Identidades políticas y cultura política.

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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA UNIDAD AZCAPOTZALCO DIVISIÓN DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANIDADES DOCTORADO EN SOCIOLOGÍA LÍNEA DE INVESTIGACIÓN EN SOCIOLOGÍA POLÍTICA IDENTIDADES POLÍTICAS DE JÓVENES PRIÍSTAS Y CULTURA POLÍTICA EN SAN BARTOLOMÉ, COATEPEC, MUNICIPIO DE HUIXQUILUCAN, ESTADO DE MÉXICO Ponente: Eduardo Fermín Vesga Urbina Tutora: Dra. María Cristina Sánchez Mejorada Lectores: Dra. María Ana Portal Ariosa Dr. Sergio Tamayo Flores-Alatorre 20 de noviembre de 2012

Transcript of Identidades políticas y cultura política.

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA

UNIDAD AZCAPOTZALCO

DIVISIÓN DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANIDADES

DOCTORADO EN SOCIOLOGÍA

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN EN SOCIOLOGÍA POLÍTICA

IDENTIDADES POLÍTICAS DE JÓVENES PRIÍSTAS

Y CULTURA POLÍTICA EN SAN BARTOLOMÉ, COATEPEC, MUNICIPIO DE

HUIXQUILUCAN, ESTADO DE MÉXICO

Ponente: Eduardo Fermín Vesga Urbina

Tutora: Dra. María Cristina Sánchez Mejorada

Lectores: Dra. María Ana Portal Ariosa

Dr. Sergio Tamayo Flores-Alatorre

20 de noviembre de 2012

1

ÍNDICE 1

INTRODUCCIÓN 3

I. IDENTIDADES POLÍTICAS 19

INTRODUCCIÓN

CONCEPTOS

CULTURA E IDENTIDADES POLÍTICAS

IDENTIDADES PARTIDISTAS

CONCLUSIONES

2. LAS JUVENTUDES PRIÍSTAS Y LA POLÍTICA

EN MÉXICO 52

INTRODUCCIÓN

LA CULTURA POLÍTICA EN MÉXICO

EL CONTEXTO NACIONAL

EL ESTADO DE MÉXICO

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

DE LAS JUVENTUDES PRIÍSTAS

ORGANIZACIONES POLÍTICAS JUVENILES

LAS MUJERES JÓVENES EN EL PRI

CONCLUSIONES

3. CULTURA, IDENTIDADES E IMAGINARIOS POLÍTICOS 74 DE JÓVENES PRIÍSTAS DE SAN BARTOLOMÉ INTRODUCCIÓN

EL IMAGINARIO MEXIQUENSE

2

EL ESCENARIO DE SAN BARTOLOMÉ

IMAGINARIOS DE JÓVENES DE

SAN BARTOLOMÉ

IMAGINARIOS PRIÍSTAS

IMAGINARIOS NO PRIÍSTAS

CONCLUSIONES

4. CARACTERÍSTICAS Y PRÁCTICAS POLÍTICAS DE 113 JÓVENES PRIÍSTAS DE SAN BARTOLOMÉ INTRODUCCIÓN

PRÁCTICAS POLÍTICAS DE LOS JÓVENES

JÓVENES PRIÍSTAS ORIGINARIOS

JÓVENES PRIÍSTAS AVECINDADOS

ASPIRACIONES SOCIOPOLÍTICAS ASPIRACIONES DE EMPLEO ASPIRACIONES DE ESTATUS CONCLUSIONES

5. EPÍLOGO 147

6. DEFINICIONES OPERACIONALES 162 E INDICADORES

7. ANEXOS 170

8. FUENTES DE CONSULTA 180

3

INTRODUCCIÓN

El análisis de cómo se construyen, se relacionan, dialogan y se enfrentan las

identidades políticas, constituye uno de los temas más relevantes de Sociología

Política. Como afirma Melucci “en el fondo de todo conflicto hay siempre un

conflicto de identidad”1, por lo que el estudio de las identidades políticas de los

jóvenes priístas de San Bartolomé Coatepec, ubicado en el municipio de

Huixquilucan, en el Estado de México, nos ofrece elementos epistemológicos para

el diseño de escenarios que trascienden los límites locales, frente a una realidad

social, económica y política en la que los partidos políticos cumplen un papel

fundamental.

Entiendo las identidades políticas como categorías de análisis que nos

permiten explicar, comprender y distinguir teóricamente los rasgos y prácticas de

individuos y grupos sociales vinculados con el poder político. Conformadas por

elementos diversos, representan herramientas útiles para el estudio de los

fenómenos sociopolíticos, y en el caso que nos ocupa, de jóvenes priístas

originarios y avecindados en San Bartolomé Coatepec, Municipio de

Huixquilucan2, en el Estado de México.

Parto de la hipótesis principal de que la condición de originario o

avecindado, incide en la construcción de dichas identidades políticas. En este

sentido, el ser originario o avecindado, particularmente en las clases sociales de

menores ingresos, determina la posibilidad de participar en la vida política del

municipio y del partido político, influye en el ánimo de pertenencia partidista, en el

interés de ser postulado para ocupar determinados cargos públicos o de

representación popular o en el hecho mismo de lograr esa postulación.

Esto se da de una manera diferente cuando los avecindados pertenecen a

una clase social alta, a alguna familia de “abolengo en la clase política” o a cierto

1 Citado por Gilberto Giménez (2007) Estudios sobre la cultura y las identidades sociales, México,

Conaculta/ITESO, p. 117. 2 En adelante, San Bartolomé.

4

grupo político que los impone, aun cuando no hayan nacido en el pueblo o incluso

en la entidad. De esta hipótesis principal se desprenden hipótesis secundarias,

que son las siguientes:

a) La tradición familiar es un factor que influye en la determinación

de los jóvenes de San Bartolomé para pertenecer y participar en un

partido político como el PRI.

b) La condición de desempleo o empleo precario, y la aspiración de

conseguirlo o ascender en la escala social, son factores que

determinan la decisión de los jóvenes de San Bartolomé de

pertenecer y participar en un partido político como el PRI.

Para probar o refutar nuestras hipótesis fue necesario, definir los siguientes

objetivos:

- Delimitar el significado del concepto de identidades políticas, desde la

perspectiva de la Sociología Política.

- Identificar las características sociopolíticas de jóvenes priístas en el pueblo en

estudio.

- Mostrar la relación que se presenta entre la condición de originario y

avecindado, su vínculo con la tierra y el tipo de identidades políticas que se

construyen.

- Señalar de qué manera influyen en la construcción de las identidades políticas

de jóvenes priístas, sus prácticas culturales y tradición familiar.

- Analizar la relación que existe entre la identificación partidista y la posibilidad de

ascenso socioeconómico, la esperanza de conseguir un empleo en la

administración municipal o un cargo de representación popular.

Con el propósito de cumplir estos objetivos, se llevaron a cabo entrevistas

a simpatizantes y militantes del Partido Revolucionario Institucional y personas

5

que conocen la trayectoria de ese instituto político en el pueblo en estudio, a fin

de describir los elementos identitarios y prácticas de los jóvenes priístas, que los

caracterizan y los distinguen. La selección y acceso a nuestros entrevistados fue

posible, en gran medida, gracias al trabajo de campo que desde hace varios años

realizan investigadores y estudiantes de la Maestría en Planeación Urbana, de la

Universidad Autónoma Metropolitana3. Particularmente, hago constar mi profundo

agradecimiento a los Doctores María Ana Portal Ariosa, Cristina Sánchez

Mejorada y Sergio Tamayo Flores-Alatorre; de igual modo, a Rodolfo Roque y

Rosario Martínez, jóvenes de San Bartolomé, Coatepec, y entusiastas sociólogos.

No sobra decir que la interpretación de la información que recopilé y que vierto en

este trabajo, es responsabilidad mía: es también el resultado de quien, con una

formación inicial en el ámbito de las Ciencias Jurídicas, incursiona en el territorio

de la Sociología, y específicamente de la Sociología Política.

Nacer en un lugar y ser reconocido como nativo, ofrece ciertos privilegios

de los que no siempre gozan quienes llegan de fuera. Este trabajo tiene el

propósito de mostrar de qué manera la condición de originario o avecindado de

los jóvenes priístas en San Bartolomé, influye en la construcción de sus

identidades políticas. En este contexto y con el interés de estudiar particularmente

la realidad mexiquense, acoto mi atención en jóvenes priístas de San Bartolomé.

Elegí estudiar este partido político porque, como es sabido, es un instituto político

que durante años ha gobernado el país, y en el Estado de México conserva, hasta

el momento en que estas líneas se escriben, la gubernatura y la mayoría de los

municipios que lo integran.

El Estado de México es una de las treinta y dos entidades federativas de la

república mexicana, y datos del Censo de Población y Vivienda 2010, refieren que

tiene una población aproximada de 15 millones de habitantes. De acuerdo con

ese mismo conteo, el municipio de Huixquilucan registra una población de

3 Como resultado de dicha investigación, coordinada por la doctora Lucía Álvarez Enríquez, se

publicó en 2011 la obra titulada: Pueblos urbanos, identidad, ciudadanía y territorio, México, Miguel Á. Porrúa.

6

242,167 habitantes, integrada por 116, 502 hombres y 125, 665 mujeres. 27 por

ciento de ese total lo conforman jóvenes de 15 a 29 años de edad.

Si a nivel nacional, el desequilibrio en los niveles de ingreso y la tasa de

desempleo resultan desalentadores, particularmente para la consolidación de un

régimen democrático4; en el Estado de México presentan condiciones alarmantes:

datos del INEGI (2010) reflejan que la entidad mexiquense se ubica dentro de las

diez entidades federativas con mayores índices de desocupación, con un 7.29 por

ciento; ocupa el primer lugar en cuanto al porcentaje de jóvenes inactivos

(15.1%)5; y también lo tiene en cuanto a población ocupada que labora en una

entidad o país diferente al de su residencia, alcanzando un 22.4 por ciento. Con

una población económicamente activa de 6,336,599 personas, 5,900,992 se

encuentran ocupadas y 435,607 desocupadas6. Según datos de la Encuesta

Nacional de la Juventud (2010), el Estado de México tiene la cifra más elevada de

jóvenes (de 12 a 29 años de edad) que ni estudian ni trabajan.

A nivel municipal, el índice de ocupación parcial y desocupación (TOPD)7,

de acuerdo con datos del Plan de Desarrollo Municipal 2009-2012, fue de 15.02

por ciento, en el año 2000. La mayor parte de la población está empleada en la

industria manufacturera y de la construcción. Por lo que toca al sector agrícola, se

cultiva principalmente avena, maíz y haba; se crían aves, ganado bovino, ovino y

porcino; sin embargo, este sector se dedica a cubrir básicamente necesidades de

autoconsumo. El sector secundario está conformado por pequeñas empresas e

industrias de manufactura, de alimentos, textiles y construcción de comercios y

servicios; y destaca el crecimiento de establecimientos comerciales destinados a

cubrir la demanda de estratos socioeconómicos con alto poder adquisitivo8.

4 El Censo de Población y Vivienda 2010 refiere que en ese año, el 31% de la población ocupada

declaró un nivel de ingreso mensual que no supera los dos salarios mínimos. 5 Encuesta Nacional de Juventud 2010.

6 Cifras de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), señalan que

la tasa promedio de desempleo en México es de alrededor del 5, pero la tasa de de desempleo entre la población de jóvenes mexicanos (de 15 a 24 años), asciende a más de 9 por ciento. 7 Este índice se refiere al nivel de desocupación u ocupación parcial de la población

económicamente activa. 8 Plan de Desarrollo Municipal de Huixquilucan (2009-2012). Según cifras contenidas en este

mismo documento, en el año 2000, las mujeres representaron el 37.61% y el 72.58% de la

7

MAPA DE LA REPÚBLICA MEXICANA Fuente satelital

El grado promedio de escolaridad en el Estado de México es superior a la media

nacional (8.6), y equivale a la secundaria concluida (9.1). En Huixquilucan, la

población de 18 años o más con estudios de nivel profesional asciende a 38,218

Población Económicamente Activa (PEA) y de la (PEI) Población económicamente Inactiva, respectivamente.

8

personas, mientras que la cifra de personas con estudios de posgrado es de

6,071 9.

MAPA DEL ESTADO DE MÉXICO. EN ROJO SE UBICA EL MUNICIPIO DE HUIXQUILUCAN, UNO DE LOS 125 QUE CONFORMAN LA ENTIDAD.

Fuente: www.edomexico.gob.mx

San Bartolomé Coatepec, conocido por sus habitantes como San Bartolito,

es un pueblo con una población aproximada de 4500 personas, de las cuales

2150 son hombres y 2350 mujeres. De ese total, poco más del 47 por ciento es

mayor de edad y alrededor de un 27 por ciento, es decir, 1215 personas, son

jóvenes de 15 a 29 años.

Huixquilucan forma parte de la Zona Metropolitana del Valle de México10,

tiene una extensión de 143.52 kilómetros cuadrados y está ubicado en la parte

9 INEGI, 2010.

9

central del Estado de México. Su territorio limita al norte con el municipio de

Naucalpan de Juárez y Jilotzingo; al sur con el municipio de Ocoyoacac y las

Delegaciones Miguel Hidalgo y Cuajimalpa, del Distrito Federal; al noroeste con el

municipio de Lerma y al este con la Delegación Cuajimalpa11.

MAPA DEL MUNICIPIO DE HUIXQUILUCAN, ESTADO DE MÉXICO: ENTIDAD Y MUNICIPIOS COLINDANTES

Fuente: www.edomex.gob.mx

10

La Declaratoria fue publicada en la Gaceta Oficial del Distrito Federal, el 25 de enero de 2005.

Consulta en la web, realizada en enero de 2011, disponible en: http://www.fundacion-

christlieb.org.mx/zmvm/delimitacion_zmvm.pdf 11

Bando municipal del H. Ayuntamiento de Huixquilucan.

10

MAPA DEL MUNICIPIO DE HUIXQUILUCAN, ESTADO DE MÉXICO. ENTIDAD Y MUNICIPIOS COLINDANTES

Fuente: www.edodemexico.com.mx

El vínculo con la tierra, y la calidad de campesino, ejidatario, comunero,

arrendatario o comodatario, genera diversas identidades sociales y políticas que

se confrontan y trascienden en el espacio y en el tiempo. Estudiar el concepto de

identidades políticas desde el campo de la Sociología Política y definir, si bien de

una manera sucinta, cada una de estas categorías, resulta una condición

necesaria para explicar cómo se conforma ese vínculo. El primer capítulo de mi

investigación lo destino a alcanzar este objetivo, relacionando las identidades

políticas con los imaginarios y la cultura política. Abordo el concepto de

identidades partidistas, como especificidades de las identidades políticas. Para

ello analizo las propuestas de diversos autores y presento un modelo propio. En el

segundo capítulo abordo el tema de las juventudes priístas y su participación en la

política nacional; describiendo la distancia entre el discurso y la realidad de los

jóvenes en México, su aparente desinterés por la política institucional y por los

partidos políticos. En el tercer capítulo se describen los imaginarios políticos de

11

jóvenes priístas de San Bartolomé; recojo aquí las descripciones y valoraciones

que hacen respecto a su reconocimiento, pertenencia, permanencia y vinculación

con el partido político y sus prácticas. En el cuarto capítulo analizo el concepto de

juventud, desde un enfoque sociopolítico, y los rasgos que distinguen a los

jóvenes priístas originarios y avecindados de San Bartolomé, haciendo una

revisión de sus aspiraciones sociopolíticas, de empleo y estatus.

Hablar de originarios, en estricto sentido, es tanto como referirse a pueblos

ancestrales, pobladores autóctonos o aborígenes. Estos términos, con matices

que pasaremos por alto, nos acercan a un campo semántico común.

En este trabajo, los términos originarios y avecindados se emplean en un

sentido sociológico amplio, para hacer alusión, por lo que toca a los primeros, a

quienes pertenecen a familias cuyos ancestros tienen muchas generaciones

viviendo en el pueblo y se sienten pertenecientes a él, aunque en realidad no es

posible determinar con precisión qué significa tener “muchas generaciones”.

De este modo, por ejemplo, uno de mis entrevistados refiere que su familia,

aun cuando lleva varias generaciones viviendo en el pueblo y el apellido está en

la lista de solicitantes de dotación de tierras ejidales de 1927, no forma parte de

los auténticos originarios. De este modo, en San Bartolomé, no obstante haber

nacido en el pueblo, si los padres no tienen la condición de originarios, los hijos

seguirán siendo señalados como avecindados por varias generaciones12. Esta

forma de entender el concepto de originario, concuerda con el criterio que

expresan Lucía Álvarez y María Ana Portal, cuando afirman que no puede

identificarse a los pueblos indígenas con los pueblos originarios. El concepto de

pueblo originario, refieren estas autoras, “nace cargado de un significado político,

ideológico e identitario e implica una delimitación geográfica ya que se refiere

exclusivamente a los pueblos ubicados en la cuenca de México”13.

12

Así lo refiere un joven originario de San Bartolomé, Huixquilucan. Entrevista realizada en marzo

de 2010. 13

Álvarez Enríquez y María Ana Portal, “Pueblos urbanos: entorno conceptual y ruta

metodológica”, en Pueblos urbanos: identidad, ciudadanía y territorio, op.cit., p.11-12. Las autoras sostienen que la mayoría de los autores que las precedieron, definen el concepto de pueblos originarios a partir de criterios culturales: 1. Origen prehispánico reconocido. 2. Conservan el nombre que les fue asignado durante la Colonia, compuesto con el de un santo patrón. 3.

12

Por exclusión, quienes llegan de fuera y se asientan en el pueblo pueden

adquirir la categoría de avecindados. El concepto de avecindados en sentido

jurídico, adquiere un significado particular, que rebasa la propia voluntad de

quienes se asientan en un territorio14. En una interpretación sistemática y con

base en la legislación agraria, los avecindados del ejido gozan de los derechos

que les confiere la ley, y son aquellos mexicanos mayores de edad que han

residido por un año o más en las tierras del núcleo de población ejidal y que han

sido reconocidos como tales por la asamblea ejidal o el tribunal agrario

competente 15.

Esta normatividad determina que la calidad de avecindado se adquiere si

además de ser mayor de edad, se ha residido por un año o más en las tierras,

siempre y cuando se cumpla también la condición de que la asamblea del ejido o

el tribunal agrario competente reconozca al susodicho avecindado.

El jus sánguinis o la pertenencia al círculo de familias mexiquenses

encumbradas o vinculadas a ellas, puede ser condición suficiente para aspirar a

contender por un cargo de elección popular, aunque no se haya nacido en

Huixquilucan16.

El Diccionario Jurídico señala el significado de jus sánguinis y jus soli, de la

siguiente manera:

Jus. (lat) m. Derecho, justicia, equidad.// Autoridad, poder. // Documentos

que acreditan el derecho, títulos.(…) sánguinis. Der. Derecho de la sangre,

expresión que da a entender que la nacionalidad y los derechos de una

persona se rigen por la legislación de su patria familiar de origen. //- soli.

Der. Derecho del suelo en que se nace, expresión que significa que la

nacionalidad y los derechos de una persona se rigen por la legislación del

Mantienen un vínculo con la tierra y el control sobre sus recursos naturales. 4. Reproducen un sistema festivo centrado en fiestas patronales y sistemas de cargo. 5. Mantienen estructuras de parentesco consolidadas. 6. Tienen un panteón sobre el que conservan su control administrativo. 7. Reproducen un patrón de asentamiento humano. 14

Artículo 13 de la Ley Agraria de 1992. 15

Artículo 13 de la Ley Agraria. D.O. del 26 de febrero de 1992. 16

Utilizamos la expresión de “círculo de familias mexiquenses encumbradas” para referirnos, en el

plano estatal a las familias Hank, Del Mazo, Chuayffet, Jacob, entre otras. Para San Bartolomé, el

apelativo puede aplicarse a las familias Ibáñez, Juárez y Roque, particularmente.

13

país en que ha nacido, sin perjuicio del derecho de opción que pueda

corresponderle al alcanzar determinada edad17.

Campesino, es quien vive en el campo y se dedica a las labores agrícolas,

sea originario o avecindado. Ejidatario, de acuerdo con la legislación de la

materia, es quien ha recibido una dotación de tierras o la ha adquirido por otro

título; en tanto que comunero es quien, como propietario de la tierra, pertenece a

un núcleo de población comunal 18. Sobre este particular, el artículo 27

constitucional dispone:

La Nación tendrá en todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad

privada las modalidades que dicte el interés público (…) para el

fraccionamiento de los latifundios; para disponer, en los términos de la Ley

reglamentaria, la organización y explotación colectiva de los ejidos y

comunidades; para el desarrollo de la pequeña propiedad rural;

VII. (…) La ley, con respeto a la voluntad de los ejidatarios y comuneros

para adoptar las condiciones que más les convengan en el

aprovechamiento de sus recursos productivos, regulará el ejercicio de los

derechos de los comuneros sobre la tierra y de cada ejidatario sobre su

parcela.

Es importante señalar que la conformación del ejido ha variado en el

tiempo. A decir de Trujillo Bautista, el ejido no nace con la Revolución Mexicana,

pues:

(…) en la época colonial la tierra para indios fue dispuesta a través de

Cédulas emitidas por el Rey español en su momento. Así tenemos que

Felipe II en Cédula del 1o. de diciembre de 1573, dispuso: “los sitios en

que han de formar pueblos y reducciones tengan (los indios) comodidad

de aguas, tierras y montes, entradas, salidas y labranzas y un ejido de una

legua de largo, donde los indios puedan tener sus ganados19.

17

Palomar de Miguel, Juan, (1981) Diccionario para Juristas, México, Mayo Ediciones. 18

Véase la Ley Agraria de 1992, aunque por supuesto el ejido tiene antecedentes históricos más

antiguos, que nos remontan a las Cédulas Reales emitidas durante la época colonial. 19

Trujillo Bautista, Jorge Martín, (2009) “El Ejido, símbolo de la Revolución Mexicana”, en Luzón,

José Luis y Marcia Cardim (Coord) Problemas Sociales y Regionales en América Latina. Estudio de casos, España, Universidad de Barcelona,p.109. Disponible en: www.ub.edu/medame/PSTrujillo.pdf

14

Como se observa en la cita anterior, se alude al concepto de pueblo, que

fue sustituido en 1934 en la legislación constitucional por los de núcleo ejidal o

núcleo comunal de población posteriormente. En 1987 se añade la figura de

centro de población. Cabe recordar que el texto original del artículo 27

constitucional se refería a los pueblos, de este modo:

Los pueblos, rancherías y comunidades que carezcan de tierras y aguas, o

no la tengan en cantidad suficiente para las necesidades de su población,

tendrán derecho a que se les dote de ellas, tomándolas de las propiedades

inmediatas, respetando siempre la pequeña propiedad20.

Por otro lado, el arrendatario es quien paga al arrendador por el uso de la

tierra, en tanto que el comodatario es quien goza de ese uso en forma gratuita,

por acuerdo con el comodante.

Esta relación con la tierra, que da lugar a distintos roles, ya sea como

campesino, ejidatario, comunero, arrendatario o comodatario, presenta

características singulares.

Tanto el Estado de México como Huixquilucan, están gobernados por el

Partido Revolucionario Institucional, un partido político que, según se afirma,

controló el país durante casi setenta años, y mantiene el poder en la gubernatura

y en 97 de los 125 municipios de la entidad mexiquense21. Desde 1940 a la fecha,

Huixquilucan ha sido gobernado, primero por el Partido de la Revolución

Mexicana y luego por el Partido Revolucionario Institucional (1946), salvo durante

el período de (2000-2003) en que gobernó Guillermo Espinoza Cruz, del Partido

Acción Nacional.

San Bartolomé es uno de los once pueblos que conforman el municipio de

Huixquilucan, junto con El Palacio, Ignacio Allende, La Magdalena Chichicaspa,

20

Texto original del artículo 27, párrafo III, de la Constitución Política de los Estados Unidos

Mexicanos. 21

Los datos se refieren al año de 2011. En realidad, en estricto sentido, como me haría notar el

maestro Rodolfo Gil Thompson, profesor del Departamento de Derecho de la UAM, el PRI nació en 1946, por lo que no es exacto afirmar que gobernó al país setenta años. Sin embargo, el propio partido celebró en marzo de 2010 su aniversario número ochenta y uno.

15

San Cristóbal Texcalucan, San Francisco Ayotuxco, San Francisco Dos Ríos, San

Juan Yautepec, Santa Cruz Ayotuxco, Santiago Yancuitlalpan y Zacamulpa22.

Muchos pueblos de toda la república y particularmente del Estado de

México, como San Bartolomé, tienen raíces indígenas y mantienen una estrecha

relación con la tierra, que es uno de los referentes principales en la conformación

de sus identidades; presentan además enormes diferencias sociales, inseguridad,

desempleo, deficiencias en los servicios públicos, contaminación, escasez de

agua, y un manifiesto desinterés de un gran sector de la población y

particularmente de los jóvenes por participar en los partidos políticos.

Este desinterés o apatía se refuerzan en gran medida con el desempeño

de algunos gobernantes y por la falta de capacidad o voluntad de los partidos

políticos para incorporar a esos jóvenes en sus filas y dar respuesta a sus

demandas23.

Al ser la población joven un sector importante del electorado y entendiendo

que la juventud es un símbolo de esperanza24, futuro, cambio, posibilidades de

transformación y mejoramiento social, económico y político, los partidos políticos

han visto la conveniencia de incorporarlos a sus programas, particularmente

durante los tiempos electorales. Esto se ha hecho incluyendo a jóvenes en las

listas de candidatos, disfrazando de jóvenes a quienes no lo son, o flexibilizando

el concepto de joven, para que incluya en su significado a personas que rebasan

los cuarenta o incluso los cincuenta años25.

22

www.huixquilucan.gob.mx 23

Michels, Robert (1915) Los partidos políticos, Argentina, Amorrortu Editores, Vol. II, Sexta

reimpresión, 2003, p.9. Michels observaba, en 1915, que la apatía de las masas y la necesidad de ser conducidas, contrastaba con el apetito natural de los líderes por el poder. 24 Vega, Aimée. (2000) “El manejo de las emociones en las campañas presidenciales de 2000 de México y España”. Revista Mexicana de Ciencias Políticas y Sociales, septiembre-diciembre, año/vol. XLIV, número 180, Universidad Nacional Autónoma de México, pp. 139-154. De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (2009), la población joven en el Estado de México (15 a 29 años) ascendía a 3 736 670 personas en 2005, lo que representaba una cuarta parte (26.4%) del total de la población en la entidad. 25

En el Estado de México se hablaba por ejemplo de Enrique Peña Nieto como un gobernador

joven, quien recibió la constancia de mayoría que lo acreditaba como Gobernador electo, en agosto de 2005, cuando tenía cuarenta años. Así, Ricardo Alemán, en El Universal (15 de enero de 2007) escribe: “Enrique Peña es un político joven, priísta de siempre, pero que hasta hace un par de años no pasaba de ser un modesto diputado local”. Álvaro Cueva, en Milenio (23 de

16

Es necesario que en la construcción de las identidades26 sociales y

políticas, queden al descubierto los intereses ajenos a la población, cuyos fines

satisfacen únicamente a grupos privilegiados que explotan los sentimientos

identitarios. En una democracia, entendida como forma de gobierno, pero también

como un sistema de vida fundado el constante mejoramiento social, económico y

cultural del pueblo27, las identidades políticas deben ser asumidas por los propios

pueblos o grupos sociales, estableciendo sus diferencias y definiendo sus

proyectos. Sin bien el enfrentamiento de identidades es propio de la relación

política, el diálogo y la cooperación entre ellas es al mismo tiempo condición para

la sobrevivencia de una sociedad democrática: un diálogo que da como resultado

sociedades de colaboración y no de subordinación, en donde un grupo identitario

sojuzga al otro, lo excluye en forma violenta o pretende su exterminio.

Aunque San Bartolomé ha perdido su fisonomía rural e indígena y buen

número de ejidatarios o comuneros ya no trabajan la tierra o se han visto

obligados a venderla, su sentido de pertenencia hacia ella tiene un carácter

cultural, mítico y religioso, que está seriamente influenciado por prácticas

culturales que conservan rasgos de origen indígena, y que se traduce además en

formas de acción política sui generis. Dentro de este escenario, la presente

investigación se limita al estudio de una sola unidad de análisis: jóvenes priístas

de San Bartolomé Coatepec28.

De esta manera, planteo las siguientes preguntas en torno de las cuales

gira la investigación: ¿La condición de originario o avecindado en jóvenes priístas

de San Bartolomé Coatepec, incide en la construcción de las identidades políticas

y particularmente de las identidades partidistas? ¿qué características identitarias

tienen los jóvenes priístas que nacieron en San Bartolomé Coatepec o son hijos

de originarios y cómo se distinguen de los avecindados? ¿cómo influyen las

noviembre de 2008) lo califica de la siguiente manera: “Enrique Peña Nieto, joven, galán, padre de familia, viudo”. 26

La palabra “identidades” tiene significados polisémicos aun en el campo de la Sociología, que es

en el que se ubica la presente investigación. 27

Artículo 3o. de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. 28

San Bartolomé Coatepec es conocido también como “San Bartolito”.

17

tradiciones familiares en la construcción de identidades políticas en jóvenes

priístas de San Bartolomé Coatepec, sean estos nativos o avecindados? ¿qué

papel juega el desempleo de los jóvenes y la esperanza de obtenerlo, en su

participación partidista?

En esta investigación se emplea una metodología que parte de una triada

que articula la teoría, el método y la selección de datos para la investigación29.

Como sostiene Karl Popper, entiendo por teoría un conjunto articulado de

conjeturas que se someten a la crítica y a la validación, para la conformación de

un conocimiento objetivo. Utilizo un método cualitativo, sobre la base de que la

condición del investigador no es la de quien vive en la comunidad, sino más bien

la de quien, como forastero y amigo30, se acerca a la gente para conocer su

experiencia y su sentir. (Emic)

Con una visión multidisciplinaria, se utilizan entrevistas abiertas o

semiestructuradas, contextualizadas en el marco de una geografía urbana y

política determinada, durante un período electoral y bajo las condiciones

sociodemográficas de un municipio como Huixquilucan, con enormes contrastes

sociales, económicos y culturales. A través de entrevistas abiertas se

establecieron diálogos para propiciar confianza y espontaneidad hacia el

entrevistador, “darle voz a los entrevistados”31 y ofrecer una perspectiva de la

realidad distinta de la que sostiene el investigador.

29

Tamayo, Sergio, Conferencia dictada en el Seminario para la Maestría en Planeación

Metropolitana, Universidad Autónoma Metropolitana, 8 de marzo de 2010. 30

Bazán, Ángel Aguirre (Ed) (1995) Etnografía. España. Editorial Boixareu Universitaria. P. 94. El

autor señala que es Powdermaker quien define al etnógrafo como Stranger and friend (1966), “como una persona que ha traspasado las fronteras territoriales de una cultura para estudiarla”. 31

Tamayo, Sergio, Loc. Cit.

18

MAPA PARA UBICAR EL PUEBLO DE SAN BARTOLOMÉ, COATEPEC, EN EL MUNICIPIO DE HUIXQUILUCAN Fuente: Página del Ayuntamiento de Huixquilucan

www.huixquilucan.gob.mx

19

Capítulo I

Cultura e identidades políticas

Introducción.

El estudio de las identidades políticas de jóvenes priístas y de la cultura

política en un pueblo como San Bartolomé, nos permite entender la realidad

sociopolítica de individuos, categorías sociales y grupos, en un tiempo, lugar y

ocasión determinados; pero también ofrece un modelo teórico para explicar y

prever fenómenos que trascienden ese marco contextual, y que es aplicable a un

entorno más amplio. Dada la naturaleza polisémica de los conceptos de

identidades políticas y cultura política, entablamos un diálogo con autores como

Michel Maffesoli, Chantal Mouffe y Carl Schmitt, buscando en ellos elementos

teóricos para precisar cómo conceptualizamos lo político y la política. Desde su

propia perspectiva, los tres pensadores nos aportan herramientas para entender

la importancia de las relación nosotros- los otros, que representa la esencia

misma de las identidades políticas. Mientras Maffesoli la concibe como una

tensión paradójica; Mouffe sugiere un antagonismo en donde se comparten

escenarios comunes para organizarlos de formas distintas; y Schmitt, considera

que la distinción política (amigo-enemigo) es la distinción de mayor intensidad. La

cultura política, magma de creencias, valores, normas, actitudes, signos y

símbolos compartidos en torno al poder político; está conformada, en su

dimensión subjetiva, por identidades políticas compuestas por elementos de

reconocimiento, pertenencia, permanencia y vinculación. En este marco, las

identidades partidistas, en su carácter de especificidades de las identidades

políticas, es decir, como un tipo sui generis de éstas, nos permiten describir,

analizar, identificar y distinguir las características principales de jóvenes priístas

originarios y avecindados de San Bartolomé, en el contexto de un período

determinado. Con ello podemos entender y comprender el papel que cumple la

20

relación que estos actores políticos establecen con la tierra, como referente

fundamental en la construcción de sus identidades políticas.

El enfoque desde el cual se realiza este estudio es el de la Sociología

Política. Para ello, debe señalarse que la vinculación entre la Sociología y la

Política ha creado esta rama de las Ciencias Sociales. Aunque de “la Política” se

tienen noticias por lo menos desde el siglo IV A.C., con pensadores como Platón

o Aristóteles, es hasta Nicolás Maquiavelo cuando empieza a adquirir un carácter

científico y autónomo, independizándose de la Ética. La Sociología nació

propiamente en la segunda mitad del siglo XIX, llamándose Filosofía Positiva o

Física Social.

Referirse a la Sociología Política significa distinguir dos campos del

conocimiento: el de lo social, y el de lo político. De Grazia sostiene que la

Sociología Política se encarga del estudio de los fundamentos sociales de la

política32.

El significado de “lo político” no tiene un carácter uniforme. De este modo,

Carl Schmitt, por ejemplo, señala:

El enemigo político no necesita ser moralmente malo, ni estéticamente

feo, no hace falta que se erija en competidor económico, e incluso puede

tener sus ventajas hacer negocios con él. Simplemente es el otro, el

extraño, y para determinar su esencia basta con que sea

existencialmente distinto y extraño en un sentido particularmente

intensivo. En el último extremo pueden producirse conflictos con el que

no puedan resolverse ni desde alguna normativa general previa ni en

virtud del juicio o sentencia de un tercero «no afectado» o «imparcial»33

.

La caracterización del otro, del distinto o extraño que no soy yo, me permite

identificarme como yo, y relacionarme con quienes sí son como yo, y por lo mismo

no son distintos o extraños.

Para Schmitt, la distinción política, que es “la más fuerte e intensa de las

distinciones”, es la de amigo y enemigo. Sin embargo, el enemigo político no es

32

Michels, R. (1969) Introducción a la Sociología Política. Ed.Paidós. Argentina. 33

Schmitt, Carl. (1990) El concepto de lo político. España, Alianza Editorial.

21

un enemigo absoluto, sino que es reconocido como persona y se puede negociar

con él: de aquí que puedan establecerse alianzas o negociaciones políticas.

En un orden distinto de ideas, Chantal Mouffe34 propone una política

pluralista y democrática. Para ella, los antagonismos se expresan no sólo a través

de relaciones amigo-enemigo, sino entre adversarios, que comparten espacios

simbólicos comunes, pero pretenden organizarlos de maneras diversas.

Nuestra autora considera que el antagonismo es consustancial a la política,

pero la tarea de una política democrática “consiste (…) en crear las condiciones

capaces de hacer que la aparición de tal posibilidad sea mucho menos palpable”.

Las relaciones sociales adquieren un matiz político en la medida que en

ellas intervienen factores de poder o dominación. En este sentido es que los

fenómenos sociales se “politizan”; es decir, “la politización se refiere a la

elaboración de un discurso que cuestiona un orden dado”35. Pero en la

actualidad, el espacio de lo político ha trascendido límites y, por ejemplo,

parafraseando a Michel Maffesoli, la religiosidad es una condición de la política36.

De aquí que el sociólogo francés señale:

Así como la muerte es necesaria a la vida, o en todo caso le da sentido,

especificándola por lo que es, así lo político es una instancia que – en su

acepción más fuerte – determina la vida social: la limita, la restringe y le

permite existir al mismo tiempo.

Estamos encadenados a todo esto, y el término político describe bien la

dimensión de ello. Traduce la tensión paradójica que en el exterior

34

Mouffe, Chantal. (2003) La paradoja democrática. España. Editorial Gedisa, p. 29. La autora

señala: “Si las identidades colectivas sólo pueden establecerse según el modo del nosotros/ellos, está claro que, dadas ciertas condiciones, siempre podrán ser transformadas en relaciones antagónicas”. 35

Ema López, José Enrique. “Lo político, la política y el acontecimiento”, Foro Interno, p.75. http://revistas.ucm.es/cps/15784576/articulos/FOIN0707110051A.PDF Consultado: mayo de 2009. 36

Maffesoli, Michel. (1992) La Política y su doble. México, Instituto de Investigaciones Sociales. El

autor sostiene: “Para decirlo en términos más clásicos, no hay política sin “religión”, tomada ésta en su más estricto sentido: lo que vincula a la gente que comparte un conjunto de supuestos comunes”, p.8. En otro sitio, Maffesoli (1977), retoma las ideas de Marx y llama a la política “forma profana de la religión”. Lógica de la dominación. España, Ediciones Península, p. 214.

22

(interespecífico) como en el interior (intraespecífico), preside la relación

con el otro37.

Para Thomas Nagel, por otro lado: “la política es con frecuencia tanto el

escenario del conflicto como el de la cooperación”38.

A mi juicio, los autores citados nos permiten entender cómo en las relaciones

sociales y políticas se determinan límites y diferencias. Cuáles son las

condiciones que a un grupo social o político lo definen como tal y lo hacen distinto

de otro. Estas condiciones permiten establecer relaciones de cooperación, pero

también de lucha por el poder y dominación del otro.

Cultura e identidades políticas.

El concepto de identidades políticas está estrechamente vinculado con el

de cultura política. Este último, ofrece un abanico polisémico que se origina en los

significados que tienen las palabras que lo integran.

Por ello, antes de referirnos específicamente a la cultura política, conviene

presentar un esbozo de los significados que se han dado a la palabra cultura39. El

significado de la palabra cultura ha sufrido transformaciones a través del tiempo.

En 1871, por ejemplo, Edwar B. Taylor definió la cultura de esta manera:

La cultura o civilización, en sentido

etnográfico amplio, es aquel todo complejo

que incluye el conocimiento, las creencias,

el arte, la moral, el derecho, las

costumbres y cualesquiera otros hábitos y

capacidades adquiridos por el hombre en

cuanto miembro de la sociedad40.

37

Ibid. Maffesoli señala: (p.1-3) 38

Nagel, Thomas. (1996) Igualdad y parcialidad. Bases éticas de la teoría política. España. Paidós,

p. 29. 39

Zalpa, Genaro. (2011) Teoría (s) de la cultura. Plaza y Valdés, México, p.23. El autor hace

mención de una lista de 164 definiciones de cultura que en 1963 elaboraron Kroeber y Kluchkhon. 40

Taylor, Edwar B., La ciencia de la cultura, citado por Roberto Salcedo Aquino, La noción de

cultura. México, FES, Acatlán, UNAM.

23

El concepto clásico de Taylor identificaba los términos cultura y civilización,

para referirlos a un todo complejo que el hombre adquiere en sus relaciones en

sociedad.

Muchos años después, en 1940, Walter Benjamin señalaba: “No existe

ningún documento de cultura que no lo sea al mismo tiempo de la barbarie”41. Las

palabras de Benjamin reflejan un sentido político consustancial de la cultura: ésta

se manifiesta no sólo como instrumento del poder, sino de barbarie. El Ángel de la

Historia, al que alude Benjamín, observa cómo a su paso, los avances de la

cultura dejan atrás vestigios de crueldad y destrucción.

En época reciente, Baumann42 advierte al menos tres sentidos distintos de

la palabra cultura: el jerárquico, el diferencial y el genérico. En un sentido

jerárquico, el concepto de cultura puede calificarse de presuntuoso y sus

significados suelen asociarse a algo valioso: aquí se puede hablar del desarrollo

de una sola cultura, o de la alta cultura. En un sentido diferencial es válido

encontrarse con distintas culturas, sin que una sea necesariamente superior a la

otra. En su dimensión genérica, la cultura permite distinguir la humanidad de lo

humano, entendiéndola como prácticas que definen los comportamientos sociales

significativos.

Considero que este último sentido se acerca al concepto freudiano de

cultura, entendida como “la suma de producciones e instituciones que distancian

nuestra vida de la de nuestros antecesores animales y que sirven a dos fines:

proteger al hombre contra la Naturaleza y regular las relaciones de los hombres

entre sí”43.

Algunos autores sostienen que el concepto de cultura está estrechamente

vinculado con el de identidades sociales. De este modo, Gilberto Giménez

señala, por ejemplo:

41

Benjamin, Walter, (1940) Tesis de filosofía de la historia, tesis VII. 42 Baumann, Zygmunt. (2002). La cultura como praxis. España. Paidós. 43

Freud, Sigmund, (1950) El malestar en la cultura, p. 3033.

24

La cultura subjetivada es también la matriz de lo que de ahora en adelante

llamaremos “identidades sociales”, ya que éstas resultan precisamente de

la interiorización peculiar y distintiva de ciertos rasgos culturales por

parte de los actores sociales, rasgos que sirven como referencias para

definir su unidad (ad intra) y su diferenciación (ad extra). Esta

observación es capital, ya que permite comprender que cuando hablamos de

identidad, por lo menos en el sentido aquí empleado, no estamos

abandonando el territorio de la cultura sino que nos estamos refiriendo, en

cierta forma, a su lado subjetivo44

.

Para este autor, la cultura es: el conjunto complejo de signos, símbolos,

normas, modelos, actitudes, valores y mentalidades a partir de los cuales los

actores sociales construyen, entre otras cosas, su identidad colectiva.

Este lado subjetivo o interiorización de la cultura es un tipo de conciencia45.

Por ello, el autor que se comenta refiere que las identidades sociales son

autopercepciones de un nosotros relativamente homogéneas, en contraposición

con los otros con base en distintivos que determinan el espacio de la propia

identidad 46.

En otro orden de ideas, Andreas Wimmer señala que la cultura, “escribe,

así pues, el guión de acuerdo con el cual los individuos desempeñan su papel en

el escenario de la sociedad” 47.

Tal y como lo hemos señalado en otro sitio, de la lectura de la Constitución

Política Federal podemos intuir que, cuando se habla de cultura se hace

referencia a un bien, pues la democracia supone un sistema de vida en el que la

44

Giménez, Gilberto, (2007) Estudios sobre la cultura y las identidades sociales, Op. Cit., p. 110-

111. Las negrillas son nuestras. En otro sitio, el autor señala: “entendemos por cultura el conjunto de formas simbólicas – esto es, comportamientos, acciones, objetos y expresiones portadores de sentido – inmersas en contextos históricamente específicos y socialmente estructurados, dentro y por medio de los cuales dichas formas simbólicas son producidas, transmitidas y consumidas”. Gilberto Giménez.(1994) “Comunidades primordiales y modernización”, Op.cit., p.171. 45

Sartre, Jean Paul. (1964) Lo imaginario. Argentina, Editorial Lozada, p. 19. Para este autor,

“percibir, concebir, imaginar, son en efecto los tres tipos de conciencia por las cuales nos puede ser dado un mismo objeto”. Sartre se refiere al término conciencia, “no para designar la mónada y el conjunto de estructuras psíquicas, sino para nombrar a cada una de estas estructuras en su particularidad concreta. Hablaremos, pues, de conciencia de imagen, de conciencia perceptiva, etc., inspirándonos en uno de los sentidos alemanes de la palabra Bewusstsein.” P.11. 46

Cfr. Giménez, Gilberto. (1994) “Comunidades primordiales y modernización”, en: Modernización

e identidades sociales. UNAM, México, p. 170. 47

Andreas Wimmer, “La cultura como concertación”, Revista Mexicana de Sociología, Vol. 62, No.

