Pasion2016

Edita: MCaballero

Comunicación SL

Año II • No 2

Marzo 2016

Semana Santa2016

Asombro y admiración por la Semana Santa de Murcia,llena de arte y belleza, fe y religiosidad, amor

y generosidad, seriedad y alegría

FOTO

: JUANCH

I LÓPE

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Miradasque cautivan

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Semana Santa l Sumario l Marzo 2016

Todas las procesiones, por Pedro Soler:n Viernes de Dolores 17n Sábado de Pasión 18 y 19n Domingo de Ramos 22n Lunes Santo 24 y 25n Martes Santo 26 y 28n Miércoles Santo 29 y 31n Jueves Santo 32 y 33n Viernes Santo 38 a 43, 46 y 48 y 49n Sábado Santo 52 y 54n Domingo de Resurrección 56 y 57

n El amor de Nuestro Señor no tiene límiteJosé Manuel Lorca Planes 4

n La Pasión por las calles de MurciaPedro Antonio Sánchez 5

n El peso de los pasosAntonio Gómez Fayrén 14

n Con los ojos de la feJosé Luis Mendoza 36

n Un pasado que nos impulsa al futuroPedro García-Balibrea 36

n Cristo ha vencido a lamuerte ¡Aleluya!José María Falgas Martínez 56

n El máximo de los respetosJosé Ignacio Gras Castaño 58

n Importantes efeméridesAlberto Castillo Baños 58

n Una carrera oficialpara MurciaMiguel Massotti 62

Un espectacular primer plano delCristo del paso de Los Azotes, dela procesión de los salzillos, reali-zado por el fotógrafo JuanchiLópez, sirve de escaparate paraeste segundo número, segundoaño, de ‘Pasión por Murcia’.

Nuestro agradecimiento a todos losperiodistas, colaboradores, articulis-tas, fotógrafos y anunciantes que danvalor a esta revista. Sin ellos no habríasido posible. Nuestro reconocimien-to al Cabildo Superior de Cofradías,a la consejería de Cultura y Portavo-cía, al Ayuntamiento de Murcia y, deforma muy especial, a su concejalía deEmpleo, Turismo y Cultura.

n Semana Santa singularPedro Soler Gómez 6 a 9

n Carteles de Semana Santa 12

n El de Francisco Martínez-Escribano, un pregón con música e imágenes 16

n Martínez Tornel y los salzillosFrancisco Javier Díez de Revenga 40 y 41

n La frustrada asonada del Nazareno JesúsAntonio Botías 44

n Imagineria y teatroFrancisco Javier Díez de Revenga 60 y 61

n Recetas de cocina para estas fechasRaimundo González Frutos 65

n Los desfiles de otros tiempos 66

n José Ballesta, alcalde de MurciaPedro Soler 10

n Willy Ramos, pintor, autor del cartel 2016 Pedro Soler 13

n Ramón Sánchez-Parra, presidente del CabildoPedro Soler 20

n Noelia Arroyo, consejera de Cultura Tito Conesa 27

n Jesús Pacheco, concejal de Cultura y TurismoPedro Soler 53

n Raimundo González Frutos, cocineroTito Conesa 64

n Región de Murcia.Costa Cálida 2

n Huertas Motor 7n Econex 8n Gorfactory 9n Centro de enseñanza Majal Blanco 11n Restaurantes La Torre 15n Hotel 7 Coronas 21n Mercado del Sol 23n Escuela Universitaria de Osteopatía 24n Cortinas Gredecor 25n La Torre de Puente Tocinos 30n Utopiux 31n Puerto de Cartagena-Autoridad Portuaria 37

n Clínica Pepe Soler 38n Cementos Cruz 39n Abante Auditores 41n Aparcamiento Excelsior 45n UCAM 47n Cámara Comercio de Murcia 51n Hero 55n Typsa 57n Estrella de Levante 59n Puerto Marina de las Salinas 63n Trabis 67n Ayuntamiento de Murcia 68

