El motivo de la fuente en el Cántico Espiritual de San Juan de la Cruz. Antecedentes y dimensión...

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Reo*¡ta ite tn Facultad de Fílosofía y láras ile la Pontiftcia Unil¡wsifuil ' Cdótica Argmtfuru Santa Mo¡ia dz lott Buénos Aires /¡'-m. AGOSTO 1983

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Reo*¡ta ite tn Facultad de Fílosofía y láras ile la Pontiftcia Unil¡wsifuil

' Cdótica Argmtfuru Santa Mo¡ia dz lott Buénos Aires

/¡'-m.

AGOSTO 1983

EL MOTIVO DE LA FUENTE EN EL CAT]TICO ESPIRITUALDE SAN IUAN DE LA CRUZ.

AN¡TECEDENTES Y DIMENSIÓN SIMBÓLICA. O

Resurrrr¡+ (ansrntcr) DE- rR{BAJo

El p,ropósito de este artículo es estudiar el moüvo de la fuente e¡ el Cá.nti.co Espiritunl de San Juan de la C;ntz, mediante }a comparación con $rs antese-dentes más inmediatos y más discu*Jdos:laEglngo ff, de Garcilaso de la Vega,y su refundición "a lo divinol' por Sebastián de Có¡doba. Dicha comp,araciónse proporle destacar la profunda originalidad del motivo et el Cárúfuo, dondees verdaderamente un símbolo sacrq mientras que en Garcilaso su senüdo,que es profano, no llega a lo simbólicq y en, Córdoba se encierra dentro de loslímites de la alegoría. Este trabaio se completa con Ia mencfón de algunasotras fuentes que pueden citarse para la fuente en el CfuúM, y con la breveenumeración de otros motivos del poema que tradicionalmente se relacionancon el motivo de la fuente

Lr runNrr EN EL Cá¡úbo Wtd or S¿¡¡ JueN on r¿ Cnuz

L La espiritunl.izwihr del mdía: ¡Ie lo Wstarfl a la mí§bs:Go¡cila,so - SebostüÍn iI¿ CNofu - fun ltmn d¿ Ia Cnn

I.L) Ngww^e tesis c,títicas oúerio¡a sobte. ln^s odnaiudonas erüeC,ucilaso - Sebastúún ile Ctffiofu g Sofl luan de la Cnn:

L1.1) Dámaso Alonso: I-a rysía ile San luan ilz la Cnn (Deúe wtaladera), L912.

En este libro -ya un clásico de los estudios sanjuaninos- dedica DimasoAlonso abundante estrncio al problema de las fuentes del poeta místico. Seocutr)a, entre otros motivos, del tema de la finúe (no sólo de la fuente del

* Este trabajo fue realiz¿do durante la tenencia de r:na beca intema otorgada por elConsejo Nacional de trnvestigaciones Científicas y Técnicas.

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chtiao sino también de la fuente del 'cantar de la alma qu.o so huelga deconoscer a Dios por fe"). Le reconoce a este tema antecedentes generales nogarcilasescos en la literatura bucólica y en Ia mística, pero insiste trrarticular-mente en la influencia de Garcilaso y, sobre todq en la de su devoto refun-didor, Sebastián de Córdo,ba. A saber:

a) Alonso afirma Ia constancia del empleo místico del agua, con granvariedad y matices de simbolización. Recuerda a Francisco de Guna y Bernar-dino de Laredo, en la transmisión del tema místico del agrm mmantte, temaque aparece, como se sabe, en el "Cántar de la alma..." ("b. cit., p. 61).

b) En cuanto a Ia estrofa 11 (versión A) del Cóntico Esphüua\ qurepresenta una fue¡te estática, una "fuente-espejo", Alonso se remonta a los pri-meros brotes del género b'ucólico, y señala que dicha fuente:

'...ut, del lado literario humano, consecuencia de una larga traüción (no olvi-demos el ambiente pastoril del Cóntico de San Juan de la Cruz). La iarga cadenaempiez.l en lo mítológico, y abarca el desarrollo del género pastoral, fuente deNarciso, agua-fuente o serena playa -en que se miran los pastores, desde el mons-truoso de Teócrito y Oviüo y el Coridón virgiliano hasta el lloroso Salicio y elaristocrárico Albanio de Garcilaso de la Vega'; (ob. cit., p. 41),

Insiste más adelante:9

"El tema de la fuente, en la ascendencia pastoril del Cántico, es tan üejo comoIa literatura bucólica en e1 mundo" (ob. cit., p. 06).

c) No obstante, Alonso ve en la fuente de la estrofa 1l influencias másespecíficas. En primer términq destaca el uso particular del tema en Garcilaso.Etla Egl.oga II -señala.Alonso- la fuente es el lugar central de la acción, noun mero elemento decorativo com,o solía serlo en la pastoril; acompaña todala trama y cumple un papel hasta cierto punto de "personaje- puesto que lospastores se dirigen a ella mediante evidentes voc¿rtivos. No es, tampocq unsimple espejo, corno en la Iiteratura bucalica anterior, sino el lugar donde venlos pastores "imágenes abstractas, espirituales. . . o visiones de la desvariadairnaginación" (ob. cit., pp. 42 y 66).

También en San Juan de la Cruz -adüerte Alonso- la fuente es :urt csnbro(.-bisagra de su estructura, pues siwe para separar Ia .vía unitivar, articulándolacon los grados anteriores", p. 42) y es un espejo donde se ve la imagen másespiritual que es dabtre imaginar: la del Amado divino. Pero -señala don Dáma-so- en este caso el tránsito, de Garcilaso a San Juan no es directo. Hay "unr.inculo, un término intermedio", un "eslabón", en fin, que falta.

d) Este eslabón perdido es, corno decía María Rosa Lida, el ',libreio" desebastián de c6rdoba. Para D'ámaso Alonso, en Garcilaso la fuente llegaba alos límites de Ia simbolización, aunque sólo del Lado humano. Córdoba sería

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Ia _pauta que permite Ia transición entre el símbolo profano y el símbolo sagrado.có,rdoba, antes que san ]uan, llena al símbolo garcilasesco de sentido rellgioso,si bien, como el mismo Alonso lo reconoce, el sentido parücular de la simboli-z-aci6n llevada a cabo por Córdoba no está muy claro ip. OZ).

e) En suma, Alonsopostula comoinspirador m.edi^afo de san Juan, en cuantoa la privilegiada posibión central de la fuente, en cuanto a la superación delespejo de la literatura pastoril, que se limitaba a reflejar las formas físicas, enc¡ranto al empleo del vocativo para dirigirse a ella, a la fuente de la Egloga lrde Garcilaso: p€ro propone como antecesar inmed,ido a sebastián de c6ráoba,por el solo hecho de haber imbuido de significaoión leligiosa el motivo delpoeta toledano. En cuanto al sentido específico de la fuente, Alonso-admiteque no hay semejanza entre la "fuente de la fe" saniuanina, y la fuente delrefundidor, que oscila entre el "espejo donde ve el alma sus culpas" o dondese refleja una misteriosa historia ininteligible para el grosero Silvano, y la "fuen-te de la Gracia" que mana del costado de Cristo.

f) Alonso no menciona los orígenes bíblicos del tema. Dedica tambiéna1gún espacio a refutar la sugerencia de Pfandl, que planteaba Ia consideracióndel cttbdlero Pl"ati"r, como fuente inspiradora del carrnelita (cfr. pp. 62-66).

I.1,2) María Rosa Lida: Reseña de La poesia d.e San luan da l,a Crua,RFH, V, 1943, pp. 377-395.

Esta investigadora descarta a Sebastián de Córdoba como fuente intermediaentre San |uan y Garcilaso; 1o admite como fuente saamt'daria, coexistente iun-to al influio directo del poeta de Toledo. En lo que respecta a ra fwnte delCá.rúíno Espdrbüol y sus antecedentes, declara:

a) Que está de acuerdo con Dám¿so Alonso en el rechazo del cabstteroPl,otit como texto inspirador del motivo de la fuente en San ]uan.

b) Que, e,n cambio, no le parece de absoluta necesidad postular la media-ción de córdoba entre la fuente del cántico y la fuente profana de la Egtoga trL.

Para iustificar esta aserción aduce 1as siguientes r.azones:

_ bl) Que la fuente es un simbolo religioso muy antiguo y empleado en muydiversos sentidos;

b2) Que la fuente de Sebastián de Córdoba asume un sentido distinto dela de san Juan, "que representa la Fe, donde se refleja la presencia divina-.Ninguno de los sentidos que la fuente detentaba en córdoba :rcorresponde a la{e, y todos son ir:¡econciliables con el reflejo de un rostro, con los .oiosdeseados, ";

b3) Que, dejando aparte el aspecto alegórico, "«los ojos deseados» están máscerca de Garcilaso (Esbga 11,746-747): ¿sabes qué me quitaste, fuente clara,los ojos de la cara?...";

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M) Qu" nada se opone a la interpretación directa del texto garcilasianoen sentido religioso por parte de san Juan, más aún, habiendo una ya largatradición que identificaba la fuente con Ia fe;

b5) Que sólo en la Eglo'ga 1I, a diferencia de tanta literatura bucolica anterior,se espera ver en la fuente otro rostro distinto del propio. En esta variante p'uedeperdurar -sugiele María Rosa Lida- el recuerdo del espejo mágico del Príma-Ieón (modeTo del cabail,ero Platir, iechazaco como fuente de san Juan por razo-nes de imposibilidad bibliográfica) en el cual ve el amante -perímágicamente*el rostro de su amada. si este doble recuerdo -Garcilaso y el Primoleón- perdu-ra en el deseo de la Esposa, cabe notar -señala María Rosa Lida- cuán de].ica-damente se desvía san ]uan de ambos modelos: de Garcilaso porque en sanJuan la E,spo,sa no se contempla a sí misma en la fuente sino a su Amado; delPrimo,l,eón po,rque el reflcjo de los ojos divinos sobreviene por el deseo yno mágicamente (cfr. Lida, ob. cit., pp. 384-385, nota r, para la disquisiciónsobre la fuente).

I.1.3) E. Allison Peers: Reseña de La Poe.gía de San luan d.e la Cruz.BSS, XXII, 1944, pp. 104-106.

E1 e¡te trabajo, Allison Peers la da justamente corno ejemplo de '1ugarcomúri', desmintiendo que pueda tratarse de una influencia direóta de Sebás-tián de c6rdoba. Pe€ s es, en general, reacio a aceptar el influjo del refundidory estima que ni aun la evidencia de más peso aducida por Alonso grede consi-dera¡:se concluyente.

L1.4.) E. AllisonPeers: "TheAlleged Debts of San Juande la Cruz toBoscán and Garcilaso de la Vega", IlR, vol. XXI, nQ 1, Jan. 1953.

En este a¡tículo se propone Peers una exhaustiva revisión de las supuestasdeudas de San fuan con Garcilaso, Boscán y Sebastián de Córdoba. Como méto-do general sugiere la precaución de fijarse siempre si la fuente de los pasajesestudiados en San Juan no puede hallarse en el Cantor de l,os Co",nlues antes queen la literatura profana. En lo que respecta al motivo de la fuente en particular,Allison Peers sitíra las tesis de Alonso frente a la críüca del más furioso opositor'a los sostenedores de la influencia de Boscán y Garcilaso sobre San Juan: el padreEmeterio de Jesús María. Este opina que en toda la tradición pstoril anteriora Garcilaso suele ocu¡rir que Ios pastores se dirijan a la fuente directamente;que el tratamiento del tema de los ojos y del espejo es distinto en Garcilasoque en San Juan; también aduce que, si bien la fuente es en la Egloga II másimportante que en la pastoril latina, es más bien episódica que central. Porultimo, cornpara el pasa¡:e de San ]uan con pasajes de Cetina y Montemayor,sosteniendo que éste se aproxima a San Juan mucho más que Garcilaso. Peersopta por considerar que existe una posible reminiscencia de Garcilaso, aunqlueprcclama la necesidad de tener presente ante todo el C¡ru.ttar (IV, 15; IV, 12).