4 (Oct-Dic. 2000), pp. 127-157. México. Universidad Nacional Autónoma de México.

25

gente lo mejore o lo acreciente. En este sentido, alguien podría acumular más

cultura, una multiplicidad de culturas o una cultura de “mejor” calidad48.

El derecho a la cultura forma parte del elenco de derechos humanos

reconocidos por los Pactos Internacionales y recientemente fue reconocido en

nuestra Constitución Política Federal49. Consecuentemente, a ningún grupo de

personas le agrada que califiquen su cultura como precaria, incipiente o pre-

ilustrada. Es signo de deferencia hablar de una persona culta o con una alta o

amplia cultura.

En contraste, Max Horkheimer y Theodor W. Adorno señalan:

La industria cultural, en suma, absolutiza la imitación. Reducida a mero

estilo, traiciona el secreto de éste: la obediencia a la jerarquía social. La

barbarie estética cumple hoy la amenaza que pesa sobre las

creaciones espirituales desde que comenzaron a ser reunidas y

neutralizadas como cultura. Hablar de cultura ha estado siempre

contra la cultura50. El denominador común “cultura” contiene ya

virtualmente la captación, la catalogación y clasificación que entregan a

la cultura en manos de la administración. Sólo la subsunción

industrializada, radical y consecuente, es del todo adecuada a este

concepto de cultura. Al subordinar todas las ramas de la producción

espiritual de la misma forma al único objetivo de cerrar los sentidos

de los hombres, desde la salida de la fábrica por la tarde hasta la

llegada, a la mañana siguiente, al reloj de control, con los sellos del

proceso de trabajo que ellos mismos deben alimentar a lo largo de todo

el día, esa subsunción realiza sarcásticamente el concepto de cultura

unitaria, que los filósofos de la personalidad opusieron a la

masificación51

.

48

Véase: Vesga Urbina, Eduardo, “El derecho del individuo a la cultura en México”, Congreso de

Investigación Multidisciplinaria, Facultad de Estudios Superiores Acatlán, Universidad Nacional Autónoma de México, Octubre de 2008, UNAM/MIMEO. 49

Cabe destacar también la reforma del 6 de junio de 2011 al artículo primero constitucional, que

incluye el reconocimiento de los derechos humanos plasmados en los Tratados Internacionales. 50

En una traducción distinta se dice: “hablar de cultura ha sido siempre algo contra la cultura”.

Dialéctica del Iluminismo, Subadmericana, Buenos Aires, 1988. De igual modo, se sustituye el concepto de cultura unitaria, por el de cultura orgánica. 51

Horkheimer, Max y Theodor W. Adorno. (2006) Dialéctica de la Ilustración. España, Editorial

Trotta, p.176. Las negrillas son nuestras.

26

Para Adorno, la cultura después de Auschwitz, se transformó en ideología

de un mundo administrado, y opera como instrumento al servicio del poder. De

aquí que el sociólogo y filósofo judío realice una crítica a la filosofía de la

identidad que llega al extremo de justificar la aniquilación de lo que es diferente,

porque está fuera de esos parámetros de uniformidad o encasillamiento.

Los productos políticos, trátese de personas o de propuestas, envueltos en

celofán, se ofrecen al público elector-consumidor a través de una poderosa

industria cultural. Como afirman Adorno y Horkheimer:

La industria cultural defrauda continuamente a sus consumidores

respecto de aquello que continuamente les promete. La letra sobre

el placer, emitida por la acción y la escenificación, es prorrogada

indefinidamente: la promesa en la que consiste, en último término, el

espectáculo deja entender maliciosamente que no se llega jamás a la

cosa misma, que el huésped debe contentarse con la lectura de la

carta de menús52

.

El concepto de cultura política nació el siglo pasado, durante la década de

los cincuentas. Como hemos señalado antes, a principios de la década siguiente

(1963), los politólogos norteamericanos Gabriel Almond y Sydney Verba, basados

en elementos cognoscitivos, evaluativos y afectivos, acuñaron el concepto de

cultura cívica para referirse a las visiones y orientaciones políticas ciudadanas,

que se expresan en las prácticas políticas53.

Para estos autores, existen tres modelos de cultura cívica:

La parroquial, propia de sociedades poco diferenciadas donde las

funciones políticas se encuentran insertas en otras instituciones sociales;

La de subordinación, pasiva y asociada a la existencia de regímenes

autoritarios y,

52

Ibid., p. 184. 53

Peschard, Jacqueline, La cultura política democrática, Cuadernos de Divulgación de la Cultura

Democrática, Instituto Federal Electoral, México.

27

La de participación, idealmente aquella que favorece la existencia de

regímenes democráticos debido a los deseos de los individuos por ejercer

sus derechos y obligaciones54.

Desde este enfoque culturalista de Almond y Verba, la cultura política ha

estado representada por un conjunto de valores, actitudes, ideologías, formas de

evaluación y participación política. Es decir, como un conjunto de orientaciones de

los individuos hacia los objetos políticos55. De este modo, suele hablarse también

de culturas políticas autoritarias o democráticas. La cultura cívica parroquial

obedece a una ausencia de relaciones entre el gobernado y el gobernante. La

segunda, de subordinación y corte vertical, impone al súbdito las decisiones del

gobierno. En el tipo de cultura democrática o participativa, el gobernado cumple

un papel importante en la toma de decisiones y en la exigencia para la rendición

de cuentas.

Para Roberto Varela, la cultura política puede definirse como: “el conjunto

de signos y símbolos compartidos (transmiten conocimientos e información,

portan valoraciones, suscitan sentimientos y emociones, expresan ilusiones y

utopías) que afectan y dan significado a las estructuras de poder56”.

En este marco contextual, el concepto de cultura política está vinculado a

los de ideología y poder57. Aquello que llamamos cultura política se transforma en

ideología y en instrumento de control social, justificación mediatizadora de

quienes pueden comercializar y promover a través de ella valores que no

necesariamente integran, sino desintegran. Valores que no tienen que ver con el

respeto, sino con la falta de respeto. Valores que no construyen, sino que

destruyen.

54

Citado por Héctor Tejera Gaona en: Cultura Política, Poder y Racionalidad, Revista Alteridades,

México, 1998, pp. 145-157. 55

Durand Ponte, Víctor Manuel. (2004) Ciudadanía y Cultura Política. México, Siglo XXI, p. 17. 56

Varela, Roberto,(2005) Cultura y poder. Anthropos/Universidad Autónoma Metropolitana,

México, p. 166. 57

Véase el trabajo de Sergio Tamayo, en: Sermeño, Ángel y Estela Serret. (Coord) (2008)

Tensiones políticas de la modernidad. México. Miguel Ángel Porrúa Editor.

28

La sociedad actual, de enormes progresos culturales, es sin embargo la

misma en la que millones de seres humanos han sido despojados de sus tierras,

viven en condiciones de pobreza y no cuentan con alimentos, empleos, servicios

de salud, educación o vivienda para tener una vida digna. Es también la sociedad

de las guerras, de la violencia y la inseguridad de todo tipo58. Es la sociedad que

no respeta otras culturas y postula una cultura hegemónica.

Roberto Gutiérrez afirma que cultura política es una categoría que puede ser

entendida como una: “síntesis heterogénea y en ocasiones contradictoria de

valores, informaciones, juicios y expectativas que conforman la identidad política

de los individuos, los grupos sociales o las organizaciones políticas y que, por lo

tanto, dibujan el perfil de los sujetos políticos en interacción59”.

Este autor destaca la relación estrecha que existe entre los conceptos de

cultura e identidad política. La cultura política configura la identidad política, le da

forma, determina sus rasgos. Gutiérrez afirma que el concepto de identidad tiene

su origen en el campo de la Psicología60. Sin embargo, ha trascendido a diversos

ámbitos, tales como la Sociología, la Política y la Antropología, por lo que integra

aspectos cognitivos, afectivos, comportamentales y volitivos.

Pablo Castro Domingo señala que podemos entender por cultura política

ese “conjunto de símbolos y signos que portan conocimientos, información,

valoraciones, sentimientos, emociones, anhelos, veleidades y utopías que se

relacionan con el ejercicio del poder”61.

En palabras de Esteban Krotz, la cultura política está conformada por “los

universos simbólicos asociados a los ejercicios y estructuras de poder”. En estas

58

Vesga Urbina, Eduardo (2008) Op.cit. 59

Gutiérrez, Roberto, (2001) Identidades Políticas y Democracia. México. Instituto Federal

Electoral.Op. Cit., p. 27. 60

Véase a Roberto Gutiérrez. (2001) Op. Cit. Este autor señala que: “el concepto de identidad en

el campo político es deudora, en lo fundamental, de las tesis provenientes de la teoría psicoanalítica”. 61

Castro Domingo, Pablo y Héctor Tejera Gaona (Coord) (2009) Teoría y Metodología de la

Cultura Política y el poder. México, Miguel Ángel Porrúa/UAM, p.152.

29

definiciones encontramos la relación íntima que la cultura y las identidades

políticas mantienen con los imaginarios62.

Respecto de lo imaginario, Gastón Bachelard sostiene que el vocablo

corresponde a la imaginación, más que a las imágenes. El filósofo francés señala

que “la fuerza de la imaginación radica en su capacidad de proyectar realidades

posibles, crear posibilidades que nos liberan del sometimiento a la realidad”63. De

aquí se desprende la posibilidad de la crítica de la realidad, del statu quo, y el

diseño de realidades distintas.

De acuerdo con Carretero Pasín, aunque existe un sentido peyorativo de lo

imaginario, que radica en su función legitimadora de las formas de dominación

social, también es cierto que los imaginarios cumplen funciones

desestabilizadoras que propician los cambios sociales. Es decir, existe una lucha

entre imaginarios que intentan conservar el orden social, e imaginarios que

buscan transformarlo.

Para Gastón Bachelard, recordemos, “imaginar es ausentarse, es lanzarse

a una vida nueva”64. En el mundo de la política y de lo político, los que mandan y

los que obedecen, los dominadores y los dominados, construyen sus propios

imaginarios para conservar el poder y para resistirse u oponerse a él en una lucha

constante.

En el estudio de las identidades, desde una perspectiva sociológico-política,

deben considerarse aspectos complejos, entendiendo a las identidades como

dimensiones intersubjetivas de la cultura65. Las identidades políticas pertenecen al

universo de las identidades sociales de carácter colectivo. Por lo tanto, antes de

62

“Los imaginarios sociales guardan, en este sentido, una estrecha similitud con la noción de

universo simbólico, acuñada por Berger y Luckman, pero a diferencia de éste, están desprovistos de una matriz simbólica totalizadora, de un marco significativo último”. Carretero Pasín, Ángel Enrique (2001) Imaginarios sociales y crítica ideológica. Una perspectiva para la comprensión de la legitimación del orden social. Tesis de Doctorado. Universidad de Santiago de Compostela. España, p.158. 63

Citado por Carretero Pasín, Ángel Enrique (2001) Tesis de Doctorado, p.133. 64

Bachelard, Gastón (1986) El aire y los sueños. México, Fondo de Cultura Económica, p.12. 65

Véase a Gilberto Giménez. (2006) La cultura como identidad y la identidad como cultura.

México. Instituto de Investigaciones Sociales.

30

adentrarnos en el estudio de la especie, habrá que referirse al género. La

identidad social de un individuo, señala Henry Tajfel:

concebida como el conocimiento que tiene de pertenecer a ciertos grupos

sociales junto con la significación emocional y valorativa que él mismo le

da a dicha pertenencia, sólo puede definirse a través de los efectos de las

categorizaciones sociales que segmentan el medio ambiente social de un

individuo en su propio grupo y en otros grupos66.

María Ana Portal plantea que la identidad se expresa en la respuesta que se

formula a las preguntas: ¿quién soy?, y ¿quién quiero ser?67 Las preguntas que

se hace nuestra autora nos permiten reflexionar acerca de cómo un individuo o un

grupo se ve a sí mismo, qué características tiene y cómo se distingue de los

demás; pero también cómo es visto por los otros, o cómo quiere ser visto, no sólo

en el presente, sino en su pasado y en el futuro. Con esta interpretación coincide

Olga Lassaga:

La identidad es a la vez aquel conjunto de características que nos permiten

reconocernos a nosotros mismos a lo largo de nuestra vida otorgándonos un

sentido de continuidad y aquello que nos hace diferentes a los demás y que

permite distinguirnos68.

Lassaga nos explica de esta manera, cómo la identidad nos permite

identificarnos y reconocer los límites entre el yo o el nosotros, y el otro o los otros.

Castoriadis hace un análisis de las identidades a partir de lo que él llama la

lógica identitaria o lógica de conjuntos. De este modo, nos explica cómo es que

un conjunto puede estar formado por elementos diversos, pero que al formar parte

de él, conforman una unidad, y por lo tanto una identidad.

Para poder hablar de un conjunto, o pensar un conjunto, señala Castoriadis:

66

Tajfel, Henry (1984) Grupos humanos y categorías sociales, categorización, identidad y

comparación. Barcelona, Editorial Herder, p. 296. 67

Para María Ana Portal, (Coord) ( 2001 ) Vivir la diversidad: identidades y cultura en dos

contextos urbanos. México, Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, p. 41, las interrogantes de quién soy y hacia dónde voy constituyen premisas centrales de la identidad. 68

Véase el trabajo de Lassaga Millet, Olga. (2004) La identidad europea como construcción social

compleja. Tesis Doctoral. Universidad de Barcelona.

31

hay que poder distinguir-elegir-poner-reunir-contar-decir objetos. Poco

importa la naturaleza de estos objetos. Aquí, la universalidad – lo mismo que

la universalidad potencia y efectiva del lenguaje – es absoluta: estos objetos

pueden depender de la percepción o de la sensación externa o interna, del

pensamiento en sentido estricto o de la representación en el más amplio

sentido del término. Es menester poder poner estos objetos como definidos,

en el sentido de una definición decisoria- práctica, y como distintos 69.

Como elementos reunidos, aun cuando no confundidos, los integrantes de

un partido político (conjunto) mantienen entre sí similitudes y diferencias. De aquí

que construyan su propia identidad y la identidad colectiva como grupo, que le

permite reconocerse y lo distingue de otros partidos políticos.

Por ejemplo, pensar, por ejemplo, en Beatriz Paredes, Enrique Peña Nieto,

Manlio Fabio Beltrones o Eruviel Ávila Villegas, como miembros de un mismo

partido político, el Partido Revolucionario Institucional, nos lleva a plantear

algunos supuestos:

1) Que tienen una misma historia o las mismas raíces.

2) Que comparten una misma “ideología política”.

2) Que persiguen un fin común.

3) Que tienen una misma visión de lo que debe ser la forma de

gobernar y del futuro del país.

Estas posibles coincidencias entre personas no impide pensar en sus

diferencias, y en los conflictos que al interior del mismo partido se generan,

causando tensiones por la lucha del poder o por los recursos escasos. Como es

sabido, Beatriz Paredes presidió el Partido Revolucionario Institucional a nivel

nacional. Ha sido diputada local y federal, senadora y gobernadora de Tlaxcala

de 1987 a 1992. Pretende ofrecer una apariencia de mujer progresista, y utiliza

69

Castoriadis, Cornelius. (2007) La institución imaginaria de la sociedad. Argentina. Tusquets

Editores, p. 355.

32

una forma simbólica – y seguramente nada ingenua, de vestir. Sin embargo, sus

detractores la asocian con el ex presidente Salinas70.

Enrique Peña Nieto es el “joven y guapo” representante de un poderoso

grupo político (el grupo Atlacomulco), vinculado con los grupos económicos más

influyentes de México. Formó parte de la administración del gobernador Arturo

Montiel71, fue Titular del Ejecutivo Estatal mexiquense y candidato de su partido a

la Presidencia de la República.

Manlio Fabio Beltrones, por otro lado, es senador, ha sido diputado federal y

gobernador del Estado de Sonora. Es un influyente político sonorense, a quien se

le asocia con los viejos priístas.

Eruviel Ávila Villegas nació en el Estado de México y es hijo de un chofer de

transporte público, aunque se le relaciona con grupos políticos poderosos, tanto

del Gobierno del Estado de México, como del clero católico. Fue diputado local y

presidente municipal de Ecatepec en dos ocasiones, candidato del PRI a la

gubernatura del Estado de México durante el proceso electoral de 2011, y es el

sucesor de Enrique Peña Nieto.

Gilberto Giménez distingue las identidades individuales de las colectivas.

Por lo que hace a las primeras, señala que en la tradición sociológica, la identidad

de un individuo está definida sobre todo “por la pluralidad de sus pertenencias

sociales”, y entiende por pertenencia “la inclusión de la personalidad individual en

una colectividad hacia la cual experimenta un sentimiento de lealtad”72.

Ciertamente quienes simpatizan o militan en algún partido político muestran

sentimientos de lealtad, a veces por el líder, por el jefe inmediato o incluso por el

propio partido político, del que se sienten parte. En cierta forma, pertenecer a un

70

Beatriz Paredes Rangel ocupó la Secretaría de Acción Juvenil y después fue Secretaria General

de la Confederación Nacional Campesina. Gobernadora de Tlaxcala durante el mandato del

presidente Carlos Salinas de Gortari; y ex dirigente nacional del PRI. Paredes Rangel se ha deslindado de los señalamientos que la vinculan con el ex presidente Salinas. 71

Se llamó así a un grupo de jóvenes cuyas carreras políticas fueron impulsadas por el ex

gobernador mexiquense, Arturo Montiel Rojas. Entre ellos, destacan los nombres de Enrique Peña, Luis Miranda y Carlos Iriarte Mercado. 72

Giménez, Gilberto.(1997) Materiales para una Teoría de las Identidades Sociales. México.

UNAM, Instituto de Investigaciones Sociales.

33

partido es algo similar a la afición de quien “le va al América, o al Toluca”. Es

“ponerse la camiseta.”

Este autor cita a Alberto Melucci, y señala que, de acuerdo con este último,

la identidad comprende al menos tres elementos:

a) La percepción de su permanencia a través del tiempo, no obstante sus

variaciones.

b) La percepción de una unidad, con límites y fronteras del espacio

identitario.

c) La capacidad de reconocerse y de ser reconocido en cuanto portador de

dicha identidad.

Los elementos identitarios de percepción a los que se refiere Melucci

plantean referencias temporales y espaciales que ubican al sujeto individual o

colectivo en un momento y lugar determinados, permitiéndole adquirir una

conciencia de quién es, quién quiere ser y cómo es visto por los otros.

Giménez señala, por otro lado, que las identidades colectivas “pueden ser

vistas como ´sistemas de acción´ y no como sujetos que actúan con la unidad de

propósitos que le atribuyen sus líderes e ideólogos, e incluso sus oponentes”73.

Para él, además de las identidades de rol, están las identidades de pertenencia,

las identidades biográficas y las identidades caracteriológicas.

Estos tipos de identidades se relacionan con los grupos en los que un

individuo interactúa, los lugares en donde nace o habita, con sus características,

sociales o de género, y con su historia o biografía personal.

La biografía es justamente lo que el individuo ha hecho, cómo ha vivido, cuál

es su obra. Esto da lugar a la denominada identidad biográfica. La identidad

caracteriológica alude a los atributos que tiene el individuo, si es honesto, leal,

humanitario, institucional o progresista, por ejemplo.

73

Giménez, Gilberto, (2004) “Culturas e identidades”. Revista Mexicana de Sociología, Vol. 66,

Número especial (Oct., 2004), p. 93, Universidad Nacional Autónoma de México Disponible en: URL: http://www.jstor.org/stable/3541444

34

Esquema de los tipos de identidades, de acuerdo con el pensamiento de Gilberto Giménez Elaboración propia

En este orden de ideas, los miembros de un partido político ejercen ciertas

funciones o desempeñan roles al interior del partido (identidad de rol); son

militantes del partido o solamente fungen como miembros nominales,

manifestando lealtad a los principios, a los estatutos del partido y a su plan de

acción (identidad de pertenencia); tienen una memoria colectiva, conformada por

la historia en la que el partido ha alcanzado ciertos logros o ha sufrido derrotas

(identidad biográfica o memoria colectiva); y comparten atributos que los

identifican como miembros de ese partido y no de otro (identidad

caracteriológica).

En el campo social, los sujetos desempeñan diversos roles y expresan así

diversas identidades. La identidad tiene que ver con lo que hacemos o dejamos

de hacer. Este es el plano de lo que se conoce como identidad de rol 74. Por ello

74

Una opinión diferente sostiene Federico M. Rossi (2006), “La condición juvenil ante las

transformaciones de la sociedad”, cuando afirma: “Una de las consecuencias más importantes es el fin de las identidades “fuertes”. Las identidades sociales y políticas son cada vez más

35

se dice que alguien es o se reconoce muchas veces por lo que hace, y que existe,

por ejemplo, una diferencia entre decir que se es priísta o actuar como priísta.

Ostentarse como priísta y serlo en realidad.

Una comunidad o un grupo se identifica como tal en la medida en que

destaca diferencias frente a otros, que son ajenos a ellos, que no comparten su

estilo de vida, su ideología, sus creencias, sus principios, su color, sus prácticas.

Sergio Tamayo también nos ayuda a entender qué son las identidades

políticas. En principio, junto con Kathrin Wildner, señala que la identidad no es un

hecho observable ni un dato empírico de la realidad, sino una construcción

analítica. La identidad, continúa señalando, tiene cuatro componentes:

Esquema de los componentes identitarios, de acuerdo con el pensamiento de Sergio Tamayo Elaboración propia

El primer componente es el reconocimiento y tiene que ver con el sentido del

ser. Lo que Heidegger llama “el ser.” Sergio Tamayo lo explica de esta manera:

efímeras y parciales, más fragmentadas y menos inclusivas. Ya no es posible afirmar tan fácilmente la existencia de identidades que engloben a una multiplicidad de actores y sujetos. Es igualmente relevante, el hecho de que la identidad de los sujetos ya no es más producto de la posición en la que se encuentra en la estructura social y los roles sociales que cumple”.

36

El primer elemento de la identidad es el reconocimiento, entendido como el

sentido del ser, el concepto del yo, un proceso de autoidentificación, de

autoestima y autodeterminación, es decir, de reconocerse a sí mismo. Me

reconozco y me reconocen. Es el sentido de quién se es y cuál es la relación

de mí con los otros. Se aclara la identidad cuando se responde a las

preguntas a) ¿Quién soy?, o b) ¿Quién eres? (…)75

Para ser priísta, panista o perredista, no basta con creer y reconocer yo

mismo que lo soy, sino que es necesario que los otros me reconozcan como tal.

Por supuesto que tendré que acumular un bagaje de conocimientos, sentimientos,

experiencias y prácticas sociopolíticas que me permitan conducirme con ese

carácter, y tal vez, como ese tipo de “militante” o “simpatizante” que cada partido

político reconoce.

Yo soy alguien que puedo ser reconocido como yo, porque tengo ciertas

características que me hacen diferente de otros. La diferencia y la negación del

otro76, son condiciones que me permiten construir mi identidad.

El segundo componente al que se refiere Tamayo es la pertenencia. Para el

autor, pertenecer “significa tener el dominio de algo, incluso de uno mismo77. Es el

proceso de situarse y al mismo tiempo poseer, apropiarse de las cosas, del

espacio”78. Podríamos decirlo, en palabras de Jean Paul Sartre, el “estar en el

mundo”. Estar adentro, a un lado, arriba, abajo, afuera, me coloca en una

posición respecto del conjunto o del grupo del que deseo ser miembro, con el que

simpatizo, donde participo y del que formo parte.

De esta manera puedo ubicarme en la derecha, el centro o la izquierda.

Incluso al interior del PRI, los militantes de dicho instituto político se han

pronunciado en ocasiones a favor de alguna de estas tendencias. De este modo,

por ejemplo, un académico de la Universidad Nacional Autónoma de México, ex

75

Tamayo, Sergio y Wildner, Kathrin (Coord) (2005) Identidades urbanas. Universidad Autónoma

Metropolitana, México, p. 16-17. 76

Tamayo; Sergio. Conferencia dictada en el Seminario de la Maestría en Políticas Metropolitanas,

Universidad Autónoma Metropolitana. 8 de junio de 2010. 77

A diferencia de Castoriadis, para quien pertenecer es formar parte de un conjunto, de una

unidad, de un partido político, y de la doble significación que Sartori menciona acerca del concepto de partido, como parte y unidad al mismo tiempo. 78

Tamayo, Sergio y Kathrin Wildner (Coord) (2005) Op.cit., p. 19. Las negrillas son nuestras.

37

secretario particular de Roberto Madrazo, pre-candidato del PRI a la Presidencia

de la República; y participante en la contienda para ocupar la dirigencia nacional

del PRI durante el proceso en que resultó ganadora Beatriz Paredes, ofrecía

construir un PRI de izquierda 79.

La permanencia es el tercero de los componentes de la identidad. Esto

significa que las personas o los grupos – en nuestro caso, los jóvenes que forman

parte de un partido político – tienen ciertos rasgos que conservan en el tiempo, en

su historicidad. Ello no implica que las identidades dejen de tener un carácter

fundamentalmente dinámico y dialéctico, como señala Tamayo.

La no permanencia tiene riesgos pero también ventajas. El Partido

Revolucionario Institucional, por ejemplo, ha modificado más de diez veces sus

Declaraciones de Principios a lo largo de su historia, lo que ha llevado a

considerarlo como carente de ideología, o que se encuentra en una situación de

peligrosa anomia identitaria80. Las transformaciones ideológicas del partido dieron

lugar a modificaciones de trascendencia en el ordenamiento constitucional: de

este modo, la educación pasó de ser socialista, en el período del presidente

Lázaro Cárdenas, a democrática.

El peligro de dicha anomia es paradójico y es probable que no sea casual,

pues de este modo, el PRI se ha convertido, como otros partidos políticos

mexicanos, en un partido “cacha votos”, no importa cuál sea la ideología del

votante.

Este autor se refiere al cuarto componente de la identidad y lo denomina

vinculación. En otras palabras, el concepto de identidad es relacional. Soy yo, en

la medida en que me relaciono con los demás y por eso las identidades son

esencialmente relacionales o vinculatorias. Me veo en el espejo del otro. Aquí

radica la autopercepción y la heteropercepción, es decir, cómo me veo yo y cómo

79

Periódico La Jornada, 18 de noviembre de 2006. Me refiero al Doctor Javier Oliva Posada. 80

El dato sobre dichas modificaciones en los textos de las Declaraciones de Principios lo tomo de

Luis F. Aguilar, “En torno a la ideología del PRI”, en La Reforma del PRI y el cambio democrático en México, México, Noriega Editores, p. 233. Por otro lado, el concepto de anomia identitaria es retomado de Gilberto Giménez, en: Estudios sobre la cultura y las identidades sociales, op. cit., p. 121.

38

me ven los demás. Es justamente en el actuar con el otro, o con los otros, en

donde se construyen las identidades sociales.

Sergio Tamayo lo explica de esta manera:

Este componente de vinculación expresa con claridad el sentido de

pertenencia a un grupo, a una red o a una institución. Y también se

apropia de ideas y valores que son comunes de la colectividad. Es una

forma de integrar y asimilar, y en ese sentido hay un proceso – explícito o

implícito, dependiendo del tipo de identidad que se trate – de reproducción

de la identidad que asegura la asimilación y su mantenimiento81.

En este orden de ideas, la vinculación a un partido político se expresa a

través de prácticas que los militantes o simpatizantes realizan, pero también por

un conjunto de ideas y valores con los que esos militantes o simpatizantes

comulgan. No es lo mismo pertenecer a un partido demócrata, que a uno

nacionalista, socialista o de derecha.

Estela Serret coincide en este aspecto con Tamayo al afirmar la naturaleza

relacional o vinculatoria de las identidades, y señala:

Las identidades colectivas se edifican, lógicamente, en torno a referentes

que indican la pertenencia a grupos, definidos por oposición, exclusión o

diferencia respecto de otros colectivos. Así, por ejemplo – o más bien,

complejos de símbolos – como nación, etnia, raza, religión, o género

(femenino o masculino), funcionan como referentes de pertenencia de

colectivos, que se integran como tales gracias a la eficacia en la

interpretación de subjetividades con que operen los referentes

mencionados82

.

Los pueblos, los partidos políticos y los grupos de presión también son

referentes políticos en torno de los cuales se construyen las identidades políticas,

81

Tamayo, Sergio y Kathrin Wildner. (Coord) Op.cit., p. 21. 82

Véase el trabajo de Estela Serret. (2006) El género y lo simbólico: la constitución imaginaria de

la identidad femenina. México, Instituto de la mujer oaxaqueña, p. 49.

39

que son incluyentes y excluyentes al mismo tiempo; que generan consensos, al

igual que conflictos.

Esta situación relacional o vinculatoria al interior de las identidades y entre

ellas, puede darse de distintas formas. Es claro también que, como piensa Freud,

en una misma identidad pueden confluir y tensionarse instintos de vida y de

muerte, y en ese sentido generar identidades de uno o de otro tipo. Identidades

que construyen consensos o disensos; identidades tolerantes, democráticas, de

respeto. Identidades impersonales e imaginarias, que asumen intereses

institucionales, colectivos, o grupales y los sobreponen a los individuales, en lo

que Nagel denomina una posición impersonal.

Los componentes identitarios, tanto de reconocimiento, pertenencia,

permanencia y vinculación, se expresan como condiciones del ser y el estar, en el

tiempo y en el espacio y la relación con el otro. De aquí que la hipótesis central de

nuestro estudio esté relacionada con la condición de originario o avecindado de

jóvenes priístas, que es una manifestación del componente identitario de

pertenencia, entendido, interpretando el pensamiento de Tamayo, como las

relaciones de poder que surgen de la apropiación o ubicación respecto de la tierra

o del locus, es decir, del vínculo de propiedad o posesión de la tierra y de la

apropiación de creencias, valores, sentimientos y utopías relacionados con ese

vínculo. Los jóvenes priístas originarios de San Bartolomé son y se sienten

propietarios de su espacio o de su tierra, lo que además tiene que ver con su

pertenencia a grupos generacionales, con el tiempo en que han vivido en la

localidad, sus prácticas sociopolíticas y las relaciones que establecen con los

otros. Los avecindados de San Batolomé Coatepec, también mantienen una

relación sui generis con el espacio en que habitan y en el que se encuentran los

límites del pueblo en que se asentaron y que en muchos casos los vio nacer.

Por su parte, Simón Pachano se refiere también a la identidad y afirma:

En ese sentido, la identidad se construye como la afirmación de los

elementos que caracterizan a un grupo humano, a los cuales éste asigna

un valor fundamental para su autodefinición y considera, a la vez, como la

40

expresión de “lo normal”. Por tanto, la construcción de las identidades es

inicialmente la “afirmación” de un conjunto de condiciones o características

de un grupo social frente a otro u otros. A la vez, al ser el producto de la

interacción de grupos sociales, es preciso utilizar siempre el plural y no

hacer referencia solamente a una identidad aisladamente83

.

También la lengua es un factor que determina la identidad. Quienes hablan

alguna lengua, como los pueblos mixtecas u otomíes, desarrollaron algún tipo de

identidad. Incluso algunos dialectos propios de ciertos grupos sociales construyen

identidad, pues no son comunes a otros y se presentan como lenguajes

excluyentes: yo hablo así para que me entiendan quienes pertenecen a mi grupo,

pero no los otros. Sin embargo, no obstante que en algunos pueblos sus

habitantes han dejado de hablar su lengua, no dejan de sentirse otomíes, por

ejemplo, y de reproducir prácticas sociales propias de esa etnia y del mestizaje.

Un elemento más que conforma la identidad es la religión. El papel que

cumple la religión en la política no es menor. Basta referirse a la imagen de la

Virgen de Guadalupe o a los cargos de mayordomías como símbolos de identidad

en la cultura mexicana contemporánea y en muchos de los movimientos sociales

y políticos relevantes durante la historia de México.

Bajo este símbolo, se aglutina un conglomerado de individuos con un origen

y un destino político común. Comparten creencias, sentimientos y la esperanza de

una vida trascendente.

Las identidades se vinculan con el arraigo a un cierto territorio o localidad y

el apego a personas, objetos o costumbres84. Estas identidades obedecen a

factores tales como el lugar de nacimiento, aquél en el que se habita o en donde

se realizan actividades laborales. Alguien que nace en un pueblo de Huixquilucan,

en el Estado de México, se reconoce como oriundo de ese lugar. Se siente del

pueblo porque ahí nació y ha vivido, porque en ese lugar vivieron sus padres y

sus abuelos. Porque ahí está su tierra, su infancia y sus muertos.

83

Cfr. a Pachano, Simón (Editor). (2000) Ciudadanía e identidad. Ecuador. Facultad

Latinoamericana de Ciencias Sociales, p. 38. 84

Véase al trabajo de Portal, María Ana. (Coord) ( 2001 ) Op. Cit.

41

Esas identidades son empleadas y cultivadas con propósitos políticos. Es

más difícil hacer obedecer a alguien con pautas impuestas, que a quien cumple

pautas que le han sido internalizadas, pero que el individuo asume como propias,

creyendo que las sigue de manera consciente.

Esto mismo sucede en los ámbitos regionales: así se habla del mexiquense,

del yucateco, del guerrerense o del veracruzano, por citar algunos casos.

Pertenecer a esa comunidad identitaria favorece la cohesión, pero al mismo

tiempo resulta un eficaz mecanismo de control social85. Ser priísta supone

compromisos y lealtades hacia el partido.

Al hablar de identidad o identidades, y particularmente de identidades

políticas, es necesario hacer mención del carácter excluyente de las identidades.

Aunque debemos reflexionar hasta qué punto las identidades políticas

excluyentes son generadoras de violencia.

En el ámbito de la democracia, la inclusión del otro – como afirmara

Habermas – es al mismo tiempo un reconocimiento. Pero la inclusión del otro

lleva aparejada también la exclusión de otros y es por ello que en muchas

sociedades en las que se presenta una democracia hacia dentro, se generan

estrategias de dominación y despotismo hacia afuera, es decir, hacia los otros (el

enemigo), quienes no comparten nuestra identidad.

Aquí la idea de lo político que sostiene Carl Schmitt, al considerarla una

relación de amigo-enemigo, contrasta con la que plantea Giovanni Sartori, al

referirse a una relación de “suma cero”, en la cual no tiene que haber un ganador

o un perdedor86.

Sin embargo, el autor italiano sostiene que el concepto de poder es político,

y no ético87. Y continúa señalando: “el poder ordena; y el poder del Estado dicta

órdenes respaldadas por el monopolio legal de la fuerza”88.

85

Consúltese a Tamayo, Sergio, en Sermeño, Ángel y Estela Serret. (Coord) (2008) Tensiones

políticas de la modernidad. México. Miguel Ángel Porrúa Editor. 86

Véase a Sartori, Giovani. Teoría de la Democracia. I. El Debate Contemporáneo. Alianza

Editorial, España, 2000, p. 274-305. 87

Ibid., Para este autor: “el poder es siempre la fuerza y la capacidad de controlar a los otros –

incluyendo la fuerza de disponer de sus vidas y de sentenciarlos a muerte”. p. 52.

42

Conciliar los intereses del Estado, o de quienes controlan el aparato del

Estado con los ciudadanos, no es asunto sencillo. Es por ello que Fernando

Savater sostiene que la razón del Estado se enfrenta con la razón de los hombres

y esto es lo que convierte al Estado en un aparato indigno e irracional89.

En las relaciones de poder, la razón o las razones de los ciudadanos se

enfrentan permanentemente a las razones del Estado, o del “estado”, si se quiere

omitir el criterio valorativo del término90.

Parafraseando a Gilberto Giménez, podemos decir que las identidades

políticas son especificaciones de las identidades sociales, que consisten en la

auto percepción subjetiva que tienen de sí mismos lo actores llamados grupos

políticos91. Por ello, Giménez responde a la pregunta de ¿qué son las identidades

políticas? diciendo:

Son, ante todo, identidades colectivas orientadas a la participación directa

en el ejercicio del poder o a la intervención sobre los poderes públicos en

términos de influencia y de presión. Y las identidades colectivas, a su vez,

son el conjunto relativamente estable de rasgos distintivos por los que se

reconocen y/o son reconocidos grupos o conjuntos de individuos que

comparten representaciones socialmente construidas (creencias, valores,

símbolos…) referentes a un campo específico del espacio social y, en

consecuencia, orientaciones comunes a la acción92

.

Entendida su naturaleza colectiva, las identidades políticas se construyen con los

rasgos simbólicos de la propia cultura política. A nivel del individuo, este autor

señala:

88

Ibid., p. 232. 89

Véase a Savater, Fernando. (1984) Las razones del antimilitarismo y otras razones. España.

Editorial Anagrama, p. 213. 90

Óscar Correas discute sobre la ortografía y el sentido valorativo del “estado”. 91

Giménez, Gilberto (1994) Modernización e Identidades Sociales. UNAM, México, p. 170. El autor

señala textualmente: “La identidad étnica es una especificación de la identidad social y consiste en la autopercepción subjetiva que tienen de sí mismos los actores llamados “grupos étnicos”. Las negrillas son nuestras. 92

Giménez, Gilberto. Estudios sobre la cultura y las identidades sociales, México,

Conaculta/ITESO, 2007, p. 117.

43

la identidad política se define en términos de afiliación o pertenencia a

determinados colectivos políticos, con grados de intensidad que varían

desde la simple simpatía hasta la participación militante. Tal afiliación o

pertenencia son generadoras de solidaridad y lealtad. Se puede decir que

un individuo tiene, por ejemplo, una “identidad panista” cuando su grado

de afiliación o pertenencia a dicho partido es tal, que le confiere un

“apellido” políticamente reconocido (“es un panista de hueso colorado”),

guía en forma relativamente coherente sus opciones políticas más

relevantes y permite prever sus valores y preferencias.

Desencantados de la política institucional y de los políticos, buena parte de

los jóvenes se abstienen de participar en partidos políticos o de votar en las

elecciones. Algunos jóvenes priístas de “hueso colorado”, utilizando la

terminología de Giménez, no dudan en cubrir su anatomía cuando la oportunidad

o la coyuntura política lo exigen, vistiéndose de azul o de verde. Así se hizo con

las alianzas del PRI con partidos políticos como Nueva Alianza, o en Guerrero,

cuando el candidato priísta Manuel Añorve se vistió de verde durante su campaña

por la presidencia municipal de Acapulco.

Las identidades diferenciadas se ven resquebrajadas cuando en el

escenario político se forman alianzas partidistas sin importar la ideología de los

partidos que las integran, con el propósito de alcanzar el poder o vencer al

adversario93.

Al interior del PRI, pueden citarse casos de políticos que durante muchos

años fueron priístas, y después se convirtieron en críticos de ese partido. Algunos

partidos de oposición han entonado el canto de las sirenas para atraer a sus filas

a políticos priístas que no han sido cobijados por su partido de origen, o cuando

éste no cumple sus expectativas94.

93

La coalición que llevó a Gabino Cué, ex colaborador del entonces gobernador priísta, Diódoro

Carrasco, a la gubernatura, se llamó: “Unidos por la Paz y el Progreso”, y estuvo conformada por los partidos PAN, PRD, Convergencia y el Partido del Trabajo. 94

El 24 de febrero de 2010 se publicó en la prensa la carta que el senador Mario López Valdez

envió a Beatriz Paredes, entonces dirigente de su partido, el PRI, anunciándole su renuncia a dicho instituto político, y exponiéndole las razones por las que contendería por la gubernatura, una vez que no se había actuado de manera democrática para seleccionar al candidato, y se había desconocido la opinión de las bases. Por otro lado, cabe señalar que Ángel Aguirre Rivero fue

44

Pero las mutaciones o metamorfosis políticas no son exclusivas del priismo,

sino que están de moda en todos los partidos o son propias de identidades

políticas desechables o light.

Identidades partidistas.

El partido moderno (1915) organiza a las masas que participan en una

elección, dirigiendo de manera metódica y armónica las voluntades de sus

miembros hacia objetivos y metas prácticas idénticos95. Como afirma Sartori,

Hume hace una caracterización de los partidos políticos96 (facciones reales) en

función de los lazos que vinculan a sus integrantes, sea que se trate de intereses,

principios, o afectos97. La identidad o identificación partidista98 es un tipo de

identidad política.

Las identidades partidistas se construyen en función de lealtades,

pero también de componendas y complicidades. Algunas veces los lazos

familiares o los intereses económicos o religiosos son elementos que entrelazan a

los miembros de algunos partidos. En estos casos, los partidos políticos

adquieren más la fisonomía de facciones que de auténticos partidos políticos99.

Secretario de Desarrollo Económico, durante el gobierno de José Francisco Ruiz Massieu en el estado de Guerrero, durante el período de 1987-1993. En agosto de 2010, Aguirre renunció al PRI. 95

Michels, Robert, Los partidos políticos, op.cit., vol II, pp.155-163. 96

Sartori cita la definición de Burke de partido político: “Un partido es un cuerpo de hombres

unidos para promover, mediante su labor conjunta, el interés nacional sobre la base de algún principio particular acerca del cual todos están de acuerdo”. Giovanni Sartori (2005) Partidos y sistemas de partidos. España, Alianza Editorial, p.36. 97

Giovanni Sartori, (2005). Partidos y sistemas de partidos. España, Alianza Editorial, p. 35. 98

Moreno, Alejandro y Patricia Méndez (2006) Revista Política y gobierno. Vol. XIV, número I, 1er.

Semestre de 2007. “La identificación partidista en las elecciones presidenciales de 2000-2006 en México”. Los autores señalan: “Entendido de manera clásica como una orientación psicológica afectiva de largo plazo o duradera hacia un grupo político, específicamente un partido, el concepto de identificación partidista ha sido adaptado al análisis de las democracias nuevas (…)”, p. 46. Refiriéndose a los jóvenes, estos autores señalan: “Los jóvenes suelen tener identificaciones partidarias más débiles que los electores de mayor edad, pero éstas se van desarrollando durante la vida política del ciudadano”, p. 47. 99

Sartori, Giovanni. Op.Cit., pp. 27-37.

45

Los grupos también se forman en la comunión de intereses que tejen redes

de colaboración, de simpatía o incluso de amistad. En el ámbito de la política

suele emplearse la palabra amigo para fortalecer o comprometer la lealtad: el

amigo es aquel en quien se deposita la confianza, el que es leal, el que no

traiciona. El amigo es el incondicional, que está conmigo en las buenas y en las

malas.

Al interior del partido se construyen estas redes de “amigos”. Personas que

comparten ideales, proyectos y destinos políticos. “Nuestro amigo va a tomar

posesión como dirigente del Partido o titular de alguna dependencia, por lo que

requiere de nuestro apoyo”, es algo que es común escuchar para conseguir la

adhesión o la colaboración de alguien.

Respecto de las identidades partidistas, José Woldenberg afirma que en

todo el mundo, éstas tienen en la actualidad un carácter “poroso, debido a que las

preferencias de los electores suelen ser cambiantes100. Pero si las preferencias de

los electores son cambiantes, también lo son los intereses de los políticos en

cuanto al partido que los cobija. Así, el ex titular del Instituto Federal Electoral

advierte además que frente a las identidades políticas o partidistas se presenta el

fenómeno del pragmatismo, para el que no importa el partido o la ideología con tal

de obtener el cargo o llegar al poder. Esto se ha dado en forma reiterada en

aspirantes priístas, quienes al no ser postulados por su partido al cargo de

elección popular al que aspiran, deciden renunciar, afiliarse a otro partido o

conformar uno nuevo. Un caso ejemplificativo, es el del candidato del Partido

Acción Nacional en el proceso electoral de 2010 a la gubernatura de Veracruz,

Miguel Ángel Yunes, connotado expriísta y quien fuera cercano colaborador y

después detractor de la lideresa del magisterio, Elba Esther Gordillo.

