“Masonería e Islam: sus sistemas de valores y el caso de un
sirio que fue Gran Maestro de la Gran Logia de Costa Rica”
Ricardo Martínez Esquivel
Introducción
La masonería es un espacio de sociabilidad, que permite la interacción de
individuos con distintos orígenes fenotípicos y características étnicas. Blancos, negros,
chinos y semitas, entre tantos, así como cristianos “en cualquiera de sus versiones”,1
ateos, judíos, taoístas y musulmanes, entre los distintos adeptos a religiones o filosofías
de vida, se han relacionado en esta sociedad. Lo anterior a pesar, de que el cristianismo
en sus versiones: católica y pentecostal, así como el Islam mismo, condenan la
masonería. En el caso de Costa Rica, el carácter multicultural de la logia no ha sido la
excepción, ya que hemos identificado miembros con distintas características fenotípicas
y culturales a través de la historia de esta asociación.2 Sin embargo, uno de los casos
Esta investigación fue realizada en el curso “Islam y Política”, dirigido por el profesor Zidane Zeraoui,
en la Maestría Académica Centroamericana en Historia de la Universidad de Costa Rica, durante el II
Semestre del 2008. Por otra parte, agradezco los comentarios a la versión final de este trabajo, al profesor
Iván Pozuelo Andrés del IES Universidad Laboral de Gijón, España, sin embargo, el presente texto es
completa responsabilidad del autor.
Profesor de Historia e Investigador de la Universidad de Costa Rica. Director de REHMLAC, Revista
de Estudios Históricos de la Masonería Latinoamericana y Caribeña, ISSN: 1659-4223
(http://rehmlac.com/pags/inicio/inicio.php). Miembro del Centro Estudios Históricos de la Masonería
Española (CEHME) de la Universidad de Zaragoza, España. Correo electrónico:
1 Acerca de la condena de la Iglesia católica a la masonería, véase nuestro trabajo: “Documentos y
discursos católicos antimasónicos en Costa Rica (1865-1899)”, REHMLAC, Revista de Estudios
Históricos de la Masonería Latinoamericana y Caribeña (San José) 1, n. 1 (mayo-noviembre 2009): 135-
154. http://rehmlac.com/recursos/vols/v1/n1/rehmlac.vol1.n1-543rich.pdf. (Revisado el 3 de marzo del
2010). 2 Investigaciones sobre la diversidad cultural y fenotípica en las logias masónicas de Costa Rica, están en
nuestros trabajos: Composición socio-ocupacional de los masones del siglo XIX”, en Diálogos Revista
Electrónica de Historia, 8, n. 2 (agosto 2007-febrero 2008): 124-147.
www.fcs.ucr.ac.cr/~historia/articulos/2007/vol2/6vol8n2martinez.pdf. (Revisado el 3 de marzo del 2010);
y “Sociedades de ideas en Puerto Limón durante la década de 1890”, en Revista Intercambio. Revista
sobre Centroamérica y el Caribe (San José) 7 (2009): 157-186.
http://www.ciicla.ucr.ac.cr/revista_intercambio/006_007/007.pdf. (Revisado el 3 de marzo del 2010); así
como en el trabajo de Miguel Guzmán Stein, “La lapidaria fúnebre-masónica en Costa Rica como fuente
de investigación de una comunidad inédita”, REHMLAC, Revista de Estudios Históricos de la Masonería
Latinoamericana y Caribeña (San José) 1, n. 2 (diciembre 2009-abril 2010): 88-120.
más atípicos en el país ha sido el encontrar árabes o musulmanes participando de la
logia masónica.
Por lo tanto, en esta investigación, buscaremos responder a: ¿qué permite en el
sistema de valores masónico que un musulmán sea masón o al inverso?3 Analizaremos
y compararemos ambos sistemas de valores en una primera parte, mientras que en una
segunda parte, estudiaremos la participación de inmigrantes sirios y libaneses en la
masonería costarricense durante la primera mitad del siglo XX. En esta segunda parte
del trabajo, veremos las condiciones, en que éstos se insertaron en la sociedad
costarricense y su participación en las logias masónicas del país, dando un especial
énfasis a la vida de Bejos Miguel Yamuni Abdala, quien llegó a ser Gran Maestro de la
Gran Logia de Costa Rica en el periodo 1949-1950.4 Por último, vale agregar, que este
trabajo es parte de uno mayor, sobre las redes de libaneses en Latinoamérica y la
participación en la masonería como medio de inserción social.
Relaciones entre los sistemas de valores de la Masonería y el Islam
La masonería
La masonería es una forma de sociabilidad centrada en la libre asociación, posee
una estructura jerárquica y corporativa, y sus reuniones están caracterizadas por rituales
simbólicos.5 Los tres principios fundamentales de la masonería son creer en el Gran
Arquitecto del Universo,6 practicar el amor al prójimo y creer en la trascendencia e
inmortalidad del alma. Para los masones, el participar en la logia confiere un
http://rehmlac.com/recursos/vols/v1/n2/rehmlac.vol1.n2-mguzman.pdf. (Revisado el 3 de marzo del
2010). 3 Acerca del sistema de valores en la sociedad de ideas masónica, véanse Armando Hurtado Juarez,
Nosotros, los Masones (Madrid: EDAF, 2005); y Konrad Menué, La Masonería (Barcelona: Grupo
G.R.M., 2007). Sobre el sistema de valores en el Islam, Ana Isabel Planet Contreras, “Sistema de valores
en el Islam”, Cuadernos de derecho judicial 20 (2006): 31-56 y sobre la cosmovisión en el Islam sobre la
teología, los derechos de las personas y el misticismo, Zidane Zeraoui, Islam y Política. Los proceso
políticos árabes contemporáneos (México: Editorial Trillas, 2008), 40-72. 4 Sobre la vida de Yamuni como masón y máxima autoridad masónica en Costa Rica, Archivo de la Gran
Logia de Costa Rica (AGLCR), “H:. Bejos M. Yamuni Abdala”, Gaceta Masónica (San José) 1 (15
agosto 1950): 5; y Rafael Obregón Loría & George Bowden, La Masonería en Costa Rica (San José:
Imprenta Tormo, 1950), Tomo IV, 252-254. 5 La bibliografía que explica la masonería es ínfima, sin embargo un manual claro y conciso, lo
encontramos en el trabajo de José Antonio Ferrer Benimeli: La masonería (Zaragoza: Alianza Editorial,
2001). 6 Arquetipo que depende de la persona puede significar “un dios superior”, “el único dios”, “el principio
de todo”, etcétera.
compromiso ético-moral y de constante formación intelectual. En el discurso de la logia
masónica se promueven valores como la filantropía, la tolerancia y la igualdad.7 La
masonería costarricense, que estudiamos en este trabajo, es masculina y posee como
requisitos poseer 21 años, saber leer y escribir (lo cual dice bastante sobre el nivel
socioeconómico de los masones de la época), y presentar un “buen testimonio”.8
Imagen 1
La Escuadra cruzada con el Compás y la “G” en el centro
La Escuadra cruzada con el Compás y la “G” en el centro ha sido el símbolo más genérico de la
masonería. En la masonería existen “Tres Grandes Luces”: (1) el Volumen de la Ley, que puede ser
según la religión, la Toráh, la Biblia o el Corán, entre otros textos sagrados, y cuya misión es iluminar el
espíritu y la mente; (2) la Escuadra, que regula la conducta de los hermanos masones; y (3) el Compás,
que representa el espíritu y los límites del masón. Por su parte, el origen del uso de la letra “G” en la
masonería ha sido de los más debatidos, para unos proviene del inicio de la letra inicial de la palabra
geometría, es decir, la ciencia que recoge y simboliza las siete ciencias o artes liberales o resumen del
conocimiento en la Edad Media. La letra “G”, simbólicamente, también se asocia con el genio y la
gravitación; por su parte, la masonería moderna ha relacionado esta letra con la inicial de la palabra
“dios” en inglés: “god”. Para ampliar sobre esto, puede consultarse cualquier manual o libro
introductorio sobre masonería, recomendamos, entre tantos: José Antonio Ferrer Benimeli, La masonería
(Zaragoza: Alianza Editorial, 2001).