Sobre la comparacíón realizada por Alonso entre la estrofa del Cdntíco y laescenade la fuente enla Eglngyt:,Il refundida por Sebastián de Córdo;ba (Allí

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'1

estaba una fuente clara y pura / que como de cristal resplandecía. . ."), "1

padreEmeterio piensa que la aproximación es tan vaga que una fuente real, rodeadede árboles silvestres, podría haber inspirado mejor a San luan. A Peers, por sparte, el paralelo le parece uno de los más débiles citados (cfr. para la discu-sión sobre el tema de la fuente art. cit., pp. 12-13).

Ll.5) Glen R. Gcle: edición de C.t$rctla'so a lo dioina, de Sebastián deCórdoba, con introducción y notas; 1971.

Gale afirma decididamente Ia función mediadora del refundidor. En gemral adhiere siempre a Dámaso Alonso; en su comentario sobre la Egloga IIrefundida por Córdoba se limita a la comparación Córdoba-Garcilaso, sin exter-derse en paralelos con San Juan de \a Cruz, pero nunca discute los asertos dedon D:ímaso. Gale lleva su favor hasta el elogio de Ia 'testreza literaria" deCórdoba,l de su talento naturaL lnra la composición, si bien termina reconiFcie,ndo que dicho talento se ahoga la mayor parte del tiempo en Ia mediocdda¿No es, por cierto, el único en arriesgar este tipo de valoración.2 En sunea, C,aIe

defiende a Córdoba como "eslabón perdido" que une a San Juan con Garcilaso,exalta sus virtudes como refundidor, y destaca el objetivo espiritual y didáctico

-no estético- de su obra.

I.1.6) C,olin Thompson, The p,oet and th,o mystic, Oxford, 1978.

En este importante litrro, Thornpson minimira., en general, la influencia deSebastián de C6rdoba. En cuanto al motivo de la fuente -nos dice- es tanantiguo como la misma literatula bucólica (cosa que admite -recuerda- dmismo Alonso). Para Thompson, el único pasaje (queno pertenec€,,por cierto,a las églogas refundidas) donde podría darse alguna semejanza entre la estrofa

11 (versión A) del Cántdco, y Sebastián de Córdoba, es el siguiente:

"juntos a algUna fuente nos yremos ,/ por donde el agua rnumrtrando vaya / !combidarnos a que nos sentemos / su cústalina lustre..

"' (F. tg¡r-v, en la eüeión

original).

Y aquí -dice Thompson- aunque se utiliza el mismo adjetivo que ern-'

plea San Juan (cristalina), 'this cornmonplace description is given ¡o ¡!¡g «lustre, rather than to the .fuente' asin San Juarf' (p. 74).

No hay ninguna referencia de Thornpson aI simbolismo del pecado y dcla Gracia como posib,le eslaMn entre la fuente aún pastoril de Garcilaso y lafuente mística de San Juan de la Cruz

En general, Thompson considera que todos los nexos hasta ahora estabile"

cidos entre Sebastián de Córdoba y San Juan "are commonplace, and shon, nosignificant parallels" (p. 7a).

1 GALE, C., S&astiá¡is da C'órdabo craftmanship, MLN, vol. 84, no 2, trla¡cü,1969, pp. 3O8Jl4.

2 Gr..rsB E-, fl cú¡o co*ña etu orc. Christian rifrcimarúas of Garciüaso's petr¡in t}¡e sixteenth and seventeenth centu¡ies". HR, 37, 196O, pp. 6l-76.

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Ii1iliii

Tarahién destaca agud¿mente la düerencia radical de tono y espíritu entreeI gran rnístico y el piadoso refundidor:

'Córdoba is a rnoralist, and not a very impressive one; San Juan is a my§tiggiven to flights of raptue and exhuberance of langrrage. It must therefore be

conoluded that in spite of üe importanc.e ascriH to Córdobá as an influence onSan ]uan's poeüc formation, an examinaüon of his divinized Boscán and Garci-laso fails to produce any Írore thao a series of shared com¡rronplac'e words andüemes, aud perhaps one case of indirecÉ parallel. The view which has become

so rvidely widespread, that San Juan was deeply indebtd to Córdoba, needs

serious rnodification" (p. 75).

Thompson tampoco admite una deuda directa de San ]uan con respectoa Grcilaso en el pasaje que nos ocupa. CA 11, sosüeng es una elaboraeiónde Ia vieja imagen del pastor (Polifemo) que se mira en las aguas y vo su pro.pio reflejo, lo cual le prueba que no es tan mal 4rarecido. Eo San ]uan:

".. .it is the Bride v'ho gazes into the «ch¡istalina fuente», with aI the symbolism of these words in Cü¡ristian literature (Thmpson no aclara cuál sea este

simbolismo), desiring to see there reflected üe eyes of the Belor¡ed" (p. 78).

Garcilaso -serlala Thompson- también trata el tema originalmentg en

especial al ligarlo son la locura de Ñbanio, pero el üatamiento que de á baee

San Juan es demasiado diferente cormo paxa suponer una influencia garcilasiana.

Estas son, en sruna, las principales posiciones en cuanto a las fuentes inspi-radoras garcilasianas o refundidas, déI pasaje que nos ocupa. Va)¡amos ahoraa la cornparación directa entre los tres autores: C"areil,aso, Có,rdoba y San ]uande la Crue

L2) Contproníon Aet *rtW de ta fwnte en lz,ls tras rytas:

En un trabajo anterior ("La función de ias aguris en Ias eglogas do Gar-

cilaso de la Vega") realizamos un cuidadoso anáIisis dela Egl.oga II con miras

a ubicar la fúnción de la fuente y el bío Tormes. En este anárlisis habíamos se-

goido el esquema de Rafael Lapesa,3 descubridor, como se sabe, de una colres-

¡nndencia *étti"t entre las dos mitades de Ia égloga; corrcspondencia, desde

h.SO no siempre exacta, matemática, pero sí lo bastante apreciable para dese-

char las críticas que consideraban esta notable composición garcilasiiana como

un trabajo desmesurado o caótico. Comprobamos así que la equilibrada- cons.

ln¡cción de la égloga se realzaba aún más por la exister¡cia de contenidos se'

m¡inticos contrastantes que correspondían a las formas métricas trnralelas en

t¡tr¿ y otra mitad de la obra. Dentro del juego de oposiciones así constituido se

futacaban lt fuente y el tío Tot"mes como imágenes centrales de dos mundos:

! Leps§A, R., f¿ tWec-totfu poétba ilc C,ucilaso, Mad¡id, B,evi§ta de Occidente, 1968.

:45 -

Ia fuente, del idearizado ¿imbito pastorir, r9r9s de ra dura acción hsoiea; e,r d;:Thi:.ra vida cortesana y g""r."rr, áár .*uiá a"i"-J;; y d" r"

"oe,l

rencias halladas, sino sobre la situaiión y l*a"t"rírticás de ,"]"rrliJitrtrffiraleza en general) en el poera trilJ;;;;;n su refundidor.

En sebastián de córdo,ba esta fina oposición se rompe. se trata aquí, dmrdequiera, det probtem" d" I; ,i"r#;i:t.p_!r", ;r;;il;;tado con ryoscuros üntes moraristas. En cualquier ámbito á; a;;;;; _corre o ,r*jo cafnpo abierto- ra c¡iatura h¡.rilana apa.rece corno deste-"dr;;;;Hcelestial hacia Ia que creben t""d"r toduJ^rrr, *¡"r. ra É,do;i il pierde, en h,ff.'r""t:ff:*:jT' _*11i _*. co'árur, ese exquisiro y armonioro ,"hoJffHfTI;:, de la,., naruraleá ga,crrasi;. i; ;;Hü;áá#"J'L,ffi;,ó

" ;"'ffi , #ffi

s :[",:i'Hi,ll;:i1l 6m;i :: :::ffiU'; XHdán, escenario de una= aburria" r,i*iZ"' i. Ur,"Urr';rbr"r_; ;iñ;i;_rEiNos p'roponemos a continuación reariz.ar un 1»rarero entre ras dos églogdsiguicndo las divisiones métricas rau"rtiá"r- *i I,ñ;;.' i]üo, com¡nrarí+rmos entre sí Ia primera y segunda mitad de li nel;""Ii, jl}.a"ur,

reraeio- 1nándola brevemente con ras "unti"oáil,

vu r,uuraá, ;; ;;;" ""bajo

anteriri::LT,:T,:fl,:f:'"1"^9::li:"-.Fi*1"i"íJ," centrará, no sobre toa", ra drre- l

Gencu¿so vs. 1-37 Senasr¡er »p Cónnon¿

- L¿- fuente es imagen del pasado:"Oh,/ clarus ondas] "¿*, ";;;;:sente,,/ en viéndoos, Iu *"*oria'd"

aquel día..."- T¿ fuente aparece inmutable frenteat cambio nafural de las estaciones-

per{ecra y siempre "rtrb6-il;;i;;iturbulento conflicto amoroso en elalma del pastor.

- No aparece la fuente como imagendel pasado.

- l{o .u destaca el contraste entre Iainmutabilidad de Ia fuente y Ia;;funda alteración anímic" áéf ,"iái"-Antes bien, parece estableclrse'uütacrta comparación entre Io que ocn_qe col la fuente y lo,

"rrui*", Lo9I, e.spíritu de Sylvano: ..En

mediooel rn\¡rerno está templada/ el afi;adulce desta clara fu^ente,Z y-,r'áverano más que nieve elada. / y eteste pecho todo es accidente:/ enel estío.soy la^nieve fna/ y

"" á"¿1"del tnyierno tuego ardiente;,,

En- vez de mostrarse como unparadigma de Ia autosuficiencia vapacibilidad de la Naturalez¿ frentáal dolor humano, la fuente s" ;;;:sentaría -casi como un e¡emplo'desubversión del orden, au'f" i"" ,"hace eco Sylvano.

-28-

G¡ncr,lso SmesrrÁN »n Cón»ore

- Visión idealizada del paisaje. Natu-taleza plrra y armónica (que rodea asu imagen central y quintaesenciada:la fuente)

- Inarrnoníá hombre desdichado/ pai-saje paradisíaco ("yo solo en tantobien

-morir mo siento")

- No hay púcticamente imágenes na-turales.

- No se da.

vs. 38-76

- Elogio de la vida retirada en la pazdo la Naturaleza

- Holganza en eI deleitoso marco na-tural:'A la sombra holgando/ de un altopino o robre,/o de alguna rob'usta yverde encina/ el ganado contando,/de su manada pob're.. '" (51-55).

- Imagen del deicanso, del sueño plá-cido en eI Paisaje arneno, junto almurmullo de Ia fuente:*Convida a dulce sueño/ aquel man-so ruido/ del agua que la clara fuen-te envía. .."

-Paradigma: hombre natural, libre decuidados, inocente, sanq en el mar-co deuna naturaleza Perfecta.

