El PIB de la Nueva Granada en 1800: auge colonial, estancamiento republicano

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EL PIB DE LA NUEVA GRANADA EN 1800: AUGE COLONIAL, ESTANCAMIENTO REPUBLICANO Salomón Kalmanovitz 1 La historia cuantitativa de Colombia antes del siglo XX aguarda a ser elaborada, especialmente sus cuentas nacionales. Existen cálculos serios sobre la evolución del PIB de 1905 en adelante, 2 pero no hay intentos sistemáticos de calcularlo para el siglo XIX y más atrás. Para estimar el valor agregado del virreinato se cuenta con datos fiscales de 1761-1800 y 1810, incluidos los estancos de tabaco y aguardiente, de la parte de los diezmos percibidos por la Corona y de impuestos al comercio interior y exterior que permiten hacer un cálculo a mano alzada del valor agregado del sector correspondiente. Hay, además, series de diezmos para la Nueva Granada central, para el Cauca y Antioquia que permiten inferir un valor aproximado de la producción agropecuaria. 1 Quiero agradecer a John Coatsworth por sus agudas observaciones a este trabajo y a James Robinson por su acompañamiento durante mi visita a la Universidad de Harvard en el otoño de 2005. Carlos Esteban Posada me hizo sugerencias valiosas y Miguel Urrutia leyó y comentó pacientemente varias versiones del trabajo. Jorge Orlando Melo me mostró direcciones de salida cuando estaba perdido entre los datos. Adolfo Meisel fue de gran ayuda para dar mayor coherencia a los cálculos del PIB y me suministró generosamente los datos fiscales de su reconstrucción de las cajas reales de la Nueva Granada entre 1761 y 1800. Martha Herrera me hizo valiosas observaciones que dieron más precisión al ensayo. Gracias a todos, aunque respondo por todo lo que afirmo en el escrito. 2 Urrutia y GRECO, Banco de la República (2003).

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EL PIB DE LA NUEVA GRANADA EN 1800:AUGE COLONIAL, ESTANCAMIENTO REPUBLICANO

Salomón Kalmanovitz1

La historia cuantitativa de Colombia antes del sigloXX aguarda a ser elaborada, especialmente suscuentas nacionales. Existen cálculos serios sobre laevolución del PIB de 1905 en adelante,2 pero no hayintentos sistemáticos de calcularlo para el sigloXIX y más atrás. Para estimar el valor agregado delvirreinato se cuenta con datos fiscales de 1761-1800y 1810, incluidos los estancos de tabaco yaguardiente, de la parte de los diezmos percibidospor la Corona y de impuestos al comercio interior yexterior que permiten hacer un cálculo a mano alzadadel valor agregado del sector correspondiente. Hay,además, series de diezmos para la Nueva Granadacentral, para el Cauca y Antioquia que permiteninferir un valor aproximado de la producciónagropecuaria.

1 Quiero agradecer a John Coatsworth por sus agudasobservaciones a este trabajo y a James Robinson por suacompañamiento durante mi visita a la Universidad deHarvard en el otoño de 2005. Carlos Esteban Posada me hizosugerencias valiosas y Miguel Urrutia leyó y comentópacientemente varias versiones del trabajo. Jorge OrlandoMelo me mostró direcciones de salida cuando estaba perdidoentre los datos. Adolfo Meisel fue de gran ayuda para darmayor coherencia a los cálculos del PIB y me suministrógenerosamente los datos fiscales de su reconstrucción delas cajas reales de la Nueva Granada entre 1761 y 1800.Martha Herrera me hizo valiosas observaciones que dieronmás precisión al ensayo. Gracias a todos, aunque respondopor todo lo que afirmo en el escrito.2 Urrutia y GRECO, Banco de la República (2003).

Los datos sobre acuñación son un buen reflejo de laproducción minera, y existen series largas de todoel período colonial y un cálculo hipotético delcontrabando da una idea del volumen de producciónminera que escapó a los impuestos de las autoridadescoloniales. También existen datos del comerciointernacional de finales del siglo XVIII. Las cifrasaproximadas de sectores como artesanía, construccióny servicios se pueden derivar de los censospoblacionales del siglo XIX, lo que de por sí tienemuchos problemas pero es la única forma de acercarsea una realidad difícil de contabilizar. Los datoscensales del virreinato sólo existen para 1778-1780y aunque es muy probable que subestimen lapoblación, permiten hacer un cálculo burdo del PIBper cápita.

El objetivo de este ensayo es entonces presentar uncálculo del PIB de la Nueva Granada antes de suindependencia, analizar los antecedentes delaparente crecimiento económico, establecer algunashipótesis sobre el crecimiento económico en el sigloXIX, con un punto de llegada en 1905. Estashipótesis primitivas, si se quiere, permiten hacercomparaciones internacionales con los resultados delas investigaciones sobre las cuentas nacionales deotros países latinoamericanos durante el mismoperíodo, como México, Chile, Cuba, Brasil yArgentina.3 Las cifras aproximadas del PIB permiten,a su vez, derivar juicios informados sobre laparticipación de los impuestos coloniales y lastransferencias a la metrópoli, el grado de aperturade la economía y el peso de los diferentes sectores.Otros puntos de interés que se pueden abordar son

3 Coatsworth (1989) [no figura en la bibliografía: aparece1989], Engerman, Sokoloff (1999).

los del auge minero y general de la segunda partedel siglo XVIII, durante el virreinato, en contrastecon la caída de la minería y el relativoestancamiento republicano. Así se podrá destacar el“costo de la Independencia”, asociado en especial aldesorden político posterior y a la imperfección delas instituciones democráticas, penosamenteconstruidas sobre bases de por sí endebles.