AGRADECIMIENTO

LA PUBLICIDAD

LAS PROCESIONES

LAS CRÓNICAS, LOS REPORTAJES LAS OPINIONES

LAS ENTREVISTAS CARTEL 2016

LA PORTADA

LAS FOTOS, DE JUANCHI LÓPEZ

n Toda la Semana Santa 6 a 9, 17 a 33 y 38 a 57

FOTÓGRAFO INVITADO: JOAQUÍN ZAMORA

n Mi Semana Santa 34 y 35

Edita: MCaballero Comunicación y Gestión, S. L. (www.mcaballerocomunicacion.es) • Director: Mariano Caballero Carpena.Publicidad: MCaballero Comunicación (Teléfono 606 467 659) • Imprime: Jiménez Godoy, S. A. • Depósito Legal: MU 354 - 2015.

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Semana Santa l Marzo 2016 Semana Santa l Marzo 2016

Queridos lectores:

Un año más ve la luz la revis-ta ‘Pasión por Murcia’, a cuyadirección agradezco la invitacióna compartir con cuantos la tie-nen entre sus manos esta brevereflexión, que pretende acercar-nos al misterio fundamental denuestra fe que, en forma de imá-genes religiosas y bellos desfilesprocesionales, recorre las céntri-cas calles de nuestra ciudad.

Muchos de ustedes habránllegado hasta nosotros con deseode tener unos días de descansoy poder contemplar nuestra ‘cate-quesis en la calle’ que supone laSemana Santa de Murcia. Hablaren este rincón del sureste denuestro país de Semana Santa eshablar de primavera, de colori-do, de belleza y barroquismo, detradiciones y, sobre todo, de fe.Porque lo que contemplan nues-tros ojos, adornado por belloenvoltorio de cuanto nuestra ciu-dad nos ofrece, no es sino la

El amor de Nuestro Señor no tiene límite

La llegada de la Semana Santanos ofrece, año tras año, la

ocasión de rememorar en la callela Pasión de Cristo, su triunfosobre la Muerte y su Resurrec-ción. Los cofrades, herederos deuna tradición secular, cumplenasí una doble función: una indivi-dual, la de la penitencia; la otracolectiva, la ofrenda de un men-saje que va más allá de la simplenarración para convertirse encatequesis para cuantos contem-plan lo que sucedió, hace casidos mil años, en Jerusalén.

Muchos de nosotros hemostenido desde niños la posibilidadde vivir la Semana Santa comonazarenos. Conocemos así del

esfuerzo que desempeñan nues-tras cofradías a lo largo de todoel año para vivir la fe, para cono-cer y transmitir el mensaje de laRedención. Un trabajo que culmi-na cuando se abren las puertasdel templo y nuestra procesiónsale a la calle.

Cada ciudad, cada pueblo denuestra Región, concibe la Sema-na Santa con un sentimiento y uncarácter especial, en la que cadamanifestación pasionaria cuentacon una personalidad propia,definida a través del tiempo ytransmitida de padres a hijos. Yasí, cuando uno se acerca a laSemana Santa murciana, no sólocontempla la gran belleza de susimágenes, sino que percibe todoun conjunto de sensaciones y sen-timientos, un conglomerado deritos y formas de hacer que seha forjado a lo largo de los siglosy cuyo valor va mucho más allá delo material.

Los esforzados estantes, elconstante ir y venir de los mayor-domos y el silencioso desfilar delos penitentes se nos muestrancomo manifestación tangible deun tiempo Barroco que sigue vivoen las calles de Murcia y que seha enriquecido con la aportaciónde muchas generaciones de naza-renos.