-- Elogio de la vida virtuosa.

- No hay mención de marco natu¡al nide hoiganza. Se enfatiza el trabajoconstante, y la búsqueda de 1o iustoy provechoso.

- Sueño moderado del hombre ürtur:'so, quien se desPierta Ya-Pemandoen

"I traba¡o gue le aguarda durante

el día.

- Paradigma: hombre matd, laborio-so, consciento de Ia culPa, Preocu-pado al m,áximo por la salvación deiu alma. No hay entorno natu¡al.

d ^^áVS. / /-ó\rf

- Elogio del sueño restaurador.

- Tema de la Fortu¡a: desdicha delque cae de un estado dé "amorosos

bienes" por obra de la Fortuna ca-prichosa.

- Relato de Albanio:Intervención constante de la Natura-leza. Camila es una ninfa consagradaa Diana desde la niñez. Los dos ami-gos se dedican al pasatiemPo do lacaa (mayor y menor)

-Escetrarios: montaña, bosque, selvar¡mbmsa, valle, fuente, llano.

-Vituperación del sueño "de letargomortál": presumiblemente se refie¡eaquí Córdoba al zueño del Pec,ado.

- Téma de la culpa: desdicha del quevive alejado de la Gracia.

- Relato de Sylvano:La Naturaleza no interüene con asi-duidad, en realidad, casi nada.Se habla de una vida licenciosa debailes, banquetos y vicios en cornpa-ñía de Celia.

- Escenarios: "ptraga" "fiestas", "canto-nes",'banquetes"; los dos amigos se

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-:1.il

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Gencr.eso Sr¡esrrÁw nn Cónoore

solaan con *músicas y juegos delei-tosos"

*amorosas cancioncillad', y se

entreüenen en la sedueción de mu-jeres mediante tercerías ( C,elia, alparecer, ayudaba a Sylvano en es-tos pasos).Demás está señalar que estos am-bientes no condicen en absoluto conel rámbito pstoril al cual se suponeque pertenecen los personaies de_ la6glo§a.I-a mixtura es bastante des-afortunada.

vs. 33835

-Después de protestas, ctmieuza el -Después de protestas, relato de Svl-relato de Albanio. vano.

vs. 386S80

f, ,+,ll

hl

- La tensión entre Albanio y C,amilaproüene de que Albanio no se atre-ve a confesarle a Camila su amor.

- En una "ardiente siesta" faügadosde la caza,llegan Albanio y Camilaal "mejor lugar do la floresta" (elmismo en eI que se centra 1a con-versación Albanio - Salicio)

- Se reclinan a la sombra de un árbol,que no aparece on el resto del re-lato.

- Recogen el "agradabtre espíritu delcéfiro fresco".

- Se describe la fuente (siguiendo muyde cerca el modelo ovidiano de lasMaamorfosis).

- La fuente es la misma que la del co-mienzo, del relato, y la que permane-ce en toda la composición.

- La fuer¡te se pinta -similarmentea Ovidio- como una fuente rodea-

-EI desentendimiento Sylvano-Cbliaradica en que Celia Ya no acomPañacon gusto a Sylvano en sus corretías,.y lo amonesta con frecuencia.

- Llegan, también a la hora vespertina,peró'viniendo de una fiesta fatiga"-áos". Celia y Sylvano al "mejor lugarde la floresia" (que no' es identifica-do con el escenario del diálogo Raci-nie.Sylvano).

- Se reclinan a la sombra de un árbol"que adquiere una insosPechada di-mensión y se hace figura de la mismaCruz.

- C,elia recoge "no sé qué espíritu" delos sacros ramos del árbol.

- Celia, llorosa, comienza a encarecerlas virtudes del árbol.

- Aoarentemente. se trata do otro ma-rrrirti"l, "Aüí eítava una fuente cla-ra y pura...". La descripción _no es

exactámente la misma que en Garci-laso. No hay mención de la arenadorada y.las piedrecillas. La fuenteesta rcreada de "mil diversidades de

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Srn¿.sr¡,fu nn Cónoos¡Gencrr¿so

da de arena áurea, y exenta de toda gt""g9.'pero no hay- huellas de pas-

huella en su derredtr. [or' Sólo se ve un pastor levantado

sobre el árbol, que es una clara ima-

sen de Chisto crucificado'

- C¿mila va a ¡nirar en la fuente el - t6t* llora ante el pastor sangrante y

rostro de la amada'dá Albaoio y en- uñs; * sylvano qué renuncie al mun-

cuentra, desagradablemente so{pren- il:il itlgt ' lá fuente' no movida

;ffiJ iiyá?opio ffi,1ij;:;?j.'"##;le*:.t;,'ll:"¡ü l" función de espeio de-la fuen-

te ("como claro estrrjo relumbrava ,,¡-

- c¿mila huve airada al ver su propio - 3"*:: '!;T'i';;iJ:H:t:L¡Tl:rostro en la fuente' ;;;;"d" U"g, S,f""r,o r ,""1u yhuve también.Ñ;

"; claro lo que ve Celia en la

i;;"i; i''y "o sé qué se vio que a'ssí

llorava") ni tampoco 1o que anterior-

mente Éa visto SYlvano inmediata-

;;;i; después qú" t" describe .lai"á"t", "aI? corná en espeio parecia/

una diversa hystoria variada,/ puesto

il; t" mirava Y no entendía"' Cabe

.irpoí"t que sé trate del drama dc

irh"á"""i¿"; en cuanto a la reacción

á" Ó"tiu, los comentaris'tas la acha-

can a que este Personaje alegórico(óeHa ás el almi) ve reflejadas e-n

,L-i.*g"t de la fubnte to'das sus cul-. Das.

_ Una vez desaparecida Camila, Al- - ili;r"" también cae en un estado de

banio cae "r, orr""-rtiáo de postra- *lñó',^ryIo no entiende por qué

áórr, r".o.r*iendo su culpa: -. ha huido celia'

-iñ&;;¿n del rlbaro dá 'tlbanio; - No hay rebaño ni naturaleza que res-

-;;;;ñ * uLl"a*o;-las selvas p""q-1 Sólo lo.s deleites de Svlvano

responden al dolor del pastor' quedan descurdados'

-Pastores y voq'"-'-'" il"gu" a pre- -sI a""t"*n los compañeros de libel-

guntar. r , ñ !^ !n3je de sYlvano'

_ inu"io pide a los pastores del'T'aio - Sylvano pide a sus amigos que caD'

que canten ," ;"""#";"U -¡U"t'".

tén su muerte en 1a "Bética ribera"'

-Albanio try" ",,'ii';;"h; v- U"g.t a -Svlvano llega a una torre y se sien-

un alto Uu*rr"o'!,rJ-ifu4" ^tgUte tí entre do"s almcnas' No hay men-

el Taio. R""oe.ia álli ño"' felices "ia" aa Tqjo' Recuerda'favores de

a pensar en C'elia.

En ambos casos, i,tento failido de suicidio; en córdoba se habla de urur

'f""rP";;;1o impiae y que pudiera ser la divina'

-29-

I

I

l

5

G¿ncu,eso SssesrrÁN ¡n Cón¡one

, h l*r ![,ffi

- Antes de inteutar el suicidio. havuna invocación a los rím que ,.o álmar y un ¡ecuerdo de las ta¡eas tí_pic_amente ¡nstoriles que aIIí desa_rrolló Albanio: oororar sus toros,abrevar sus vacas, baer tgradabléson".

-I{"y también una invocación a losríos pero se recuerdan Ia" Ii"""iá,,amorory-q (y báquicas) que tuüeronIugar allí.

- Celil llega aI lugar donde vio al pas-tor herido. Mediante una serid deexclamaciones retóricas encomia Iabondad de los dones divinos, y tomaIa herida del costado de Cristó comoorigen de la fuente:"¡o celestial herida del costado! / iofuente de tal lado derivada! / iOalma descuydadal, ¿hasta quándo' /tardas de te yr lavarido a tal ribera?,,(vs.72-L727)Celia no habla a la fuentareal, comoCamila, más adelantg sÍno quo serefiere a Dios como fiwnte y,in¡.r"a-dua; "iOh bien entero/ o'solá enquien espero, y do se lava/ el aTmaque en ti lrava y en ti espera!" peroen general, son preferidñ Ias metá-foras de luz a lai acuáticas p*r, ,u-ferirse a Ia divinidad.

vs. 681-7lg (estancias)

No intervienen elementos acuáücos ni otros motivos naturares destacabres.

vs. 720-765 (rima interior).

- Camitra llega al Iugar de Ia decla¡a_crón_ persiguiendo un ciervo herjdo.Se dirige a la fuente ,"pro"hárrdoiá,en cierto modo, q,re por culpa deella haya perdido Ia amistad de AI_banio: 'Ay dulce fuente mía_ v decuél¡, alto/ con sólo ,r, ,obie'r"liáme arrojaste!/ ¡Sabes qué me oui.taste fuente clúa?/ Loi oyos dJ Iacara, que no quiero/menos un com.trmñero que yo amaba;/ mas no co_mo él pensaba..." (rr. 744_749).

vs. 76&983 (tercetos)

En esta ercéna central se producen ros encuentros Arbanio-camira vsvlvano-celia iunto . I" tu""ü fári;;r, aferra, a1;;;rp".üvas damasdormidas, qrr. re d"rpi;.t";;;;r;tt""d;.y tratan de hür.- En Ia discusión con Albaniq Camila _

-C"H" -tr)one a la rw,ón,por tesügo depone a la fuente como testigo del Ia orai'a-cooá*t; d" Sylvano.mal proceder de aquéI.

fr*rrfult damas consiguen escaparse. euedan Albanio y Sylvano junto a la

-30-

itt Snnesurfuv nr CónnosA,Gencu¿so

ih a losi licencias: tuvieron

úacables.

b al ps-sie derornia laI y tomaÍD como

do[ / ¡oú/io,¡Áodo /ribera?"

al, comoque se

gtrt¡ica-sdo eneI almar-F Peroe metá-F¡a re-

tigo de

oa la

-Albanio increpa a Camila Y clamapor Ia muerté que, seP¡-are el almaáel cuerpo. Se vuelve loco, creYen-do que la separación se ha concte-tado y que ya es puro espíritu-. De-cide que alguien le ha robado su

crretpd y pregunta Por él a la fuen-te, en cuyo fondo ve su imagen- (co'ronada de laurel Y con un Palo de

acebo en la mano)' ConcluYe que

es su cuerllo y lo corurúna a termi-nar su deitierro Y a unirse a él'

- La fuente no interviene en el discur-so de Sylvano cuya locura consistemás bien en su ohecada necedad: noreconocer su libertinaje y la sensua-lidad desenfrenada que ha provoca-do la huida de Celia.

- Albanio invoca repetidamente a laimagen de Ia fuente (a la que creesu cuer¡n) y por fin intenta aro-jarso al manantial Para unirse conálla, pero es detenido Por Salicis YNemoroso.

- Se elogia la mágica sabidur'ía de Se-

vero, insp rado por Febo, su Poderde dominar los elementos naturalesv de curar los amores desesperados.

- S"u"to canta en la ribera del río lasalabanzas de la libre vida.

vs. 103L1128 (tercetos)

-Primer relato de Nemoroso: presen-tación de Severo, del'isacro Tormes"y de la ciudad de Alba de Tormes.Encarece.la hermosura de sus torresy más aúr¡ la virtud de sus señores.

