“Pedro Salinas en Nueva York: Avisos del poeta exiliado desde la ciudad metafísica”

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Transcript of “Pedro Salinas en Nueva York: Avisos del poeta exiliado desde la ciudad metafísica”

CoxTRA EL oLWDo. trr ExILIoESPAxor EN EsreDos Uxmos

EDITADO POR

SpsesrmAN EenBn y CnrsrmR MaRTixp z Cts,AZo

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Pedro Salinas en Nueva York. Avisos del poeta

exiliado desde la ciudad metafisica

Nunrn MoncnooCollege of Staten Island

City University of New York

..1 eje humanista y soclal que sostiene la obra de Pedro Salinas es un hecho quc

' -,)r..1 con tos numerosos estudios y ediciones que de stts obras y sobre sus obras

.:cho y se siguen haciendo.l De especial significaciSn son sus aflos de exilio en

-::rericanas, entrc 1936y 19-51. Pedro Salinas se embarca hacia los Estados Unidos

: rrqosto de 7936, ya que habia aceptado a finales de 1935 urra invitaci6n para

- -' )rlo Profesor Visitante en Wellcsley Co11ege. La prolongzrci6n de la guerra civil

'.-lirntaci6n de la dictadura en Espaiia 1e obligan a seguir en 1os Estados Unidos,

- -'redad que se convicrte en objeto de sus anflisis y de sus birsquedas encaminadas

.r mavor cntendimiento de la realidad y del ser humano.

Su exilio en tierras americanas afecta considerablementc su sensibilidad y

. ::tiento, dando lugar a una voz con un alto componente satirico-moral cuyo fruttt

- :.ipre sentativo es el llbro Todo mris claro y olras ?0e ruas, publicado en 7919. lin esta

: .co[Je poemas escritos entre 1.937 y 1947, su etaPa mlis dura de1 exilio americano,

) que expresa las angustias de un hombre que vive cn un pais ajeno y profundamente

.:.;Ldictorio, en un mundo tecnol6gico y moderno con signos de autodestruccitin 1,

:-...rrnanizaci5n. Pcro iunto a su actitud condenatoria de la modernidad, Pedro Salinas

:'rfiesta una actitud de esperanza dcrivada de su fe en 1os valores humanos y universales.

.r realidad exterior y prosaica contrapone una realidad po6tica y trascendente que 1e

.L ir identilicar valores universales en un mundo trivial y deshumanizedo.2 Un ejemplo

:,rdo el1o nos lo da e1 poema "Nocturno de 1os avisos."

Parte de 'fodo ruris claro y atrls ?aemas,:r el "Nocturno de los avisos" es eiemplo dees ejemplo de

Cr r-lu EL ol\lDo. El e'xlto ESPANoL BN Esreoos Uxtpos

unapoesiaquemanifiestaelconflictoentfelarealidadmaterialylapo6ticaconunaltocontenidocriticoy6tico,satiricoymoral,unapoesiadevozprofundayuniversalques6lohasidoposibledesdeelexilio.ComoafirmaJuanMarichal'lasconsecuenciasdelexilio para los escritores espafloles que 1as supieron o pudieron aprovechar fueron

providenciales,yaqueestadolorosaexperienciapermiti6aalgunosserfielesasuvozmisprofunda y universal, mls de 1o que hubierarrpodido serlo en Espafla despu6s de la

Guerra c\vrl (7976:73).Elmismo poeta confiesa en una carta a Jorge Gui116n al

publicarse Todo mds claro 7 otras poemas:-"Si'son poemas que no hubiera escrito en Espafla'

(Salinas y Gui116n 1.992:504)'a

Andr6s Soria Olmed o,aTanalizarla correspondencia entre Pedro Salinas yJorge

Gui116n, concluye que durante el exilio, ,. u..ntou la severidad moral y la necesidad de

comunicaci6n, adquiriendo sus per{iles m6s espirituales (soria 1992:69-70) 'La afioranza

del espaflol como instrumento de comunicaci6n se convierte en motivo de dolor; tal comc

afirmaMontserrat Escartin, "Salinas nos dice que e1 hombre, como ser espiritual' e'

inseparabledesulenguaje,porqueatrav6s.delapalabra'queesespiritu'seconstruyeas:

mismo,,(Gasc6n ZOO\, is)-.E ' "1 Sulirru, del exilio, adem6s' se intensifica el sentimienti

de su pertenencia a una tradici6n literaria. Como ha escrito Juan Marichal' el prop5sitt

de Sa]inas como profesor y escritor era, por afill de integraci5n universal, la divulgacio:

de 1os perennes valores humanos de la literatura hisp6nica y su pertinencia vital' e:-

contraste con su rechazoy aversi6n hacia todo 1o que en el mundo moderno atente contG

esos valores.s

Asi se manifiesta en el ,,Nocturno de los avisos" que) como ha a{irmado 1a criti'-;

se trata de una descripci6n satirica de 1a avenida Broadway y el Times Square de Nue-'-;

York,endonde,.d.,t,.ulamencionadaangustiadeSalinasantelasociedadmoderruy su reacci5n ante un mundo deshumanizado y sin valores' Pero esta angustia y e':'l

reacci6n contra "esas espantables presencias familiares de nuestro tiempo"' '.;r'

monstruosidadesmaterialesymentales,convertidasenpannuestrodecadadia,sinc-rrcasi nadie las extrafle" (Diez7996:115), se equilibra con la "profunda Senetal\zac|'t'

humana y el significado universal a que asciende el poeta desde su circunstancia" (saii:t'

