El cierre del universo politico. Un acercamiento al posmarxismo de Slavoj Zizek y Herbert Marcuse a...

25
EL CIERRE DEL UNIVERSO POLÍTICO. UN ACERCAMIENTO AL POSMARXISMO DESDE HERBERT MARCUSE Y SLAVOJ ŽIŽEK A TRAVÉS DE LA VENTA DE REFUGIOS ATÓMICOS DE LUJO EN LA GUERRA FRÍA. UNMDP FACULTAD DE HUMANIDADES CARRERA: PROFESORADO EN FILOSOFÍA MATERIA: FILOSOFÍA POLÍTICA PROFESOR TITULAR: RODRÍGUEZ MATILDE ALUMNO: GARCÍA OSVALDO MATRICULA: 15864 AÑO: 2014

Transcript of El cierre del universo politico. Un acercamiento al posmarxismo de Slavoj Zizek y Herbert Marcuse a...

EL CIERRE DEL UNIVERSO POLÍTICO. UN ACERCAMIENTO AL POSMARXISMO DESDE HERBERT MARCUSE Y SLAVOJ

ŽIŽEK A TRAVÉS DE LA VENTA DE REFUGIOS ATÓMICOS DE LUJO EN LA

GUERRA FRÍA.

UNMDP

FACULTAD DE HUMANIDADES

CARRERA: PROFESORADO EN FILOSOFÍA

MATERIA: FILOSOFÍA POLÍTICA

PROFESOR TITULAR: RODRÍGUEZ MATILDE

ALUMNO: GARCÍA OSVALDO

MATRICULA: 15864

AÑO: 2014

2

ÍNDICE

1. INTRODUCCIÓN...…………………………………………………………...........PG. 3

2. EL CIERRE DEL UNIVERSO POLÍTICO. UN ACERCAMIENTO AL POSMARXISMO DE H.

MARCUSE Y S. ŽIŽEK………………………......................................…............. PG. 4

3. “EL HOMBRE UNIDIMENSIONAL”. LA VENTA DE UN REFUGIO ATÓMICO DE

LUJO…………………………………………………………………………...........PG. 6

4. LÍNEAS DE ENCUENTRO ENTRE HERBERT MARCUSE Y SLAVOJ ŽIŽEK A PARTIR DE

LAS OBRAS “EN DEFENSA DE LA INTOLERANCIA” Y “EL SUBLIME OBJETO DE LA

IDEOLOGÍA”......................................................................................................PG.10

5. LA BROMA DE LA IDEOLOGÍA? O HOW TO KEEP COOL IN THE COLD WAR!...........PG.16

6. CONCLUSIÓN................................................................................................PG.21

7. ANEXO.........................................................................................................PG.23

8. BIBLIOGRAFÍA...............................................................................................PG.25

3

1. INTRODUCCIÓN.

El siguiente trabajo, surge de una cuestión irrisoria, analizada por Herbert

Marcuse en “El hombre unidimensional”: la venta de “refugios atómicos de lujo”,

de la situación desconcertante que provoca la connotación de un enunciado de

tal tipo. A la par, surge la pregunta por las condiciones de posibilidad de tal

enunciado en el lenguaje público, y lo pertinente en todo caso, de un análisis

arqueológico al respecto. Este análisis, pone de relieve en primera instancia un

problema de índole ontológico para la filosofía política en general: el cierre del

universo político.

El trabajo se inicia por ello, como un acercamiento al posmarxismo y a los

rasgos generales de los pensamientos de Herbert Marcuse y Slavoj Žižek,

partiendo de la crítica de una tesis marxista clave: la noción del proletariado

como agente revolucionario. En segundo lugar, se desarrollan los temas

principales de “El hombre unidimensional”, donde se analiza la sociedad de

administración total y el funcionamiento del lenguaje en dicha sociedad. Un

lenguaje, que supera por mucho el lenguaje Orwelliano dirá el autor.

En tercer y cuarto lugar se analizan algunos de los temas principales de “En

defensa de la intolerancia” y “El sublime objeto de la ideología”, empleando una

lectura que rescata fuertes líneas de encuentro entre ambos autores. Los temas

abordados son de gran variedad: el multiculturalismo postideológico, la

postpolítica, la fantasía, el síntoma, el fetichismo de la mercancía y el rol de la

risa como forma de negación de lo político, entre otros. Se busca, al mismo

tiempo, la correspondencia con el caso de los refugios de lujo, entendiéndolo

como un eficaz paradigma para abrir el debate en torno al modelo de

subjetividad al cual responde y en todo caso a la posibilidad de un accionar

político transformador.

4

2. EL CIERRE DEL UNIVERSO POLÍTICO. UN ACERCAMIENTO AL

POSMARXISMO DE H. MARCUSE Y S. ŽIŽEK.

El cierre del universo político, tiene como contrapartida teórica el abandono de

una tesis marxista clave: el proletariado, en tanto que su existencia misma

representa una contradicción insalvable, deviene en el agente encargado de

llevar a adelante el proceso revolucionario1. Así, señala Marx: “El verdadero

límite de la producción capitalista lo es el propio capital’2; el umbral que lo

separa de una forma diferente de producción, está determinado de antemano

por el desarrollo histórico de las mismas fuerzas de producción. Por lo tanto, es

en la marcha inherente del modo de producción capitalista donde se

desarrollarán las bases que permitirán la ruptura revolucionaria y la superación

de dicho modelo hacia el control social de los medios de producción.

No obstante, el curso que tomó el capitalismo realmente existente, -su aparente

capacidad de renovarse de forma perpetua-, ha suscitado en el plano teórico la

necesidad de atravesar ésta y otras tesis marxistas fundamentales, dando lugar

a una perspectiva que permitiese dilucidar más claramente el fenómeno

ideológico. Una perspectiva que proporcionase una comprensión más acabada

de los mecanismos de poder y la complejización de estos, en relación a su

capacidad de reducir las contradicciones en su seno y prolongar la lógica de

explotación.