En ambas églogas está la desciipción de la tierra siempre verde que se

halla en la ribera del río.

vs. 934-1031 (rima interior)

vs. 1129-1153 (rima interior)

- N\revos lamentos de Sylvano por Ce-lia. En üsta de que Celia no quiereunirse a é1, Sylvano decide ahogarseen la fuente para descansar Por {in;lo detienen Racinio y Gracioso.

-Primer relato de Gracioso: presenta-

ción de San José, del río Jordán Y d.e

la ciudad dé Betén; se enfatiza más

bien la santa humildad del lugar.

- Se exalta la santidad y pureza de Jo-sé, su poder Para serenar las almas,

inspiraáo por Dios, Y Para remediarel dolor de los pecadores.

- José canta en lá ribe¡a del Jordán las

alabanz-as del Señor.r¡¡ila yi dam¿s

- Diálogo entre Salicio y Nemoro'so.

- Antes de cornenzar el segundo rela-to de Nemoroso se inserta lá famo-sa descripción de la naturaleza quqsegún It mayoría de los críticos,

- Diálogo entre Racinio y Graeioso'

- El helmoso cuadro natural garcila-siano es sustituido por una introdue-ción alegorizante, de tono p-rosaica-

rnente mo¡alista: "Mi entendimiento

-31 -

GancrlesoSrs,a,suÁN or Cón»on¿

puede haber influido casi següra_.T":l]:. er1 et -Cdnúico Espirítual:I)ues-trg ganado pace, el üLnto ás_püa,/ ¡llomena sospira en dulcecantor/ y en amoroso llanto ," *r"_crlla;,/ gime la tortolilla sobre el

?l:?,1, presénranos " "ol-o "lfiuaolores/ y esnralta en mil coloies suverdura;,/ Ia fuente

"luro u orrmmurmurando/ nos está convidándoa dulce trato- (vs. f f¿Af ffg).--'*"

pace., al cielo aspira,,/ nuesfuo hcsospua en tierno llanto_/ ), "ye¡¡nuestr-o canto se amar¿illai d_ Itortolilla- sobre el olmo;/ prJ.-lnos a colmo el cielo flores/^y-eñta en mil colores, Ia verduia/ d" -,esperanza.- pura. asigurando,/ (ryremos dél gozando en du]ce b"ü-.

: i154tB2S (rima interior)

- Segundo relato de Nemoroso:- Invocación a faunos, ninfas. sáti¡osy silvanos; el narrador

"iiü;U:;;j_ces_modos y sutiles,,; to p*i".if "Lte aJcanza..

* l9"go dominador de Ia Natu¡aleza.- El Tormes Ie muestra una urna la_brada por él mismo.- Historja del Iinaje de AIba.- Ambiente estéüco del paganismo

( abunda¡rte intervención i8-&;r;;y dioses). Papel marcadu-""t" .""_tagónico del duque ¿o" f"rruíáá-ll.q"q se Ie dedica I;-;ñ;;;del relato.

-l:yd: terrenal pteno del duque,Prgtotr,po del cortesano, completd en:y.oj rgr aspectos. proyección inde-fintda hacia eI futuro de sus haza_ñas.

- Salicio y Nemoroso deciden I"rr* Jenfermo a Severo. pil;;;r"ñ¿rlselo antes del amanecer.

- Segundo relato de Gracioso:- fnvocación fraternal a todos ios hm.

!res; eI narrador "mpl.ará

"ilffi9es modos y sutiles. p;; dm p.*:Ia historia iacra.

-$l Jo_sé amansa Ia ira de Ias alm*s- $ Jordán Ie muestra una urna labra_

99 po" el testamento viejo.-Historia sagrada: Abrahám e Isaac_

Ja_cob, David yG.tttlr" S;l;;óffitalla: bíbtica' áu leyá,

j" isáe[ffiJo ,l.i9 y su madre, matanz_a de losmocentes, pasión del-Señor. La parted_edicada á Ios hecho, mir-oiTC;ristg es muy escasa comparada coueI resto.

- Humillación terrenal de Cristo, er¡rmreino no es de este mr¡ndo. -' --¡-

- salicio eIgS{,, **r#a quien re" tu"i"In- "dE*á;t";;; - ffiriffilHbxl*fff*:,ih*]secretos. mo espirifual.

vs. 185485 ( tercetos )

- Racinio y Gracioso deciden sometera. Dyrvano a Ia cura de Ia gracia di-vina antes de que anochez-á--

*

-32_

Dloh1-

t-Ee

-Visión del Paisaje camPesino (de

índole bastante ieatista¡: carn'pesinos quo recogen rebaños, caserÍas

áu aolr¿" sale el humo' Alusión a

ft"" "u"uula"¿es

corllunes; guardar el

rebaño, Preparar la eena'

- Salicio y Nemoroso se seParan'

- No hay referencia a elementos coti-áirror'del paisaie camPes'tre. Másbien hav al&o¡áAón moralista: "Y

veo blaáqueá-. p"t los altores/ la nie-ve oue rne avisa de los días/ que se

á lávado el mundo como en flores"'

- Racinio y Gracioso (la razon y la gra-

cia) deben ir forzosamente juntos'

Esto puede bastarnos para apreciar las profundas di{erencias entre la

ugt g--u, i. c*"ilurc y'lu-d* ^córdrtr.

Mientras en Garsilaso el entorno

natural tiene un valor p'reponderante por sí tnismo' en Córdoba puede decirse

;;;;;r";"r="" u*¡o ,io.-p"^ua' "opá

de alusiones alegóricas v morales' La

fuente y el río T"*;;-1;hora ¡oráán) que e.n Garcilaso se oponían como

imágenes centralizadora, dt do' *t"'do' (ifr' nuestr? Íubujl.anterior)a aquí

se hermanar, "r, ,.r- -lsrno sentido religioso. Hay algrin.matiz diferenciador;

pcr ejemplo, que, mientras la fuente aparece en rálacién directa con el drama

;;;;;i;;áiuaoú -á"i

ul*u, et rio lordán muestra abiertamente 1a dimen-

sión histórica de la relación tomb,re-Dios. pero vayamos derechamente a la

esquematizaciórrdelasprincipales.opo.sicionesentrelaprimeraylasegundamitad de la égloga d* c]6rdoüa, tal como habíamos hecho con la do Garcilaso:

Tercetos: vs.1-37 Tercetos: vs. 18511885

- Aparece la fuente, cuYo orderr in' - No aparece la fuente'

verso de temperaturas paxece-mar-char a comPut con Ia confusión en

el alma del Pecador.

-Monólogo. D"s"orrciio y alteración -Diálogo' Firme d-ecisión de los ami-

apasionada. ¡s¡LU /

los f,aciocinio, distancia y obietividad.

- Intimo combate de diferencias' Un mismo llarecer' -

-Recuerdo de Celia. p"'udo' ;Ñü * ÁL"iiona a Celia' Mirada al

futuro.

-Búsqueda del sueño (que es "letar. --g*q"La"delacruación

(queesdes-

go mortal-). '- \Yuv ve p"rtá, a b verdad de la fe).

Nohayaquí,comoenGarcilaso,oposicióndedosvisionesdelpaisaje:laprramente idealizada del paisaje aTer-ro y f' *¿t cotidiana y realista de los

¡nstores qrr" ,""rg.ri ,* tlu"í*, do las. "tserías

humeantes' No se da' pues'

tamrlocú, ,oo optrr.io,,I" i* '"iá"i"t'es hombre-paisaje como se daba en Gar-

cilaso. Pero puede tal vez suponerse otro tipo -de

oposición' En la primera

a A publicarse en próxioos números de la revista l¿l'rus'

-33-

l

il

t§¡#i

il:T.|,: 33,,?,L,i'":'lid:#*H"?:d:r ^..1¡"" pareoen alrnonizar ( contraria-

nT:"¿,"ffi lfl ::lr*'^y^v9;1li':F""iü:rffi"ffi:ffi J"fi Tffi;Xj1.*il,Xi:"lT;l;T.;a;;ñ;i,;i"J;,,ruft ffi ;i-,ffi "1"ffi;:"ff.i i:'o"J:#"§,:lrx"-r::l:ilT,l:i"l#r:'ffi ffi #,.niil#*donde,l'llLfl :" ::,'i1.",H.9,r *** g;? rdi ii",i iJhfr A#&'dlá:H

":ffi*:l¿.:fl::: :i ,t 'o'ul",i,i,,",'l" -"lndEfr

H"il"fr,"jmediante-una imagen "át *1, ;y

"*iluaLs .rurrun a la caducÍdad de Ia vida

avisa ¿e lü;ñ7;" se 4 ,c.,,r^ ^, *.,.¡:Tryr los altores./ Ia nieve q* *uavisa de tos dias,z q"" " a-fuíá;;ffi;,firJ#i':""ifl[:/ il,:iffir:ffirffEstancias: vs. 8&76 Estancias: vs. l82g-54

l

ti

ri

- flggr de Ia üda virhnsa, ,purtaa"oet pecado: üda acti-ra, preocup_da.de- Ia salud ¿"i-aü-iñeirTcaritativz-

- Elogio de Gisto (modelo ,rp*ooel irombre virtuoso); fe en su-capa_cidad cu¡ativa.

(En Garsilaso e_l elq*o de la vida retirada, de Ia descuidada e inocenteholganza en Ia Daz natura-i, "o"u*táti á": r"

-vida excerente, activa en todosIos ó¡denes' dei duq-ue aá eru", -J. üroráar-v h;;;#;r antonomasia.En Córdoba no hav contraste, sino insisten"i"-rr¡lí_r¿J:;":; en h segundamitad se trata de órrto--ir-o- en "" -ir*""pffi;e]ffi. ",r,

r, primeraperte no intervieneer derieioso -".;;;ür q"á;á;;;iu"fia" der so;ritario,ni Ia fuenie centraliza ese paisaje "*"rr).

Tercetq: vs. T7_SIZ Rima interior: vs. ll54-1g2g- Co_ntra-elogio del sueño (se trat,del sueño-d"t p.""e;á"i;rT ;" -Al-abanza de Ia üda espiritual y -*'ral activa.

i

l

ll

l

{espertaná por ü voz'delp*d.;j.--- r.e,ma-d_e Ia culpa: locr¡¡a v o*idi-crón del que,üve falto de- Giacia.- rrngano que el sueño Ie hace a Syl_

va.no.

-Discusión con Raciuio.- Rgcha,zo de Sylvano a Racinio. F.¡e

mtsrad entre Ia Razón y Ia Sen_sualidad.

- Relato de Sylvano mal de su grado.-Yi9" li.ienciosa a" iyl""", ; "C"ü;- {e}ato de las viciosas aventuras deCelia y Sylvano.

- fnvectivas constantes de Sylva¡ocontra Ia Razón amonestadoo'. --

- Historia de los virtuosos,

- Verdad sagrada que muestra Ia urna.

- Acuerdo Graeioso-Racinio.-Amistad RacinioG¡acioso (Razon_

Gracia).

-Relato gustoso de Gracioso.-Pu¡eza y virtud de San José.- Relato de hechos e¡empiares de la

Biblia.

-Alabanzas constantes de Ia virtud.

Rima interior: vs. 83&85 Rima interior: vs. I2g-1153- Reproches de Racinio a Svlr¡ano- Discusión Racinio-Sylvano.'

-' -."' - Ilogio de Racinio * Sro ¡ouá-.-*.-- Gracioso propone relatar'-iÁ- ertensr¡su encuentro con San José. Racinio

(No interviene aquí el marco naturar q!'t:r;tx;no, c'mo ocurría enGarcitasq vs' r14'rrB3, il-i;"düárll"iar'-ár*i¡#' d;'citamos wpra).