LAS CUENTAS FISCALES

La Nueva Granada era en gran medida una economía“natural”, con un sector minero que generaba buenaparte del excedente del virreinato. En las demásactividades económicas, los arrendatarios yaparceros de las haciendas, los indígenastributarios y aun los esclavos, los artesanos y lostransportistas que guiaban recuas de mulas ollevaban la carga en su propio lomo dedicaban lamayor parte de su energía a lograr su subsistencia.El producto transado en los mercados internacionalesy como circulante surgía de la producción de oro,que se cambiaba por bienes de lujo y otros másnecesarios: molinos, trapiches, medios detransporte, armas, etc. Las cifras de lasexportaciones de oro son del orden de 2 millones depesos plata anuales, pero también se traficaba conalgodón, añil, tagua y otros productos, en menorcuantía. Los productos transables dentro de laeconomía eran el aguardiente, la sal y el tabaco, elganado, las mieles y la panela, la sal, lasalpargatas y las ropas de la tierra. Los estancos detabaco, aguardiente y sal eran monopolios que lepermitían a la Corona extraer una parte importantedel excedente local.

Cuadro 1

Valor anual de los impuestos entre 1761 Y 1810Cuentas 1761-1765 1776-

17801796-1800 1801-1810

Minería 63.350 99.976 216.862 228.000Comercio yproducción

93.565 128.906 174.172 184.880

Tributo indígena 17.307 30.944 102.815 47.000Venta de puestos 7.820 9.116 14.893 70.000Estancos 141.846 366.271 860.612 853.500Comercio exterior 38.955 35.122 98.061 191.000Diezmos 17.890 21.196 42.841 100.000Suma común 124.082 270.140 1.510.256 811.377Totales 506.815 961.671 2.576.170 2.445.000Impuesto percápita

0,72 1,21 2,74 2,5

Impuesto/PIB 2,95 4,75 10,39 8,4Fuentes: promedios de los quinquenios de 1761 a 1800, Meisel(2004); 1810, Jaramillo (1987) (ésta es una cuenta fiscal queestá posiblemente incompleta).

De acuerdo con Aníbal Galindo, la masa común en 1810era una cuenta miscelánea de todo tipo de impuestos.Aquí destacamos los impuestos principales y el restolo subsumimos en esa cuenta. Los diezmos constituyen2/9 de las sumas acopiadas en las subastas que ibana la Corona más otros rubros que representaban un25% del producido. Se calculó una población en798.000 en 1788 y de 940.000 en 1800, suponiendo uncrecimiento demográfico de 0,78% anual. Se supuso

que el PIB virreinal per cápita creció al 0,3% anual(cfr. Anexo).

La unidad básica fiscal era la Caja Real, quecontaba con un contador y un tesorero. En la NuevaGranada habían 37 cajas reales, 13 principales y 24subalternas, que enviaban sus excedentes a lasprincipales.4 Los ingresos de la Corona en su últimadécada de dominación alcanzaron en promedio la sumade 2,4 millones pesos, unos 770.000 pesos por losestancos de tabaco y aguardiente. Los otrosproductos estancados –como la sal, la pólvora y losnaipes– completarían un monto de 861.000 pesos(33,4% del recaudo) al final de la dominaciónespañola, constituyendo el rubro más importante delos recursos acopiados por la Corona. El impuesto ala minería había sido reducido sustancialmente porlos Borbones para fomentar la actividad, del quintoinicial al 3%, lo cual debió tener efectosmultiplicadores y conducir a una mayor prosperidadgeneral; los estancos y las alcabalas, debieronaumentar sustancialmente el recaudo tributario. Elmonto coleccionado contra el oro producido fue porlo general de un 9% a un 10% de los impuestostotales.

4 El área en consideración no corresponde a los límitesactuales de Colombia. Las provincias de la Nueva Granadaen 1800 que tomó por Meisel fueron las siguientes:Costa Caribe: Cartagena, Santa Martha, Riohacha.Región Central: Pamplona, Socorro, Tunja, Santa Fe,Casanare, Mariquita y Neiva.Región Occidental: Antioquia, Chocó y Popayán. Pastopertenecía a la Audiencia de Quito y estaba también laAudiencia de Panamá, pero ambas estaban integradas alvirreinato de la Nueva Granada. Se excluyó la Caja Real deQuito.

La participación de la administración colonial enlos diezmos era del 25% y la comisión de losrecolectores un 35% del monto que recaudaban, segúnJorge Orlando Melo.5 Los recolectores de diezmosparticipaban en subastas anuales para cada juzgado olocalidad y debían estimar seriamente lo querecaudarían, so pena de pagar una caución en caso deque incumplieran. Es difícil establecer cuál era laparte de la agricultura que pagaba el diezmo.Deberían quedar por fuera los pequeños cultivos y laagricultura de los resguardos, ya sometida altributo indígena, así como la Costa Atlántica, conpoca presencia del Estado español y de la Iglesia.En todo caso, la evasión ha debido ser considerable.6

Como se aprecia en el cuadro 1, el tributo indígenaera relativamente bajo en 1783, 2,8% del total deimpuestos, y se redujo al 1,9% en 1810, lo querefleja la virtual extinción de la nación de indios.Los cultivos pequeños y sobre todo la agricultura yla ganadería de la Costa, que generaban pocosexcedentes, estaban exentos y posiblemente lejos delpoder de los diezmeros.