La logia masónica es un espacio de sociabilidad moderna, ya que en ésta prima
la racionalidad, es afirmada la autonomía y realización del individuo y del sujeto, y ésta,
la logia masónica, es presentada como un ámbito diferenciado y especializado en la
sociedad civil.9 La masonería propone al individuo como actor político y social por
excelencia. François Furet10
explica, que en sociabilidades como la masonería, cada
actor posee una relación con las ideas y con los fines, es decir, estas sociedades en sus
prácticas, puede que anticipen el funcionamiento de la democracia actual, pues, al
7 Consúltese: Menué, 13-15.
8 En: AGLCR, Procedimientos de la Gran Logia de Costa Rica 1905 (San José: Imprenta Alsina, 1906);
y Proceedings of the Grand Lodge of Costa Rica 1907-1908-1909 (San José: Alsina Press, 1911). 9 Véase: Fortunato Mallimaci, “Catolicismo y Liberalismo: las etapas del enfrentamiento por la definición
de la modernidad religiosa en América Latina”, La modernidad religiosa: Europa latina y América
Latina en perspectiva comparada, ed. Jean Pierre Bastian (México: Fondo de Cultura Económica, 2004),
20. 10
François Furet, Pensar en la Revolución Francesa (Barcelona: Petrel, 1980), 220-221.
menos discursivamente, igualan a los actores individuales dentro de un derecho
abstracto suficiente para constituirlos como ciudadanos, ya que definen la parte de
soberanía popular correspondiente a cada persona. En consiguiente, la libre asociación
-al menos discursivamente- se convierte en la condición de progreso, fraternidad,
igualdad y libertad, ya que ésta es el estado forzado de toda civilización.11
La sociabilidad masónica ha sido considerada por masones como discreta y por
profanos, muchas veces como secreta,12
pluriformal y con su propio marco normativo
estructurante, es decir, la logia posee diferentes funciones: educativas, espirituales,
culturales y políticas.13
Lo anterior no es exclusivo de la logia masónica, ya que las
sociedades modernas en general se han caracterizado por la pluralidad de mundos de
vida, esto en respuesta a la unidad simbólica y el carácter englobante de las sociedades
premodernas determinadas por el Antiguo Régimen,14
lo cual por supuesto, trae
consecuencias en el proceso de configuración de identidades, donde la identidad
individual no es un dato más, sino una opción.15
Esto ha permitido, que la logia
masónica posea antecedentes culturales, que predefinen un espacio social, donde son
promovidos el ecumenismo y la interacción multicultural.
En la logia masónica, sociedad de ideas con una funcionalidad pluriformal, y un
discurso modernista y progresista, durante el siglo XIX e inicios del siglo XX en
Latinoamérica, si hubo una idea, que se buscó perfeccionar, fue el principio abstracto de
la igualdad, lo cual sin duda alguna colaboró en los modelos sociales impulsados por el
11
Puede consultarse acerca de esto: Pilar González Bernaldo de Quirós, “La sociabilidad y la historia
política”, Nuevo Mundo Mundos Nuevos (2008). http://nuevomundo.revues.org/index24082.html.
(Revisado el 7 setiembre 2008). 12
Un ensayo que debate, los supuestos caracteres, ya sean, discreto o secreto de la masonería, está en:
Yván Pozuelo Andrés, “La masonería: ¿una organización discreta? Cuestión de definición”, REHMLAC,
Revista de Estudios Históricos de la Masonería Latinoamericana y Caribeña (San José) 1, n. 2
(diciembre 2009-abril 2010): 62-87. http://rehmlac.com/recursos/vols/v1/n2/rehmlac.vol1.n2-543y.pdf.
(Revisado el 15 de diciembre del 2009). 13
Véase: Luis Martín, “Las logias masónicas: una sociabilidad pluriformal”, Hispania: Revista española
de historia (España) 63, n. 214 (2003): 523-550. 14
Un caso de esto está en Olga Arenillas Dan José, “Un espacio de sociabilidad único durante el Antiguo
Régimen: comerciantes, extranjeros y milicianos en la desembocadura del Nervión”, Cuadernos de
historia (Vasconia) 33 (2003): 387-407. 15
Acerca del funcionamiento de las identidades sociales, consúltese: Gilberto Giménez, “Materiales para
una teoría de las identidades sociales”, Insumisos. Red de investigadores latinoamericanos por la
democracia y la paz.
http://www.insumisos.com/lecturasinsumisas/Teoria%20de%20las%20identidades.pdf. (Revisado el 7
setiembre 2008)
liberalismo.16
La práctica de libertades individuales a lo interno de sus respectivas
colectividades, en una especie de aprendizaje parlamentario y de autorepresentación, es
una constante en la logia. En la masonería, el individualismo liberal y su visión de una
sociedad igualitaria, ha fundamentado las ideas políticas de autonomía del sujeto social
individual como actor democrático.17
El Islam
El Islam (الم س ,significa “sumisión al único dios”) es una religión monoteísta اإل
que retoma las enseñanzas atribuidas a Abraham, Moisés y Jesús, entre otros, pero que
ante todo posee su plenitud y universalidad en la revelación vivida por el profeta
Muhammad (Mahoma),18
la cual restituye la relación del ser humano con la divinidad.
A los seguidores del Islam se les llama musulmanes. El Islam consiste en creer en el
dios único, sus seres espirituales, sus libros, sus mensajeros, la resurrección, el día del
juicio final, la predestinación y el libre albedrío. En la cosmovisión islámica, el hombre
posee la capacidad (libertad otorgada por dios) de elegir, pero nada sucede sin la
predeterminación y el conocimiento divino.19
Los deberes del musulmán están en: (i) dar testimonio (“shahada”) que no hay
más dios que Dios y que Muhammad es su profeta; (ii) rezar (“salat”) como lo establece
la “Sharia” (ley); (iii) practicar el “zakat” (limosna obligatoria); (iv) ayunar durante el
Ramadán; y (v) realizar el “hayy” (peregrinación a la Meca).20
En el Islam, el buen
testimonio es fundamental, el Corán dicta en el sura XVI, “La Abeja”, aleya 90:
“Haremos sufrir castigo sobre castigo, como premio de su maldad, a aquellos que han
creído y que han apartado a los demás del camino recto”.21
Observamos, en la aleya
16
El liberalismo para estos años es una filosofía enmarcada por los ideales de la Ilustración francesa,
promotora de la modernidad y que posee como vanguardia al republicanismo, el cual a su vez, posee
como vanguardia a la masonería. Hans-Jürgen Prien, “Protestantismo, Liberalismo y Francmasonería en
América Latina durante el siglo XIX: Problemas de investigación”, Protestantes, liberales y
francmasones. Sociedades de ideas y modernidad en América Latina, siglo XIX, ed. Jean Pierre Bastian
(México: Fondo de Cultura Económica, 1990), 15-23. 17
Véase: Bastian, “Introducción”, Protestantes, liberales y francmasones. Sociedades de ideas y
modernidad en América Latina, siglo XIX, 7-14. 18
Sobre la vida del profeta del Islam, entre tantas obras clásicas, publicadas en español, están: Julan
Vernet, Mahoma (Madrid: Austral, 1987); y Humberto Rizziatano, Mahoma y el Islam (Barcelona:
Daimon, 1976). 19
Consúltese: Planet, “Sistema de valores en el Islam”, 31-40. 20
Puede verse sobre esto: Zeraoui, Islam y Política. Los proceso políticos árabes contemporáneos, 40-
42. 21
El Corán (Madrid: Editorial ALBA, 2002), 198.
anterior, la importancia de una vida recta y correcta. El Islam no es una religión de
“árabes”, está abierta a personas con distintos orígenes fenotípicos y características
étnicas (lenguaje en la mayoría de los casos, así como nacionalidades hoy día).22
“Cada
ser humano es igual a sus semejantes y la humanidad forma una comunidad fraternal al
servicio del Creador del Universo”.23
Imagen 2
La Media Luna y la Estrella
La Media Luna y la Estrella son uno de los símbolos más utilizados en el Islam. La Media Luna fue
adoptada como símbolo del Islam en el siglo XIV, aunque originariamente su imagen representó una luna
creciente, también fue relacionada con la diosa Diana. La estrella, signo de soberanía y divinidad, fue
añadida más tarde.