Tercetos: vs.386-680 Tercetos: vs. 1032-1128

- Disputa Racinio - SYlvano. -

- Reláto de la ruptura con Cblia; éstaya no desea acomPañarlo en su vidalibertina.

- Impureza de Sylvano' Incapacidadde* arrepentirse. Apartamiento de

Dios.

- Escenario de la discusión final con

Celiá: paisaie ameno donde se ha-

lla la fuentq que mostrará a SYlva-

no una *historia" para é1 incompren-sible, y le hará manifiesta a Celiala dimensión de su Pecado'

- Celia, conmovida ante la imagen delpastoi crucificado, y horrorizada porio qr" ha vjsto en la fuente, huYe

de Sylvano.

No se puede decir que aquí la fuente. y el río Jordán se opongan en su

sentido esencial. La fueirte aótúa hasta ciárto puntó ""-Tq.la

urna' nn 91i1

yo Sylvano "¡nr diversa historia variad:.", que parecía allí.-'c'omo en espe]o,

;i,"'rr;ñ ;;; ñ;;blu-"nt" sea el dram" a"iu Redención; en ella ve Celia

--es de presumir- ti *t"" ¿"rlig,,,udo por las -""]pu:: Tu"t3 el- río- Jordán

eon su urna bíblica ;;; f"L"t? ,obr"'crryo árb,cl está crucificado "1

pu"t"r

;;; ;;üt* rl"u"ludor"r-y p,urificadoresr en ámbos se muestra el misterio cris-

;;;^6;q*" "t tonf" dyli,r"o no lo -entienda ni lo perciba oscr¡ramente si-

qüera): ambo,s ,orr':'"rpL¡d', reflejo de acontecimientos trascrendentales. Pero

;;";*á; ;;';-loraa"-i"'"*tib* á"tulladamente la relación histórica con Io

ái"i""-"r"ignudu ""--"i-l,iUrr, _e1 1a fuente la Redención se reactuali'a eB

for,o; indiviáual y r".rutu (caidobe no dice con claridad tg qgg -ven

Svlvano

, C"tio. en cambio, uá A"tiJ"" con minucia exasperante en los bíblicos dibujos

il;;;ó. i;-i;;;t"-r, ", aquí tampoco, como, era en Garcilaso la imagen

oue reunía las esencias" á;l ;";á" natuial, importante en -sí mismo; como toda

H;-;#;";"il ¿sr"s" á" -ó?iaáu',

su fuieión se subordina a yt signifi-

áa?p,raá* "rtr¡l.fiaí a poiori por e1 autor y fácilmente imaginable por el

Iector.

- Elementos acuáticos que aparecen

en la primera mitad son los ríos:

Iuego del abandono sufrido, S-/v-19enc"omienda a los pastores de la "Bé-

üca ribera" quo lloren Y cantcn su

muerte en la ribera del río' Cuandooiensa en el sücidio, recuerda a loslcorrientes ríos esPumosos" Y Pideque hagan'Tunesto lutd'Por é1, qleüo t"rró ctmo escenario de su vidadisipda: *Por quien en vos mis Pes-

- Primer relato de Gracioso. Presenta a

San Tosé en la ribera siemPre verde

del Jordán, cantando dulcemente' Se

menciona Ía tierra de Belér5 gloriosapor su humilde santidad'

-Ác¡solada pueza de ]osé' Poder.decurar las aliras e interceder por ellas'

El santo canta alabanzas a Dios'

- Escenario del encuentro con San

Tosé: ribera deleitosa del Jordán, sa-

áro, dulce y claro río, que Ie 1ev-ela-rá al santo la historia de la Reden-

ción grabada en una urna cristalina'

- Gracioso, suspenso ante el canto de

San José, q.t.-da adrnirado oyénclolo'

-35-

cas ordenaba/ con mil gustos deamor entretexendo,,/ do Báco y susabor se coronava,,.

-, To *p?rgcen, en estos tercetos. elt a,¡o ni el baratrco de donde el oa._lor garcilasiano pensab. ;*;ñ;.se elimina así un elemento del'*sis-tema acuático" de Ia Egbga Ii. -

Onitjmos los estancias 61&7Ig, lnrala segunda mitad.Ias que no hay conespondencia en

Rima interior: vs. 72fi:765 Rima interior: vs. g34-108I

- MonóIogo de Celia:Iugar donde vio alherido.

- MonóIogo_de Sylvano con interven_ctones de Racinio y Gracioso.

va buscando eldivino pastor

- Gragión de Celia al Crucificado. IIe_na de lamentos y alabanzas.'--'-'-

- Cclia__-se dírige a Ia fuente llamán_ctola "tueute derivada de Ia heridade Cristo"; exhorta * .lurrurr";;iribera".

- Arrepentimiento de Celia.- Qelia no necesita ayuda: la ha halla_

do en Dios.

- Q"qí"r de Sylvano, que se obstina ensu locu-ra (_esto es, en su nccedad )po_r er abandono de Celia.

- Sylvano egere arroiarse a la fuentepara suicidarse.

- _Obstinación de Sylvano.- Racinio y Gracioio se ven obligados

a auxilia¡ a Sylvano, aunque ésL Io,rechaza..

Escena central: vs. 766_g84.

Contr"over.sia Celia_Sylvano en el lugar c]e la fuente.celia i¡lvoca en su ayuda a cristo Redentor y pone por testigo a.ra Razónen cuanto al mal p,roced-er d" Syluu"o.'-coJir escapa' Lamentos de syrvano, que, sin-reconocer su curpa, se dirigea ta fuente paü c,"ra¡e";;;" ;"ril;¿;;i ¿nri"y- rr";;;;-;i:rtando conmigo,/.pues, ¿'cóm-o errov aquí, ,r ;,."y;;r;;;;? / ¿;á_;;:;;i;;g" y enemigo? /Dímelo tú. serena" ,r."1..rlr f";;í",-i" Dii.,"lo; ya que

"l íoro y claro Febo /nrnca tus f¡escas oir¿ ,, "r"ái;;;l;,i

"" "rt;r.r:r"igos ccmentan Ia ..locura,,

de Sylvano, esto es, su empecinamiento

No se tlata. uor cierto, de ]a locura de Albr-nio que cree ver su cucrt)üperdidc e, "r cspi¡o a. loi""itá,',#.il Ia necedad ¿J-pá"áao, q,re ," obr.trna c:r jushficarse y co,vieric ,u, "u1fuJ'"; ;rhril

uur pEUd

Hemos podido rnostra-r', a t¡avés de estos parareros, que Ias oposfcionesgenerates sustentadorar a"t'"q"ii;urr; ál il ¿giüi'il'ro*ri"*r, sebasti¡ín deCórdoba iri tan finas ni tr" "oliiirr,r*;.;'"d;;;;;;i;;iffi ,-i,b;,i;;ü'*";'l'"r"1;,:T"il-,,-ff:,1?,:h**:tl

y el esgírig.. En ge-,eryI,- er ¡nisaje es mucho menos importante en córdobaque en ra égroga der toredano y cúmpre """ i"".iá" t¿,Iáá"*a" ;; ;il;.g,de oposiciones. Mostrándolo en "rqrá**r, tendríamosi

Parsa¡r nNGencrr.eso vs. 1-37

Persa¡e rNSrr.rsr¡Á¡r »r Cón»ora

-Fuento representante de la inaltera-bilidad y estabilidad del mundo na-tu¡al frente a,los conflictos del hom-bre.

- Acentuación de la belleza del lugarameno.

-Fuente de función no muy clara. pa-¡_eoe haber una *subversión

del or_

.d""'- q* afecta a Ia naturaluzr--y-ithombre juntarnente.

vs. 3&76

- Naturaleza idflicaüda retirada.

del elogio a Ia

vs.77-337

- Marco natural denio-Camila.

la amistad Alba- - Marco de fiestas, banquetes, plazas,etc., que sugieren más bien ,rnu disi_pación ciudadana ajena a las conven_ciones de tra pastoril.

vs.386-680

- Fuente natural, no alegórica.

-Itp"ig físico (para Camita).- Función puramente pastori de los

rlos.

- Fuente de la Redención, espefo r.e-velador de las culpas (para -Ceiia¡.

- -t'uente que muestra una historia in-comprensible (para Sylvano).

-,tispejo espiritual (para Chlia).- Connotaciones eróLicas y báquicas

de los ríos.

vs.7%)-7ñ

- Ciervo herido.

-Fuente del paisaje ameno. - Fastor herido.

- Fuente de ,la herida de Cristo.

vs. 766-933

- Fuente testigo del mal proceder deAIbanio.

- Im¡nrtante papel de Ia fuente en laesoena de l¡a locura.

- *Razón"

testigo del mal proceder deSylvano.

-I¡tervención escasa, casi incidentalde Ia fuente en el üscurso á; §ti_v¿ux).

-óf-

vs. 934-1031

I i!;dE,

- Sigue el discurso de Albanio con Iafuente.* fntento de suicidio de Albanio.

- La fuente no interyiene en el dis_curso hasta que Sylvano decide sü_clclarse.

vs. 1032-1128

- !i9 Tormes:- antropomorfización pa_gana. - Río Jordán: antropomorfización muy

atenuada.

vs. 1129-1158

- Y*"o natural que introduce el re_Iato. - \farco natural ahogado bajo el peso

oe una alegorización de índole mo-ral.

vs. 1154-1828

- favocacirftr a Ios elementos naturales. _ fnvocación a Ia humanidad.

vs. 182$1854

-YilrlffiHr$paisaie campe- _Alegorización moralista det paisaje.

,* o?:r:H*;rffiffi: mlsma' podemos establecer con Garcilaso las siguien-

I - No se opotre radicqrme¡¡s ar úo (cfr. nue-stro trabajo anterior dondemostramos Ios esenciares cont¡astes .l"t * i, ]"."ü?;. Tormes, irná-genes de dos mundos).2- No es Ia quintaesenciq o el oenho der m¡Jndo natu¡ar idearizado. Es fun-damentalniente rrna imag"n de h Ráención. No se Ia asocia a ros diosespastoriles sino al p.rt"iOf"i"o. ----

3- Está relácionada con la muerte y ra obsesión amorosa, pero no tanto comoen le égloga garcirasiana, ,.,-.órg p"r'. syr-rno. para ó"ria e, un ámbitorib:rador donde nacg a ú uaa áe-la ?"; "i;;";;l*;ñr. para c¿mita

:: i?r;ffi:io, el ámbit" ao"J" ¿"-r""Ur" i, t*U"a-ool"r]ii.a de h pasión

4- No refleja tanto "üsiones de ra desvariada imaginación,, (como dijeraDárnaso Alonso de Ia.fuente lrrriultr*¡ "r"rio-r?-"i"riá objeüvidad det<lrama ' de Ia Redención ;"oi[#;;; áo ,.r, urr.,r. Brr-"ste sentidq seIiga a lo eterno y a Ig ffi-#*ntras en Ia égloga der toledano seligaba a lo fugai y a lo il"*ri;.- --'5- No se liga o."f".".1:^"Tente ar pasado sino ar futuro (er porvenir der arnr¿salvada por Ia Gracia).