La gráfica 1 muestra que en la Nueva Granada lacarga de impuestos en el PIB pasó del 2,9% antes deque empezaran a surtir efecto las reformas5 El volumen bruto de producción agrícola pagando eldiezmo debió ser entonces (10 x 4 x /9) x 1,35.6 El cálculo aproximado de lo que percibía laadministración colonial y las cuentas de diezmoselaboradas por Brungdart y Melo dan sumas pequeñas que noson consistentes con las tendencias sectoriales de laeconomía. Por ejemplo, en 1810, que arrojó 100.000 pesosde diezmos para la administración colonial, el productoagrícola bruto sería de 5,4 millones de pesos, inferior ala suma que finalmente escogimos: 14 millones.

borbónicas, a cerca del 10% hacia comienzos delsiglo XIX. El Nuevo Reino de Granada tenía una delas cargas más pesadas de las colonias españolas,sólo inferior a la de Nueva España (México) que,según algunos analistas acusaba síntomas deestancamiento, precisamente por la alta tributaciónque transfería a la madre patria. Como se verá,parte del recaudo en la Nueva Granada se reciclabapara cubrir gastos militares en la defensa deCartagena y pagar la burocracia, de modo que suefecto contractivo sobre la actividad económica eramenor. Argentina tenía poca población pero ya teníaun comercio intenso y pagaba pocos impuestos,mientras que Perú era un caso intermedio deexplotación de ricas minas de plata con una cargatributaria menos oprobiosa. Gráfica 1Impuestos en el PIB colonial

Fuente: Meisel (2004).

Cuadro 2Impuesto en varias colonias de América alrededor de1800

(Dólares corrientes de 1800, 1 dólar =1 pesoplata)

País PIB percápita

Impuesto(miles)

Impuestoper

cápita

IMP/PIB

Colombia 27 2.576 2,7 10,2Argentina 82 1.121 3,4 4,2México 40 31.618 5,3 13,2Brasil 29 4.200 1,7 4,9Perú 33 2.455 1,9 5,7Fuente: Coatsworth, Taylor (1998), Tabla 1.5, p. 35. El cálculopara Colombia es nuestro y se presenta más adelante.

Falta considerar otra carga que financiaba lasactividades de la Iglesia Católica y que en la NuevaGranada llegaba, según el dato de Galindo para 1810,a 400.000 pesos, el 1,6% del PIB. La cargatributaria total de la Nueva Granada era entoncesdel 11,6% del PIB, sumando los impuestos para laCorona y los destinados a la Iglesia.

Una carga tributaria de esta magnitud era corrientepara un país capitalista de la época, comoInglaterra en tiempos de paz.7 Pero la cargatributaria de la Nueva Granada, una sociedadprecapitalista, constituía un freno importante parasu desarrollo económico, algo que entendieron bienlos economistas criollos de ese tiempo.

LAS CUENTAS VIRREINALES

El virreinato de Nueva España tenía un PIB percápita de 40 pesos (según los cálculos deCoatsworth) y era de las colonias españolas másricas, lo que pone un límite superior al PIB de la

7 Entre 1761 y 1800 la carga tributaria inglesa varióentre el 12,8% del PIB y el 14%, según Williamson.

Nueva Granada, que era una economía menos poblada ymás pobre que México. Escogimos un método de pruebay error ad hoc, basado en las cuentas fiscales, paracalcular minería, comercio y gobierno y aproximandoagricultura y artesanía a la participación de estossectores en las cuentas nacionales de 1905 y en elcenso de población de 1870. Igualamos transporte concomercio.

Cuadro 3Cálculo del PIB de la Nueva Granada en 1800Sector Pesos plata ParticipaciónAgricultura 1 14.000.000 54,4Minería 2 3.000.000 11,6Artesanía 3 3.500.000 13,6Comercio 4 1.575.000 6,1Gobierno 2.576.000 10,0Transporte 1.100.000 4,3Total 25.751.000 100,0Población en 1800 938.580PIB per cápita 27,41. En 1905, 60% del PIB era agrícola (Kalmanovitz y López,2006). Considerando que en 1800 el sector líder era el minero,el tamaño relativo de la agricultura era menor.2. El oro acuñado era de 2 millones de pesos; se supuso que350.000 salían para financiar el contrabando, de acuerdo conMeisel (2005), y 650.000 se utilizaban como medio de pago y deatesoramiento.3. Se supuso que la artesanía representaba un 13,6% del PIB, conbase en los datos del siglo XIX, que indican un 12,1% de lapoblación total dedicada a esta actividad en el censo de 1870.4. El comercio interior se derivó a partir del impuesto del 4%,lo que arroja una suma bruta de 5 millones de pesos. Se supusoque la comisión del intermediario era del 20%, lo que da1.000.000, más 100.000 de salarios a los cargadores y bogas. Elcomercio exterior, tasado en un 10%, daría un volumen decomercio de 1.910.000 pesos; que, con un margen del 25%, da unvalor agregado adicional de 475.000 pesos plata.