Las identidades políticas y partidistas están estrechamente vinculadas con

la participación política. Como señala Sartori, la palabra partido tiene dos sentidos

100

Woldenberg, José. “Identidad y pragmatismo”. Periódico Reforma, 4 de marzo de 2010.

Consultado en esa fecha y disponible en: http://www.emedios.mx/testigospdfs/20100304/26bcf1-5df2b2.pdf

46

semánticos opuestos101. El vocablo partido tiene que ver con “ser parte”, es decir,

con un proceso analítico o de separación; pero también con pertenecer y

participar, es decir, con una dinámica sintética e incluyente.

Participar significa, de acuerdo con la Real Academia Española, “tomar

parte en algo, recibir una parte de algo o compartir”102. Participar políticamente se

asocia también a comprometerse103. Asumir un compromiso es empeñar la

palabra, hacer una promesa para cumplir algo o cumplirle a alguien. La

participación política que ejercen quienes pertenecen a un partido político tiene un

carácter institucional y depende del grado de democracia que se vive al interior

del mismo. Como en una relación estado-gobernado, que puede ser la de un

estado-súbdito o la de estado-ciudadano, al interior del partido se presentan

también relaciones parroquiales, autoritarias o democráticas.

En el discurso partidista se hace uso de un imaginario que congrega a los

distintos militantes y simpatizantes del partido, a fin de integrar un conglomerado

relativamente homogéneo y cohesionado. Por ello, para citar un caso, durante el

discurso del 79 Aniversario del Partido Revolucionario Institucional, la entonces

dirigente del Comité Ejecutivo Nacional, Beatriz Paredes Rangel, expresó que los

priístas de distintos niveles, desde el modesto presidente de una sección hasta el

encumbrado funcionario público priísta, habían sido convocados por los generales

Plutarco Elías Calles y Lázaro Cárdenas; y por el “amigo” Luis Donaldo Colosio;

además de que estaban “hermanados” por el sentimiento de amor a México104.

101

Sartori, Giovanni. (2005) Partidos y sistemas de partidos. España, Alianza Editorial, p. 29.

“Cuando la palabra “parte” se convierte en “partido”, disponemos pues, de un término que está sometido a dos atracciones semánticas opuestas: por una parte, la derivación de partire, dividir, y por la otra, la asociación con participar y, en consecuencia, con compartir”. 102

Diccionario de la Real Academia Española. 2009. 103 Comisión Europea [Commission des Communautés Européennes] (1991: 26-31): Les Jeunes

Europeens en 1990, Bruselas, Luxemburgo. Citado por René Bendit, “Participación social y política de los jóvenes en países de la Unión Europea”: Ponencia presentada durante la Reunión de Trabajo “Juventud” CLACSO. 1994. El autor señala: “En otras palabras, se les estaba preguntando cuáles serían las causas por las que valdría la pena comprometerse –social y/o políticamente-, lo que equivaldría a decir “participar”. 104

Discurso pronunciado por la Presidenta del Comité Ejecutivo del Partido Revolucionario

Institucional durante el Aniversario 79 del Partido. 4 de marzo de 2008. Consultado en: http://www.priguanajuato.org.mx/images/boletines/Discurso_Beatriz_Paredes_Aniversario_PRI.pdf

47

Aunque el nacionalismo dejó de ser parte del discurso, la memoria de un

pasado común y el destino del propio partido para recuperar la Presidencia de la

República, conservar las gubernaturas, las presidencias municipales, las

senadurías, diputaciones y demás espacios de poder, fortalecen los lazos de

unión y alientan la participación de los priístas. El destino del partido político

supone también la posibilidad abrir espacios políticos, cargos y prebendas. Como

lo señala Denisse Dresser:

La generosidad del Estado que con el paso del tiempo produce personas

acostumbradas a recibir en vez de participar, personas que son vasos y

tazas, ciudadanos vasija, ciudadanos olla, recipientes en vez de

participantes, resignados ante lo poco que se vacía dentro de ellos105.

Los ciudadanos conformistas, como apunta Dresser, generan políticos

mediocres, y un sistema de clientelismo, cacicazgos y patronazgos. El

clientelismo, en lugar de la participación en la vida política, permite reproducir este

juego en el que durante cada campaña los electores se saben engañados porque

reciben promesas que nunca se cumplen. ¿Cuáles son algunas de las prácticas

de participación política de los jóvenes en un partido político como el PRI?

Existen distintas formas de participar o comprometerse con un partido,

desde mostrar simpatía, afiliarse, ser militante, cuadro o dirigente del mismo. Se

puede participar asistiendo a mítines o reuniones, participando en foros de

discusión política; apoyando a los candidatos; promoviendo el voto, votando;

escribiendo o hablando a favor del partido o de sus candidatos, etc.

En la búsqueda de reconocimiento y la construcción de su propia identidad,

los jóvenes suelen incorporarse a los partidos políticos para realizar distintas

labores altruistas: desde la ayuda a comunidades con carencias económicas,

hasta la gestión de beneficios para sus colonias, pavimentación o electrificación

105

Así lo expresa Dresser, Denisse. “De la sumisión a la participación ciudadana”. Encuentro

Empresarial COPARMEX, Ciudad Juárez, 12 de octubre de 2007. Dresser señala que la insatisfacción lleva a la participación, el enojo a la contribución, el malestar con el statu quo a la necesidad de cambiarlo.”

48

de calles; instalación de servicios de agua y drenaje; mejoramiento de la

seguridad pública, entre otras.

La apertura de oportunidades de acceso a los servicios educativos o las

posibilidades de obtener un empleo remunerado o alcanzar algún cargo público,

son también algunas de las motivaciones que impulsan a los jóvenes a participar

en los partidos políticos. Algunos de estos partidos les ofrecen espacios

educativos de nivel superior, una vez que no tienen oportunidades para ingresar a

las universidades públicas o carecen de los recursos suficientes para pagar las

altas colegiaturas de las instituciones privadas de educación superior106.

Entre los intereses que tienen los jóvenes al participar en política también

está el de promover la construcción de instalaciones deportivas, canchas de futbol

o de baloncesto, por ejemplo; proteger el medio ambiente o exigir mayores

espacios en las estructuras del propio partido, y a nivel gubernamental.

Como en la identificación partidista, también la participación está asociada a

un interés por conformar redes de amigos, o por lo que Maffesoli llama “una

orientación hacia el otro”, la socialidad. Son redes de amigos que comparten

intereses comunes; que comparten una ideología, una forma de pensar o un

destino político. Comparten también emociones, sentimientos y gustos. Quienes

cooperan en las actividades políticas de un partido, en sus prácticas políticas,

pueden hacerlo en forma permanente o sólo durante los períodos electorales.

La diversidad de intereses confluye y se enfrenta al mismo tiempo, no sólo

hacia el exterior, sino entre los distintos grupos que integran un partido. Más aún,

a veces se enfrentan intereses del propio individuo y del grupo, frente a intereses

impersonales o comunitarios. Así lo plantea Thomas Nagel, cuando afirma:

Un individuo puede moverse simultáneamente por intereses personales,

que tienen que ver con su vida particular y sus particulares

preocupaciones, y por motivos impersonales que serían imparciales

106 No obstante el acceso tan limitado que tienen los jóvenes para ingresar a las universidades

públicas, y casi nulo para las universidades privadas, el Presidente de la República, el panista Felipe Calderón, los convoca a continuar con sus estudios universitarios. Mensaje de Año Nuevo transmitido por televisión, 2011.

49

respecto a cualquier persona – ya sea él mismo, sus amigos o un perfecto

extraño - 107.

No es común que se reconozcan esos intereses personales y buena parte

de quienes expresan interés por la política afirman que lo que buscan no es un

interés propio, sino el beneficio de la sociedad, de su comunidad, de su partido o

de ciertos grupos vulnerables.

Conclusiones.

Identidades políticas y cultura política son conceptos íntimamente

relacionados. El primero constituye una categoría analítica que permite delimitar,

entender y distinguir los rasgos de una categoría o grupo social, así como las

condiciones de reconocimiento, pertenencia, permanencia y vinculación que los

conforman. Las identidades políticas se construyen y deconstruyen con los rasgos

de la cultura política, entendida como un magma de signos y símbolos

compartidos en el escenario de las relaciones de poder, que conserva y altera el

orden social. La participación política y los imaginarios, se enfrentan en esa lucha

de contrarios, que como pugna entre nosotros y los otros enfrenta a adversarios y

enemigos. La cultura política está conformada por conocimientos, normas,

valoraciones y utopías relacionados con el ejercicio del poder político. En este

marco, las identidades partidistas representan un tipo de identidades políticas: por

ello los jóvenes que se identifican como priístas comparten características

comunes, que los distinguen de otros partidos políticos. A través de los elementos

teóricos que nos ofrecen las identidades políticas, es posible analizar, entender y

comprender los rasgos de carácter congnitivo, afectivo y valorativo de esos

107

Nagel, Thomas. Igualdad y parcialidad, op.cit., p. 30. Este autor señala más adelante,

distinguiendo la posición particular de la impersonal: “Estamos pues ante una consecuencia directa de lo que he considerado que es la forma adecuada de identificación imaginaria con los puntos de vista de los demás, cuando reconocemos su importancia desde la posición impersonal”, p. 74. Las negrillas son nuestras.

50

jóvenes, cómo se ven a ellos mismos, cómo ven a los otros y cómo son vistos por

quienes son diferentes.

Las identidades partidistas se conforman por dimensiones subjetivas

interdependientes que están asociadas a la cultura política. Estas dimensiones

tienen que ver con prácticas sociales que se manifiestan en forma individual o

colectiva (ámbito personal), con un contenido determinado y niveles de intensidad

diversos (ámbito material), en un espacio (ámbito espacial), y tiempo (ámbito

temporal), precisos. Estas prácticas sociales están determinadas por

manifestaciones conductuales, afectivas, cognitivas y valorativas. Esto puede

representarse de la siguiente manera:

ESPACIAL

TEMPORAL PERSONAL

MATERIAL

ELEMENTOS COGNOSCITIVOS

ELEMENTOS VALORATIVOS

ELEMENTOS AFECTIVOS

ELEMENTOS AFECTIVOS

ELEMENTOS CONDUCTUALES

IDENTIDADES

POLÍTICAS

Esquema de las dimensiones identitarias Elaboración propia

51

De acuerdo con este modelo, los componentes identitarios de

reconocimiento, pertenencia, permanencia y vinculación, que conforman las

identidades políticas de jóvenes priístas de San Bartolomé, se expresan en un

contexto de dimensiones espaciales, temporales y ocasionales determinado; de

manera individual y colectiva; a través de prácticas diversas que tienen que ver

con su militancia o con la simpatía hacia el partido, con su historia o con su

ideología partidista.

Los elementos cognitivos se determinan por el bagaje de datos que los

jóvenes tienen del partido, de sus integrantes, de su organización y

funcionamiento; los conductuales, por el tipo de prácticas que desempeñan tanto

al interior como al exterior del partido; los valorativos, se asocian a la percepción

acerca del partido y los lazos que unen o distancian a sus integrantes: este es el

caso de valores como la honestidad, la solidaridad o la lealtad; y los afectivos, con

aquellos sentimientos que despierta en ellos cada uno de los componentes de la

identidad, y que pueden ser de orgullo, de seguridad, de culpa o de vergüenza,

por ejemplo.

52

Capítulo II

Las juventudes priístas y la política en México

Introducción.

Desde 1939, con la creación de la Confederación de Jóvenes Mexicanos,

el Partido de la Revolución Mexicana, precursor del PRI, entendió la conveniencia

de emplear un discurso populista para captar la simpatía o adhesión de un sector

numeroso de la población: los jóvenes.

Paradójicamente, desde entonces y hasta el día de hoy, las oportunidades

que les brinda ese instituto político son escasas, lo mismo que las políticas que el

aparato gubernamental ofrece para ellos. Muy pocas oportunidades de acceso a

las universidades públicas, a empleos, centros de salud y deporte. El abismo que

separa las campañas electorales, llenas de promesas de los aspirantes a un

cargo de elección popular, y la realidad de sus actos de gobierno, es enorme.

Esta es una de las razones que ha propiciado la apatía de muchos jóvenes

para participar en un partido político como el PRI; y ha generado también un alto

nivel de desconfianza en los partidos políticos: de acuerdo con la Encuesta

Nacional de Valores 2008, siete de cada diez personas manifestaba poca o

ninguna confianza en los partidos políticos.

En el Estado de México, el PRI diseñó una estrategia electoral en el que

ofreció la “renovación” del partido, con candidatos jóvenes, empezando por el

candidato a Gobernador, Enrique Peña Nieto. En la estructura del partido,

organizaciones políticas juveniles, como la de mujeres jóvenes priístas, el Frente

Juvenil Revolucionario, Juventud Popular Revolucionaria, y Vanguardia Juvenil

Agrarista, impulsan a jóvenes priístas para escalar posiciones políticas.

La falta de representatividad política que perciben, no sólo los jóvenes, sino

muchos otros grupos de la población, se traduce en altos índices de

abstencionismo que benefician en última instancia a los partidos políticos que

mantienen el poder. A nivel nacional, en el Estado de México, Huixquilucan y

53

particularmente en San Bartolomé, el PRI continúa siendo la principal fuerza

política, aún cuando los recursos que emplea para mantener su posición estén en

entredicho, en cuanto a su carácter legítimo.

La cultura política en México: El contexto nacional.

Hablar del avance o mejoramiento de la cultura política es uno de los

principios que caracterizan a los sistemas políticos como el nuestro, que se

ostentan como democráticos.

En la década de los sesenta, el estudio realizado en México por Powel

Almond y Pye Verba reflejaba que una buena parte de los mexicanos

consideraban que vivían en una democracia, aun cuando el PRI mantenía un

régimen hegemónico. Identificado con los colores patrios, el Partido

Revolucionario Institucional obtenía el voto de las mayorías. “Voto porque soy

priísta, porque soy mexicano”108. A ello se sumaba la convicción de que

solamente el PRI tenía posibilidades de ganar las elecciones, y que los demás

partidos políticos le hacían comparsa.

La percepción que a nivel nacional se tiene acerca de la política – al menos

de lo que podría llamarse “la política institucional” y de los políticos, no es la

mejor. De acuerdo con los datos que arrojó la Tercera Encuesta Nacional sobre

Cultura Política y Prácticas Ciudadanas (2005) realizada por la Secretaría de

Gobernación, existe en México un amplio desinterés ciudadano por la vida

política. Nueve de cada diez entrevistados señalaron estar “poco o nada

interesados” en ella. Sin embargo, en esta misma encuesta se preguntó qué tan

necesarios son los partidos políticos para que el país mejore, y cuatro de cada

diez personas contestaron que son poco necesarios (42%), uno de cada diez

señaló que nada necesarios (13%), y casi cuatro (3.8) de cada diez, es decir, el

38%, manifestó que son muy necesarios109. Esta cifra contrasta, sin embargo, con

108

Durán Ponte, Víctor Manuel. Op. Cit., p. 199. 109

Tercera Encuesta Nacional sobre Cultura y Prácticas Ciudadanas (2005). Secretaría de

Gobernación. http://www.encup.gob.mx/encup/

54

la que presenta Denisse Dresser, cuando afirma que únicamente el cuatro por

ciento de la población confía en los partidos políticos110.

El desinterés por la política “institucional” y la desconfianza en los políticos

son expresiones que se manifiestan particularmente en los jóvenes111. Datos de la

Encuesta Nacional de la Juventud (2005) realizada por el Instituto Mexicano de la

Juventud, refieren que entre los jóvenes de 12 a 29 años de edad, el 44.5% de los

encuestados señaló que no simpatizaba con ningún partido político.

Sólo un 19.8% de los encuestados contestó que simpatizaba con el Partido

Revolucionario Institucional, el 17.4% con el Partido Acción Nacional y el 12.0%

con el Partido de la Revolución Democrática.

Estos resultados sufrieron una ligera variación tratándose de la zona centro

del país. En esta zona, el 45.7% señaló que no simpatizaba con ningún partido

político, pero el 16.3% expresó su simpatía con el PRI, el 16.6% con el PAN, y el

17.4% con el PRD112.

A la pregunta de si el joven se consideraba priísta, panista o perredista, a

nivel nacional el 45.0% contestó que no se consideraba de ninguna filiación, y

sólo el 6.5% se consideró muy priísta y el 11.2% poco priísta.

De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional sobre Cultura Política y

Prácticas Ciudadanas (ENCUP) 2008, sólo un 23% de los ciudadanos

encuestados en México afirmaron confiar “mucho” o “algo” en los partidos

políticos, en tanto que este porcentaje fue del 72% tratándose de la Iglesia, y de

66% tratándose del Ejército. El decremento que se registró respecto de la

confianza en los partidos políticos fue del 10%, comparando la cifra con la de la

Encuesta Nacional de Valores 2005.

110

El Sol de México, 4 de marzo de 2010. Síntesis informativa del Partido Revolucionario

Institucional. 111

Según datos del Programa Nacional de Población 2008-2012 (p.35), en México existe una

población aproximada de 20.2 millones de jóvenes, cifra que tenderá a decrecer, ubicándose en

14.1 millones hacia el 2050. 112

Fuente: IMJ-CIEJ, Encuesta Nacional de Juventud 2005, México, 2006.

http://www.jovenes.df.gob.mx/biblioInfo.php

55

En esta misma encuesta de 2008, alrededor de un tercio de la población

señaló interesarse mucho o algo en la política y la mayoría de los ciudadanos

mexicanos (siete de cada diez) expresó tener poca o ninguna confianza en los

partidos políticos113.

Como destaca Maricela Portillo, los jóvenes:

(…) perciben esta falta de representatividad política y manifiestan su

malestar en una aparente apatía del mundo de la política que

sistemáticamente los excluye y con el cual no se sienten identificados. Se

convierten en uno de los públicos objetivo de los partidos políticos

en los tiempos de campañas electorales; en esos momentos los

políticos apelan a la juventud particularmente para pedirles su voto.

Consecuencia de esta práctica utilitaria, los jóvenes han aprendido a

sostener una relación instrumentalista con el poder: qué quieres que te

dé, qué me das a cambio114

.

Paradójicamente, algunos estudios registran la participación de los jóvenes

en movimientos sociales de apoyo a los grupos indígenas, en contra de la

globalización o a favor de la paz o de la conservación del ambiente, expresando

con ello su interés en formas distintas de entender la política115. Grupos de

jóvenes han mostrado su solidaridad y participaron en marchas con movimientos

sindicales, apoyando al Sindicato Mexicano de Electricistas, por ejemplo.

De acuerdo con cifras del Instituto Federal Electoral, para las elecciones

del 2006 el padrón estaba conformado por 71, 758,545 ciudadanos. De la cifra de

113

Dicho de otra manera, el 60 por ciento de los ciudadanos expresó tener poco o ningún interés

por la política. No obstante lo anterior, dos de cada tres ciudadanos creen que los partidos políticos tienen mucho o algo de poder para transformar las cosas en México. Únicamente el siete por ciento de los ciudadanos afirmó formar parte o haber formado parte de algún partido político. Seis de cada diez ciudadanos mexicanos que ya contaban con 18 años o más en el año 2000 señaló haber votado en todas las elecciones federales y locales que se han organizado desde entonces. El interés por la política es bajo, pero parece ser aún menor entre las mujeres. ENCUP 2008. 114

Portillo, Maricela. “Juventud y política. Representaciones en el discurso de los jóvenes de la

Ciudad de México”. Revista de Estudios sobre Juventud. Op. Cit., p.222 115

Aguilera Ruiz, Óscar,“Un modelo (transocéanico) por armar. Algunas hipótesis sobre el vínculo

entre juventud y política”. Revista de Estudios sobre Juventud. Julio-diciembre de 2003. Centro de Investigación y Estudios sobre Juventud. Instituto Mexicano de la Juventud. México, pp. 64-81.

56

ciudadanos que votaron en esa elección, el 45.2% estaba conformado por

jóvenes de 17 a 34 años116.

En junio de 2006, según algunas empresas encuestadoras, el 36% de los

jóvenes entre 18 y 29 años expresaron su simpatía por el candidato presidencial

del PAN, en tanto que un 31% lo hizo por el del PRD y sólo un 23% por el del

PRI117. Estas cifras muestran hasta qué punto el PRI perdió simpatizantes entre

las juventudes y explican al mismo tiempo, por qué ha venido adoptando medidas

proselitistas o clientelares para recuperar a este sector del electorado.

El mapa electoral.

El Partido Revolucionario Institucional es la fuerza política más importante

en el país: gobierna en 20 entidades federativas, mientras que el Partido Acción

Nacional gobierna en cinco entidades federativas, el Partido de la Revolución

Democrática en cuatro; y la alianza del PAN-PRD en tres. De acuerdo con datos

del propio partido, el PRI gobierna el 59 por ciento de la población total del país y

es mayoría en 19 de los 32 congresos locales118.

En 2009 el PRI recuperó las gubernaturas de Querétaro y Nuevo León119.

En 2010 se celebraron comicios para elegir gobernadores en once estados de la

república: Aguascalientes, Chihuahua, Durango, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo,

116

Cuna Pérez, Enrique,(2007) “Democracia electoral y participación política juvenil. Análisis de la

propuesta partidista dirigida a los jóvenes en las elecciones presidenciales de 2006”, Revista El Cotidiano, Universidad Autónoma Metropolitana, Vol. 22, número 145. El autor destaca cómo, según algunos analistas, la participación de los jóvenes fue determinante en las elecciones del 2000 para que el Partido Acción Nacional obtuviera el triunfo. 117

Ibid. 118

El PRI gobierna en los estados de Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León,

Tamaulipas, Durango, Tlaxcala, Nayarit, San Luis Potosí, Veracruz, Hidalgo, Querétaro, Colima, México, Tabasco, Campeche, Yucatán, Quintana Roo y Zacatecas. El PAN gobierna en Baja California, Baja California Sur, Jalisco, Guanajuato y Morelos. El PRD gobierna los estados de Chiapas, Guerrero, Michoacán y el Distrito Federal. La alianza PAN-PRD gobierna en Oaxaca, Puebla y San Luis Potosí. Datos de abril de 2012. En julio de 2012 se celebraron elecciones para gobernador en seis entidades federativas: Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Tabasco y Yucatán: en ellas, el PRI pierde Tabasco, pero gana en Chiapas y en Yucatán, con lo que, al mes de septiembre de 2012, incrementó a 20 el número de entidades federativas en las que gobierna. 119

Ver cuadro en el Anexo.

57

Sinaloa, Tlaxcala, Tamaulipas, Veracruz y Zacatecas. El PRI ganó en ocho

entidades, en alianza con otros partidos, mientras que en Oaxaca, Puebla y

Sinaloa, ganaron las elecciones alianzas de partidos tan disímbolos como el PAN,

PRD, PT, Convergencia y Nueva Alianza.

En 2011 se celebraron elecciones en Guerrero (30 de enero), en donde el

PRD conservó la gubernatura; Baja California Sur (6 de febrero), que ganó el

PAN; Hidalgo, Coahuila, Estado de México y Nayarit (3 de julio), que ganó el PRI;

y Michoacán (13 de noviembre)120, en donde obtuvo el triunfo el PRD.

En los últimos años se han generado diversos procesos de alternancia, en

donde un partido político ha perdido el poder en el gobierno estatal o lo ha

recuperado. Tal es el caso de los estados de Aguascalientes, Oaxaca, Querétaro,

Puebla, Nuevo León, Tlaxcala, San Luis Potosí, Sinaloa y Zacatecas.

Frente a este escenario, la sombra de posibles alianzas sobre todo entre el

PAN y el PRD generó desconfianza en los políticos priístas, y el temor de que los

resultados en Guerrero, Oaxaca, Puebla, y Sinaloa pudieran multiplicarse o

proyectarse en el Estado de México y en las elecciones federales de 2012.

El Estado de México.

El desencanto de la ciudadanía por participar en los procesos electorales

es un fenómeno nacional en el que también el Estado de México está inmerso.

Datos recientes permiten avalar esta afirmación, pues durante la sesión de

apertura del Proceso Electoral 2009 en dicha entidad federativa, el Consejero

Presidente del Instituto Electoral del Estado de México señaló que “la paradoja

por superar es la de organizar elecciones sumamente costosas para 10 millones

120

http://www.laeconomia.com.mx/calendario-electoral-2011/ Consultado en diciembre de 2010.

58

de electores en tiempos donde la crisis económica es inminente y sólo alcanzar 6

millones de votos o menos”121.

A pesar de que en las elecciones del 2006 el PRI ganó en 54

ayuntamientos, de acuerdo con cifras del Instituto Electoral del Estado de México,

el Partido Acción Nacional, que obtuvo el triunfo en 24 ayuntamientos, fue el

partido que hasta julio de 2009 gobernaba a la mayoría de la población

(4,236,252), lo que representaba el 28.73% del total. También a esa fecha, el PRI

gobernaba a 3,718,566, es decir, el 25.06%, y el PRD a 3,442,466, esto es, al

23.20% del total de la población122.

A nivel estatal, es importante destacar que, de la lista nominal de electores,

que en el 2006 ascendió a 9,014,847 ciudadanos, el 31.52 % estuvo conformado

por jóvenes, de entre 18 y 29 años123, mientras que el 45.87% por ciudadanos

entre 30 y 49 años, y sólo el 22.60% por ciudadanos de más de 50 años.

Si bien es cierto que el porcentaje de jóvenes que integraba la lista nominal

de electores era elevado, es necesario considerar que una buena parte de ese

porcentaje de jóvenes, como del total de la población que integra dicha lista

nominal, aun cuando tienen la capacidad de votar y cuentan con su credencial de

elector, no votan y tampoco participan en la vida política institucional de su

comunidad. En 1995, la edad promedio en el Estado de México era de 24.78

años, se estima que ascendió a 28.6 en 2008 y será de 36.2 en 2030124.

121

Milenio, 2 de enero de 2009. http://impreso.milenio.com/node/8515358 , consultado el 29 de

enero de 2009. De acuerdo con datos del Instituto Electoral del Estado de México, a fines del 2008 el padrón electoral (personas en edad de votar) en la entidad ascendía a 10 millones 66 mil 521 ciudadanos, en tanto que la lista nominal (que considera a las personas que tienen credencial para votar) alcanzaba alrededor de 9 millones 692 mil 703 ciudadanos. Boletín 007, IEEM, 15 de enero de 2009. 122

Instituto Electoral del Estado de México. Análisis de Resultados Electorales. (2006)

http://www.ieem.org.mx/pdf/carpeta/are05_06.pdf 123

Aun cuando existen diversos criterios para caracterizar a la juventud, en este trabajo

consideraremos a los jóvenes en este rango de edades, pues es a partir de los 18 años cuando cuentan con la capacidad para votar. El Programa Nacional de Población 2008-2012, considera a los grupos de 15 a 19 y de 20 a 24 años de edad como adolescentes y jóvenes, por ejemplo. 124

Navarrete López, Emma Liliana, en “La juventud en el Estado de México. Una visión

sociodemográfica a partir de la Encuesta Nacional de Empleo de 1988.” El Colegio Mexiquense, 2000, señalaba que “el Estado de México “está formado por una población predominantemente joven” (p. 4), aunque hay una tendencia hacia el envejecimiento, pues según algunas

59

A pesar del discurso a favor de los jóvenes, durante la campaña electoral

del 2009, de los 125 candidatos priístas para ocupar las presidencias municipales,

únicamente catorce fueron jóvenes (hasta treinta y cinco años), y de esos catorce,

sólo tres mujeres jóvenes. Es importante destacar que tan sólo un 10% del total,

es decir, únicamente 15 candidatas del PRI a presidentes municipales, fueron

mujeres.

De los candidatos a diputados locales, sólo cinco fueron menores de 35

años. Cuatro, del total de 45 candidatos a diputados fueron mujeres, pero ninguna

de ellas joven. En la lista de los 40 candidatos a diputados federales hubo sólo

cuatro mujeres; siete jóvenes, dos de ellas mujeres. Con todo, en las elecciones

locales del 5 de julio de 2009, el PRI, en alianza con otros partidos (PVEM-NA-

PSD-PFD), ganó 97 de los 125 municipios que conforman la entidad.

Antecedentes históricos de las juventudes priístas.

En 1929, a instancias del presidente Plutarco Elías Calles, se creó un

partido político con el nombre de Partido Nacional Revolucionario (PNR), como

amalgama de partidos y grupos políticos regionales. En 1938 el PNR se

transformó en Partido de la Revolución Mexicana (PRM); y en 1946 se constituyó

con el nombre que actualmente tiene: el Partido Revolucionario Institucional.

Desde su fundación, el partido ha estado conformado por los sectores

agrario, obrero y popular. Durante el gobierno de Lázaro Cárdenas y en el marco

de la consolidación del sector obrero y campesino al interior del partido, para

promover la participación de los jóvenes se creó en 1939 la Confederación de

Jóvenes Mexicanos, que dirigía el tabasqueño Carlos Alberto Madrazo Becerra125.

estimaciones, el promedio de edad en la entidad se incrementará de 28.6 años en 2008, a 36.2 años en 2030. 125

Discurso pronunciado por Alejandro Moreno Cárdenas, Presidente del Frente Juvenil

Revolucionario, con motivo del XXX aniversario de la autonomía de esa organización juvenil del Partido, el día 4 de marzo de 2003, en la Ciudad de Pachuca, Hidalgo. La República, Revista del Partido Revolucionario Institucional. http://www.fjr-hidalgo.org.mx/DOCS/Historia_FJR.pdf, consultado: Julio de 2009.

60

Madrazo perteneció a la organización paramilitar denominada “Camisas

Rojas”, fundada y dirigida por el entonces gobernador de Tabasco, Tomás Garrido

Canabal, que operó desde 1930 con grupos de choque en contra de sacerdotes y

grupos católicos126.

En 1947 se creó al interior del partido la Dirección Nacional Juvenil con el

propósito de impulsar la formación de los jóvenes priístas. A instancias de Jesús

Reyes Heroles, el 4 de marzo de 1973 se creó el Movimiento Nacional de la

Juventud Revolucionaria, como una organización autónoma.

En 1980 el Movimiento se transformó en el Frente Juvenil Revolucionario.

En el ámbito normativo, y de acuerdo con lo dispuesto en el artículo tercero de

sus Estatutos, “el PRI impulsa la participación ciudadana a través de grupos y

organizaciones constituidos por jóvenes”. De este modo, el artículo 3o. de sus

Estatutos señala:

Artículo 3.- El PRI impulsa la participación ciudadana que se expresa en la

diversidad social de la nación mexicana con la presencia predominante y

activa de las clases mayoritarias, urbanas y rurales, que viven de su

trabajo, manual e intelectual, y de los grupos y organizaciones constituidos

por jóvenes, hombres, mujeres, adultos mayores, personas con

discapacidad y pueblos y comunidades indígenas cuya acción política y

social permanente, fortalece las bases sociales del Estado Mexicano127.

126

En 1934 los “Camisas Rojas”, cuyo dirigente era Tomás Garrido Canabal, dispararon en las

afueras del templo de San Juan Bautista en Coyoacan contra la joven María de la Luz Cirenia Camacho González, de 27 años, y líder de Acción Católica, causándole la muerte. Formaban parte de los “Camisas Rojas” jóvenes varones de 15 a 30 años de edad, que vestían camisas de ese color, pantalones negros y cascos militares negros y rojos. http://www.elporvenir.com.mx/notas.asp?nota_id=32620 11 de octubre de 2005. Consulta: Julio de 2009. Revisar: Confederación de Estudiantes Socialistas de México y Confederación de Jóvenes Mexicanos. Revisar: Rogelio Hernández. La Historia Moderna del PRI. Entre autonomía y sometimiento. El Colegio de México. www.revistas.colmex.mx/revistas/7/art_7_902_6166.pdf

127 Artículo 3o., Estatutos del PRI aprobados en la XX Asamblea Nacional Ordinaria. Por otra parte,

los artículos 43 y 44 de esos mismos Estatutos mencionan que el Frente Juvenil Revolucionario, tiene como fines: “acceder a cargos de dirigencia y de elección popular” e “impulsar la participación de un mayor número de jóvenes al Partido y sus tareas políticas”, entre otros.

61

A fines de los ochenta el PRI comenzó una etapa en la que se generaron

divisiones al interior del partido. Una de estas fracturas propició la salida de los

miembros de la Corriente Democrática, durante el gobierno de Miguel de la

Madrid, que posteriormente dio paso a la creación del Frente Democrático, que

lanzó la candidatura de Cuauhtémoc Cárdenas a la Presidencia de la República.

Las voces de que Cárdenas habría ganado la elección fueron silenciadas a través

de la llamada “caída del sistema”, que operó el entonces Secretario de

Gobernación, Manuel Bartlett.

En 1994 el PRI, comandado por el Titular del Ejecutivo Federal, Carlos

Salinas de Gortari, propuso a Luis Donaldo Colosio como candidato a la

Presidencia de la República. Colosio había sido Secretario de Desarrollo Social

durante el gobierno de Salinas y principal operador del Programa Nacional

Solidaridad (PRONASOL), uno de los programas sociales más importantes. A

principios de marzo de 1994, la campaña de Colosio no encendía en el ánimo del

electorado, más preocupado por la guerra de Chiapas y la actuación del

Comisionado para la Paz, Manuel Camacho Solís. El discurso del 6 de marzo,

pronunciado por Colosio, tenía el propósito de marcar una distancia con el

Presidente de la República y ganar adeptos para la elección de agosto de ese

año. Sin embargo, Colosio fue asesinado el 21 de marzo de 1994.

Pocos meses después, en septiembre, el entonces Secretario General del

PRI, y quien había sido Gobernador del Estado de Guerrero y profesor

universitario, José Francisco Ruiz Massieu, también fue asesinado. Ruiz Massieu

fue impulsor de lo que él llamaba la “nueva clase política”, y escribió, pocos días

antes del homicidio del que fue objeto, a propósito de la muerte de

Colosio: “Pobre Luis Donaldo, pobre de mí, pobres de todos nosotros”.

Con esas palabras, Ruiz Massieu no sólo pronosticó su propia muerte sino el

futuro de su partido. Sin embargo, el derroche de recursos para apoyar la

campaña del sucesor de Colosio, Ernesto Zedillo Ponce de León, y las

componendas políticas con el Partido Acción Nacional, permitieron al PRI ganar la

elección de agosto de 1994 para la Presidencia de la República. Esto no obstante

que meses antes, el candidato panista, Diego Fernández de Ceballos, había

62

ganado un debate transmitido en la televisión frente a los candidatos del PRI y del

PRD.

Para la elección de 2000, el PRI diseñó un proceso de selección interna para

definir quién sería su candidato a la Presidencia de la República. En este proceso

se enfrentaron el ex secretario de Gobernación, Francisco Labastida Ochoa, y el

ex gobernador de Tabasco, Roberto Madrazo Pintado. La confrontación entre

Labastida y Madrazo desgastó a ambos precandidatos, aunque el triunfador del

proceso de selección fue Labastida.

Aun cuando muchos priístas que participaban en la campaña presidencial

estaban convencidos de que Labastida ganaría la elección y pocos pensaban que

el PRI y el gobierno cedería el paso a la alternancia, el mismo día de la votación

el Presidente de la República, y luego el presidente del Instituto Federal Electoral,

anunciaron la derrota del hasta entonces hegemónico partido. El anuncio cayó

como balde de agua fría para los priístas y sobre todo para el propio Francisco

Labastida, quien no pudo ocultar su cara desencajada ante los medios de

comunicación cuando supo que había perdido la elección.

Un caso sonado del malestar priísta después de la elección, fue el de

Eduardo Andrade Sánchez128, quien se presentó en el noticiero nocturno de

Televisa en estado de ebriedad, luego de conocer los resultados que dieron el

triunfo al candidato del Partido Acción Nacional, Vicente Fox Quesada.

En 2006 el PRI tuvo una gris participación en la elección presidencial, con

Roberto Madrazo como candidato, alcanzando el tercer lugar, y menos del 23 por

ciento de la votación, muy por debajo de los candidatos del PAN y del PRD,

Felipe Calderón y Andrés Manuel López Obrador.

Ya con el carácter de partido de oposición, el PRI tuvo que adaptarse a una

nueva realidad, pues no contó con la figura del Presidente de la República para

dirigir sus destinos. Acorde con los contenidos de sus Estatutos, durante el

Discurso del Aniversario 79 del Partido Revolucionario Institucional, la entonces

128

Después una larga trayectoria como militante priísta, diputado y senador de la República,

Eduardo Andrade renunció a su partido en febrero de 2006, con motivo de diferencias con Roberto Madrazo. En 2008 se reincorporó al PRI.

63

Presidenta del Comité Ejecutivo de dicho Instituto Político, Beatriz Paredes

Rangel, señaló: “Involucrar a los jóvenes en el PRI, respaldarlos en sus propias

expresiones de participación es primera prioridad para nuestro Partido. (…) Es la

hora de la responsabilidad con México, y, particularmente, con las nuevas

generaciones”.

Sin embargo, mientras en sus discursos los políticos priístas destacan la

importancia de las juventudes y su compromiso con las nuevas generaciones, las

prácticas mantienen obstáculos para esos jóvenes, a quienes sólo se utiliza en las

campañas para conseguir su voto. La responsabilidad con las nuevas

generaciones no se traduce ni en oportunidades educativas, ni en empleos, ni en

campos deportivos o centros de recreación. No se traduce tampoco en mayores

oportunidades de participación política, cargos públicos, partidistas o de elección

popular.

En 2011, el Comité Ejecutivo Nacional del PRI contaba con dieciocho

Secretarías129, de las cuales sólo una se encargaba en forma directa de la

juventud. El titular de la Secretaría de Asuntos de la Juventud, Carlos Corona

Martín del Campo, presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios

durante el período 2004-2007, en entrevista periodística señaló, respecto de la

participación de los jóvenes en su partido:

El partido se está renovando y afortunadamente cambió ya la vieja

perspectiva de que edad representaba necesariamente experiencia y

capacidad. Afortunadamente las nuevas generaciones que nos hemos

formado académica y políticamente hoy estamos recibiendo confianza de

nuestra dirigencia y esto sin duda alguna alienta a las nuevas

generaciones del partido para seguirse formando, preparando, para seguir

129

Secretaría General, Secretaría de Organización, Secretaría de Organización, Secretaría de

Acción Electoral, Secretaría de Estrategia, Información y Propaganda, Secretaría de Gestión

Social, Secretaría de Finanzas, Secretaría de Administración, Secretaría de Acción Indígena,

Secretaría de Relaciones Académicas, Secretaría del Deporte y Relaciones con Organizaciones

Deportivas, Secretaría de Asuntos de Personas con Discapacidad, Secretaría de Asuntos de los

Adultos Mayores, Secretaría del Medio Ambiente, Secretaría de Asuntos de la Juventud,

Secretaría de Promoción Cultural, Secretaría de Salud, Secretaría de Asuntos y Desarrollo

Metropolitano.

64

adelante, sabedores de que el partido cambia, se renueva y abre las

puertas130.

Los cambios, la renovación y la política de puertas abiertas del PRI, no ha

impedido que muchos viejos priístas continúen en la cúpula, ejerciendo el poder y

tomando decisiones.

En la Secretaría General del CEN del PRI, por ejemplo, Jesús Murillo Karam,

quien ocupó la sub secretaría de Seguridad Pública y de Gobernación, ex

gobernador del estado de Hidalgo, nació en Mineral del Monte, Hidalgo, el dos de

marzo de 1948, por lo que a la fecha en que estas líneas se escriben, tiene

sesenta y dos años131. Jesús Kumate Rodríguez, Secretario de Salud del CEN del

PRI, nació en Mazatlán, Sinaloa, el 12 de noviembre de 1924 y fungió como

secretario de Salud durante el gobierno de Salinas de Gortari (1988-1994); en

2011, el doctor Kumate cumplió ochenta y siete años132.

Por otra parte, Carlos Rojas Gutiérrez, secretario de Asuntos Metropolitanos,

nació el cuatro de noviembre de 1954, por lo que cuenta con cincuenta y seis

años. Fue senador, diputado y Secretario de Desarrollo Social durante los

gobiernos de Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo133.

En otras carteras encontramos a la diputada Graciela Ortiz González, quien

nació el 29 de noviembre de 1954134; a Eduardo Cayetano García Puebla; al

diputado Javier Guerrero García, nacido el 20 de octubre de 1958135; a Guillermo

Hopkins Gámez, quien nació el 26 de noviembre de 1954136; a Ernesto Enríquez

Rubio; a Xóchitl Molina González; a Arquímedes Oramas Vargas, nacido el 16 de

junio de 1963; y a Norma Enriqueta Basilio Sotelo, nacida el 15 de julio de 1948.

130

Semanario Crítica.5 de febrero de 2010. Disponible en:

http://www.semanariocritica.com/notas/2010/Febrero/189/carlos.html 131

Montoya, Alberto, Historia del PRI en Hidalgo. Consulta realizada en marzo de 2010. Disponible

en: http://pri-hidalgo.org.mx/home/images/stories/imagenes/historia-CDE.pdf 132

http://amcath.ccadet.unam.mx/archivos/kumate.pdf Datos de 2010. 133

http://sil.gobernacion.gob.mx/Librerias/pp_PerfilLegislador.php?Referencia=2300371 134

http://sil.gobernacion.gob.mx/Librerias/pp_PerfilLegislador.php?Referencia=2306515 135

http://sil.gobernacion.gob.mx/Librerias/pp_PerfilLegislador.php?Referencia=2300454 136

http://sil.gobernacion.gob.mx/Librerias/pp_PerfilLegislador.php?SID=&Referencia=600

65

A nivel local, el Comité Directivo Estatal del PRI estaba integrado de

manera acorde con la imagen que pretendía mostrar el Gobierno del Estado, con

un gobernador “joven” como Enrique Peña Nieto. Desde el Presidente del Comité

Directivo Estatal, Ricardo Aguilar Castillo, la mayoría de los rostros reflejaban más

juventud que experiencia.

El entonces dirigente estatal del PRI, en entrevista a un periódico local,

señaló, cuando le preguntaron quiénes son los priístas:

Somos un partido que nace de la Revolución Mexicana, que sostiene los

principios de libertad, igualdad, soberanía popular y democracia con

justicia social. Nuestras raíces nos sirven actualmente para erigirnos como

partido de la estabilidad política, como el partido de la paz social, como el

partido que le dio autoridad y respetabilidad al Estado mexicano, como el

partido que hizo suyo el proyecto de Nación plasmado en la Constitución

Política de los Estados Unidos Mexicanos137.

En el contenido de esta declaración se observa cómo los priístas se ven a

ellos mismos, o cómo quisieran ser vistos por los otros. El PRI es un partido con

raíces en la Revolución Mexicana. Es el partido de la estabilidad política, de la

paz social, según el dicho del dirigente estatal de ese instituto político.

A la fecha en que estas líneas se escriben, el Comité Directivo Estatal del

PRI en el Estado de México, está conformado por las siguientes Secretarías:

Secretaría General: Yetzabel Ximénez Esparza

Secretaría de Organización: Juan Manuel Martínez Nava

Secretaría de Acción Electoral: Enrique Martínez Orta Flores

Secretaría de Administración y Finanzas: Luis Vega Aguilar

Secretaría del Programa de Acción y Gestión Social: Leticia Calderón Ramírez

Secretaría de Asuntos de Gobierno y Legislativos: Edgardo Rebollar Pérez

Secretaría de Acción Indígena: Rafael Díaz Bermudez

Secretaría de Cultura: Francisco Javier Estrada Arriaga

137

Aguilar Castillo, Ricardo, Ponencia sobre Liderazgo Juvenil presentada en el Instituto

Tecnológico de Monterrey, Campus Estado de México, 20 de febrero de 2009.

