Análisis del Ciclo Económico Mexicano en Base a la Curva de Phillips; 2000-2014
Transcript of Análisis del Ciclo Económico Mexicano en Base a la Curva de Phillips; 2000-2014
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES ACATLÁN
DIVISIÓN DE CIENCIAS SOCIOECONÓMICAS PROGRAMA DE ECONOMÍA
Análisis del Ciclo Económico Mexicano en
Base a la Curva de Phillips; 2000-2014
Gabriel Himelfarb Mustri
ABSTRACT
Este trabajo de investigación expone un acercamiento teórico y empírico sobre el ciclo económico
mexicano en base a la Curva de Phillips, mediante un marco teórico que justifica el planteamiento
de la NAIRU y dos modelos econométricos que muestran la relación entre la inflación y el
desempleo así como una estimación de la NAIRU del 2000 al 2014. Así mismo se presenta un breve
análisis impulso respuesta que permite observar la relación tanto del proceso inflacionario
mexicano y el desempleo con el comportamiento del reloj cíclico publicado por el INEGI.
The following paper exposes a theoretical and empirical approach to the Mexican Economic cycle,
based on the Phillip´s Curve, under first a theoretical intercourse that justifies the NAIRU exposure
and two econometric models that describe the relationship between inflation and unemployment,
including an NAIRU estimation from 2000 to 2014. Also in this paper, an impulse-response is
exposed in orther to observe the relation of causality that the inflation and unemployment have to
the economic cycle clock published by the INEGI.
Keywords: Inflación, desempleo, NAIRU, Expectativas Racionales, Ciclo Económico, Curva de
Phillips, Política Monetaria, Macroeconomía, Estabilidad de Precios, monetarismo, Banco Central,
Econometría, Series de Tiempo, Teoría Monetaria Metas Inflacionarias.
Introducción
Las fluctuaciones del ciclo económico han sido una gran fuente de investigación dentro de
las distintas escuelas económicas, donde se ha mostrado el ímpetu de los economistas
teóricos por analizar las variables que someten al comportamiento cíclico a diversas
fluctuaciones bajo el esquema de distintas corrientes de política económica. La teoría
monetaria así como la política monetaria, han mostrado una causalidad directa en las
fluctuaciones y el análisis del comportamiento de los ciclos económicos, más preciso aún,
las variables que muestran los grandes agregados económicos desde la visión monetaria
de México nos dan una pauta para la investigación del ciclo económico Mexicano como
una variable del tipo de series de tiempo. Tanto la inflación como el desempleo, son dos
grandes agregados económicos que han intervenido en la fluctuación cíclica de la
economía Mexicana, donde bajo el esquema teórico de la curva de Phillips han mostrado
una intensa causalidad de las fluctuaciones cíclicas en México. Por su parte, la curva
NAIRU es un punto de partida para el análisis del comportamiento del ciclo económico
que en forma más directa nos permite observar en distintas etapas y fluctuaciones tanto
el desempeño de la economía mexicana así como la política que se ha tomado en función
de las fluctuaciones cíclicas, siendo esta la tasa natural de desempleo. La curva de Phillips
como tal, nos muestra la relación económica de las variables inflación y desempleo, que
dependiendo de cada etapa del ciclo, dichas variables e han movido y ajustado a la
situación tanto económica como política de México, así mismo, la NAIRU nos permite
observar la decisión de política pública que la Banca Central y las autoridades económicas
han tomado a manera de tratar de suavizar los choques económicos del ciclo mexicano.
Por una parte podemos observar mediante el ajuste de una recta entre inflación y
desempleo, el comportamiento del mercado laboral, permitiéndonos tener una visión más
objetiva sobre el desempeño de la economía real de México. Así mismo, por otra parte, el
comportamiento de la inflación nos permite dar pie a un análisis crítico de la cuestión
financiera y su relación con la economía mexicana, dando pie a un análisis teórico y
empírico que incorpora tanto la parte real de la economía, como la parte financiera y la
evolución de ambas a través del horizonte temporal del 2000 al 2014, pasando por
diversos choques tanto internos como externos. Tanto la causalidad del sector externo en
materia de balanza comercial así como la deuda y el reajuste de esta misma bajo un
cambio estructural en el modelo económico y monetario basado en el nuevo consenso
macroeconómico, y la formación de la autonomía del Banco Central Mexicano o el Banco
de México y su adopción del modelo de metas inflacionarias y expectativas racionales. La
claridad que estas variables (Inflación y Desempleo) nos muestran las condiciones en las
que la economía mexicana ha tenido que ajustar su política económica, donde la visión
crítica o el punto de análisis recaen de nuevo sobre la NAIRU. En sí, la complejidad de la
economía mexicana ha mostrado una fuerte dependencia tanto al sector real y al sector
financiero así como a las presiones internacionales y a los choques externos, por lo que la
decisión de política incurre en un carácter de alto criterio en base a las variables de
inflación y desempleo por lo que de nuevo nuestro análisis recae sobre la propia Curva de
Phillips y su comportamiento comparativo con el PIB.
La investigación económica sobre la fluctuación y comportamiento del ciclo económico en
México se ha visto muy nutrida por las diversas investigaciones y métodos utilizados. Sin
embargo, la medición macroeconómica del ciclo económico de México se ha centrado
principalmente en el análisis y estudio del PIB real, mostrando un riguroso esfuerzo por
concretar y observar las fluctuaciones cíclicas. El uso del PIB real como un instrumento de
medición ha mostrado a manera muy general el comportamiento del ciclo a través del
tiempo, pero carece de un análisis y un nivel de abstracción más profundo que enfatice en
si las variables macroeconómicas que ocasionan las fluctuaciones del PIB de manera
endógena. La propia teoría de los ciclos económicos planteadas bajo la escuela de la
Economía Política Ortodoxa, mantiene una riqueza teórica bajo un nivel de abstracción
que va de lo general a lo particular, es decir, expone las causas estilizadas y concretas a
manera teórica sobre las fluctuaciones del ciclo económico llegando así de las variables
particulares hacia el análisis del comportamiento general, evitando el sesgo y la perdida
de información en el proceso de abstracción.
El objetivo de este trabajo se basa en el estudio de las fluctuaciones y comportamiento del
ciclo económico mexicano a manera de análisis estadístico y econométrico, basado en dos
variables macroeconómicas; inflación y desempleo, formando como tal la Curva de
Phillips. Con ello se plantea utilizar la NAIRU como un punto crítico de observación y
análisis, es decir un punto de partida para observar y analizar la convergencia y el efecto
que dichas variables tienen sobre el ciclo económico. Debido a la dinamización de dichas
variables, es posible observar las distintas fases del ciclo basándonos en el
comportamiento de la inflación y el desempleo, tomando como punto de partida la curva
NAIRU en sus distintas fases históricas desde el año 2000 hasta el 2014. En sí, el trabajo
presenta una metodología de investigación empírica que muestra bajo esquemas y
métodos econométricos la relación entre la causalidad del ciclo económico y las variables
inflación y desempleo dado que las variaciones y comportamientos de dichas variables
muestran fuertemente una expresión de cada fase del ciclo económico de México. Que en
sí, de manera teórica, diversos autores como Keynes, Roberts, Hansen, Mitchell, Kautsky,
Lucas, etc. Han manifestado una abstracción de la causalidad de las fluctuaciones de los
ciclos económicos, por lo que a manera empírica, en este trabajo se trata de dar un
acercamiento al análisis teórico derivado de diversos autores que tratan de exponer la
coyuntura del estudio del ciclo económico, dando aquí una muestra aplicada al caso
mexicano.