En términos per cápita, la producción minera enColombia era de 2,1 pesos (sin contar lasdesviaciones para financiar el contrabando o servirde medio de pago), mientras en México llegaba a 3,5pesos por persona. En ambos casos, el crecimientoeconómico del siglo XVIII fue liderado por el sectorminero (para México, ver Dobado y Manero 2006). Ennuestro caso, la minería en 1800 contribuía con un12% del PIB y durante el siglo anterior presentó uncrecimiento anual del 2,5% anual, que se tornó mássistemático y acelerado en la segunda mitad delsiglo (gráfica 2).

Gráfica 2Oro acuñado en el siglo XVIII(Quinquenios anualizados)

Según Paul Bairoch, una manera de calcular elingreso per cápita es suponerlo igual a 200 veces elsalario diario (Salvucci, 257). La cifra asíobtenida para la Nueva Granada no está lejos delsalario anual de los peones libres y concertados,que variaba entre 15 y 30 pesos al año más algunasraciones; un capataz obtenía entre 30 y 50 pesos

anuales y raciones más generosas (Tovar 1994, 19).Tomando la media de Tovar para los peones, elingreso per cápita sería de 22 pesos y 4 reales alaño, sin incluir las raciones. Si se incluyen,superaría nuestro cálculo de 27,4 pesos plata. Hayque considerar que el valor agregado por losindígenas resguardados debía ser menor, pero mayorel que producían los esclavos, y que los salarios enla Costa Atlántica eran mayores que en la regióncentral. Lo que nos dice esta consideración que noestamos demasiado desviados al contrastarla con elresultado del PIB per cápita de la Nueva Granada.

El virreinato de la Nueva Granada tuvo un buencrecimiento económico durante la segunda mitad delsiglo XVIII, como muestran la producción de oro, losresultados fiscales y los diezmos de las regionescentrales, y como atestigua Brungdart de laprovincia de Popayán, pero igual en Antioquia, queregistró un auge del comercio (Melo, 1980, Twinan1985). El Santander actual (provincia de Guanentá)tenía una activa vida económica basada en suartesanía, en su pequeña agricultura y en su intensocomercio con las regiones mineras del virreinato. Laregión de la costa y Cartagena en especial tenían unbuen comportamiento, gracias a su escasoordenamiento político, que permitía el contrabando(Herrera 2002, 116), y al gasto comprometido en ladefensa de Cartagena.

Por su parte, en México la producción minera crecióa un 1,8% anual durante el siglo XVIII, que arrastróel desarrollo de los sectores que la alimentaban.Algunos autores afirman que las políticas borbónicasestrangularon la liquidez monetaria de su economíaal ampliar la exportación de plata y aumentar latributación (Salvucci 1999, 280). Según Coatsworth

(1989), la economía mexicana se estancó a finalesdel siglo XVIII por la combinación de impuestos másaltos y una mayor exportación de plata que dejóilíquida a la economía, e hizo más onerosas todaslas transacciones. Dobado y Marrero, sin embargo,argumentan que los incentivos de las políticasborbónicas a los empresarios de la plata dieronlugar a ese sólido crecimiento de largo plazo,incluso más alto que el de una economía yacapitalista como la de Inglaterra, que crecía al1,3% anual en el siglo XVIII. Es de dudar, sinembargo, que toda la economía de Nueva Españacreciera al mismo ritmo que el sector minero.

Dobado y Marrero sugieren que el crecimiento deNueva España era “normal” para la época y que habríadesembocado en un crecimiento moderno, de no habersedado la Independencia. Pero cuando se lo compara conel tamaño del PIB per cápita de Estados Unidos en1800 salta a la vista que éste era casi el doble queel de su vecino del sur (cuadro 5). México, igualque la demás colonias ibéricas, se caracterizaba porhaciendas basadas en la servidumbre y el peonazgopor deudas, y además tenía instituciones políticasautocráticas que capturaban las oportunidadescomerciales y productivas de la época. La superaciónde ese legado ha sido muy larga y traumática en todoel continente, y es aún una barrera para eldesarrollo económico.

Aunque en la Nueva Granada también aumentarondrásticamente los impuestos con las reformasborbónicas, no revirtieron la dinámica expansiva dela economía. Como vimos, la expansión de la mineríadel oro en la Nueva Granada era más acelerada que lade la plata en México, pues el oro se utilizaba comomedida de cambio interna, cuando era extraído

ilegalmente y se intercambiaba en polvo pormercancías para las zonas mineras de Antioquia yChocó. La refinación del oro era acompañaba porpequeñas cantidades de plata que bien pudieronaliviar las necesidades de circulación interna(Bonilla 2001). Los incentivos tributarios a laminería del oro explican el crecimiento de la últimamitad del siglo XVIII, que tuvo efectosmultiplicadores en la agricultura. Por otra parte,es posible que la reorganización de los estancosestuviera acompañada por unas mayores áreas decultivo de tabaco y de caña de azúcar para elaboraraguardiente, como sugieren las crónicas de Ambalema(Bejarano y Pulido 1986; Soulodre-La France 2004).

La agricultura de la región central del virreinatodebió crecer a una tasa nominal similar a la de losdiezmos, 2,9% anual entre 1763 y 1813 segúnBrungdart, aunque, como vimos, aumentó la eficienciade la recolección de todos los impuestos y, además,hubo un alza muy fuerte de los precios de la carne(3 veces según Safford entre 1720 y 1800) lo quedebió hacer menor la cifra real. Lo anterior sugiereuna ausencia de mejoras de la productividad eincapacidad de respuesta del sector agropecuario auna demanda creciente. Brungdart dice que el alzadel precio de la carne incentivó la caza de ganadosalvaje en los Llanos Orientales, y se pagaba por supenosa subida a la Sabana de Bogotá. Los diezmos delos Llanos crecieron al 5,2% anual, el mayordinamismo del virreinato.

