin un llamado al arrepentimiento, la fe y el discipulado, tampoco esparticipación en la misión del Dios trino. Una evangelización verdaderamente trinitaria-como una adoración y acciónque lo sean-es la invitación a participar en fe en la vida misma de Dios trino ypor eso en la totalidad de lo que Dios ha hecho, hace y hará para cumplir supropósito de ser “todo en todos”.14

13 Jung Mo Sung, Sujeto y Sociedades Complejas, Para repensar loshorizontes utópicos, Ed. Vozes, Petrópolis 2002, Pag 1114 Miguez Bonino J., Rostros del Protestantismo Latinoamericano, Ed. Nueva Creación, Bs. As. 1995, ISEDET, pag 139.

Desde el Génesis hasta el Apocalipsis, las SagradasEscrituras dan testimonio de la acción de Dios como creadordel universo y de la vida del hombre mediante su Palabra yEspíritu, principio y fin de todo. En la Biblia se nospresenta la historia de Dios con su pueblo. Frente a larebeldía de la humanidad, Dios interviene con su redención,la cual se hace plena en Jesucristo, nueva creación dequien por el Espíritu nace la iglesia.Jesucristo es “la vida de la iglesia, Él encarna y realizasu impulso misionero y ese anhelo de comunión plena en alamor.El Dios de la Biblia es pues el actor principal de lahistoria. Jesús de Nazareth encarna esa historia. La Bibliala interpreta, la Iglesia bajo la guía del Espíritu Santola proclama en medio de la historia y cultura de lospueblos de la tierra. En este dialogo misionero en la Trinidad somos incluidoscomo co-actores de la misión divina a través del envío. ¿Enqué constituye este envío? En la gran comisión mateana yjuanina, Mt. 28:16-20; Jn. 20:21-22. El envío o la misiónde los creyentes tiene que ver con la dinámica del Diostrino: El Padre envió al Hijo en el poder del Espíritu, elHijo nos envía a nosotros, comunidad de fe investida deautoridad para llamar a la humanidad a la fe y el amor yenviarlos en nombre del Padre, del Hijo y del EspírituSanto a hacer discípulos de entre todos los pueblos de latierra. De esta forma somos incluidos en el envío de Dioshacia el mundo en su propio nombre para que la Iglesiaenvíe en el nombre de Dios.¿Cuál es el propósito de Dios para el mundo?En general, sin entrar en detalles, la de “reconciliarconsigo todas las cosas, así las que están en la tierracomo las que están en el cielo, haciendo la paz mediante lasangre de la cruz”, de su Hijo Jesucristo. (Col. 1:20)En Jesucristo Dios se ha propuesto juzgar al mundo, (Hech.17:31) instaurando su Reino de Justicia entre los hombres alos fines de liberar a la humanidad del poder del pecado yde la muerte y a su creación de la corrupción por medio deJesucristo. (Ro 8:1-3;1 Tim 2: 5-6). En la encarnación,(totalidad del hecho de Cristo), se ha inaugurado una nuevaera “bajo el signo de la liberación”.15 Dios se proponecrear una comunidad mundial de amor, (Universalismo o15 Miguez Bonino, Theology and liberation” Internacional Review of Misión, January 1972, pag 68

Globalización positiva), en la cual se haga operante sujusticia, su paz, su salvación. El compromiso de Dios conel mundo es total, porque el mundo en su totalidad ha sidovíctima de la obra del mal. Por ello cometemos un graveerror exegético y teológico cuando limitamos la misiónreconciliadora de Dios al ámbito espiritual individual yprivado o cuando lo reducimos solo al ámbito social ocuando la separamos de las implicaciones éticas o cuandoempujamos el juicio y la salvación divina a un mundo delmás allá.Desde el punto de vista bíblico la misión evangelizadora deDios no se limita a una reconciliación individualista,espiritualista escapista, extramundana, desencarnada yalienada de la opresión que ha sufrido el mundo aconsecuencia del pecado. Antes bien, se trata de una misiónque ofrece una salvación completa de la vida de la persona,de la sociedad y de la humanidad y de la creación que gimea una. Como agente de la misión de Dios, la iglesia no solo debeocuparse por tener un estilo de vida según la nueva vida enCristo, sino que debe actuar como portavoz de este estilo.(Papel paradigmático de la iglesia, con toda la ambigüedadde estar conformada por pecadores, pero con toda lasantidad de la presencia de la gracia del Cristocrucificado-resucitado que intercede en medio de ella).