En el sistema de valores del Islam, el principio de igualdad o equidad es
fundamental, los hombres son iguales, pero no idénticos delante de dios, esto, sin
importar los niveles socioeconómicos, culturales o físicos. La única diferencia entre los
musulmanes, sólo la puede ver dios, espiritualmente, y ésta depende de la piedad y
bondad de cada persona con los demás. En el Islam es fundamental la solidaridad
comunitaria material, incluso, algunas corrientes ven la infalibilidad de la comunidad
frente a lo individual.24
Por otra parte, la práctica de la tolerancia religiosa y el respeto
a las creencias de los demás, en el Islam ha sido considerada esencial para la
convivencia comunitaria.25
Sobre la tolerancia entre los hombres, la aleya 11 del sura
XLIX, “Las Habitaciones”, dice: “Que los hombres no se burlen de los hombres;
aquellos de quienes se hace mofa valen tal vez más que los que se burlan; ni las mujeres
de las otras mujeres, tal vez éstas valen más que las otras. No os difaméis entre
22
Roberto Marín Guzmán, “Introducción al estudio del Medio Oriente Islámico: trayectoria histórica,
continuidad y cambio”, Serie Cuadernos de Historia de la Cultura (San José) 1 (2004). 23
Rabitat al-„Alam Al-Islami, “Los derechos humanos en el Islam” (Traducción de Muhammad Isa
García)”, Web Islam. Comunidad Virtual. http://www.webislam.com/?idt=5466. (Revisado el 19 de
setiembre del 2008). 24
Zeraoui, Islam y Política. Los proceso políticos árabes contemporáneos, 65-67. 25
Véase el sura CIX, “Los Infieles”, El Corán, 468.
vosotros ni os deis motes. Cuán mal se aviene el nombre de maldad con la fe que
profesáis. Los que no se arrepienten serán verdaderos malvados”.26
En el Islam, la “solidaridad comunitaria” se consolida cuando los hombres y las
mujeres y los bienes de éstos son protegidos, puesto, que la vida de la persona, sus
bienes y honor han sido declarados intangibles por dios, siempre y cuando no haya
motivo legal para suprimirlos. La unidad y buen funcionamiento de la “umma”
(comunidad de creyentes) es fundamental para los musulmanes,27
aunque la unicidad de
los hombres va más allá, ya que comprende la unidad y fraternidad entre todos los seres
humanos. El Islam moderno establece, que los derechos fundamentales y universales
son para todos los seres humanos, independientemente, que la persona sea ciudadana o
no de un estado islámico.28
La educación en el Islam es el elemento consolidador de la
unión comunitaria. Aprender a leer y escribir es un derecho y deber, tanto para los
hombres como para las mujeres, incluso más apreciable que muchos de los rituales.29
Por otro lado, en el sistema de valores islámico, encontramos, que la libertad de
expresión está contemplada en el sura IV, “Las Mujeres”, aleyas 147-148: “Dios no
guste de que se divulgue el mal, a menos que sea víctima de la opresión. Dios lo oye y
lo sabe todo. Ora divulguéis el bien u ocultéis el mal, ora perdonéis el mal, Dios es
indulgente y poderoso”.30
“El Islam reconoce el derecho de pensamiento y de expresión
para todos los ciudadanos, siempre y cuando sea utilizada al servicio de la verdad y la
virtud, y no para la difusión de la malicia y el mal”.31
Por su parte, en el Islam es
contemplada la libertad de asociación, así como la libertad de consciencia y prácticas
religiosas; y es practicado el derecho de participar en los asuntos del Estado, donde los
funcionarios del gobierno y los miembros de las asambleas consultivas son elegidos
libremente,32
y con toda independencia por el pueblo,33
observamos aquí, el
funcionamiento de principios democráticos en el Islam.34
26
En. El Corán, 384. 27
Véase: Zeraoui, Islam y Política. Los proceso políticos árabes contemporáneos, 66. 28
Consúltese: Al-„Alam Al-Islami, “Los derechos humanos en el Islam”. 29
Sobre esto en: Zeraoui, Islam y Política. Los proceso políticos árabes contemporáneos, 65-67. 30
Véase: El Corán, 74. 31
Puede revisarse: Al-„Alam Al-Islami, “Los derechos humanos en el Islam”. 32
El voto se contempla en el Corán tanto para el hombre como para la mujer, pero para ésta vale medio
voto. 33
Al-„Alam Al-Islami, “Los derechos humanos en el Islam” 34
Véase: Juan Martos Quesada, “El Corán como fuente de derecho en el Islam”, Cuadernos de Historia
del Derecho 11 (2004): 327-338.
Masonería e Islam
Después de haber analizado someramente los sistemas de valores masónico y
musulmán, hemos encontramos, discursivamente, varias similitudes. En ambos
códigos, lo primero es el culto a un ente superior (divino) y lo segundo el amor al
prójimo; por otra parte, encontramos, la creencia en el libre albedrío de los seres
humanos y la trascendencia e inmortalidad de sus almas. Tanto la masonería como el
Islam poseen una serie de rituales simbólicos, ya sean materiales o discursivos, los
cuales son importantes, pero siempre, sobre éstos estará la convivencia fraternal, no sólo
de sus miembros o adeptos, sino de la sociedad en general.
Por otra parte, en ambas cosmovisiones prima un discurso de igualdad que
trasciende los niveles socioeconómicos, los orígenes fenotípicos y las características
étnicas (idioma, nacionalidad e incluso religión, esto a pesar de que el Islam es una
religión a diferencia de la masonería que es una filosofía de vida) de las personas. Para
los masones como para los musulmanes, las prácticas de la tolerancia (religiosa
inclusive, permitiendo sociabilidad ecuménica), la caridad y la filantropía, (recordemos
la norma del zakat en el Islam) y el poseer un buen testimonio, son fundamentales, por
lo que el compromiso ético-moral es constantemente motivado.
En la masonería como en el Islam, la libertad de expresión y asociación, así
como el voto independiente son elementos constantes en sus respectivos sistemas de
valores. El individuo en ambas cosmovisiones es propuesto en dimensiones
sociopolíticas, con sus respectivos deberes y derechos. Por su parte, la educación, el
saber leer y escribir, así como la continua formación intelectual y cultural son pilares en
la masonería y el Islam. Finalmente, la logia masónica y la mezquita funcionan como
centros de crítica y debate de ideas, pensamientos u opiniones, en un marco sin duda
democrático. Las jerarquías elegidas democráticamente existen en ambos códigos. La
logia masónica es un espacio de sociabilidad proyectado a construir una mejor sociedad,
esto, al igual, que en la mezquita, donde se busca el mejoramiento de la umma y la
sociedad en general.
Hasta acá, observamos, que aparentemente no existe contradicción (por la
similitud de prácticas) en que un masón sea musulmán o un musulmán sea masón.35
Sin
35
Un ensayo que trata sobre la no contradicción de que un musulmán sea masón o al inverso, está en:
Shaikh Hatim Fidahussein Nakhoda, “Islam and Freemasonry”, Pietre-Stones Review of Freemasonry
embargo, el tema de la masonería es muy sensible para los musulmanes, debido a que
esta sociedad utiliza en su ritualismo, símbolos y filosofías propias del Islam. Está el
caso de la asociación masónica: “Antigua Orden Árabe de los Nobles del Relicario
Místico (A.A.O.N.M.S sus siglas en inglés)”,36
organizada en New York durante el año
1872, por el médico Walter M. Fleming y el actor teatral William J. Florence, ambos,
masones grado 33º, “Sublime Gran Comendador”, del Rito Escocés de Antiguos y
Aceptados. Esta organización es mejor conocida como: “Hospitales Shriners para
niños”, y por el uso de feces de color rojo por parte de sus miembros. La agrupación
tomó como temática el Medio Oriente, sus templos37
empezaron a ser construidos
semejantes a mezquitas. El primer templo fue “la Meca Templo (Meca Relicario)”,
establecido en el Salón Masónico de la Ciudad de New York, el 26 de setiembre de
1872, siendo Felming el primer potentado.
Imagen 3
Walter M. Fleming utilizando el gorro frigio
(Lodge St. Michael No. 2933, Singapore, District Grand Lodge of the Eastern Archipelego, UGLE.).
www.freemasons-freemasonry.com/islam_freemasonry.html. (Revisado el 19 de setiembre del 2008). 36
Conocida comúnmente como los “Shriners”, éstos son una asociación de beneficencia, que en la
actualidad, poseen más de medio millón de miembros, mientras que a través de más de 190 templos
masónicos alrededor del mundo, financian una red hospitalaria para niños. Estos hospitales utilizan
tecnología de punta y algunos son de los más prestigiosos del orbe. La atención médica es completamente
gratuita. Los únicos requisitos para recibir atención médica son: ser menor de 18 años de edad, sufrir
algún problema en los huesos, músculos o articulaciones, buena probabilidad de conseguir una mejoría
significativa con el tratamiento y que dicho tratamiento no pueda ser financiado por la familia en alguna
otra institución médica. Para ser un “Shriners”, el único requisito es ser al menos maestro masón, tercer
grado simbólico de la masonería. Esta asociación masónica posee hoy día miembros en todo el mundo y
en su web, podemos encontrar, la más variada información sobre ésta, además, de que muchos grupos de
éstos poseen su propio sitio en internet. Para ampliar, acerca de la historia de los “Shriners”, véase:
Shriners International, A short history. Shriners Hospitals for Children & Shriners of North America.
http://www.shrinershq.org/files/shrine/PDF/SONA_Short_History_Booklet.pdf. (Revisado el 25 de enero
del 2010). El link del sitio oficial es http://www.shrinershq.org/. 37
Hoy día se le llaman “auditorio” o “Centro Shriner”.
Para 1875, la asociación masónica “Shriners” poseía 43 miembros, pero, ya para
el año siguiente, el 6 de julio fue organizado el Gran Concilio de la Antigua Orden
Árabe de los Nobles del Relicario Místico, y Fleming fue elegido “Potentado Imperial”.