En la provincia de Popayán, el crecimiento de losdiezmos fue del 2% anual entre 1722 y 1800, lo queaun con variaciones de precios está bien para unaeconomía precapitalista. La agricultura de Antioquiatambién estaba en fuerte expansión, como revelan sus

diezmos, jalonados por un crecimiento sostenido dela minería y el comercio (Twinan 1985). Hay quetener en cuenta, sin embargo, que el aumento detodos los impuestos que la administración borbónicapretendió llevar a cabo incluía los diezmos, porqueuna buena parte de ellos (2/9 + 3% = 25%) quedaba enpoder de la Corona. Así, el aumento de los diezmospudo significar tanto un aumento de la eficienciatributaria como un incremento de la producciónagrícola.8

Otro incentivo al crecimiento, muy concentradoregionalmente, era el gasto en la defensa deCartagena –unos 600.000 pesos al año más 100.000tomados directamente de su caja real, que recaudabalos impuestos al comercio exterior– que también semanifestó en una mayor demanda para surtir a lastropas y a los trabajadores de las fortificaciones(Meisel 2005) El gasto en defensa de Cartagena pudollegar a ser del orden del 2,7% del PIB delvirreinato, de acuerdo con nuestras cifras. Elaumento de impuestos afectó entonces negativamente ala región del centro pero benefició a la CostaAtlántica. La agricultura de la provincia de SantaMartha y el levante de ganado en la de Cartagenadieron lugar a una división del trabajo y a uncomercio creciente entre ellas, aunque los “indiosbravos” de la provincia de Riohacha y de la Sierranevada no habían sido controlados por la Corona(Herrera, 2002)

La notable recuperación demográfica de la NuevaGranada en el siglo XVIII estuvo detrás del augeeconómico observado, basado además en una crecientedivisión regional del trabajo entre los distritos

8 Debo esta observación a Adolfo Meisel.

mineros de Antioquia, Chocó y Cauca, y los centrosartesanales de Guanentá, Pasto y Santa Fe, que comocentro concentraba la burocracia virreinal de altosingresos, mientras que en el altiplano se producíael trigo, la cebada y las papas, y se engordaba elganado que venía de los Llanos o de Tolima y Huila.La región de Guanentá fue afectada especialmenteporque el estanco del tabaco arrancó muchas matas alos parceleros, y se favorecieron Girón, Ambalema yel valle del Cauca, lo que combinado con unosfuertes aumentos de impuestos condujo a la rebelióncomunera de 1781.9

EL IMPACTO FISCAL EN EL CRECIMIENTO DE LARGO PLAZODEL PIB: DE LA COLONIA A LA REPÚBLICA

Dos elementos que ayudan a ajustar las cuentas“virreinales” es el peso del Estado en los hombrosde la economía y la magnitud del flujo de capitalhacia fuera, que afectó el crecimiento económico.Como ya vimos, en 1800 los impuestos eran un 10% delPIB, una cifra muy alta para los patronespremodernos. Sin embargo, una parte de esos recursosse gastaban en la defensa de Cartagena, otra en lossueldos de la burocracia española y criolla, más loscostos de administrar los estancos. En 1792 esosgastos llegaron a 1.447.000 pesos plata (Meisel,2004), el 6,1% del PIB promedio del quinquenio 1791-1795. Los ingresos fiscales durante ese mismo lapsofueron de 1.913.000, el 8% del PIB. El excedenterepatriable fue entonces de 1,9% del PIB, quetambién pudo ser situado en otros virreinatos. SegúnOscar Rodríguez, las remesas enviadas a España entre

9 La revuelta no se hizo sentir en la política fiscalborbónica, que siguió extrayendo cada vez más recursos delvirreinato.

1750 y 1802 rondaron en promedio 220.000 pesos plataanuales, que en nuestra contabilidad virreinal seacercan al 1% del PIB.10 El otro punto del PIBrestante se pudo enviar a México o a Perú, pero entodo caso esa magnitud pudo ser un freno importantepara el crecimiento de largo plazo de la economíaneogranadina, teniendo en cuenta que laproductividad del trabajo era baja y el excedenterelativamente pequeño.

El Estado colonial tuvo gran impacto apropiándose detodas las áreas rentables de la economía queestancaba, fijando impuestos al comerciointernacional y local, y otorgando privilegioscomerciales a los miembros de los “consulados”,frenando con todo ello el desarrollo comercial y laacumulación privada de capital. Para ser miembro delconsulado y de un cabildo o para entrar a launiversidad había que demostrar la “pureza desangre”, es decir, no tener en la más lejanagenealogía ancestros moros, judíos, indígenas onegros, lo que combinaba un criterio religioso (ser“cristiano viejo”) con otro racial (sangreinmaculada) (Hering 2004, Garrido 1993, 120). Ellolimitaba las oportunidades de los manchados por latierra o por la falsa para acceder a la propiedad(repartida por los cabildos), ser abogados y llega alos altos puestos de la burocracia colonial osimplemente entrar al comercio internacional, laactividad más rentable de la época. Los arrieros ycolonos antioqueños acumularon capital desafiando10 A pesar de que sus propias cifras desvirtúan cuantiososenvíos del excedente del virreinato a España, en especialsi se desconoce su orden de magnitud frente al productointerno virreinal, Rodríguez insiste en que “a finales delsiglo XVIII, la Colonia (sic) de la Nueva Granada comienzaa ser rentable para el fisco español” (p. 88).

las restricciones raciales coloniales tanto en elcomercio como en la titulación de la tierra.