Como tal el análisis del ciclo económico se puede plantear de una manera distinta a la
propia superficialidad del estudio del PIB real como una serie de tiempo. Sino que este
trabajo se centra en observar las causas macroeconómicas y endógenas del sistema que
ocasionan las fluctuaciones del ciclo económico, en base a las variables inflación y
desempleo, que en conjunto nos conforman un argumento teórico conocido como la
Curva de Phillips. De igual modo el punto de partida para analizar las oscilaciones cíclicas
de la economía, es el NAIRU como un punto crítico que según cada oscilación del ciclo.
Utilizando varias técnicas y modelos econométricos, es posible determinar así como
analizar el comportamiento y las distintas fases del ciclo económico en México.
La inflación y la tasa de desempleo son causas y efectos de las oscilaciones cíclicas de la
economía bajo el esquema teórico, dado que dichas variables denotan según su momento
las distintas fases del ciclo económico, mostrando así en conjunto con el carácter histórico
de la economía mexicana la contraposición de ambas variables macroeconómicas
conjunto al desarrollo y comportamiento del ciclo económico para el caso mexicano.
En la primera parte de este trabajo se expone a manera teórica la perspectiva
macroeconómica Neoclásica y Ortodoxa sobre el comportamiento del proceso
inflacionario y su relevancia con el desempleo. Posteriormente se expone un
planteamiento teórico que justifica el análisis de la NAIRU como tasa natural de
desempleo y como variable de estudio para el ciclo económico. Así mismo, en el apartado
siguiente, se muestra una evidencia estadística sobre el comportamiento del proceso
inflacionario analizando el comportamiento del INPC y de la Tasa de Desempleo, ambos
desde el año 2000 hasta el 2014. Por último se da un análisis empírico mostrando
evidencia estadística y econometría sobre el comportamiento del INPC relacionado con el
desempleo, mediante primero un análisis estático que indica la relación de ambos y la
determinación del desempleo sobre el proceso inflacionario, y posteriormente se da un
análisis dinámico mediante el uso de la econometría de series de tiempo para poder
observar r el comportamiento del inflación y desempleo incorporando un horizonte
temporal y la variación evolutiva de ambas variables, para poder incorporar el impacto de
las expectativas racionales sobre el comportamiento de las variables estudiadas, así
mismo se incluye un análisis impulso-respuesta donde se busca ver los efectos de ambas
variables bajo distintas líneas de causalidad.
Marco Teórico; La Curva de Phillips; Perspectiva Ortodoxa y Neo-
Keynesiana
Comúnmente, las series de tiempo que nos permiten analizar la perspectiva teórica sobre
el comportamiento de los ciclos económicos, fluctúan en torno a una tendencia temporal,
comúnmente creciente a largo plazo debido al desarrollo de las fuerzas productivas, lo
que nos permite establecer que no existe dentro de las fluctuaciones económicas, un
estado estacionario. La teoría convencional del crecimiento, nos plantea que la propia tasa
de crecimiento decrece con el tiempo en un horizonte temporal de largo plazo, teniendo
una relación capital trabajo inferior al nivel del supuesto estado estacionario, aunque por
otra parte, las teorías de crecimiento endógeno nos sugieren que la tasa de progreso
técnico puede variar con la actividad innovadora endógena de las empresas (Birch, Peter
Sorensen. 2009: 10). Siendo así, pues, la propia innovación empresarial así como otros
factores incluyentes en la fluctuaciones económicas pueden generar tanto una atracción o
repulsión de fuerza de trabajo, generando así un aumento o disminución del consumo y la
inversión, lo que nos da distintas fluctuaciones en corto y largo plazo de los ciclos
económicos. Por otra parte, las variables del tipo monetarias representan también un alto
grado de influencia sobre el comportamiento general de la economía, siendo pues la
inflación una de las variables más impactantes e influentes en las oscilaciones cícilas.
Después de la segunda guerra mundial, los economistas llegaron a una concepción donde
sí se deseaba lograr una menor inflación, se tendría que aceptar un desempleo
permanente, y viceversa. La noción de la relación entre inflación y desempleo fue
planteada por A. W. Phillips en 1958, donde según evidencia estadística, dio a conocer la
relación inversa entre inflación y desempleo, dos variables mutuamente excluyentes
durante las distintas fases del ciclo económico. Donde según la ortodoxia, en periodos de
auge, la inflación está presente por lo que según el enfoque monetarista, se debe
controlar la oferta monetaria mediante la tasa de interés como ancla de control
monetario para prevenir los choques inflacionarios, mientras que por otra parte, la
corriente heterodoxa plantea que durante periodos de auge se debe de aplicar una
política fiscal contractiva que reduzca el gasto o aumente los impuestos con el fin de
contraer a un nivel óptimo la demanda agregada con el fin de prevenir choques
inflacionarios. Así mismo, la controversia entre las escuelas heterodoxa y ortodoxa
también presenta un choque teórico en las fases de depresión. Por una parte, la ortodoxia
plantea una expansión monetaria que permita un aumento de la masa monetaria que a su
vez genere un incremento en la inversión y en la ocupación, mientras que la heterodoxia
se enfoca más en una expansión fiscal mediante aumento del gasto yo reducción de
impuestos.
Ahora bien, ¿Qué relación existe entre las variables involucradas en la Curva de Phillips y
el Ciclo económico? Si partimos de un contexto histórico, la crisis del Petróleo en la
década de los 70, se vio caracterizada por un fenómeno que incluyo tanto inflación y
desempleo, bajo el mismo margen de ocurrencia. Como tal, la coexistencia de inflación y
desempleo puso fin al paradigma Keynesiano, el cual no se concebía bajo un contexto de
estanflación (Alonso Neira, Miguel A. Bagus, Philip. Rallo Julián, Juan Ramón. 2011: 77). La
concepción monetarista centrada bajo la conducción de Friedman (1968), conforme al
comportamiento de la Curva de Phillips y el manejo del paro, se centraron en dos puntos
importantes; en primer lugar, la propia expansión monetaria es la influencia directa sobre
la actividad económica real a corto plazo, pero a su vez, a largo plazo, la propia producción
real y el empleo terminan por regresar a sus niveles naturales que en sí, son únicamente
afectados a largo plazo por factores reales. Por otra parte, Friedman asume que es en sí, el
factor dinero lo que genera las oscilaciones a corto y largo plazo de la producción y
empleo convergiendo y divergiendo entorno a sus valores naturales (Ídem. 2011: 78),
siendo pues, tanto la inflación como el desempleo, causantes directos de las oscilaciones
del ciclo económico entorno a su producto potencial, así mismo, las variaciones en dichas
variables son claramente congruentes a las fases del ciclo económico.