La investigación presente en “El hombre unidimensional”, inaugura un modo de

pensar más allá del materialismo histórico ortodoxo, valiéndose, en gran medida,

del psicoanálisis freudiano para el análisis de las nuevas formas de alienación

en el capitalismo tardío. Esta línea de trabajo, es retomada actualmente y puesta

a punto a través de la lectura de Lacan realizada por diversos autores

posmarxistas, entre los cuales se encuentra Slavoj Žižek como uno de sus

1 Recuérdese la frase con la cual cierra el Manifiesto comunista: “La burguesía produce, ante todo, sus propios sepultureros. Su hundimiento y la victoria del proletariado son igualmente inevitable.” 2 Esta cita es retomada por Žižek en: “El sublime objeto de la Ideología.” Buenos Aires” Trad. Isabel V, Núñez. 1ª Ed. 2ª reimp.- Buenos Aires. Siglo XXI Editores. 2009. Pg. 82. Pertenece al Volumen III, Capitulo XV, Pg. 321 de la obra “El capital” de K. Marx.

5

máximos referentes. Žižek, perteneciente a la corriente de pensamiento hoy

denominada Izquierda Lacaniana, procurará llevar a adelante un análisis del

acto político como tal, un análisis de la política tout court3. Frente a la

problemática de la clausura política, buscará abordar de lleno la pregunta: ¿Qué

es actuar políticamente hoy en día y, si acaso es posible hacerlo? Tratando a

través de este cuestionamiento, de comprender el fenómeno político- en

términos de Laclau- “sin mutilarlo”4.

Esta es quizá, a grandes rasgos, la característica esencial del proyecto. Por ello

la intervención, se desarrolla en términos de una ontología política.

Tanto Marcuse como Žižek, comparten la idea de que el problema fundamental

que impide la comprensión del acto político, es la despolitización de la

economía, y el moldeamiento de un modo de subjetivación conformista pasivo.

Ante la clásica definición de la política como “el arte de lo posible”, ambos

autores concuerdan en la idea de que la política, bajo las condiciones

ideológicas actuales, es justamente lo contrario: “el arte de lo imposible”.

La investigación se desarrolla en torno a la homologación de una serie de

intervenciones teóricas diversas, las cuales tienen como común denominador un

mismo núcleo problemático duro e inaccesible por definición. Este núcleo

problemático -el cual se identifica con el “real” Lacaniano en la obra de Žižek-,

detenta el lugar que históricamente, en el plano del saber, ha sido ocupado por

el totalitarismo -en tanto fenómeno ineludible para la reflexión que concierne a

todo proyecto analítico filosófico-político-. Quizá sea posible responder a la

pregunta planteada acerca de la posibilidad del acto político solamente si se

indaga en las causas y el alcance de dicha experiencia.

El gran problema, tanto para Marcuse como para Žižek, se halla en el cierre de

una dimensión donde tiene lugar el debate en torno al alcance de dichas

cuestiones. Donde como consecuencia, la negación sistemática de la vida y la

libertad quedan relegadas, tanto de la discusión, como de la agenda de los

gobiernos. Para este último autor, la perspectiva académica que afirma la

3 Laclau, Ernesto: “La razón Populista”. 1ra Ed. 7ma reimp. Buenos Aires. Fce. 2013. Pg. 27 3 Op. Cit. Pg.70

6

existencia actual de un universo postideológico es perfectamente solidaria y

coherente con dicho cierre. Para Marcuse, es el resultado al que conduce

inevitablemente la sociedad de administración total.

3. “EL HOMBRE UNIDIMENSIONAL”. LA VENTA DE UN REFUGIO ATÓMICO DE

LUJO.

La tesis central, presente en “El Hombre Unidimensional”- título que funciona a

modo de sentencia-, ancla en torno a la idea de que la sociedad capitalista

actual, con su correlato ideológico, la “racionalidad tecnológica”, ha llegado al

punto de convertirse en una sociedad de administración y movilización total de la

conducta y necesidades humanas; logrando, a través de ello, la contención e

integración de aquellas fuerzas que históricamente resultaban antagónicas. De

esta forma se convierte en unidimensional, fundamentalmente porque cierra,

dentro del universo del discurso y la acción, la función crítica del pensamiento; la

posibilidad de elaborar conceptos que subviertan la irracionalidad del orden

establecido, en nombre del libre desarrollo de las capacidades y facultades

humanas.

La democracia actual, consolida de forma eficiente y sin necesidad de terror

alguno el totalitarismo reinante. Un gobierno totalitario, no necesariamente debe

ser asociado únicamente a la tiranía de un partido y/o al terrorismo de estado;

del mismo modo debe considerarse así a aquel gobierno que esté basado en la

administración total de los instintos humanos y en la instauración de un régimen

de libertades represivas; un sistema en donde las satisfacciones y libertades

prolonguen, en vez de aliviar, el esfuerzo y sufrimiento humano.

El éxito sin precedentes de la sociedad de administración actual, se debe, sin

embargo, a la capacidad del aparato productivo de distribuir una mayor cantidad

de bienes a una mayor cantidad de personas, elevando de forma considerable e

inédita el nivel de vida. Lo que permite, la intensificación del poder sobre el

sujeto, al tiempo de sumirlo en un agradable bienestar. Esto lleva a la

7

configuración de un modelo de subjetividad conformista; acompañada de un tipo

particular de “conciencia feliz”; para la cual las contradicciones se hacen

tolerables, razonables. Es justamente, en este elemento racional dentro de lo

irracional de la sociedad actual, en donde sugiere hacer hincapié “El hombre

Unidimensional” y en mayor medida el proyecto conjunto de la Teórica Critica;

poniendo de relieve la capacidad del sistema de prescindir por momentos de

toda lógica para preservarse.

Centrándose en el universo del discurso, el autor extrae -de los anales de la

publicidad durante la Guerra Fría- una serie de expresiones paradigmáticas,

claves a la hora de analizar el funcionamiento del lenguaje en la sociedad de

administración total.

La tesis central es que el lenguaje público, a través del cual se sostiene la

ideología, ha superado por mucho el lenguaje Orwelliano, y que el tópico de la

banalidad del mal se muestra ya carente de sentido, debido a que el mal se

muestra trasparente en su crueldad y monstruosidad.