En 1878, poseían 425 miembros y 13 templos en 8 estados, para 1888, 7210 miembros
y 48 templos entre Estados Unidos y Canadá, y en 1900, distribuidos en 82 templos,
55000 miembros. A pesar del simbolismo, los “Shriners” no tienen nada que ver con el
Islam y los requisitos para unirse a esta asociación son netamente masónicos.
Imagen 4
Escudo de la asociación masónica “Shriners”
Los “Shriners” argumentan, que su ritual representa el aspecto más alto de la
masonería especulativa, ya que enseñan lecciones morales, definen mejor los principios
de la espiritualidad e insisten en la necesidad de buscar a dios y conocer sus atributos.
La cuestión del “relicario místico” proviene de la leyenda sobre la conversión de Ali Ibn
Talib Ibi -yerno y primo de Muhammad- como la primera en la historia del Islam, la
cual es continuada por el shiísmo,38
tradición profética islámica que reclama la
autoridad de Muhammad como herencia de la descendencia a través de Alí. El shiísmo,
históricamente, ha tenido, que desarrollarse en la clandestinidad (elaborando señas y
códigos), debido a la oposición sunnita (tradición profética islámica mayoritaria),39
característica (la clandestinidad) que le acerca a la masonería.40
38
Sobre éste, consúltese: Mohamed alí Amir-Moezzi, “Del derecho a la teología: los niveles de realidad
en el shiísmo duodecimano”; y María Mercè Viladrich, “El shiísmo: la construcción de un orden sagrado
en los primeros tiempos del Islam”, en: El Islam plural, ed. María Angels Roque (Madrid: Icaria
Editorial, 2003), 75-114. 39
Véase: Suad al Hakim, “El islam sufí”, en: El Islam plural, 115-138. 40
Sobre esto: Fahim A. Knight, “Freemasonry and Islam: What do they share?”, Wake Up From Your
Slumber. www.wakeupfromyourslumber.com/node/4114. (Revisado el 19 de setiembre del 2008).
A pesar de las similitudes entre los sistemas de valores masónico e islámico, y la
apropiación de símbolos musulmanes, materiales y discursivos, por parte de la
masonería, el Islam ha condenado esta forma de sociabilidad, y por ende, prohibido la
participación de musulmanes en ella. El 15 de julio de 1978, el Colegio de Jurisdicción
Islámica,41
presentado en la Universidad de Azhar de El Cairo, señaló: “Dado que la
masonería se involucra en actividades peligrosas, es un gran peligro, y con objetivos
malvados, el Sínodo Jurisdiccional determina que la masonería es una organización
peligrosa y destructiva. Cualquier musulmán que se afilia a ella, sabiendo la verdad de
sus objetivos, es un infiel al Islam”.42
El Colegio de la Jurisdicción Islámica, sobre la masonería, determinó los
siguientes estatutos (la negrita es nuestra):
1. La masonería es una organización clandestina, que oculta o revela su
sistema, dependiendo de las circunstancias. Sus principios actuales son
escondidos a sus miembros, excepto a miembros escogidos de grados
superiores.
2. Los miembros de la organización, mundialmente, son tomados de hombres
sin preferencia por su religión, fe o secta.
3. La organización atrae a sus miembros bajo la base de proveer beneficios
personales. Enzarza a los hombres en volverse políticamente activos, y sus
fines son injustos.
4. Los nuevos miembros participan en ceremonias de diferentes nombres y
símbolos, y son asustados de desobedecer sus regulaciones y órdenes.
5. Los miembros son libres de practicar su religión, pero solo los miembros
que son ateos son promovidos a grados superiores, basados en cuanto están
dispuestos a servir a sus peligrosos principios y planes.
6. Es una organización política. Ha servido en todas las revoluciones, tanto
transformaciones militares como políticas. En todos los cambios peligrosos
esta organización aparece tanto expuesta como veladamente.
7. Es una organización judía en sus raíces. Sus máximos dirigentes
secretos son judíos y promueven actividades sionistas.
8. Sus objetivos primarios son el distraer de las religiones y distrae a los
musulmanes del Islam.
9. Intenta reclutar hombre con influencia financiera, política, social o
científica, para utilizarlo. No toma en consideración aplicantes que no
41
“Religiones y masonería. Condena por la religión islámica”, Wikipedia, the free encyclopedia.
http://es.wikipedia.org/wiki/Condenas_religiosas_de_la_masoner%C3%ADa#Condena_por_la_religi.C3.
B3n_isl.C3.A1mica. (Revisado el 19 de setiembre del 2008). Para ampliar sobre la condena del Islam a la
masonería, consúltese: Jacob M. Landau Source, “Muslim Opposition to Freemasonry”, Die Welt des
Islams 36, n. 2 (July 1996): 186-203. 42
Ibid.
pueda utilizarlos. Recluta reyes, primeros ministros, altos oficiales del
gobierno e individuos de similar condición.
10. Tiene ramas bajo diferentes nombres a forma de camuflaje, para que la
gente no pueda dar seguimiento a sus actividades, especialmente si el
nombre de masonería tiene oposición. Estas ramas son conocidas como
“Leones”, “Rotarios”, entre otros. Ellas tienen principios malvados que
contradicen completamente las reglas del Islam. Hay una clara relación
entre masonería, judaísmo y el sionismo internacional. Ha controlado
las actividades de altos oficiales árabes en el problema palestino. Ha
limitado sus deberes, obligaciones y actividades para el beneficio del
judaísmo y el sionismo internacional.
En los estatutos anteriores, observamos, una serie de “estereotipos malévolos”,
que históricamente han construido diferentes representaciones sociales sobre la
masonería, las cuales van en línea con el discurso antimasónico de la Iglesia católica de
los siglos XVIII y XIX,43
promulgado por los diferentes papas sobre esta sociedad.44
Las representaciones musulmanas de la masonería, que le satanizan como “una secta
conspirativa, secreta, misteriosa y peligrosa socialmente”, el Colegio de Jurisdicción
Islámica las tomó del discurso católico, sin embargo, le ha agregado “una relación” a la
masonería con el desarrollo del sionismo y el judaísmo en general.45
Pero, ¿de dónde
sale la relación entre la masonería con el sionismo o el judaísmo?
La representación musulmana de la masonería como una “institución judío
conspirativa, que entre sus metas, camino a dominar el mundo, está destruir el Islam”,
no es original del Islam. Desde el último tercio del siglo XIX, en la Europa occidental,
43
Sobre estas similitudes discursivas del catolicismo y el Islam, en lo que respecta la condena a la
masonería, consúltese: David Zeidan, “A Comparative Study of Selected Themes in Christian and Islamic
Fundamentalist Discourses”, British Journal of Middle Eastern Studies 30, n. 1 (May 2003): 72-74. 44
Acerca de las representaciones católicas y el discurso papal sobre la masonería de los siglos XVIII y
XIX, véanse nuestros trabajos (que si bien se centran en el caso costarricense, presentan una visión global
sobre la situación): “Documentos y discursos católicos antimasónicos en Costa Rica (1865-1899)”;
“Masonic Societies of Ideas and their Social Representations in Costa Rica (1865-1899)”, CRFF Working
Paper Series (Sheffield) 4 (December 2008): 1-21.
http://freemasonry.dept.shef.ac.uk/show_upload.php?id=356&blob_field=upload_file1. (Revisado el 10
de octubre del 2009); y “Conspiradores políticos y sectas misteriosas: Imaginarios sociales sobre la
masonería en Costa Rica (1865-1899)”, Revista Estudios (San José) 22 (2009).
http://www.estudiosgenerales.ucr.ac.cr/estudios/no22/papers/isec1.html. (Revisado el 3 de abril del
2010). 45
Acerca del sionismo, puede consultarse: Theodor Herzl, El Estado Judío (Washington D. C.:
Departamento Latinoamericano de la Agencia Judía. 1946); Max Nordau, “Discurso pronunciado en el
primer Congreso Sionista”, en: Sionismo, ed. José Monin (México, D. F.: Editorial Tribuna, 1939); y Yuri
Andreev, El Sionismo. Prédicas y realidades (Moscú: Editorial de la Agencia de Prensa Novosti, 1988).