6-Es sienpre clara y purificadora'

7-H. paradigma humano que.corresponde a Ia fuente no e1 el bww atlm,;n'

donado a la q,rietul"rñrrl, sino ia q*g; sufriente.de C¡isto crucificado,

veredor d. h ;;;;ü;:' fl-á""a" "p*ttotit se transforma así en un

mundo santificado por el pastor por- "lrrtooorrasia,

que no se opone a}

mundo bíblico del Jordán'

8-Se opone a los ríos de la campaña, donde qe -ha-elercitado la disipaci6n

-t "#;;"; ii;;;;-;"""r; "" 'l á'o de la fuóote garcilasiana)' no

contrasta con elü; iil;;iie*" "" i" rgtog" de sebastián de córdoba)'

9- Se opone al río Jordán :¿.l9 t" cuanto al matiz del proceso redencionista'

-ñ,Já;; ]oJ"'"t individual y en el río histórieo'

l0-Hay aquí dos visiones radicalmente distintas de la fuente (cosa que no'-ffi"r'r=;"1i rii"üll'á¡L-,*li:. i1¡; sylv_ano ¿ la d.el alma. sylvano

asocia la fuente u ío pasió"- 1vs' f-a¡ y no d9í1- de verla nunea como a

una fuente ,"*1,*ri1i ;tgrifild* d"gá'i""t' Cáli"' "o cambio' descubre

en la fuente (luenü ó? o, se aclarJ si es la misrra que la invocada p'or

Sylvano al principio d^* t" églog") a Cristo y se descubre a sí misma'

l1-NoesmudaeinhumanacomolafuentedeGarcilaso'sinoque'siendode cristo halrl, ui alma (aunque no al torpe s,vlvano) el lenguaie que

ella Puede comP'render'

I-a fircnte'an el Cánrico Espiritual

Aclaramos aquí, ante to'do, que hemos decidido utilizar f" Y{oi versión

del Cá¡tÍi¡:,o,11"*"d;;;ú;;;t "versión A (manuscritg de Sanlúca¡ de

Barrameda),dadoquenuestrapreocupaciónsecentraenelpoemamismo'ynoenloscoment*rios(quealeanzansuplasmaciónyplenituddefinitivaenla¡edacción B, *urrrru",it"'de ]aén)' En esta elección concordamos con el crite-

rio de Dámaso Afo,l,o t' Coli" Tho*BSon' que acuerdan,a la versión A el mayor'á;#*"-yi" á,aá""ción más genuinamente simbólica'

VeamosahoralassimilitudesydiferenciasqueexistenentrelafuentedeSan Juan y la de sus dos pl"edecesores:

Seneisv'os:

1- La fuente es un elemento que cambia la acc'ión de la égiog" y g'"1

Cúnlico,q.r" pnor*i ," "o"t"o

en lis acontecimientos ' Goza' de una sitr¡ación

central y exc'epcional, en este sentido'

2 - Tanto Camila, como Cblia, corno la Esp'osa' se dirigen a la fuente

en vocativo'

3 - En los tres textos se contempla algo en la fuente'

-39-

I

4-En ninsuno de los tres casos Ia fuente responde a Ia invocación (deia ma1e1a

"", q"u" Tbr;t -

"r¡"ri]o er río Torries, er río- Jordrin, Ias cria-,turas interpeladas por Ia -frpora). -'

5 - En c,anto a Ia semejanza estrictamente verbar, hay una mayor simi-Iitud entre er réxico,.-prááíp*"d"ürua"-ál cbrd¿b";"ra carificar a Iarue'ie v cr sue empJe-r tu" ¡uán. ürd;b" -üHr;;;;

ti,"rt" ..que como'de cri,stol' resirandec'ía", ;r"iLJ"'i* *oüq, -r".rt"r""riri}irnr..

aparece másadclanre "r, Ii éerrg;.iil ¡;ü,tá"" #"córdoba: .y tantas gentes ,/ acudenque Ias fuentes

-aikatúns' / r;;;...;'G-lai}_i*ñi, t también insistecórdobaeir Ia caridad de espefiáái"-i"L"t i ..uili

"orr*-inL'*spfio parccra...-(v. aa6). "ttes¡índose^"rg_ "-.ql"uá tu;;i"

"tu.r;7-á;; "á^rrt*, espeio re_Iumbrava...""lvs. +ro-+ñj. iilii, ,#ara que Ia expresión ..sembrantes ora_teados"

"uo"r "l asnecto ¿í" u r*"il ,,"r* t-antq s, i,-rr"iáo de espefo; banJuan -dice- habríá_toÁaá;;.t"",Jp'.áao der;ef;di;;i lnota 1, p. 307.de La Genése'd,u *can¡¡ouu sw*tiií']. parís, 197_1). Los adjerivos preferi-!:: t* Garcilaso p** "riifi""i.-i. lr"t" no se reflá¡an en san Juan (crara,pura ) ; en cambio. Ia,expresión .."¡,o, doáá*;;.t;il;;; ;" Garcilaso que'de córdoba. Reco¡dem'or Iu iriÉoogaáiáo .etó¡c, J"

-ó-a*iü, ..¿sabes quéme quitasre, fucnte ctarap /,tas "ir; d"t"-';;:..""d?;ti47), interroga_ción v respuesta que ya María Rosa'úa. t"a. p n t t;;;).Ji*ioruro con sanJuan. ñ ;r,* .r) u ,,s

4 'u'Ptu ) re*t

l";"r.:i31T=:^"j:^HH: det motivo. Dicha exrensión, des-.de luesa, es pnoporcionadu "

ra áL il-*#J'i;Wr'?;ffiJ#"Jtk,il::Lt:*,,i:,:_u:.T^,0:ll rms "-*,i í7éa",i,* 1";?ff; ¿l'"p""", re5. pero

II tiene en Garcilaso

.'

1

i

j

de Cualquier $!OdO. ( -'---- vr vv"o'w lversrurl ra, apenas 19b. PerO(.é*i..^ \, ñtt^ -^ "^ipr*tar que Ia fuente sólo a¡nrece L, *o estrofa delffi *;.'":,13-l,i':::Y:;;;;h;;;"ft r?x#:,#ff 'E'"#igffi; ffi:i^*:" *- _yi_ i§r^, pero n9. de fue,te;

olno:#;:", f;tuente cuenta por ro me«)s-om is .n".i"i9fi:ó!.ffir';";,ft,":l -iffilll?,I1ga gaeihsiana y con lr * b dr seE;ti¿" ¿" aor¿áÉ,

-Ii.I"r.r";m^c o ráe

g* .gfueihsiana y eotr U a }a & (nos referimos alasapa.rieioaes en esaús).

2- La aprición absoruhmente sorpresiva de Ia fuente y Ia farta de marco,de entorno referenciar proit". iá1. .i- ó"r"rrrrJ-";;;';risebasüán de cór_doba, la fuente otá-eim"*ad;;;""" paraje naturar determinado: se tr¿tadel 'mejon lusar de I" fr";á;; áa i*r* amaent* por excelencia. En carci-Iaso'la descriocióm es más-práir", ,r1i"podo cubiefto áu-'tior", cororidas ylloTlü:"', $r..donde ,"prí'". -"¿il-' fr"rd;--i;--i";;;' se pinta comoen et pcen)a oüdiano,

"or, ru aretra dorad" t úi;"uip.i*rra* v'r", ai"á'*dores limpios dc uisad"r, E"-óórd;"b;, se' de^,,u;;- r-olrJlááo l, figura delárbol alegórico dorlde_se h"IL- ;;if;"rár el parto.; h;i;r;;¿" prestada a rascaracterísticas físicas de la _fuents ;;;;, i" ertátirr rour* toao su signifi-cad! religioso. Pero en ambos .*;; l;i"ente se sitúa concretamente en unentorno fijo y preciso y-la u"g"á. áoios pastores * *ilu.

"r-totarmente expri-cable v coherente con'er "ortE*to. e"

"""iuiá. ;;; 'ó'i*luo,'ra

Amada, des_pués de una seri'e de apasionaa"r pr"üüs por er "buoáorro

áo q,r* eI AmadoIa ha dejadq protesbas "r,

Irc q""-;;;";;"*r, imágenes de Ia natura reza" entorno (cfr. estrofas &I0), :" dilát¡"-t,p.orriro a _la fuente, cuya existenciaeI lector no imaginaba^rig:.rl ,"Áii;;. no se sabe dónde.está; no Ia sitúaen ningún lugar preciso y no ra'me¡rciourá *d;;;;¡; ;I'ñ"rr.

3-La naturaleza del C&nfuo es totalmente distinta de Ia naturaleza g¡r!cilasiana y de la naturaleza de la égloga de Córdoba. En Garcilaso hay dosGsoeoarios contrapuestos: el mundo exclusivamente ¡nstoril, idealizado, cuyocrst¡o es la fuente del pn'ado ameno, y el de Ia vega de Alba de Tor-mes, ciudadde antiguas torres y de ilustres señores, por donde pasa eI río Tormes. EIFisaie pastoril, tal como Garcilaso lo pinta, no deia de ser convencional, aurl-que se trate de una naturaleza exaltada en su valor propio, corno forma esté-Ecq y no meramente de un telón de fondo. En Córdoba" el equilibrado es-plendor natural del paisaje garcilasiano desciende de tonq se opaca bajo¡madas alegorizaciones y meditaciones morales que 1o ocultan en 'tanto formaestética. El escenario bucólico que correspondería (según la Eglnga II, deGarcilaso) a la vida pastoril de Sylvano y Celia, está intercaladq por otra¡nrte, con la introducción de ambientes no naturales que no guardan ningunaa¡monía con los ento,mos pastori'les presentados. Esta int¡oducción do "plaga",Testas" y "b,anquetes" grose,ros en un medio presumiblemente idílico, no de-semboca en la creación de un amLriente exótico y misterioso como el que oca-siona la mixturtu de elementos di,spares en el escenario natu¡al del Cá.ntí,co;resulta simp,lernente, forzada a ojos vistas por el protrÉsito de mostra¡ la vidalieenciosa del pecador Sylvano (para lo cual hubiera sido sin duda más apro-

¡frado -de no existir la necesidad de seguir el original refundido- hacerlodirectamente un cottesano, o un homb,re de ciudad disipado, y no una mez;clade ¡nstor literario y juerguista). Se agrega a este escenario idíliculicenciosoh presentación de la santa tierra de Belén y del ]ordán, en lugar de Alba deTo¡mes y de su río.

En San ]uan la poetización de la naturaleza es totalmente anti,cornpnci,o-rI; escapa del ámbito limitado de la pastoril y alcanza" un nivel de inmen-dihd cócmica, sin dejar por ello de centrarse en pequeños lugares íntimostambién (el huerto, el lecho, la bodega); es la fluctuación de ütacrocosmos )rmic¡ocosmos deque habla Thornpson (cfr. ob. sit. Cap. V). En este amplí-simo escenario se rnezclan elernentos que pertenecen netamente a la pastorangrecolatina y renacentista (el muldo garcilasiano) con elementos que pro-**ren de la atrnósfera oriental del Cfuúipo, y puede muy bien decirse queIm dementos escogidos son los más bellos y refinados de cada ámbito.

Ifientras que en Garcilaso y e'n Córdoba existe una secuencia lógica deloe cambios de e'scenario (que son relativamente pocos) en San Juan se pasademoa otro paisaje o lugar sin la menor explicación (de ahí que el Cánticoirysiooe, según dice Thompson, como la re,unión de hermosos fragmentosep€rso6). Mientras en el toledano y sr.r refundidor los lugares desde dondeL¡Han y actúan los personaies están explíeitamente fiiados, en el Cántkrt,ürte¡¡te Ia mayor parte del tiernpo es difícil o irnposible decirlo: no se sabe,!E gi¡rsq\, üesüe d6trüe tralo\a \a Nrnada a\ ertra,ezat 'e\ Có;rrtico, d6nüe está^a frp"ro que aparece después de la invocación a la luente de la más miste-riosa manera.