Siguiendo pues la línea de causalidad del análisis de la Curva de Phillips y el ciclo
económico, los cambios en las tasas salariales se vinculan en sí, con la tasa de inflación así
como en los cambios del PIB real. Por otra parte. Robert Lucas (1976) planteo un enfoque
innovador al análisis de Phillips con respecto al crecimiento económico bajo el esquema
de inflación y desempleo. En sí, Lucas identifico el movimiento del ciclo económico en
movimientos cointegrados mediante la producción, los precios, la tasa de interés a corto
plazo, la oferta monetaria, la velocidad del dinero, la demanda efectiva y los beneficios y
expectativas de las empresas. Según el planteamiento de Lucas, una economía en la que
existen alteraciones en los niveles de precios, más en específico, una subida general del
nivel de precios, los agentes que componen la economía observaran el fenómeno del alza
de precios. Por un lado, los agentes pueden percibir dicho cambio de manera específica
sobre un bien, lo interpretaran como un cambio relativo y transitorio, haciendo que
aumente durante es periodo la jornada laboral en dicho momento haciendo que aumente
la cantidad de producto disponible. Por otro lado, existe la situación donde el cambio
específico en el nivel de precios se percibe como un efecto permanente, lo que generará
por una parte una variación minima en el trabajo de forma decreciente y a su vez un
aumento de la inversión. En sí, la elevación general de los precios genera movimientos
conjuntos en los movimientos de los precios, los salarios, producción e inversión, donde el
resto del ciclo económico se produce a partir de estos movimientos. En sí, la fase de
expansión cíclica, según Lucas, se originó por un incremento general en los precios que los
productores percibieron como específicos, sin embargo, cuando los productores se dan
cuenta que el alza de precios se dio por un alza generalizada y no por un incremento en la
demanda, concientizan que han invertido y producido una cantidad excesiva y por tanto,
comienzan a contraer la producción y a reducir la inversión, con el fin de situar de nuevo
su stock de capital y mercancías en inversiones más rentables o en un proceso de
acumulación y capital ocioso. Esto a su vez, causa la caída en la producción y en la
inversión, donde al disminuir la demanda, también se reducirán los precios, causando así
la fase descendiente del ciclo como una evolución del modelo (McCandless, George. T. Jr.
1993: 180-182).
El trabajo de Phillips desde mucho antes que la innovación teórica de Lucas, presentó un
enfoque orillado a la corriente keynesiana acerca del efecto estabilizador y estimulante de
la política monetaria anti cíclica, donde se planteaba su propio efecto a largo plazo. Sin
embargo, uno de los procesos que se opusieron a la hipótesis de Phillips, fue el
surgimiento de la estanflación que rompió con el trade off entre inflación y desempleo
(Raiver, Adrián. 2010: 3-4). Por tanto, regresando a la visión de los nuevos monetaristas,
se concluyó que la curva de Phillips bajo supuestos keynesianos solo se cumplía de forma
efectiva a corto plazo, siempre y cuando la tasa de inflación no sea en sí, anticipada por
los agentes económicos, dado que si este contexto se cumplía, la política monetaria
expansiva seria inefectiva debido a los efectos de las expectativas adaptativas, haciendo
pues que la Curva de Phillips llegase a un nivel vertical o más aun a un nivel natural de
desempleo (Ídem. 2010: 6), esto quiere decir que en el largo plazo, los agentes crearan
expectativas más acertadas sobre la inflación por lo que cualquier movimiento de la Curva
de Phillips no tendrá efecto alguno en el desempleo más que en una medida natural, salvo
que los agentes sean sorprendidos con choques inflacionarios inesperados o sorpresas
monetarias.
Por otra parte, este modelo no considera aun la participación o la injerencia que los
monopolios empresariales ejercen sobre el nivel de empleo ni los precios “viciosos”. Para
ello, en la década de los 80 como respuesta a la doctrina de pensamiento Neoclásica, más
en específico a la Nueva Macroeconomía Clásica o el Nuevo Monetarismo, surgió la Nueva
Economía Keynesiana como una respuesta al desajuste teórico que presentaba la teoría
de Lucas y Friedman. La Nueva Economía Keynesiana plantea entre otros modelos, una
nueva Curva de Phillips, que incorpora las rigideces de los precios y salarios al análisis de la
inflación y el desempleo. La Nueva Curva de Phillips y la especificación tradicional
destacan tres diferencias de suma importancia; En primer lugar, la Nueva Curva de
Phillips, el comportamiento empresarial de fijación de precios es producto de un proceso
de optimización de las empresas bajo competencia entre monopolios, las cuales están
sujetas a limitaciones en cuanto a la frecuencia con la que pueden ajustar su precio. En
segundo lugar, la especificación tradicional de la Curva de Phillips, la inflación se define
bajo el supuesto de que los agentes tienen expectativas adaptativas, mientras que en la
Nueva Curva de Phillips, los agentes mantienen expectativas racionales. Por último, en la
Nueva Curva de Phillips, el indicador óptimo de la actividad económica está representado
por los costos marginales reales (Ramos Francia, Manuel. Torres García, Alberto. 2006: 7),
esto se debe al resultado del proceso de optimización de las empresas monopólicas que
determinan sus precios. Por otra parte, la inflación dentro del contexto de la Nueva
Economía Keynesiana y bajo el marco analítico de la Nueva Curva de Phillips, la inflación
como tal, es función de dos factores; por una parte depende de la inflación esperada en el
próximo período, lo cual se basa en las expectativas racionales de los agentes, en segundo
lugar, se encuentra la brecha entre el nivel de precios optimo y el nivel de precios actual
(Liquitaya Briceño, José D. 2010: 11) lo que hace una referencia a la propia Regla de Taylor
, así mismo, otra vez podemos mencionar que la propia inflación depende en este caso del
costo marginal real. En sí, tanto la inflación y el desempleo fluctúan en base a las fases del
ciclo económico, por una parte, la brecha entre el nivel de precios optimo y el nivel
observado, se agudizará en un sentido u otro, según la fase del ciclo, siendo que al
encontrarse en auge, los precios observados son mayores que el nivel de precios optimo,
esto se debe a la presencia de inflación causada por el exceso de liquidez en el mercado y
los altos niveles de consumo. Por otra parte, durante la fase de crisis, el nivel de precios
observado cae por debajo del nivel óptimo de precios, esto se debe a una sobre oferta de
bienes y a una acumulación de inventarios lo que genera una crisis de realización y da pie
al inicio de una fase recesiva o depresiva de la economía. Así mismo, los costos marginales
reales nos exponen de cierta manera las expectativas de inversión, dado que a mayor
costo marginal, mayor será el costo de expandir la producción por lo que las expectativas
de inversión se verán afectadas. Según esta línea de análisis, podemos comparar la fase de
los ciclos económicos con el indicador de los costos marginales y las expectativas de
inversión. Por una parte, durante una fase de auge, los costos marginales se reducen
haciendo que exista de uno u otro modo, expectativas óptimas para incrementar la
inversión. Por otra parte, durante la fase de depresión, como ya se ha mencionado, los
costos marginales aumentan por lo que las expectativas empresariales para invertir y
expandir la capacidad instalada no son favorables ni atractivas. Estos dos argumentos se
cumplen siempre y cuando ya exista una capacidad instalada.