Por otro lado, sobre las supuestas actitudes de masones sionistas, encontramos una serie de leyendas
urbanas en Internet. Véase: Celil Layiktez, “Freemasonry in the Islamic World”, Revue de Franc-
Maçonnerie (Lodge Zeytin Dali No. 146 Grand Lodge of Turkey). http://www.freemasons-
freemasonry.com/layiktez1.html. (Revisado el 19 de setiembre del 2008).
principalmente, luego de La Troisième Republique (Tercera República Francesa, 1870-
1940), empezaron a ser relacionados, no sólo los masones con los judíos, sino, que
además, con los comunistas.46
Dicha representación empezó a expandirse por el
continente, e incluso, llegó a ser utilizada por Adolf Hitler durante su Tercer Reich
(1933-1945),47
y exageradamente en España, por Francisco Franco durante su gobierno
(1939-1975).48
Por otra parte, nos llama la atención, lo tardía de la condenación musulmana a la
masonería, ya que desde el último tercio del siglo XIX, hubo la organización de logias
masónicas en países musulmanes, incluyendo la participación de musulmanes en la
masonería, en especial, en el Imperio Otomano,49
en Egipto50
y en Persia (actual Irán).51
Sin embargo, ¿por qué hasta 1978 hay una condena de esta magnitud? Encontramos la
respuesta, en los acontecimientos vividos por los países musulmanes durante los años
previos.
Durante la creación del Estado de Israel (1948) fueron arrebatadas tierras
palestinas, desde entonces, Israel recibiría constantes ataques desde Siria, Jordania y
Líbano. En 1967, con la “Guerra de los Seis Días”, Israel derrotó la coalición Siria-
Egipto, apoderándose de nuevos territorios musulmanes; sin embargo, en 1973, con la
“Guerra del Yom Kippur”, dicha coalición vencería a Israel.52
Finalmente, observamos,
constantes incursiones de Israel en el Líbano desde de 1968 (inclusive durante la guerra
46
Sobre esto, véase: Ferrer, El contubernio judeo-masónico-comunista: del satanismo al escándalo de la
P-2 (Madrid: Istmo, 1982). 47
Para ampliar sobre esto, consúltese: Stephen Eric Bronner, A Rumor about the Jews. Antisemitism,
Conspiracy, and the Protocols of Zion (Oxford: Oxford University Press, 2003). 48
Consúltese: Javier Domínguez Arribas, El enemigo judeo-masónico en la propaganda franquista
(1936-1945) (Madrid: Marcial Pons, 2009). 49
Para ampliar sobre esto, consúltense: Michelle Campos, “Freemasonry in Ottoman Palestine”,
Jerusalem Quarterly (Jerusalem) 22-23 (2004): 37-62; y Şükrü Hanioglü, “Notes on the Young Turks and
the Freemasons, 1875-1908”, Middle Eastern Studies 25, n. 2 (April 1989): 186-197. 50
Acerca de la masonería y su importancia en el Egipto decimonónico y de inicios del siglo XX, pueden
consultarse: Karim Wissa Source, “Freemasonry in Egypt 1798-1921: A Study in Cultural and Political
Encounters”, Bulletin British Society for Middle Eastern Studies 16, n. 2 (1989): 143-161; Albert Kudsi-
Zadeh, “Afghānī and Freemasonry in Egypt”, Journal of the American Oriental Society 92, n. 1 (January-
March 1972): 25-35; y Byron D. Cannon, “Nineteenth-Century Arabic Writings on Women and Society:
The Interim Role of the Masonic Press in Cairo (al-Lataif, 1885-1895)”, International Journal of Middle
East Studies 17, n. 4 (November 1985): 463-484. 51
Véase: Hamid Algar, “An Introduction to the History of Freemansonry in Iran”, Middle Eastern Studies
6, n. 3 (October 1970): 276-296. 52
Véase: Marín, “La ocupación militar israelí de Cisjordania y Gaza”, Serie Cuadernos de Historia de la
Cultura (San José) 7 (2003); y Ralph Schoenman, El conflicto árabe-israelí. (La historia oculta del
sionismo) (San José, 1991).
civil libanesa, con mayor suceso a partir de 1975) hasta la invasión militar de 1982.53
Por ende, consideramos, que este tipo de situaciones entre el Estado de Israel y algunos
países musulmanes, crearon actitudes negativas entre estos actores, así que el relacionar
la masonería con un movimiento sionista o judío anti-musulmán fue tan sólo, una
representación antijudía más, por parte de ciertos grupos musulmanes.
Por último, agregamos, que la condena hecha por el Colegio de Jurisdicción
Islámica se enmarca en un conflicto, que está más allá de un problema entre los
sistemas de valores de la masonería y el Islam, ya que consideramos, que el problema
de algunos sectores musulmanes fundamentalistas, está más bien, estando de acuerdo
con Roberto Marín, con “la modernidad occidental”.54
Por lo tanto, siguiendo está
línea, coincidimos con Jacob Landau,55
en que la condena musulmana a la masonería se
debe a que: (i) la visión o discurso liberal-democrático-igualitario de las logias
masónicas puede inspirar un espíritu revolucionario, que puede afectar la tradición en
los diferentes espacios de la sociedad musulmana; (ii) el carácter universal de la
masonería y la participación de algunos de sus miembros en la construcción de estados-
nación, como sucedió con la República de Turquía, puede afectar el buen
funcionamiento de la umma; (iii) la visión secular de muchos masones y el uso de
símbolos judeo-cristianos en los rituales masónicos no son del agrado de los círculos
musulmanes ortodoxos; (iv) las redes económicas en que participa la masonería, así
como su vocación filantrópica, podrían desestabilizar las instituciones musulmanas; y
(v) la composición social de las logias masónicas, generalmente, por miembros de élites
socio-económicas puede condicionar a esta asociación en detrimento de los sectores
más pobres de la sociedad.
53
Acerca de esto, puede verse: Marín, La guerra civil en el Líbano. Análisis del contexto político-
económico del Medio Oriente (San José: Editorial Texto Ltda, 1985). 54
Consúltese: Marín, El Fundamentalismo islámico en el Medio Oriente contemporáneo (San José:
EUCR, 2001), 35-51. 55
Landau, “Muslim Opposition to Freemasonry”, 202-203.
Bejos Miguel Yamuni Abdala:
Gran Maestro de la Gran Logia de Costa Rica
La masonería fue organizada oficialmente en Costa Rica en 1865, llegando a
consolidarse en 1899 con la fundación de la Gran Logia de Costa Rica,56
institución con
lo cual, el desarrollo de la sociabilidad masónica adquirió un carácter nacional. A pesar
de lo anterior, durante la primera mitad del siglo XX,57
la composición social de las
logias masónicas costarricenses estuvo integrada por mayorías extranjeras, incluso, la
gran maestría, de 50 años estuvo 34 años dirigida por un extranjero. Estadounidenses,
ingleses, alemanes y españoles en su mayoría, han integrado las logias costarricenses.
Sin embargo, entre 1900 y 1950, miembros de redes de inmigrantes sirios y libaneses,
empezaron a sociabilizar en las sociedades masónicas del país. ¿Quiénes fueron estos
inmigrantes? ¿Por qué emigraron? ¿Por qué sociabilizar en la masonería? ¿Quién fue
Bejos Yamuni? Son algunos cuestionamientos, que en este apartado buscaremos
responder.
Entre los años 1887 y 1897, identificamos el primer periodo de inmigración
sirio-libanesa a Costa Rica.58
Durante el primer año (1887) llega la primera pareja:
Pablo Sauma Aued y Susana Tajan Meckbel, mientras, que en 1892 llegan al país el
segundo par de sirio-libaneses; José Tabush Fallat e Ignacio Haquím Zaglul.59
Pero,
¿por qué la emigración? ¿Cuáles eran las condiciones del Monte Líbano? Bueno, para
empezar, desde el siglo XVI, la costa del Líbano empezó a formar parte del Imperio
56
Véase nuestro trabajo: “Un estudio comparado del establecimiento de logias masónicas en Costa Rica y
Guatemala (1865-1903)”, Número especial de Diálogos 9º Congreso de Historia Centroamericano (San
José, julio 2008): 2357-2382. http://www.historia.fcs.ucr.ac.cr/articulos/2008/especial2008/articulos/07-
regional/100.pdf. (Revisado el 3 de diciembre del 2009). Por otra parte, sobre la organización de la Gran
Logia de Costa Rica. Consúltese: Arthur George Malin Gillot, “Época de la Gran Logia de Costa Rica”,
Documentos Históricos referentes a la Masonería en Costa Rica (San José: Imprenta y Encuadernación
Alsina, 1926); y Obregón & Bowden, Tomo III, 54-59. 57
Acerca del desarrollo de la masonería en Costa Rica durante la primera mitad del siglo XX están los
trabajos Federico Góngora Herrera: Documentos de la Masonería Centroamericana (Antigua y
Aceptada). Desde el año 1824-1933 (San José: Imprenta Española, 1937), 100ss; y Mis últimos
documentos de la Masonería Centroamericana Antigua y Aceptada. Años 1809-1939 (San José:
Imprenta Española, 1940), 265-291; Obregón & Bowden, Tomo IV; y Guzmán-Stein, “De cómo el
Generalísimo Francisco Franco Bahamonde, jefe del estado español, otorgó la Orden de Caballero de
Isabel la Católica a un masón gallego que fue dos veces Gran Maestro de la Gran Logia de Costa Rica”,
La Masonería en Madrid y en España del siglo XVIII al XXI, coord. José Antonio Ferrer Benimelli
(Zaragoza: CEHME, 2004), Tomo II, 1209-1272. 58
Los distintos periodos de inmigración libanesa en Costa Rica hasta 1987, en: María Cruz Burdiel de las
Heras, “La emigración libanesa en Costa Rica” (Tesis Doctoral en Estudios Árabes e Islámicos y Estudios
Orientales, Universidad Autónoma de Madrid, 1988), 142-162. 59
En: Cruz Burdiel, “La emigración libanesa en Costa Rica”, 130.