Para Thompson, incluso, la natural ez-a es en et Cd;ntico un protagonistaindependiente d-e los otros, lo que -afirma- no ocurría en Garcilaso. Cabe,.ñ*Íur, con todq que el río To,rmes em la Eglaga II cumple hasU ciertg ,tr4rnto

un papel de personaje independiente y también se le concbde poqer de habla(corno a las óriaturas que responden a la Esposa). Pero, claro está, su,presen-

-4t-

l

'ri+'

tación antropomórfica- obedece a Ia converrción grecoraüna, en rnr¡fu¡San Juan es la naturale? pura, tomada como tal naturaleza, Ia que ,,f I:bP :1" ,"tr".ry,*:rfizalrse i *ái" a"i r"-.r. i*-"t i'fr*", oiusta la observación del nnlsmo_ Thomtr»on ;rp".t" d" rá-ñtI*r,,oa ,dora o entoqrecedora que ros eremeutü naturaies *r,r*oi;-ü *Irdó.protagonistas- (las criaturas ponen a la Estr»sa en la huella del AEa&medio de la fuente se da la-extraordinaria manifestación del Esposo; enbio,-Ia Amada quiere apartar ras_raposas de Ia viña,-y; ü;ñ conlua*valles,

riberas, aguas, aires, ardorás-- para que no furben el meñoT,ryru que duerme en la paz del huerio, *-1, á, ""á¡1" la com!'§-e lcs

-amantes (sobre todo Ia que se refiere al'Ésposo) ár, a"*"ot*

Naturaleza; esto no ocurre ni en el toredano "i *i *'r"roodidor (:sea en.un grad_o p,equéño y convencional); en San ]uan, por el cotprocedimiento llega a extremos inusitados; también la' iato¡alezacomo- expresión -aunque expresión insuficiente- der don supremo (por el P¡r_or" ("el mosto de granadas", "el aspirar a" a iyii't el canto ddulce Philom.ena / el soto y * dooayr, / enia" noche;;.á;, i *o nrrr,,consume y no da pena").

La naturaleza en San Juan es, en suma, simbólica, no es sóIosino que alude a un mundo de reraciones transnatur¿.res y Io hace no demane a abstracta, concep'tual o alegórica, sino mediante *na apertura h*csugerencia indeterminada. Esta sugerencia es provocada en el á-nimo ddmediante la conexión de indieios (indicios que Thompson señala concioflal

_agud,eza, y que dan paso a la formaci" a" una- au¡ósfera de micomo Ia indeterminación del lugar de la locución, Ias inconexiones entrenarios diversos, la exuberante acumulación de imágenes naturales en torun referente -el Amadol qrr" queda en último -t¿r*ir*

oeulto por Iaterminación que esta exuberancia provoca, etc.).

4 - El vuelco de 1a acción detenninado por la fue,nte es en eI (

total, de una imtrrortancia abarcadora y absotuta. Adernás, mienMs enlaso y en sebastián de córdobu ,.rrrrtu explicable denáo der cote,üqel Cdntico no.

No se,sabe por qué el Esposo ha deirado a la Amada que se

3on-rienzo del cantar, 10 se sabe ,tarnpoco por qué vuelve ni ie qué

5 - Diferencia en el tono de ras invocaciones a Ia fr¡erte por trcamil3, celia y la Esposa; diferencia en las .ir"r*ÁÁ-y ", r*

lo hace realmente: si los ojos se han formado te verdad en ta drente, dAmado se ha presentado físicamente ante la Bsposa, dónde se haetc. I"a aparición del Amado es totalmente misteriosa. En la Eglagc'rr únada de misterio en la co.nternplación que cámila haoe de

"ipnop¡. ¡en la de sebastián de córdoba eI posible misterio es ahogado por eIalegórieo, o por el espíritu aiegóricq mejor dicho, qrru .&á"",, lL níz ibobra.

cuencias:

En C,sfuo:

"¡Ay dulce fuente mía, y de cuin altocon sólo un sotlresalto me arrojaste!¿Sabes qué me quitaste, fuente clara?Los ojos de la cara, que no quierontenos un compañero que yo amaba;mas no como éi pensaba. . ." (vs. 744-7491

La invocación simplemente expresa el sentimiento de Camila ante un suce-so que ya ha pasado.

En Cffioba.:

"¡O celestial herida del costado!¡o fuente de tal lado derivada!¡o alma descuydaila!, ¿hasta quándotardas de te yrlavando a tal ribera?

;';i; ;'ü;';;;;; ,"r,0':: #ero'el alma qu-^ en ti trava y en tí espera!" {vs.724-727

v 747-749)

Aquí se trata solamente de una "arrepentida alabanza" al poder salutí-fero de la gracia redentora. El alma no pide un don que ya sabe que se leofrece, que está ofrecido a todos los hombres, sino más bien se reprende asl misma en estas exclamaeiones por no aprovechar como debie¡a el don quese le brinda.

En San' ltnn:

"iO cristalina fuente,si en essos tus semblantes plateadosformasses de repe.ntelos ojos dmseadosque tengo en mis.entrañas dibuxados" (Est. tl)

La invocación es de tono desiderativo y suplicante; eontrastando con eltono anterior del discurso de la Es¡rosa, en el que ésta reprocha ardientementeal Amado su abandono. A difererrcia de las o'tras dos invocaciones pide undon, se üende hacia la esperanza de un favor prodigioso que no se ha produ-cido y que no sabe si se le concederá. Las otras invocaciones son más bien detipo retórico y no tienen consecuencias ulteriores en Ia acción; la invocadiónde la Espo,sa causa un efecto real, provoca un vuel«¡ absoluto en el curso deIia acción.

6 - Diferencia en Ia naturaleza de 1o coutemplado:

fut fucíl,ass: L¿ fuente actúa como espeF rrateri¿l: Camila se ve a sírnicmq arurque ha ido @n }a intención de ver a otra: l¡a desconocid¿ ¡mrd¡.de Albanio.

-43-

I

h*tf.ili

F

En Córd.alru: Sin duda la fuente es un espejo espdrümn: Córdoba no de-fine expresamente la realidad contemplada, pero por el contexto -la presenciadel pastor crucificado en el rírbol de la fuente- trrodernos entender que la"historia varyada" vista -aunque no @m,prendida- por Sylvano, es el dramade la Redención; confirrna esto la reacción de Celia (eL alma), conmovidasin duda ante el sacrificio divino, y llevada al extremo del arrepentimientoante lo que ve en la fuente: presumiblemente, como han apuntado otroe críticos,sus propios pecados.

En San luan: I-,a realidad que se contempla es de índole inde'terminada,misteriosa: los ojos del Amado que aparece de m,anera tan repentina y extra-

'ordinaria, y de los que no se sabe con certeza si son espirituales o materiates,:si emergen realmente en la fuente, o si el alma los ha üsto de otra manera,si su índole es metafórica o si debe tomárselos en un sentido real.

7 - En el Cántíoo'no hay elemento que se oponga semánticamente a Iafuente, corno ocurría con el río Tormes en la égloga garcilasiana; tampocopuede deairse que haga Wndfint, con rln elemento acuático, corno hace lafuente con el ]ordán en la égloga de Córdoba (ya que ambos poseen la mis-ma sign:ficación piadosa). La fue¡te del Cdmti,co es única en su género y ensu seatido, cumple una función que no pertenece a ningún otro elemento den-tuo del poema y no entra tampoco en juego ningún juego de antinomias.

8- El carácter simbóIico: Ni en Garcilaso ni en Sebastián de Córdobapodría decirse que la fuente tiene un carácter propiamente simMlico. EnGarcilaso, aunque la fuente actúe como eje del mundo pastoril y en ella se

concentreu las aeciones, Ios hecho,s y el significado de ese mundq no hay sugp-rencia, ni indeterminación ni polivalencia stric'to s¿ns¿¿ tampoco: Ios hechos ylos sentidos mencio,nados se agrupan en torto a la fuente por oontigiiidadpoemática, están todos ellos explícitos y presentes en eI transcurrir sintagmrí-tico del discurso; 11o son "sentidos ausentes" evocados por indicios que partande la fuente, En Córdoba, la sugerencia que podría existir (pues el devotoautor no dice con todas las letras lo que hay y lo que se ve dentró de lafuente) está dummente limitada no sóIo por el co'ntedo inmediatq sino portodo el contexto poernático. La égloga de Córdoba es un poema alegórico, enel sentido'más "chato" y conceptualizante del término; y eso lo presentimosdesde que se inicia la égloga y lo vem'os expresamente confirmado en su trans-curso: los personajes son figuras de Moralidad, se habla expresamente del peca-do, de la culpa, de la sensualidad, de la vida vitrtuosa, de, la gracia, del are-peatimieatc, se enumeran ejemplos bíblicos Y, Por últirnq se hace una atrPteG'lis ¿a Redentor y su Madre. Todo el andamiaie poético se vuelve mero ins-trum:nto para la-transmisión de una enseñanza moral: no hay aquí *vuelo delespíritu" como e;r el gran místicp: ni en eI sentido poético, ui en el sentidoreligioso.

En cambio, ea el Cfuüco (poema misterioso y aéreo, si los hay), lafuente es un elemeato de'stad;tts indefinido", extraña por excelencia. ¿Se tratade una fuente real, dentro de la coavención trnisajística del poema? S[ debetomarse como real ¿cómo pudieron los oios del A¡nado manifestarse verda-deramente en ella? Si es una ficción poética" ¿a qué se refiere, qué quieredecir', qué simboliza, en suma? Que San Juan nos informe en los comentarios

-M-

oue se trata de la "fuente de la fe- resr¡lta trnr corrpleto exürapoemritico. Es

ü", irt".pr.tación alegórica superpues_ta aI poem1. -No pueden desconocerse

los indiciós qrr" pooroJrn en toirro^a ella uná atrnósfera que podríamos llamar:á-*"t rr"á ri*¡¿ucu': su aparición repentina, su desalnrició! igualmente

ñ;,i;;-l t"t"l, su indete¡iúnación tocaaonal la inverosimilitud o aun

irre.alidad del suceso que en ella presumible-"oie ocr¡rre, su status poemá'rirrealidad ;;¿; q;; Ln ella presumiblem""te o9"rr9, su status poemá'r

ii"liJ"fmál (Já"f"= ro -r"t""diá.

en sentido 'realista- o como metáfora

áá ago? Acaso'áwda también a esta indetersri¡ación eI hecho {e gue lafilü se halle ti-t";á" ;;t" el arsenal metafórico que emplea la Amada

*fl""t"ur al Amado ausente, y la aparicióa súbita de1 Esposo en persona, que

quiebm el delicado juego conceptual)'5

Citemos, en fin, para terminar, unas palabras de Duvivie¡:

..Ilimportepeuánotrepointdevueactuelquelafontaineapostrcphéevienned; l;t-rt-rtá"-á" C"i¿o5ul qui lui-méme Ia tenáit de Garcilarc, et que tc,s deux

f;#"d;jt i"'t *t rp"iár, cornme cela se fait volontiers á l'égar-d des obiets de

i;-;;;"*'ús le geire áL l'églog"". Image pu_remeni fonctionelle et totalepent

rpl¡i""i"¿", .tü ,}"rt pl"s {"e l'agent -poisible d'une certaine danilestation

d;;;;, -i;ü"ráár"

d" virtualitéi """oüé"r áux dispositions intérieu¡es (.. '); .n

*i-*|g""-¿rns une perspectivg^dynamique-, ccr.nme la nuit, qui,.nous I'a*ons vu,

"ri Ü"iiiú" Lii" pti,eip" d-e l'union. La^fontaine est un sgmbol,a.ort néma que

ü- *rt¡:;{ p"rt-¿t"á au iond, une autre forme du méme symbole"'

(Duvivier, R., ob. cit., P. 198)

Il) Ngunas atras fuenÍes dÉ\, matioo db la funnte en e:l cántíco Espiritual.