1981:I270).6sucontactoConesarealidadartificial,mec6nica,manufacturada,..criai-;ide nuestro tiempo... cargada con una cantidad de potencialidades po6ticas imposible r

calcular" (Salinas 1981: I 285), permite al poeta elevarse a una contemplaci6n filosoir

de ciertas verdades universales en las que resuenan "1as interpretaciorl€s llu€ oTlrl

hombres... han dado deluniverso y del ser humano" (Salinas 1981: I 2}9)'Conclaros t:r*

de la tradici6n literaria espaflola, Salinas expresa su angustia ante un mundo automatiag

ydeshumanizado,yelresultado,laconcienciadesuvida,m6salldyporencimade:*illvida, danclo a la realidad cruda y externa, una realidad singular y po6tica de signific;:n*

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i\LIRIA },IOR(IADO

- .nirrersales.

. \L.IDAD Y trL POtrTA LN trL EXILIO

-)LLrante sus aflos de exilio en tierras americanas, Pedro Salinas desarrolla una

obra: poesia, teatro, novela, cuento y ensayos, sin olvidar su amplia..lencia epistolar. En su obra de estos airos revela su 6tica y po6tica y se observa,.e ha mencionado, su postura de desengaiio y amargura ante la p6rdida de los

.r-rri1Iros que supone el mundo tecnol6gico y los acontecimientos mundiales, una

:r.r,:ndo moderno, sus paradojas y contradicciones. A 1a guerra civil espaiiola le

- r.rra mundial, y su preocupaci6n ante los acontecimientos hist5ricos afecta 1a

:r de su obra en el exilio. Segfn afirma E,nric Bou: 'Ante la barbarie b61ica, o' :lrr1; ante los cambios sustanciales de las formas de vida, su testimonio es muy' ..sto que fue uno de los primeros escritores peninsulares. . . de vivir en su propia

. .erie de trasformaciones que treinta aflos md"s tarde habrian de gcneralizarse- ie origen" (1988: a3).

:)li1ro Salinas veia la urp5encia por una regeneraci6n moral de la sociedad

E.n una carta aJo ge Gui116n fechada el29 de octubre de 1940, Salinas confiesa:

, .r en alguna 6poca de la historia humana 1os hombres han sido md"s estirpidos.

.:,r, pucde que si. Relativamente, es decir en relaci6n con su estado actual de- ,:'lro, cultura y conciencia de si mismos, creo que no." Por otra parte, en otra

--la a Guil16.n en 1941, asegura que 1e "asusta ver c6mo conviven en el mismo: .rn lado la precisiSn, 1a maravilla de organizaci6n, de capacidad ejecutiva, de-.: 1a materia y de sus usos inmediatos, y por otro 7a torpeza,la pequeiiez, el

.L desorientaci6n del pensamiento" (Soria 1992: 70).-:r rcalidad precisa y capazt torpe y deshumanizada, es tambi6n para Salinas

,. rmbro v tema po6tico. I)dmaso Alonso escribe que Salinas es "un poeta que',:cho, en la vida de la realidad y en la realidad del mundo de los libros. . . y h"

-.-ho por 1a fantasia universal t...1 Y ocurre que este poeta, tiene una capacidad

.,:Ljn diferenciada, que se vierte en poema, en comedia, en novela, en cuento, en

Y todo... es una profunda, una unitaria comprensi6n po6tica del mundo" (55).- . .:onsidera que 1a realidad exterior percibida por 1os sentidos es una simple--,,.ii6n de la realidad esencial en un sentido plat6nico, por 1o que su poesia gravita, 'trasrealidad" de las cosas (Zadoya 1976: 63-5). Para Pedro Salinas, ciertas. ::rorales y est6ticas existen en el mundo ideal plat6nico, y, segirn manifiesta en

..'. conciencia tiene acceso intuitivo a estas verdades. Pedro Salinas es consciente.,r'tleza" engaiiosa de la realidad externa y su actitud es ambigua, desconfiada y

. rnte 1a posibilidad de captar su esencia.T Pero tambi6n cree que la obra po6tica- ..cender 1o ordinario, ya que el poema termina modificando todo 1o que trata.

,r,Lirlilll'l'l

CoxtR,t El. ol-vrDo. Er Bxuo BspaNor rN Esreoos UNrpos

Segirn revela en La realidad y el poeta (colecci6n de sus conferencias en John Hopkins

University en 1937) 6ste, el poeta, "se coloca ante la realidad 1o mismo que un cuerpo

humano ante la Luzrpara crear otra cosa: una sombra... El poeta afiade sombras al mundo,

sombras claras y luminosas, como luces nuevas [...] Toda poesia opera sobre una realidad

para c:rear otra" (Salinas 1981: I 191). Salinas cree en la universalidad y trascendencia del

poema, la poesia que transporta la realidad a "un plano en el que las contingencias se

pierden quedando s6lo la pura esencia" (Salinas 1981: I 245).Y esa universalidad estd

representada por los grandes mitos y tradiciones literarias del pasado, "fuentes de las que

bebe, 6l y 1os poetas que le rodean" (Monegal 7993:54).