Tanto el desempleo y la inflación, son dos causas y consecuencias de las oscilaciones del
ciclo económico, por lo que el marco analítico de la Curva de Phillips, tanto en el esquema
tradicional como en el esquema Neo Keynesiano, dan pauta a la observancia y al análisis
del comportamiento del ciclo económico, por una parte, la inflación, como parte del
marco analítico de la Nueva Economía Keynesiana, y bajo el esquema de la Curva de
Phillips es posible analizar la importancia del componente retrospectivo backward-looking
frente al prospectivo (Ramos Francia, Manuel. Torres García, Alberto. 2006: 4), pudiendo
incorporar al análisis del ciclo económico, las expectativas de los agentes sobre la
estabilidad de precios. Por otra parte, el nivel de empleo indica tanto la expansión o
contracción de la inversión y del consumo, por lo que las variaciones y/o oscilaciones de
dichas variables siguen la misma dinámica que el comportamiento del ciclo económico,
por lo que en las secciones posteriores de este trabajo, se mostrará la relación entre la
inflación y el desempleo con las oscilaciones del ciclo económico de México.
La Curva NAIRU como Punto de Partida al Análisis del Ciclo
Económico
Antes de tratar de utilizar la curva NAIRU como punto de partida para la observación de
las oscilaciones del ciclo económico, primero se debe definir que es la NAIRU. Como tal, la
NAIRU (Non-acelerating inlfation rate of unemployment), es la tasa natural de desempleo
inelástica al cualquier cambio en la tasa de interés. La tasa natural de desempleo es la tasa
que prevalece cuando las expectativas de inflación han sido confirmadas por los agentes.
Esta tasa natural, no es inmutable, sino que puede presentar grandes variaciones a través
del tiempo, según la ciclicidad de la economía, esto es debido a que tanto la tasa natural
de desempleo y los choques de la oferta representan cambios en el trade-off entre la
inflación y el desempleo. En sí, la propia tasa natural de desempleo nos permite ver el
nivel de coincidencia entre la oferta de mano de obra y la disponibilidad de plazas
laborales (Ball, Laurence y Mankiw, Gregory N. 2002: 118), la cual va a moverse conforme
cambian las fases del ciclo económico. Sin embargo, una implicación de este análisis, es
que el valor de la NAIRU está muy ligado al tipo de régimen monetario. Si una economía
tiene una inflación muy parecida a un ruido blanco, las fasces del ciclo por tanto serian
completamente estocásticas, y basadas más en expectativas racionales de incertidumbre
radical, rompiendo el esquema de las expectativas adaptativas, así mismo se considera la
existencia de Histéresis¹ en el nivel de empleo, como causa de estancamiento económico.
La propia NAIRU es una herramienta tanto de análisis como de proyección. Cuando el
desempleo está por debajo de la NAIRU, se espera que la inflación se incremente, lo que
puede definirse de cierto modo como una fase de auge, siempre y cuando la inflación sea
causada por un incremento en el consumo y exceso de liquidez en el mercado, y no por
factores distintos a estos. Por otra parte, cuando la inflación está por encima de la NAIRU,
se espera que esta se reduzca (Ídem. 2002: 121), lo que puede dar paso a una fase de
crisis, siempre y cuando la reducción de los precios sea agresiva y causada por problemas
de realización de la producción así como acumulación de inventarios. Como tal, la NAIRU
nos permite el nivel natural de desempleo e inflación, por lo que en este trabajo la
tomaremos como un punto de partida para el análisis de las fases del ciclo económico. A
manera teórica, el movimiento rápido de las variables inflación y desempleo en distintos
momentos, así como su brecha con la NAIRU vertical, es un reflejo de la fase cíclica en la
que se encuentra la economía.
Inflación y Desempleo; El Caso Mexicano, Descomposición de la
Serie de Tiempo
La economía mexicana se ha caracterizado por un dinamismo macroeconómico que ha
sido influenciado por la política interna a lo largo del siglo XX y XXI. Los procesos
inflacionarios en México han sido característicos de crisis económicas que han reducido el
nivel de actividad económica, presentándose como momentos de estanflación, lo que de
una u otra manera ha llegado a romper los supuestos de la Curva de Phillips en el corto
plazo. Sin embargo, la cuestión de las expectativas ha ido muy ligada al ritmo de
crecimiento de la economía mexicana. Dado que los costos de la inflación pueden dividirse
entre aquellos que provienen de la inflación anticipada y aquellos que se originan por la
inflación no anticipada (Schwartz, Moisés J. Pérez López, Alejandro. 2000: 167), siendo
pues que las expectativas tanto adaptativas y racionales, han jugado un papel
fundamental en la inversión y con ello en las distintas fases del ciclo económico mexicano.
En la siguiente grafica podemos observar el comportamiento del ciclo económico en
ondas cortas de 3 a 5 años, partiendo del año 2000 al 2014;
Figura 1: Indicador del Ciclo Económico Según el INEGI
Elaboración propia en base a datos obtenidos del INEGI, Reloj de Ciclo Económico. Datos del 2000 al 2015
98
99
100
101
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013
En síntesis, podemos observar en la gráfica anterior el comportamiento de 3 ondas cortas
del ciclo económico mexicano. La primera va del 2000 al 2003, donde se muestra una
desaceleración económica, llegando a su punto más bajo en 2003. Así mismo a partir del
2003 hasta el 2008 se observa una recuperación de la economía mexicana. Por último, a
partir del 2008 se vuelve a presentar un des aceleramiento de la economía mexicana que
llega a su punto más bajo en 2009 y alcanza una recuperación lenta hasta 2012. La caída
en 2008 se observa de forma rápida, en un período de menos de un año, por otra parte su
recuperación se da sino hasta casi tres años después, hasta mediados del 2012, donde
nuevamente alcanza su auge y posteriormente se observa de nuevo otro declive, de
menor magnitud a la depresión o cresta del 2009.
Sin embargo, podemos comparar el movimiento cíclico de la economía mexicana con el
comportamiento de la inflación y el desempleo, en la gráfica siguiente se muestra de
manera conjunta el reloj de ciclo económico del INEGI conjunto al desempleo y al proceso
inflacionario (INPC).