Existe un consenso extendido sobre el impactonegativo de la opresión colonial en el crecimiento,que justificó la Independencia en términoseconómicos. Pero los resultados de este y otrosestudios indican que estaba creciendo bien en lasegunda parte del siglo XVIII la Nueva Granada,impulsada por la minería como sector líder. Lapolítica de fomento de los Borbones, que redujo losimpuestos a la extracción del oro, probó serentonces muy exitosa. Se profundizó la divisiónregional del trabajo, lo que se reflejó en laintensificación del comercio interno, a la vez quelas exportaciones de oro financiaban el comercio deimportación (y el contrabando).11

Las instituciones coloniales produjeron un rígidosistema social de castas, restringieron el comercioe impusieron pesados tributos y así impidieron quela Nueva Granada, igual que las demás coloniasespañolas, crecieran de acuerdo con su potencial. Nose construyeron los escenarios para la negociaciónpolítica entre intereses económicos y regionales,pues se impidió todo autogobierno, reflejo a su vezdel aplastamiento de los parlamentos, es decir, dela revolución burguesa en España. Al no contar con

11 Hay diversas percepciones sobre el siglo XVIII:Jaramillo Uribe y Adolfo Meisel (Jaramillo, Meisel yUrrutia 1997) perciben estancamiento y aumento de laeficiencia fiscal, mientras que Jorge Orlando Melo (1980)y este autor encuentran evidencias de un fuertecrecimiento.

las instituciones políticas básicas del capitalismo,el crecimiento económico en la América colonizadapor españoles y portugueses fue poco sostenibledespués de la Independencia.

Colombia tuvo un fuerte deterioro económico despuésde 1810. El ingreso per cápita de 1800 era de 27,4pesos plata, 308 dólares de 1985, y de 342 dólaresen 190512, lo que muestra un crecimiento muy pequeño.Esa evolución se explica por el estancamientoeconómico de la primera mitad del siglo y ciertareactivación durante la segunda mitad del siglo XIX.

Las guerras por la Independencia, que también fueronguerras civiles, y las guerras frecuentes durante elresto del siglo impusieron un pesado lastre alcrecimiento económico republicano. Pero, sobre todo,la Independencia significó el colapso del Estadocolonial y su reemplazo por un Estado demasiadopequeño. De los impuestos excesivos se pasó a lapráctica inexistencia de impuestos, que recayeroncasi exclusivamente sobre el sector externo. Así,los nuevos gobiernos no pudieron sostener lo que laCorona mantuvo en el continente durante variossiglos: cierto orden político.

El desorden político fue una causa del atraso detodas las excolonias españolas y portuguesas (North,Summerhill, Weingast 2002). Es claro que la falta deinstituciones parlamentarias, donde se pudieran12 Según la serie elaborada por GRECO, Banco de laRepública. Este fue un año todavía atípico, la economía nose había recuperado del conflicto de los mil días y de lahiperinflación, de modo que en 1899 el PIB per cápita pudohaber sido mucho mayor, como lo insinúa el PIB per cápitade 1913 que se registra en la serie, aunque con métodosmás sofisticados de paridad del poder adquisitivo local.

negociar políticamente los conflictos, y lasdificultades para construirlas durante el siglo XIXhicieron difícil encontrar una senda de crecimientomoderno, que llegó finalmente en la segunda mitaddel siglo XIX, primero a la Argentina y después sediseminó por todo el continente americano durante elsiglo XX.

Prados de la Escosura sostiene que las coloniasespañolas perdieron el orden político, un costo queapenas compensó el beneficio de la reducción de losimpuestos siguiente, pero que tuvieron un adecuadocrecimiento posterior. Sin embargo, su base de datosdel período 1820-1870 sólo incluye 4 países y enesos 50 años su PIB per cápita sólo creció el 10%.Prados compara el crecimiento de América Latina conel de las colonias europeas en África y sale bienlibrada la primera. Pero no tiene mucho sentidocomparar una colonización con poblamiento contraotra que despobló y desarticuló en forma permanentemuchas sociedades tribales.

El argumento de North et al. es que la falta deinstituciones parlamentarias en las colonias deEspaña prolongó por mucho tiempo el desordenpolítico, lo cual obstaculizó el crecimiento delargo plazo. Encontramos convincente este argumentopara las colonias ibéricas, pues la desigualdadsurgió de la división social y racial de lasociedad, lo que impidió el desarrollo del sufragioy ha sido un freno para el crecimiento económico yuna fuente de inestabilidad política.

ALGUNAS COMPARACIONES INTERNACIONALES

En términos de peso del recaudo tributario y delcomercio internacional en la economía, la Nueva

Granada tenía, como vimos, una de las cargas máspesadas pero era también una economía relativamenteabierta. Las exportaciones de la Nueva Granada eranun 7,8% del PIB, superada por Brasil (azúcar) yArgentina (cereales y cuero), pero era más abiertaque México, 5,2% del PIB, y Perú, 7% (cuadro 4).Hacia 1800, la actual Colombia tenía una poblaciónde alrededor de 938.500 personas, mientras Méxicotenía 6.122.000, Brasil 3.250.000 y Perú 1.115.000(Newson 2005, cuadro 3). El PIB per cápita más altocorrespondía a las economías más abiertas y contasas impositivas menores.