Otomano,60
sin embargo, el Monte Líbano se desenvolvió fuera del control de éste.61
Agregamos, que el Monte Líbano al sur fue druso62
y el norte maronita63
-lo cual le
permitió a este sector desarrollar comercio con la Europa cristiana-, por lo que una de
las características históricas de este territorio ha sido el conflicto religioso.64
A finales
del siglo XIX, el imperialismo y neocolonialismo europeo crecía a pasos agigantados, el
Imperio Otomano empezó a llenarse de incontables impresitos, los cuales sumados a la
mala administración técnica, industrial y de ingresos, inició la decadencia de este
imperio.65
El Monte Líbano, históricamente, siempre ha poseído una fuerte influencia
extranjera, de países europeos, Egipto y por supuesto el Imperio Otomano. Para la
segunda mitad del siglo XIX, este territorio vivió el conflicto maronita-druso, en una
época, en que llegan nuevas ideas (ilustradas y modernizantes),66
se busca la inserción
al mercado mundial y fueron constantes las luchas sociales por los altos impuestos.67
Para estos años fueron promulgadas las reformas del Tanzimat, las cuales procuraron
igualdad ante la ley de las distintas minorías, por lo que los maronitas, entre otros
derechos, ahora podían adquirir propiedades.68
Sin embargo, eran comunes las
60
Sobre éste, véase: Gilles Veistein, “El Imperio Otomano, desde 1492 hasta finales del siglo XIX”, Los
judíos de España. Historia de una diáspora, ed. Henry Méchoulan (Madrid: Trotta, 1993), 347-372. 61
Consúltese: Marín, La emigración Libanesa en los Siglos XIX y XX. Análisis de sus causas
Económicas-Sociales (San José: Editorial Alma Mater, 1997), 45-46. 62
Los drusos (en árabe دروزي y en hebreo דרוזי) son una minoría religiosa, que ha habitado
principalmente en el Líbano, Siria, Jordania y Palestina (e Israel). Éstos hablan árabe y definen su
religión como islámica, a pesar de que la mayoría de musulmanes no los aceptan como tales. Los drusos
se llaman “gente de un solo dios” y poseen su origen entre finales del siglo X e inicios del siglo XI,
cuando algunos ismailíes consideraron al Califa fatimí Al-Hakim como una manifestación divina. La
religión drusa acepta no sólo elementos islámicos, sino, también, griegos, judío-cristianos e incluso,
gnósticos (algunos creen incluso en la reencarnación); además, practican la taqiyya shiíta. 63
La iglesia cristiana maronita está basada en tradiciones orientales y posee su origen en San Marón a
finales del siglo IV e inicios del siglo V, en Antioquía. Los maronitas a mediados del siglo V sostuvieron
radicalmente, que Jesucristo era a la vez dios y hombre, y que poseyó dos voluntades, una humana y otra
divina (Concilio de Calcedonia del 451). Por lo anterior, empezaron a ser perseguidos y asesinados, por
lo que emigraron al Monte Líbano. En 1736 con el Sínodo de Luwayza, los maronitas se unieron a la
Iglesia católica. 64
Acerca de éste, consúltese, entre tantos trabajos: Alberto Priego & Carlos Corral, “El Líbano: crisol de
culturas y pequeño próximo oriente”, UNISCI Discussion Papers (Madrid) 14 (mayo 2007): 57-70. 65
Véase: Marín, La emigración Libanesa en los Siglos XIX y XX, 67-69. 66
Sobre la proliferación de este tipo de ideas, sabemos. que a mediados del siglo XVIII fue organizada
una logia masónica en Beirut y desde 1868 la organización y funcionamiento de este tipo de asociaciones
en la zona ha sido prácticamente continua. Acerca de las actividades masónicas en El Líbano, véase el
sitio web de su gran oriente: The Lebanese Great Federal Orient. http://www.lgfo.org/ (Revisado el 19
de setiembre del 2008) 67
Marín, La emigración Libanesa en los Siglos XIX y XX, 72. 68
Ibid., 75.
imposiciones de los drusos a los maronitas para vender y comprar tierras.69
Para esta
coyuntura, la principal actividad económica fue la producción y la exportación de seda,
provocándose así mayores vínculos entre el Líbano y Siria. La disputa en el mercado
fue entre fábricas de sedas libanesas y francesas.70
La inserción al mercado mundial del Monte Líbano, gracias a la industria de la
seda y el desarrollo de esta empresa, provocó la expansión del capital por difusión de la
economía monetaria, el comercio y el trabajo asalariado en las fábricas. El país se
convirtió no sólo en monoexportador, sino, que también, destinó una gran mayoría de su
territorio al cultivo del árbol de morera, que alimenta el gusano de seda. Por su parte,
campesinos y productores de dicho árbol, empiezan a endeudarse con banqueros
extranjeros. Para el periodo 1870-1890, debido a los grandes problemas económicos
por la caída del precio de la seda y los bonos otomanos (desde 1868 se declara la
bancarrota, disminuyendo los subsidios y el presupuestos que llegaba por medio del
Mustasarrifiyya ordenado por el sultanato), los comerciantes extranjeros salen del país
con su capital, provocando la contracción del crédito y una severa decadencia de las
inversiones locales, la cual acrecienta los procesos de endeudamiento y las fábricas de
seda empiezan a cerrar.
Por lo tanto, los libaneses empiezan a emigrar principalmente a Estados Unidos,
Australia y Brasil. Entre 1860 y 1900, salieron 120000 personas, y entre 1900 y 1914,
210000 más.71
Los barcos de emigrantes zarpaban por el Mar Mediterráneo,
primeramente a los puertos de Génova y Marsella, de donde salían rumbo al continente
americano.72
La mayoría de emigrantes libaneses eran adeptos a la Iglesia maronita
(emigraban debido a la persecución que estaban experimentando los cristianos, por parte
de los drusos).73
La coyuntura donde inician las migraciones libanesas fue la misma, en
que Costa Rica desarrolló su proyecto progresista, el cual consistió en el crecimiento
económico centrado en la exportación de postres (café y banano, principalmente), y por
ende, la inserción del país en la economía mundial, así como la modernización de la
infraestructura y formas de comunicación, situaciones, que motivaron la inmigración
69
Ibid., 83. 70
Ibid., 93-97. 71
Ibid., 100-109 y Cruz Burdiel, “La emigración libanesa en Costa Rica”, 130-145. 72
Cruz Burdiel, “La emigración libanesa en Costa Rica”, 132. 73
Ibid., 75-82 y 131.