Figura 2: Ciclo Económico, Inflación y Desempleo
Elaboración propia en base a datos obtenidos del INEGI y el Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
96
98
100
102
104
00 01 02 03 04 05 06 07 08 09 10 11 12 13
CIEC
2
3
4
5
6
7
00 01 02 03 04 05 06 07 08 09 10 11 12 13
40
60
80
100
120
00 01 02 03 04 05 06 07 08 09 10 11 12 13
Inflación
(INPC)
Desempleo
Podemos observar que en el periodo del 2000 al 2003, se cumplen las características de
una crisis. Dado que el desempleo mantiene un comportamiento o tendencia creciente al
mismo tiempo que la inflación también muestra una tendencia creciente. Así mismo, el
periodo de 2003 a 2008 muestra un desempleo estable o natural, pero aún se observan
choques inflacionarios. Sin embargo, para este periodo, el indicador de ciclos económicos
nos muestra una recuperación económica. Por último, en el periodo de 2008 a 2012, se
muestra claramente un alza significativa en el desempleo y un proceso inflacionario
continuamente creciente. Así mismo, el indicador del ciclo económico nos muestra de
nuevo una caída en la actividad económica, debido a los efectos absorbidos por la crisis de
2008 en E.U.A. lo que generó una contracción de la economía mexicana.
Por otra parte, si analizamos el comportamiento cíclico de la inflación y el desempleo,
mediante un filtro Hodrick-Prescot (HP), podemos observar las oscilaciones periódicas en
cada una de las variables.
Figura 3: Componentes Cíclicos del Desempleo
Elaboración propia en base a datos obtenidos del Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
Podemos observar que el desempleo se agudiza en 2002 y en el periodo de 2008-2010,
debido a la desaceleración económica causada primero por la crisis de las empresas dot
com, y en el segundo periodo, por la crisis de 2008 en E.U.A. El comportamiento del
desempleo tiene una periodicidad muy corta en comparación con su tendencia y
comportamiento a largo plazo. Así mismo, a manera general, el ciclo del desempleo
muestra una estacionariedad seria con picos estocásticos altos causados principalmente
por choques externos y cambios estructurales de política interna en México.
-1.5
-1.0
-0.5
0.0
0.5
1.0
1.5
2000 2002 2004 2006 2008 2010 2012
Figura 4: Tendencia y Ciclo del Desempleo (2000-2014)
Elaboración propia en base a datos obtenidos del Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
Al igual que la gráfica 3, la gráfica 4 muestra el alza del desempleo de manera cíclica
conforme la tendencia. Del año 2000 al año 2005, se observa una tendencia creciente del
desempleo causada por un alza del componente cíclico de la misma. Del mismo modo
para el año 2006 al 2008, el desempleo muestra picos alcistas que generan una tendencia
creciente en el desempleo para el mismo periodo. A sí mismo, el desempleo se estabiliza a
partir del 2012 pero no disminuye sino que se mantienen estables en un nivel alto. Esto
sugiere como causa la recesión continua de la economía mexicana que hasta hoy en día se
mantiene, con pequeñas disminuciones a partir del 2013.
Por otra parte, el comportamiento de la inflación en comparación al movimiento cíclico de
la economía mexicana muestra otro tipo de padecimientos.
Figura 5: Tendencia y Ciclo de la Inflación (2000-2014)
Elaboración propia en base a datos obtenidos del Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
-1.5
-1.0
-0.5
0.0
0.5
1.0
1.5
00 01 02 03 04 05 06 07 08 09 10 11 12 13
-1.2
-0.8
-0.4
0.0
0.4
0.8
1.2
1.6
00 01 02 03 04 05 06 07 08 09 10 11 12 13
El proceso inflacionario en México ha mostrado desde el año 2000 una tendencia
creciente. Aunque en el componente cíclico se muestran valles, la tendencia a largo plazo
es creciente, debido a que existe un proceso inflacionario creciente y continuo que ha sido
controlado por la Banca Central. Sin embargo, los picos más altos de inflación se observan
en los mismos periodos de altos márgenes de desempleo (Ver grafica 2 y 4). Siendo pues
la inflación otro componente que genera oscilaciones en el ciclo económico mexicano.
Por otra parte, tanto la Inflación como el desempleo presentan un componente
estacionario, Seasonality, conforme evoluciona la onda corta del ciclo económico
mexicano. Para el caso del desempleo, el componente estacional (Utilizando la
herramienta X12 Censos) a doce meses se muestra en la tabla siguiente;
Figura 6: Indicador Estacional del Desempleo
Índice de Factores Escalados
Mes Índice
1 0.982916
2 0.924001
3 0.948945
4 1.075603
5 1.072996
6 1.074806
7 1.031932
8 0.955724
9 0.879313
10 1.061252
11 1.044025
12 0.973494
Elaboración propia en base a datos del Banco de México, mediante el método de Media Móvil y X12 Census.
De la tabla anterior, podemos observar que en los meses que constatan el periodo medio
del año, Abril, Mayo, Junio y Julio, se muestra un aumento en el índice de desempleo,
debido a la contracción económica que presenta la economía mexicana, recuperándose
así hasta Agosto, donde comienzan a aumentar la producción para hacer frente a la
demanda de Diciembre, por lo que podemos intuir que existe un desempleo estacional y
crónico en períodos cortos según el calendario económico anual, lo cual nos sugiere la
presencia de ondas cortas menores a un año.
Para el caso de la inflación, el comportamiento es distinto, en la tabla siguiente se muestra
el índice de Factores Escalados para el INPC.
Figura 6: Indicador Estacional de la Inflación
Índice de Factores Escalados
Mes Índice
1 1.005366
2 1.004608
3 1.005573
4 1.003401
5 0.996957
6 0.994976
7 0.994339
8 0.994367
9 0.996779
10 0.998042
11 1.002101
12 1.003602
Elaboración propia en base a datos del Banco de México, mediante el método de Media Móvil y X12 Census.
Podemos observar de la tabla anterior, que el comportamiento del proceso inflacionario
muestra índices altos en los primeros meses del año, debido al comportamiento de las
expectativas adaptativas de los agentes, donde en enero se dan los incrementos salariales.
Sin embargo, tanto la inflación y el desempleo presentan choques externos que generan
irregularidades en el comportamiento de ambas variables.
Figura 7: Componentes Irregulares de la Inflación y el Desempleo
Elaboración propia en base a datos obtenidos del Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
0.994
0.996
0.998
1.000
1.002
1.004
00 02 04 06 08 10 12
INPC IR
0.8
0.9
1.0
1.1
1.2
1.3
00 02 04 06 08 10 12
Desempleo IR
De la gráfica anterior podemos observar para el caso de la inflacion, tres choques
prominentes (resaltados en gris), el primero correspondiente a finales del año 2000 y
principios del 2002. Este choque se debe a diversos factores; como el rezago del factor de
cambio estructural de la Banca Central o Banco de México de regimen cambiario y
monetario, adoptando el esquema del Nuevo Consenso Macroeconomico y el esquema de
Metas Inflacionarias. El segundo choque es el menos prominente de los tres resaltados,
Este parte de finales del 2004 a principios del 2006, este choque se debe principalmente a
un cambio estructural en la politica mexicana, siendo pues el final del sexenio de Vicente
Fox y el inicio de Felipe Claderon, aquí podemos incluir las preciones politicas como
contexto que desarmonizaron las espectativas de los inversionistas haciendo que aumente
la demanda de liquidez. Por ultimo, el tercer choque se observa desde finales de 2009 e
inicios del 2010, podemos asumir qu este choque inflacionario es concecuencia tanto del
rezago de la crisis ocurrida en E.U.A. en 2008 asi como la reaccion de la Banca Central
Mexicana ante la Crisis norteamericana, dond el Banco de Mexico, disminuyó la tasa de
interés.