66

Secretaría del Deporte: Mario Gil Hernández

Secretaría Técnica del Consejo Político Estatal: Luis Alberto Contreras Salazar138

Como se advierte, a diferencia del Comité Ejecutivo Nacional, la estructura

a nivel estatal no cuenta con una Secretaría de Asuntos de la Juventud.

En la esfera legislativa, únicamente cinco diputados locales priístas tienen

menos de treinta y cinco años. Sólo dos diputados cuentan con menos de treinta

años: Vicente Martínez Alcántara, del Distrito X, y César Guillermo Calderón

León, del Distrito XXXIV. Martínez Alcántara fue Presidente Municipal de Villa

Victoria; mientras que Calderón León fue Presidente del Frente Juvenil

Revolucionario en el Estado de México, y es hijo de Guillermo Calderón Vega,

quien ocupó la subsecretaría de Gobierno en la administración del gobernador

Arturo Montiel.

En otras palabras, los datos acerca de las edades de los integrantes de la

Legislatura del Estado de México reflejan las escasas oportunidades que tienen

los jóvenes mexiquenses para insertarse en esa estructura. Para hacerlo, casi

siempre se requiere tener algún vínculo familiar o político; condiciones que

también aplican para el resto de los legisladores de mayor edad, entre los que

destacan montielistas, chuayffetistas y peñistas. Los datos anteriores confirman

las afirmaciones de Julián Salazar, quien sostiene: “(…) en el Estado de México

los grupos y liderazgos tienden a mezclarse. Es posible, por lo tanto, encontrar a

miembros prominentes, y aun dirigentes de un determinado grupo, como

integrantes de otro distinto139.

La designación del candidato del PRI a la gubernatura del Estado de

México, Eruviel Ávila Villegas, confirmó el planteamiento de Salazar. Aunque el

candidato priísta y hoy gobernador del Estado de México para el período 2011-

138

Datos recogidos en 2010. 139

Salazar Medina, Julián (1993) (Coord) Estructura y dinámica del poder en el Estado de México,

UAEM, Estado de México. Citado por Javier Arzuaga-Magnoni et al, en: “Élites, alternancia y partidos políticos en el Estado de México: entre la pluralidad, la búsqueda del voto y el debilitamiento institucional”. Economía, Sociedad y Territorio, vol. VII, núm. 25, 2007.

67

2017, es de un origen socioeconómico modesto, lo cierto es que se formó en el

equipo del ex gobernador Arturo Montiel y representa una pieza ad hoc en el

escenario de los grupos políticos hegemónicos de la entidad.

Organizaciones políticas juveniles.

El artículo 43 de los Estatutos del partido hace mención de algunas de las

organizaciones juveniles priístas. De esta forma, señala lo siguiente:

Artículo 43. El Frente Juvenil Revolucionario es la organización de

carácter nacional por medio de la cual los jóvenes se incorporan a la

acción política del Partido y cuya acción y desarrollo se rige por sus

documentos fundamentales, los cuales establecerán su vinculación con el

mismo; sus normas internas no podrán contravenir los principios del

Partido Revolucionario Institucional. Se integra por las estructuras del

Frente Juvenil Revolucionario en las entidades federativas; las

organizaciones juveniles sectoriales: Federación de Organizaciones

Obreras Juveniles, Vanguardia Juvenil Agrarista, Juventud Popular

Revolucionaria, Juventud Territorial, las organizaciones nacionales

adherentes al Frente Juvenil Revolucionario, y las que se integren en el

futuro; así como los jóvenes que se afilien libre, voluntaria e

individualmente.

El Frente Juvenil Revolucionario (FJR) tiene entre sus fines, el de

“promover la incorporación de un mayor número de jóvenes al Partido”, así como

impulsar su participación en el trabajo partidario.

En la legislatura local (2009-2012), el diputado por el Distrito XXXVII, Pablo

Basañez García140, con cuarenta y un años de edad, ocupó la Secretaría General

del Frente Juvenil Revolucionario del Estado de México; Óscar Jiménez Rayón,

de cuarenta años, diputado local por el Distrito XXVIII fue presidente del FJR en

Tlalmanalco y posteriormente presidente municipal del mismo municipio. El

140

Basañez García es originario de Ciudad Obregón, Sonora. Fue designado presidente de la

Fundación Colosio en el Estado de México. Actualmente es Presidente Municipal electo de

Tlalnepantla, para el período 2013-2015.

68

también diputado local David Sánchez Isidoro fue Presidente del Frente Juvenil

Revolucionario en el municipio de Coacalco y después presidente municipal.

Carlos Iriarte Mercado141, diputado local de la Legislatura por el distrito

XVII, ocupó la Subsecretaría del FJR del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.

César Guillermo Calderón León, de veintiocho años, diputado local por el distrito

XXIV es el presidente del FJR en el Estado de México.

Las mujeres jóvenes en el PRI.

A pesar de que, desde 1911 se encuentran antecedentes históricos de la

lucha de las mujeres por exigir el reconocimiento de sus derechos políticos, no es

sino hasta 1929 que se crea el Partido Feminista Revolucionario, de donde surgió

Edelmira Rojas viuda de Escudero, quien sería la primera dirigente del sector

femenil del Partido Nacional Revolucionario142. En febrero de 1947 entró en vigor

la reforma constitucional por la que se reconoció el derecho de las mujeres de

votar y ser votadas en elecciones municipales, y en 1953 se les reconoció este

derecho a nivel federal.

Fue hasta junio de 2002 cuando se reformó la legislación federal electoral

para obligar a los partidos políticos a considerar al menos un 30 por ciento de

mujeres candidatas a cargos de elección popular.

Con todo, el ámbito normativo suele estar distanciado del fáctico. Sin

embargo, es importante señalar que, de conformidad con lo dispuesto en el

artículo 3o. de los Estatutos del PRI, el partido deberá impulsar la participación

ciudadana de grupos y organizaciones constituidos por mujeres. En este mismo

sentido, el artículo 36 de dichos Estatutos señala:

141

Presidente Municipal electo de Huixquilucan para el período (2013-2015). 142

Cronología integrada del movimiento de mujeres de México (1910-2010) Instituto de Estudios

Históricos de las Revoluciones Mexicanas. Consultado en julio de 2010. Disponible en: http://www.inehrm.gob.mx/pdf/cronologia_mujer.pdf

69

Artículo 36. Al interior del Partido, las mujeres se integrarán en un solo

organismo de carácter nacional, incluyente, denominado Organismo

Nacional de mujeres priístas mismo que se normará por sus documentos

básicos, y que integra a las mujeres de los Sectores, las Organizaciones y

los grupos ciudadanos, así como a las mujeres que se afilien libre,

voluntaria e individualmente. El Organismo Nacional de Mujeres Priístas

establecerá en sus documentos básicos su vinculación con el Partido.

Sus normas internas no podrán contravenir los principios del Partido

Revolucionario Institucional. Sin menoscabo de su autonomía, los

mecanismos y modalidades de renovación de sus dirigencias, deberán

ser revisados por el Partido. Las dirigentes del Organismo Nacional de

Mujeres Priístas que resulten electas democráticamente a nivel nacional,

estatal, municipal y delegacional, formarán parte de los comités

respectivos y tendrán representación equivalente a la de los Sectores

dentro de la estructura partidista.

La identidad o identificación partidista de las mujeres priístas, es un tipo de

identidad política que también se edifica en función de lealtades, componendas y

complicidades. Su participación política, controlada por la dirigencia del partido,

está vinculada con su identidad política y partidista, y tiene que ver con un

proceso analítico pero al mismo tiempo sintético. Una joven priísta señala lo

siguiente:

A mí ya en ese tiempo me tocó votar. Entonces yo voté por el PRI porque

yo ya estaba en una escuela priísta, entonces voté por el PRI. Todavía, a

pesar de que hay muchas personas que vienen de otros estados, todavía

habemos personas que defendemos a nuestro municipio a morir, a capa y

espada.

Los jóvenes están desinteresados. Dicen que el PRD es una “cochinada”.

El PAN dicen que es para ricos. Entonces los jóvenes que son de

poblaciones de bajos recursos prefieren a un partido como el PRD, que se

dice que es de pobres y el PAN se dice que es de ricos y el PRI dicen que

no sirve para nada. Entonces en ese vaivén se quedan sin partido porque

ninguno les funciona.

Muchos jóvenes son muy cerrados, no votan, no les interesa la

participación política.

70

Probablemente en mi caso, el Partido me ha dado y yo estoy

contribuyendo y él me da más y es algo recíproco. Las demás personas

sienten que dan y dan, y dan sin recibir. Sienten que los usan.

El joven ha tenido desinterés por algo que les conviene a ellos mismos y a

su comunidad. Un joven que necesita dinero no se va a acercar a un

partido que no le va a dar dinero, sino a uno que le da el apoyo que

necesita aunque no comparta lo que está haciendo, pero el le está dando

lo que necesita en ese momento. En el PRI se trata de amor a tu

comunidad o a tu país. No vamos a estar pagándole a nadie.

Realmente los jóvenes no eligen, simplemente se van donde hay

dinero. Ese es el modo de acaparamiento de los demás partidos. En el

PRI estás ahí por convicción 143.

Como se observa, la joven priísta manifiesta su compromiso hacia su

comunidad, aunque reconoce los beneficios que le otorga el PRI, pues le brinda

la oportunidad de formarse. La opinión que expresa respecto a una gran mayoría

de los jóvenes, es que a ellos no les interesa participar en los procesos

electorales, pues sienten que son “usados” por los partidos políticos, sobre todo

en los períodos de campañas. Quedarse sin partido es una de las opciones de

muchos jóvenes que no encuentran utilidad alguna en participar en partidos

políticos que no les dan nada, ni siquiera dinero.

Juventud Popular Revolucionaria.

Esta es una agrupación de la Confederación Nacional de Organizaciones

Populares, definida por su propio Programa de Acción y por sus Estatutos como

un organismo político nacional autónomo, de jóvenes, de acción permanente,

cuyo propósito es generar cuadros políticos y dirigentes del Partido

Revolucionario Institucional y encauzar las demandas reales de la juventud

mexicana para su bienestar.

143

Entrevista a una joven priísta originaria. Diciembre de 2008.

71

Juventud Popular se plantea como un espacio de participación para los

jóvenes del sector urbano y semiurbano para hacer política, representar y

defender los intereses de los jóvenes y promover su participación. El artículo 12

de sus Estatutos señala

Para los efectos de estos Estatutos, se entenderá por militante todo

mexicano cuya edad esté comprendida entre los 12 y los 30 años, que

decida, de manera individual y voluntariamente, afiliarse en forma directa a

la Juventud Popular Revolucionaria, o hacerlo a través de sus

Organizaciones adherentes144.

El artículo 27 de estos mismos Estatutos dispone que se reconocerá el

carácter de cuadros a los militantes menores de 30 años que cumplan con los

requisitos señalados. La Asamblea Nacional es el Órgano supremo de la

agrupación y está integrado, entre otros, por los legisladores federales y locales

menores de 30 años, que sean miembros de la Juventud Popular Revolucionaria

y de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares. (Artículo 34)

Vanguardia Juvenil Agrarista.

Este es un organismo nacional filial de la Confederación Nacional

Campesina, creado hace más de cuarenta años, que defiende los intereses de las

clases campesinas, se identifica política e ideológicamente con el Partido

Revolucionario Institucional y tiene entre sus propósitos postular como candidatos

a cargos de elección popular a sus militantes145. Entre otras actividades, impulsa

la instalación de incubadoras de negocios en el campo, prepara técnicos y

profesionistas y promueve programas para la capitalización de los jóvenes en el

campo.

144

Estatutos de Juventud Popular Revolucionaria, aprobados durante la Asamblea Nacional

Extraordinaria, celebrada los días 22 y 23 de noviembre de 2003. 145

http://vanguardiajuvenilagrarista.wordpress.com/directorio/presidencia/ Consulta realizada en

julio de 2010.

72

En la Legislatura del Estado de México (2009-2012), el diputado local por el

Distrito XXXIX, Darío Zacarías Capuchino, de 38 años, fue Secretario de

Vanguardia Juvenil Agrarista en el municipio de Acolman, en donde

posteriormente sería presidente municipal. Por otro lado, el diputado local por el

Distrito I en Jilotepec, y también ex diputado federal, Héctor Velasco Monroy, es

también Secretario General de la Liga de Comunidades Agrarias, fue coordinador

de la Vanguardia Juvenil Agrarista en la región Atlacomulco y presidente del

Comité Municipal del FJR en ese municipio.

También cabe recordar que Beatriz Paredes, ex dirigente nacional del PRI,

inició su carrera política en esta agrupación cenecista, además de que fue

fundadora y dirigente del Movimiento Nacional de la Juventud Revolucionaria en

Tlaxcala146.

Los datos expuestos nos muestran cómo algunos militantes priístas

iniciaron su carrera política en agrupaciones juveniles, organizaciones de mujeres

o agrupaciones campesinas del partido, y escalaron hacia otras posiciones.

Conclusiones.

Si observamos la distinción entre política y política institucional, es evidente

que los jóvenes en México expresan tanto interés por participar en la primera,

como apatía o rechazo por participar en la segunda. En el escenario de la política

institucional, en la que los partidos políticos cumplen un papel importante, los

jóvenes priístas forman parte de una población que muestra un marcado

desinterés por los temas políticos y altos niveles de desconfianza hacia dichos

institutos políticos, que no los representan, ni responden a sus expectativas.

Paradójicamente, el discurso priísta de renovación promueve su participación y

146 Organización que antecedió al Frente Juvenil Revolucionario (FJR).

73

ofrece candidaturas con rostros nuevos. Buena parte de esos rostros tienen

vínculos familiares o de complicidad con los viejos políticos priístas.

En el Estado de México se observa con claridad esta dinámica, y para ello

es suficiente revisar las listas de aspirantes a las diputaciones y a las presidencias

municipales. De manera particular, las prácticas priístas excluyentes se hacen

evidentes con la postulación de candidatos vinculados estrechamente con grupos

políticos poderosos de la entidad. Estas prácticas ponen al descubierto que

mientras en el discurso se ofrecen oportunidades para los jóvenes, los viejos

priístas se mantienen al frente y ocupan la mayoría de los cargos de elección

popular. De esta manera, los jóvenes en general y las mujeres jóvenes,

conforman categorías y grupos de edad excluidos, con limitadas posibilidades

para participar en la vida política de la entidad.

No obstante los niveles de desconfianza en la política institucional y en los

partidos políticos, el PRI ha logrado conservar el poder en la mayoría de las

entidades del país y ganó la Presidencia de la República para el período 2013-

2018, si bien sus triunfos electorales no están sustentados en prácticas

electorales transparentes y democráticas, sino en estrategias clientelares y

muchas veces fraudulentas. Los niveles de abstencionismo y una endeble

legitimidad de los gobernantes o representantes populares electos, son

consecuencias de estas prácticas.

Conscientes de la importante presencia que tienen los jóvenes en la

conformación del electorado, el discurso proselitista del PRI les ofrece un cúmulo

de expectativas, aunque sólo sea durante los tiempos de la fiesta electoral. Para

demostrar al público la presencia de jóvenes, ahí están en los nuevos cargos los

rostros joviales de los hijos, sobrinos o nietos de los viejos priístas, que como en

las monarquías, son herederos del trono.

74

Capítulo III

Cultura, identidades e imaginarios políticos de jóvenes en San Bartolomé

Introducción.

San Bartolomé es un pueblo inmerso en un municipio, en una entidad

federativa, y en un país en donde el PRI ha mantenido la hegemonía, no obstante

las acusaciones en su contra por supuestas conductas clientelares y fraudulentas

para obtener el voto.

Desde 1814 se estableció en México – al menos por lo que el Decreto

Constitucional mencionaba en su artículo 38 - que ningún género de cultura

podría ser prohibido a los ciudadanos. El constante mejoramiento cultural del

pueblo, la continuidad y acrecentamiento de nuestra cultura, educar, investigar,

fortalecer y difundir nuestra cultura, son propósitos que alternan paradójicamente

con el reconocimiento del carácter pluricultural147 de la nación mexicana.

La vida nueva, que ansían sobre todo los desposeídos, es la utopía que

ofrecen los políticos durante sus campañas electorales, en las que, aliados con

los grandes consorcios que controlan los medios de comunicación, enajenan la

mente de los electores con promesas, con sueños e historietas que fomentan la

fantasía. El México que todos queremos; construir una nación de justicia y de

leyes; el país que queremos heredar a las nuevas generaciones; poner a México

en la ruta del Desarrollo Humano Sustentable; el interés superior de la Nación; se

está forjando una generación de mexicanas y mexicanos libres de complejos, de

tabúes, de miedos y de perjuicios; el destino de nuestra nación dependerá de lo

que los mexicanos hagamos o dejemos de hacer;148 son eslogan que exaltan las

pasiones nacionalistas de la población hacia el futuro.

147

Como se ha señalado, esta palabra no aparece en el Diccionario de la Real Academia de la

Lengua. 148

Véase el Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012.

75

La manera en que se establecen las relaciones sociales y políticas

privilegia desde algunas posiciones teóricas el consenso o el conflicto. Chantal

Mouffe destaca la importancia del conflicto y el disenso, realiza una interpretación

del pensamiento de Schmitt y establece una distinción conceptual entre la política

y lo político, pero en opinión de Marcos Engelken-Jorge:

El principal problema deriva de que Chantal Mouffe sólo quiere adoptar

ciertas ideas de Schmitt, mientras rechaza otras. Más concretamente,

Schmitt (1932:26) defiende que es la distinción amigo/enemigo la que

constituye la dicotomía central de lo político y concibe los pueblos

como datos dados. Por el contrario, la politóloga belga establece una

distinción conceptual clara entre la política y lo político, refiriéndose

éste a la formación más o menos espontánea de oposiciones

amigo/enemigo, y aquélla, a la actividad de control y regulación de esta

conflictividad innata149.

Estas relaciones de conflicto por la lucha de recursos escasos se

manifiesta a través de los partidos políticos que participan en las contiendas

electorales para alcanzar el poder y ocupar los cargos de gobierno, a nivel del

Poder Ejecutivo o de toma de decisiones en el plano legislativo.

Una de nuestras entrevistadas, joven priísta de 22 años, de padres priístas,

nos dice: “Cada candidato cuando es tiempo de campaña, bueno, se desvive por

149

Engelken-Jorge, Marcos. (2008) “Democracia posnacional, dos debates teóricos: Habermas,

Mouffe y el nacionalismo funcional”, Universidad del País Vasco, Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas, 2008. Publicación electrónica de la Universidad Complutense. Disponible en: www.ucm.es/info/nomadas/19/marcosengelken.pdf El autor continúa señalando: “Expresado de modo más preciso: parece que son consideraciones lógicas las que animan el argumento de Mouffe; sin Ellos no puede haber un Nosotros. Y efectivamente, no podemos sino darle la razón en cuanto que lo social parece estar atravesado por una lógica de lo político, es decir, por la tendencia a la formación de identidades colectivas (Nosotros) y, eventualmente, por la categorización de los Otros como amigos o enemigos. Sin embargo, la política, como ámbito conceptual diferenciado de lo político, esto es, como espacio que trata de organizar la convivencia y que aspira a contener el potencial de hostilidad inherente a las relaciones humanas, no se ve necesariamente determinado, en virtud de la distinción conceptual entre la política y lo político, por tal hostilidad y fronteras entre Nosotros y Ellos”. Las negrillas son nuestras.

76

el municipio, pero después ni se aparece, jamás lo volvías a ver. Esto lo sé

porque yo lo veía…150”.

Es interesante observar que en el caso de nuestra entrevistada, según su

dicho, sus padres no ejercieron ninguna influencia en su militancia partidista, no

trabajan ni han trabajado en la administración municipal y los recursos

económicos que obtienen no dependen de que el partido se mantenga en el

poder. En otros casos, los jóvenes encuentran en su filiación partidaria una forma

de perpetuar los valores partidistas de sus padres, pero también de conservar sus

relaciones y los cargos públicos que les han proporcionado beneficios

económicos, sociales y políticos.

Mientras Robert Michels refiere casos de jóvenes que pertenecen a las

clases aristocráticas y deciden asumir una ideología socialista – él mismo lo fue

durante su juventud – también pueden citarse casos de hijos de priístas, que

decidieron alejarse de la tradición familiar, criticarla o repudiarla151. Los casos de

Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo y Andrés Manuel López Obrador son

ilustrativos, como los de políticos que durante muchos años fueron priístas, y

después decidieron convertirse en críticos del sistema y de su partido de

origen152.

Durante los tiempos de campaña, como en los tiempos de torneo o de

competencias olímpicas o futbolísticas, se incrementa la participación y el

entusiasmo de los jóvenes, motivados además por el pago que reciben para

apoyar a los candidatos. El tiempo de campaña tiene similitudes con la fiesta y

con el certamen. Durante la fiesta podemos convivir con los candidatos, estrechar

su mano, recibir una carta o un presente, y hasta tomarnos una fotografía con

150

Entrevista realizada en Huixquilucan a una joven priísta de Huixquilucan, por Eduardo Vesga

Urbina, en diciembre de 2009. 151

Cristina Sánchez Mejorada refiere que durante el movimiento de 1968 en México, se registraron

muchos casos de este tipo. Más recientemente, podemos citar el caso de Luis Donaldo Colosio Riojas, quien ha hecho declaraciones señalando que él es distinto a su padre, y no expresa interés por dedicarse a la política. Otro es el caso de Leticia Martínez, hija de Emilio Martínez Manatou, connotado priísta, Secretario de Estado y ex Gobernador de Tamaulipas. El nieto de Martínez Manatou es Jorge Emilio González Martínez, ex presidente del Partido Verde Ecologista de México, que en algún momento fue un partido político aliado del PAN. 152

Vale la pena señalar que José Francisco Ruiz Massieu se refería en 1990, al PRI, como partido

de origen de otros partidos, en “Ideas a Tiempo”, Editorial Ariel, México.

77

ellos. Conocer a un candidato, siempre sonriente y amable en tiempo de

campaña, genera confianza y despierta esperanzas.

La creencia en un futuro mejor, en un gobierno benefactor, dadivoso y casi

milagroso, orienta a un buen número de electores durante el carnaval electoral en

el que se reparten obsequios, camisetas, gorras, destapadores, ceniceros,

llaveros, calcomanías y demás objetos de propaganda política. Sobra decir que

para ganar la simpatía o el compromiso de los electores, o incluso para comprar

el voto, los candidatos, sus partidos o los gobiernos mismos, emiten mensajes,

promueven programas sociales, reparten despensas, materiales para

construcción y dinero.

En el certamen, la competencia despierta pasiones: se lucha porque gane

nuestro partido. Emociones positivas y negativas, como la esperanza, el miedo, la

confianza y la culpa153 entre otras, confluyen con una especie de sentimiento

religioso o providencial que hace creer que los candidatos o los gobernantes

cuentan con poderes mágicos o casi divinos para resolver nuestros problemas. Ya

en el plano del ejercicio público, frases como: un gobierno cercano a ti, es tiempo

de todos, todos somos Cuautitlán, trabaja para tu bienestar, son algunos de los

lemas de las administraciones municipales en el Estado de México.

En este orden de ideas, Denisse Dresser señala:

Porque cada seis años México se busca un “Cid Cambeador.” Cada

seis años México busca un político capaz de redimir al país y

rescatarlo. Los mexicanos le gritaron a Vicente Fox una y otra vez en el

Ángel de la Independencia, no nos falles, y se sorprendieron cuando lo

hizo. Por eso ha llegado el momento de reconocer que no hay

salvadores, que sólo hay ciudadanos con una obligación compartida 154.

El pensamiento mesiánico, entendido como la creación de “alebrijes

políticos”, sujetos imaginarios (líderes o partidos políticos) en los que se deposita

153

Vega, Aimée. (2000) Op. Cit. 154

Dresser, Denisse, op.cit.

78

una confianza desmedida, parece ser una constante que se repite durante cada

proceso electoral. Influenciados por la propaganda política, el nuevo partido o el

próximo político despierta esperanzas para un mejor futuro en el que existan más

y mejores fuentes de trabajo, oportunidades educativas, centros de salud,

viviendas, seguridad pública, menos pobreza y todos aquellos aspectos que se

esperan de un buen gobierno.

En este proceso juega un papel importante el castigo. Los electores tienen

la oportunidad de sancionar a los malos gobernantes, quienes permitieron que se

extinguieran sus fuentes de trabajo, que no fomentaron la creación nuevos

empleos o que obligaron a sus familiares a emigrar. Esos gobiernos que no

construyeron el clima de paz, tranquilidad y confianza que les ofrecieron y con el

que soñaron.

El imaginario mexiquense.

En el Estado de México confluyen diversas etnias nacionales, colonias de

extranjeros y clases sociales. En un mosaico multicultural, conviven en la entidad

mazahuas, otomíes, nahuas, matlazincas y ocuiltecos principalmente, aunque

también se registran habitantes pertenecientes a otras etnias como la maya,

mazateca, mixe, mixteca, purépecha, totonaca y zapoteca, flujos migratorios

procedentes de otras regiones del país, que han venido a asentarse en el Estado

de México por falta de oportunidades económicas en su lugar de origen.

Los historiadores refieren que la raza otomí es la más antigua y primitiva

que habitó en Mesoamérica. Los otomíes más adelantados llegaron a formar

ciudades, como Man-he- mí, que posteriormente fue Tóllan 155. En la entidad

mexiquense, los otomíes habitan principalmente en los municipios de Acambay,

Aculco, Amanalco, Atizapán de Zaragoza, Chapa de Mota, Lerma, Morelos,

Otzolotepec, Huixquilucan, Jiquipilco, Temoaya y Toluca.

155

Chavero, Alfredo. (1960) México a través de los siglos. Tomo I, Editorial Cumbre, México, p. 64-

75. Una opinión contraria plantea Fernando Benítez, en Los indios en México. Vol. IV. Para Benítez, los otomíes eran nómadas y no sedentarios.

79

La colindancia con la Ciudad de México, centro cultural y laboral de

muchos de sus habitantes, y el hecho de que casi el 40 por ciento de la población

no nació en la entidad, son factores que han influido para que, sobre todo en la

zona metropolitana del Valle de México, no esté plenamente construida una

identidad mexiquense.

A diferencia de otros estados de la República, muchos de los habitantes de

los municipios mexiquenses que forman parte de la zona metropolitana del Valle

de México, no conocen la historia ni las tradiciones de su entidad y sienten que

viven en México, es decir, en algo así como una extensión de la Ciudad de

México. Algunos de sus símbolos, como la bandera de la entidad o el himno, son

poco conocidos, y aún el gentilicio de mexiquense, es un vocablo relativamente

novedoso para ellos156.

En los municipios metropolitanos del Estado de México se han formado

conglomerados sociales formados por habitantes de las zonas tradicionales,

zonas populares y residenciales con intereses contrastantes. Quienes habitan en

zonas residenciales y desconocen la historia, las costumbres o las prácticas

sociales de los originarios, escuchan con extrañeza y a veces con molestia sonar

los cuetes durante toda la noche previa a la fiesta del santo patrón del poblado

cercano, sin comprender el significado de estas prácticas sociales.

El escenario de San Bartolomé.

San Bartolomé es un pueblo originario del municipio de Huixquilucan, en el

Estado de México. Situado a pocos kilómetros del Distrito Federal y de Toluca, en

San Bartolito, como también es conocido, habita una población de casi 5 mil

personas, entre originarios y avecindados157.

156

Moreno de Alba, José G. (2008) Minucias del lenguaje, México, F.C.E., el autor refiere que la

voz apareció publicada por primera vez en 1992, en la vigésima segunda edición del Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española. 157

Sánchez Mejorada Fernández, María Cristina. (2008) “Sociabilidad y politicidad de y entre

“nuevos” y “viejos” actores en un pueblo conurbado de la ZMVM”, en: Escenarios de Gestión del

Espacio Urbano y Regional en México. México, Gobierno del Estado de México. Biblioteca

Mexiquense del Bicentenario, pp. 113- 122. Según datos del II Conteo de Población (2005), refiere

80

Aunque en Huixquilucan se han instalado zonas comerciales y algunos de

los fraccionamientos residenciales más lujosos del país, en él también se

conservan rasgos de los pueblos tradicionales, que conviven con zonas populares

y asentamientos irregulares muy pobres.

Las tierras de San Bartolomé estuvieron habitadas originalmente por

otomíes, por lo que desde la época colonial se conformó como un pueblo con

presencia indígena o tribal. Los otomíes se caracterizan por ejercer prácticas

sociales y religiosas de colaboración, reciprocidad y ayuda mutua. Con un fuerte

arraigo por la tierra, a la que incluso veneraron, organizan sus relaciones sociales

y políticas a través de cargos como los de mayordomías158. Para los indígenas, la

relación con la tierra se construye de una manera singular y a diferencia de la

cultura occidental en la que la tierra pertenece a quien habita en ella, aquí quien

habita la tierra y sobre todo quien la trabaja, pertenece a la tierra, a la madre

tierra, que le da sustento.

De esta manera lo expresa López Bárcenas:

En segundo lugar, porque para los indígenas sus espacios territoriales

son fuente de identidad y parte de su ser; más que los territorios

pertenezcan a los indígenas son éstos los que forman parte de aquéllos; la

tierra es el lugar de origen, fuente de creencias, sustento de una

cosmovisión, unas prácticas socioculturales peculiares y asiento de un

pasado común. Además de esto, dada la depredación de la sociedad

moderna, la tierra y los recursos en ella existentes, necesitan del

conocimiento y sentido de conservación de los indígenas para su

la autora, se calcula que tan sólo 3 de 10 personas son originarios del pueblo y descendientes de

otomíes. 158

Barrientos López, Guadalupe, (2004) Otomíes, pueblos indígenas del México contemporáneo,

Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, México, p. 6. La autora señala: “según algunos autores, “otomitl” provendría del náhuatl “otocac”, “que camina” y “mitl”, “flecha”, porque, supuestamente, los otomíes, grandes cazadores, caminaban cargados de flechas”. También fue usado en términos despectivos por los aztecas, como sinónimo de sucio y flojo, pero la enorme capacidad en el trabajo y la creatividad que a través del tiempo han demostrado los pueblos ñähñu deja sin sentido tal definición.”

81

existencia. La tierra peligra sin el concurso de los indígenas pero éstos no

pueden vivir sin ella159.

Con el despojo de tierras que sufrieron durante la Conquista, los pueblos

originarios se vieron en la necesidad de pagar a los grandes hacendados para

trabajar las tierras que antes les pertenecieron. Para el caso que nos ocupa, este

hecho es reconocido en la solicitud de dotación de tierras presentada por vecinos

de San Bartolomé en 1924 ante las autoridades agrarias, en donde sostienen que

han sido poseedores de esas tierras por más de cien años, exhibiendo recibos de

pago de renta a Antonio Díaz Sánchez, quien se ostentaba como propietario de la

ex hacienda de San José de los Leones160.

La categoría de pueblo de San Bartolomé fue reconocida desde la época

colonial y así quedó asentada en el Censo de 1910, aunque fue hasta 1924

cuando un grupo de campesinos solicitó la dotación de tierras para constituir el

ejido. La petición de los agricultores se fundó en la Ley del 6 de enero de 1915 y

en el artículo 27 constitucional, y estuvo suscrita por Joaquín H. Ibáñez, Natividad

Juárez y Juan de Mata Pérez. El 21 de octubre de 1939, el Comisariado Ejidal de

San Bartolomé solicitó la ejecución de la resolución presidencial de dotación de

ejidos, incluyendo una copia del censo original de los 165 campesinos con

derecho a dotación. De esa lista, cincuenta y cinco personas tenían los apellidos

Ibáñez o Juárez, mientras que sólo tres el de Roque, y cuatro el de Urbina.

27.- Ibáñez Agustín, 28.- Ibáñez Blas, 29.- Ibáñez Celestino, 30.- Ibáñez Crisóforo,

31.- Ibáñez Daniel, 32.- Ibáñez Estanislao, 33.- Ibáñez Esteban, 34.- Ibáñez Gabino A.,

35.- Ibáñez Hilario, 36.- Ibáñez Guillermo, 37.- Ibáñez Jacinto, 38.- Ibáñez Juan, 39.-

Ibáñez Juan V., 40.- Ibáñez Manuel, 41.- Ibáñez Marcos, 42.- Ibáñez Marcos P., 43.-

Ibáñez Margarito, 44.- Ibáñez María C. Vda. de Ibáñez, 45.- Ibáñez Melitón, 46.- Ibáñez

Joaquín, 47.- Ibáñez Nazario, 48.- Ibáñez Pedro, 49.- Ibáñez Prospero, 50.- Ibáñez

Secundino, 51.- Ibáñez Simón, 52.- Ibáñez Juan Zenón, 53.- Juárez Albino, 54.- Juárez

Abraham, 55.- Juárez Alejandro, 56.- Juárez Aniceto, 57.- Juárez Anselmo, 58.- Juárez

159

López Bárcenas, Francisco, Autonomía y derechos indígenas en México, Centro de

Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias Sociales y Humanidades, UNAM, México, Ediciones Coyoacán, p.51. 160

Archivo General Agrario, Loc. Cit.

82

Anselmo, 59.- Juárez Antonio, 60.- Juárez Atilano, 61.- Juárez Casimiro, 62.- Juárez

Celso, 63.-Juárez Cirilo, 64.- Juárez Domingo, 65.- Juárez Emiliano, 66.- Juárez

Feliciano, 67.- Juárez Félix, 68.- Juárez Higinio, 69.- Juárez Ignacio, 70.- Juárez Isidro,

71.-Juárez Julián, 72.- Juárez Leonardo, 73.- Juárez Longinos, 74.- Juárez Marcelino,

75.- Juárez Martha, 76.- Juárez Natividad G., 77.- Juárez Natividad, 78.- Juárez Paulino,

79.- Juárez Pedro, 80.- Juárez Pedro M., 81.- Juárez Serapio, 82.- Juárez Tomás161.

El núcleo campesino de San Bartolomé no contaba con personalidad

jurídica para reclamar su derecho a la tierra. Este reclamo sólo pudo hacerlo un

grupo de campesinos que se constituyeron como comisionados o representantes

de los vecinos y miembros del Comité Particular Administrativo o Comité

Particular Ejecutivo Agrario del pueblo.

En 1935 se conformó en San Bartolomé una nueva Comisión para solicitar

la dotación de ejidos, siendo designado como presidente el C. Zacarías Roque,

como vocales Pedro N. Mireles y Esteban Ibáñez, y como representante censal,

Ignacio Juárez.

El 21 de octubre de 1939 acuden ante la Delegación del Departamento

Agrario de Toluca los señores Eduardo Perea y Estanislao Medina,

presidente y tesorero del Comisariado Ejidal de San Bartolomé Coatepec,

pidiendo que se ejecute la resolución presidencial de la dotación de ejidos.

Se incluye una copia del censo original de los 165 campesinos con

derecho a dotación hecha en el año de 1927162

.

El despojo sufrido por los pueblos otomíes originarios de San Bartolomé

durante la Conquista, al igual que el despojo legalizado a través de la reforma al

artículo 27 constitucional, que favoreció la enajenación de las tierras de los

ejidatarios a fraccionadores de lujosos conjuntos habitacionales, contradice los

principios contenidos en los Pactos Internacionales de Derechos Humanos, y

particularmente, en el Convenio de la Organización Internacional del Trabajo de

1989. A través de la reforma constitucional al artículo primero constitucional,

161

Fuente: Archivo General Agrario. Agradezco a Rodolfo Roque el que me haya permitido tener

acceso a este documento. 162

Ibid.

83

publicada en el Diario Oficial del seis de junio de 2011, estos derechos humanos

han sido reconocidos de manera expresa en nuestra Carta Magna163.

La conciencia de identidad supone pensar quiénes somos, mirarse como

otomíes, matlazincas, mazahuas, nahuas u ocuiltecos y sentir la pertenencia a

esa etnia, a ese pueblo, a esa tierra que los vio nacer, la tierra que trabajan y que

les da el sustento. Es también el lugar en donde están sus recuerdos, tradiciones

y leyendas. Esa misma identidad también significa ser visto o reconocido por los

otros, ser nombrado o señalado por el otro diferente. Así surge la misma palabra

otomí, de origen náhuatl, que significa aquel que camina cargado de flechas164.

Sin embargo, la simbiosis identidad-territorio sufre un resquebrajamiento

cuando los habitantes de esos territorios son despojados de su tierra (y de su

hábitat, que incluye además sus recursos naturales, sus ríos, bosques, fauna, aire

y suelos) y tienen que pagar por trabajarla o por habitar en ella.

La propiedad originaria de los pueblos en San Bartolomé, no ha sido

protegida por el Estado mexicano, pues ni siquiera se ha reconocido la

personalidad de esos pueblos ni la capacidad de ser considerados titulares de

derechos de propiedad. A través de figuras del derecho agrario, como el ejido o la

propiedad comunal, los pueblos se vieron en la necesidad de conformar

estructuras de autoridad como el Comisariado Ejidal o Comisariado de

Administración de Bienes Ejidales.

Al paso del tiempo, el propio sistema jurídico impuesto y sobrepuesto a los

sistemas normativos indígenas, a través de la reforma de 1991 al artículo 27

constitucional, la Ley Agraria de 1992 (Ley Salinas) y la miseria de los

campesinos, facilitaron las negociaciones leoninas para la venta de las tierras de

los indígenas. Como lo advierte Trujillo:

163 En el plano internacional, el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo sobre

Pueblos Indígenas y Tribales en Países Independientes, adoptado en la ciudad de Ginebra, Suiza, el veintisiete de junio de mil novecientos ochenta y nueve; y aprobado por el Senado el once de julio de mil novecientos noventa, señala en el punto segundo de su artículo primero: “ 2. La conciencia de su identidad indígena o tribal deberá considerarse un criterio fundamental para determinar los grupos a los que se aplican las disposiciones del presente Convenio”. 164

Barrientos López, Guadalupe, (2004) Op.cit.

84

Las reformas de diciembre de 1991 al Artículo 27 de la Constitución

mexicana abandonaron esta concepción patrimonial de la tenencia de la

tierra ejidal, cancelaron el compromiso estatal de distribución de tierras y

legitimaron la venta y las transacciones en torno a los derechos

agrarios, prácticas que, como se menciona más adelante, surgieron de

manera informal desde los primeros tiempos del reparto agrario. En

particular, las reformas implicaron la supresión del derecho de los núcleos

de población a la dotación de tierras y aguas (Procuraduría de le Reforma

Agraria, 2007) la legalización de las operaciones de venta, renta y

aparcería de tierras ejidales, así como la opción al dominio pleno y la

privatización de tierras ejidales, la eliminación de algunas instancias

tradicionales de autoridad estatal superpuestas a la organización ejidal,

como las comisiones agrarias mixtas, y la legalización de la propiedad de

la tierra por sociedades mercantiles por acciones165

.

La reforma de la fracción VII del artículo 27 constitucional, publicada en el

Diario Oficial el 6 de enero de 1992, reconoce la personalidad jurídica de los

núcleos de población ejidales y comunales y protege su propiedad sobre la tierra.

Su contenido se reproduce y desarrolla en el artículo 9 de la Ley Agraria de 1992,

la cual señala:

Artículo 9.- Los núcleos de población ejidales o ejidos tienen

personalidad jurídica y patrimonio propio y son propietarios de las tierras

que les han sido dotadas o de las que hubieren adquirido por cualquier

otro título.

Artículo 11.- La explotación colectiva de las tierras ejidales puede ser

adoptada por un ejido cuando su asamblea así lo resuelva, en cuyo

caso deberán establecerse previamente las disposiciones relativas a la

forma de organizar el trabajo y la explotación de los recursos del ejido,

así como los mecanismos para el reparto equitativo de los beneficios, la

constitución de reservas de capital, de previsión social o de servicios y

las que integren los fondos comunes. Los ejidos colectivos ya

constituidos como tales o que adopten la explotación colectiva

podrán modificar o concluir el régimen colectivo mediante

resolución de la asamblea, en los términos del artículo 23 de esta ley.

165

Trujillo, Jorge Martín, El Ejido, símbolo de la Revolución Mexicana. Disponible en:

http://www.ub.edu/medame/PSTrujillo.pdf Consultado en diciembre de 2010.

85

El texto original del artículo 27 constitucional establecía limitaciones para la

enajenación de la propiedad comunal, señalando al respecto lo siguiente:

VI. Los condueñazgos, rancherías, pueblos, congregaciones, tribus y

demás corporaciones de población que de hecho o por derecho guarden

el estado comunal; tendrán capacidad para disfrutar en común las

tierras, bosques y aguas que les pertenezcan o que se les haya

restituido o restituyeren, conforme a la ley de 6 de enero de 1915; entre

tanto la ley determina la manera de hacer el repartimiento únicamente de

las tierras.

VII. (…) Se declaran nulas todas las diligencias, disposiciones,

resoluciones y operaciones de deslinde, concesión, composición,

sentencia, transacción, enajenación o remate que hayan privado total o

parcialmente de sus tierras, bosques y aguas a los condueñazgos,

rancherías, pueblos, congregaciones, tribus y demás corporaciones de

población que existan todavía, desde la Ley del 25 de junio de 1856; y del

mismo modo serán nulas todas las disposiciones, resoluciones y

operaciones que tengan lugar en lo sucesivo y produzcan iguales

efectos. En consecuencia, todas las tierras, bosques y aguas de que

hayan sido privadas las corporaciones referidas, serán restituidas a éstas

con arreglo al decreto de 6 de enero de 1915, que continuará en vigor

como ley constitucional166.

En 1934 se reformó por primera vez el artículo 27, incluyendo en su párrafo

tercero el concepto de núcleos de población, como hiperónimo de pueblos,

rancherías y comunidades. En esa misma reforma se establecieron, en las

fracciones X y XI disposiciones relativas al ejido. De este modo, la fracción X

señalaba:

X. Los núcleos de población que carezcan de ejidos o que no

puedan lograr su restitución por falta de titulares, por imposibilidad de

identificarlos o porque legalmente hubieran sido enajenados, serán

dotados con terrenos, tierras y aguas suficientes para

constituirlos, conforme a las necesidades de su población; sin que en

ningún caso deje de concedérseles la extensión que necesiten, y al

166

Texto original del artículo 27 constitucional. Derechos del pueblo mexicano, México a través de

sus constituciones, (1985) Cámara de Diputados, Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, Tomo IV, p.1560.

86

efecto se expropiará por cuenta del Gobierno Federal, el terreno que

baste a ese fin, tomándolo del que se encuentre inmediato a los

pueblos interesados167.

La reforma del artículo 27 constitucional, publicada el 10 de agosto de

1987, señalaba en la parte final del párrafo tercero:

Los núcleos de población que carezcan de tierras y aguas o no las

tengan en cantidad suficiente para las necesidades de su población,

tendrán derecho a que se les dote de ellas, tomándolas de las

propiedades inmediatas, respetando siempre la pequeña propiedad

agrícola en explotación168.

El municipio de Huixquilucan se ubica en una de las entidades federativas

en donde el Partido Revolucionario Institucional tiene una importante presencia.