La asamblea de Jerusalén, (Hechos 15), nos invita adiscernir que elementos de una cultura podemos incorporar yque elementos de esta debemos descartar que no son fieles ala palabra de Dios. Así será necesario apelar a un lenguajecomprensible que nos permita ser entendidos por la gente denuestras culturas, pero sin dejar de cuestionar costumbresy prácticas de esa cultura reñida con el evangelio:pretensiones absolutistas de los poderes de este mundo,idolatrías, racismo, exclusiones, machismo, feminismo,nepotismo, xenofobia, autoritarismos o el sometimiento a la

utopía del mercado16… ya sea cuando se instalan en laiglesia o cuando abundan en la sociedad.

Por lo dicho anteriormente la iglesia en el contextoparticular donde desarrolle su misión estará siempredesafiada a realizar una función profética, crítica yterapéutica: conteniendo y sosteniendo a las personas ycomunidades en tiempos de crisis, capacitándolas en elconocimiento del evangelio a los fines de descolonizar susubjetividad, intentando afirmarlas en una instanciacrítica que denuncie la maldad delorden imperante y desafiándolas a vivir en la santidadpersonal y social a la cual nos invita el Reino de Dios.

Nestor Miguez, en el Imperio y la Cruz describe muy biencomo la cultura imperial globalizada procura conquistar elnúcleo motor de la conducta humana, el deseo, porque comohemos dicho el resultado último de la subjetivizaciónglobalizada no es que desaparezca la “realidad objetiva”,sino que desaparezca nuestra subjetividad misma, mientrasla realidad social continúa su camino. También nos muestraque es necesario construir el sujeto “desimperializado”como una nueva creación en Cristo donde el deseo se haceresponsable y libre en relación con el otro. (Gal 5:13-15).

(…)“El sujeto deja de ser sujeto que desea libremente, sino que su deseo esguiado compulsivamente por el deseo del otro, del otro poderoso. Por lo tantopierde la condición de sujeto libre y responsable, para quedar como el sujeto aldeseo, y por lo tanto, cautivo y aislado, individualizado. La alienación del deseoen la sociedad de consumo reemplaza a la alienación de los cuerpos en elesclavismo romano y la alienación del trabajo en la sociedad del capitalismo deproducción. Ya no es solo el “trabajador alienado”, sino que ahora es el“consumidor alienado”, es decir, sujeto del deseo del otro. Eso produce ladestrucción del sujeto en tanto sujeto. Aquellas teorías posmodernas ydeconstructivistas, que se venden como “políticamente progresistas” y que seplantean la desaparición del sujeto, no hacen sino consagrar la aspiración

16 (Los especialistas en la cultura del consumo saben que lo más importante no son las características del producto, sino la capacidad de comunicar sentidos, sueños y esperanzas unido a losproductos que se van a consumir. Ellos saben que tener sueños y esperanzas son necesidades vitales de las personas. El neoliberalismo no solo ofrece sus sueños y esperanzas, sino que difunde su propia utopía: un mundo dominado por la lógica del mercado).

imperial. Como dice Ferry Eagleton, siendo públicamente contestatariasterminan siendo económicamente cómplices”.(…) (…)“La critica al Imperio pasa por la formulación de un proyecto de identidadhumana que sea capaz de incorporar la experiencia de la cruz comoexperiencia constructiva, de emancipación del deseo de su cautividad imperial,para hacerse deseo con el otro, expresión de libertad y amor. La identidad,historia y proyecto recupera este mensaje de la Cruz, no para quedarseadorando al crucificado, sino para aprender el proyecto humano que lo alentóa afrontar la cruz como obediencia y cuya validez se confirma en el anuncio dela resurrección, anuncio de la esperanza de esa nueva forma de relaciónhumano-divina que llamamos “Reino de Dios”(…). 17

Por supuesto que no estamos haciendo de la ideologíaneoliberal y sus representantes y del fenómeno de laglobalización en su faz negativa, el chivo expiatorio delorigen de todos los males de la humanidad. Somos concientesque la debilidad de la condición humana es parte de su serlimitado y pecador. Lo que hemos estado planteando es queel neoliberalismo y la globalización en su conformaciónnegativa, han aumentado la exclusión y por ende elsufrimiento de la humanidad, han creado una nueva forma deesclavitud a través de la colonización de la subjetividad yhan incrementado de manera alarmante el peligro de ladestrucción ecológica en nuestro mundo. Como, así también,han contribuido a crear en la mayoría de los cristianos unavivencia de la fe individualista, conformista, idolátrica ycómplice con el Imperio presente.