Orwell predijo hace mucho que la posibilidad de que un partido político que trabaja para

la defensa y el crecimiento del capitalismo fuera llamado “socialista”, un gobierno

despótico “democrático” y una elección dirigida “libre”, llegaría a ser una forma lingüística

–y política- familiar. 5

Entre Noviembre y Diciembre de 1960 en el New York Times era posible

encontrar entre sus paginas cuestiones como las siguientes: “Los trabajadores

buscan la armonía de los misiles”6, “Un submarino nuclear tiene un precio

aproximado de ciento veinte millones de dólares”7. Y por último, un anuncio

donde se ofrecía a la venta al público un “Refugio de lujo contra la

radioactividad”8.

Estos ejemplos del discurso público resultan inestimables a la hora de analizar la

capacidad de convertir lo negativo en positivo por parte de la sociedad de

administración total, de unificar los opuestos. Tanto en el plano político como en

5 Marcuse, Herbert: “El hombre Unidimensional. Ensayo sobre la ideología de la sociedad industrial avanzada”.Tr. Antonio Elorza.1ra Ed. Barcelona. Ed Planeta De Agostini. 1985. Pg. 119 6New York Times, 1 de diciembre de 1960 7 Ibíd. 2 de noviembre de 1960 8 Ibíd. 7 de noviembre de 1960

8

el comercial, dicha unificación, es el estilo que adopta la operación de

inmunización del discurso contra las expresiones de protesta y negación. Vale la

pena recordar que, en “1984” de Orwell, este procedimiento es denominado

“doble-pensar”. Consiste en la capacidad de mantener dos creencias

contradictorias en la mente de los sujetos simultáneamente y lograr que se

acepten ambas. Recuérdese además, la famosa advertencia del escritor

respecto del lenguaje político:

“El lenguaje político está diseñado para hacer que las mentiras suenen confiables y el

asesinato, respetable; y para darle la apariencia de solidez al mero viento.”

Ahora bien, si “trabajadores”, “armonía” y “misiles”, son contradicciones

irreconciliables y ninguna lógica o lenguaje es capaz de unir correctamente el

lujo y la radioactividad ¿cómo es posible que esta lógica y este lenguaje lleguen

a ser perfectamente racionales?

Cuando en el campo del discurso, como signo de comercialización social,

emerge “ la venta un refugio de lujo contra la radioactividad” junto a la

interpretación del mismo como símbolo de prosperidad, lo fundamental a tener

en cuenta, en este acontecimiento, es que en dicho enlace opera una

traducción: se disuelve un sustantivo, con una carga atroz, en otro de imagen

placentera. Esta operación, que tiene lugar en el lenguaje público, es llamada

“contracción sintáctica”. Ejemplos similares, se observan en los medios de

comunicación cuando se oye hablar de “bombas atómicas limpias”,

atribuyéndose en dichos casos a la destrucción y aniquilación humana una

integridad moral o física.

“La contracción sintáctica es una operación del lenguaje por la cual se imponen

imágenes y milita contra el desarrollo y la expresión de conceptos. Impidiendo el

desarrollo conceptual, impide el pensamiento. “ 9

Por lo tanto, señala Marcuse “¿Cómo pueden la protesta y la negación encontrar

9 Marcuse, Herbert: “El hombre Unidimensional. Ensayo sobre la ideología de la sociedad industrial avanzada”.Trad. Antonio Elorza.1ra Ed. Barcelona. Ed Planeta De Agostini. 1985. Pg. 125

9

la palabra correcta cuando los organismos del orden establecido admiten y

anuncian que la paz es en realidad el borde de la guerra, que los últimos

cañones llevan consigo la justificación de su precio, y que los refugios contra

bombas pueden ser muy acogedores?”10 Lo importante, no es el hecho de que

este tipo de cuestiones venda, sino el hecho de que promueven la identificación

inmediata del interés particular con el general, los negocios con el poder

nacional y la prosperidad con el potencial de aniquilación. Es posible admitir que

dicho lenguaje en si no es terrorista, y que la gente no es llevada a creer todo

ciegamente. Pero, no obstante, al exhibir sus contradicciones como la clave de

la verdad, este universo del discurso se cierra a cualquier otro discurso que no

se desarrolle en sus propios términos, y este es el resultado final de dicha

operación.

El rasgo distintivo de la sociedad industrial avanzada es la sofocación efectiva de

aquellas necesidades que requieren ser liberadas –liberadas de aquello que es tolerable,

ventajoso y cómodo- mientras que sostiene y absuelve el poder destructivo y la función

represiva de la sociedad opulenta. Aquí los controles sociales exigen la abrumadora

necesidad de producir y consumir despilfarro; la necesidad de un trabajo embrutecedor

cuando ha dejado de ser una verdadera necesidad; la necesidad de modos de descanso

que alivian y prolongan ese sufrimiento; la necesidad de mantener libertades engañosas

tales como la libre competencia a precios políticos; una prensa libre que se autocensura,

una elección libre entre marcas y gadgets. En este caso, bajo el gobierno de una

totalidad represiva, la libertad se puede convertir en un poderoso instrumento de

dominación. En la medida en que estos productos útiles son asequibles a más individuos

en más clases sociales, el adoctrinamiento que llevan a cabo deja de ser publicidad, se

convierte en modo de vida. Es un buen modo de vida –mucho mejor que antes- y así en

cuanto tal se opone al cambio cualitativo. Así surge el modelo de pensamiento y

conducta unidimensional.11

La belleza revela su terror conforme las altamente clasificadas plantas nucleares y

laboratorios se convertían en “parques industriales” con agradables alrededores; los

cuarteles de Defensa civil exhiben un “refugio de lujo contra la radioactividad” con

alfombras “suaves” de pared a pared, sillones, televisión y cuarto de diversión, “diseñado

como un salón familiar combinado durante el tiempo de paz (sic) y refugio familiar contra

la radioactividad si estalla la guerra”. 10 Op cit. Pg.120 11 Ibíd. Pg.37

10

Si el horror de tales realizaciones no penetra en la conciencia, si realmente se da por

sentado, es porque estas realizaciones son: perfectamente racionales en términos del

orden existente o son signos de la ingenuidad humana y el poder más allá de los límites

tradicionales de la imaginación. 12

4. LÍNEAS DE ENCUENTRO ENTRE HERBERT MARCUSE Y SLAVOJ ŽIŽEK A

PARTIR DE LAS OBRAS “EN DEFENSA DE LA INTOLERANCIA” Y “EL SUBLIME

OBJETO DE LA IDEOLOGÍA”.