Este conflicto entre la realidad material y la realidad po6tica en su constante

birsqueda de significados universales se desarrolla durante sus aflos de exilio. Segrin trlena

Gasc6n \Gra, este conflicto indica un dualismo que podria ser expresi6n de su situaci6n

alienada, de estar y no estar, de vivir en la contradicci6n (7993:40). Antonio Monegal

afirma que la obra de Salinas es "una obra en tensi6n. . . entre la palabra y el silencio, entre

la realidad y el poeta...entre la tradici5n y la vanguardia... Hay en su poesia una lucha.

una incertidumbre" (7993:58) que bien se podria equiparar a su lucha como exiliado en

un pais ajeno en el que no llega a integrarse. Tal como afirma Jos6 Luis Abe116n en E.

exilio como constante )) coml categzrla, "1...] trste hombre situado en el exilio ha de aguzr

el oido. La vista puede perdede, por su propensi6n a crear espejismos; por eso, en e-

exiliado es fundamental el saber escuchar 1as voces interiores. Sdlo movido por ellas e-

exiliado puede dirigirse hacia la luz y orientarse a la aurora" (2001: 55). Pedro Salina.

supo conectar con su voz interior y, ante el mundo material lleno de espejismos, propusc

una "aventura hacia lo absoluto" con una poesia satirica y moral que se representa en ToLi:

mtis claro y 0tr0s ?lemas en general y en el "Nocturno de los avisos" en particular.

2. EL "NOCTURNO Dtr LOS A\1SOS"El "Nocturno de los avisos" se origina a partir de una experiencia humana, ci:

una realidad concreta que Salinas alterna hdbilmente con ideas abstractas y generale.

con otra realidad creadora e imaginativa, para lograr el prop6sito de todo poeta: ".i

creaci6n de una realidad nueva dentro de la vieja"(1981: I 190-91). El propio Salinas e:.

"Deuda de un poeta" (1957),una conferencia que dio en Wellesley College en 1937,hac'-

un sugerente comentario sobre este poema:8

Mi experiencia humana es que yo, a poco de llegar a los Estados lJnidos, r',"paseando por una gran avenida de Nueva York y que se encienden las luces. qNo .,eso? Eso es 1o que pas6. Y entonces, de esa experiencia humana brota, por el proce;

po6tico quc yo no s6 explicar, el poema. Y luego,. . . cuando yo me pongo a leerlo. -,'

leo...1o que yo no habia escrito:1o que habia escrito el poema...1o que dentro .rmi experiment6 de una mancra intuitiva, pero no puse alli deliberada ,

50

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Ir11TlllDl, dt,' generalei, poeta: l.

, Salinas e:

1937, hircr

Llnidos, r,c,-

.,,rccs. iNo .,rr el proces

', a leerlo, r:c dentro d,cliberada -.

conceprualmente. (1981: III 446)

-,1 poema es capaz de comunicar 1a experiencia po6tica intuitiva del poeta.

.si e1 prop6sito que 1e da a1 conjunto de sus poesias seg[n indica en el prefacio' ,is claro: la de ir "en busca del lector" (Diez 1996:114). Como indica Andrew

, .i L1 par que e1 poema modifica y extiende la realidad, posibilita a su vez que 1os

::rodifiquen y extiendan el poema al hacerse eco de 1a experiencia irracional de1

'93:113-14).\si, Pedro Salinas revela en e1 "Nocturno de los avisos" su firme creencia: que 1a

:. obra de esclarecimiento, "aunque gotee angustias y se busque 1a solitaria

.:.ici6n," ante el mundo de1 progreso y la t6cnica que con e1 tiempo convertir6 aI

Jcl"ser alno ser" (Diez1996:115). En una carta aJorge Gui116n en 1a quc le

.'- sisnificado de1 titulo de1 libro Todo m.ris claro, escrtbe Salinas: "f P]arece raro en- .ron muchos poemas de preocupaci6n espiritual profunda, y de tonos doloridos

J r-rcl". . . Pero c1 titulo se refiere concretamente a la funcicin del poema, y en general

:.ia. Todo, incluso 1o mds tcnebroso y atormentrldo, e s aclarado por e1 poema. La::- is que la filosoffa pone en claro 1as cosas" (Salinas y Gui116n 1,992: 470). iY qu6

.i.r o de qud nos avisa el poema "Nocturno de los avisos"? En "Deuda de un poeta"

-:r.'sa que se trata de un nocturno que es de luces y no de oscuridad. Las luces que

:-. la noche americana tienen casi siempre una funcitin anunciadora y emplea la

:, ':ivisos" en el sentido de avisar a alguien, y al mismo tiempo en el sentido de

, tSalinas 1981: III437). Comienza el ensayo preppntindose qu6 es 1o que 61debe

".-,reta a la realidad americana, ya que la poesia "proviene de1 contacto con 1a realidad

. o col-r un tipo de realidad psicol6gica interna" (Salinas 1,981: 134). Conliesa que

., ionsignado por escrito unas huellas de 1o mucho que 1os Estados fJnidos le han'-.o6ticamente) que en la rcalidad americana, lejos de ser prosaica, late un:r gran

- .. podtica, y que 1o que sc ha expresado en 61 po6ticamente no es la naturaleza, sino

- ,iro y 1o social, lo humano en general (Salinas 1981:131-36). Y esta realidad urbana,

r' 1-rumana en conflicto con la realidad po6tica que se ha cxpresado en dl, es 1o que

. con tintes satiricos y morales el "Nocturno de 1os avisos."

El poema comienza con una menci6n a la rectitud de las calles americlnas quc

.. irlusiSn a la rectitud moral:

iQriin va a dudar dc ti, la rectilinca,que atraviesas e1 mundo tan derecha

como el asceta, entre 1as te nt'.rciones?