De acuerdo con las cifras del Instituto Electoral del Estado de México, en las

elecciones del 2006 para elegir Gobernador, con una lista nominal de 134,216

electores y una votación total de 59,327 votos, el candidato a la gubernatura de la

Alianza por México, constituida por el Partido Revolucionario Institucional y el

Partido Verde Ecologista de México, alcanzó 24,343 votos, lo que representó el

41.22% del total. El Partido Acción Nacional fue su más cercano competidor, con

un total de 22,798 votos y el 38.60% del total de la votación169. Lo anterior

significa que el margen de competitividad en el municipio es muy alto, puesto que

el partido triunfador alcanzó únicamente un margen de victoria de 2.69% sobre su

principal opositor.

167

Reforma al artículo 27 constitucional. Decreto publicado el 10 de enero de 1934, en el Diario

Oficial. En 1992 se derogaron las fracciones X a XIV de este artículo. 168

Reforma al artículo 27 constitucional. Decreto publicado en el D.O. el 10 de agosto de 1987.

También con la reforma décimo quinta reforma al artículo 27 constitucional, publicada en el D.O. el

6 de enero de 1992 y “con el propósito de dar certidumbre jurídica en el campo, se dio fin al

reparto agrario”, y se modificó el texto del párrafo tercero de dicho artículo, suprimiendo su parte

final. Derechos del Pueblo Mexicano, México a través de sus constituciones, op.cit., volumen IV, p.

1553. 169

Instituto Electoral del Estado de México. Análisis de Resultados Electorales. (2006)

87

A partir de 1940 se inició el proceso de industrialización en el Valle de

Toluca, lo que generó un incremento demográfico en la región. En la década de

los sesenta se inició la construcción del fraccionamiento residencial La Herradura

y en 2004 la del fraccionamiento Bosque Real – uno de los más lujosos de México

- en terrenos vendidos por los ejidatarios de San Bartolomé 170.

Aunque durante muchos años la agricultura representó una de las

actividades básicas en el poblado, San Bartolomé cuenta con minas de arena, de

las que se extrae piedra, grava y tepetate, por lo que los ejidatarios obtienen

ingresos de la venta de estos materiales o del arrendamiento de los terrenos.

Uno de nuestros entrevistados, oriundo de San Bartolomé, nos explica:

Hubo una época muy difícil. Vino gente a proponer la compra de esas

tierras. La necesidad de la gente, y viendo la situación de que las

cosechas ya no eran como antes, y cuando el gobierno no te apoya,

tienes la tierra pero no hay recursos económicos, entonces vienen

personas, empresarios. Mi tío y mi papá vendieron. Como dicen: El

dinero en manos de pobres, pobre dinero. El dinero se acabó,

despilfarrado”.

En San Cristóbal ellos también vendieron. Bosque Real se construyó

con San Bartolito y San Cristóbal, y ahora van por Magdalena. En un

tiempo vamos a acabar como el pueblito de Tecamachalco,

encerrados, nada más el pueblito, y afuera pura zona residencial171

.

Así ocurrió con las tierras de San Bartolomé que formarían parte del

ostentoso fraccionamiento residencial de Bosque Real. Como escuchamos de voz

de los ejidatarios durante nuestras entrevistas, uno de los ejidatarios gastó el

pago que le hicieron por esa venta en una sola noche, y murió al día siguiente.

170

Los terrenos de Bosque Real se compraron a los ejidatarios de San Bartolomé y San Cristóbal

en 60 pesos el metro cuadrado, pagándose a cada ejidatario la cantidad de 1 millón 200 mil pesos. A la fecha, el metro cuadrado de terreno se cotiza en mil 200 dólares. Periódico El Universal, 26 de abril de 2004. Según esta misma fuente, “la construcción del fraccionamiento Bosque Real generará alrededor de 20 mil empleos para trabajadoras domésticas, jardineros, meseros, vigilantes y choferes”. 171

Entrevista realizada por Eduardo Vesga a un joven originario de San Bartolomé, de la familia

Urbina que, según su dicho, ha ocupado durante muchos años diversos cargos de representación en el poblado.

88

La idea de que el gobierno debe proporcionar los apoyos está tan

extendida, como aquellas que plantean que también el gobierno tiene la culpa de

todos los males que aquejan a la sociedad, las carencias y dificultades

económicas y sociales. Es importante observar cómo la presencia de los otros, los

extraños, los que viven en lujosas residencias y construyen conjuntos

amurallados, genera en los habitantes de las zonas tradicionales la impresión de

estar cercados, encerrados. No pueden transitar libremente por esos sitios, sólo lo

pueden hacer para emplearse, y siempre que cumplan con las condiciones que se

les imponen.

Los originarios son personas que nacieron en San Bartolomé, pero que

además provienen de familias con determinados apellidos, de ejidatarios o

comuneros con un fuerte arraigo a su tierra y apego a las costumbres, prácticas

religiosas y comunitarias. El vínculo que mantienen con la tierra, lo expresa un

joven originario de la siguiente manera:

Lo que nos han inculcado es el respeto a la tierra que es nuestra.

Vengo de una familia campesina, mi padre era campesino, mi abuelo

era campesino, mis tíos campesinos. La tierra nosotros la

trabajábamos. Es muy diferente tener tierra que trabajar la tierra. El

amor por la tierra, por lo tuyo. La mayoría de la gente que la ha vendido

es porque se ha visto en situaciones apretadas, por necesidad. Yo le

aseguro que si la gente tuviera lo elemental, y pudiera salir

adelante sin vender la tierra, no lo haría. Es algo que viene de

generación en generación. Esa tierra se la heredó mi abuelo a mi

padre. De mí a mis hijos. Son cosas a lo mejor no de valor, pero de

identidad de uno172

.

Esta relación de generación en generación con la tierra, es la que permite a

los originarios reclamar derechos en las relaciones políticas. No basta nacer en

San Bartolomé para ser considerado originario. Como lo señala uno de nuestros

172

Entrevista realizada por Eduardo Vesga a un joven originario de San Bartolomé, en diciembre

de 2009. Algunas fuentes refieren que muchos de los propietarios fueron obligados a vender.

89

entrevistados originarios, existen familias que tienen viviendo en San Bartolomé

varias generaciones, sin que puedan ser considerados como originarios.

Las familias de los auténticos originarios son las que llevan apellidos como

Ibáñez, Juárez o Urbina…, porque aunque la familia Roque tiene viviendo en San

Bartolomé varias generaciones, no son de los auténticos originarios 173.

En otro contexto y para un país distinto, Mauricio Pilatowsky afirma: “la

tierra sólo se pone por encima de los muertos. Millones de personas han sido

sacrificadas en este culto idólatra por la arcilla”174. Sin embargo, es evidente que

en Huixquilucan, como en muchos otros lugares, se ha despojado de sus tierras –

su único patrimonio - a miles de campesinos pobres, convirtiendo sus ejidos en

lujosos fraccionamientos, abusando de su miseria y a cambio de unas

monedas175.

Los oriundos sienten que tienen más derechos que los avecindados, que

ellos deben ser quienes legítimamente tomen las decisiones en el pueblo o

puedan ser designados representantes o autoridades. El entrevistado continúa

diciendo:

Esos cerros tienen historia que nuestros viejos nos contaban. Aquí

en San Bartolomé, el Señor de Esquipulas es nuestro patrón. Mi padre

nos decía que aquí iba a ser Chalma, eso es lo que mi abuelo le

contaba. Son leyendas de gente antigua. En el cerro allá arriba hay

árboles frutales, Se supone que por una aparición en la punta del cerro

(Coatepetl, o Cerro de las Serpientes), los pobladores se asustaron y

los corrieron, y por eso se fueron a Chalma. Debido a eso nuestro

patrón, el Señor de Esquipulas, es igual al de Chalma 176

.

173

R.R. nos expresó lo anterior, aunque en el listado de dotación del ejido de 1934, al cual, por él

mismo tuvimos acceso, se incluye a cuatro campesinos de apellido Roque. 174

Pilatowsky, Mauricio. (2008) La autoridad del exilio. México, Plaza y Valdés/FES Acatlán,

Universidad Nacional Autónoma de México. 175

En Chiapas por ejemplo, miles de indígenas han sido expulsados de las tierras que dedicaban a

cultivos tradicionales, para ser utilizadas por empresas cafetaleras. 176

El Señor de Esquipulas es llamado también Cristo Negro de Esquipulas y su imagen es muy

conocida en países de Centro América y México. La identidad generada por la devoción al santo

patrón aglutina individuos y grupos sociales diversos. En realidad, mientras que el Santuario del

Cristo Moreno de Chalma se fundó en 1573, el de Esquipulas, en Guatemala, se fundó en 1597.

90

IMÁGENES DEL TEMPLO DE SAN BARTOLOMÉ COATEPEC, MUNICIPIO DE HUIXQUILUCAN

Fuente satelital

91

Los sitios con historia, ya se trate de cerros, ríos o terrenos, son parte del

entorno en que habitan los pobladores de San Bartolito y que conforma su

identidad. Es el locus en donde se sitúan, el lugar de pertenencia.

La palabra avecindado deriva del latín vicīnus, de vicus, barrio, lugar y de

acuerdo con el Diccionario de la Real Academia Española, significa “el que habita

con otros en un mismo pueblo, barrio o casa”. Avecindado puede ser, a veces,

quien no tiene un vínculo de propiedad con la tierra, no es ejidatario ni comunero;

es el desposeído, el que sólo tiene su fuerza de trabajo; pero también se

encuentran aquellos avecindados que adquirieron propiedades.

Los avecindados son gente que viene de fuera y llegó a vivir en San

Bartolito, no pertenecen al grupo de ejidatarios que recibieron la dotación original

del ejido ni son comuneros y su relación con la tierra es distinta de la que

mantienen los originarios; son extraños que, por no ser nativos del lugar, no

reciben el mismo trato que los originarios, a menos que establezcan vínculos

sentimentales, jurídicos o políticos con los oriundos, pertenezcan a una clase

social acaudalada, sirvan a los intereses o reciban la bendición divina o la

protección de las altas esferas del poder.

Hasta hace poco, muchos de los avecindados no podían participar en las

fiestas de los originarios, ni podían ocupar cargos públicos o de representación

comunitaria. Como explica Cristina Sánchez Mejorada, a diferencia de los

originarios, los avecindados o arrimados están obligados a pagar cuotas por el

uso de agua o para los festejos de las fiestas patronales.

No obstante lo anterior, en los últimos años, en Huixquilucan casi todos los

presidentes municipales han nacido fuera del municipio y mantienen intereses

ajenos a los pueblos. Llegar a Huixquilucan, como caído del cielo, permite a los

ungidos ocupar una posición social y política relevante, no obstante su condición

de avecindados.

Respecto de la caracterización de la cultura política en Huixquilucan, como

en muchos municipios de México, Cristina Sánchez Mejorada sostiene:

92

La corrupción de las autoridades, su incompetencia (…) aunada a una

cultura política autoritaria, basada en redes de patronazgo y

compadrazgo, prácticas clientelares y caciquiles e incluso la

violencia política y el narcotráfico son, entre otros muchos,

elementos que han convertido o consolidado a los municipios como

espacios naturales de lucha y control, lo que los convierten en espacios

profundamente antidemocráticos cooptados por grupos y redes de

poder177

.

Vale la pena comentar la situación de una de nuestras jóvenes

entrevistadas. Aunque ha participado como funcionaria electoral en el Instituto

Electoral del Estado de México en varias elecciones, su condición de avecindada

proveniente de una clase social modesta, no le ha permitido hasta hoy ocupar un

posición relevante en la estructura política municipal. Ella no es hija de ningún

cacique del pueblo ni pertenece a alguna familia pudiente. Sus apellidos no son

Ibáñez, Juárez o Roque, que son aquellos que durante décadas han mantenido el

control político en San Bartolomé.

Las cosas en San Bartolomé no difieren de las que se presentan a nivel

nacional, a nivel estatal, en otras entidades federativas o en otros municipios de

México. Como sabemos, por ejemplo, Miguel Alemán Valdés fue Gobernador de

Veracruz de 1936 a 1940, y Presidente de la República de 1946 a 1952; su hijo,

Miguel Alemán Velasco, fue Gobernador de Veracruz de 1998 a 2004.

En Michoacán, tres generaciones de la familia Cárdenas han ocupado la

gubernatura: Lázaro Cárdenas del Río (1928-1932); su hermano, Dámaso

Cárdenas del Río (1929) (1950-1956); Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y Lázaro

Cárdenas Batel (2003-2008). No puede omitirse que el ingeniero Cuauhtémoc

Cárdenas estuvo cerca de ser Presidente de la República en 1988, de no ser por

la caída del sistema.

En el Estado de México, apellidos como los Del Mazo, Huitrón o Jacob,

entre otros, se han escuchado a lo largo de sucesivas generaciones. Alfredo del

Mazo Vélez, quien se dice, fue sobrino del gobernador Isidro Fabela (1942-1945),

177

Sánchez Mejorada F., María Cristina. (2009) “La democracia que nunca llegó”, op.cit., p. 1.

93

lo sucedió en el cargo de 1945 a 1951; su hijo, Alfredo Hilario Isidro del Mazo

González, ocupó la gubernatura de 1981 a 1986; y a partir del 2009, el nieto,

Alfredo del Mazo Maza fue Presidente Municipal de Huixquilucan, y uno de los

más fuertes aspirantes a suceder en el cargo al gobernador Enrique Peña Nieto.

Enrique Jacob Gutiérrez fue Presidente Municipal de Naucalpan en varios

períodos: en 1920, de 1928 a 1929, de 1932 a 1933; de 1940 a 1941. Su hijo,

Enrique Jacob Soriano, ocupó la presidencia del mismo municipio de 1964 a

1966, y el nieto, Enrique Jacob Rocha, originario de Naucalpan, también fue

Presidente Municipal de ese municipio de 1994 a 1996; Jacob ha sido Diputado

federal de la LV Legislatura y Diputado local por el Distrito 29 de Naucalpan.

En otros niveles se reproduce el mismo esquema. Carlos Cadena, hijo de

Manuel Cadena, Diputado, ex Secretario General de Gobierno en la

administración de Arturo Montiel, fue Diputado local, Secretario de Desarrollo

Económico y Secretario de Desarrollo Metropolitano en el gobierno de Enrique

Peña.

Aunque el Estado de México es una de las entidades federativas en las que

el Partido Revolucionario Institucional mantiene una fuerte presencia y ha

conservado el poder a nivel de la gubernatura, el Partido Acción Nacional,

aprovechándose de las pugnas internas en el PRI, impulsado por el efecto Fox y

con el apoyo de grupos de avecindados, obtuvo el triunfo para ocupar el cargo de

presidente municipal de Huixquilucan en el período 2000 a 2003.

En el listado de presidentes municipales de Huixquilucan, José Eligio,

Bibiano, Ignacio, Roque, Enrique, Javier, Fernando, llevaron el apellido García.

Antonio Huitrón Vera fue Presidente Municipal de Huixquilucan de 1985 a 1987, y

también lo fue su primo, Abel Huitrón Rosete, de 1994 a 1996. Estos últimos,

familiares del ex Secretario General de Gobierno en la gestión de Alfredo del

Mazo Vélez, Abel Huitrón y Aguado, y del ex rector interino de la Universidad

Autónoma del Estado de México Antonio Huitrón Huitrón178.

178

Garduño Ramírez, Guillermo. “De Poder a Poder”, Periódico local del Estado de México: El

Diario, 16 de marzo de 2009.

94

Acerca de estos privilegios de parentesco, uno de los caciques priístas de

San Bartolomé manifiesta su inconformidad con estas prácticas y nos comenta:

“Por ejemplo ahorita, unos cuantos diputados hay hijos de gobernadores o ex

gobernadores. Cuántos diputados hay hermanos o primos de los gobernadores.

Eso pega abajo179.

De acuerdo con nuestro estudio, un reducido número de jóvenes en San

Bartolomé militan o son simpatizantes del Partido Revolucionario Institucional, y la

mayoría son mujeres.

La participación de las mujeres.

La creciente participación de las mujeres en diversos aspectos de la vida

social, se ha hecho presente también en los asuntos políticos. En nuestro trabajo

de campo, varias de nuestras entrevistadas han sido mujeres. Aquí se presentan

datos que se desprenden de las entrevistas que les hicimos y que reflejan su

interés en la política y la convicción de pertenecer y participar en un partido

político como el Partido Revolucionario Institucional. De acuerdo con la

información obtenida, de los jóvenes que en San Bartolomé militan o son

simpatizantes del Partido Revolucionario Institucional, la mayoría son mujeres180.

No obstante lo anterior, las mujeres tienen una participación todavía

limitada: ningún presidente municipal en Huixquilucan ha sido hasta hoy mujer, y

en la actual integración de la Legislatura local únicamente cuatro diputadas de la

bancada priísta mexiquense son mujeres jóvenes.

179

Entrevista realizada por Rodolfo Roque y Eduardo Vesga Urbina, en San Bartolomé, en

diciembre de 2009. Como señala Robert Dahl: “Como es típico, los miembros más privilegiados de la sociedad, las elites políticas, sociales y económicas, si se quiere, apoyan y, cuando pueden, incluso hacen que se respeten las doctrinas que justifican su superioridad”. La igualdad política. (2008) México, Fondo de Cultura Económica, p.37. 180

Así lo refiere una de nuestras entrevistadas cuando le preguntamos: “¿Más mujeres que

hombres?: Yo creo que sí.” De nueva cuenta, la misma entrevistada señala: “Yo creo que las mujeres están participando más”. Entrevista realizada por Rodolfo Roque y Eduardo Vesga Urbina. Diciembre de 2009.

95

La diputada federal por el 8 distrito en Tultitlán, Sandra Méndez Hernández,

de treinta y un años, fungió como Secretaria de Organización de Mujeres Jóvenes

del Comité Directivo Estatal181.

Ocho de las trece regidurías del Ayuntamiento de Huixquilucan (2009-

2012) están ocupadas por mujeres182. Pero aunque en este caso el porcentaje de

participación de las mujeres es alto, el recuento que hemos presentado durante

este estudio de las mujeres y jóvenes que contendieron por diputaciones locales y

federales en 2009, nos lleva a concluir que se trata de categorías sociales y

grupos de edad desfavorecidos por el sistema político. Como se ha señalado, si

bien es cierto que existe un discurso a favor de los jóvenes, en el proceso

electoral de ese año, del total de candidatos priístas para ocupar las presidencias

municipales, un número muy reducido fueron jóvenes, y sólo tres mujeres

jóvenes.

Es en este escenario en el que la cultura y los imaginarios políticos de los

jóvenes que habitan en San Bartolito confluyen, pero también se enfrentan. Los

hijos de los caciques, por ejemplo, se dicen orgullosos por su pertenencia

partidaria, porque afirman que el país y las instituciones son el resultado de los

gobiernos de militantes de su partido. Sin embargo, una joven priísta originaria de

San Bartolomé reconoce que las elecciones municipales de 2009 no fueron

ganadas de manera limpia por su partido y que se repartió dinero antes y el

mismo día de la elección.

La identificación de muchos jóvenes hacia un partido político tiene que ver

con la conveniencia. En este sentido, un militante priísta avecindado se expresa

de la siguiente manera, cuando le preguntamos cómo son los jóvenes priístas de

Huixquilucan:

A ellos lo que les interesa es el dinero. Lo único que les interesa es el

dinero. Salen con la ilusión de que van a ganar mucho. Es una gran

181

http://www.priedomex.org.mx/ Consulta realizada en julio de 2010. 182

El dato es contrastante, pues a nivel nacional, a la fecha (2011) sólo una mujer a nivel nacional

es Gobernadora: en Yucatán, Ivonne Ortega Pacheco, sobrina del ex Gobernador priísta Víctor Cervera Pacheco.

96

frustración. Son pragmáticos porque no traen un fundamento ideológico

que defiendan. Los jóvenes de ahora no saben eso, lo que quieren es

dinero, dinero, dinero.

Yo tuve la oportunidad de llegar como Delegado del Directivo Estatal.

Te tienen que respetar. Cuando vienes con un cargo, te tienen que

respetar. Es gente muy sencilla, te respeta, pero además como vienes

con cargo. Son muy amables, te abren la puerta, pero no invadas sus

espacios porque ya no eres bien aceptado, ya llegas a competir con

ellos. Es parte de nuestra cultura, parte de la ideología del mexicano.

Ya vienes a competir. Eso es lo que le pasa a la gente oriunda de

Huixquilucan. Los avecindados no. Como se va haciendo una

mezcla, empieza a cambiar la forma de ver las cosas. Los hijos salen a

Toluca, salen al Distrito Federal, y empieza el proceso de

desculturización. Los jóvenes ya no participan en las fiestas, en los

Comités. No, porque los grandes caciques eran quienes decidían

quiénes iban o quiénes no iban, les coartaban libertades a jóvenes

que querían participar 183.

Cuando no son los padres priístas quienes inducen la participación de sus

hijos, las razones por las que ellos participan, como afirma Woldenberg, son de

naturaleza pragmática, más que ideológica. Este pragmatismo está representado

en dinero, en la promesa de un empleo en la administración pública o de un cargo

de elección popular. Así lo reconoce uno de nuestros entrevistados, antiguo líder

priísta de San Bartolomé, cuando sostiene:

Los jóvenes están motivados. Ahorita participaron muchos jóvenes en la

campaña de Alfredo. Esos jóvenes participaron por algo. Qué les voy a

ofrecer ahorita a esos jóvenes. Para la siguiente campaña no van a querer.

O como ya vieron van a decir participo pero con tanto. No vamos a

avanzarle. Los jóvenes muy pocos son los que se pueden poner las pilas

para sacar un buen liderazgo.

183

Entrevista realizada por Eduardo Vesga Urbina a un experimentado militante priísta, avecindado

de Huixquilucan. De él es la expresión: “como caído del cielo”, que empleamos en este trabajo para referirnos a quienes llegan al poblado con un cargo o un nombramiento de las autoridades. “Así es, si te manda el Presidente de la República, tienen que hacerte caravanas. No importa que seas avecindado, porque vienes de Toluca”, dice nuestro entrevistado.

97

Del testimonio de este entrevistado se desprende cómo muchos de los

jóvenes priístas que participaron en la campaña del presidente municipal de

Huixquilucan lo hicieron únicamente por un interés económico, más que político.

La opinión de este líder priísta se reafirma con la que expresa una joven

militante priísta avecindada de San Bartolomé:

Cuando ganó Acción Nacional en el 2000 antes eran panistas, son

jóvenes que no tienen identidad firme. Si ganara el PRD se pondrían

una camiseta amarilla y no tendrían ningún problema. Tiene que ver

con cómo fortaleces tu identidad política.

El Estado de México es una de las entidades de la república con un mayor

porcentaje de habitantes jóvenes, si por ello entendemos a quienes tienen una

edad entre los 18 y los 29 años184. Esta entidad federativa se ha caracterizado por

ser un bastión del Partido Revolucionario Institucional, que a pesar de los

descalabros sufridos a nivel nacional, ha logrado conservar el poder en la

gubernatura y en la mayoría de los ciento veinticinco municipios. En alianza con

otros partidos, el PRI ha contado con el apoyo de partidos como el Partido Verde

Ecologista de México o el Partido Nueva Alianza, que han incorporado en sus filas

a jóvenes.

Pocas palabras tienen un significado más cercano al de imaginarios que la

de jóvenes. De acuerdo con la noción de Michel Maffesoli, imaginario y utopía

son conceptos estrechamente vinculados. El primero impulsa o dota de fuerza a la

utopía, que es al mismo tiempo una manifestación de lo imaginario. Para este

autor, en la utopía, como hecho social, se encuentran mezclados el pasado y el

futuro.

En cada época, la concepción de lo posible está determinada por

condiciones particulares; por lo tanto, el adjetivo “utópico” no se refiere a lo que

184

De acuerdo con cifras del INEGI, alrededor de 5 millones de habitantes en el Estado de México tienen entre 15 y 34 años. Datos de 2011.

98

carece de lugar propio, “sino más bien a aquello cuya aparición está vedada por el

poder de las sociedades establecidas 185.

De este modo, imaginarios y utopías son manifestaciones sociales para

asumir una posición crítica frente a la realidad y proponer realidades posibles

diversas. Así, los jóvenes expresan utopías, sueños diurnos; diseñan propuestas

fantasiosas e imaginan mundos distintos. Para los adultos, los jóvenes

representan lo que fueron, sus proyectos, ilusiones, planes, aventuras y osadías.

Cuando somos jóvenes pensamos que podemos comernos el mundo, o que

podemos transformarlo. Para los jóvenes los límites son para romperse, las

bardas para saltarse y las reglas no los obligan, les prohíben o amenazan para

realizar conductas que quieren llevar a cabo; sino que son instrumentos para

jugar o para entonar melodías distintas de las que escuchan los adultos, que

aburren su oído y por ello prefieren escuchar las propias.

Los imaginarios nos ofrecen un mundo de posibilidades creativas que los

jóvenes construyen a diario para la nueva rola, el próximo ligue, las próximas

vacaciones, el plan de la banda o un nuevo look. Decir juventud es hablar de

innovación, rebeldía, labilidad, entusiasmo y fortaleza. Pensar en los jóvenes

también es proyectar un mejor futuro. La juventud es símbolo de esperanza,

cambio, progreso.

Es evidente que aunque las categorías de jóvenes comparten múltiples

características que los identifican y conforman como un universo homogéneo,

existen diversos factores que determinan al mismo tiempo su carácter

heterogéneo. Los jóvenes de la clase alta difícilmente coincidirán con los de las

clases media o baja. Los jóvenes que estudian en escuelas públicas son distintos

de quienes lo hacen en escuelas privadas; los que trabajan y estudian, y quienes

únicamente trabajan o estudian, o aquellos que han sido forzados a integrar la

generación “nini”, porque ni trabajan ni estudian. También están los jóvenes que

se enrolan en el narcotráfico o los que son contratados para cubrir plazas en la

185

Marcuse, H., Vers la liberation, p. 12, citado por Maffesoli, Michel, Lógica de la dominación,

España, Ediciones Península, p. 47.

99

policía, con el riesgo que conlleva su inexperiencia para enfrentar a los grupos

más peligrosos de la delincuencia.

La visión amable de los jóvenes contrasta con otras que se han encargado

de estigmatizarlos: en este sentido, decir juventud es pensar en delincuencia, en

drogadicción, en sexo desenfrenado, movimientos de protesta y desorden. En

este sentido, juventud es sinónimo de inexperiencia o irresponsabilidad.

La clase política, constituida como élite y oligarquía impulsada por diversos

grupos empresariales, cámaras y confederaciones, sindicatos cooptados y demás

corporaciones que cumplen una eficaz tarea como grupos de presión, ha

encontrado en la juventud una singular bandera política. Lo mismo que el

campesinado o el sector obrero, los jóvenes siempre son mencionados en los

discursos políticos. Para ellos se trabaja, por ellos se lucha, en ellos se piensa.

Pero al igual que los campesinos, los obreros y los indígenas, los jóvenes, y sobre

todo los desposeídos, son uno de los sectores más desvalidos de la sociedad: un

porcentaje limitado tiene acceso a la educación superior, al empleo, a los cargos

públicos o de representación política. No obstante lo anterior, el discurso de la

clase política siempre está atento para convocarlos, para pedir su voto y su

participación.

La nueva generación de políticos es la generación de los jóvenes, aunque

no de todos, sino de aquellos que pertenecen a las familias de quienes se

consideran propietarios de los cargos públicos y, como al estilo de las monarquías

absolutas, se sienten con derecho para heredar el poder. Así lo hacen en el

Estado de México familias enteras en donde el abuelo, el padre y el hijo han sido

presidentes municipales, diputados o senadores. No son otros sino los mismos,

con nuevas caras pero el mismo linaje o los mismos apellidos186.

186

La idea se reafirma con la lista de nombres de los colaboradores del equipo de transición del

Presidente electo, Enrique Peña Nieto. Entre ellos, destacan Andrés Massieu, hijo del ex secretario particular del ex presidente Carlos Salinas de Gortari; Enrique de la Madrid Cordero, hijo del ex presidente Miguel de la Madrid Hurtado; y Alejandro Murat Hinojosa, hijo del ex gobernador de Oaxaca, José Murat.

100

Hablar de la transformación de una categoría social en grupos de

interés187, supone la interacción entre los miembros de un grupo para buscar

objetivos comunes, y la conformación de vínculos entre los integrantes de ese

grupo. Tal vez resulte fantasioso pensar en grupos de interés de jóvenes con una

conciencia de sí mismos, planteando derechos exigibles para obtener espacios

educativos, de diversión y deporte, oportunidades de empleo, cargos públicos y

de representación política: grupos de interés conformados por auténticos jóvenes

que defiendan derechos para todos los jóvenes y no únicamente para quienes

pertenecen o tienen relación con la clase política188.

Cada año se incorporan al mercado electoral millones de clientes jóvenes.

Algunos de ellos, inexpertos e ingenuos, se dejan persuadir por el canto de las

sirenas de los políticos que ofrecen cambios y mundos diferentes. Otros muchos,

tal vez la mayoría, no creen en esos discursos y reconocen los engaños.

Identifican la política institucional con corrupción y mentiras. Observan las

imágenes de los viejos políticos camuflados como jóvenes, vistiendo como ellos,

sonriendo y adoptando su “nueva actitud”.

En el escenario de lo político, jóvenes priístas originarios y avecindados, se

enfrentan en un proceso de nosotros-ellos, que construye sus identidades, los

identifica y excluye al mismo tiempo.

187 Ayala Blanco, Fernando y Mora Velázquez, Salvador, El estudio de los grupos de poder en

México, Universidad Nacional Autónoma de México, 2010. Los autores señalan: “Al hablar de grupos de interés, estamos conceptualizando a toda asociación de personas o instituciones organizadas, que tienen intereses, valores o deseos comunes. Indudablemente se estructuran para beneficiarse a sí mismos –como grupo— en detrimento, muchas veces, de otras agrupaciones o de la misma ciudadanía. Es más, en términos generales, realizan acciones encaminadas a influir o afectar en las instituciones del poder público”. 188

Por supuesto, estas líneas fueron escritas antes de que surgiera en nuestro país el movimiento

juvenil Yosoy132.

101

Imaginarios de los jóvenes de San Bartolomé.

En San Bartolomé no existe una categoría homogénea de jóvenes que

compartan valores, intereses o prácticas sociales. De este modo, una primera

clasificación de esta categoría puede hacerse entre originarios y avecindados;

aunque también es posible distinguir entre los jóvenes de clases económicamente

altas, medias y bajas.

Los hombres se distinguen de las mujeres jóvenes, y lo mismo ocurre entre

los jóvenes que trabajan y quienes se encuentran desempleados. Es posible

ubicar el universo de los jóvenes hijos o familiares de caciques o dirigentes

priístas, y el de aquellos que no lo son. Es evidente que una gran proporción de

jóvenes no se interesan por los partidos políticos, mientras que sólo una minoría

manifiesta algún interés hacia ellos.

Con estos contrastes, la forma de pensar de muchos de ellos no siempre

coincide con la de la clase social a la que pertenecen. De este modo, como

observó Robert Michels, jóvenes de clase alta se convierten en líderes de las

causas obreras; y no faltan campesinos, obreros o políticos que ascienden en la

escala social, olvidan y traicionan sus orígenes de clase, o defienden los intereses

de su nueva clase.

En este sentido, Michels apunta:

Sin embargo, podemos decir sin temor de equivocarnos que la gran

mayoría de jóvenes burgueses que van hacia el socialismo lo hacen, para

citar una expresión citada por Felice Monmigliano, con perfecta sinceridad

e inspirados por ardiente buena voluntad. No buscan la aprobación

popular, ni la fortuna, ni las distinciones, ni los puestos bien pagados.

Piensan solo que el hombre debe estar en paz con su propia conciencia y

debe afirmar su fe con la acción189.

189

Michels, Robert, op.cit., Vol. II, p. 60.

102

La creencia de que la gente confía más en los jóvenes contrasta con

aquella que los considera inexpertos e irresponsables. Pero la mala fama de los

viejos políticos se quiere encubrir con esos rostros joviales. Se acabó la época de

los viejos para dar paso a los jóvenes políticos. Rostros nuevos para encubrir los

viejos intereses, los intereses de siempre, los de los grupos más poderosos

enquistados en las altas esferas de la política.

Imaginarios priístas.

Como afirma Mirón Lince, a pesar de haber perdido la Presidencia de la

República, el PRI todavía es un partido político con “accesos al poder que

satisfacen las ambiciones personales de sus políticos” e inspira una cultura

política propia, y un gran aprecio por conservar su institución190. A mi juicio,

jóvenes militantes y simpatizantes de ese partido en San Bartolomé, como los de

cualquier otro, tienen además ambiciones y aspiraciones sociales y políticas para

sí mismos, pero también para la comunidad o la sociedad a la que pertenecen.

Estas ambiciones y aspiraciones, representan valores que dibujan la identidad del

partido político en un momento y en un lugar determinado191. Sobre el particular,

Mirón Lince señala:

Existe, aunque no del todo estudiada, una cultura priísta. El arreglo de las

diferencias, y hasta el olvido de las agresiones más injuriosas, hacen parte

de ella. El aprecio y el apuro por la conservación organizativa del partido

es, por otra parte, el fundamento de ese código. Desprovista de

explicaciones teóricas, esa cultura priísta podría ser por ahora retratada

justamente con las palabras de Miguel Alemán que en este texto aparecen

como epígrafe: los priístas estamos acostumbrados a comer ajos y

cebollas y después sonreír.

190

Mirón Lince, Rosa María, (2004) “De la hegemonía a la oposición: el PRI y su cambio

organizativo”, en: Mirón Lince, R. y Ricardo Espinoza Toledo, Partidos políticos en México: nuevos liderazgos y relaciones, México, UAM/UNAM, p. 124. 191

Ibid., p.151. La autora sostiene que “los partidos funcionan con base en los intereses y valores

de sus miembros”.

103

En suma. El PRI, ya sin el Poder Ejecutivo Federal en sus manos, ha

comenzado a funcionar como lo que nunca antes fue: un verdadero

partido político, autónomo, heterogéneo y sumamente complejo192.

Esta apreciación sugiere, desde mi punto de vista, una especie de cinismo

político que, no obstante un desagradable o mal sabor, hace sonreír a quien come

ajos y cebollas. Hay que decir, sin embargo, que además de las virtudes curativas

y medicinales que se atribuyen a estos vegetales, algunos gastrónomos preparan

deliciosos platillos con ellos, por lo que no puede generalizarse que tengan el

sabor desagradable que se les atribuye, en todos los casos y para cualquier

paladar. Por otro lado, algunos investigadores han encontrado efectos del ajo

para reducir infartos cerebrales193, mientras se dice que la cebolla estimula el

apetito, además de que es un diurético y antibiótico natural.

Las satisfacciones que ofrece el poder, ya sea cuando se pone al servicio

de la gente o cuando se emplea para satisfacer intereses personales, genera

también un buen sabor de boca, que quien lo ha percibido lo conoce y lo

aprecia194.

Dependiendo de su origen (originario u avecindado), la clase social a la que

pertenecen, su escolaridad, su situación laboral y vínculos políticos, los jóvenes

priístas de San Bartolomé adoptarán prácticas diversas. El hijo, sobrino o familiar

de algún líder político sólo tendrá que esperar la recomendación de su pariente

para ocupar el cargo público o la propuesta para ser considerado candidato a

algún cargo de elección popular.

192

Ibid., p.153. 193

Científicos de la Universidad nacional Autónoma de México y del Instituto Nacional de

Neurología y Neurocirugía Manuel Velasco Suárez, encontraron que el extracto de ajo envejecido reduce, e incluso inhibe, la muerte celular en un modelo experimental de isquemia cerebral.

http://ciencias.jornada.com.mx/ciencias/noticias/estudian-efectos-del-ajo-en-el-infarto-cerebral Consulta

realizada en diciembre de 2010. 194

Conocemos el caso de don Horacio Torres, un antiguo priísta que en su desempeño como

servidor público del Instituto Nacional de Migración presenció el mal trato que un extranjero daba a una empleada doméstica, de origen indígena. A consecuencia de estos hechos, el también profesor universitario gestionó y logró la extradición del extranjero.

104

Los otros, tendrán que acercarse a los poderosos y ganarse su confianza

mediante su trabajo, componendas o favores. En algunos casos, como el que nos

refiere una de nuestras entrevistadas, la fortuna parece sonreírles:

Una joven de 24 años, de condición económica humilde, comenta que

trabajaba para una empresa de Telemarketing, cuando un día tocó a la

puerta de su casa el candidato del PRI a la Presidencia Municipal de

Huixquilucan, un catorce de febrero. Después de que el candidato le pidió

su apoyo, ella le expresó su interés de incorporarse a su campaña. Dos

años después, la joven se habría convertido en dirigente municipal de la

organización de mujeres de su partido y poco después, en regidora de

Huixquilucan 195.

En la mente de los jóvenes que se incorporan en el Partido coinciden

intereses personales y sociales al mismo tiempo. En el discurso de nuestra

entrevistada se escuchan frases que evocan sentimientos, propuestas de cambio,

promesas y reproches, como:

Político que no toca corazones no sirve” / “me duele la pobreza de la gente

de Huixquilucan”/ “apoyar a la gente de escasos recursos de nuestro

municipio”/ “esto de la política, que yo inicié para hacerlo por necesidad”/

“mi meta era darme a conocer como una mujer joven trabajadora y

comprometida con la gente pero con hechos y con trabajo”/ “demostrar que

aquello de lo que nos quejábamos que era la política de promesas y no

cumplir, ahora demostrar que nosotros podemos hacer un cambio”/ “el PRI

es el partido más fuerte por cómo está organizado”/ “el PRI, con un

gobernador joven, nos está demandando que participemos”/ “yo no

tengo un papá que haya sido diputado o un tío que haya sido

regidor”/ “los jóvenes tenemos todos los dones que se pueden

requerir para ayudar”/ “me apasiona el contribuir a cambiar algo”/ “mi

candidato es un hombre joven, tiene 33 años y es candidato a

presidente municipal”/ “tengo la comisión de formar una estructura de los

jóvenes de la zona tradicional”/ “yo vengo del trabajo, yo vengo de lo que

sé hacer, no vengo porque alguien me impuso”/ “mi papá no tenía

inclinación política, mi mamá siempre ha votado por el PRI por algo,

no sé, corazonada”/ “no todos somos iguales, los malos políticos sí hay,

195

Entrevista que realicé a una dirigente juvenil priísta de la asociación: “Impulsando a una

realidad joven”. Abril de 2009.

105

pero no es una cuestión de partido”/ “es un ambiente donde todo mundo

quiere estar arriba de todo mundo, yo no he tenido que caer en eso”/

“orgullosamente lo único que me ha permitido estar en donde estoy es mi

trabajo”/ “en nuestra organización, todas las personas que forman parte de

ella son originarias, aunque aquí las puertas están abiertas para

todos”/ “siento y me duelen sus adultos abandonados, los niños pobres, si

a alguien le duele la gente de Huixquilucan es a mí, y lo siento de todo

corazón”/ “se dice que quienes vamos a decidir elecciones a futuro

somos los jóvenes”/ “el gobernador cree en nosotros los jóvenes,

que tenemos las ganas, él ha puesto mucha fe en los jóvenes”/

Como puede advertirse, en las palabras de nuestra entrevistada se destaca

la importancia que en el discurso de los políticos tienen los jóvenes, como opción

de futuro y de cambio. Vale la pena mencionar la referencia reiterada a su

incursión en la política, sin tener un papá o un tío que haya sido diputado o

regidor, mientras que el entonces candidato y hoy presidente municipal, tenía

justamente estas condiciones biográficas. Es paradójico también destacar que

aunque en la organización que dirige nuestra entrevistada “las puertas están

abiertas”, ningún avecindado pertenece a ella.

La entrevistada dice ser oriunda de Huixquilucan y dirige una agrupación

de jóvenes mujeres priístas. Ella afirma, haciendo alarde de su sensibilidad, que

tiene muy presente la frase: “político que no toca corazones no sirve”.

Al mismo tiempo, destaca algunos obstáculos a los que se enfrentan las

mujeres:

A las mujeres nos tomaban así como: “hay sí, ya le dio las naylon (sic) yo creo a tal,

y por eso está ahí.” Inclusive las mismas priístas. Orgullosamente puedo decir

que lo único que me ha llevado a tener lo que tengo y a ocupar la posición en que

estoy ha sido mi trabajo. Que realmente sí se puede. Que los jóvenes debemos

demostrar que sí se pueden cambiar las cosas, con un trabajo honesto. Hasta

ahorita yo puedo decir que a nadie le he robado nada, al contrario, yo he tenido que

poner de mi dinero.

En la agrupación política que dirige participan únicamente originarios, y

aunque cuando se le pregunta al respecto señala que las puertas están abiertas

106

para todos, sean originarios o avecindados, durante la entrevista que le hice

reconoció diferencias entre ellos:

Eso es lo que sentimos nosotros, si alguien que tuviera un mismo cargo y

no fuera de Huixquilucan, yo creo que eso no sería para cuestionárselo,

esa pasión y ese sentimiento que te une de nacimiento a tu tierra es

la que te impulsa doblemente a dar lo mejor, y esa sensibilidad que

sientes le hace falta a la otra persona. Yo lo hago y te aseguro que es

así, porque es mi gente y es la que me duele.

Yo tengo 24 años viviendo en Huixquilucan, y he vivido sus carencias, he

vivido su pobreza, siento y me duelen sus adultos abandonados, los niños

pobres. Si a alguien le duele la gente de Huixquilucan es a mí. Algo que a

lo mejor pocos van a decir, o a la gente que sea no sea nativa de

aquí, tendrá el fundamento para expresarlo. Yo sí lo tengo y lo siento

de todo corazón. Es una de las cosas que me impulsa a hacerlo (…)

En otras palabras, en opinión de la entrevistada los originarios cuentan con

sensibilidad que no tienen quienes no lo son, además de que realizan un esfuerzo

doble debido a la pasión y al sentimiento que los une a su tierra por haber nacido

en ella.

No obstante estas características de sensibilidad (“político que no toca

corazones no sirve”) que pudieran no ser exclusivas de las mujeres, ella se refiere

a una de las candidatas priístas jóvenes que ocupó la dirigencia de la agrupación

estatal de jóvenes mujeres priístas y que en el momento de la entrevista era

candidata a presidente municipal196.

Precisamente por eso el gobernador del Estado de México está muy

interesado en convocar y captar la mayor votación de jóvenes.

El gobernador cree mucho en nosotros los jóvenes. Cree que tenemos

las ganas, las ideas y los proyectos. El gobernador ha puesto la fe en

muchos jóvenes, tan es así que la mayoría de los candidatos a

presidentes municipales en el Estado de México son jóvenes. El caso

de mi dirigente estatal que es mujer y es joven. Es una mujer

196

Se refiere a Alejandra Paulina del Moral, joven priísta de veintiséis años, quien obtuvo el triunfo

en la elección de julio del 2009 para Presidente Municipal en Cuautitlán Izcalli.

107

verdaderamente aguerrida con mucha decisión, fuerte en su actitud y muy

sensible, muy noble con lo que pasa en su municipio. Alejandra del Moral,

nacida en Cuautitlán Izcalli, fue líder de las mujeres jóvenes a nivel estatal.

Aunque la entrevistada se equivoca cuando afirma que la mayoría de los

candidatos del PRI a presidentes municipales son jóvenes, lo cierto es que existió

la pretensión de hacerlos parecer a muchos como tales. La de la voz destaca

además ciertas características que en su opinión tiene Alejandra del Moral, joven

priísta de 26 años, que a partir del agosto de 2009 sería la presidenta municipal

en Cuautitlán: “(…) verdaderamente aguerrida, con mucha decisión, fuerte en su

actitud, muy sensible y noble con lo que pasa en su municipio197.