extranjera para laborar en los distintos proyectos, debido a la falta de capitales y
profesionales capacitados.74
El proyecto progresista costarricense condicionó favorablemente la inmigración
extranjera en el país para estos años, a Costa Rica llegaron principalmente: italianos,
españoles-cubanos, estadounidenses e ingleses, alemanes, chinos y afrocaribeños.75
Junto a los libaneses,76
sobresalió el hecho, de que inmigraron tantos chinos, que para
1904 fue promulgado, por parte del Presidente de la República: Ascensión Esquivel y su
Secretario de Estado: José Astúa,77
un decreto que prohibió la entrada al país de árabes,
turcos, sirios, armenios, gitanos de cualquier nacionalidad y chinos.78
Por otro lado, a
esta coyuntura pertenecen los años, en que inmigraron los primeros árabes o
musulmanes a Latinoamérica (finales del siglo XIX e inicios del siglo XX), los cuales
en su mayoría, además de ser oriundos del Monte Líbano, lo eran también, de Siria y
Palestina.79
Muchos de estos inmigrantes eran maronitas o cristianos de otra
denominación, de origen campesino y con poca preparación intelectual, y se
encontraban en busca de libertad religiosa y política.80
74
Proyecto que fue muy similar en toda Centroamérica. Véase: Ciro Flamarion Santana Cardoso &
Héctor Pérez Brignoli, Centroamérica y la economía occidental 1520-1930 (San José. EUCR, 1977); y
Víctor Hugo Acuña Ortega, Historia General de Centroamérica. Tomo IV. Las Repúblicas
Agroexportadoras (1870-1945) (Madrid: Ediciones Siruela S.A., 1993). Por su parte, explícitamente la
inmigración libanesa y su inserción en el sistema económico costarricense, véase: Cruz Burdiel, “La
emigración libanesa en Costa Rica”, 19-56. 75
En: Rita Bariatti Lussetti, “La inmigración italiana en Costa Rica (1821-1968)” (Tesis de Licenciatura
en Historia, Universidad Nacional, Heredia, Costa Rica, 1987); Giselle Marín Araya, “Inmigrantes
españoles en la ciudad de San José, 1850-1930” (Tesis de Magíster Scientiae en Historia, Universidad de
Costa Rica, 2000); Anita Gregorio Murchie, Imported spices: a study Anglo-American settlers in Costa
Rica 1821-1900 (San José: Departamento de Publicaciones del Ministerio de Cultura, Juventud y
Deportes, 1981); Eugenio Herrera Balharry, Los alemanes y el Estado cafetalero (San José: UNED,
1988); Moisés Guillermo León Azofeifa, “Chinesse inmigrants on the Atlantic coast of Costa Rica. The
economic adptation of an Asian minority in a pluralistic society” (Tesis Doctoral, Tulane University,
1987); y Ronald Soto Quirós, “Un otro significante en la identidad nacional costarricense: el caso del
inmigrante afrocaribeño, 1872-1926”, Boletín AFEHC 25 (octubre 2006). 76
Entre 1887 y 1950 inmigraron a Costa Rica 247 sirio-libaneses. Véase: Cruz Burdiel, “La emigración
libanesa en Costa Rica”, 142-143. 77
Esquivel había sido miembro de la logia masónica “Unión Fraternal” de la Ciudad de San José, entre
1883 y 1887, mientras, que Astúa lo fue de la sociedad masónica “Regeneración”, entre 1890 y 1899;
ambas asociaciones fueron dependientes del Gran Oriente y Supremo Consejo Centro Americano. En:
AGLCR, Registros de firmas Respetables Logias: Unión Fraternal 19 (1883-1887) y Regeneración 6
(1888-1899). 78
Oficial, Colección de Leyes, Decretos, Acuerdos y Resoluciones 1904 (San José: Imprenta Nacional,
1904), 308-309. 79
Para ampliar sobre el caso de los palestinos, puede consultarse el trabajo de Marín: A Century of
Palestinian Inmigratio into Central America. A study of their economic and cultural contributions (San
José: EUCR, 2000). 80
Véase: Marín, “Los inmigrantes árabes en Costa Rica. Asimilación y legado cultural”, Herencia (San
José) 11-12, n. 1-2 (1999-2000): 17-20.
En Costa Rica, la principal actividad de los inmigrantes libaneses -al igual que
del inmigrante en general- fue el comercio, de hecho, éste fue el medio más importante,
con el cual, los sirios-libanes se insertaron en la sociedad costarricense.81
Por otra parte,
vale señalar, que muchos de estos inmigrantes fueron iniciados en la masonería, forma
de sociabilidad, que fue utilizada también por el inmigrante, para insertarse en la
sociedad costarricense.82
Sirio-libaneses como los comerciantes: Juan Assad
Albdelnour Mousaly, William S. Alem, Horacio N. Alem, George R. Breedy, George
Breedy, Saeed Mitry Breedy Haddad, Salem Breedy, Selim Breedy, Salomón Esna
Muses (Moisés), Teófilo Esna, José Jalet Bichra (Bechara), Pedro Jalet Francis,
Abraham Maleck (Malick), Teófilo Sarkiss Esna, Pedro José Sauma Aued y Bejos
Yamuni, entre otros, empezaron a formar parte de las redes masónicas en Costa Rica,
durante la primera mitad del siglo XX.83
Finalmente, veremos, el caso de Bejos Yamuni, quien como hemos reiterado,
ocupó el máximo puesto masónico en Costa Rica. Los Yamuni son originarios de la
ciudad libanesa Deir el-Ahmar84
مر) راالح significa “convento rojo”). Bejos Miguel دي
Yamuni Abadala nació el 11 de noviembre de 1881 en una aldea llamada Serel. Debido
a la inestabilidad socioeconómica del país, sus padres deciden emigrar, en primera
instancia lo hicieron Miriam Abdala y su hijo mayor Bejos, quedando con el padre los
81
Ibid. 82
Diferentes casos de inmigrantes, utilizando la masonería como un medio más de inserción social en
Costa Rica, los encontramos, en nuestros trabajos: Composición socio-ocupacional de los masones del
siglo XIX; “Sociedades de ideas en Puerto Limón durante la década de 1890”; “Sociabilidades modernas:
sociedades fraternales secretas en el Caribe costarricense a finales del siglo XIX”, Memorias. Revista
Digital de Historia y Arqueología desde el Caribe (Barranquilla) 11 (noviembre 2009): 128-143.
http://www.uninorte.edu.co/publicaciones/memorias/memorias_11/Investigacion/Articulos/Art.Nro.3_soc
iedades_secretas_costarricenses.pdf. (Revisado el 5 de febrero del 2010); y “Sociabilidad moderna,
impugnación católica y redes masónicas en la Ciudad de Puntarenas (1870-1951)”, en El Pacífico la
historia de una región desconocida. 1821- 2007, eds. Jorge Bartels, Oriester Abarca y Juan José Marín
(San José: SIEDIN, 2010). (En prensa); así como en los trabajos de Guzmán Stein: “La lapidaria fúnebre-
masónica en Costa Rica como fuente de investigación de una comunidad inédita”; y “Masones y liberales,
españoles y cubanos: Intervención y aporte al desarrollo social, político y cultural de Costa Rica en el
siglo XIX”. 83
AGLCR, Anuario de la Gran Logia de Costa Rica 1922-1923 (San José: Imprenta Alsina, 1924), 89-
133; Oficial, Censo Municipal de San José 1904 (San José, 1904); Censo comercial el 31 de diciembre de
1907. Comercios e industrias patentadas (San José: Tipografía Nacional, 1909); Censo comercial año
1915 (San José: Imprenta Nacional, 1917); Censo de población de Costa Rica. 11 de mayo de 1927 (San
José: Dirección General de Estadísticas y Censos, 1960); y Cruz Burdiel, “La emigración libanesa en
Costa Rica”, 146-160. 84
Consúltese: Cruz Burdiel, “La emigración libanesa en Costa Rica”, 82. Deir el-Ahmar está ubicada a
100 km de Beirut. Esta ciudad fue parte del Imperio Romano y desde el siglo VI ha poseído una mayoría
de familias maronitas. Sobre esta ciudad véase: “Deir el Ahmar”, Wikipedia, the free encyclopedia.
http://en.wikipedia.org/wiki/Deir_el_Ahmar. (Revisado el 19 de setiembre del 2008).
otros tres hijos, Jamil, Juan y Cilia.85
Primero emigraron a Australia, sin embargo no se
aclimataron y deciden regresar al Monte Líbano. Posteriormente, deciden viajar a
Paramaraibo (Guyana Holandesa), pero debido a la misma razón de su primera
emigración, deciden partir esta vez hacia los Estados Unidos.86
Camino al norte de
América, el barco en que viajan sufre un desperfecto, por lo que éste realiza una escala
en Puerto Limón, en el Caribe costarricense. Los Yamuni Abdala fueron obligados a
pasar unos días en Costa Rica, visitaron a otros inmigrantes sirio-libaneses y luego de
dialogar con éstos y observar las posibilidades de desarrollo de este país, decidieron
quedarse en él.87
Esto sucedió en el año de 1901.88
Miriam Abdala y Bejos Yamuni entonces, establecieron un puesto de comidas
en el mercado principal de dicho puerto, además, de que vendían en la línea del
ferrocarril, que iba de la ciudad capital de San José a Puerto Limón.89
Cuando éstos
lograron reunir suficiente dinero, se trasladaron a la ciudad capitalina, donde buscaron
establecerse como comerciantes.90
En los siguientes años lograron emigrar los
hermanos de Bejos, un familiar llamado Miguel Dumany, la sobrina de Miriam Abdala,
Rosa y el hijo de ésta: Antonio.91
Imagen 5
“La Pouppé”
85
En: Yamuni, “102 años de historia”. http://www.yamuni.com/Historia_mayoreo.aspx. (Revisado el 19
de setiembre del 2008). 86
Cruz Burdiel, “La emigración libanesa en Costa Rica”, 135. 87
Yamuni. 88
Cruz Burdiel, “La emigración libanesa en Costa Rica”, 137. 89
Ibid. 90
Yamuni. 91
Archivo Nacional (AN), Secretaría de Policía 797, 4510.