Segirn e1 propio Salinas en "Deuda de un poeta": "el sentido rectilineo,

ctrico, va unido a1 sentido recto: rectitud moral o intelectual. I lay que ser una

i1

cr-r\TR\ Et- OL\IDO. Er- U)0I-IO ESPANOL oN Esrarlos UNToOS

persona recta... una calle rectilinea le da a uno una especie de lecci6n de rectitud" (1981:

11I 438).e John Crispin seflala el tono ir6nico del poeta y afirma que la ciudad, de esta

manera, simboliza a Am6rica en su papel de lider del mundo en pos de la democtactay

1a libertad y como poder absoluto tras la segunda guerra mundial (7974:727).Y continr-ia:

Todos acatan, hasta el mds rebelde,

tus rigurosas normas Paralelas:aceras, el arroyo,1os rieles del tranvia.

Confiesa el poeta que 1o que sentia en esas avenidas era la sensaci6n de ser

empujado en una sola direcci6n, de ser arrastrado, sin dejar lugar a la vacilaci6n, "no hay

eso de hacer que se pasea, como por Sevilla, o por la Merceria de Venecia... Todo est6"ya

marcado y trazado... como si uno fuera una gota de agua en el fondo de un cauce, del

cauce del rio"(Salinas 1981:438).Todo esto le sugiere la idea de que todo rio tiene sus

orillas, y se pregunta cudles son las orillas de una gran avenida neoyorkina:

tus orillas, altisimos ribazos

sembrados de ventanas' hicrba espesa,

que a la noche rebrillacon gotas del el6ctrico rocio.

Las orillas son los rascacielos, "altisimos ribazoslsembrados de ventanas, hierba

espesa,r' una hierba que tambi6n tiene su rocio, como la natural, el rocio de las luce.

el6ctricas. Como afirma el poeta, 1a experiencia humana se va trasladando a t6rmino.

metaffsicos, a t6rminos de imagen.

La inflexibilidad de la rectilinea se ve reforzada por la numeraci6n que nos gui;

desde el principio de la calle hasta su final "como una especie de mano conductora,"

Infinita a los ojos

Y toda numerada, a cada PasoUn algo nos revelas...

Nos revela que la existencia humana tambi6n tiene su principio y su t6rmino -'

que vivimos entre dos nitmeros: "aflo de cuna, aflo de tumba'..,"indicando la numeracio:

de la calle el paso de los afros. Y ante la aparente ilimitaci6n de la calle, el poeta pien=.

sobre "la fatal limitaci6n num6rica no s6lo de la calle, sino del curso de nuestra vid.-

(Salinas 1981: III 439), experimentando asi la calle como simbolo de la vida humana q-.

sigue su curso, con la transitoriedad manriquefra, "como si uno fuera una gota de agua ':e1 fondo de un cauce, del cauce del rio" (Salinas 1981: IlI 438). trstas imigenes n-'

remiten a Jorge Manrique, de cuya actitud po6tica ante Ia realidad ha dicho Salinas c::

52

-ectitud" (198

ciudad, de esi

r democracia

l7). Y continri ,

lsaci6n de se

laci6n, "no h,.

..'lbdo esti r: un cauce, d.

o rio tiene s.,.

irtanas, hierb

o de las luc.b a t6rmin,.

que nos €lllductora,"

su terminct

r numeracir'

poeta pien.lruestra vic.

humana q',-,

ta de appa.r'igenes n .

r Salinas q,...

.'. angustiado preguntarse por el propio destino (Salinas 1981: I 21.1.).La,

r- respuestas a este tipo de cuestiones, el deseo de encontrar un significado a

ha cambiado a pesar de 1os adelantos t6cnicos y cientificos, y el dilema de1

:rtempor6neo continria siendo el mismo dilema con el que se ha enfrentado el-.:sde siempre.', .lirigi6ndose a la cal1e le pregunta:

iLlegari hasta qu6 nirrneroJ...Tu nirmero cien mil, si tri pudieraspr( )lr )ngartc, ya r)tUcrta, :in I us Citra:

\ rs dice el poeta que quizli esto significa que "1a calle suefla en el momento dc

::.lo todos los poetas neoplat6rricos piensan, esa trascendencia de 1o humano". . 181: IIT 439),1o que le lleva a recordar a Carcilaso, cuya actitud antc 1a realidad,

.'-'lica Salinas, es la de rehacerla idealizindola:

ino scria l:r Arcadia, y dos amantcs,a la siesta tendidos en 1'.r grama,antcs dc Cristo v los rascaciekrs?

L,r Arcadia como imagen de vida perfecta y tranquila a la que aspira el poeta, en

. rdad ideal e intemporal ("antes de Cristo y los rascacielos") en contraposici6n a:..ril externa transitoria.l0 Pero la calle no ofrece ningrina soluci6n a estas preguntas..

.,. haciendo e1 poeta por una avenida de Nueva York, hasta quc l1ega 1a noche y se

.rtr-r 1as luces, "empiezan los el6ctricos avisos/ a sacudir 1as almas indecisas,"

r , 1a calle de proposiciones y de soluciones.

En "Deuda de un poeta" revela Salinas el juego ir6nico en e1 poema hasta este

:rrimero 1a calle nos habia ensefiado a ser rectos y seguir sin parar por un camino

.rLr de ntmero en nirmero, I ahora se encienden 1as palabras, sc encienden los avisos

++0). A partir de este momento, la ironia se transfbrma en sarcasmo a medida que

:.r reacciona ante los avisos de ne6n:

"iLucky Strikc, Lucky Strike!" IQr6 rcfulgencial

E1 aviso nos da una solucirin, nos invita al tabaco, pero el poeta 1o rechaza;

qY todo va a scr cso?

iUn sopkr entre los labios,imitirci6n sin canto de ln mirsica,trdnsito de hurno a nada?