La obra “En defensa de la intolerancia” de Slavoj Žižek se desarrolla

fundamentalmente como una crítica al discurso multiculturalista liberal, bajo la

tesis de que este tipo de pensamiento es el correlato ideológico del capitalismo

avanzado y es plenamente solidario con la despolitización de la economía,

reduciendo la labor critica a una lucha en pos de reconocimientos de estilos de

vida particulares; en última instancia, reduciendo la política a política identitaria.

El relato multiculturalista, aboga por la tolerancia y la comprensión de la otredad,

pero en tanto que el multiculturalista conserva un punto hueco de universalidad,

desde donde se comprende al otro, dicha tolerancia se convierte ineludiblemente

en una tolerancia represiva. En el plano concreto, el multiculturalista acepta los

matices asimilables del otro culturalmente diferente, reprimiendo y negando

aquellos aspectos que no se encuentran en conformidad con las normas de la

sociedad establecida. El reconocimiento es un reconocimiento del “otro

abstracto”, el cual no tiene lugar cuando hay que “vérselas con el otro real”.

Téngase en cuenta el siguiente caso para ilustrar esta idea. “En argentina en los

últimos años se ha desarrollado un gran interés por la cultura peruana, sus

comidas, las tradiciones incaicas, su vestimenta, etc.… Incorporándose dentro

del imaginario social una infinidad de elementos de la misma. El matrimonio

cultural es sin embargo una unión del argentino (real) con el peruano abstracto,

ya que el peruano(real) sigue siendo considerado no obstante un inmigrante 12 Ibíd. Pg.227

11

ilegal no deseado, que vende droga, roba la fuente de trabajo, etc..”

El discurso multiculturalista, al remitirse a reconocer la particularidad de un

grupo oprimido, opera negando la universalidad de la condición de dicho grupo.

Este es el mecanismo fundamental que permite toda despolitización. En este

punto, Žižek recurre al concepto de hegemonía de Ernesto Laclau13, para quien

el acto político solo es posible, si un reclamo político particular adquiere estatus

de universal, es decir, si se erige en nombre de la injusticia del todo y representa

un significante que permite condensar una cadena equivalencial de reclamos. La

incapacidad de resolver de manera diferencial dichos reclamos es lo que permite

la transformación del orden imperante. El multiculturalista, señala Žižek, atiende

cada reclamo por separado, asignado a cada grupo su rol de víctima y su lugar

correspondiente en el orden existente, “a cada cual derechos diferenciales”. De

esta manera lo que se conserva es la lógica inexorable del capital y su marcha

ciega.

“Este referirse a una forma cultural particular es una pantalla para el anonimato universal

del capital.”14

La post-política -la política entendida como la gestión de los asuntos sociales,

más allá de las divisiones ideológicas y el antagonismo- limita así las

posibilidades del acto político. Esta limitación se debe directamente a la

despolitización de la economía, a la idea generalizada de que el capital y los

mecanismos del mercado son instrumentos/procedimientos neutros que hay que

aprovechar.

Ante esto, Žižek dirá que el gesto político de izquierdas consistirá (“en contraste

con la identificación de derechas, cada cual en su sitio”) en la “identificación con

el síntoma”, es decir con aquella parte que, aun siendo inherente al actual orden

universal, no tiene lugar propio dentro del mismo.

“Identificar la universalidad con el punto de exclusión, decir: “Todos somos trabajadores

inmigrantes”.15 13 Véase “Hegemonía” en Laclau, Ernesto: “La razón Populista”. 1ra Ed. 7ma reimp. Buenos Aires. FCE. 2013. 14 Žižek , Slavoj “En defensa de la intolerancia”. 1ª Ed Trad Javier, E, Ceballos y Antonio, J,A Fernandez. Ed Sequitur. Madrid. 2007. Pg. 67

12

A través de la concepción multiculturalista, de la negación de la política como

post-política, en “En defensa de la Intolerancia” se observa una línea de

encuentro con el procedimiento propio del discurso ideológico, destacado por

Marcuse, la “concreción sintáctica”, el funcionamiento Orwelliano del lenguaje.

Žižek, retoma la formula expresada por el primer ministro inglés Tony Blair, en

aquel momento en que definió al New Labour como el “centro radical”.

Advirtiendo que “en los viejos tiempos de las divisiones políticas “ideológicas”, el

término “radical” estaba reservado” o a la extrema izquierda o a la extrema

derecha”.

El centro era por definición moderado: Conforme a los viejos criterios, el concepto

Radical Centre es tan absurdo como el de “radical moderación… Lo que tiene de radical,

es su radical abandono de las “viejas divisiones ideológicas”. Lo importante para los

promotores del New Labour es aplicar las buenas ideas, vengan de donde vengan

Ideológicamente. Esto es las ideas que funcionan. El problema es que dicho

funcionamiento es aquel que se adecua al marco de relaciones socio-políticas.16

Como se señaló, el verdadero acto político, es justamente lo contrario,

precisamente aquello que modifica el contexto que determina el funcionamiento

de las cosas. Žižek alude a un conocido lema de los sesenta de Den Xiaoping:

“Poco importa si el gato es blanco o rojo, con tal de que cace ratones.”

De esta manera el conflicto entre las visiones ideológicas globales, encarnadas

por distintos partidos que compiten por el poder, queda sustituido por la

colaboración entre los tecnócratas ilustrados (economistas, expertos en opinión

pública) y los liberales multiculturalistas: mediante la negociación de los

intereses se alcanza un acuerdo que adquiere la forma del consenso más o

menos universal.