Por parte del desempleo, los choques han sido mas suaves que en el caso del proceso
inflacionario, debido a que el aparato productivo mexicano ha estado estancado sin
cambios significativos mas que choques temporales y/o estacionales. El choque mas
prominente del desempleo se observa entre finales del año 2000 y mediados del año
2001. Este choque se debe a un cambio estructural en la politica mexicana debido al
cambio de regimen politico que se dio en el año 2000, lo cual la incertidumbre sobre el
nuevo régimen contrajo la ocupacion por un periodo breve. El comportamiento del
desempleo se ha mostrado mas estacionario que el comportamiento del proceso
inflacionario, donde el segundo ha mostrado choques estocasticos causados tanto por
externanlidades como por cambios estructurales y coyunturales. En si, podemos observar
que el desempleo no ha tenido choques irregulares constantes ni repetitivos por lo que
según indica su componente irregular, ha tenido variaciones minimas en base a choques
estocasticos y externalidades o fuerzas exogenas ajenas al comportamiento del sistema
economico mexicano.
Análisis Empírico Para el Caso Mexicano; 2000-2014
Metodología
La metodología utilizada para medir y analizar el comportamiento de las variables se
divide en dos análisis;
1. Análisis Estático: Este consiste en una comparación de las variables inflación y
desempleo mediante un modelo estático Log-Linear que nos permite ver la
asociación y la dependencia de ambas variables así como una estimación de un
modelo que nos permita analizar el comportamiento inflacionario y el desempleo
en México.
2. Análisis Dinámico: Este consiste en un modelo de series de tiempo que nos
permite generar una NAIRU en base a la descomposición del índice de desempleo,
utilizando su tendencia como desempleo potencial, o tasa natural (Loria, Eduardo,
Márquez, Juan Carlos y Ramírez, Jorge. 2008: 633). Y Por último, se incorpora un
análisis impulso respuesta para observar los efectos de la inflación y el desempleo.
Análisis Estático de La Curva de Phillips
Especificación del Modelo
Variables Utilizadas:
INPC logaritmizado, como la variable que define la inflación. Publicada por el Banco de
México
Desempleo, la tasa mensual de desempleo publicada por el INEGI.
Ambas variables son de carácter mensual, de enero del 2000 a mayo del 2014.
Análisis de Correlación
Las variables anteriores se encuentran bajo un coeficiente de correlación lineal de 0.8411,
en retrospectiva a una relación positiva entre ambas, siendo pues que el desempleo sigue
un crecimiento natural, al igual que el proceso inflacionario mexicano presenta un
crecimiento natural dentro de los objetivos fijados por el Banco de México, de 3.5 % (+/-
.5% de variación o bondad).
Figura 8: Matriz de Correlación y Diagrama de Dispreción
Elaboración propia en base a datos obtenidos del Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
Desempleo
Linpc
2 4 6
4
4.5
5
Matriz de Correlación entre Inflación y Desempleo
Parámetros del Modelo
INFLACION = 3.807 + 0.1525(Desempleo)
ee(0.0071885) ee(0.03033)
R2= 0.7247 R2-Ajustada=0.7131 F-Fisher=450.19
La constante al origen se denomina en este modelo como la tasa natural de inflación o la
meta inflacionaria del Banco de México (Previamente mencionada como 3.5%) donde en
este modelo presenta una desviación del objetivo de 0.3% ubicándose dentro del límite de
tolerancia establecido por el Banco De México.
Pruebas de Especificación
1. Normalidad (Variables y Residuales del Modelo)
Shapiro-Wilk SK-Test Jarque-Bera
LINPC 3.91 43.15 30.42
Desempleo 3.13 23.27 7.56
Residuales 0.74227 0.6881 0.86386022 ***Todas las variables se probaron a un nivel de 95% de confianza, los números resaltados en negrita dan prueba de que las
variables siguen una distribución normal.
2. Autocorrelación Serial (Residuales)
ARCH-LM CHI^2 Rezagos
Residuales 72.954 12 ** La Prueba ARCH-LM nos permite observar si existe Autocorrelación serial en los residuales del modelo, se realizó en un intervalo de
confianza del 95%, aceptando la Hipótesis nula que establece la no existencia de Autocorrelación Serial.
Durbin-Watson CHI^2 Rezagos
Residuales 457.252 12 ** La Prueba Alternativa Durbin-Watson (Durbin-Watson Alternative Test for Correlation) se realizó en un intervalo de confianza del
95%, aceptando la Hipótesis nula que establece la no existencia de Autocorrelación Serial.
3. Multicolinealidad/Velocidad de la Varianza
V. Explicativas VIF 1/VIF
Desempleo 1.00 1.0000
Media Total 1.00 **La velocidad de la varianza es menor a 7, así mismo la R2 es mayor a la R2-Ajustada, por lo tanto se puede asumir que el
modelo no presenta efectos de multicolinealidad por lo que los estimadores son MELI (BLUE).
4. Heterocedasticidad/Homosedasticidad (Residuales)
Breusch-Pagan CHI^2 Prob>CHI^2
Residuales 11.38 0.0007 **Según la Prueba Breusch-Pagan, el modelo no presenta una varianza homosedastica, la prueba se realizó con un 95% de confianza
Breusch-Godfrey CHI^2 df Prob>CHI^2
Residuales 122.258 12 0.000 **La prueba conjunta Breusch-Godfrey LM, nos indica que no existe homosedasticidad en la varianza del modelo. Esta Prueba se realizó
a un nivel de 95% de confianza.
Análisis Dinámico: Comportamiento de la NAIRU
Variables:
LINPC; va variable INPC logaritmizada.
LINPCt-1; Primer rezago del INPC logaritmizado, equivalente a la inercia del pasado de la
variable, lo que representa las expectativas adaptativas en la economía mexicana.
Ddes; Es el diferencial entre el desempleo observado y su tasa natural (NAIRU) o
tendencia filtrada con el filtro Hodrick-Presscott. (Desempleo-Tendencia del desempleo).
ɛ; Término de perturbación estocástico.