Rechaza la propuesta de pasar el tiempo de forma trivial y frivola, echando humo

-53

- Corrru. EL oLVIDo. Er- Bxr-ro ESPANoL rN Esrattos UNtoos

por la boca, aludiendo al verso gongorino ("en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en

nada") que simboliza el ritpido trinsito de la vida a la muerte: "este aviso no nos sirve...

Es una de las invitaciones a echar por un camino de la vida que no es camino y que no

es nada" (Salinas 1981: III 440). Pero hay otras ofertas, otros anuncios que le alumbran:

"White Horse. Caballo Blanco."lWhisky? No.Sublimaci6n. Pegaso.

El poeta estd hablando po6tica y prdcticamente. Las im6genes materiales, al pasar

por la experiencia creadora cambian de signo, y asi, el caballo blanco que representa la

marca de whisky le lleva a1 mitico Pegaso ya que, segrin el poeta, las personas aficionadas

a esta bebida pueden hallar en ese caballo blanco una especie de sublimaci6n de escape.

Y esa botella se ofrece como una grupa que se insinira:

D6cil sirviente amigo de las musas,

ofreciendo su grupa de botella, a1 que encuentre el estribo que le suba.

Y a medida que aumentan las luces aumentan las dudas,y de nuevo las paradojas

de la experiencia externa: la luces no iluminan en una calle como 6sta, sino que

deslumbran y confunden a la persona mucho m6s: "el hombre contempor6neo, si tiene

unas cuantas luces, se da cuenta de que con tantas claridades como ha aprendido, ve la-.

cosas m6s confusas que nunca" (Salinas 1981: III 441). trsa confusi6n le hace sentir estratrapado en un laberinto sin guia posible, y a1 poeta le viene la idea de 1o que gui6 por e-

laberinto de D6dalo a Teseo, el famoso h6roe cl6sico: el hilo de Ariadna, el ovillo que l;joven princesa cretense 1e proporcion6 para que una vez en el laberinto no se perdiera-

logrando, asi, vencer al Minotauro. Pero el rinico hilo que encuentra a su alrededor so:-

los rieles del tranvia, "el hilo de un tranvia sin Ariadna."11 Es obvio que la realidad exterio:.

aparente y engaflosa, es incapaz de ofrecer guias y soluciones ante las contradicciones'r

confusiones del mundo moderno.

Y de nuevo las paradojas, la primera impresi6n de rectitud, de saber por dond:

ir, se ha convertido en una total confusi5n. De ahi el siguiente verso:

;Qr6 fricil, si, perderse en una rectal

Para el poeta muchas veces las simplificaciones no sirven, y cree que para 1le:ra la verdad hay que dar en muchas ocasiones muchos rodeos, hay que laberintizr:c(Salinas1981:III 441).Nfinaldel"Prefacto"aTodomdsclaroyztros?zernas,PedroSalir-*:

aftma que hasta la poesia mis enredada revela enigmas y que "cuando Ma11arm6 sin:rque necesitaba afladir un poco de oscuridad a cierto poema, es que queria poner a--l"r

mucho m6s en claro" (Salinas 7996: L76).

54

Continrian l"li' -- -::E\f SaS, que Sr

ix- rt-i :-a!-tricas, r-ictir

- - --l . La fnica se

!n,r-rn:--: jr.. el alba que

inx-,-, r':nanufacturJJ

m;is tLa p:

Se pregunra

&alrtji,:r, la solucion

u::-,:--i. no sabe a

iium::e+;: --artenre que p

;La d,

Es decir, la pa

ilrs: r-;jes en la lectruurr$-a;:a r- condena. ):r!um:rr- _, en la que un(

l--l

muert{la nai.

El domingo,I.,lltuilliii[Tr]rt .< tiene la sosp

Snri,Lln.i; i981: III #.qI

rr'[r..:i I ia gran para

luuul :rr..r-eso, se elaborilfl TLr.r:,i.:o: 1a ruelta r

E1 poeta sigue

Iluixrlr*rt .iparente de la

[...]. ,rru tal:a

Pero le llega er

(rOZ-ld

,. en sombrar e

I no nos sirve.

]ntino y que n,Le le alumbrar

:criales, al pasr

ie representa 1

iras aficionadr,,

ii6n de escap.

,-rba.

,r 1as paradojrr.

Jsta, sino qu.irinco, si tienr:-endido, ve 1a,

rac Sentir esti1:

ue guici por e,

1 ovi1lo que 1"

ir se perdiera.

,rlrededor sor-

iidad exterio:..

r:rdicciones i

-r por donde

e para llegar

Lberintizarse)cdro Salinas

1arm6 sintioL poner algo

NI]RIA N'TOR(]ADO

::iinitan los anuncios y las confusiones, ya no hay nada seguro, tampoco "para

-.r!, que se queman/ un mi1lar por minuto en torpes aras,"a1 acercarse a 1as

-:.--as, victimas de una iluminaci6n que "no ilumina, sino mata" (Salinas 1981:

., Linica seguridad que tiene el poeta es que "el alba no se alquila," que la luz

'. alba que busca y que le puede guiar, no es 1uz alquilada que anuncia, unaluz' -.trtufacturada. Y siguen surgiendo en el poema voces el6ctricas que anuncian,

mis trd"gica que todas:"Coca Co1a.r2

La pausa que refresca." Pausa iEn d6nde?

i: pregunta el poeta si no estar.i" en la pausa, en la invitaci6n a no pensar, a

:, la soluci6n a las angustias del hombre que pasea por una calle que, aunque es

- , r'ro sabe a d6nde 1e lleva, una pausa trdgica. Pero sc cuestiona tambi6n' ,tentc qu6 pausa es 6sta:

il-a dc Pnolo y Francesca en su lectura?