A su vez Marcuse advierte como, en su momento, el bipartidismo en política

exterior cubría los intereses competitivos de los grupos mediante la amenaza del

comunismo internacional. Quizás hoy en día tras la caída de la URSS cabría

pensar en la amenaza de la “debacle económica y el terrorismo islámico”. Esta

forma, prosigue, es la que se extiende a la política doméstica, “donde los 15 Op cit. Pg.124 16 Ibíd. Pg. 90

13

programas de los grandes partidos son cada vez más difíciles de distinguir,

incluso en su grado de hipocresía y tópicos empleados”17. Esta unificación de los

opuestos gravita sobre las posibilidades de cambio social en el sentido que

abarca aquellos estratos sobre cuyas espaldas progresa el sistema.

Casualmente se refiere al partido laborista ingles de la siguiente manera:

“El partido laborista Ingles, cuyos líderes compiten con sus oponentes

conservadores en promover los intereses nacionales, difícilmente se dedica a

apoyar un modesto programa de nacionalización parcial”.18 Lo mismo sucede

con los partidos comunistas francés e italiano de la época. Marcuse advertía ya

la necesidad de estos partidos de marginar la toma revolucionaria del poder y

contemporizarse con las reglas de juego parlamentarias.

Estos partidos comunistas nacionales que desempeñaban el papel histórico de partidos

de oposición legal fueron “condenados a no ser radicales”. Atestiguando la profundidad y

la dimensión de la integración capitalista.19

En otra de sus obras, en “El sublime objeto de la Ideología”, Žižek expone una

serie de elementos clásicos de la teoría lacaniana que posibilitan el análisis del

funcionamiento de la ideología más allá de la concepción tradicional, esto es,

como el velo que cubre el estado real de las cosas, -las relaciones sociales que

determinan el control de los medios de producción-.

Estos elementos permiten ampliar algo más la lectura de Marcuse del “refugio

atómico de lujo”, reforzando la idea de que este acontecimiento discursivo puede

funcionar como “paradigma ideológico”. Haciendo uso del empleo clásico del

término “paradigma” expresado claramente por Giorgio Agamben en “Estado de

excepción”.

En griego el término “paradigma” quiere decir simplemente ejemplo, es un

fenómeno particular que, en cuanto tal, vale por todos los casos del mismo

género y adquiere la capacidad de construir un conjunto problemático más

vasto. En este sentido, el panóptico en Foucault y el doble cuerpo del rey en

17 Marcuse, Herbert: “El hombre Unidimensional. Ensayo sobre la ideología de la sociedad industrial avanzada”. Rad Antonio Elorza.1ra ed. Barcelona. Ed Planeta De Agostini. 1985. Pg. Pg.48 18 Ibíd. Pg.50 19 Ibíd. Pg. 51

14

Kantorowicz son paradigmas que abren un nuevo horizonte para la investigación

histórica, sustrayéndola a los contextos metonímicos o cronológicos. Homo

Sacer no es solamente una figura oscura del derecho romano clásico, sino

también la cifra para comprender la biopolítica contemporánea.20

En la obra de Žižek, la noción Lacaniana de point de caption (punto de

acolchado) juega un rol central en la comprensión del funcionamiento de la

Ideología, y permite distanciarse de la lectura clásica de la misma. El point de

caption se concibe como la operación ideológica fundamental, permitiendo

describir como la “fantasía” se convierte en un argumento imaginario que

encubre la división o “antagonismo” fundamental en torno al cual se estructura el

campo social -es justamente lo que posibilita la hegemonía en términos de

Laclau-. Es necesario considerar el hecho de que no haya nada por fuera de la

alienación, que esta no sea un velo que cubre lo real, sino por el contrario,

aquello que posibilita la articulación de la realidad como tal. Detrás de la

“fantasía” se hallaría la desintegración del sujeto, el “vacío psicótico”. Por ende

no sería posible pensar un más allá Ideológico, lo fundamental es la

comprensión de la fantasía a través de la escenificación de la misma. Es

necesario recordar que para Lacan no hay algo así como una “cura

psicoanalítica”, y de lo que se trata en cambio es de permitir la identificación con

el síntoma. Para en última instancia atravesarlo, llegar a un acuerdo con él.

Entendido como significante, el “refugio de lujo” es un claro ejemplo de síntoma,

el cual a su vez funciona como condición necesaria para la articulación de la

fantasía del capitalismo.

“El síntoma es una marca corporal aterradora que es meramente un testigo mudo que

testimonia un goce repugnante, sin representar a nada ni nadie.”21

Por medio de una reflexión sobre el funcionamiento de la “fantasía” en Kafka

resulta algo más claro lo expresado anteriormente.

20 Agamben se refiere a la noción de “paradigma” en una entrevista realizada por Flavia Costa en AGAMBEN, GIORGIO: “ESTADO DE EXCEPCIÓN. HOMO SACER II. 1º. TRAD. F. COSTA, VARELA. ED. ADRIANA HIDALGO. BUENOS AIRES. 2004. PG. 14 21 Žižek , Slavoj “En defensa de la intolerancia”. 1ª ed Trad Javier, E,Ceballos y Antonio, J,A Fernández. Ed Sequitur. Madrid. 2007. Pg. 111

15

El llamado “universo de Kafka”, donde se da una imagen exagerada fantástica

de la burocracia moderna no es una “imagen fantasía de la realidad social”, sino

al contrario, la puesta en escena de la fantasía que actúa en plena realidad

social.

“Lo que llamamos realidad social es en ultimo termino una construcción ética; se apoya

en un cierto como si (actuamos como si creyéramos en la omnipotencia de la burocracia,

como si el Presidente encarnara la Voluntad del Pueblo, como si el Partido expresara el

interés objetivo de la clase obrera…)22

En cuanto se pierde la creencia, la trama de la realidad social se desintegra.