De este modo se expresa:

yo decido hacer un grupo de jóvenes y armar una asociación civil a la cual

denominamos: “Impulsando una realidad joven”. Esta agrupación civil que

somos un grupo de amigos, yo como presidenta fundadora me tocó ir a

buscar a mis amigos, hacer ese equipo de trabajo, va encaminado a

apoyar a la gente de escasos recursos de nuestro municipio y así lo

hemos venido haciendo … 198

Ella misma continúa diciendo:

La organización tiene una estructura de cinco. De ahí lo que nosotros

hicimos es generar una red de amigos, porque vimos que muchos

jóvenes hombres querían involucrarse y mujeres que también querían

apoyarnos. Decidimos hacer la red de amigos… 199

De madre priísta, nuestra entrevistada narra la manera en que inició su

actividad partidista como promotora o movilizadora del voto: “Yo inicié como

197

Alejandra Paulina del Moral es hija del doctor Ismael del Moral Castro, ex dirigente municipal

del PRI en Cuautitlán Izcalli y propietario del Hospital San Rafael, en contra del cual se han hecho imputaciones por negligencia médica. Es señalada por su inexperiencia política y por no habitar en el municipio; además, se dice que está vinculada sentimentalmente con el presidente estatal del PRI. Fuente: http://nuestrotiempotoluca.wordpress.com/2009/03/04/los-alcaldes-tricolores/ Consultado en julio de 2009. 198

Entrevista que realicé a una joven priísta. Abril de 2009. 199

Ibid.

108

activista movilizadora promotora del voto, mi labor era ir a tocar las puertas para

plantear la propuesta de nuestro candidato, corrí con la suerte de trabajar con la

primera regidora…”

Otra de las jóvenes entrevistadas en Huixquilucan, joven de 25 años nacida

en Toluca, pero cuyo abuelo paterno es oriundo de Huixquilucan, expresa

orgullosamente que pertenece a las familias antiguas del municipio:

Tengo prácticamente doce años viviendo aquí. Mi abuelo paterno es de

aquí, somos de las familias antiguas del municipio. Primos hermanos

de mi abuelo fueron presidentes municipales. Siempre me ha llamado

la atención la política. Toda mi familia ha estado en algún cargo político,

aquí en el municipio y fuera de. Cuando platiqué con Lorena me gustó

mucho la forma en que estaba haciendo la nueva política. Esto es,

gestionar apoyos para la comunidad y no tanto para el bienestar propio,

eso me llamó mucho la atención200.

En las palabras de nuestra entrevistada se encuentra un reconocimiento

expreso de que los cargos municipales en Huixquilucan han estado en poder de

familias: “primos hermanos de mi abuelo fueron presidentes municipales”, señala

orgullosamente nuestra entrevistada.

Una más de nuestras entrevistadas, joven priísta de 22 años, señala:

/ “me siento orgullosa de ser priísta”/ “a Alfredo del Mazo, a parte de que

está guapísimo, es una persona muy sencilla”/ “este el nuevo PRI”/

“nosotros somos caras nuevas”/ “nos tienen más confianza”/ “no me

pagan, vivo del dinero que me dan mis papás”/ “a mí me gusta ayudar a la

gente a cambio de nada”/ “hay una comunidad que se llama “El Hielo” que

prácticamente no tiene nada: les llevamos ropa, leche para los bebés, lo

haces porque quieres ver mejor a tu comunidad”/ “mis papás son priístas,

pero nunca han trabajado en el Ayuntamiento”/ “nunca me

influenciaron”/ “siempre cada candidato cuando es tiempo de campaña se

desviven, y luego ni se aparecen, jamás lo volvías a ver”/ “de un 100% de

jóvenes, al 80% no le interesa la política y dice “que güeva”/ “no vean

esto como una cuestión política, sino por el bien de la comunidad”/

200

Entrevista realizada por Eduardo Vesga Urbina, en abril de 2009.

109

En el plano estatal, la importancia de promover la participación de los

jóvenes la advierte el presidente del Comité Directivo Estatal del PRI en el Estado

de México, Ricardo Aguilar Castillo, al afirmar:

El voto más importante, el voto democrático al padrón electoral (sic) va a

ser de jóvenes. Vamos a llegar, como tú sabes, a un padrón electoral de

más de diez millones de personas201. El de los jóvenes es el voto más

importante.

No obstante lo anterior, según Aguilar Castillo “la apatía de los jóvenes por

los temas políticos es escandalosa y por ello hay que tratar de convencerlos

porque ellos también quieren escuchar propuestas de los partidos políticos…”

Pero si bien se pueden ofrecer propuestas o entregar algunas dádivas por

su participación en la campaña o por su voto, ello no supone ningún compromiso

con los jóvenes. Según nos refiere un joven originario, si acaso una decena de

jóvenes originarios de San Bartolomé que participaron en la campaña del

presidente municipal están trabajando en el Ayuntamiento (2009-2012) y ocupan

cargos menores202. Únicamente Mayra Ibáñez Ibáñez, priísta originaria de San

Bartolomé, ocupó la cuarta regiduría en el Cabildo de Huixquilucan en ese

período. El acuerdo político, nos comenta el entrevistado, es asignar cada trienio

una posición política a San Bartolomé: “En ocasiones ha sido una Dirección en el

Ayuntamiento, y luego una regiduría. O a veces una Dirección y una regiduría.

Como cuando Facundo Roque Nava fue Director de Gobierno, durante la

administración de David Korenfeld”203. Según se desprende de la entrevista

realizada por Cristina Sánchez Mejorada a una avecindada de San Bartolomé,

Roque Nava ocupó en el siguiente trienio una regiduría204.

201

La Junta Local del Instituto Federal Electoral reportó, al mes de marzo de 2012, un padrón

electoral en el Estado de México, de alrededor de diez millones, 460 mil mexiquenses.

202 Entrevista realizada por Eduardo Vesga a un joven originario de San Bartolomé. Marzo de

2010. De acuerdo con nuestro propio entrevistado, poco más de cien personas de San Bartolomé

trabajan en el Ayuntamiento. Revisar: originarios? 203

Entrevista realizada por Eduardo Vesga Urbina a Rodolfo Roque. Marzo de 2010. 204

Ma. Cristina Sánchez Mejorada F, “La Democracia que nunca llegó, cultura y prácticas políticas

en el Municipio de Huixquilucan”. VI Congreso de la Red de Investigadores de Gobiernos Locales de México (IGLOM).

110

Otros rostros jóvenes en el cabildo son los de Erika Larrregui Nagel, Laura

Minerva Ramírez Chicho, Enrique Vargas del Villar, Rosalba Josefina Tovar

Molina, Teresa Ginez Serrano, todos regidores del Cabildo de Huixquilucan

durante el período 2009-2012. Para el período 2012-2016, se ubica como regidor

a César Juárez Segura, originario de San Bartolomé, y cuya edad aproximada es

de 45 ó 50 años. Es posible que en el imaginario, o en el discurso ideológico de

algunos priístas, exista la creencia de que gobernar puede ser ayudar a la gente,

aunque muchas veces el gobernante es el que vive de la gente o de los

impuestos que paga esa gente para mantener el aparato de gobierno.

Imaginarios no priístas.

Entre quienes no son priístas, porque pertenecen o militan en algún otro

partido político o no militan en ninguno, se escuchan comentarios para descalificar

al PRI y a los gobiernos priístas. De este modo, durante la campaña del 2000

para la presidencia de la República, tanto el candidato del Partido Acción Nacional

como el del Partido de la Revolución Democrática, emitieron mensajes de

propaganda política que asociaban al PRI con corrupción, violencia, pobreza y

falta de atención a la educación205.

En un sentido despectivo hacia ese instituto político también se pronunció

el ex panista Francisco José Paoli Bolio. En 2005, Paoli Bolio calificó al PRI como:

“Formación variopinta llena de tribus e intereses, en proceso de

descomposición”206.

Para muchos, el PRI es el partido que conservó el poder por más de

setenta años, el de los dinosaurios207, el partido del dedazo, de la verticalidad, de

205

Vega, Aimée. (2000) Op. Cit. 206

En entrevista a La Revista Peninsular, Paoli Bolio califica al Partido Revolucionario Institucional

como: “Formación variopinta llena de tribus e intereses, en proceso de descomposición”. Edición 831, 26 de septiembre de 2005. Disponible en: http://www.larevista.com.mx/ver_nota.php?id=271 207

Resultan interesantes las declaraciones de Javier Duarte, candidato del PRI a la gubernatura de

Veracruz, cuando afirma: “El Partido Revolucionario Institucional está renovado y los dinosaurios

111

las imposiciones, del presidencialismo, el de la dictadura perfecta208. Para otros

ha sido también el partido para la estabilidad y la paz social, el que creó las

instituciones, impulsó el crecimiento económico del país y permitió abrir el camino

a la democracia incipiente en nuestro país.

El respeto a los derechos humanos y el cumplimiento de las leyes, la

responsabilidad de los servidores públicos, el control, la transparencia y la

rendición de cuentas, condiciones de un auténtico Estado democrático de

Derecho, no son realidades palpables en nuestro país. Salvo en aquellos casos

en que se fraguan venganzas políticas, la impunidad de los altos funcionarios

viene a ser la regla y no la excepción.

Conclusiones.

Conformada como un magma contradictorio, la cultura política en San

Bartolomé se presenta en un escenario de lucha por el poder en el que los

jóvenes priístas originarios y avecindados se enfrentan y construyen consensos. A

través de esta dinámica, la exclusión de la mayoría de la población se traduce

muchas veces en actitudes idiotas, en el sentido etimológico de la palabra, es

decir, de desinterés por los asuntos públicos, no por propia determinación, sino

porque la estructura del partido – el PRI – favorece esas prácticas de exclusión y

la inclusión de grupos privilegiados, asociados a intereses económicos y

familiares.

Los jóvenes priístas combinan el orgullo de pertenecer a un partido político

legendario, con el reconocimiento de sus prácticas de corrupción y clientelismo.

Intereses personales e impersonales: el ego, el ello y el superego, participan en

una relación dialéctica en la mente de cada priísta, y se manifiesta en sus

relaciones sociales y políticas.

ya están en otros partidos, y el futuro de los veracruzanos necesita combinar la juventud con la experiencia. Miguel Salazar/ Diario de Xalapa, 23 de marzo de 2010. 208

Vale la pena recordar las declaraciones del escritor peruano Mario Vargas Llosa, quien calificó

al sistema político mexicano y al papel del PRI, como una dictadura perfecta que utilizó la revolución y la retórica demagógica para eternizarse.

112

La influencia de los padres es determinante, y aunque también existen

casos de jóvenes que se rebelan ante la autoridad de sus ascendientes, o

construyen su propia identidad partidista, buena parte de nuestros entrevistados

alude al priísmo de sus padres, “aún cuando éste no haya influenciado su

determinación de ser priísta”.

Las diferencias que se expresan entre originarios y avecindados son

manifiestas. Unos y otros destacan sus propias virtudes y señalan los defectos de

quienes no son como ellos: el vínculo con la tierra, sus tradiciones y la

pertenencia, son factores que construyen sus identidades políticas y partidistas.

Las políticas públicas y la propia estructura jurídica han propiciado la

proletarización de los habitantes de San Bartolomé, que se han visto obligados a

vender sus tierras, cambiando su modus vivendi.

A pesar del discurso en favor de los jóvenes y de las mujeres, los datos

que arroja nuestro estudio reflejan que ellos forman un sector minoritario, tanto en

la estructura del partido, como en la de la legislatura y la administración pública

municipal.

La idea de juventud, en el imaginario político, se emplea como herramienta

del poder, para sugerir cambios sociales para construir un mejor futuro, aunque

los “nuevos rostros” persiguen los mismos intereses, que no son otros que los de

los viejos priístas, los priístas de siempre.

La imagen que hacia el exterior presentan los priístas, ya sean originarios o

avecindados, es, como señala Paoli Bolio, la de una formación variopinta. Pero

parece que se equivoca – todavía - cuando dice que está en proceso de

descomposición.

113

Capítulo IV

Características y prácticas políticas de

jóvenes priístas de San Bartolomé

Introducción.

En este capítulo se describe cuál es el sentido que, desde el enfoque de la

Sociología Política, tiene el concepto de joven. Joven es un actor político que

participa en la lucha por imponer sus intereses frente a otros: viejos o jóvenes, o

quienes han dejado de ser jóvenes. En este contexto, el estereotipo de los

jóvenes ha sido utilizado por el PRI – y por otros partidos políticos209 - para ganar

simpatizantes y votos.

Esta lucha se expresa además en San Bartolomé entre originarios y

avecindados. Cada uno de estos grupos destaca cualidades de sí mismos y

resalta los defectos de quienes son diferentes. Aquí se recogen testimonios de

jóvenes priístas y se utiliza un modelo para el análisis de las identidades políticas:

el reconocimiento, la pertenencia, la permanencia y la vinculación, son

componentes que nos permiten revisar las características y prácticas políticas que

los identifican y los distinguen. Los jóvenes priístas tienen aspiraciones de

distintos tipos que perfilan sus intereses de sentir, saber y comprender, quiénes

han sido, quiénes son y quiénes quieren llegar a ser.

Alberto Melucci afirma que el concepto de juventud tiene en la actualidad

un significado más cultural que biológico210. Otros, como Pierre Bourdieu,

sostendrán que “la juventud y la vejez no están dadas, sino que se construyen

209

Destaca el nombre del Gobernador electo de Chiapas, para el período (2012-2018) Manuel

Velasco Coello, de 32 años, miembro del Partido Verde Ecologista de México y nieto del ex Gobernador Manuel Velasco Suárez. 210

Melucci, A. (1996) “Youth, Time and Social Movements”, Young. Nordic Journal of Youth

Research, Vol. 3, Núm. 3, Helsinky, p.4-5. Citado por Federico M. Rossi (2006) en: La condición juvenil ante las transformaciones de la sociedad.

114

socialmente en la lucha entre jóvenes y viejos”211. Si antes se asociaba a los

jóvenes con la inexperiencia, la rebeldía y la falta de madurez, el desprestigio de

los viejos políticos ha generado una estrategia que pretende recuperar la

credibilidad del electorado, lanzando al mercado productos jóvenes o

aparentemente jóvenes; algunas caras nuevas que tratan de convencer con

virtudes que se asocian a la juventud: su idealismo, su condición de soñadores y

“no amañados”, distintos a los viejos políticos.

La desconfianza en la política y en los políticos, se enfrenta con esa “nueva

actitud”212 de jóvenes priístas que tienen confianza en sí mismos y que intentan

ganarse la confianza de la gente.

Sin embargo, como plantea Federico Rossi, es un mito sostener que existe

una juventud homogénea. De este modo, los jóvenes priístas tampoco pueden ser

caracterizados de manera uniforme como “dorados”, “grises” o “blancos”. De

acuerdo con esta tipología, los primeros, son aquellos que no tienen que cargar

con las responsabilidades o angustias de los adultos. Los segundos, que se

ubican en los sectores marginales de la sociedad, como los delincuentes, los

pobres o los desempleados. Los terceros representan a aquellos idealistas a los

que nos hemos referido, los “no amañados”, los nobles, los “participativos”213.

Prácticas políticas de los jóvenes.

La metamorfosis política se presenta cuando a algunos viejos los disfrazan de

jóvenes; o en los casos en que un candidato priísta se presenta en una envoltura

211

Bourdieu, Pierre (1990) “La juventud no es más que una palabra”, en Sociología y Cultura,

México, Editorial Grijalbo, pp.163-173. 212

Durante la campaña electoral de 2009, el PRI presenta entre los mensajes de su propaganda

electoral a un joven futbolista de la selección nacional que al intentar meter un gol “elige creer” y anota, aun cuando la mayoría de la gente piensa que “lo va a fallar”. La frase: “El PRI de hoy. Experiencia probada, nueva actitud”. http://fundaciontv.blogspot.com/2009/05/elige-creer-el-pri-de-hoy-nueva-actitud.html Consultada: 5 de junio de 2009. 213

Véase a Rossi, Federico M. (2006) “La condición juvenil ante las transformaciones de la

sociedad”.

115

“verde” o “azul”214. En la estructura del PRI se encuentran jóvenes de distintas

clases sociales, desde los muy humildes que buscan escalar socialmente, hasta

quienes tienen una posición desahogada, que vienen de familias de empresarios

o de políticos acaudalados.

También en el PRI ha habido jóvenes con apariencia progresista o de

derecha. El partido pudo incorporar durante muchos años a los sectores

campesinos, a los sectores populares, a los militares, a las mujeres y a los

jóvenes. Es cierto, sin embargo, que en las últimas décadas el PRI no ha sabido

conservar e incrementar sus cuadros, y prueba de ello es el alto índice de

abstencionismo, que se manifiesta en toda la población pero particularmente en

el sector de los jóvenes. Aunque el porcentaje de jóvenes que integraba la lista

nominal de electores era elevado, alcanzando el 31.52 % en 2006, cabe señalar

que buena parte de ese porcentaje de jóvenes, como del total de la población que

integraba dicha lista nominal, se abstuvo de votar y no participó en la vida política

institucional. El desinterés por la política institucional que se manifiesta en los

jóvenes se refleja en los datos de la Encuesta Nacional de la Juventud (2005):

entre los jóvenes de 12 a 29 años, el 44.5% de los encuestados expresó que no

tenía simpatía por ningún partido político. Para 2008, de acuerdo con la Encuesta

Nacional sobre Cultura Política y Prácticas Ciudadanas, únicamente el 23% de los

ciudadanos encuestados dijeron confiar “algo” o “mucho” en los partidos políticos.

Siete de cada diez encuestados manifestó tener poca o ninguna confianza en los

partidos políticos.

214

Este es el caso del candidato priísta a la diputación del XXIX Distrito en el Estado de México,

Enrique Jacob Rocha. Jacob tiene a la fecha cincuenta años, es hijo y nieto de presidentes municipales de Naucalpan, y él mismo ya fue presidente municipal en el período 1997-2000, que fue justamente el último, previo al arribo del PAN al gobierno municipal. En la propaganda electoral pretendían hacerlo lucir como joven. Es interesante notar cómo en su página web de campaña, no se mencionaba su edad. Véase: http://www.enriquejacob.org/index.html La edad del candidato sí se publica en la página oficial del PRI del Estado de México: http://www.priedomex.org.mx/index.asp Consultadas: 5 de junio de 2009. Para el segundo supuesto puede recordarse al candidato del PRI a la presidencia municipal de Acapulco, Manuel Añorve Baños, quien en muchos carteles de propaganda durante su campaña se presentaba vestido con el color verde. El PRI, en alianza con el Partido Verde Ecologista de México, obtuvo el triunfo electoral en ese municipio gobernado por el PRD en 2008. La misma estrategia fue seguida por el candidato priísta a la Presidencia de la República, en la elección de julio de 2012, proponiéndolo como el candidato del Partido Verde.

116

Muchos de estos jóvenes y mujeres han emigrado a otros partidos como el

Partido Acción Nacional, el Partido de la Revolución Democrática o el Partido

Verde Ecologista de México, o simplemente asumen una posición apartidista.

La crisis económica mundial de la primera década del dos mil, fue uno de

los factores que influyó en el comportamiento de los electores en julio del 2009 y

también se manifestó de manera contundente durante la elección de julio de

2011. Si había que emitir un voto de castigo, éste debía ser en contra del Partido

Acción Nacional.

De este modo, en la elección de julio de 2009 para Ayuntamientos, no

obstante las cifras de abstencionismo y el número electores que se pronunciaron

por anular su voto, el PRI alcanzó en el Estado de México una votación del

41.29%, contra 21.00% del PAN y sólo un 16.68% del PRD215.

Se ha dicho que el PRI “arrasó”216 en la elección en toda la entidad. En el

caso de los candidatos priístas jóvenes para presidentes municipales, el partido

también ganó en todos los casos, salvo en el municipio de Almoloya de Alquisiras,

en donde obtuvo el triunfo el Partido Acción Nacional.

Mientras algunos jóvenes tienen simpatía, agradecimiento o afecto217 por el

PRI, como resultado de una tradición familiar, dádivas recibidas, complicidades o

imitación, otros buscan una oportunidad para integrarse a un grupo político que

les permita ascender en la escala social, ocupar un cargo público, conseguir un

empleo u obtener reconocimiento social.

No obstante que, particularmente en el Estado de México, se observa una

estructura sumamente cerrada en el partido, lo que resulta muy claro cuando se

215

Cifras del Instituto Electoral del Estado de México. Consulta realizada en julio de 2009, en:

www.ieem.org.mx 216

Además del llamado “efecto Peña”, este triunfo electoral no ha dejado de ser objeto de

señalamientos y denuncias por una “brutal compra de votos por parte del PRI”, intimidación de la policía estatal y participación de golpeadores. Agencia de Noticias Independiente, Julio de 2009. http://tvnoticias.wordpress.com/ Consulta realizada en julio de 2009. 217

Mercado Gasca, Lauro (1997) Una visita a la lealtad hacia los partidos políticos, en: Política y

Gobierno, vol IV, núm. 2, segundo semestre. El autor señala que: “la identificación partidista se definió originalmente como una orientación afectiva hacia un partido político”. “La identificación partidista es un concepto derivado de teorías de psicología social respecto de grupos de referencia y dinámica de grupos pequeños. Estas teorías sostienen que el sentido del yo puede incluir un sentimiento de identidad personal con un grupo secundario tal como un partido político”, p.291.

117

analiza la cadena hereditaria o familiar de quienes han ocupado los cargos más

importantes a nivel estatal y municipal, existen jóvenes que tienen la esperanza

de “colgarse” de los linajes, estableciendo compromisos de trabajo, lealtades o

amistades con quienes están más cerca de los herederos del poder.

Una joven militante del PRI, de condición humilde, pero con aspiraciones

políticas, habla de su candidato a la Presidencia Municipal, quien tiene

características opuestas a las suyas, es decir, es miembro de la familia

gobernante:

Yo vengo del trabajo, vengo de lo que sé hacer. No vengo porque alguien

me impuso, no vengo porque mi papá fue diputado y dijo ahí va mi hija, mi

papá no tenía inclinación política, mi mamá siempre ha votado por el PRI,

por algo, no sé, corazonada. Inclusive mi papá era de los que decía,

cualquier político que venga lo mando directito por un tubo218.

En forma contrastaste están las respuestas que nos dieron otros jóvenes

priístas del municipio de Huixquilucan. A diferencia de nuestra entrevistada, que

nos habla de la corazonada de su madre, quien siempre votó por el PRI; la

mayoría de estos jóvenes señala que no recibió la influencia de sus padres para

ser priísta. Mientras nuestra entrevistada sostiene que ella viene del trabajo y de

lo que sabe hacer, y en otro momento nos dirá que jamás ha obtenido recursos de

manera indebida, con lo cual presume su honestidad; las respuestas de los

jóvenes muestran que están orgullosos por ser priístas; aunque señalan que no

todos los jóvenes priístas son honestos; y consideran que el PRI no es

considerado un partido de gente honesta. Todos coinciden en que los priístas son

ganadores, pero afirman que existe un rechazo hacia los jóvenes priístas.

Otras respuestas estuvieron vinculadas con la lealtad hacia su partido.

Como pudimos apreciar, los jóvenes se consideran leales a su partido y contestan

que siempre han votado por él. Esta actitud coincide con la trayectoria de la

madre de nuestra entrevistada, quien, como se ha señalado, “siempre votó por el

PRI”; y con la respuesta de la mayoría, que afirma que no cambiaría de partido.

218

Entrevista que realicé a una joven priísta. Abril 2009.

118

También la mayoría de los jóvenes sostiene que ser mujer no es un

obstáculo para participar en el PRI 219. Es paradójico encontrar que solamente

una persona, quien es mujer originaria, afirma que las mujeres jóvenes tienen

menos oportunidades que los hombres para participar en su partido; y es ella

misma la única que responde que sí cambiaría algún día de partido.

Aunque la mayoría de los jóvenes considera que existen las mismas

oportunidades para los jóvenes priístas originarios que para quienes no lo son, es

decir, para los avecindados, lo cierto es que también reconocen que no ha habido

ningún Delegado en la comunidad que no haya sido originario, con lo cual se

evidencia que las oportunidades que tienen los originarios y los avecindados – a

nivel de la comunidad - no son las mismas. En este orden de ideas, vale la pena

destacar que hasta 1990, todos los presidentes municipales de Huixquilucan

habían sido originarios220.

Los jóvenes priistas no son particularmente de izquierda o de derecha. Es

probable que quienes se identifican más con la izquierda tengan preferencia por

partidos como el Partido de la Revolución Democrática o el Partido del Trabajo;

mientras que los simpatizantes de la derecha generalmente se pronuncian a favor

de partidos como Acción Nacional. Pero al interior del PRI también se encuentran

sectores que simpatizan indistintamente con la izquierda, la derecha o el centro.

Durante la campaña de julio de 2011, el Movimiento de Izquierda Ciudadana,

grupo político presuntamente de izquierda, cuyo dirigente nacional era el senador

independiente René Arce, se pronunció a favor del candidato del PRI al Gobierno

del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas221.

La situación de familias enquistadas en el gobierno se encuentra

claramente reflejada en Huixquilucan y en San Bartolomé. Como señala Cristina

Sánchez Mejorada:

219 Esto contrasta con la información recabada durante nuestra investigación, en cuanto al número

de mujeres priístas que ocupan cargos como legisladoras o presidentas municipales. 220

Sánchez Mejorada, Cristina. (2008). Sociabilidad y politicidad… Op.cit. 221

Periódico Milenio, 29 de junio de 2011. Consultado en julio de 2011, en:

http://impreso.milenio.com/node/8983404

119

En San Bartolomé es notable el cacicazgo que ejercen unas cuantas

familias (cuatro o cinco), que son las que cuentan con un mayor poder

económico pero sobre todo político, condición que da cuenta de los rasgos

de la cultura política que a pesar del proceso de “transición a la

democracia” sigue predominando en nuestro país pero de manera

especialmente burda en el municipio de Huixquilucan.

Son diez las familias que desde 1940 se han apoderado del gobierno

municipal. Dos de estas son originarias de San Bartolomé, (las

familias Ibáñez y Juárez) las que en contubernio con otras ejercen el

poder a discreción222.

Estos rasgos de cacicazgo de la cultura política que destaca Cristina

Sánchez Mejorada, y que, como ella señala, se observan de manera

especialmente burda en San Bartolomé y en Huixquilucan, se extienden a mi

juicio en toda la entidad mexiquense, en donde muchos gobernadores han

heredado el poder a sus familiares, desde Isidro Fabela Alfaro223, quien nació en

Atlacomulco en 1882, hasta la fecha.

Es probable que la simpatía hacia el PRI se haya generado en algunos

jóvenes cuyos padres recibieron del gobierno dotaciones de tierra como

ejidatarios, porque han sido empleados de administraciones priístas, o ellos

mismos han trabajado para esas administraciones. La difícil situación de

desempleo que se vive a nivel nacional, ofrece escenarios como el que nos

describe un experimentado priísta de San Bartolomé:

Sí, tenemos muchos jóvenes en San Bartolomé, priístas. Yo creo que

tenemos una estructura como pueblo bien, pero como en todas las

comunidades tenemos carencias. El área deportiva, yo creo que eso

también jala para que retiremos a los muchachos del vicio. Como en San

222

Sánchez Mejorada, María Cristina. (2008) Op.cit., pp. 113-122. La autora cita a las familias

Aguirre, García, Gutiérrez, Silva, Ibáñez, Huitrón, Calvillo, Rojas, Juárez y Torres. 223

Isidro Fabela gobernó el Estado de México del 16 de marzo de 1942 al 15 de septiembre de

1945, y dejó el poder a Alfredo del Mazo Vélez, quien gobernó del 16 de septiembre de 1945 al 15 de septiembre de 1951. Ángel Chopín Cortés. (2000) Veinticinco gobernadores nacidos en el Estado de México. Instituto de Estudios Legislativos. Estado de México.

120

Bartolomé hay mucha gente que le gusta tomar, como en todas las

comunidades. Pero sí tenemos una mayoría de priístas en San Bartolomé.

En las últimas elecciones del 2006 ganamos los tres órdenes de gobierno:

la diputación local, la diputación federal y la presidencia municipal.

No tenemos el dato exacto de cuántos priístas tenemos, pero me

atrevo a decir que arriba de 400 jóvenes, de los cuales votan 150

aproximadamente, que están en la lista nominal. Seguimos siendo

mayoría, aunque Acción Nacional ha subido sus bonos. Ellos tuvieron la

representación del Ayuntamiento en 2000-2003.

Muchos de los jóvenes estaban empleados dentro del Ayuntamiento, y

cuando llega Acción Nacional en 2000 los ubican como priístas y los

empezó a correr en forma grosera. A los que no pudo correr, si eran

secretarias, las pusieron a barrer las calles y lavar los baños. Esto nos

fortaleció pues se dieron cuenta de cómo actuaba otro partido diferente al

que había venido gobernando en Huixquilucan. Pero San Bartolomé sigue

siendo priísta y tengo la fortuna de haber nacido en San Bartolomé, nativo

de ahí224.

La simpatía, la gratitud o el afecto por el partido se presentan aquí como

muestra de lealtad hacia el partido del gobierno proveedor de tierras o como

resultado de una necesidad de empleo. Se combina la expectativa de un triunfo

electoral con la posibilidad de contar con un trabajo en la administración municipal

del partido ganador.

Más que una identificación con los principios del partido o con su

plataforma ideológica, en algunos casos se trata simplemente de conveniencias o

necesidades coyunturales. De este modo, no sólo el PRI sino muchos otros

partidos, ofrecen a los votantes – y particularmente a los jóvenes - la posibilidad

de un empleo temporal, en tiempos difíciles.

224

Entrevista que realicé a un líder priísta, enero de 2009.

121

Jóvenes priístas originarios.

Como hemos dicho, según los datos que analiza Cristina Sánchez

Mejorada, únicamente tres de cada diez personas en San Bartolomé son

originarios225. Si admitimos, siguiendo las cifras que hemos podido recabar, que

en el pueblo existen aproximadamente cuatrocientos jóvenes priístas, esta cifra

representa menos del 10 por ciento de la población que habita en San Bartolito,

que es de poco más de 5 mil habitantes. En este orden de ideas, estamos

hablando de alrededor de 120 jóvenes priístas originarios y 280 avecindados, de

los cuales vota únicamente el 35 por ciento, es decir, 42 jóvenes priístas

originarios y 98 jóvenes priístas avecindados226.

De este segmento de jóvenes priístas es necesario distinguir al menos dos

sub-segmentos: los jóvenes originarios que pertenecen a una clase social

“acomodada” y aquellos que forman parte de una clase social “baja” o “media

baja”.

El reconocimiento, en las identidades políticas de jóvenes priístas

originarios.

Acerca del reconocimiento, entendido como uno de los elementos que

conforman las identidades políticas de jóvenes priístas de San Bartolomé, que en

palabras de María Ana Portal y Sergio Tamayo se manifiesta a través de las

preguntas: ¿quién soy? ¿quién eres? o ¿quién quiero ser?, debe destacarse que

la mayoría de nuestros entrevistados, expresan orgullosamente ser priístas,

miembros de un partido ganador. Manifiestan su militancia o simpatía participando

como movilizadores del voto o emitiendo su voto, y son leales a su partido. No

obstante ese orgullo, que los auto-identifica, ellos mismos señalan que no todos

los jóvenes priístas son honestos, y que su partido no es considerado un partido

225

Cfr. Sánchez Mejorada, María Cristina y otros. Op. Cit. 226

La cifra concuerda con la que nos dio uno de nuestros entrevistados. Ver cita 219.

122

de gente honesta. Sobre este particular, cabe citar las palabras de A. Ibáñez,

quien señala:

Para que nuestros jóvenes tengan un acercamiento hacia el PRI, el

partido tiene que cambiar muchas prácticas, prácticas viciadas, en

las que no siempre se muestran ni la honestidad, ni el trabajo, ni el

conocimiento, ni la aptitud para el desempeño del cargo público, que

es uno de los grandes problemas227

.

Los señalamientos de nuestro entrevistado parten del supuesto de que no

todos los jóvenes comparten las prácticas viciadas, ni las conductas deshonestas.

Es decir, que la juventud tiene un carácter homogéneo y está conformada por

miembros de ese sector a los que Rossi caracteriza como blancos. El orgullo que

los jóvenes manifiestan por ser priístas, contrasta con el uso que los adultos

hacen de su condición de jóvenes, o las pocas oportunidades que se les brindan

para participar en forma efectiva en el partido o en el gobierno. A. Ibáñez continúa

señalando:

Entonces, si nuestros jóvenes no tienen un acercamiento al PRI es porque

a veces no hay una oferta que garantice su incorporación, su trabajo

político, un reconocimiento. Saben que no tienen oportunidades en un

PRI que casi siempre ha sido para gente adulta y a veces para gente

vieja. En el espectro nacional, al PRI lo prefiere la gente vieja y otro rango

importante es el iletrado, el poco instruido. Probablemente los jóvenes con

cierto grado de preparación están con los partidos de derecha o con los

partidos de izquierda228.

Los originarios se distinguen de los avecindados, presumiendo un mayor

compromiso con su pueblo y con su partido. La mayoría refiere firmeza en sus

227

Entrevista que amablemente me concedió don Alfredo I., originario de San Bartolomé,

Huixquilucan, ex regidor y ex presidente del PRI en el municipio, en noviembre de 2008, gracias a la intervención de los maestros Rosario Hernández Jiménez y Jesús Alvino, a quienes agradezco su valioso apoyo durante esta investigación. 228

Ibid.

123

convicciones, que se manifiesta en que no cambiaría de partido. Para ellos, los

otros, los avecindados, son quienes sí se dejan comprar.

Sobre este elemento identitario, vale la pena citar el testimonio de un

originario de San Bartolomé, ex presidente del PRI en Huixquilucan. Cuando se le

pregunta acerca de su percepción acerca del trabajo de los jóvenes priístas de

San Bartolomé, el entrevistado señala:

Yo creo que los jóvenes en el PRI sólo han sido un membrete. Es decir,

han sido personas que se han utilizado para los propósitos de las

generaciones adultas. Nunca se han dado los espacios para que

empiecen a trabajar en lo que saben. Anteriormente nuestros muchachos

eran jóvenes probablemente con una escolaridad muy limitada y no tenían

aspiraciones de nada pues no tenían un capital o acervo profesional como

lo tienen ahora. Actualmente nuestros jóvenes empiezan a tener una

formación académica que les permitiría incorporarse de mejor manera al

trabajo político.

Los jóvenes sólo eran ocupados para trabajar la matraca, en la

propaganda, en las bardas, en formar parte de un contingente, en llevarlos

a los mítines, a las marchas, pero nunca otorgarles cargos importantes

ya dentro del gobierno municipal y menos para tareas importantes

dentro de la política.

Nuestros jóvenes finalmente a la fecha no han podido tener una

representación dentro de los Ayuntamientos. Jamás han formado parte

del Ayuntamiento. Tenemos una deuda muy grande con ellos. Cuando

nuestros jóvenes ya rebasan la edad de los treinta años, que dejan de

ser jóvenes, es cuando tienen el acceso al cargo público o al trabajo

político, pero siendo jóvenes menores de treinta años no hay

ninguna posibilidad. Esto yo lo percibo en la generación de ahora en

donde están muchos de los que fueron mis alumnos en la preparatoria229.

La pertenencia, en las identidades políticas de jóvenes priístas originarios.

229

Entrevista que realicé a Alfredo I., priísta originario de San Bartolomé.

124

La condición de originario de los jóvenes priístas, es una manifestación de

su dimensión identitaria de pertenencia, entendida como relación con la tierra y

como apropiación de creencias, valores y sentimientos. Los jóvenes priístas

originarios de San Bartolomé son y se sienten propietarios de su espacio o de su

tierra, lo que además tiene que ver con su pertenencia a grupos generacionales,

con el tiempo en que han vivido en la localidad, sus prácticas culturales y las

relaciones que establecen con los otros.

Entendida como una forma de apropiación del espacio, los originarios

expresan su deseo de dominio frente a los avecindados, por el vínculo que los

une a la tierra y los derechos que les da ese vínculo para mandar y gobernar.

Cuando uno dice ¿por qué los jóvenes no participan? No, sí participan por

Dios, pero quisieran participar de otra forma. Ellos quisieran formar

parte en el grupo de gobierno que toma las decisiones.

El ser adulto no garantiza que las decisiones que se tomen vayan a ser

siempre mejores. A veces se tiene temor de que el joven tome una

decisión equivocada. Bueno, a lo mejor si toma la decisión equivocada

tiene justificación. Creemos que el adulto por ser adulto lo que va a decidir

va a ser lo correcto, cosa que tampoco es cierto.

Qué es lo que ocurre con nuestros muchachos entonces. No perciben al

PRI como un partido que les de cabida. A lo mejor porque tampoco el

PRI tiene una oferta atractiva. Recordando información reciente, los

jóvenes o tienen una preferencia por el PAN o tienen preferencia por

partidos de izquierda. Quienes tienen inclinación hacia algún partido de

derecha, esto es por un factor de familia que determina esa inclinación;

mientras quienes tienen inclinación hacia la izquierda o las izquierdas, es

por la formación escolar que están obteniendo.

El PRI no le garantiza una propuesta, no les ofrece una oferta atractiva.

Creemos que al joven lo único que le interesa es el futbol. Hay que

regalarle pelotas. No hemos entendido que el joven tiene una problemática

más compleja, que quisiera que fuera atendida. El joven requiere apoyos,

becas, espacios para prácticas profesionales, requiere apoyos para

contactarlo con el sector público o privado que les pueda dar la primera

posibilidad de un empleo. Requiere atención médica, espacios de

recreación y de cultura. Eso es lo que requieren nuestros jóvenes.

125

No todos son futbolistas, no a todos les gusta patear pelotas. Este es un

error que yo vislumbro en este partido y a lo mejor es por eso que los

jóvenes no tienen esa inclinación230.

La permanencia, en las identidades de jóvenes priístas originarios.

Este elemento identitario es entendido como el conjunto de rasgos que se

mantienen en el tiempo y que configuran la fisonomía de un actor político. Los

jóvenes priístas se consideran herederos de las tradiciones de un partido político

que ha tenido diversas transformaciones, desde que se fundó en 1929. No

obstante lo anterior, es el partido que lleva los colores patrios, y sostiene el

discurso de los principios revolucionarios, nacionalistas y de justicia social. La

permanencia también está ligada a las tradiciones culturales y particularmente, a

las que imponen la familia. Muchos jóvenes priístas originarios mantienen su

militancia priísta por tradición, lealtad o compromiso hacia sus padres, y con el

instituto político que favoreció su estabilidad económica y social.

La vinculación, en las identidades de jóvenes priístas originarios.

La vinculación se refiere al sentido de pertenencia a un grupo, en este

caso, al partido. Está relacionada con la auto-percepción y la hetero-percepción.

Es cuando los jóvenes rebasan la edad de 30 años, “y dejan de ser jóvenes”231,

cuando se les brindan oportunidades para acceder a un cargo público o al trabajo

político, no obstante que los Estatutos de ese partido señalan que dicho instituto

impulsará la participación ciudadana de grupos y organizaciones de jóvenes. El

PRI, según su dicho casi siempre ha sido un partido para gente adulta y a veces

para gente vieja.

230

Ibid. 231

Navarrete L., Emma Liliana, Op.cit., sostiene que, a diferencia de siglos pasados en los que una

persona de 25 años ya no era considerada joven, en la actualidad se siguen considerando como tales, aun personas de 30 años.

126

Uno de nuestros entrevistados es un joven de veinticinco años, que nació

en San Bartolomé. Según él mismo nos dice, su familia tiene alrededor de cuatro

generaciones de haberse asentado en la localidad. La diferencia entre originarios

y avecindados es tan marcada, que no es suficiente con haber nacido en San

Bartolomé para ser considerado como originario. Nuestro entrevistado nos señala:

Hay varios jóvenes que se van mezclando entre familias de originarios y

avecindados. Algunas familias de avecindados, sus hijos son nativos de

San Bartolomé, pero no se les considera como originarios, a pesar de

que son nativos del lugar. Es más la carga de identidad que se tiene

como pueblo, por el apellido. Uno se vincula por los apellidos, los Pérez,

Juárez, Ibáñez, Urbina. Incluso mi familia no es originaria, tiene apenas

cuatro generaciones en San Bartolomé y por ello no se les considera tan

originaria como otras que tienen más tiempo en el lugar.

Nosotros sí nos consideramos como del pueblo, sobre todo porque

mi tatarabuelo tuvo relación con uno de los Ibáñez. Mi bisabuelo se

juntó con una persona de apellido Silva y fueron heredando terrenos en

el pueblo. Mi abuelo tenía terrenos en la parte centro del pueblo, que

originalmente eran de los Silva232.

Nuestro entrevistado ha investigado los antecedentes históricos de las

familias de San Bartolomé y conoce a detalle cuáles son aquellas familias que

tienen más tiempo en el lugar y cuáles menos. Al respecto, nos dice: “Incluso los

Ibáñez tienen pocas generaciones”. Sin embargo, tanto la familia de los Ibáñez,

como Roque, han ocupado cargos políticos importantes en Huixquilucan.

De este modo, continúa diciendo:

En San Bartolomé la gente es muy apática. Como hay control. El juego

político así es. Los cuatro o cinco que están dentro del Partido tienen

acuerdos. Hoy te toca a ti y dentro de tres años le toca a Mayra (Ibáñez),

dentro de tres a Horacio (Ibáñez), a Facundo (Roque). Se van rolando.

Tres años están desempleados y luego les toca algo. Rodolfo Encampira

232

Entrevista realizada por Eduardo Vesga Urbina a un joven originario de San Bartolomé. Marzo

de 2010.

127

está desempleado en este momento, aparentemente, porque tiene

negocios233.

En otro momento de la entrevista, el de la voz reconoce que en la actual

administración del Ayuntamiento de Huixquilucan hay alrededor de veinte jóvenes

que trabajan para el Ayuntamiento.

Hay como unos veinte. Gente que cobra, Tania Ibáñez, Noé Jerónimo

Ibáñez. No trabajan pero cobran. Noé Rivas. De Nora no recuerdo su

apellido, su segundo apellido es González o Pérez. Todos son

originarios. No recuerdo más nombres ahorita.

La afirmación de nuestro joven entrevistado, originario de San Bartolomé,

nos hace recordar la historia de otra de nuestras entrevistadas, avecindada ella, y

a quien nos referiremos con más detalle en el apartado siguiente. Colaboró en la

campaña del candidato priísta para la Presidencia Municipal, pero no fue

incorporada a la nómina del Ayuntamiento de Huixquilucan, en donde sólo hay

originarios de San Bartolito.

Otra de nuestras entrevistadas es una joven militante priísta, que aun

cuando no nació en San Bartolomé, en nuestro análisis consideramos como

originaria, puesto que es hija de uno de los líderes priístas más importantes del

poblado, de una familia de caciques originarios de San Bartolomé, aunque su

madre nació en el Distrito Federal. Formada en la tradición priísta desde pequeña,

refiere que “trae en la sangre” eso de participar.

Su convicción priísta nace de las ideas que sus padres le inculcaron, pero

aunque afirma que siente orgullo porque “el PRI construyó al país”, al mismo

tiempo expresa dudas respecto a su futuro: “Si me dedico a la política no sé por

cuál partido ir, no tengo idea clara”. Más aún, nos dice que a su esposo lo

invitaron a trabajar para el Partido Acción Nacional, por lo que al momento de

votar estaba confundida y no tenía ganas de hacerlo: “Mi papá fue el que me

233

Entrevista. Marzo de 2010. Las negrillas son nuestras, pues el entrevistado se refiere a las

personas por su nombre, sin mencionar los apellidos.