Es decir, la pausa de1 pasaje de1 Infierno de Dante, pausa que hicieron estos dos

.,.'es en la lectura de una historia caballeresca para besarse, 1o que 1es caus<i su

--11 \'condena. No sabe el poeta si se trata, entonces, de una pausa en la quc uno se

r e n 1a que uno se salva: quizris se trate de la pausa

... dcl Crucillcado entre dos mundos,muerte y resLrrrccci6n? O la otra,6sta,1a nada entrc dos nadas: el domingo.

E1 domingo, la pausa en el quehacer diario, que es "la nada entre dos nadas"

.-. I se ticne 1a sospecha de que "no hacemos nada ni 1a semana pasada ni 1a que viene".r: 1981 :III 443), dando 1a sensaci6n de1 "no ser" al que se dirige el humano:

' ,zco 1a gran paradoja: que en los cubiculos de los laboratorios, celebrados templos':-r)q.reso) se elabora del modo m'is racional 1a t6cnica de1 mis definitivo regreso del.rrrano: la ruelta del ser a1 no ser" (Diez 1996: 175).

El poeta sigue avanzando con e1 alma llena de dudas e inquietudes en la falsa

rud aparente de la calle:

[...], avanza, triste, el dma:tu fhlsa rectitud no 1a cncaminir.

Pert., le llega entonces un nuevo rvisrr:

"Gozad de1 mundo. Ho1,, a las ocho y treinta."

Corru EL ol!'iDo. Er- exr-to ESPANoL PN Esrapos UNipos

Se trata de una invitaci6n al placer, defendida por "cien bailarinas," el anuncio de

un cuerpo de baile que,

con un itmo de lazz,van rePitiendoaquel sofisma, aquel, aquel viejo sofisma.

El sofisma, como pensaron los hedonistas y los epicirreos, es creer que 1a vida es

simplemente placer. Y se pregunta si la calle, es decir, la vida,

iA eso llevabas? iEl final, tan simPle?

[...] Mas no ser6. Ya el principe constante

que l'uelve, si se fue, que no se rinde,

con su grito de guerra: "Dientes blancos,

no hay nada mis hermoso," nos avisa.

Aqui incurre el poeta "por puro eco, por pva fuerza tradicional, en la antigua

posici6n espaflola del desengaflo... llevada a la literatura como pocos por Qrevedo, que

dice: no, todo eso del placer pasa" (Salinas 1981: lI7 444),y 1o irnico que queda al final es

la muerte, el esqueleto, los huesos, 1o que no es carne, la carne del hedonista, sino los

huesos del asceta, lo interior, los "dientes blancos" que refieren a una preferencia por la vida

interior envez de la hedonista y exterior. Es la actitud que encontraba Salinas enJorge

Manrique: "la vida, los placeres y las vanidades no son nada. Este mundo no es sino un

camino hacia el otro" (1981: I2L6),y no debemos dejarnos confundir por la realidad

aparente que, aludiendo a Calder6n, es ilusoria y tan pasajera como un suefro. Los placeres

"no son sino mentirosos mensajeros, ligeros corceles, emboscadas que nos tiende la muerte

para engaflarnos" (1981: I 212).

Y ante tal recorrido l1eno de dudas, inquietudes y desengaflos, viene el cansancio:

las luces le han derrotado, ya nada le enseflan y no sabe si hay algunas que le puedar

guiar:

Incr6dulo de letras Y de aceras

Es decir, ya no cree en 1o que le dicen por un lado las letras, las tentaciones er-

varias direcciones, y por otro lado las aceras, la falsa rectitud de las calles. Asi, el poeu

decide sentarse en la alta noche

a esPerar que se apaguen estas luces

y me dejen eL Paz, con 1as antiguas.

Se refiere a las estrellas, las luces de las que hablaba Fray Luis de Le6r-

'publicidad de Dios,"

Ori6n, Cefeo, Arturo, CasioPea'

56

la-t conste!l

xh

,d,

El poeta r

n r::: - ::,iad. -\si.u:tLt: ::::iren las est*d

.i-::_.1 que paga

:r:r:- ''.-era'de luce*L,:,;: 1951: II]

nru-i- erteriorccLos ar-isc

rmr,::iidad. de I

:;c- E- nundo n

?:,nr-:. a-::ej-ando \- f,ilr,. t _:en al dolct m -::i--;ieil de

Itrl,,U :.:::irua]. CO:

an - :::: r- san -Juar:rs i.i :.-"'e]ecion de

;lum:, =- :- cielo es e.