Por su parte, Marcuse se instala en la fantasía sostenida, a través del refugio

atómico, en relación al holocausto, señalando que lo que empieza como el

horror allí vividos, se convierte en la “práctica de gente entrenada para vivir en

condiciones anormales: una existencia humana subterránea y el consumo diario

de alimentos radioactivos”. 23

Retomando a su vez una cita de Eugene Ionesco:

“El mundo de los campos de concentración… no era una sociedad excepcionalmente

monstruosa. Lo que vimos allí era la imagen, y en cierto sentido la quintaesencia de la

sociedad infernal en la que nos sumergimos cada día.”24

Esta lectura del holocausto es un elemento clave en la obra de Žižek, según el

cual, los campos de concentración son el fenómeno que designan con mayor

precisión al “anverso perverso” de la civilización del Siglo XX. 25

Todos los diferentes intentos de vincular este fenómeno con una imagen

concreta (Holocausto, Gulag, etc.) de reducirlo a un producto de un orden social

concreto (fascismo, estalinismo) no han sido sino otros tantos intentos de eludir

el hecho de que en este caso se enfrenta lo “real” de nuestra civilización que

22 Ibíd. Pg. 65 23 Ver: Anexo. 24 Marcuse, Herbert: “El hombre Unidimensional. Ensayo sobre la ideología de la sociedad industrial avanzada”. Rad Antonio Elorza.1ra ed. Barcelona. Ed Planeta De Agostini. 1985. Pg. 110 25 “No hemos de olvidar que los campos de concentración fueron un invento de la “liberal” Inglaterra, que datan de la guerra de los Boers, que también se usaron en Estados Unidos para aislar la población japonesa, etc. “en Žižek , Slavoj “En defensa de la intolerancia”. 1ª ed Trad Javier, E,Ceballos y Antonio, J,A Fernandez. Ed Sequitur. Madrid. 2007. Pg. 82

16

retorna como el mismo núcleo traumático en todos los sistemas sociales.

A esta altura resulta evidente la distancia del enfoque analítico frente a la lectura

tradicional de la ideología. Mientras que la “critica Ideología” trata de deducir la

forma ideológica de una sociedad determinada partiendo de la conjunción de sus

relaciones sociales efectivas, el enfoque analítico apunta sobre todo a la fantasía

ideológica eficiente en la propia realidad social.

5. ¿LA BROMA DE LA IDEOLOGÍA? O HOW TO KEEP COOL IN THE COLD

WAR!

Un último aspecto es necesario resaltar del caso analizado, el cual permite

acceder a la descripción de una de las características fundamentales de la

subjetivación ideológica, descrita por Peter Sloterdijk y empleada por Žižek, esto

es la “Razón cínica”, o el cinismo como forma de Ideología. Lo que se busca

indagar es el lugar que ocupa la broma en el funcionamiento de la fantasía.

Como se señaló al comienzo del trabajo, el mismo inicialmente se articula en

torno al efecto cómico que tiene el fenómeno de la “Venta de refugios atómicos

de lujo” y lo irrisorio de dicho acontecimiento para un análisis de tipo

arqueológico. A través de dicho rastro se ponen de relieve las condiciones

epistémicas que permitieron la emergencia especifica de ese de acontecimiento

discursivo, en términos foucaultianos las estrategias de saber/poder que lo

sustentan. La venta de refugios atómicos de lujo por su carácter impensado, por

su radical imposibilidad de base, no puede menos en primera instancia que

causar gracia, lo cual no hace otra cosa que poner de relieve aún más su

monstruosidad.

En tanto que exhibición obscena de las contradicciones como verdad, muestra

el carácter trasparente de la monstruosidad como fue mencionado a través de

17

Marcuse.26 A su vez esta es una de las características fundamentales de la

“Razón cínica”. La forma en que opera en el discurso Ideológico es abordada por

Žižek a través de un análisis de la obra de Umberto Eco, “El nombre de la

rosa”.27

La tesis fundamental de la obra es que la fuente del totalitarismo es un vínculo

dogmático con la palabra oficial: la falta de risa, de separación irónica. La risa es

en la novela de Eco un elemento subversivo por definición, se la considera

portadora de una fuerza liberadora y antitotalitaria.

Žižek invierte dicha tesis, al señalar que en la sociedad contemporánea, la

distancia cínica, la risa, la ironía, se convierten en un mecanismo ideológico; que

la Ideología “no pretende ser tomada seriamente”. Advierte que ya la escuela de

Frankfurt brinda una relectura clave a la definición clásica de la Ideología como

“falsa conciencia”; que tiene como premisa una “conciencia ingenua”, la cual es

formulada: ellos no lo saben, pero lo hacen- Estos autores dejan en claro que,

no se trata, ni es posible “ver simplemente como son las cosas”, o “quitarse los

antejos de la Ideología”, (en nuestro caso, encontrar lo absurdo o irracional del

refugio). De lo que se trata por el contrario, es de ver cómo la realidad no puede

reproducirse sin esta mistificación ideológica.

Marcuse advierte ya el hecho de que dicho procedimiento está inscrito en la

esencia misma de la racionalidad tecnológica y por ello hace hincapié en la

imposibilidad de base del accionar político. Es consciente de cómo la

mistificación abierta es un elemento nodal en la estructuración ideológica, del

aspecto fundacional de la fantasía.

La tesis de Sloterdijk retomada por Žižek, va un paso más allá al señalar que el

sujeto cínico está al tanto de la distancia entre la máscara ideológica y la

realidad social, pero pese a ello insiste en la máscara. La fórmula propuesta es:

ellos saben lo que hacen, pero aun así lo hacen. La Razón cínica como 26 Es necesario recordar las palabras de Marx en el Manifiesto en relación al capitalismo: “El capitalismo ha ahogado el sagrado éxtasis del fervor religioso, el entusiasmo caballeresco y el sentimentalismo del pequeño burgués en las aguas heladas del cálculo egoísta. Ha hecho de la dignidad personal un simple valor de cambio. Ha sustituido las numerosas libertades escrituradas y adquiridas por la única y desalmada libertad de comercio. En una palabra, en lugar de la explotación velada por ilusiones religiosas y políticas, ha establecido una explotación abierta, descarada, directa y brutal”. Marx, Karl; Engels Frederich: “Manifiesto del Partido Comunista”. Ediciones Pluma. Buenos Aires. 2004 27 Op cit. Pg. 54

18

resultado no es ingenua, sino que es una paradoja de una falsa conciencia

ilustrada. Uno sabe de sobra la falsedad, está muy al tanto de que hay un interés

particular oculto tras una universalidad ideológica, pero aun así no renuncia a

ella. La distancia cínica es solo un camino entre muchos para cegarnos al poder

estructurante de la fantasía ideológica: aun cuando no tomemos las cosas en

serio, aun así lo hacemos.