128

estuvo llamando. Él fue quien me trajo a votar. No sé la verdad si me cambiaría yo

de partido. Sí siento feo de cómo se llevan las cosas en el PRI. No se le dan

oportunidades a los jóvenes”.

En este conglomerado aparentemente homogéneo que persigue objetivos

comunes o está hermanado por el “amor a México”, los intereses personales no

pueden ocultarse. Así, la joven priísta de San Bartolomé reconoce que al interior

de su partido existe corrupción, y considera que muchos políticos y priístas

buscan sus propios intereses, más que los intereses del partido, de la colectividad

o el municipio.

Nuestra entrevistada señala:

De eso fui testigo, se estuvieron dando despensas después de las

votaciones. Yo fui testigo. Una señora que me ayuda en mi casa, ella

recibió despensa. Ella votó por el PAN pero fue a recoger su despensa.

Dos despensas le dieron después. Se estuvo dando dinero y

despensas234.

No obstante que la de la voz no nació en San Bartolomé, destaca: “es más

fácil comprar a la gente que no es de aquí. La gente que va llegando aquí es la

que se deja comprar más fácilmente, aunque no tenga necesidad. Hasta

quinientos pesos repartieron.”

A pesar de esto, la joven militante señala que conserva el interés de

participar:

(…) esto de participar lo traigo ya en la sangre desde chiquita. Esas ganas

de participar las demostré en las elecciones. Las ganas de participar están,

a mí se me hizo un buen equipo, por el mismo fin, que era el bien de San

Bartolito. No era nada de beneficio propio. Ganó la planilla oficial, más

que el interés de la comunidad fue el interés del Partido o las elecciones

que vienen. Mis ganas de participar sí las tengo pero no estoy definida por

que partido seguir”, nos dice.

234

Entrevista realizada por Rodolfo Roque y Eduardo Vesga Urbina a una joven priísta de San

Bartolomé, en Huixquiucan. Diciembre de 2009.

129

Aunque digan que setenta años no sirvieron, el país tuvo desarrollo, eso sí,

y los gobiernos fueron priístas. Yo pienso que el PRI construyó el país. Ese

es mi orgullo. Setenta años de desarrollo y progreso los consiguió el PRI.

De los jóvenes priístas siento orgullo porque desde chiquita estuve

trabajando y todos los priístas jóvenes que se integren tal vez tienen la

misma idea de seguir trabajando por el México que queremos todos.

En este mismo sentido se pronuncia otro joven priísta originario de San

Bartolomé:

La gente de pie, la gente de la calle, sabe que este país fue construido

por administraciones priístas, con sus errores y defectos, pero han

sabido mantener la integridad de este país. El objetivo del partido fue

aglutinar a todas las corrientes, la campesina, la obrera, la popular. Aquí

la mayoría de los jóvenes que yo ubico coincide con la forma de trabajar

del PRI.235

Los originarios se perciben a ellos mismos como gente distinta de los

avecindados. Por ejemplo, al referirse a uno de los ex presidentes municipales de

Huixquilucan, priísta, un joven originario de San Bartolomé nos comenta:

Él no nació aquí. Creció en otros lados, Polanco. Cuando se destapa

para su Presidencia es que lo ponen como originario de San

Bartolomé, lo que no era cierto, cuando el que vivió aquí fue su papá.

Se abandera de nuestro nombre, de nuestra gente para llegar al poder y

llegó. Y qué pasa, lo mismo de siempre.

Todo lo que prometió, nada. Si dijo ser de la población, nunca en su

mandato hubo una obra de impacto. Sólo nos usó y nos dejó mal. Lo

toman de ratero, de narcotraficante. Cuando vamos a otros poblados

vecinos nos dicen: “Tú eres de San Bartolito, tú eres igual que tu

Presidente, eres ratero y narcotraficante”. Eso es lo único que nos dejó

a la gente. ¿Usted cree que los jóvenes como yo creemos en los

políticos?236.

235

Entrevista realizada por Rodolfo Roque y Eduardo Vesga Urbina a un joven priísta originario de

San Bartolomé, en Huixquilucan. Diciembre de 2009. 236

Entrevista que realizó Eduardo Vesga Urbina a un joven originario de San Bartolomé. Diciembre

de 2009.

130

En las palabras de nuestro entrevistado pareciera existir una justificación al

comportamiento de su presidente municipal. “Lo ponen como originario”, nos dice.

Es decir, no es originario, y tal vez esa sea la razón por la que nunca mostró

preocupación por las causas del pueblo en donde no nació. Por otro lado, esto

confirma la desconfianza en los políticos, a quienes los identifican como

mentirosos y corruptos.

El encumbramiento de las castas o clases políticas en los cargos públicos o

en la estructura de los partidos políticos, cumple en el PRI, en Huixquilucan y en

San Bartolomé, la ley de hierro de la oligarquía, frente a la que Robert Michels

proponía “descubrir el medio adecuado para reducir al mínimo el defecto principal

que parece padecer toda organización; es decir, el gobierno ejercido por la

minoría sobre la mayoría”237.

Juan Linz advierte que el concepto de oligarquía de Michels designa

fenómenos muy diversos, entre los cuales vale la pena destacar la centralización

de la autoridad y la diferencia entre los intereses de los líderes y de los miembros

del partido, en donde intereses de los primeros se sobreponen a los de estos

últimos, construyendo relaciones ademocráticas238.

La visión que tienen los originarios sobre ellos mismos.

Como se ha dicho antes, no obstante que los habitantes de San Bartolomé

ya no trabajan la tierra, la condición de ejidatario o comunero se conserva, y la

relación con la tierra tiene un matiz hasta cierto punto mítico o religioso que

determina sus prácticas sociopolíticas.

Una joven lideresa priísta destaca, respecto de las características de los

originarios de Huixquilucan: “esa pasión y ese sentimiento que te une de

237

Michels, Robert, op.cit., Vol II, p.137. 238

Linz, Juan, (1996) Michels, su contribución a la Sociología Política, México, Fondo de Cultura

Económica, p.71.

131

nacimiento a tu tierra son lo que te impulsa doblemente a dar lo mejor, y esa

sensibilidad que sientes le hace falta a la otra persona239”.

La visión que tienen los originarios acerca de los avecindados.

Los originarios de San Bartolomé se expresan de los avecindados con

expresiones como éstas:

Perfil Expresión

Mujer joven priíista

“Se deja comprar la gente que va llegando aquí”

Mujer joven priíista

“Es más fácil comprar a la gente que no es de aquí”.

Mujer joven priíista

“La gente que va llegando aquí es la que se deja

comprar más fácilmente, aunque no tenga necesidad”.

Hombre joven priíista

“Yo escuché a muchas personas incluso originarias.

No me importa votar por el partido que sea. Mejor que

me lo den a mí, a que se lo roben ellos. Es el

clientelismo político el que ha afectado:”

Hombre joven priísta

Mucha gente que llegó cuando se hizo la vía férrea. Llegó mucha gente a vivir al pueblo, muchos militares. Tienen dos generaciones viviendo ahí. Gentes (sic) que eran militares, tienen alrededor de dos generaciones viviendo ahí: los Martínez, los Briseño, que políticamente ha hecho trabajo. Esas personas se vinculan mucho con el PAN. El panismo va tomando gente de los mismos avecindados, que los priístas no los dejaba participar. Los avecindados que buscaban más la gestión de

239

Entrevista que realicé en abril de 2009.

132

servicios, tipo Naucalpan.

Hombre priíista

“Llega gente que no es de Huixquilucan, se trastorna

todo. Empiezan a despilfarrar. La gente que no es de

Huixquilucan tiene miedo que le peguen”.

Hacia un segmento de avecindados las opiniones cambian. Es el caso de

quienes llegan como caídos del cielo. En este sentido, una de nuestras

entrevistadas se expresa así acerca de un avecindado, que llegó a ser candidato

de su partido a la presidencia municipal:

Mi candidato, el licenciado Alfredo del Mazo Maza es un hombre joven,

tiene 33 años, candidato a Presidente Municipal. Mi primer acercamiento

con él me dijo: “quiero jóvenes y jóvenes de trabajo y te quiero como parte

del equipo porque he visto tu trabajo”. Aunque yo no lo conocía ni me

conocía, vio mi trabajo. Qué buena onda que me reconozca también él y

me diga “ya vi tu trabajo”, a lo mejor no estuve en tus eventos, pero ya lo

vi. “Quiero jóvenes y jóvenes de trabajo”. Ahorita tengo la comisión de él

de armar una estructura de jóvenes que quieran participar con él en su

campaña, que quieran involucrarse un poquito en lo que va a ser su

campaña electoral, de jóvenes de la zona tradicional, porque lo que él

quiere es que los jóvenes empecemos a distinguir... A lo mejor no todos

van a decir quiero irme con el PRI, pero debemos tener una simpatía por

algún partido, ya sea por el PRI, por el PAN o por el PRD y que eso de

que siempre nos quejamos, que siempre los mismos, el claro ejemplo soy

yo…240

Tanto Del Mazo, como Arturo Montiel Rojas y Enrique Peña Nieto

pertenecen al renombrado grupo Atlacomulco, aunque, como candidato del PRI a

la gubernatura del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas declaró que ese grupo

240

Entrevista que realicé en abril de 2009. Más sobre Del Mazo: en el Anexo de este trabajo.

133

“no existe”241. En el grupo Atlacomulco, como señala Rogelio Hernández, se dan

relaciones de amistad, compromiso y lealtad. Más aún, de complicidades 242.

La lealtad, apunta Rogelio Hernández, “es la posibilidad de confiar en un

colaborador pues es, al final de cuentas, la condición básica para que el político

cumpla con los compromisos de un cargo y, por ende, deje una buena imagen

que abone el camino de su futuro político”243.

Jóvenes priístas avecindados.

Los avecindados de San Bartolomé son personas provenientes de otros

lugares (municipios o entidades federativas), que adquirieron un pedazo de tierra.

Entre nuestros entrevistados pertenecientes a este segmento, destaca el

testimonio de una joven priísta avecindada de San Bartolomé. Nació en el Distrito

Federal el veinte de julio de mil 1978. A la fecha de la entrevista tenía la edad de

treinta años. Sus padres, nacieron en Michoacán y Querétaro y llegaron al pueblo

hace veinticinco años.

Ella sufrió desde niña un trato discriminatorio por parte de los originarios.

Los avecindados no podían ir a las mismas fiestas ni tener relaciones

sentimentales con los originarios. En 1995 ingresó a la preparatoria número 58 en

Huixquilucan y es ahí en donde tiene su primer acercamiento y la invitan a

participar en el Partido Revolucionario Institucional. Descubre que le gusta la

política y “andar metida en estos menesteres”244.

241

Entrevista de Carmen Aristegui al candidato Eruviel Ávila Villegas, ex presidente municipal de

Ecatepec, en 2011. 242

Tomo la idea de una charla personal con Arturo Díaz León, quien en 1994 fuera secretario

particular de Santiago Oñate Laborde, entonces Procurador del Medio Ambiente y después Presidente del CEN del PRI. Díaz León destacaba un concepto importante en este tipo de relaciones, que a mi juicio le faltó mencionar al doctor Rogelio Hernández Rodríguez: complicidades. 243

Hernández Rodríguez, Rogelio. (1988) Amistades, compromisos y lealtades: líderes y grupos

políticos en el Estado de México. México. El Colegio de México, p. 33. 244

Entrevista que le hice a una joven avecindada de San Bartolomé Coatepec, en diciembre de

2009.

134

Empezó a hacer amigos y a participar en las prácticas políticas del partido,

“que es un partido muy noble que te permite tener muchas ventajas por encima de

otros245. Con relación a esas diferencias entre originarios y avecindados, en el

plano de la política, nuestra entrevistada señala:

Me afilié al partido cuando tenía 18 o 19 años. Yo no nací en San

Bartolomé. A mí me ha costado mucho trabajo llegar a donde he

llegado y lograr lo que he logrado, por dos razones: una por ser

mujer y otra por no ser originaria, no sólo de San Bartolomé, sino por

no ser originaria a nivel municipal.

Esas son dos vertientes que determinan muchas cosas. Pero en esta

práctica difícil he aprendido a desarrollar capacidades para enfrentarme a

eso y a otros retos. Yo no visualizo mi participación en los procesos

electorales o ingresar a la nómina aunque no vaya a trabajar.

Yo practico la política no para vivirla sino para gozarla, es parte de lo que

yo considero que es el placer de la política, y mi práctica me ha permitido

desarrollarme en la academia, impulsarme en mis actividades

académicas.

El reconocimiento, en las identidades políticas de jóvenes priístas

avecindados.

Entendido también como significación emocional y valorativa que determina

la pertenencia en un segmento social, los avecindados enfrentan una lucha de

poder contra los originarios. Ellos se asumen como producto de su propio

esfuerzo y no como juniors, o “hijos de papi”, como los originarios.

Expresan, al igual que los originarios, un fuerte orgullo por su condición de

priístas y mantienen lazos de lealtad hacia su partido, que suplen muchas veces

aquellos lazos que los originarios mantienen con la tierra. Si no son campesinos u

originarios, al menos sí son priístas, y su militancia se distingue de la de los

originarios, porque está basada en una formación académica más sólida, que los

impulsa a trascender los límites del pueblo y del municipio, para aspirar a ocupar

posiciones políticas en la administración estatal.

245

Ibid.

135

La pertenencia, en las identidades políticas de jóvenes priístas

avecindados.

Este elemento identitario implica situarse en el espacio y apropiarse de

éste. Ser avecindados de San Bartolomé supone una membresía, que los

distingue de los originarios, pero los identifica como tales.

En el pensamiento de los avecindados existe un reclamo constante por un

trato igualitario. Los originarios ejercieron durante años prácticas discriminatorias

hacia ellos, impidiendo o limitando sus oportunidades, por lo que su condición de

víctimas es al mismo tiempo un motor que los conduce a adoptar posiciones

revanchistas hacia quienes durante mucho tiempo los relegaron.

Pertenecer a un partido político como el PRI, sobre todo cuando se ocupa

algún cargo de relevancia, les permite sortear las dificultades y enfrentarse a los

originarios con más elementos. El conflicto aún no está resuelto, a pesar de la

mezcla que se ha dado entre originarios y avecindados.

La permanencia, en las identidades de jóvenes priístas avecindados.

Este elemento identitario está asociado a la historicidad de los actores

políticos. Son avecindados quienes no nacieron en San Bartolomé, pero tienen

su residencia efectiva en ese pueblo; aunque, como hemos visto, muchas

personas que nacen en el pueblo no dejan de ser considerados como

avecindados, si no reúnen además las condiciones de parentesco que se exigen

para ser distinguidos como originarios.

También en los avecindados influyen las tradiciones y la influencia que los

padres ejercen sobre ellos, aunque muchos jóvenes niegan esto y asumen que la

decisión de militar o simpatizar en su partido es propia. También se observa en

este segmento sentimientos de lealtad hacia su partido, no obstante los

señalamientos en su contra debidos a actos deshonestos por parte de políticos

priístas.

136

La vinculación, en las identidades de jóvenes priístas avecindados.

Este elemento relacional de las identidades políticas de jóvenes priístas

avecindados de San Bartolomé, los congrega frente a los originarios en luchas de

poder. El testimonio de una joven priísta avecindada refiere que ella no ha

advertido ningún tipo de discriminación por parte de los originarios hacia los

avecindados:

Ella, de 25 años, nació en Toluca, pero desde muy pequeña vive en

Huixquilucan. Refiere que siempre le ha llamado la atención la política,

porque su familia ha ocupado cargos dentro y fuera del municipio.

Comenta que sus padres le inculcaron ese gusto por la política, y

siempre han sido priístas. Señala que le gusta la ideología del partido.

Terminó la carrera de Relaciones Internacionales y Comercio Exterior.

Refiere que se identifica con Alfredo del Mazo. Sus abuelos son de Toluca,

pero uno de sus abuelos pertenece a una de las familias antiguas del

municipio y ha ocupado cargos en el ayuntamiento. Lo que más me gusta

es la ayuda a los demás, como el programa “Mi bebé y yo”. No le pagan

por estar ahí, sino que recibe la ayuda de su mamá. Le gustaría ocupar

algún cargo público pero no tanto para beneficio propio, sino para ayudar

a la gente246.

En contraste con otros testimonios de avecindados, que relatan casos de

discriminación de parte de los originarios hacia ellos, la joven de la voz señala que

su familia ha ocupado cargos dentro y fuera del municipio. Su posición social le

permite trabajar en actividades partidistas sin que le paguen, pues recibe ayuda

de su madre. Sus padres siempre han sido priístas y le infundieron el gusto por la

política.

246

Entrevista realizada por Eduardo Vesga, en abril de 2009.

137

La visión que tienen los avecindados sobre ellos mismos.

Los avecindados se reconocen con expresiones como éstas:

Perfil Expresión

Mujer joven priíista

“Los jóvenes avecindados en su gran mayoría somos

quienes nos hemos preparado y hemos llegado a terminar

una licenciatura, a nivel universitario. Nuestro proyecto en

sí no sólo es la localidad. A mí me gusta mi municipio, me

gusta mi localidad, pero mi proyecto no se limita ahí. Los

jóvenes avecindados tenemos el proyecto de ir más allá”.

Mujer joven priíista

“Los avecindados tenemos y llegamos con una mano

atrás y otra adelante, tenemos que aprender a luchar”.

La visión que tienen los avecindados acerca de los originarios.

Los avecindados se expresan de los originarios con señalamientos como

éstos:

Perfil Expresión

Mujer joven priíista

“Sus padres eran ejidatarios, tenían asegurada una parte

de la vida”

Mujer joven priíista

“Si sus papás tienen algo no tienen de qué preocuparse”.

138

En el segmento de los jóvenes priístas avecindados tampoco existen

condiciones homogéneas. Es evidente que aquellos que provienen de familias

acomodadas o vinculadas con la clase política priísta, gozan de privilegios que no

tienen los jóvenes que provienen de clases “bajas” o “medias bajas”.

Aspiraciones sociopolíticas.

En el universo de jóvenes priístas se encuentran aquellos que ocupan un

nivel bajo en la estructura social, y que buscan en el partido una oportunidad de

ascenso socioeconómico, pero también un espacio para tomar parte en las

decisiones o en la estructura del partido. No faltan casos, sin embargo, de jóvenes

de una posición económica desahogada, que a través de los vínculos políticos

fortalecen sus redes de negocios.

Los jóvenes con aspiraciones sociopolíticas se identifican con los líderes,

con los principios o con el programa del partido. Buscan influir en las decisiones

políticas y en la transformación de su entorno social y político.

Aspiraciones de empleo.

En este sector se ubican los jóvenes que no tienen empleo o tienen algún

empleo precario. Los tiempos electorales son una buena oportunidad para

hacerse de un ingreso y gestionar un posible empleo, si las condiciones políticas

favorecen al candidato al que se apoya.

Los compromisos que se generan durante las campañas no siempre se

cumplen. Muchos jóvenes que participan durante las campañas reciben un pago

por su “trabajo” y cuando este concluye, regresan a sus casas, o van a las calles

en busca de un “nuevo empleo”.

139

En otros casos, los grupos políticos muestran gratitud hacia los jóvenes

que apoyaron su campaña y, de resultar ganadores, los incorporan en sus

equipos de gobierno.

La crisis económica mundial, que ha tenido repercusiones en nuestro país,

no sólo ha dejado secuelas en cuanto a los índices de desempleo247, sino en el

ánimo y expectativas de los jóvenes. Si la cifra de personas que carecen de

empleo o tienen un empleo precario es elevada, un buen número de ese sector

está conformado por jóvenes.

Aunque, como hemos señalado, la mayoría de los jóvenes no muestran

interés por participar en actividades políticas de carácter institucional, algunos de

ellos se ven forzados a hacerlo cuando a cambio de esa participación reciben una

suma de dinero, sobre todo durante el tiempo que duran las campañas

electorales.

En un contexto nacional en el que los índices de crecimiento económico

son bajos y el mercado laboral se ha visto ante la imposibilidad de absorber la

demanda creciente de empleos, buena parte de los trabajos que se ofertan son

por lapsos determinados, para realizar una obra determinada o cumplir los

propósitos de una inversión.

En otros casos, las empresas prefieren utilizar otras vías de contratación,

que no las laborales, evadiendo así el compromiso o la responsabilidad de

conservar a sus empleados por un tiempo que exceda el que sus intereses o

conveniencias determinan.

La necesidad de los jóvenes de “ganarse la vida” se enfrenta a un esquema

en el que existen muchos trabajadores desempleados que reclaman su “derecho”

247

Leyva Piña, Marco A. y Javier Rodríguez Lagunas, (2000) “Oportunidades de trabajo y jóvenes”,

en: Alfredo Nateras Domínguez (Coord), Jóvenes, culturas y e identidades urbanas, UAM-Editorial Porrúa, pp. 285-301. Los autores señalan: “Pero el desempleo y la degradación del trabajo no son procesos naturales, éstos responden en parte a la lógica de acumulación capitalista, a las estrategias empresariales y estatales, a la respuesta de los actores laborales (…) que directa o indirectamente presionan o influyen e las condiciones en que se genera y se apropia la riqueza social”.

140

al trabajo, y con ello la oportunidad de encontrar su “turno”, un espacio, así sea

precario o temporal.

Los jóvenes conviven a diario en un escenario en el que sus padres

despiertan con el temor de perder ese día su trabajo, por su baja productividad o

por un capricho del patrón. Ese temor o riesgo son elementos que juegan a favor

de una lealtad incondicional hacia el patrón o hacia el partido político que les

ofrece alguna alternativa de empleo. La subordinación, entendida como un “poder

jurídico de mando que se corresponde a un deber de obediencia”, es también una

subordinación emocional o partidista: en las manos del patrón o del partido está la

posibilidad de “ganarse la vida”248, y con ello la de sobrevivir.

El joven que carece de condiciones de estabilidad en el empleo suele ser

un sujeto cuya identidad se resquebraja. Carece de un sentimiento de lealtad,

pues no tiene la certeza de pertenecer a la empresa o al organismo en que labora

o la de sentirse capaz de contribuir con los recursos que su familia requiere y por

cuánto tiempo.

Su futuro es incierto. Por ello es que la inestabilidad que los jóvenes tienen

en el empleo es una condición relevante para producir lo que Manuel Castells

llama: fragmentación de las identidades249.

Leyva Piña y Rodríguez Lagunas señalan:250

Frente a los grandes cambios en el mercado laboral, la falta de empleos y la

tendencia hacia la baja calidad de los que existen, sumados al escaso nivel

educativo y la contención salarial, los jóvenes encuentran con más frecuencia

problemas de exclusión y limitaciones para el cumplimiento de sus

expectativas y aspiraciones.

248

El derecho a ganarse la vida se desprende del texto contenido en el artículo 6o. del Pacto

Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. 249

Castells, M. (2005) Sobre la individualización o fragmentación de identidades, véase:

Globalización, desarrollo y democracia: Chile en el contexto mundial. México. Fondo de Cultura Económica, p.120. 250

Leyva Piña, Marco A. y Rodríguez Lagunas, Javier.(2000), Op.Cit.

141

Al enfrentarse a tales limitaciones, algunos jóvenes, si bien los menos,

encuentran en la participación política y en los mensajes seductores de muchos

políticos, una esperanza para su futuro, un líder en quien creer, una religión

profana.

Seguridad, tranquilidad y confianza, son algunos de los referentes con los

que podríamos vincular esa búsqueda juvenil de quienes lo mismo pretenden

obtener un mínimo de estabilidad laboral que el reconocimiento de un partido

político. Quien desempeña un trabajo en condiciones de inestabilidad, como quien

participa de manera inestable en un partido, genera sentimientos de inseguridad,

de desconfianza y de temor251. Hablar de estabilidad o del reconocimiento

implica pertenencia, identidad, integración, participación y compromiso con los

propósitos de la empresa, del organismo para el que el trabajador presta sus

servicios o del partido político en que se milita.

La exclusión genera frustración, desánimo, incertidumbre y angustia. Por

ello la decisión de un joven votante desempleado no es un voto libre y auténtico,

sino condicionado y falaz.

Una joven priísta no comparte la idea de que todos los jóvenes priístas

como ella se hayan afiliado al partido o participen en actividades electorales como

un medio para obtener un ingreso o un trabajo. Al respecto, señala:

El partido te da la oportunidad para pelear por un espacio de

representación, más que laboral. Yo desarrollo lo laboral en otra parte.

Además de participar en el partido, en procesos electorales, en cuestiones

laborales la política no es mi ejercicio laboral, sino la docencia.

No obstante lo anterior, ella misma reconoce:

Esos jóvenes, como la gran mayoría, veía que se hacen los cambios en

los mandos medios y decían: a mí me preocupa mucho pues si me sacan

del Ayuntamiento qué voy a hacer, “no sé ni lavar platos”. Cuando el

Partido Acción Nacional gobernó el municipio algunos de ellos eran

251

De la Cueva, M., (1978) El Nuevo Derecho Mexicano del Trabajo, México, Editorial Porrúa,

Tomo I, p.219. El autor cita a Máximo Dursi en su cuento Bertoldo en la Corte, cuando dice: “vivir sin temor es el destino del hombre”.

142

panistas; son jóvenes que no tienen identidad. Si ganara el PRD se

pondrían una camiseta amarilla y no tendrían ningún problema.

El clientelismo político ha generado una gran desconfianza en los jóvenes,

que se sienten utilizados, aunque aprovechan las oportunidades de obtener

ingresos durante las campañas electorales, sin que ello represente mayor

compromiso de los políticos hacia ellos. De este modo lo expresa uno de nuestros

jóvenes entrevistados:

Me decía mi tío que en San Bartolomé, incluso en Huixquilucan, son muy

poquitos jóvenes priístas, que son miembros activos del PRI. Habrá

unos diez. Simpatizantes momentáneos o electorales sí hay.

La gente difícilmente es leal. Llega un candidato y se cuelgan de él.

Cuando se va a ir, se cuelgan del que viene. La gente no se pone la

camiseta. Tengo muchos amigos, demasiados amigos que trabajaron

como movilizadores en la campaña, pero sin ningún compromiso,

jóvenes, y no se sienten priístas.

La militancia partidista se ha perdido. Las nuevas generaciones, me

decía un familiar que en el PRI no hay jóvenes. Participa, igual en tres

años te toca algo grande, pero no me interesa. La política está tan mal, el

Partido está tan mal que nos utilizan, nos engañan. No tengo confianza.

Yo sabía que el presidente municipal ni conocía el pueblo. Yo participé

como subdelegado municipal, por invitación de personas del pueblo, como

Luis Juárez, Mayra Ibáñez, Facundo Roque.

Lo que están haciendo con Noé Jerónimo, es lo mismo que hicieron

conmigo: Primero la participación en el pueblo, el Comité Pro Fiestas,

después me invitan a la Delegación Municipal, me invitan a participar en el

PRI, no me registraron, no entiendo por qué. Me empecé a dar cuenta de

muchas cosas, de que te utilizaban252

.

252

Entrevista a un joven originario. Marzo de 2010.

143

Aspiraciones de estatus.

Aunque es paradójico, ante el desprestigio de la política y de los políticos,

algunos jóvenes tratan de encontrar en el partido un reconocimiento a su

desempeño y a ellos mismos. Salen de sus hogares y comienzan a tejer

relaciones sociales externas a la familia, en donde ocupan un rol distinto que no

es el de hijo o hermano, para transformarse en militante, miembro del partido,

aspirante a regidor, candidato suplente del diputado o simplemente priísta

simpatizante.

Si se trata de hijos o familiares de políticos, la tradición familiar y la red de

relaciones los impulsa para seguir esas pautas y mantener los beneficios que la

política o el servicio público les ha brindado. Para quienes ocupan una posición

social baja, la carrera partidista puede resultar una vía para escalar en la

estructura social. Robert Michels, en su estudio sobre los partidos políticos, lo dice

de esta manera:

Todo miembro de la clase trabajadora acaricia la esperanza de

ascender hacia una esfera social más alta, lo cual le garantizará una

existencia mejor y menos restringida. El ideal del obrero es llegar a la

pequeña burguesía253.

No obstante el desprestigio de un partido como el PRI, algunos jóvenes

priístas se sienten orgullosos de serlo, o tienen la esperanza de poder influir en

las transformaciones que requiere el partido.

Una joven priísta de San Bartolomé afirma:

Nunca me he llevado una mala palabra ni desprecios por ser priísta,

porque en la escuela un maestro nos preguntó a qué partido político

253

Michels, Robert, op.cit., Vol II, p.82.

144

pertenecíamos, los que quisiéramos decir. Yo fui la única priísta en mi

salón, casi la mayoría perredista254

.

Si bien nuestra entrevistada señala que no ha sufrido desprecios por ser

priísta, es importante destacar que ella fue la única en su salón que reconoció su

militancia, mientras que la mayoría expresó su simpatía por otro partido. No se

tienen elementos para afirmar que en el salón no había más priístas que ella, o si

únicamente ella decidió reconocerlo.

Conclusiones.

El concepto de juventud, que tiene un significado más cultural que

biológico, también presenta una connotación política. En la lucha por el poder,

viejos y jóvenes se enfrentan y asumen la autoridad para determinar quién es

joven y quién deja de serlo. De vez en vez, los límites se vuelven flexibles, cuando

así conviene a los intereses de un partido político o de grupos de poder. De este

modo, en ciertas circunstancias el PRI incluye en la categoría de jóvenes a

personas de 40 años, por ejemplo, y califica a su gobernador como un gobernador

joven. Siempre puede ser alguien joven o viejo, según el contexto.

No existe en el PRI, ni en San Bartolomé, una juventud homogénea.

Conviven en su interior jóvenes dorados, grises y blancos. Hijos de caciques,

políticos o empresarios, con hijos de campesinos o gente humilde. En ellos se

expresan lazos de gratitud, lealtad, complicidades y compromisos hacia su partido

político, que consideran en general un partido de gente deshonesta, pero del que

están orgullosos de pertenecer. En muchos de estos jóvenes se encuentran

aspiraciones de estatus, de conseguir un empleo o un cargo público, y algunas

veces también de transformar las estructuras y prácticas viciadas del partido.

254

Entrevista realizada por Rodolfo Roque y Eduardo Vesga Urbina en San Bartolomé,

Huixquilucan. Diciembre de 2009.

145

En San Bartolomé, como en todo el país, se registran elevados índices de

abstencionismo particularmente en los jóvenes. Menos del cuarenta por ciento de

ellos participa en las elecciones, lo que muestra el elevado nivel de apatía y

desconfianza en los partidos políticos, y particularmente en el PRI. No obstante

los resultados de las elecciones más recientes, tanto a nivel local, como federal, la

descripción de Francisco Paoli Bolio, de considerar al PRI como formación

variopinta, en proceso de descomposición, todavía podría tener el carácter de

advertencia para un futuro no lejano.

Mientras esto ocurre, el agonizante partido – controlado por gente adulta y

a veces por gente vieja – parecería inyectarse drogas para mantenerse con vida y

“ganar” las elecciones. La ficción de un partido ganador es en realidad la de

quienes con derroche de dinero compran las conciencias de los votantes.

La lucha de identidades políticas, entre originarios y avecindados de San

Bartolomé, se expresa en escenarios distintos. Al interior del pueblo, ningún

avecindado ha ocupado el cargo de delegado político; a nivel del municipio, los

cargos de presidentes municipales estuvieron reservados durante muchos años

para los originarios. Originarios y avecindados se perciben a sí mismos como

gente distinta, y destacan sus propias virtudes y los defectos de los otros. Los

segundos reclaman un trato igualitario al interior del pueblo; pero los originarios

consideran que para sentir las necesidades del pueblo y tomar parte en las

decisiones políticas, es necesario haber nacido ahí.

La tradición familiar es un factor que influye en gran medida en la

determinación de ser priísta. La búsqueda de ascenso socioeconómico o la

oportunidad de tener un empleo o un cargo público, e incluso el interés por

participar en los cambios que requiere el partido, son también aspiraciones que

tienen los jóvenes priístas. Los jóvenes afirman que la determinación de formar

parte de un partido político como el PRI es propia, pero la influencia o tradición

familiar cumple un papel importante. Algo similar ocurre con la creencia de que los

originarios y los avecindados, o que los hombres y mujeres priístas, tienen las

mismas oportunidades: conjetura que se rebate cuando se revisan los datos de

quienes ocupan los cargos públicos.

146

IMAGEN DEL ESTADO DE MÉXICO Y ENTIDADES COLINDANTES

Fuente satelital

147

Epílogo

“En el espectro nacional, al PRI lo prefiere la gente adulta y a veces la gente vieja”. (Líder priísta, San Bartolomé).

La hipótesis central de esta investigación planteó que la condición de

originario o avecindado ha cumplido una función determinante en la construcción

de las identidades políticas de jóvenes priístas de San Bartolomé. A pesar del

proceso de urbanización, su relación con la tierra, es una expresión del

componente identitario de pertenencia, entendido como relación de propiedad o

posesión sobre el espacio y como apropiación de creencias, valores, sentimientos

y expectativas.

Adentrarse en un pueblo como San Bartolomé es tanto como pretender

definir sus límites, encontrar cuáles son las características de quienes dicen

pertenecer a ese pueblo, quienes quieren pertenecer o quienes han pertenecido.

En estricto sentido, tendríamos que decir que los auténticos originarios de San

Bartolomé, fueron sin duda los descendientes de los indígenas que caminaban

portando flechas, los otomíes. Algunos de los actuales pobladores, conservan

rasgos de esa cultura ancestral, de sus símbolos, de sus creencias, de sus

tradiciones, aunque la mayoría ya no hable la lengua materna, sino la que les fue

impuesta por los conquistadores.

De esas raíces indígenas y de esas tradiciones culturales se han

aprovechado durante años algunos políticos para dominar al pueblo y despojarlo

de sus tierras. Primero, como resultado de la guerra de conquista y la proclama

de que todo el territorio era del rey, no obstante que antes y durante siglos

hubiera sido de ellos. Después, aprovechándose de prácticas legales hechas a la

medida y de ese sentimiento comunitario para conseguir el apoyo a los partidos

políticos que se ostentan como representantes de la “Nación” y benefactores del

pueblo.

148

Aun cuando San Bartolomé había sido pueblo durante siglos antes de su

llegada, los conquistadores se arrogaron el derecho de reconocerlo como tal a

través de cédulas reales y censos artificiosos. Incluso imponiéndole un santo

patrono a su nombre original de Coatepec, o Coatepetl, cerro donde habitan

serpientes, símbolos de sabiduría y no del pecado.

Despojados de sus tierras y convertidos en jornaleros, los pobladores de

San Bartolomé se vieron en la necesidad de solicitar dotaciones de tierra,

siguiendo los procedimientos de un sistema jurídico que no era el suyo, basado

en usos y costumbres.

En ese escenario de conflictos y cooperación propio de la actividad política,

los recursos que proporcionaba el gobierno para el campo y los beneficios de la

urbanización estuvieron condicionados a cambio del voto. Los clientes de ese

gobierno benefactor empezaron a ser tratados como ciudadanos vasija, como lo

expresa Denisse Dresser. Si antes fueron otomíes ahora tienen que ser también

mexicanos y votar por el partido del gobierno, ese que ostenta los colores de la

bandera nacional, proveedor de semillas y fertilizantes. Aquél que tiene el poder

para quitarles la tierra o para reconocerlos como pueblo o propietarios.

Después de haber pertenecido a esa tierra durante siglos, y de poseerla y

trabajarla de manera comunitaria, los gobernantes decidieron imponer sus reglas,

a fin de que también las tierras de los campesinos entraran al juego del mercado.

Un juego sin lugar a dudas desigual, en donde una de las partes se ve obligada a

vender por hambre al precio miserable que el opulento comprador determine.

El ideal de la democracia, tanto como el de la igualdad política, en San

Bartolomé está condicionado por la calidad de originarios o avecindados; por

castas o pedigrí. A través de entrevistas realizadas in situ, dimos respuesta a las

preguntas de investigación que nos planteamos en este trabajo. Los jóvenes

priístas originarios de San Bartolomé son y se sienten propietarios de su espacio

o de su tierra, lo que además tiene que ver con su pertenencia a grupos

generacionales, con el tiempo en que han vivido en la localidad, sus prácticas

sociopolíticas y las relaciones que establecen con los otros.

149

Desde 1940, alrededor de diez familias se apoderaron del gobierno

municipal de Huixquilucan, manteniendo un poder económico, pero sobre todo

político. De esas familias, dos de ellas son originarias de San Bartolomé.

No obstante que al interior del partido se encuentran jóvenes cuyos

familiares han ocupado u ocupan cargos públicos en el Ayuntamiento o son

priístas de años y el cacicazgo es ejercido por unas cuantas familias de apellidos

Ibáñez, Juárez y Roque, principalmente, es probable que la simpatía hacia el PRI

se haya generado en jóvenes cuyos padres recibieron del gobierno dotaciones de

tierra como ejidatarios, o quienes han obtenido los beneficios de administraciones

priístas. Sin embargo, el pragmatismo manifiesto de los electores hace pensar

que más que una identificación con los principios del partido o con su plataforma

ideológica, operan conveniencias o necesidades coyunturales.

En San Bartolomé conviven y se enfrentan las identidades de los jóvenes

“originarios”, descendientes de esas familias pudientes que ejercen el cacicazgo,

ocupan las mayordomías, las regidurías, las sindicaturas y la presidencia

municipal en la tierra de los cardos comestibles 255.

Como resultado del proceso de industrialización y especulación comercial

de terrenos, respaldado además por reformas constitucionales y agrarias que lo

favorecen, San Bartolomé ha perdido su sentido rural y muchos ejidatarios y

comuneros ya no trabajan la tierra o se han visto obligados a venderla. En este

escenario, los jóvenes priístas, sean originarios o avecindados, comparten una

identidad partidista sui generis, que se confronta con la de otros partidos pero

muchas veces se mimetiza, construyendo con otros partidos políticos alianzas

multiformes y polifacéticas.

Para saber cómo se construyen y cuáles son los rasgos fundamentales de

las identidades políticas de jóvenes priístas originarios y avecindados de esta

localidad durante un determinado periodo (2009-2011), hemos partido de un

análisis conceptual. Contrastamos así, sobre la base de los sentidos o

significados que se dan a las palabras en el campo de la Sociología Política, qué

255

Este es el significado que se atribuye al vocablo Huixquilucan.

150

podemos entender por cultura, identidades sociales, cultura e identidades

políticas, centrando nuestra atención en estos dos últimos conceptos.

En los primeros capítulos de este trabajo se hizo una revisión de las ideas

de diversos autores, y que no siempre son coincidentes. Con base en las

propuestas de Cornelius Castoriadis, Gilberto Giménez, Roberto Gutiérrez, Sergio

Tamayo, Roberto Varela, entre otros, decidimos elaborar nuestro propio modelo

para el análisis de las identidades políticas de jóvenes priístas de San Bartolomé.

Para los propósitos de nuestra investigación, y siguiendo a Roberto Varela,

nuestro interés se centró en destacar el conjunto de signos y símbolos

compartidos que transmiten conocimientos, valoraciones, sentimientos y

emociones que expresan lo que estos jóvenes priístas han sido, son y quieren

ser.

Resultó de mucha utilidad considerar la visión de Henry Tajfel, para quien

las identidades sociales, adquieren una importante significación en la dinámica de

pertenecer a ciertos grupos sociales, al mismo tiempo que sentir y valorar esa

pertenencia. En palabras de Sergio Tamayo, “la diferencia y la negación del otro

me permiten construir mi identidad”, que se conforma como una categoría

analítica que tiene cuatro componentes: pertenencia, reconocimiento,

permanencia y vinculación.

Las identidades políticas son especificaciones de las identidades sociales,

que determinan los rasgos de pertenencia, ideas, creencias, valores, sentimientos

y prácticas que vinculan a los miembros de un grupo o institución política –

partidos políticos- que los afirman como ellos mismos y los distinguen de otros. La

categoría teórica o analítica está estrechamente vinculada con los conceptos de

cultura, imaginarios y participación política. Los partidos políticos ofrecen

identidad a sus miembros o a sus seguidores, cohesionándolos para conformar un

nosotros y distinguirlos de otros. Es decir, representan un dispositivo muy fuerte

de vinculación.

En ocasiones resulta superflua la ideología del partido si lo que interesa es

obtener un cargo público o de representación popular. Así lo entienden quienes se

refieren al sentido poroso de las preferencias cambiantes de los electores, que se

151

extiende a las preferencias o conveniencias también cambiantes de los políticos

respecto del partido político que les sirve de trampolín.

Las identidades políticas, como expresión de las identidades sociales de

carácter colectivo, también pueden definirse como autopercepciones subjetivas

que tienen de sí mismos los actores llamados grupos políticos, y particularmente

los actores jóvenes que forman parte de los partidos políticos. En este sentido, las

identidades partidistas son un tipo de identidad política, que se construye a través

de lealtades, componendas y complicidades.

El doble sentido semántico de la palabra “partido”, al que alude Sartori, nos

da la idea de separación, pero también de inclusión o participación. En la

democracia representativa moderna, que no directa, los partidos políticos cumplen

un papel fundamental. Tan es así, que en el imaginario colectivo puede flotar la

idea de que un país es democrático, porque existen procesos electorales en los

que los ciudadanos emiten su voto por un partido político, aunque este sea el

único, o el que siempre gana las elecciones.

El PRI es un partido político que tiene como antecesores al Partido

Nacional Revolucionario (PNR) y al Partido de la Revolución Mexicana (PRM).

Uno de sus instrumentos rectores, su “Declaración de Principios”, lo define como

un partido político insertado en la corriente socialdemócrata, que se postula como

popular y nacionalista. Según dirigentes del PRI, el partido que nace de la

Revolución Mexicana, sostiene los principios de libertad, igualdad, y justicia

social; además de que se identifica como el partido de la estabilidad política, que

hizo suyo el proyecto plasmado en la Constitución Mexicana.

En 1939 se creó la Confederación de Jóvenes Mexicanos y en 1947 la

Dirección Nacional Juvenil al interior del partido, con el objetivo de promover la

formación de cuadros juveniles priístas. Hacia 1973 se formó el Movimiento

Nacional de la Juventud Revolucionaria y en 1980 dicho movimiento se

transformó en el Frente Juvenil Revolucionario.

Para muchos priístas, pertenecer a ese partido político es tanto como ser

mexicano: es el partido que se vale de los programas sociales del gobierno para

152

promover el voto, además de que emplea en su simbología los colores de la

bandera nacional.

En el momento en que estas líneas se escriben, la estructura del PRI en el

Estado de México continúa bajo la dirigencia del gobernador en turno, priísta de

cepa, con sólidas raíces y vínculos familiares con la clase política mexiquense y

fuertes relaciones con los grupos económicos más poderosos del país, asociados

particularmente con las empresas que mantienen el monopolio de las dos

cadenas de televisión más importantes del país.

La cultura política priísta tiene características sui generis, y está fundada en

el aprecio y el apuro por la conservación organizativa del partido. Sin embargo, al

interior del PRI confluyen y se enfrentan diversos grupos con rasgos particulares y

disímbolos que conforman la textura variopinta – como dice Paoli Bolio cuando se

refiere a los priístas, y que nos hacen pensar en varias culturas o subculturas

políticas y no en una sola.

En el Estado de México, el PRI ha conservado el poder a nivel del gobierno

estatal. Durante el proceso electoral de 2009 obtuvo el triunfo en 97 de los 125

municipios del estado, en alianza con partidos como el Verde Ecologista de

México, Nueva Alianza, el Partido Social Demócrata y el Partido Futuro

Democrático 256. Como resultado del voto de castigo del electorado por la crisis

económica mundial, durante esa elección el PRI alcanzó el triunfo con una alta

votación.