En sus inicios, Yamuni se asoció en sus negocios con el inmigrante libanés
Sarkis Bejos Massad.92
Ya para 1915, Yamuni posee una de las tiendas de importación
de productos europeos (explícitamente encajes, sedas, plumas y telas),93
más importante
de la ciudad capital. Esta tienda estaba en los alrededores del mercado central de San
José y se llamó “La Pouppé” (término en francés que significa: “La muñeca”, situación,
en que observamos, como “lo europeo” fue parte de cultura de Yamuni).94
Durante el
siglo XX, los negocios comerciales de la familia Yamuni crecieron significativamente,
hasta el punto de poseer hoy día uno de las más importantes casas comerciales en Costa
Rica: “Bejos Yamuni e Hijos S.A.”.95
Imagen 6
Bejos Miguel Yamuni Abdala
Por último, en lo que respecta a las estrategias de inserción social, encontramos,
que para el 29 de marzo 1912, Bejos Yamuni, quien se declara de nacionalización siria,
decidió nacionalizarse costarricense.96
Más tarde, en el año de 1914, Yamuni contrae
matrimonio con la costarricense Mercedes Tabush Haquín, hija de los inmigrantes sirio-
libaneses José Tabush e Ignacia Haquín.97
Por otra parte, Yamuni junto a otros
inmigrantes, promovieron la organización de “La Casa Libanesa”, institución cultural de
92
Ibid., Gobernaciones 2728. 93
Oficial, Censo comercial año 1915, 14. 94
Yamuni. 95
Sobre el desarrollo comercial de esta empresa, puede consultarse: AN, Ministerio de Hacienda 19256,
22029 y 27807; y Economía 2425. Y véase su sitio web: http://www.yamuni.com. (Revisado el 19 de
setiembre del 2008). 96
Oficial, Nacionalización 3613. 97
Yamuni.
la cual Yamuni fue presidente en 1930.98
Para concluir, no podemos dejar por fuera su
vida masónica. Bejos Yamuni fue iniciado masón en la logia “Regeneración 1” de la
Ciudad de San José, el 5 de julio de 1905.99
En 1910, Yamuni se afilió a la logia
“Libertad 4” de la misma ciudad,100
en 1927, a la asociación masónica “Hermes 7”,
situada también en San José, donde inclusive, en 1938, llegó a ser su Venerable
Maestro.101
En 1940. Yamuni se afilió a la logia “Maravilla 10” de la Ciudad de
Alajuela, llegando a ser su Venerable Maestro en 1943, año en que promovió la
construcción del templo de esta logia.102
Finalmente, en 1950, Yamuni se afilió a la
logia angloparlante de la ciudad capitalina: “La Luz 3”.103
Bejos Yamuni llegó a obtener el grado 32 de la masonería: “Sublime y Valiente
Príncipe del Real Secreto”,104
mismo grado, que también, para 1949 alcanzó su hijo
Miguel Yamuni Tabush. Padre e hijo fueron miembros de las Cámaras Filosóficas del
Rito Escocés Antiguo y Aceptado de la Gran Logia de Costa Rica. Bejos Yamuni fue
Gran Tesorero y Teniente de la Gran Logia de Costa Rica, y en 1949 fue nombrado
Gran Maestro de este gran oriente, cargo, que desenvolvió hasta junio de 1950, debido a
que tuvo que realizar un viaje a Europa. Yamuni fue remplazado por el comerciante
estadounidense radicado en el país: Eric C. Murray.105
Los viajes de Yamuni al “viejo
continente” fueron constantes, debido a que en distintas ocasiones se desenvolvió en
actividades plenipotenciarias representando a Costa Rica.106
El principal aporte de
Yamuni como Gran Maestro fue en 1950 promover la construcción del Mausoleo
masónico en el Cementerio General de San José.107
Conclusiones
98
Cruz Burdiel, “La emigración libanesa en Costa Rica”, 232-234. 99
AGLCR, Actas de tenidas Respetable Logia Regeneración 1 (1905). 100
Ibid., Actas de tenidas Respetable Logia Libertad 4 (1910). 101
Ibid., Actas de tenidas Respetable Logia Hermes 7 (1927 y 1938). 102
Ibid., Actas de tenidas Respetable Maravilla 10 (1940-1943). 103
Ibid., Actas de tenidas Respetable La Luz 3 (1950). 104
Ibid., “H Bejos M. Yamuni Abdala”. 105
AGLCR, “H Bejos M. Yamuni Abdala”. 106
Sobre éstas, podemos revisar: AN, Fotografía 2491, y véase: Jorge Francisco Sáenz Carbonell,
Historia Diplomática de Costa Rica (1910-1948) (San José: Editorial Juricentro, 1998). 107
AGLCR, “H Bejos M. Yamuni Abdala”.
La logia masónica se ha desenvuelto históricamente como un espacio de
interacción de personas con diferentes rasgos fenotípicos y características étnicas,
constituyéndose como un espacio multicultural. En la mayoría de países, las sociedades
masónicas, en sus composiciones sociales han poseído miembros de diferentes
nacionalidades, lenguas y religiones. En el caso de Costa Rica han sido estudiadas las
participaciones de diferentes inmigrantes en la masonería, pero el caso de los sirio-
libaneses y los árabes o musulmanes en general, ha quedado rezagado. ¿Pero puede un
musulmán ser masón o al inverso?
La respuesta es sí, ya que hemos identificado varias similitudes entre ambos
códigos de valores. Incluso, hoy día en la masonería costarricense sociabilizan dos
iraníes shiítas. En la masonería y el Islam existe el culto a un ente superior y se insiste
constantemente en la práctica de amor al prójimo. Por otra parte, la creencia en el libre
albedrío de los seres humanos y en la trascendencia e inmortalidad de sus almas; el uso
de rituales simbólicos; un discurso de igualdad; las prácticas de la tolerancia, la caridad,
la libertad de expresión y asociación, el voto y la educación; y el funcionamiento de la
logia masónica y la mezquita como centros de crítica y debate de ideas, pensamientos u
opiniones; son elementos que forman parte de las cosmovisiones masónica y
musulmana. Incluso, está el caso de la asociación masónica de proyección social:
“Antigua Orden Árabe de los Nobles del Relicario Místico”, organización mejor
conocida como “Hospitales Shriners para niños”, la cual está basada en elementos
musulmanes. A pesar de lo anterior, en 1978 el Colegio de Jurisdicción Islámica
condenó la masonería y la participación de musulmanes en ésta, incluso, llamándoles
infieles si lo hacen, ya que considera que ésta es “una organización política conspirativa
pro-sionista y anti-islámica”, representación que se explica en el conflicto judío- países
musulmanes característico de estos años.
Por otro lado, las inmigraciones sirio-libanesas iniciaron en la década de 1870
debido a las crisis política y socioeconómica, que experimentaba el Imperio Otomano.
El Monte Líbano, además, estuvo en crisis, explícitamente, por la caída en el mercado
internacional de los precios de la seda y el conflicto druso-maronita. Las inmigraciones
fueron hacia los Estados Unidos, Australia y Brasil, principalmente. A partir de la
segunda mitad del siglo XIX e inicios del siglo XX, las condiciones para inmigrar a
Costa Rica fueron bastante favorables por los requerimientos estructurales del país, el
cual implementaba su proyecto progresista. Es este país fue motivada la inmigración
extranjera, sin embargo, se prohibió la entrada a personas oriundas del Medio Oriente,
África y Asia, lo cual no evitó, que entre muchos casos, una importante inmigración
sirio-libanesa al país.
Las estrategias o mecanismos de inserción de los sirio-libaneses durante la
primera mitad del siglo XX en Costa Rica fueron: (i) económicas, a través de la
participación en las distintas redes comerciales; (ii) políticas, al nacionalizarse y
aprovechar sus orígenes, para así representar al país plenipotenciariamente; y (iii)
sociales, en las alianzas matrimoniales tanto endogámicas como exogámicas, así como
la participación en espacios de sociabilidad como la masonería y la promoción de otros
como los centros culturales. El comprender la participación de estos inmigrantes en las
diferentes dinámicas de la sociedad costarricense, nos lleva no sólo a preguntarnos en
qué medida los sirio-libaneses forman parte de la composición social del país fenotípica
y étnicamente, sino, también, cuál ha sido el aporte de éstos en la construcción del
estado y formas de sociabilidad en el país, para finalmente poder observar la
participación de éstos en la construcción y funcionamiento de identidades sociales en
Costa Rica. Por último, una temática, que está por estudiarse, es el desarrollo de
sociedades masónicas o formas de sociabilidad moderna en la generalidad, en países
musulmanes y del Medio Oriente o la participación de musulmanes en la masonería.
Nos preguntamos: ¿Cuáles necesidades sociales son llenadas o se buscan llenar al
momento en que un musulmán empieza a sociabilizar en una logia masónica?
Anexo 1
Anuncio de la tienda del inmigrante libanés Pedro José Sauma en la Ciudad de
San José, Costa Rica (1916)
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