La creencia de que se vive en una sociedad postideológica por ende es el

correlato inequívoco de la despolitización de la economía. La negación del acto

político tiene aquí su lugar en el momento en el cual la ideología se convierte en

totalitaria; debido al hecho de ya no pretender ser tomada seriamente, ni siquiera

por sus autores.

Su estatus es solo un medio de manipulación puramente externo e instrumental; su

domino está garantizado, no por valor de verdad, sino por simple violencia

extraideológica y promesa de ganancia. 28

Cabe señalar que este análisis conduce a la noción Marxista del Fetichismo de

la Mercancía, según la cual en el capitalismo las relaciones entre las personas

adquieren el status de relaciones entre cosas. Es decir, lo sujetos emancipados

de la superstición son conducidos a relacionarse entre sí en términos

estrictamente utilitaristas, guiados por el interés egoísta, adquiriendo el estatuto

de mercancías entre otras en el intercambio de bienes.

Según Žižek, no es que se abandonen las creencias, supersticiones y

mistificaciones en detrimento de la personalidad utilitarista, sino por el contrario

dichas creencias son puestas en escena por las cosas mismas, realizándose en

el plano social de forma aún más efectiva. La fórmula que propone es: Ellos ya

no creen, pero las cosas creen por ellos.

La falsa conciencia por lo tanto, opera en la praxis. (Es el como si, mencionado

en relación a Kafka), no tiene lugar en el fuero interno, ya que el sujeto es

plenamente reconocido en su radical emancipación en dicho nivel; la falsa

28 Op cit. Pg. 58

19

conciencia es radicalmente exterior, la creencia es encarnada en la conducta

práctica y efectiva de la gente, su estatus es objetivo y no subjetivo.

Por ultimo vuelve a servir de ejemplo la risa como elemento clave para dar

cuenta de la fantasía ideológica: En los espectáculos populares y series de

Televisión frecuentemente se asiste, frente a algún comentario ingenioso o

divertido, a una risa incluida en la banda de sonido, “la risa enlatada”. ¿Por qué

esta risa? Si bien es posible inclinarse a pensar que la risa misma se convierte

en cuestión de obligación, lo cual no es un dato menor, la verdadera clave del

hecho reside en que a través de la “risa enlatada” el Otro – la fantasía

ideológica- es encarnada en el aparato de televisión, “nos está descargando de

la obligación de reír, ríe en vez de nosotros”.

Así que, aun cansados de un fatigoso día de trabajo estúpido, nos pasamos la tarde

mirando amodorrados la pantalla de televisión, después podemos decir, objetivamente,

por medio de otro, nos la pasamos realmente bien.29

Žižek, en algún momento de su obra retoma un pasaje de “1984”. Una de las

escenas según el autor de mayor trascendencia dentro de la misma.

Winston: « ¿Existe el Gran Hermano?»

O’Brien: «Claro que existe. El Partido Existe. El Gran Hermano es la encarnación del

partido.»

Winston: « ¿Existe en el mismo sentido en que yo existo?»

O'Brien: « ¡Tú no existes!» 30

No debe resultar extraño por lo tanto luego de analizar el rol de la broma y el

papel conferido como sostén de la fantasía, el hecho de que durante el periodo

en el que salieron a la venta los refugios atómicos de lujo, -si bien su venta no

sufrió el éxito que se esperaba, aunque se vendieron alrededor de 200.000

unidades en Estados Unidos y todavía hoy en día hay empresas que se dedican

exclusivamente a la venta de los mismos- la economía en el país haya 29 Op cit. Pg. 64 30 Orwell, G: “1984”. Ed Ediciones Destino. Barcelona. 1957.Pg 148

20

prosperado en breve tiempo de una forma sin precedentes31. El carácter de lo

monstruoso como mecanismo de prolongación de la Ideología capitalista, no

solo requiere la mera contradicción en términos, sino que necesita elevar cada

vez más en el plano discursivo el nivel de abuso semántico, como

mecanismo/signo de su capacidad ilimitada de exceso en todos los planos. Se

trata de una escenificación del poder mismo y su alcance inefable.

Una vez más Marcuse, no deja de mencionar este mismo fenómeno, aludiendo

quizá de forma sutil, a la justificación publica de Estados Unidos respecto de

Hiroshima y Nagasaki:

Ni la creciente productividad, ni el alto nivel de vida, dependen de la amenaza exterior,

pero su utilización para la contención del cambio social y la perpetuación de la

servidumbre, sí. El Enemigo es el común denominador de todo lo que se hace y

deshace. Y el Enemigo no debe identificarse con el comunismo actual o el capitalismo

actual; es en ambos casos, el espectro de la liberación...Una vez más, la enajenación de

la totalidad absorbe las enajenaciones particulares y convierte los crímenes contra la

humanidad en una empresa racional. Cuando las personas, debidamente estimuladas

por las autoridades públicas y privadas, se preparan para una vida de movilización total,

son sensibles a ella no solo debido al enemigo presente, sino también por las

posibilidades de inversión y empleo en la industria y la diversión. Incluso los cálculos

mas insensatos son racionales: La aniquilación de cinco millones de hombres es

preferible a la de diez millones, veinte millones y así por el estilo. Es inútil alegar que una

civilización que justifica su defensa mediante tales cálculos proclama su final.32