Cuadro 4Exportaciones, impuestos y PIB per cápita en 1800(Porcentaje y pesos plata)Colonia Exportacio

nes percápita

Exportaciones/PIB

Importaciones percápita

Importaciones/PIB

PIBpercápita

Colombia

2,1 7,9 2,7 10,1 27

Argentina

10 12,2 3,4 4,2 82

México 2,1 5,2 5,3 13,2 40Brasil 4,8 16,4 1,7 4,9 29Perú 2,3 7,0 1,9 5,7 33

Fuente: Coatsworth, 1998; para Colombia el cálculo es nuestro.

En 1800, Colombia era medianamente pobre y suingreso per cápita era 70% el de México, similar aldel Brasil y un tercio el de Estados Unidos. Unpunto de partida bajo para la época, si se locompara con los 450 dólares de México, los 738 deBrasil y los 807 de Estados Unidos.

Cincuenta años más tarde, era aún más pobre.Entonces su PIB per cápita era similar al de Méxicoy un 42% el de Estados Unidos, que avanzaba en su

industrialización empleando una mano de obra librecuyos salarios y productividad eran los más altos dela época. Esto nos indica que el crecimientoeconómico del país se frenó, después de que afinales del siglo XVIII se observaban relacionesmercantiles más intensas y un aumento de lasexportaciones. Ello no significaba, sin embargo, quepudiera obtener un desarrollo capitalista normal. Encomparación con Estados Unidos había grandesdiferencias de organización del trabajo en suspuntos de arranque: haciendas basadas en laservidumbre en la América española y granjasfamiliares libres en tierra no muy fértiles en elnorte de Estados Unidos y un sistema eficiente deplantación esclavista en el sur; por ello, en lascolonias anglosajonas la productividad no sólo eramayor sino creciente.

En 1913 Colombia había comenzado su despegue yalcanzado el PIB per cápita del Brasil, pero sehabía rezagado de nuevo frente a México, que tuvouna rápida industrialización durante el porfiriato(1880-1910), y seguía perdiendo terreno frente aEstados Unidos, que después de su guerra civilconsolidó su desarrollo capitalista y aceleró sutasa de crecimiento; entonces el PIB per cápita deColombia era el 13,4% el de Estados Unidos.

Los ingresos per cápita de los paíseslatinoamericanos tienden a igualarse en el siglo XX;es importante que algunos comenzaran primero, comoArgentina con su extraordinaria participación en elmercado mundial, los otros fueron entrando mástardíamente a ese territorio, pero los primerosfueron los que más se rezagaron en la segunda partedel siglo XX. Esto sugiere que los países herederosde la colonización ibérica comparten, en alguna

medida, los fundamentos institucionales quecondicionan el crecimiento económico de largo(Robinson 2006).

CUADRO 5PIB por habitante en algunas economías del NuevoMundo (Dólares de 1985)País 1800 1850 1913 1989Colombia 304 304 652 4.100Argentina n.d. 874 2.377 6.093Brasil 738 901 700 4.241México 450 317 1.104 4.170Estados Unidos 807 1.394 4.854 17.576Chile n.d 484 1.685 5.355Fuente: Engerman y Sokoloff (1999, 318). Para Colombia loscálculos de 1800 y 1850 son nuestros, el de 1913 es deCoatsworth (1998). Los resultados de Engerman y Sokoloff para1989 nos parecen extraños, y para hacer los ajustes empleamoslas proporciones entre Colombia y Argentina y México de 1992 quecalculó Maddison (1995, 24).

Los datos calculados del PIB per cápita de losdiversos países permiten derivar las tasas decrecimiento, que se presentan en el cuadro 6. Ahorasuponemos que la economía de la Nueva Granada tuvoun crecimiento del PIB per cápita del 0,3% anualdurante el siglo XVIII, un buen comportamiento parauna sociedad preindustrial. En Estados Unidos crecióal 0,5% anual en ese mismo período.

CUADRO 6Tasas anuales de crecimiento del PIB per cápita(porcentaje)País 1700-1800 1800-1850 1850-1913 1913-1989Argentina nd Nd 1,6 0,5Brasil nd 0,4 -0,4 2,4

Chile 0,4 Nd 2 1,5México 0 -0,7 2 1,9Perú 0,1 Nd 1 1,5EstadosUnidos 0,5 1,1 2 1,8Colombia 0,3 0 1,1 2,3Fuente: Engerman y Sokoloff (1999, 318). Para Colombia, loscálculos de 1700-1800 y de 1800-1850 son a mano alzada, el de1913-1989 se basa en GRECO. Nuestro cálculo para 1800-1905 diouna tasa de crecimiento del 0,4%, de modo que se supuso que enel medio siglo hubo estancamiento y que en el período 1850-1913se compensó para obtener el crecimiento de esos 113 años.