Manteniendo una personali-dad claramente reconocible, queidentifica a toda una ciudad, sehan incorporado nuevas cofradías,nuevos pasos, nuevas procesio-nes. Decenas de actos llenan lasagendas en Cuaresma. Los litúr-gicos, como vía crucis, quinarios,triduos o besapiés. Los culturales,que cubren el calendario con pre-sentaciones de revistas, concier-tos, conferencias o exposicionesque dan muestra, en su conjunto,del gran nivel participativo de la

Semana Santa en la ciudad deMurcia, y de su vitalidad y proyec-ción exterior.

Esa vitalidad está presente enun patrimonio que sigue crecien-do, incorporando nuevas apor-taciones que se suman a la con-trastada calidad de las imágenesy grupos escultóricos, a los soni-dos característicos de las mar-chas de procesión o de los tam-bores sordos y los carros-bocinade la burla, a la singular indu-mentaria de los nazarenos.

Las procesiones murcianasaúnan fervor y pasión en una ciu-dad que vive intensamente suSemana Santa. Que mantienen yrenuevan la esperanza en un futu-ro protagonizado por los centena-res de niños que forman partede las cofradías y por aquellosque han dado forma, estos últi-mos años, a una procesión infan-til, la del Ángel, que siembra ilu-sión a cada metro de su recorri-do por las mismas calles que, díasmás tarde, recorrerán los peni-tentes, mayordomos y estantes.Esos nazarenos que portaránsobre sus hombros el peso deuna cruz o el de un paso; queempuñarán cirios o báculos; quevestirán túnicas de diversos colo-res. Esos nazarenos que, unidospor una vivencia única de la fe,que cada cual lleva bajo su capuzcomo un sentimiento personal eíntimo, volverán a hacer posibleel milagro pasional de cada pri-mavera.

Os deseo, nazarenos murcia-nos, una gran Semana Santa.

La Pasión por las calles de Murcia

PEDRO ANTONIO SÁNCHEZJOSÉ MANUEL LORCA PLANES

Pedro Antonio SánchezPresidente de la Comunidad Autónoma

de la Región de Murcia

Viernes Santo. Detalle del paso El Prendimiento,de Francisco Salzillo

† José Manuel Lorca PlanesObispo de Cartagena

Monseñor José Manuel Lorca Planes, saludando desde el balcóndel palacio Episcopal, durante la Semana Santa de 2015.

Experimentemostambién que su pasión,muerte y resurrecciónsiguen siendo hoy tannecesarias como realespara cada uno denosotros

expresión de un encuentro deDios con cada uno de nosotros,que nos llama a adentrarnos en laadmiración y la gratitud por elamor hasta el extremo que Él nostiene. Estos días santos han deprocurar, tanto al murciano comoa todo aquel que de fuera nosvisita, una oportunidad de expe-rimentar en su propia vida que elamor de Nuestro Señor no tienelímite, y que su pasión, muerte yresurrección siguen siendo hoytan necesarias como reales paracada uno de nosotros.

Por eso, queridos amigos, lesinvito desde aquí a abrir bien loscinco sentidos y dejarse impregnarde la gracia que nos viene de Dios.Vamos a ver pasar ante nosotrosbellísimas imágenes de la Santísi-ma Virgen y de Nuestro Señor,muchas de ellas salidas de la gubiade nuestros grandes escultores,Francisco Salzillo, Nicolás de Bussy,Sánchez Lozano, Roque López,José Planes…, y que han sabido

recoger el sentido de una vidaentregada por amor y comunica-da a toda la humanidad. Vamos aver a cientos de estantes y peni-tentes que, como sólo se procesio-na en Murcia, hacen su estación depenitencia cargando sobre sushombros el peso de sus sufrimien-tos y promesas. Gentes que bus-can no solo ya el esplendor deesa imagen que portan o acompa-ñan, sino que ante todo viven sufe de manera aun más intensa sicabe en estos días.