En 2010, el PRI ganó en ocho entidades en las que se celebraron comicios

para elegir gobernador, en alianza con otros partidos como el Verde Ecologista de

México y el Partido Nueva Alianza. En contraste, en entidades como Oaxaca,

Puebla, Sinaloa y Guerrero, alianzas de partidos políticos tradicionalmente

opositores, con ideologías aparentemente incompatibles, como el Partido Acción

Nacional, el Partido de la Revolución Democrática, Convergencia, Partido del

Trabajo y el Partido Nueva Alianza, lograron derrotarlo.

256

Estos dos últimos partidos políticos perdieron su registro al concluir las elecciones de 2009, al

no alcanzar el mínimo del 2 por ciento de la votación válida registrada en la elección para presidentes municipales y diputados locales.

153

Con un elevado abstencionismo, en julio de 2011, el PRI, en alianza con el

Partido Verde Ecologista de México y el partido Nueva Alianza, ganó la elección

para Gobernador, con Eruviel Ávila Villegas257.

No obstante que en los últimos años se ha registrado un crecimiento de la

conciencia política en México, el mapa electoral refleja que el PRI estará

gobernando, a partir de 2013, en 20 de las 32 entidades federativas. No sin serios

cuestionamientos, el PRI también ganó los comicios para elegir al Presidente de

la República durante el período 2013-2018, con Enrique Peña Nieto.

El PRI invierte fuertes sumas de dinero en campañas para construir

historias y consolidar, como afirma Balandier, el secuestro de lo político por lo

mediático. En el discurso de ciertos dirigentes priístas encontramos frases que

aluden a una supuesta renovación del partido, y la confianza que la dirigencia

tiene en las nuevas generaciones. El voto más importante, plantean, será de los

jóvenes.

La cultura y los imaginarios políticos de los jóvenes muestran la tensión

entre el modelo jerárquico autoritario y el modelo igualitario. El primero de ellos

responde a intereses de las élites, de esa oligarquía que se adueña de una

pseudo democracia, de los grupos políticos poderosos. De un modelo en el que

operan cacicazgos, compadrazgos, prácticas clientelares, lealtades y

complicidades. Es un modelo vertical, excluyente y resistente al cambio. El

modelo igualitario, que es horizontal, se pronuncia por prácticas ciudadanas de

participación política incluyentes y de respeto, que bajo la premisa de la igualdad

política impulsen el proceso democratizador.

Decir que los jóvenes militantes o simpatizantes del PRI conforman un

grupo homogéneo y pertenecen a ese instituto político porque confían en sus

miembros, en sus dirigentes o en la propia institución, o porque participan de la

ideología del partido, resulta un tanto aventurado. Intereses, valores,

sentimientos, compromisos y expectativas, son algunos de los principales factores

257

De acuerdo con los datos del Programa de Resultados Preliminares del Instituto Electoral del

Estado de México, el PAN obtuvo una votación de 570,185 (12.46%), el PRD 966,627 (21.12%), y la alianza Unidos por Ti, del PRI, PVEM y Nueva Alianza, 2,862,102 (62.54%). http://prep2011mx.org.mx/ Consultado en agosto de 2011.

154

que se conjugan en el pensamiento de los jóvenes para determinar su

pertenencia partidista.

Los datos acerca de las edades de los integrantes de la Legislatura del

Estado de México reflejan las exiguas oportunidades que tienen los jóvenes

mexiquenses para insertarse en la estructura política. Por lo general, contar con

algún vínculo familiar o político son condiciones para escalar en la vida política.

Como hemos advertido, durante el proceso electoral de 2009, las

oportunidades que se dieron a los jóvenes y a las mujeres, tanto para ocupar

presidencias municipales como cargos en la Legislatura, fueron escasas. Muchas

mujeres jóvenes están orgullosas por trabajo y su esfuerzo de superación; y creen

que a través de un desempeño honesto se pueden cambiar las cosas. Sin

embargo, tanto la condición de mujer, como la de avecindado, son obstáculos

para ascender en la estructura del Partido, pues existe envidia o desconfianza

hacia ellos, incluso al interior del mismo.

La limitada participación de los jóvenes en la política institucional es una

muestra evidente de que las promesas que los políticos les ofrecen no los

convencen o que en sus imaginarios, la política institucional representa corrupción

y engaños. Si, como decía Maquiavelo, gobernar es hacer creer, quienes lo hacen

lo están haciendo mal. Si, por el contrario, el buen gobernante es más bien quien

ejerce la autoridad con dignidad y respeto, y más que mandar, convence y

conduce, tampoco lo están haciendo de modo acertado.

Sin embargo, no obstante los altos niveles de desconfianza que permean

entre la ciudadanía y al interior del mismo partido, las redes de complicidades, el

corporativismo y las estrategias clientelares son las prácticas que predominan y

mantienen una relativa cohesión.

Como hemos visto, el concepto de juventud tiene un significado más

cultural que biológico, y se construye en función de relaciones de poder. De

acuerdo con estos criterios, al interior del PRI se expresan jóvenes de distintas

clases sociales e intereses diversos, algunos más individuales que sociales.

También participan segmentos que mantienen relaciones sociopolíticas con la

tierra y se asignan el carácter de originarios para enfrentarse o relacionarse con

155

quienes no lo son, porque llegaron a ese territorio después que ellos y no llevan

sus apellidos.

Para determinar qué podíamos entender por originarios y avecindados, y

precisar cómo se vinculan con el pueblo y con su partido político, fue necesario

definir los campos semánticos de dichos conceptos, debido a su carácter

polisémico.

Como se ha señalado, en San Bartolomé sólo tres de cada diez personas

son originarios. La condición de ejidatario o comunero genera un fuerte arraigo

hacia la tierra y determina las prácticas sociales y políticas de los habitantes del

pueblo. Los avecindados son señalados por los originarios como gente que no es

de aquí y que no tiene el mismo interés por participar o resolver los asuntos de la

comunidad.

Los jóvenes priístas que son originarios presentan rasgos que los

identifican y distinguen al mismo tiempo. Ellos se sienten herederos de las

tradiciones y guardan en su memoria la historia de su pueblo y de su tierra. Sus

vínculos familiares los asocian a dinastías de poder y de cacicazgos y los

confrontan con quienes viniendo de fuera se han asentado en el pueblo para ser

nombrados como avecindados, otorgándoles un trato distinto y muchas veces

discriminatorio.

En un sentido amplio, los originarios son personas que nacieron en San

Bartolomé, o que provienen de ejidatarios o comuneros antiguos, con un fuerte

arraigo o vínculo a su tierra, apego a las costumbres y prácticas culturales y

sociopolíticas. Los originarios sienten que tienen más derechos que los

avecindados y que deben ser ellos quienes legítimamente tomen las decisiones

en el pueblo o ejerzan la autoridad.

Por su parte, los jóvenes originarios defienden “a capa y espada” el lugar en

el que han nacido. Según los originarios, ellos tienen un sentimiento de amor y

respeto por su tierra, que no tienen los avecindados. Estos últimos se hacen

pasar en ocasiones por originarios y ocultan su condición de avecindados o

incluso de “fuereños”. Según los originarios, los avecindados trastornan todo, son

gente temerosa que se deja comprar con mayor facilidad. Aun cuando ellos

156

mismos han construido redes familiares que controlan los cargos públicos, los

originarios critican las prácticas políticas a nivel estatal, en donde parientes de

gobernadores o legisladores “heredan” los cargos políticos.

Para los originarios es más fácil comprar a la gente que no es de San

Bartolomé. Lo de participar “lo traen en la sangre”, desde niños. Señalan que las

ganas de participar se demuestran durante las elecciones, ya sea participando

como movilizadores o votando por el Partido; y que no buscan beneficios propios

con su participación. Reconocen que al interior de su Partido existe corrupción y

que muchos políticos y priístas buscan sus propios intereses, más que los de la

colectividad. A propósito de estas prácticas, señalan que durante la campaña se

reparten dinero y despensas. No obstante esto, expresan orgullo por ser priístas,

por los jóvenes priístas y porque “el PRI construyó al país”, pero al mismo tiempo

sienten incertidumbre o dudas acerca de su futuro y del partido al que apoyarán,

pues no les gusta cómo se llevan las cosas en el PRI, porque no se les dan

oportunidades a los jóvenes.

Los originarios plantean que San Bartolomé sigue siendo priísta, además

de que se sienten orgullosos por haber nacido ahí. En contraste con la opinión de

los adultos, otros sostienen que los jóvenes sí participan, pero quisieran participar

de otra forma. Refieren que los jóvenes no perciben al PRI como un partido que

les de cabida, puesto que no tiene una oferta atractiva para ellos.

Los mismos originarios afirman que se ha utilizado a los jóvenes para los

propósitos de los adultos, que no se les han dado cargos en el Ayuntamiento o en

la política, sino hasta que rebasan los 30 años y dejan de ser jóvenes. Su

percepción es que el PRI ha sido un partido para gente adulta y a veces para

gente vieja.

Una de las principales diferencias frente a la gente que “no es nativa de

aquí", es la participación. Los originarios sienten un mayor compromiso con la

gente y con el lugar en el que han nacido. Algunos inician como movilizadores y

promotores del voto. La gente avecindada – la que llegó de fuera – se vincula

mucho más con la oposición, porque los priístas nos los dejan participar.

157

Por otra parte, los avecindados vienen de fuera y llegaron a vivir en San

Bartolito, no pertenecen al grupo de ejidatarios que recibieron la dotación original

del ejido ni son comuneros y su relación con la tierra es distinta de la que

mantienen los originarios; son extraños que, por no ser nativos del lugar, no

reciben el mismo trato que los originarios, a menos que establezcan vínculos

sentimentales, jurídicos o políticos con los oriundos, pertenezcan a una clase

social acaudalada o reciban la bendición divina o la protección de las altas esferas

del poder.

Los avecindados que pretenden invadir espacios de los originarios, no son

bien aceptados, porque llegan “a competir con ellos”. Los grandes caciques toman

las decisiones y coartan las libertades de los jóvenes para participar. Los

avecindados también manifiestan su orgullo por ser priístas y porque sus

familiares han ocupado cargos públicos, o porque sus padres son priístas.

El conflicto entre originarios y avecindados ha sido aprovechado por grupos

ajenos para dejar fuera o limitar el acceso a los cargos públicos o de

representación a los habitantes del pueblo, ya sea que se trate de originarios o

avecindados. Algunos jóvenes priístas avecindados son desplazados porque no

nacieron en la localidad, no son hijos de esa tierra y no llevan apellidos de los

originarios. A pesar de que muchos cuentan con una formación académica más

sólida que la de los originarios, sus estudios o grados académicos valen menos

que esos apellidos o lazos familiares cuando se trata de ocupar algún cargo

público o de elección popular.

La distancia y los resentimientos entre estas dos categorías de priístas son

evidentes y se incrementan en aquellos casos en que los avecindados son

además de bajos recursos o no cuentan con la “bendición” de los poderosos.

De lo contrario, nada importa ser avecindado, o no haber nacido en el

Estado de México. El círculo de familias mexiquenses encumbradas tiene la

fuerza suficiente para adoptar o aceptar en su seno a quien le venga en gana, no

importa que no sea mexiquense o sea extranjero.

Esas mismas diferencias entre originarios y avecindados se han empleado

para dividir a los habitantes del pueblo y conseguir apoyos políticos a grupos

158

externos. De esta forma, un sector de avecindados apoyó la candidatura del PAN

para ganar la presidencia municipal de Huixquilucan en el año 2000.

La imposición de avecindados en los cargos de mayor responsabilidad a

nivel municipal obedece a componendas y relaciones con las esferas de poder a

nivel estatal. El presidente municipal de Huixquilucan durante el período (2009-

2012), Alfredo del Mazo, es hijo y nieto de gobernadores del Estado de México y

tiene vínculos de parentesco directo con el ex gobernador Enrique Peña, sin que

esto haya obstaculizado su carrera política, primero como Secretario de Turismo

durante la administración estatal y posteriormente como presidente de un

municipio del cual no es nativo. Este esquema se reproduce a nivel de

diputaciones tanto federales como locales.

Tanto originarios como avecindados afirman que los priístas son

“ganadores”, aunque confiesan que existe un rechazo hacia los jóvenes priístas.

Son leales a su partido y siempre han votado por él. Dicen también que existen

las mismas oportunidades para originarios que para avecindados, pero reconocen

que no ha habido Delegado en su comunidad que no haya sido originario.

Podemos afirmar que las identidades políticas de jóvenes priístas de San

Bartolomé, a pesar de que se diferencian en función de la condición de originarios

o avecindados, unos y otros, sin embargo, tienen rasgos comunes que los

identifican: pertenecer a un partido político “organizado, fuerte y triunfador”,

despierta o satisface sentimientos de confianza, esperanza y seguridad, ante el

incierto futuro de los jóvenes y su búsqueda de identidad. La falta de empleo o los

empleos precarios; las dificultades para acceder a las instituciones de educación

superior y de salud, así como las condiciones de inseguridad pública, facilitan el

clientelismo y la oferta política de un instituto político que negocia con las

carencias y aspiraciones de los jóvenes.

En función de su origen (originario u avecindado), clase social, escolaridad,

situación laboral o vínculos políticos, los jóvenes priístas adoptan prácticas

diversas. Algunos deben esperar la recomendación del pariente para ocupar el

cargo público o la propuesta para ser considerado candidato a algún cargo de

159

elección popular. Otros, tendrán que acercarse a los poderosos y ganarse su

confianza mediante su trabajo, componendas o favores.

Muchos originarios y avecindados comparten la creencia de que a los

jóvenes no les interesa la participación política y sólo les importa el dinero. Como

en todo el país, también en San Bartolomé, el desencanto por la política y por los

políticos es manifiesto, y se ha reforzado con los mecanismos institucionales que

refuerzan el miedo, la represión, la apatía y el desinterés de los jóvenes por

participar en los partidos políticos y ejercer el derecho al voto, que al cabo no se

respeta. Como se ha señalado, únicamente un cuatro por ciento de la población

en México confía en los partidos políticos, mientras que el cincuenta por ciento de

la población no cree en la democracia258.

En San Bartolomé se ha iniciado una mezcla entre familias de originarios y

avecindados. Sin embargo, es importante destacar que el apellido determina

quiénes son considerados originarios o avecindados, no obstante que hayan

nacido en el lugar.

Condición social, edad y tradición familiar, son factores que influyen en la

determinación de los jóvenes para pertenecer y participar en el PRI. También

influye el género, la situación de desempleo o empleo precario, y la aspiración de

conseguirlo o ascender en la escala social.

Algunos de estos jóvenes se sienten comprometidos con el Partido, porque

les ofrece la oportunidad de realizar sus estudios en escuelas priístas, porque les

paga o les ofrece la posibilidad de adquirir un empleo, mejorar el que tienen o

escalar en los cargos políticos. Entre ellos se reconoce la mala imagen del Partido

y de su trayectoria de corrupción y compra de votos, pero al mismo tiempo se

sienten orgullosos de ser priístas y reproducen el discurso de que el PRI ha sido

el constructor de las instituciones nacionales, y que es posible cambiarlo para

diseñar un mejor futuro y “ayudar a la gente”. En el peor de los casos, para

algunos jóvenes es mejor pertenecer al PRI que “quedarse sin Partido”. Las ideas

de que el PRI sí sabe gobernar, o gobierna mejor, se esparcen entre los

258

El Sol de México, 4 de marzo de 2010. Síntesis informativa del Partido Revolucionario

Institucional.

160

correligionarios como un magma que los cohesiona. Paradójicamente, otros

señalan orgullosamente que “los priístas están ahí por convicción, y no por

dinero”, y que esto los distingue de los militantes de otros partidos políticos.

En esta investigación reconocimos algunos de los tipos, componentes y

dimensiones identitarias de jóvenes priístas que nacieron en San Bartolomé o son

hijos de ejidatarios o comuneros, distinguiéndolos de los avecindados. También

se ha podido observar qué papel cumple su situación social y las tradiciones

familiares en la construcción de sus identidades políticas. Unos ven en el partido

la oportunidad para emplearse, aun cuando esto sea de manera temporal.

Decir que la condición de originario o avecindado de jóvenes priístas en

San Bartolomé incide en la construcción de las identidades políticas significa que,

esta distinción, particularmente en las clases sociales de menores ingresos,

determina la posibilidad de participar en la vida política del municipio y del partido

político, además de que también influye en el ánimo de pertenencia partidista o en

la posibilidad de ser postulado para ocupar cargos públicos o de representación

popular. Aunque el acceso a los espacios políticos, que resulta limitado en

general para los avecindados, no se da de la misma manera si ellos pertenecen a

una clase social alta, a alguna familia de abolengo – en la clase política - o a

algún grupo político poderoso que los impone.

En algunos casos observados de jóvenes priístas, sus padres o familiares

ejercen influencia sobre ellos para determinar su gusto por la política o su filiación

partidista, pero en otros casos esto no ocurre así, y manifiestan una aversión

hacia las ideas de los padres, a veces sólo por expresar sus diferencias, su propia

identidad o su independencia ideológica.

Millones de mexicanos que viven en la pobreza, con inseguridad, sin

empleo y sin tierras, se han visto obligados a comerciar con su voto: ellos son

testigos de que los políticos y la política, no están a su servicio. Muchos jóvenes

luchan infructuosamente por escalar posiciones en esa estructura controlada por

viejos priístas y sus huestes, más excluyente que democrática.

No faltan jóvenes priístas que comulgan con la fantasía de sentir que

forman parte de una fuerza política ganadora que gobierna el Estado de México y

161

en la mayoría de los municipios que lo integran. Un partido político que gobierna

en 20 entidades federativas del país259; que recuperó la Presidencia de la

República en 2012, y que impulsado por los propietarios de los medios de

comunicación, ofrece imágenes novelescas que generan ilusiones y utopías en el

votante.

Dentro del universo de jóvenes priístas del pueblo de San Bartolomé se

encuentran aquellos de escasos recursos económicos, que buscan en el partido y

en el servicio público una oportunidad de ascenso social, y jóvenes de una

posición económica alta, que a través de los vínculos políticos fortalecen sus

redes de negocios.

No obstante el discurso en favor de los jóvenes, el nivel de oportunidades

que tienen para ocupar cargos de elección popular o en el gobierno, es muy

reducido. Sólo unos cuantos jóvenes originarios de San Bartolomé trabajan dentro

del Ayuntamiento: en la estructura administrativa de Huixquilucan (2009-2012),

sólo la cuarta regidora, Mayra Ibáñez Ibáñez, nació en San Bartolomé. Si hay

pocos jóvenes en el PRI, es porque el partido los utiliza y los engaña, y por ello no

le tienen confianza. Entre ellos se observa una cierta actitud de soberbia o

vergüenza por ejercer la militancia partidista en busca de un cargo público o un

empleo. A veces, con cierto desdén, los priístas dicen que no están en búsqueda

de un empleo, y que ejercen la actividad política por placer, porque simpatizan

con la ideología del partido o por una vocación de servicio.

259

Datos al mes de enero de 2012. El PRI gobierna en Aguascalientes, Campeche, Chihuahua,

Coahuila de Zaragoza, Colima, Durango, Estado de México, Hidalgo, Nayarit, Nuevo León, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.

162

I. DEFINICIONES OPERACIONALES E INDICADORES

DIMENSIÓN

DEFINICIÓN CONCEPTUAL

DEFINICIÓN

OPERACIONAL O

INDICADORES

Identidad

social

La identidad social de un individuo, concebida como el conocimiento que tiene de pertenecer a ciertos grupos sociales junto con la significación emocional y valorativa que él mismo le da a dicha pertenencia, sólo puede definirse a través de los efectos de las categorizaciones sociales que segmentan el medio ambiente social de un individuo en su propio grupo y en otros grupos. (Tajfel, H. (1984) Grupos humanos y categorías sociales: categorización, identidad y comparación. Editorial Herder, Barcelona, p.296.)

Orgullo por su pertenencia

Reconocimiento social

Identidad

política

Son, ante todo, identidades colectivas orientadas a la participación directa en el ejercicio del poder o a la intervención sobre los poderes públicos en términos de influencia y de presión. Y las identidades colectivas, a su vez, son el conjunto relativamente estable de rasgos distintivos por los que se reconocen y/o son reconocidos grupos o conjuntos de individuos que comparten representaciones socialmente construidas (creencias, valores, símbolos…) referentes a un campo específico del espacio social y, en consecuencia, orientaciones comunes a la acción. (Gilberto Giménez)

163

Identidad

política

La identidad política es un tipo de identidad social caracterizado por prácticas políticas, es decir, por prácticas para ejercer o influir en el poder político, generando cambios en el orden social.

Identidad

partidista

La identidad partidista es un tipo de identidad política dado por la conciencia de pertenecer a un partido político y distinguirse de los cuadros, miembros, militantes o simpatizantes de otros partidos.

Cuadro

Miembro Militante

Simpatizante Posee credencial

Vota Participa

Partido

Político

"Llamamos partidos a las formas de socialización que, descansando en un reclutamiento (formalmente) libre, tienen por fin proporcionar poder a sus dirigentes dentro de una asociación y otorgar por ese medio a sus miembros activos determinadas probabilidades ideales o materiales.” (Weber, M. (1981) Economía y Sociedad. México, FCE, p. 228.)

Partido Revolucionario

Institucional

Partido político mexicano fundado en 1929 con la denominación de Partido Nacional Revolucionario. En 1946 adquirió su nombre actual. Conservó el poder durante setenta años: de 1929 a 2000. Sus estatutos lo definen como un partido socialdemócrata.

Jóvenes

Los criterios para definir a un joven varían de acuerdo con el enfoque:

Edad

clase social escolaridad

164

sicológico, sociológico, jurídico, demográfico o cultural.260 Por ejemplo, la Convención de los Derechos del Niño de UNICEF señala que para los efectos de dicho instrumento internacional, una persona menor de 18 años sigue considerándose niño.

empleado desempleado

hombre mujer

originario avecindado

Jóvenes

Adolfo Gurrieri y Edelberto Torres Rivas señalan que desde un enfoque psicobiológico, la juventud es un período de la vida en que se generan reacciones psicológicas que son el resultado de cambios fisiológicos; en tanto que, desde un enfoque sociológico, se “otorga especial significación al proceso de incorporación del joven a la vida adulta”. 261

Jóvenes

En la sociedad contemporánea, de hecho, la juventud no es más una mera condición biológica, sino una definición cultural. Incerteza, movilidad, transitoriedad, apertura al cambio, todos atributos tradicionales de la adolescencia como una fase trasicional, parecen haberse movido mucho más allá de los límites biológicos, para convertirse en

260

Torres Rivas, Edelberto, en: Gurrieri, Adolfo, y otros. (1971) Estudios sobre la juventud marginal

latinoamericana. México, Editorial Siglo XXI, p. 200, señala: “Sin embargo, los criterios para definir la edad juvenil son múltiples. Como fenómeno sociológico latu sensu, la juventud tiene formas sociales distintas. Entendido así, es proporcionalmente más corto para aquellos sectores populares de ingresos reducidos. Por otro lado, los cambios biológicos que empiezan a los 12-14 años suelen ir acompañados de alteraciones sicológicas que terminan prácticamente a los 18-20 años”. 261

Gurrieri, Adolfo, y otros. (1971) Estudios sobre la juventud marginal latinoamericana. Op.cit., p.

31. Estos autores señalan: “También puede citarse la perspectiva político-social, que intenta captar el proceso de formación, objetivos y formas de organización y acción de los movimientos juveniles y su influencia en la dinámica social”, p. 31.

165

una ampliamente difundida connotación cultural que los individuos asumen como parte de su personalidad en diferentes etapas de su vida (Melucci, 1996: 4-5)

Jóvenes

priístas

El artículo 47 de los Estatutos del PRI señala que podrán ocupar cargos de dirigencia dentro del Frente Juvenil Revolucionario jóvenes de hasta 29 años, pero que podrán ser considerados para cargos de dirigencia partidista y elección popular, jóvenes de hasta 35 años.

Cuadro, miembro, militante o

simpatizante del PRI

Los Estatutos del PRI definen cada uno de estos supuestos. Artículo 23.262

hombre mujer

con familiar priísta “influyente”

no “influyente” sin familiar priísta perteneciente a

algún grupo político no perteneciente a algún grupo político

Originario de

Habrá de entenderse por originario a quien nació en San Bartolomé, sea o no

hombre mujer

262

En sus Estatutos, el Partido establece entre sus integrantes las siguientes categorías, conforme

a las actividades y responsabilidades que desarrollen: I. Miembros, a los ciudadanos, hombres y mujeres, en pleno goce de sus derechos políticos, afiliados al Partido; II. Militantes, a los afiliados que desempeñen en forma sistemática y reglamentada las obligaciones partidarias; III. Cuadros, a quienes con motivo de su militancia: a) Hayan desempeñado cargos de dirigencia en el Partido, sus sectores, organizaciones nacionales y adherentes. b) hayan sido candidatos del Partido, propietarios o suplentes, a cargos de elección popular. c) Sean o hayan sido comisionados del Partido o representantes de sus candidatos ante los órganos electorales y casillas federales, estatales, municipales y distritales. d) Hayan egresado de las instituciones de capacitación política del Partido, o de los centros especializados de los sectores, organizaciones nacionales y adherentes, y desempeñado comisiones partidistas. e) Desempeñen o hayan desempeñado un cargo de responsabilidad política, dentro de los diferentes órganos de dirección del Partido o en sus organizaciones en los diversos niveles de su estructura. f) Participen de manera formal y regular durante las campañas electorales de los candidatos postulados por el Partido. g) Quienes hayan participado en asambleas y convenciones del Partido. h) Los directivos de las fundaciones y de los organismos especializados y sus antecedentes; y Dirigentes (…). El artículo 24 reconoce como simpatizantes a los ciudadanos no afiliados que se interesan y participan en sus programas y actividades.

166

San Bartolomé

hijo de nativos. (ius soli) con familiar priísta “influyente”

no “influyente” perteneciente a

algún grupo político no perteneciente a algún grupo político

Avecindado de San Bartolomé

Se entenderá por avecindado a quien no nació en San Bartolomé, pero tiene su residencia efectiva en ese pueblo.263

hombre mujer

con familiar priísta “influyente”

no “influyente” perteneciente a

algún grupo político no perteneciente a algún grupo político

Percepciones de la juventud y la adultez

Juventud Adultez

No adulto/adolescente Adulto/desarrollado

Haciéndose Que ha llegado

263

Se adoptó este criterio, con base en lo dispuesto en el artículo 23 de la Constitución Política del

Estado Libre y Soberano de México, que a la letra dice: “Son mexiquenses: I. Los nacidos dentro de su territorio, sea cual fuere la nacionalidad de sus padres; II. Los nacidos fuera del Estado, hijo de padre o madre nacidos dentro dele territorio del Estado; y III. Los vecinos, de nacionalidad mexicana, con 5 años de residencia efectiva e ininterrumpida en el territorio del Estado. Se entenderá por residencia efectiva, el hecho de tener domicilio fijo en donde se habite permanentemente.

167

Ser pre-social que emergerá bajo las

condiciones correctas

Con una identidad fija

Carente de poder y vulnerable Poderoso y fuerte

Menos responsable responsable

Dependiente Independiente

Ignorante Con conocimiento

Que asume comportamientos riesgosos Que asume comportamientos considerados

Rebelde Conformista

No autosuficiente Autónomo

Fuente: adaptado de Wyn y White, 1997: 12

Copyright 1997 Wyn y White

Conceptos de identidad

María Teresa Esquivel Hernández.

“Vida cotidiana e identidad”, en: Sergio

Tamayo y K. Wildner. (Coord) (2005)

Identidades Urbanas. Universidad

Autónoma Metropolitana.

“(…) un primer elemento que

caracteriza la identidad del individuo es

que ésta no es definible ni entendible

en sí misma sino en función de la

relación con lo “otro”, esto es, en la

diferencia. Construimos nuestra

identidad a partir del otro, en un

contexto de alteridad. Si bien la

actividad y las prácticas cotidianas son

fuente de la identidad, su construcción

y reproducción se lleva a cabo en el

ámbito simbólico. Las identidades

168

entonces son formas de

autodefinición y de pertenencia,

construidas dentro de sistemas

específicos de relaciones sociales con

los que el individuo se identifica, define

y confronta con los otros (otredad o

alteridad).” (P.71-72)

“(…) la identidad no es un conjunto de

cualidades distintivas que definen a un

sujeto, sino una construcción que

socialmente se lleva a cabo a través

de elementos simbólicos. De ahí su

carácter relacional (producto de la

interacción cotidiana).” (P.73)

Miguel Ángel Aguilera D. “Maneras de

estar: Aproximaciones a la identidad y

la Ciudad”, en: S. Tamayo y K. Wildner

(Coord) (2005) Identidades Urbanas.

Universidad Autónoma Metropolitana.

“Ya proponía Max Weber que un

elemento central para señalar la

existencia de una comunidad lo es el

sentimiento subjetivo de los

participantes de constituir un todo”.

(P.142)

“Una aproximación conceptual que

resulta adecuada para referirse a un

tiempo de la dinámica entre

diferencia/unicidad es la identidad”

(P.143)

Aquiles Chiu Amparán.(2002)

Sociología de la Identidad. México.

Miguel Ángel Porrúa-UAM.

“proceso de construcción simbólica

de identificación—diferenciación que se

realiza sobre un marco de referencia:

territorio, clase, etnia, cultura, sexo,

169

edad.” (P.5)

“La suma de las identificaciones

sociales usadas por una persona para

definirse a sí misma será lo que

llamaremos su identidad social”. (P.5)

“La identidad social estaría compuesta

por aquellas categorías que denotan la

membresía de uno con respecto a

varios grupos sociales (…)”(P.6)

170

ANEXO I

Listado de candidatos jóvenes que contendieron en las elecciones de julio de 2009.

En el cuadro siguiente se presentan los nombres y edades de los

candidatos priístas jóvenes (hasta 35 años) que contendieron para ocupar los

cargos de presidentes municipales. Como se observa, únicamente 14, de 128

candidatos a presidentes municipales, fueron jóvenes.

De igual modo, sólo 12 jóvenes priístas fueron aspirantes a ocupar una

diputación.

MUNICIPIO Nombre del candidato (a) Edad

Almoloya de Alquisiras

Julio Sánchez Álvarez 35

Amanalco Gerardo Colín Guadarrama 32

Calimaya Irad Mercado Ávila 30

CuautitlanIzcalli

Paulina del Moral Vela 26

Huixquilucan Alfredo del Mazo Maza 33

Juchitepec Domingo Gilberto Quiroz Silva 34

Malinalco Gerardo B. Chaquenco Reynoso 33

CANDIDATOS PRIÍSTAS JÓVENES PARA

PRESIDENTES MUNICIPALES

171

MUNICIPIO Nombre del candidato (a) Edad

Nicolás Romero Alejandro Castro Hernández 29

Ocuilan Juan José Linares Martínez 31

Papalotla Luis Enrique Islas Rincón 35

San Martín de las Pirámides

Edgar Martínez Barragán 28

Tenancingo Tanya Rellstab Carreto 31

Tequixquiac Xochitl Ramírez Rámírez 30

Zumpahuacan Miguel Ángel Vázquez Avendaño 33

CANDIDATOS PRIÍSTAS JÓVENES PARA

PRESIDENTES MUNICIPALES

DISTRITO Nombre del candidato (a) Edad

X VICENTE MARTÍNEZ ALCÁNTARA 28

XIV EDGAR CASTILLO MARTÍNEZ 32

XXIV CÉSAR GUILLERMO CALDERÓN LEÓN 27

XXXVIII DAVID SÁNCHEZ ISIDORO 34

XLIII HÉCTOR KARIM CARVALLO DELFIN 33

CANDIDATOS PRIÍSTAS JÓVENES PARA

DIPUTADOS LOCALES

172

DISTRITO Nombre del candidato (a) Edad

8 SANDRA MÉNDEZ HERNÁNDEZ 31

9 EDUARDO ZARZOSA SÁNCHEZ 35

13 JOSÉ ALFREDO TORRES HUITRÓN 35

15 ANGÉLICA MONDRAGÓN OROZCO 34

16 JOSÉ LUIS SOTO OSEGUERA 34

17 JOSÉ CIRINO VALDÉS HUEZO 34

22 DAVID RICARDO SÁNCHEZ GUEVARA 34

CANDIDATOS PRIÍSTAS JÓVENES PARA

DIPUTADOS FEDERALES

173

ANEXO II264

Listado de nombres de Gobernadores y partidos políticos que los postularon.

En el cuadro siguiente se presentan los nombres de los gobernadores y

partidos políticos que los postularon, por entidad federativa y período. En el

mismo se observan cuántos gobernadores fueron postulados por el PRI, o por

algunas alianzas conformadas por dicho partido.

ENTIDAD

FEDERATIVA

ACTUAL

GOBERNADOR

ELECCIÓN

2009

ELECCIÓN

2010-11

ELECCIÓN

2012

AGUASCALIENTES LUIS ARMANDO REYNOSO

FEMAT (PAN)

CARLOS LOZANO DE LA TORRE

(1o. dic. 2010 Al 30 nov. 2016) PRI: 1

BAJA CALIFORNIA JOSÉ GPE. OSUNA

MILLÁN

(2007-2013)

BAJA CALIFORNIA

SUR

NARCISO AGUNDEZ

MONTAÑO

PRD

(2005-2011)

MARCOS ALBERTO

COVARRUBIAS

VILLASEÑOR (PAN)

05-04-2011 AL 04-04-2017.

CAMPECHE ELECCIÓN

GOBERNADOR

FERNANDO ORTEGA

BERNÉS (PRI): 2

16-09-2009 AL 15-09-2015

COAHUILA HUMBERTO

MOREIRA VALDÉS

(PRI)

RUBÉN IGNACIO MOREIRA

VALDEZ (PRI: 3)

1-12-2011 AL 30-11-2017

COLIMA MARIO ANGUIANO

MORENO (PRI: 4)

ELECCIÓN

GOBERNADOR265

01-11-2009 AL 31-10-2015

264

Cuadro actualizado con base en la información obtenida de el periódico “El Universal”, versión

electrónica, al 2 de enero de 2012.

174

CHIAPAS

(PRD-PT-

CONVERGENCIA)

JUAN SABINES

(2006-2012)

HASTA 2006 FUE

MIEMBRO DEL PRI

MANUEL VELASCO

COELLO266

PRI-PVEM-PANAL: 5

8 dic. 2012-2018

CHIHUAHUA JOSÉ REYES BAEZA

ELECCIÓN

GOBERNADOR267

CÉSAR DUARTE JÁQUEZ

4 Oct.2010-6 Oct.2016

PRI:6

D.F. MARCELO EBRARD

(Ex PRIÍSTA)

05-12-2006

AL

04-12-2012

MIGUEL ÁNGEL

MANCERA

PRD-MC- PT

5 DIC 2012 AL

4 DIC 2018

DURANGO ISMAEL HERNÁNDEZ

DERAS

ELECCIÓN

GOBERNADOR268

JORGE HERRERA CALDERA

(PRI: 7)

15-09-2010 AL 14-09-2016

ESTADO DE

MÉXICO

ENRIQUE PEÑA

NIETO

ERUVIEL ÁVILA VILLEGAS

(PRI:8) 15-SEP-2011 AL

14-SEP-2017

GUERRERO ZEFERINO

TORREBLANCA

GALINDO (PRD)

ÁNGEL

AGUIRRE: PRD-

PT-CONVER-

265

“Quiero que ningún joven colimense enfrente el dilema de abandonar sus estudios por la

situación económica que enfrenta su familia”. (Mario Anguiano Moreno, durante su campaña a la gubernatura). 266

“Los jóvenes sí podemos ocupar cargos importantes, sí podemos ganar elecciones y gobernar

bien”. Entrevista a Manuel Velasco Coello, miembro del PVEM, de 32 años y nieto del ex gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Suárez. 267

César Duarte: Candidato del PRI. 268 José Rosas Aispuro Candidato(PAN, PRD) Priísta desde 1980, presidente del PRI 1995-1998)

http://www.milenio.com/node/371572. El Gobernador electo, el priísta Jorge Herrera Caldera, nació en 1963.

175

GENCIA

01-01-2011 AL 31-03-2017

GUANAJUATO JUAN MANUEL OLIVA

RAMÍREZ

26-09-2006

AL

25-09-2012

MIGUEL MÁRQUEZ

MÁRQUEZ

2012-2018

HIDALGO MIGUEL OSORIO

CHONG (PRI:8)

(2005-2011)

JOSÉ FRANCISCO OLVERA

RUIZ (PRI: 9 )

01-01-2011 AL 31-03-2017

JALISCO EMILIO GONZÁLEZ

MÁRQUEZ

03-01-2007 AL 28-FEB-

2013

MICHOACÁN LEONEL GODOY

RANGEL

FAUSTO VALLEJO

FIGUEROA269

(PRI:

10)

15 DE FEB. 2012-

2018

MORELOS MARCO ADAME

CASTILLO

10 ENERO 2006

AL

30 SEPT.2012

GRACO RAMÍREZ

PRD-PT-MC

1 OCT 2012-

NAYARIT NEY GONZÁLEZ

SÁNCHEZ (PRI: 9)

ROBERTO SANDOVAL

CASTAÑEDA

(PRI:11) 19-SEP-2011 AL

30 SEP- 2017

NUEVO LEÓN RODRIGO MEDINA

DE LA CRUZ (PRI: 12)

Recupera

ELECCIÓN

GOBERNADOR

04-OCT-2009 AL

03-OCT-2015

OAXACA ULISES RUIZ ORTIZ

(PRI)

GABINO CUÉ

MONTEAGUDO

269

Fausto Vallejo Figueroa fue Secretario Particular del ex Gobernador de Michoacán, Genovevo

Figueroa Zamudio, y aunque lleva el mismo apellido, sus biógrafos no reconocen parentesco con él.

176

PAN-PRD-PT-

CONVERGENCIA

1o. DIC. 2010 AL 31 NOV

2016

PUEBLA MARIO MARÍN

TORRES (PRI)

RAFAEL MORENO VALLE

PAN-PRD-

CONVERGENCIA Y NUEVA

ALIANZA

1o. de febrero 2011 AL 31

ENERO 2017

QUERÉTARO JOSÉ CALZADA

ROVIROSA (PRI: 13)

Recupera

ELECCIÓN

GOBERNADOR

01-OCT-2009 AL 30 SEP-

2015

QUINTANA ROO FÉLIX GONZÁLEZ

CANTO (2005-2010)

PRI: 12

ELECCIÓN

GOBERNADOR270

ROBERTO BORGE ANGULO

5 Abril 2011 AL 4 ABRIL

2017

PRI-VERDE NUEVA

ALIANZA: 14

SAN LUIS POTOSÍ FERNANDO

TORANZO (PRI: 15)

(2009-2015)

ELECCIÓN 2009 26 de sept. 2009 al

25 de sept. De 2015

SINALOA JESÚS AGUILAR

PADILLA (PRI)

ELECCIÓN

GOBERNADOR271

MARIO LÓPEZ VALDÉZ

PAN-PRD-PT

1o. enero 2011 AL 31

diciembre 2016

270 Coalición PRI-Verde- Panal para 2010. Vs PAN, PRD, PT, y Convergencia (Megalianza

opositora) González Canto precisó que en pláticas directas el diputado Carlos Joaquín no considera esa hipótesis y expresó que lo mismo ha sentido con Roberto Borge, Eduardo Espinoza Abuxapqui y Andrés Ruiz Morcillo, los principales señalados con posibilidades de ser candidatos. 271

Jesús Viscarra Calderón (Candidato del PRI) señala: “he escuchado a jóvenes que me piden

oportunidades que no tienen”. Por su parte, Mario López Valdez renunció al PRI en marzo de

2010.

177

SONORA GUILLERMO PADRÉS

ELÍAS

ELECCIÓN

GOBERNADOR

GUILLERMO PADRÉS ELÍAS

PAN

13 SEP. 2009 AL 12 SEP.

2015

TABASCO ANDRÉS GRANIER

MELO (PRI: 14)

(2007-2012)

ARTURO NÚÑEZ JIMÉNEZ

PRD-PT-MC

2013-2018

TLAXC ALA HÉCTOR ORTIZ ORTIZ MARIANO GONZÁLEZ

ZARUR

15 enero 2011 AL

14 enero 2016 (PRI-PVEM:

16)

TAMAULIPAS EUGENIO

HERNÁNDEZ FLORES

EGIDIO TORRE CANTÚ:16

1o. enero 2011 AL 31 DIC.

2016 PRI-PVEM- NUEVA

ALIANZA: 17

VERACRUZ FIDEL HERRERA

BELTRÁN

JAVIER DUARTE DE

OCHOA: 18

1o. dic. 2010 AL

30 NOV. 2016

PRI-PVEM: 18

REVOLUCIONARIO

VERACRUZANO (LOCAL)

YUCATÁN IVONNE ORTEGA

PACHECO (PRI)

(2007-2012)

ROLANDO ZAPATA BELLO

1 OCT. 2012-30 SEP. 2018

PRI-PVEM-PSD: (19)

ZACATECAS AMALIA GARCÍA

MEDINA

MIGUEL ALONSO REYES

12 sept.2010-

12 sept. 2016

PRI-PVEMNUEVA ALIANZA

(20)

178

ANEXO III

LISTADO DE DIPUTADOS PRIÍSTAS DE LA LEGISLATURA DEL ESTADO DE MÉXICO

El siguiente cuadro presenta un listado con los nombres y edades de los

diputados de la Legislatura del Estado de México (2009-2011). Como se observa,

la edad promedio de los legisladores es de 43 años, y sólo 5 son jóvenes (35

años o menos).

Distrito Nombre Edad

II Fernando Zamora Morales 48 años

III Pablo Dávila Delgado 48 años

IV Francisco Cándido Flores 44 años

V Jacob Vázquez Castillo 37 años

VI Alejandro Olivares Monterrubio 50 años

VII Armando Reynoso Carrrillo 42 años

VIII Noé Barrrueta Barón 37 años

X Vicente Martínez Alcántara 28 años

XII José Sergio Manzur Quiroga 54 años

XIII Jesús Sergio Alcántara Nuñez 44 años

XIV Edgar Castillo Martínez 32 años

XV Juan Manuel Mondragón Trujillo 49 años

XVI Isabel Julia Victoria Rojas 55 años

XVII Carlos Iriarte Mercado 42 años

XIX Miguel Ángel Becerril López 54 años

XXI Marco Antonio Gutiérrez Romero 54 años

XXII José Isidro Moreno Arcega 37 años

XXIII Bernardo Olvera Enciso 45 años

XXIV César Guillermo Calderón León 27 años

XXV María José Alcalá Izguerra 37 años

XXVI Flora Martha Angón Paz 42 años

XXVII Francisco Osorno Soberón 50 años

XXVIII Oscar Jiménez Rayón 40 años

XXIX Enrique Jacob Rocha 50 años

XXX Cristina Ruiz Sandoval 37 años

179

XXXI Miguel Ángel Cacique Pérez 40 años

XXXII Gregorio Escamilla Godínez 59 años

XXXIII Pablo Bedolla López 54 años

XXXIV Gerardo Xavier Hernández 41 años

XXXV Enrique Javier Nemer Álvarez 48 años

XXXVI Marcos Márquez Mercado 52 años

XXXVII Pablo Basáñez García 39 años

XXXVIII David Sánchez Isidoro 34 años

XXXIX Darío Zacarías Capuchino 38 años

XL Fernando Fernández García 54 años

XLII José Vicente Coss Tirado 55 años

XLIII Héctor Karim Carvallo Delfín 33 años

XLIV Martín Sobreyra Peña 45 años

XLV Jorge Álvarez Colin 50 años

Cuadro elaborado con base en información obtenida de la página web

del PRI del Estado de México en marzo de 2010 www.priedomex.gob.

180

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