ILL) La influencia, b|blinac Tanto Alonso como clolin Thompson se ocu-

pu" au íu ioflr"r"lu bíblica en el C'in'tico,-pero sobae todo 1o hace Thompson.

Alonso no marca prOximida<ies respecto dél particular _motivo de la fuente.

thoÁpro, sí, aun[ue sólo lialta apiroNirnaciorñs leves. En CA 11 -dice- la

,r1"¡i" hrenie or"?. slr considerád* "o*o un muy débil eco de| Cantar de

í;;C;i;;t ú1i1, ctoncte también se halla, pero aplicada a la E.spo_s{ ('Huer-

to Árr"áo "ri,r,

nLiáosa mía, espose; huertó cerrado, fuente sellada"; la ala-

¡"*r-áá"tin*'rr, +,ig, "frrr cañás riegan un vergel-de granaCos, y tú posees

las más peregrinas esencias", y en 4,L!t-"La fuente de los huertos, es un pouo

de aguas' lrirár, q** bajan con ímpetu del Líbano") '

Thompson no establece una derivación estricta de la fuente de San Juan

"o" ,op"Ét" al C*ntar, y señala que. e] mo,tivo también puede provenir q5t¡-

l*"tu-árrt* de la traáilián profani (cfr' Thornpson, ob' c!t', -cap' ! y' F).',"ü"",^"á*"""1 'giü" tte'exient oi the Songii influence inthe Cínúbo itisreaso¡rable".

5 C{r. sobre el símbolo en San Juan y sobre los inóicios -que- ngs permiter adv.elEr

u pr"á*tJ"á; "; ;ñ;"-ri-u¿iiL, cárlos tsousoñg, Teoría.le k,.gxrrys(n- poetitll,

ürí¡¿--CÁ¿or, iSTq ""i."f,-C"p. ií, v El. i,rracional'i.smo poetico (El sírnbola), ¡1a-

drid, Gredos, 1977.

-45-

.l

rr'2) Ramón LtúJ,. ^Hermut Hatzferd (Est-udíos literarios sobre místtca

española, cap. rr. rn, ller-1.";,.;;;i. nrir" árr¿,iá, (tar como ra inter_

ü:ii iii "

IHL :r ;x :: :"%ri;, "r "oo" "-itJ ffi ffi " d e r desarrorr r¡ d ebólico q"" "q"iruü;'iil;1,"'*jT: llegar a ta tmia. u .i"*""I""r#

tr;r"r:l?r:H,Hf ,iLTá,,f.::,ü"tr",,ffi "¡t".{:ltrií*ii,tf,#,;

iit:;-r"ti,:::i:i'ryi*rHH:L';"li.,T?:1ffi :,'itg'J;i**:#;conros_i.,i",-,ilflT:."rTffi1:ás#:r*í:f iX:fr*t6#Hll,;lIfS) El tzmn.de los^cj:.i-: EI mism"c Hrtzlelcl (ob. cit.. pp.56_58) cstu-i.fjü"""#:r;*¿:;"f #lln?#::gli;ü;it.-á.i'a-uaoq,",*i.i".:[e-_"1 *...ntirl

"r "l oto-ál-.,,*."atto"rona primero con Ia la"" áLu-"a"cliera origen "i-lo-u*.

:o"¡"- a"fig;3,'fl?S*ffffi t :fl:U, supos;ción que

ffiff '#¿il'*6"r¡i::;*hT,u.;lm#*:#j"l**,f,:iT:iifrffi'ii:i:"'¡.$*',.'1*-1y":=# jf,""i¿,á;"L;;;:raexpresión*niña(de ahí el mlüo I

iff ,1!^i,T".r"r#*,*T"{Hi:",d[{aa;rr!xr:p1;fj3 á,¿T+r H _...Tffi ffii#, kjrH#iíTre'; r Hffi:III) Obos matiws def Gántico trdicioruInuwe relacionoidos can lq fuente:

J.",1'1'{' -.1'fl# W s ta.- fuatte: En.er .ciervo vurnerado de san Juan

1,9 " -, ¡ ; i;

" ;§ "bñIffi " ti.t**"m.m., "g;,f ml"r#,ffi

i;m r?- ,,{ {i+ E!it+;',ru# :#;É*J';, t]ffi ,1, jr}quc busca I", "guur"'

prirrero que ¡rn€ Tb"t, qA;f il"aa cjervo heriaotán vu,ios ;;;; i;,Jd::i fuTthü, :1,Hf# *;ffi".trlfl*, "ffifz¿s. del amor petrarquesco-

f *.*üü ^f:I"rffi:'i.r*). La imasencras¡ca--señala Lida-

"t p..dl-i*;;. s.*jr", "rát*ir'aa saho. A-cle_Ilff,;:,11"T:#?* gu' *"t'itl;.'.*iq,'"o, r;;ü"" der ciervo: rap'"'"'ü-;;;";id:ff l:":JHi 'i"xr="'e á; d#;:?que también ro

se ve sobre todo en ra o,aáiáÁü?'HrTüH:1""Í:r's:j:T'l#;se presenta al ciervo ,oU." toao ü.i ;** uúrcroda que se refresca ccn elH' LXril*i"a-palomr. u" t^- -úáToá*

.esartar\ "o'

LJuio, ros siguien-

,JJ""XTJ, ;X;: 1-"1jdo- va .a tomar ,",l**lo en las leuas rrías (ímagen

¡*r ";-*"i.{# ili"E [.' :."ffi :";: i:u*ih;:;ó'tr"] "-#,,H1i:ff ;tk*lllls,**ix,*r*:f.1"i:{i'i!#:rü:i,l

;

tB

b) Que el ciervo e modelo de consortes: al ver a la esposa herida de

*** prr'él -dice san ]uan- corre él también herido de amor por ella -a 9on-*"fr¡*- [esto pertenece'a la t¡adición medieval de fábulas y e]emplarios).

IIL2) Otro motivo relacionado con la fuente -aunque e-sta relación no se

au "" "f Lr" de la fuente del Cuús- es el de la "tortolica". I"a tórtola (CA

M); ü p;i;; [c¡, ¡sl son figuras de Ia Esposa e-n e] c,futui en- el _poema

""'rá froüf" de la relacián tórtoIa-agua, Ilero ií en Ia Declnraní(n, donde San

I"r; *h; mano de un saber de larga áata explicando que: "De la tortolica

se escribe que, cuando uo halla al ónsorte, nise_asienta en ramo verdg niU"r, ,1 ug,ir óhr* ni frí4 ni se lnne_debajo de la sombra, ni se iunta con

áá, uu"rip"ro. en i*ta"áot" coi e] Esposo, ya goza de todo esto' To'das las

á;Épo"f"dud"r lL acaecen a la almafporque, lntes que,Ilegue a esta iuntaJspirituil '""r, * Amadc, a de gugrer carescer de todo deleyte, que es no

sentaise en ramc verde, y de toda honra y gloria de el- mund-o-y gusto' que

ár.o U"u", el agua .1"Á y g1.t, y de todó réfriger;o y favor.del mundo, que

es no amoararse en la soábra,'ío queriendr ,"!otur-.n nada,-gimiendo- por

i; ;;i"á;l;; tá¿* iL á'". hasta -hallar a su Esposd' (Dec¡atroci.ón, de la

Canción 33,5; versióa A).

En un principio se üjo que solo la-tradición,popular del' rorn'ance había

influido en la imag." p"Et á de 1^ tórtola y ef pertiner¡te comer¡tario de

San Tuan. prro U"..-l ñ.UiU"". descubre en este-comentario otras muchas

i"fl"#;;r, ;"" r;lr;l rror.rdo de Fontefrida. El tema de Ia tórtola estaba

extendidísimo .n tu-po"J" li"li*u rredieval y po-derna (tanto la popular

""*"-f" culta). frr"'1"r r"íces están mucho -más

leios: en los naturalistas

p*SÁou, como'AristcJes, y_a se menciona a Ia tórtolá como modelo de ave

;;T¿ñ; E" Ia l¡teratura'hexaemeral (que se lemo-nq a.o'rígengs) i-ry:::U t¿rE"U como embleme de la casta viudez. La idea de la tórtola triste y viuda

oue huye de la verdura surge por pa:imera vez, al parecer, -en los semnnps

iiwi-éi*l*,-á. S; 8"r""í¿". Cbn el tiempo, la imagel de la tórtola que

;rú; i*r aáiriur áeL verdé evoca la imag; contrariá del ave- pos-ada-en

una rama ,""u, i-agá, q-.r" * hace más poódat que nunca,t" el siglo XVI'

EI *rg, a" Ir t¿rt;l" vil-rda que enturbia- e1 aglua-antes .de beberla es acaso

dr ;;;" -itaiu"o. l-as tr"r cáracterísüicas t" aúnan :rr 4 tradición.literaria

á, fu itrli" de los rigiár Xlv y XV, foco de irradiación culturll que la trans-

ñ;;;;r países ""rrotr*r.' Esta tradición :e rc*üq sin duda, en textqs-

escolares moralizanter;;;;á po"-" devoto del ca]rrrelita Battista Spagn-uoli

if¿¿S-UfOl. De texüs-r"*"¡u"Lr de los serrnones, de la tradición e-xegética

del Co,ntar, r"g*"*"rrtu "Já¡, San Juan las características cie la DeclaraoiOn'

;i; tu";g; *i*u. Pero agrega , gtá imagen-notas lugJal: no es ya la tórtola

íiuda siío Ia que, antes aluse[te de zu Alado, lo- ha-lla- finalmente' Además,

é." Í""" ,¡rd; ; l* á;btt-; q"" rechaz-t Ia tértola el de la soryryay el.delasua fría. Thornpson confirrra, por su trnrte, los -de-scubrimientos

de Bataillon

ft; ¿;;:;o.'"?éh¡i ;-M;i;'R'osa Lida recuerda la ¡aisambro latina de la

i#d", ;ri;mo la'dl otros motivos que aparecen en el C'ántico: el ruiseñor,

las sirenas' etc' Mo,ÍA Rose T,o¡o or Brrlm

---i S;r.oN, M., "La tortolica de «Fontefrida» y del Cántico Espiritwl" eí Yatl'd

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EDICIONES UTXLIZADAS

"ffif;d,%ff.rYTil" ,?:{f, "M*; edicion preparacla por Alronso I' sotelo §alas'

-Abms;edición,intrcducciónynotasdeTorxÉsNavarroTomás'Madrid'EspasaCalpe'lglo'

"'^5ItJ**S"?3, #itrY^,á'Y,-*ff' t"*ucción' texto v notas' edicién crítica

Sell ]ueN DE LA CRrz, Yida a o'lrras com'f,ens fu San twr¡ do' la Cnn' Madrid' B' A' C''

1w5.

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