P'-rr mediorlll{tuil I r:={ a,lntempoluur rn^ :,; i --, por la p

r[Trr1iri]iS CU_lrural

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Ei Salinas i

llllllmu := iestrucciormrn'.nr- 'ied del ho,,,uttui,rn -:- *::d.o r- de .r

I*-ii[r:-, :=hada el 5lruu ru :;*- - loqico: ][

rr -\-[-- _\ocrLrr'l

mur,ntfie :- :djio un a]r

e1 anuncio de

que la vida es

.,. en la antigua

:. Qrevedo, que

:',ie da al final e.-- rriista, sino 1o,.:'ncii1 por la vidrt- rlinas en ]orr'rI , nO eS SlnO UL

:. '-r(lr la realidac

-:o. [,osplacere.-:rnde la muertr

-::e c1 cansancior

- que 1e puedan

- tentaciones er

-... Asi, el poet:

i-Lris de Le6n.

NUitT\ Nt()ttGAlx)

;r-s constelaciones que anuncian "suprcmas tiendas"y ofrecen 1o que buscamos,con dngclcs sirviendozrl aln-rt, quc Lrs pague sin mt>neda,

la tltima, si, la para sicmpre moda,de 1a final, sin tiempo, primavera.

E1 poeta rech2lza el mundo exteriot lalso y aparente para tomar el camino de la

:-:Jad. Asi, como confiesa en "Deuda de un poeta," prefiere e1 mundo de las luces

:ren las estrellas,1as que iluminan el mundo de Fray Luis de Le6n, 1as que ofrecen

,'! quc pa€Ja con su propia vida, es decir, la riltima 'primavera'de todas. No es 6sta

e ra'de luces, sino la 'primavera'de 1a deseada eternidad: 1a 'primavera'del mis a11i."

,. 1981: III 446). Como e1 gran poeta mistico, Pedro Salinas reacciona ante el

- exterior cron una actitud de escape de 1a realidad.

Los aviscrs de su "Nocturno" 1c hablan de la fugacidad de la vida, de la::i1idad, de 1a superficie y la apariencia de ias cosas, de la realidad engaflosa, dc 1a

i'-1 mundo moderno v tecnol6gico no aclara las cosas, sino que confunde mucho

-:nerando v multiplicando las dr-rdas, las incluietudes,las desilusiones y las angustias

-: Lrncn al dolor de todo exiliado, v Salinas encruentra una respuesta a su bdsqueda en

.:rdo ideal de Fray Luis. Su contemplacicin simboliza un retorno a la naturalezayla.spiritua.l. Como el propio poeta explica en su comentario a 1a poesia de Fra1, Luis

:trn y s:rnJuan de la Cruz cn "La evasi6n de la realidad" (1981: I211-259),"e1 cielo

, revelacicin de la verdad, ia explicitci6n de1 universo. Fray Luis cra lrn plat6nico, ye1 e1 cielo es ei reino de las idcas y los espiritus puros" (1981: I219).

Por medio de la poesia Salinas manifiesta su tramento antc 1os peligros de los

:'es contemporineos que amenazan 1a correcta evoluciSn espiritual de1 hombre,-irrado por la prisa v por 1a codicia, enemigas de la contemplacicin. A su vez, las

i:.ncias cuiturales nos recuerdan quc ?rnte 1a realidad del mundo prcsente, material y.-.rstiosa, el hombre contemporlneo necesita tomar contacto con las verdades

:-,'ersales que representan los grandes mitos y tradiciones literarias dc1 pasado.13

El Salinas del exilio no lue "una de esas voccs nihilistirs tan propias de este siglo

::ro de destrucciones del hombre por e1 hombre [...] Salinas afirma su esperanza en la

:rtinuidad del hombre si 6ste no olvida su condici5n de criatura, de legatario de un

,.to mundo y de su historia" (Marichal 1976. 83). E1 mismo poeta, cn una carta aJorge

,ui116n fechada el -5 de marzo de 1940, le confiesa: "Mi lema, cn 1o moral, es el del m6dico

:r 1o fisiol6gico: Mientras hay vida hay csperanza" (Salinas 1992:224).

El "Nocturno de 1os avisos" es un e.iemplo de una poesia que desarrolla y exhibe

.:sde e1 exilio un nlto contenido critico y 6tico que, como escribe Diez de Revenga en 1a

_)/

Corrru. EL olvrDo. El Bxrt-ro ESpANoL pN Esraoos UNtoos

introducci6n a su edici6n de El Contemplado y Todo mds claro y atros ?zemas, no s61o es

"anilisis de un mundo confuso y err6neo, sino... descubrimiento de la desolada realidad

y b(rsqueda de esa esperanza humanistica que Salinas siempre atribuy6 a la poesia y a su

capacidad de iluminaci6ri' (Diez 1996: 50),1a creencia de que por medio de la palabra

po6tica, el humano puede trascender la cueva de Plat6n y experimentar por un momento

lo que existe mds a1l6 del fuego y las sombras proyectadas en la pared.

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. nueva edici6n de Enric Bou, Nllonserrat Ijscartin ], Andr6s Soria Olmedo : petlra Salinas. Obra.;.-.r.r. Nlladrid: Citcdra,2007. Se trata de tres voltmencs en 1os quc se incluycn pocmas, c?rrtas y articulos

- '' de1 pocte. E1 primcr libro estri dedicado a su poesia y tarnbi6n ir 1a narrativa y a1 tcatro. l)1 scgundo. :lc1u1'e los ensavos, todos 1os articulos pLrblicados en iliiercntes rcvistas y otros articllos in6ditos. El: rbro estl dedicado ai cpistolario de Salinas. NIls de 1a rnitad dc 1as cartas esraban sin publicar. En,: hrn encontrado la mayoria de 1os poemas in6ditos y tambiin han ay,udado a dar fbnna definitiva a

-.-,oem21s.