Solo en Dios Trino se puede vencer la cautividad del deseopara hacerse deseo libre y construir un subjetividaddescolonizada. Es en la experiencia radical de laconversión, como llamado de Dios y en el proceso deperfección cristiana o santidad en comunidad, que nos llevatoda la vida, donde el sujeto se desvictimiza resistiendo ala colonización de su deseo, de sus esperanzas y sueños alos fines de mantener renovadas sus estructuras mentales yemocionales. Para de esta forma vivir su fe y amor según elsentir y la mente del Cristo crucificado y resucitado enuna comunidad solidaria en nuestro planeta globalizado.

17 Nestor Miguez, en el Imperio y la Cruz , Ponencia en el IIIEncuentro Latinoamericano de Estudios Wesleyanos, San Bernardo,Brasil, Octubre 2003

La necesidad de una renovación en nuestras congregaciones

Hoy en día muchas de nuestras congregaciones reflejan unanecesidad de renovación profunda en su vida y misión. Estanecesidad de renovación se pone en evidencia en la falta derecursos éticos teológicos y en la inconsecuencia de suactuar. Sabe que no está llamada a vivir para si, sino paraaquel que dio su vida en compromiso con los que sufren, sinembargo se preocupa más por el cuidado de sus templos y elmantenimiento del programa de la denominación que por lamisión evangelizadora y por servir a los hermanitos máspequeños, (debilidad solidaria ante el sufrimiento de losexcluidos, Mt. 25). Está conciente de su responsabilidadineludible como agente de justicia, (denunciar las alianzasde las oligarquías políticas con los capitalestransnacionales, los atropellos del poder judicial, lasguerras genocidas, la corrupción pública, la represiónpolítica, la deshumanización tecnológica, la contaminaciónambiental, la discriminación étnica, etc), pero su misiónha enflaquecido, no es levadura en medio de la masa, y porlo tanto su rol profético no es eficaz en la sociedad.Prefiere no inmutarse antes de correr el riesgo de sercuestionada y perseguida como lo fue su Señor Jesucristo. No ignora el imperativo bíblico del amor y la unidad. Peroprefiere mezclarse en luchas sectarias, hijas de lasoberbia humana, que traen división, evidenciando en suseno incredulidad, sufrimiento, desesperación ydecrecimiento.

En el caso de nuestras denominaciones hay una profundacrisis de identidad con respecto al legado de Cristo, alextremo de haber perdido la centralidad de la misiónevangelizadora.Estos últimos ejemplos que hemos compartido nos muestranclaramente la precariedad de la condición de nuestrosministerios y la necesidad de desafiar a las iglesias avivir una renovación profunda.Para Pablo, la nueva vida en Cristo se destacaba por supoder de renovación. De ahí su enfática exhortación a loscreyentes:“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por mediode la renovación de vuestro entendimiento, para quecomprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable yperfecta” (Ro. 12:2)

En uno de sus tantos viajes misioneros, después de haberpredicado, Wesley escribió en su diario:“Quede más convencido que nunca que predicar como un apóstol, sin juntar alos que sean despertados y adiestrarlos en los caminos de Dios, es soloprocrear niños para el asesino. ¡Cuánta predicación se ha hecho en estos veinteaños en todo Pembrokeshire! Mas no hay sociedades regulares, no haydisciplina, no hay orden o conexión. Y la consecuencia es que nueve de diez delos que fueron despertados están ahora más dormidos que antes”18

Wesley era conciente que la renovación que la iglesiaexperimentaba por su ministerio “era la obra entera deDios” por su Espíritu que “sopla de donde quiere”. Perodescubrió que la vida en comunidad era la forma de aguardar esarenovación que traía Dios.Wesley nos provee un valioso instrumento de renovación dela iglesia en su concepción práctica de la “ecclesiola”.Toda la organización del movimiento metodista ensociedades, bandas y clases unidas en una red conexional,que los Wesley construyeron, era una red interconectadadonde los “convertidos”( los justificados) recibíaneducación en la fe, consejo, ayuda, sostén económico,piedad comunitaria, discernimiento como fruto del amor, unaformación ética plasmada en su experiencia cotidiana,( santidad personal y social, (renovarse en la imagen deDios)…que en manos del Espíritu Santo funcionaban comolevadura en la renovación de la iglesia y de la sociedad. El movimiento metodista supo sintetizar los elementosobjetivos de la herencia protestante, (Palabra, sacramentosy orden), con los subjetivos de la herencia pietista, (laexperiencia, la santidad interior, la oración espontánea,la comunión fraternal, el servicio), en el contexto de unapasión evangelizadora y misionera. Estos grupos no solofueron el lugar donde se revitalizó y reformó la iglesia,se dio el crecimiento del cristiano, sino que fue tambiénel lugar de frontera donde se expandió la misiónevangelizadora del metodismo y el movimiento de santidad. Apartir de esta experiencia histórica del metodismo podemos reafirmar que misiónevangelizadora y renovación son inseparables de la vida dela Iglesia.