31En otra de sus obras “Irak la tetera prestada ”Žižek se pregunta respecto de la guerra librada en medio oriente ¿y si, como ya han sugerido algunos economistas, el verdadero objetivo de la guerra no fuera principalmente el control de los recursos petrolíferos, sino el fortalecimiento del dólar, la prevención de la derrota del dólar por parte del euro, la prevención del colapso de un dólar que está cada vez menos “cubierto” por un valor “real” (pensemos en la inmensa deuda norteamericana? Hoy día, una Europa unida es el principal obstáculo del Nuevo Orden Mundial que Estados Unidos quiere imponer. (p. 59). Véase Ž ižek, S. : “Irak. La tetera prestada.” Luis Alvarez Mayo (tr.), Madrir. Losada .2006 32 Marcuse, Herbert: “El hombre Unidimensional. Ensayo sobre la ideología de la sociedad industrial avanzada”. Rad. Antonio Elorza.1ra ed. Barcelona. Ed Planeta De Agostini. 1985. Pg.83

21

6. CONCLUSIÓN

Mediante el caso de “Un refugio atómico de lujo”, se procuró llevar a adelante un

recorrido aproximativo por una serie de problemáticas esenciales que se cree

debieran ser tenidas en cuenta mínimamente ante todo análisis que tenga como

objeto el funcionamiento de la Ideología en el capitalismo tardío. En tanto

paradigma, “el refugio de lujo”, permitió constituir un campo de

problematizaciones de gran vastedad, tras las cuales se cuestionó el mismo ser

de la política y la posibilidad de actuar políticamente. Las problematizaciones

giraron en torno al relato multiculturalista, el lenguaje político, la mistificación

ideológica y la razón cínica como mecanismo totalitario; a su vez como

cuestionamientos en torno a un mismo núcleo problemático.

Como se observo, el refugio de lujo, en tanto significante, excede la

interpretación clásica de la Ideología. Esto ultimo fue claramente expresado,

entendiendo que justamente la capacidad de exceso es lo que da forma y

sostiene la fantasía ideológica.

El “refugio de lujo”, es una escenificación de lo “real” de nuestra civilización,

expresa, como se señaló, la “quintaesencia misma de nuestra sociedad

industrial de comercialización total”, donde las contradicciones se manifiestan

abiertamente y el lenguaje se torna orwelliano.

El sujeto al cual esta dirigido dicho significante, es un sujeto que no toma

seriamente la Ideología, que mantiene una distancia cínica frente la misma, pero

que al mismo tiempo, en el plano de la praxis, sostiene el funcionamiento

ideológico, lleva a cabo solo acciones que se adecuan al marco de relaciones

socio-políticas establecidas, donde predomina la lógica inexorable del capital.

Žižek y Marcuse, en cierto sentido, coinciden en un mismo pronostico y ley: el

acto político debe ser necesariamente imposible. Debe transformar el marco de

relaciones establecidas, y solo será posible si se considera la repolitización de la

economía; entendida como la identificación con el síntoma. Cualquier otra

expresión política que no considere dicho elemento será proclive a favorecer el

mismo funcionamiento ideológico.

22

Si bien las investigaciones de ambos, permiten extender la comprensión del

fenómeno ideológico y el modelo de subjetividad que conforma, no logran zanjar

la brecha ontológica abierta por el mismo. Allí, justamente, radicaría la

posibilidad del acto político como tal, en la profundización de dicha brecha, en el

reconocimiento del carácter universal de ciertas contradicciones.

Por ultimo, restaría aclarar el hecho de que las líneas de encuentro establecidas

entre ambos autores, habiendo teniendo en cuenta solamente unas pocas obras,

han dejado de relieve, -aunque de forma modesta y deudora de profundidad en

algunos conceptos- la intrincada complementariedad de ambos pensamientos.

Esta ultima conclusión satisface en gran medida el objetivo del trabajo, en tanto

aproximación, aunque deja en claro, en gran medida también, lo inacabado de la

tarea emprendida.

23

7. ANEXO:

“Fallout Shelter Handbook” por Chuck West, es un libro publicado en 1962, que

contenía de forma adaptada al formato “libro de mano”, todo un manual para la

construcción y supervivencia dentro de un refugio radioactivo. Se estima que

durante “la crisis de los misiles” se llegaron a construir alrededor de 200.000

refugios en Estados Unidos. Accionar que fue promovido por el gobierno, luego

de que el presidente J.F. Kennedy el 22 de Octubre de 1962 se dirigiera a la

población para alertar sobre un inminente ataque nuclear.

24

25

8. BIBLIOGRAFÍA.

MARCUSE, HERBERT: “EL HOMBRE UNIDIMENSIONAL. ENSAYO SOBRE LA IDEOLOGÍA DE

LA SOCIEDAD INDUSTRIAL AVANZADA”.TRAD. ANTONIO ELORZA.1RA ED. BARCELONA.

ED PLANETA DE AGOSTINI. 1985.

ŽIŽEK, SLAVOJ:

- “EL SUBLIME OBJETO DE LA IDEOLOGÍA”. TRAD. ISABEL V, NÚÑEZ. 1ª ED 2ª

REIMP- EUENOS AIRES. SIGLO XXI EDITORES. 2009

- “EN DEFENSA DE LA INTOLERANCIA”. 1ª ED TRAD. JAVIER, E, CEBALLOS Y

ANTONIO, J, A FERNÁNDEZ. ED SEQUITUR. MADRID. 2007

LACLAU, ERNESTO: “LA RAZÓN POPULISTA”. 1RA ED. 7MA REIMP. BUENOS AIRES.

FCE. 2013.

ORWELL, GEORGE: “1984”. ED EDICIONES DESTINO. BARCELONA. 1957

AGAMBEN, GIORGIO: “ESTADO DE EXCEPCIÓN. HOMO SACER II, 1”. TRAD. F, COSTA E

I, VARELA. ED. ADRIANA HIDALGO. BUENOS AIRES. 2004.

MARX, KARL; ENGELS, FREDERICH: “MANIFIESTO DEL PARTIDO COMUNISTA”.

EDICIONES PLUMA. BUENOS AIRES. 2004