Modelo Teórico
INPC = ß0 + ß1 (INPCt-1) + ß2(Desempleo-Tendencia del desempleo)+ ɛt
NAIRU (INPC) = ß0 + ß1(INPCt-1) + ß2(Ddes) + ɛt
Dentro del modelo teórico podemos establecer a ß0 como la tasa natural de crecimiento
del proceso inflacionario mexicano, que en conjunto con el primer rezago del INPC, ß1,
representa la inercia del pasado sobre el comportamiento inflacionario y la formación de
expectativas de los agentes, es decir, el impacto de las expectativas racionales que tienen
los agentes tanto de la información pasada como del proceso racional de información que
influye en la formación de expectativas. ß2, por su parte representa la influencia directa
del desempleo sobre el proceso inflacionario, lo que retoma tanto la información y las
expectativas sobre el empleo como la realización de dichas expectativas de manera real,
es decir, la diferencia entre el valor observado y el pronosticado, donde dicha brecha
tendrá un impacto en el análisis de la efectividad de la política pública (principalmente la
política monetaria y la política fiscal) sobre el comportamiento del ciclo económico.
Modelo Estimado
INPC = 0.23771 + 0.9899(INPCt-1) – 0.1529(DINPC)
ee(0.13171) ee(0.001525) ee(0.04913)
R2= 0.997 R2-Ajustada= 0.985 AIC= -1467.749
Del modelo estimado podemos observar que el pasado o la formación de expectativas
tienen una influencia muy amplia en el proceso inflacionario, en forma muy directa y en
un plazo muy corto. Así mismo, la tasa de crecimiento de la inflación a largo plazo se ha
mantenido baja, es decir de 23% (0.23) a largo plazo, siendo menor al parámetro
considerado de alta pérdida de poder adquisitivo a largo plazo de 50% que establece el
Banco de México (Antonio Murillo, José y Sánchez-Romeu, Paola. 2012: 14). Por último, el
parámetro que indica la relación dependiente del proceso inflacionario, INPC con el
desempleo tiene un signo negativo, por lo que dicha relación inversa demuestra que la
Curva de Phillips si se cumple para el caso mexicano.
Figura 9: Comportamiento del Desempleo y su Tasa Natural (NAIRU)
Elaboración propia en base a datos obtenidos del Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
Podemos observar en la gráfica anterior que el desempleo tiene un comportamiento
oscilatorio sobre la tasa natural (NAIRU) sim embargo su tendencia se muestra hacia la
alza, siguiendo la dirección de la línea de tendencia de la tasa natural de desempleo
(NAIRU). Así mismo, podemos observar que del 2000 al 2009, el desempleo muestra un
bajo crecimiento a largo plazo, y a partir del 2009, da un salto creciente, debido a la
23
45
6
2000m1 2005m1 2010m1 2015m1t
NAIRU Desempleo
reducción de la actividad económica causada por los efectos de la crisis de E.U.A.,
principalmente debido a la disminución de las exportaciones mexicanas a E.U.A.
Figura 10: Desempleo Observado y Diferencial
Elaboración propia en base a datos obtenidos del Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
De igual modo, en la figura 10, se observa el comportamiento del desempleo a largo plazo
donde este muestra una tendencia creciente a largo plazo, teniendo un pico creciente a
finales del 2009 e inicios del 2010, donde posteriormente este se estabiliza a mediados del
2010 mostrando leves perturbaciones crecientes en su tendencia. Por otra parte, el
diferencial del desempleo sigue la misma tendencia que la variable original, mostrando
una variación a la alza en 2010.
Figura 11: LINPC y LINPC con NAIRU
Elaboración propia en base a datos obtenidos del Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
-20
24
6
2000m1 2005m1 2010m1 2015m1t
Diferencial (Des-Tendencia) Desempleo
44.
24.
44.
64.
8
2000m1 2005m1 2010m1 2015m1t
Modelo Estimado Tendencia del INPC (Logaritmizado)
Por último, en la figura 11, se observa que el comportamiento del modelo estimado es de
carácter oscilatorio sobre la tendencia a largo plazo del proceso inflacionario (INPC), con
mínimas perturbaciones oscilantes a la alza y a la baja, La tendencia del INPC mantiene un
crecimiento natural de 23% (0.23 de la constante al origen del modelo), y a su vez, el
movimiento oscilatorio es de carácter creciente siguiendo la tendencia natural del proceso
inflacionario
Pruebas de Especificación
1. Normalidad (Variables y Residuales del Modelo)
Shapiro-Wilk SK-Test Jarque-Bera
LINPC 0.00005 0.0000 9.7344
Ddes 0.00670 0.0113 10.7050
Y Estimada 0.00006 0.0000 9.6801
Residuales 0.17649 0.1692 3.0810 ***Todas las variables se probaron a un nivel de 95% de confianza, los números resaltados en negrita dan prueba de que las
variables siguen una distribución normal.
2. Autocorrelación Serial (Residuales)
ARCH-LM CHI^2 Rezagos
Residuales 0.359 12 ** La Prueba ARCH-LM nos permite observar si existe Autocorrelación serial en los residuales del modelo, se realizó en un intervalo de
confianza del 95%, rechazando la Hipótesis nula que establece la no existencia de Autocorrelación Serial, por lo que el rezago es
estadísticamente significativo.
Durbin-Watson CHI^2 Rezagos
Residuales 121.282 12 ** La Prueba Alternativa Durbin-Watson (Durbin-Watson Alternative Test for Correlation) se realizó en un intervalo de confianza del
95%, rechazando la Hipótesis nula que establece la no existencia de Autocorrelación Serial, , por lo que el rezago es estadísticamente
significativo.
3. Multicolinealidad/Velocidad de la Varianza
V. Explicativas VIF 1/VIF
DINPC 1.00 0.999448
INPCt-1 1.00 0.999448
Media Total 1.00 1.00 **La velocidad de la varianza es menor a 7, así mismo la R2 es mayor a la R2-Ajustada, por lo tanto se puede asumir que el
modelo no presenta efectos de multicolinealidad por lo que los estimadores son MELI (BLUE).
4. Heterocedasticidad/Homosedasticidad (Residuales)
Breusch-Pagan CHI^2 Prob>CHI^2
Residuales 3.21 0.00734 **Según la Prueba Breusch-Pagan, el modelo no presenta una varianza homosedastica, la prueba se realizó con un 95% de confianza
Breusch-Godfrey CHI^2 df Prob>CHI^2
Residuales 74.962 12 0.000 **La prueba conjunta Breusch-Godfrey LM, nos indica que no existe homosedasticidad en la varianza del modelo. Esta Prueba se realizó
a un nivel de 95% de confianza.
Análisis de Impulso-Respuesta
Figura 12: Respuestas del Reloj de Ciclo Económico al Desempleo y a la
Inflación
Elaboración propia en base a datos obtenidos del Banco de México. Datos del 2000 al 2014.