Pero todo el esplendor quesuponen las procesiones de nues-tra ciudad sólo tendrá sentidopleno si vivimos intensamentedesde la fe las celebraciones litúr-gicas de estos días, sobre tododel triduo santo, que actualizan yhacen presente lo que en ellas serepresenta. Por eso les invito tam-bién a acercarse a nuestros tem-plos y parroquias, donde acompa-ñaremos a Nuestro Señor en suPasión, Muerte y Resurrección, ypodremos vivir el gozo de saberque Él sigue entregando su vidapor cada uno de nosotros y quesu Resurrección nos hace vivirnuestra propia vida en plenitud.

Reavivemos, pues, nuestra fey dejémonos llenar de su graciapara que, desde este encuentrocon el Señor resucitado poda-mos decirle al mundo que hayesperanza, que la muerte, el sufri-miento y el dolor han sido venci-dos por Aquél que nos amó y seentregó por nosotros (Ef. 5,2).

Les deseo a todos una feliz ysanta Semana. Con mi bendición.

La esplendidez y la singularidadde la Semana Santa de Murcia

son incuestionables, como milesde personas pueden constatarcada año, desde objetivos muydistintos. Unos la enfocarán, lle-nos de fervorosa religiosidad yseguimiento de unas costumbres,desde puestos que conllevan unaparticipación directa en los desfiles,portando los tronos o las cruces,haciendo estallar el pavoroso soni-do de las bocinas o iluminando lascalles oscuras con olorosos cirios yen medio de un impenetrablesilencio. Otros la viven desde una

óptica más cómoda pero, posible-mente, no menos fervorosa o tra-dicional, ensillados en las estre-chas calles o en las más anchuro-sas vías y plazas de una ciudad,que cada año se ensancha más,pero que, para unas celebracio-nes tan entrañables, sigue siendorecoleta y cotidiana. Habría quesumar la impresión que la SemanaSanta provoca en miles de visitan-tes que cada año asoman por Mur-cia en estas fechas ya primaverales,y que son quienes con mayorasombro se percatarán de esosrasgos que no pocos historiadores

o entusiastas han definido comosingulares y únicos.

El paso de los años ha ido pro-porcionando a la Semana Santade Murcia una sucesiva amplia-ción del número de desfiles pro-cesionales de los que se ofrececita puntual en otras páginas deeste ‘Pasión por Murcia’. Seadvierte cómo han sido muchaslas cofradías que han ido surgien-do, a lo largo del siglo XX, perotambién del XXI, hasta el puntode que en días tan centrados deestas sacras representaciones,como es el Viernes Santo, son cua-tro las procesiones que desfilanpor las calles de Murcia. Cada unacon un significado, como sucedecon la que ya aparece el Viernes deDolores –la Venerable Cofradía delSantísimo Cristo del Amparo yMaría Santísima de los Dolores–hasta la que cierra el ciclo, en laparroquia de santa Eulalia, elDomingo de Resurrección.

Desfiles desde el siglo XIII¿Cuál fue el origen de los desfilesde Semana Santa? Los historiado-res defienden que se iniciaron afinales del siglo XIII, en diversasciudades españolas, por el deseode grupos de cristianos laicos,deseosos de «vivir el dolor de Cris-to», en su Semana de Pasión. Asíque comenzaron a salir a la calle arepresentar, de algún modo, lospadecimientos que Jesús sufriócamino del Calvario. Tambiénadvierten los historiadores la claradiferencia con que estos hechosse representan, porque en unaszonas de España se celebran «conextraordinaria pompa y majestad»,y en otras ofrecen «un carácter mássevero y grave», desprovisto delcarácter festivo que no pocos delos desfiles contienen en Murcia yotras ciudades del sur del país. En6 7