:-iilicto entre 1a re,lidrd cxterior v la trasccndente ha sido nrnpliamentc estudiaclo por la critica, no s61cr' --'oesia sino t:rmbi6n en su prosa dc antes y durante el exilio. Vcr por ejcmplo el articulo de Robcrt C.

:'' 'llealidacl prosaica c imasinaci6n trascendente cn dos cuentos de Pedro Salir-ras" o "La obra en prosa

''1ro Salir-res" de Emir Rodrigucz Monegal, en Petlro Salinas. El escritor-y la critica,F,d,. And.r.,, D.bi.k,,

i'i rc{brcncia a.Todo ttrit t/aro y otro.t poenta.s seha-cc clc 1a cdici(rrr de FranciscoJavier Diez de Revcnga.::ittt:n?lado. Todo mtis c/aro y otros;poezrza.r. Madrid: C1.isic.s Castalia, 1996.

': l:r cdici(rn de Anclris Soria Olrnedo de Pedro Sa/inas yJorge Guitlin; Correspondencia (192.'l 1951).:::1ona: Tusqtrets, 1992. V6ase tambi6l-r esta correspondencia en el tercer volumen dc 1a nucva cdici6n dc::'-Bou,NlontserratEscartil'AndrdsSoriaOlnredodclasobrasdelpoeta: petlroSalina.s.Obra.rCorrtpletos,:rlra' 2007' A trav6s de Ias cartas dc pueclc seguir dia a dia la posici6n 6tica cr-r ambos autorcs ante 1osrriccimientos mundiales.

'':'li-estoces de PetJro Salinas (89-107), dcJuan dc N{arichal. Las ckrs qrandcs obras cle S:rlinas en cl campo

'r critica literaria son sus esnrdios deJorge Nlanriquc v de Rub6n Dario. Uno de sus libros mis universalesrrrterpretaci6n litcraria y el que m2is rcvela de su propi:r actitud po6tic:r: Jorge Martrique, o tratliridrt y

; : na /iddd (79 17). Tambi6r.r La realidad 1t el poeta (1932 -7939).:"t Ensaltos Conp/eto.s, cdici(rn cle Solita Salinas de Nlarichal (1983). Con esta iiase Salinas dcscribc e1

ccso po6tico dcJorge Ntlanrique cn su an.ilisis de La.r Cop/as.

Corrzur FrL olvrDo. El Broi-ro ESpANoL oN Esralos UNroos

: Esa btisqueda de 1o que hay tras las apariencias implica, segrin Debicki, una actitud esc6ptica ante el mundo

ex'terior que permite ligar la poesia de Salinas con corrientes postmodernas y deconstructivistas (1993:113).s Antonio Monegal dice que Salinas, tan contrario a comentar su propia poesia, parece experimcntar una

r.acilacicinoreparocuandointerpretacomocriticoen "Deudadeunpoeta"el"Nocturnodelosavisos"(59).

En general, su labor critica est6 dirigida a buscar 1o que 61 llamaba el "tema vital" de cada poeta, pero la poesia

para Salinas era indefinible. Se puede explicar el lenguaje o el estilo, pero nunca 1a experiencia intuitiva de

la poesia. En una carta a Guiil6n cn 1951 1e pregunta: iEs que un alma sensible necesita saber el c6mo de

un poema? iNo le basta con vivir lo que es?" (Salinas y Guill6n 1992:567). Pero, como escribe Monegal, se

puede ver 1a critica con una funci6n complcmentaria que resuelve clara y l6gicamente 1o que en poesia es

tensi5n y misterio (1993:59).e Se sabe que a Salinas 1e entusiasmaban los rascacielos. Antes de dar paso a su comentario sobre el "Nocturno

de los avisos,"el poeta explica el siguiente verso que metaf6ricamente alude a los rascacielos de la ciudad de

Nueva York: "C6ndidos arlequines de Manhattan," un verso que "sali6 porque quiso salir" un dia que se

cncontraba en Central Park y entr6 en contacto con la vista de los rascacielos, despu6s de haber visto en el

Museo de Arte Moderno los arlequines geom6tricos de Picasso. Y son "cindidos" porque "el rascacielos es

una arquitectura inocente... no tiene malicia... Es rectilineo, y bien saben ustedes que la malicia cstd en 1a

curva, nunca en la recta" (Salinas 1981: III 435).10 La obra en verso y en prosa La Arcadia, del poeta italiano Jacopo Sannazaro (1450-1531), fue el modelc

mls cercano al que recurri6 Garcilaso para componer sus 6g1ogas. La Arcadia, obra tipicamente culta r

artificiosa, represcnta la exaltaci6n mdxima dcl gdncro pastoril.11 Calder6n de la Barca, en su auto sacram entil El laberinto del mundo,se basa en e1 mito y al "hi1o de Ariadna-

le 11ama e1 "hilo de la verdad."12 Pedro Salinas detestaba la Coca-Co1a, segrin se refleja en su correspondencia con Guill6n (Salinas y Gui116:.

1992:506),ya que esta bebida era reflejo de la automatizacicin de 1a sociedad en la que vivia. Este hech,

aumenta 1o ir6nico de esta referencia.13 Sobre el "Nocturno de los avisos"ver tambi6n el anllisis que sobre este poema haceJohn Crispin en su libr.Pedro Salinas (127-729) y Manuel Durin en "Pedro Salinas y su 'Nocturno de los avisos."' Pedro Salinas. E.

escritor y la cr{tica, Ed.Andrew Debicki. Madrid: Taurus, (1976):763-67.

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