COHERENCIA DE LAS PROYECCIONES

Queremos finalizar este ejercicio de estimación delPIB del virreinato de la Nueva Granada seleccionandoalgunos indicadores para analizar cómo se deterioróel crecimiento económico después de laIndependencia. La producción de oro cayó y seestancó durante buena parte del siglo XIX, comoresultado del colapso del esclavismo y de lainestabilidad política (gráfica 3), para sobrepasarel nivel colonial en 1890, con la introducción de lamecanización en las minas de veta de rvantioquia. Lafuerte caída de los diezmos, que se observa en lagráfica 4, pudo resultar de una combinación de unabaja de la producción causada por los conflictos yun cambio institucional, la resistencia de algunosterratenientes liberales a seguir tributando enfavor de la Iglesia.13 En todo caso, frecuentes lasguerras civiles y el desorden político resultanteimpidieron construir infraestructura, avanzar en laeducación e impulsar el desarrollo económico durantebuena parte del siglo XIX.13 El diezmo que recibió el gobierno en 1830 fue de 55.000pesos, y cayó a cerca de 20.000 en 1845 (Galindo 1978,cuadro 9).

Gráfica 3Producción de oro en el siglo XIX

Fuente: Ocampo (1984, 349).

Gráfica 4Diezmos, Colombia Central

Fuente: Brungdart (1974).

Las gráficas 5 y 6 muestran las exportaciones percápita durante el siglo XIX y el monto exportado a

comienzos del siglo XX, para recalcar dos puntos:que en términos de comercio internacional, el sigloXIX no significó una involución sino un crecimientomoderado de las exportaciones y un crecimientoeconómico similar al de la expansión de lapoblación, 1,5% anual (Melo 1992, 29); y que eldespegue hacia el crecimiento moderno fue un procesoque se inició en el siglo XX.

Gráfica 5Exportaciones colombianas per cápita, 1835-1913

Gráfica 6Exportaciones de Colombia, 1830-1928

Fuente: Ocampo (1984).

El otro tema que mencionamos someramente fue el dela drástica reducción del tamaño del Estado(gobiernos central y locales) que fue el resultadomás buscado de la Independencia, que medido por elrecaudo tributario pasó de un 10% en tiemposcoloniales a un 3-4% del PIB hasta bien entrado elsiglo XX (Junguito y Rincón 2004). Como vimos, eseEstado era tan pequeño e insuficiente que en elsiglo XIX no pudo garantizar un orden político quefavoreciera la acumulación de capital de largo plazoni estuvo en condiciones de construir unainfraestructura de transporte y de energía queaceleraran el desarrollo económico. Esas secuelassiguen marcando la estructura del Estado colombianoen la época contemporánea, aunque en menor medida.

Para concluir: los datos sobre la caída yestancamiento posterior de la producción minera, elcolapso de los diezmos agrícolas entre 1818 y 1833,las frecuentes guerras civiles que siguieron a laIndependencia y el moderado crecimiento de lasexportaciones durante el siglo XIX dan apoyo a la

idea de que el crecimiento económico durante laprimera mitad del siglo pudo ser parecido alcrecimiento de la población, mientras que en lasegunda mitad fue más dinámico, para hacer un fuertedespegue en las tres primeras décadas del siglo XX.Esto sólo fue posible después del apaciguamiento quesiguió a la Guerra de los Mil días y a la reforma de1910, que transformó a la Constitución de 1886 enuna carta de navegación económica, acompañada de unapaz política relativa.14 Se consolidó así, en ciertamanera, el crecimiento moderno de la economía. Perola frase “consolidó el crecimiento moderno” puedeser exagerada: este crecimiento fue similar al quecaracterizó al resto de los países de AméricaLatina, donde no alcanzó a ocupar a toda lapoblación de manera productiva ni a profundizar losmercados de los otros factores (tierra y capital).Sin embargo, esa es otra historia que merece2004investigaciones adicionales.

ANEXOSCuadro 1APoblación, PIB per cápita e Impuestos en la NuevaGranada 1761-1800

14 Entre otros cambios, hubo los siguientes: se redujo de6 a 4 años el período presidencial; el presidente pasó aser elegido por voto popular directo y no por una asambleade delegados; se introdujo el voto universal masculino; seintrodujo el voto incompleto, mediante el cual al partidoque sacara la segunda votación se le daba una terceraparte de los curules del Congreso y participación en elgabinete, y podía tener alcaldes y gobernadores (cfr.Mazzuca, Robinson (2006).

Notas: La tasa de crecimiento demográfico se dedujo delcrecimiento durante el período entre los censos de 1778 y 1825,0.7878% anual. La población se calculó mediante promediosanuales quinquenales, excepto en 1800.Se supuso que el PIB per cápita crecía a una tasa del 0,3%anual. El punto de partida fue el que se calculó para 1800.El PIB se calculó multiplicando la población por el PIB percápita. Los impuestos se derivados de los datos de Meisel(2004), como promedios anuales quinquenales.

Cuadro 2AIngresos y gastos del Nuevo Reyno de Granada en 1792Concepto Pesos plata Porcentaje del

PIBGastos militares de Cartagena

470.328 1,9

Gastos militares de Santa Fe

104.333 0,4

Sueldos de la administración

371.172 1,5

Gastos del estanco de tabaco

309.565 1,2

Gastos del estanco de 182.089 0,7Total 1.477.487 5,9Ingresos promedio 1791-1795

1.913.126 7,7

Excedente posible 456.639 1,8Fuente: Meisel (2004).

Cuadro 3APIB per cápita como porcentaje del de EstadosUnidosPaís 1800 1850 1913 1989

Colombia 38 22 13 23Argentina n.d. 63 49 35Brasil 91 65 14 24México 56 23 23 24Chile n.d. 35 35 30

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