Semana Santa singularSon diecisiete los desfiles, que se inician el Viernes de Dolores y finalizan el Domingo de Resurrección

otras ocasiones se ha recogido quefue el historiador Pérez Villamilquien escribía, hace precisamenteun siglo, en un suplemento publi-cado por el diario ‘La Verdad’, que«estas procesiones de SemanaSanta tan ostentosas, tan solem-nes, tan populosas de Murcia,como las de otras poblaciones delMediodía de España son una tra-dición veneranda de alarde y de lajactancia, si se quiere». ¿Por quéadquieren estos rasgos? SegúnVillamil, era el modo que los cris-tianos de Murcia utilizaron paraprotestar contra la conducta de losjudíos, que por entonces eran muy

numerosos en la huerta murciana yen poblaciones cercanas, y que, aveces, fueron sorprendidos sacrifi-cando animales inmundos «paraconmemorar la muerte de Cristo».Se añadía que incluso llegaron a«sacrificar a veces hombres, a

veces niños», para conmemorar lamuerte de Jesucristo.

La mañana del Viernes Santo Realidad o leyenda, el caso esque las procesiones de SemanaSanta surgieron, y las de Murcia lo

A lo largo del los siglos XXy XXI, la fundación de

diversas cofradíasproporcionó la presencia

de nuevas procesiones

Diez días que nos llevandesde el Cristo del Amparo

y María Santísima de losDolores hasta la Cruz

Triunfante y JesucristoResucitado

PEDRO SOLER GÓMEZPeriodista.Cronista Oficial de Murcia.

Sábado de Pasión. Nuestro Padre Jesús camino del Calvario.

Viernes Santo. Los Azotes, a su paso por la plaza Belluga.

f

Vienres de Dolores. Encuentro en el Camino.

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fhicieron con unas característicaspropias, entre las que predominanuna clara relación entre religiosi-dad y tradición y un canto a laesperanza, más que la sensaciónde dolor irrecuperable.

Si se quiere definir o explicar laSemana Santa murciana, no hayduda de que la mañana del ViernesSanto sigue siendo la respuesta alsentido de la espontaneidad, unestallido de belleza natural, quese engrandece hasta lo sublime,

cuando el sol también irrumpe conla fuerza impetuosa que le propor-ciona la llegada de la Primavera.Salzillo y sus imágenes son puntoy aparte en este contexto procesio-nario, que ha ido aumentando yenalteciéndose, gracias a una seriede murcianos que depositaron enlas celebraciones una parte impor-tante de sus sentimientos religio-sos, pero también el poderío de sunobleza e, incluso, su abundantefortuna personal. El ya citado PérezVillamil afirmaba que Salzillo «supofundir en el molde de su imagina-ción los tipos y los grupos, lossucesos de la Pasión y las figurasque los representan, e infundirles,no el aliento de su alma devota,sino la fe pura y ardiente del almaespañola».

A propósito de esta cita de Sal-zillo, uno se encuentra con losdatos que ya aportara Pedro DíazCassou en su ‘Pasionaria Murciana’,sobre la procesión del Viernes San-to, que –con otras imágenes, porsupuesto– desfiló por primera vezen 1603, y que «en la forma dehoy, o más o menos parecida, saledesde 1690, y solo ha dejado dehacerlo, mediante prohibicióngubernativa, en 1809». Se evocacómo «a las seis de la mañana, elestandarte debe estar a la puertade la Capilla de Jesús, a la quedeben concurrir para tomar parteen la procesión, todos los cofrades.

Antiguamente, y según los primi-tivos estatutos, todos los cofradeshabían de ir a la procesión cadauno con su túnica, cruz y soga y lospies desnudos, salvo si algunotuviera alguna enfermedad urgen-te, que este tal podía llevar en lospies unas sandalias. Los infractorespagaban media libra de cera, encuya pena incurrían lo mismo porno ir, que por llegar tarde». Nohay duda de que son síntomas deesa singularidad de nuestras pro-cesiones.

Dos millones de reales por el ÁngelTambién se entera uno en esterecorrido por el pasado, y por otrasfuentes distintas a Díaz Cassou,que por el Ángel de la Oracióndel Huerto, que costó a la cofradía4.500 reales, ofreció el Duque deWellington dos millones de rea-les; y que por el brazo derechodel San Pedro de El Prendimiento,un turista alemán llegó a ofertarhasta 25.000 francos.