En la figura anterior podemos observar tres cuadros o tres gráficos, en el primero (De
izquierda a derecha) se muestra la respuesta del reloj del ciclo económico del INEGI al
desempleo. La respuesta se da de manera inmediata pero se degrada rápidamente, es
decir, cualquier variación del desempleo generara una respuesta inmediata pero a corto
plazo sobre el ciclo económico, la cual se degradará en un período breve, es decir, el
efecto se absorbe de manera rápida. El segundo cuadro muestra la respuesta del ciclo
económico con respecto a sí misma, es decir, sus valores rezagados, donde estos tienen
un impacto exponencial sobre el comportamiento de la variable, mostrando así el ímpetu
-.1
.0
.1
.2
.3
2 4 6 8 10 12
Response of CIEC to DES
-.1
.0
.1
.2
.3
2 4 6 8 10 12
Response of CIEC to CIEC
-.1
.0
.1
.2
.3
2 4 6 8 10 12
Response of CIEC to INPC
Response to Cholesky One S.D. Innovations ± 2 S.E.
de las expectativas racionales sobre las propias expectativas de los agentes sobre el
comportamiento de la economía. Cuando las expectativas llegan a un punto máximo de
crecimiento, se genera un declive o encorvamiento de la respuesta a sus rezagos. Por
último, el ciclo económico responde de manera creciente al proceso inflacionario de
manera retardada. Este crecimiento se puede atribuir al propio proceso de alza de precios
lo que da una “ilusión” monetaria del crecimiento del ingreso nominal, dado por la
inflación, aunque este se degrada cuando los agentes perciben el alza de los precios, por
lo que solo su ingreso nominal aumento, pero el real permaneció constante.
Conclusión
El ciclo económico mexicano es en sí una fuente de análisis para las variables
macroeconómicas, debido a la forma en la que estas determinan su comportamiento en
distintos horizontes temporales. La inflación por una parte representa las expectativas de
los inversionistas, las cuales dependen de la propia formación de estas en base a
información pasada y a un proceso racional (Lucas 1972), lo que determinará el monto de
inversión en el período siguiente, así como por parte del Banco Central, se determinarán
las decisiones de política monetaria pertinentes para suavizar las fluctuaciones cíclicas
ocasionadas por el sector financiero que se transmiten por el canal inflacionario hacia el
desempeño de la economía real. Por otra parte, el desempleo representa como tal el
sector real, en palabras más Keynesianas, este es el nivel de ocupación que determina el
consumo y con ello la inversión. Tanto la inflación como el desempleo son parte
fundamental del desempeño económico y la formación de expectativas, por lo que las
fluctuaciones cíclicas se ven afectadas por el movimiento de dichas variables, así como la
gravedad o suavidez del choque económico de cada fase del ciclo. Ambas variables
presentan una estrecha relación inversa lo que permite establecer que la Curva de Phillips
se cumple a largo plazo para el caso mexicano, debido a que en el corto plazo, existen
ciertas externalidades y cambios estructurales que modifican el comportamiento del ciclo
económico mexicano.
En sí, la economía mexicana es una economía mixta muy diversificada y muy orientada a
una alta dependencia del sector externo, tanto en materia de extracción de hidrocarburos
como en manufactura, por lo que mantener una buena estabilidad de precios, es una
cuestión primordial para el equilibrio y la estabilidad macroeconómica. Así mismo, en
cuestiones internas, el desempleo es una variable muy importante que se debe de regular
con el fin de mantener una producción continua satisfecha por un consumo óptimo,
aunque lejos del pleno empleo.
Por último, ambos modelos econométricos reflejan la relación del proceso inflacionario
mexicano con el desempleo, donde ambas contribuyen a la formación de expectativas lo
que es una cuestión clave en la determinación de las fases del ciclo económico mexicano.
Como tal, la inflación y el desempleo son dos determinantes macroeconómicos de las
fluctuaciones cíclicas, dado que estas variables muestran en conjunto el desempeño de la
economía real y la percepción de los agentes ante las fluctuaciones, dando pauta de
manera bilateral al comportamiento del ciclo económico mexicano.
Bibliografía
McCandless, George T. Jr. (1993). Teoría Macroeconómica. Prentice-Hall International (UK) Ltd. Hemel Hempstead, Hertfordshire, U.K.
Birch Sorensen, Peter y Jorgen Witta-Jacobsen, Hans (2009). Introducción a la Macroeconomía Avanzada. Vol. II: Ciclos Económicos. McGraw-Hill. Copenhague, Dinamarca.
Raiver, Adrián (2010). La Curva de Phillips de Pendiente Positiva y la Crisis de 2008. Revista Europea de Economía Política. Vol. VII, N°1, pp. 71-121, Madrid, España.
Schwartz, Moisés J. y Pérez López, Alejandro (2000). Crecimiento Económico e Inflación: El Caso de México. Working Papers en Economía Mexicana. Nueva Época, vol. IX, núm. 2, Banco de México, México D.F., pp. 165-188.
Ramos Francia, Manuel y Torres García, Alberto (2006). Dinámica de la Inflación en México: Una Caracterización Utilizando la Nueva Curva de Phillips. Working Papers, N°2006-15, Banco de México. México, D.F.
Ball, Laurence y Mankiw, Gregory N. (2002). The NAIRU in Theory and Practice. Journal of Economic Perspectives, Vol. XVI, N°4. Harvard University. Massachusetts, E.U.A., pp. 115-136.
Liquitaya Briseño, José D. (2010). La Curva de Phillips en la Nueva Economía Keynesiana: Una Revisión Crítica. Revista Nacional de Estudios Económicos, UAM Iztapalapa. Vol. V, N°2, México D.F., pp. 59-83.
Bardsen, Oyvind Eitrheim y Nymoen, Ragnar. (2005). The Econometrics of Macroeconomic Modelling. Oxford University Press. New York, U.S.A.
Antonio Murillo, José y Sánchez-Romeu, Paola. (2012). Evaluación del Poder de Predicción de las Expectativas de Inflación de los Consumidores en México. Working Papers, N° 2012-13, Banco de México, México, D.F.
Chiarella, Carl. Flaschel, Peter. Franke, Reiner y Semmler, Willi (2009). Financial Markets and the Macroeconomy. Routledge International Studies in Money and Banking. Routledge, Taylor & Francis Group. London U.K.
Krugman, Paul (2008). Economía Internacional. 9° edición. Maurice Obstfeld Editors. Barcelona, España.
Bårdsen, Gunnar. Eitrheim, Øyvind. Jansen, Eilev y Nymoen, Ragnar (2005). The Econometrics of Macroeconomic Modeling. Oxford University Press, Advanced Texts in Econometrics. Oxford, U.K.
Lucas, Robert Jr. (1972). Expectations and the Neutrality of Money. En Journal of
Economic Theory. Vol 4, N°2. Graduate School of Industrial Administration,
Carnegie-Mellon University, Pittsburg, Pennsylvania, U.S.A, pp. 103-124.
Datos: Base de Datos del Banco de México. Del 2000 al 2014 y Reloj de Ciclos Económicos,
INEGI del 2000 al 2014. www.banxico.org.mx; www.inegi.org.mx
Nota: La bibliografía se realizó en formato A.P.A. (American Psychological Association), en
base al manual 2009.