18 Obras de Wesley, Diarios, Tomo II, Editor General Justo l. Gonzalez pag 159-160

Esta experiencia nos recuerda los primeros tiempos de laiglesia primitiva donde había esta práctica la cual lahacía atractiva y eficaz en su misión evangelizadora, cuyaconsecuencia era el crecimiento.Creo que el metodismo entendió su eclesiología en funciónde la misión, por eso sostenemos desde nuestraperspectiva, que si una iglesia descuida o pierde su misióny dentro de ella la evangelización deja de ser iglesia. Estoy convencido que nuestro mundo globalizado necesita másque nunca de que la iglesia vuelva a ser iglesia, por lotanto la iglesia debe renovarse para poder dar las respuestas y el servicio que nuestro mundo globalizadodemanda. Doy por hecho que la misión evangelizadora es unanecesidad apremiante en nuestras iglesias. En mi opinión estamos desafiados como denominaciones aresponder a los problemas actuales de la evangelización, noapartándonos de ella, sino más bien redimiéndola yrestaurándola a una posición de prioridad dentro delministerio total de la iglesia.En la práctica esto implica que la evangelización abarcauna variedad de acciones que se mantienen unidas por laintención de iniciar a las personas en el Reino de Dios,Reino de amor y de justicia. En esta tarea de lapredicación evangelizadora los ministros tenemos una de lasresponsabilidades cruciales para hacerla efectiva. Hoy endía debemos desarrollar el arte de relacionar el evangeliocon los temas centrales de nuestra predicación y con larealidad de nuestro mundo circundante. Cada vez que se haceun mensaje, este debe tener incorporado un toqueevangélico. Combinar esto es difícil, es todo un arte,máxime si tenemos presente el contexto histórico y socialglobalizados. Pienso que las iglesias tienen un potencial tremendo eneste ministerio. Pero la renovación que se necesita en estaárea no ocurrirá por casualidad o accidente, necesitará deun impulso intencional durante una generación completa. También nos demandará no solo creatividad e innovación enla práctica, sino una renovación teológica en nuestra formade pensar y hacer teología.Creo que debemos recuperar la herencia cristiana de unirconocimiento a la piedad de vida, donde el Padre,Jesucristo y el Espíritu Santo tienen un papel protagónicoen la evangelización. Soy un convencido que la iglesiastienen recursos sorprendentes, que si son puestos al

servicio del Dios Trino, podrían hacer un aporteextraordinario a la evangelización del futuro, a la missioDei.De lo contrario seguiremos bajo el juicio de Dios queseguirá permitiendo que impere el miedo a crecer y suefecto nefasto: el decrecimiento hasta ser una minoría queno tenga poder de levadura en la sociedad.Pero si nos replanteamos con sinceridad el tema de “lanecesidad de evangelizar hoy” como actividad prioritaria,estoy convencido que el pesimismo es imposible.

Mi intuición es que la iglesias tienen un potencialtremendo, si se “despiertan”, si se “entusiasman” para seruna fuerza vital en la evangelización con crecimientodesde la Iglesia local y en los diversos ministerios en losaños venideros.

Si estoy en lo cierto, entonces, este es el momento detener sueños y cultivar una visión fresca. No es tiempo deser cínico, ni de desanimarse, ni tampoco el momento demirar hacia atrás con nostalgia.El tiempo corre, no podemos permitirnos otra generación sinactuar. La evangelización requerirá de nosotros un trabajoarduo en múltiples áreas. Tomarlo con la seriedad que semerece puede significar una revolución para muchos denosotros: pastores y líderes laicos, fieles; ya queimplicará una renovación intelectual y teológica en toda laiglesia y significará una lucha espiritual que nos agitaráhasta las bases. Este es el momento de avanzar hacia elfuturo en arrepentimiento y solicitar que el poder delEspíritu Santo caiga sobre nosotros de nuevo y renuevenuestra visión misionera evangelizadora llenándola deentusiasmo”.19

Ponencia presentada en: The Twelfth Oxford Institue 2007England “To Serve the present age, our calling to fulfill”Group Misión and Evangelism

19 Para profundizar el tema de la evangelización: Williams J. Abraham, El arte de la Evangelización, ed Clie, Barcelona, España, 1993