En este mundo de evocacio-nes, también se debiera aludir alpatético y emocionante Cristo dela Sangre, que desfila el MiércolesSanto, obra del gran Nicolás deBussy, escultor favorito de príncipesy monarcas, de quien se cuentaque tras sus años murcianos, has-ta 1706, pasó a Valencia, paraingresar en el convento de los reli-giosos mercedarios de Segorbe,donde unió su vocación religiosacon la de artista.

Figuras anónimasTras esta mirada atrás, también hayque ensalzar las figuras anónimasde quienes, más recientemente,se confabularon para sacar a lacalle otras imágenes, bajo distintasadvocaciones, con la presenciaconstante de la Virgen María y deCristo crucificado o inmerso en supasión. Se consiguió que el núme-ro de desfiles procesionales de

Semana Santa alcanzara la másque respetable cifra de diecisiete,gracias a esos personajes que fue-ron los que, de verdad, se plante-aron la necesidad de engrandecerlas celebraciones de la Pasión deCristo, con notorias novedades y lapresencia de otros pasos, queexpandían la riqueza artística dela escultura y profundizaban en elsentimiento religioso. En definitiva,son diez días, en los que, por difí-cil que parezca, alternan la Flage-lación con el Amparo, la Caridadcon la Fe, la Penitencia con el Per-dón, las Espinas con los Azotes,

el Dolor con la Salud, el Silenciocon el Recogimiento, la Angustiacon la Misericordia, y la Esperanzacon la Resurrección. Para creer, very sentir.

Viernes Santo. La Oración del Huerto.

En Murcia no puede faltarla referencia al patético yemocionante Cristo de la

Sangre, el de los ‘coloraos’,obra del gran Nicolás de

Bussy, escultor favorito depríncipes y monarcas

Miércoles Santo. Jesús en casa de Lázaro.

Religiosidad, tradicióny un canto a la

esperanza se imponena la sensación de dolor

irrecuperable

Salzillo y sus imágenes sonpunto y aparte en este

contexto procesionario,que ha ido aumentando

y enalteciéndose

Cabildo Ayuntamiento

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Está vinculado a las cofradíasdel Amparo, del Perdón y, por

tradición familiar, a la del Refugio,de la que «mi padre fue cofrade;después lo fui yo, y ahora, mi hijo.Otro hijo mío y mis dos hijas tam-bién están en el Amparo. O seaque son tres cofradías con las quetengo relación familiar y personal».Así de satisfecho expone su vincu-lación con la Semana Santa JoséBallesta Germán, alcalde deMurcia, quien, «desde muyniño, acudía con mi padre acontemplar los desfiles y dis-frutar con ellos».

Ballesta afirma quesigue siendo «un murcia-no de a pié, porquedentro de mí tengomuy impregnadas lastradiciones y la idio-sincrasia de la gen-te de esta tierra.En nada se va a

modificar mi com-portamiento

ante la

Semana Santa, en la que afloranvivencias y sentimientos de muydifícil descripción, que llevo den-tro». Al margen de esto, si se lepregunta cómo entiende nuestraSemana Santa, desde otro puntode vista, el alcalde afirma que«principalmente, nos asentamosen salzillos y ‘coloraos’, pero nues-tra Semana Santa es mucho más.No quiero decir que sea mejor opeor que la de otras ciudades,pero sí que es diferente a lasdemás. No se basa en ese barro-quismo sentimental de Andalucía,ni en la ascética de Castilla, sino enque es fiel reflejo de cómo somoslos murcianos, de nuestra manerade ser, a veces hasta en detallesque la gente no puede percibir».

Y alude a los colores de lastúnicas, «que recogen el azul delcielo de Murcia, del verde de suhuerta, del rojo de los frutos…También la Semana Santa es larespuesta a esa manera de serde nuestra generosidad. No con-cebimos ninguna fiesta si no esdando, como hacemos con loscaramelos, con las monas, conlos huevos... Algo parecido suce-de en El Entierro de la Sardina o enel Bando de la Huerta». Reconoceque los murcianos no somos muydados al orden y a la jerarquía,«como se demuestra en una pro-cesión, en la que éste sube y aquélbaja o deja el paso para acercar-se a un espectador, o se marcha atomar un café. El mismo andar delos pasos es otra muestra. Quenadie piense que todos los ande-ros vayan marcando perfectamen-te el paso».

También, afirma el alcalde, «lasimágenes están, en cierta manera,inspiradas en los murcianos de apié. No hay imágenes duras, sinoque suelen ser de facciones suavesy, sobre todo, delicadas. Podríamosdecir que no encierran un patetis-mo trágico. Parece que se busca labelleza de los rostros, aunque tam-bién demuestren dolor». Ballestaañade que «podríamos citar otrosaspectos, desde el punto de vistasociológico o familiar, porque losmurcianos también somos muyfamiliares. Que el padre legue alhijo el puesto de estante es unhecho singular».

Parecería extraño no opinarsobre Salzillo. Y el alcalde insiste ensus teorías de la singularidad: «Esuna de las representaciones másclaras de esa idiosincrasia del mur-ciano. Salzillo nunca salió de Mur-cia, y su personalidad artística sebasó en una capacidad de percep-ción de su realidad circundanteinmediata, algo absolutamentegenial, y que demuestra la rique-za de lo que tenemos aquí. Captóde manera única esa privativa ysingular manera de ser de esta tie-rra y su gente. Sin una formaciónde escuela, cualquiera de sus imá-genes tiene un trasfondo, desde elpunto de vista técnico, que asom-bra».

Está al corriente de que laafluencia de visitantes va a sernumerosa, y que «incluso vamos asuperar cifras de otros años, acasoporque hay una buena promociónde nuestras fiestas, no solo denuestra Semana Santa, sino deotros eventos que consiguen queen los fines de semana los hotelesde Murcia estén prácticamente lle-nos». Aun así, acepta que los

JOSÉ BALLESTA GERMÁN v Alcalde de Murcia

«Nuestra Semana Santa es un reflejofiel de cómo somos los murcianos»«Los colores de las túnicas recogen el azul del cielo de Murcia,el verde de su huerta, el rojo de los frutos»

PEDRO SOLER

medios de comunicación naciona-les no siempre recogen la impor-tancia de acontecimientos comola Semana Santa murciana. «Quizá,desde fuera no se fijan lo suficien-te en Murcia. A veces es la granolvidada de muchos medios decomunicación o de agencias turís-ticas. Esto tenemos que cuidarlo,pero también tengo que recono-cer, porque me gusta la autocríti-ca, que no echemos la culpa exclu-siva a los demás. Debemos com-probar si nosotros también hace-mos lo suficiente para conseguirtodo lo que queremos. Es que a losmurcianos nos gustan nuestrascosas para la autocomplacencia,y no siempre nos damos cuentade que, aunque disfrutemos noso-tros, es importante, que sepamostransmitir hacia fuera ese gozo.Esto nos pasa con muchas cosas.

Queremos nuevas infraestructuraspara poder salir de Murcia, perotambién las necesitamos para quevengan, porque esto puede gene-rar riqueza, mejor economía, pro-greso, empleo…».

¿Se ha pensado en lanzar nues-tra Semana Santa a distancias máslejanas de las regionales? «Esta-mos trabajando en ello, porquequeremos elaborar un conjuntode actos, que encierren una perso-nalidad única para que atraigan.Que sean elementos preferentes,que inciten a venir. Es nuestroobjetivo en este y en otros temas.No podemos competir en materiaturística con aquellos que nos lle-van mucha ventaja en el mismoaspecto. Hay que hacerlo en basea la singularización». Durante laentrevista, el alcalde confesó su«especial ilusión» en un acto nove-

doso: la primera convocatoriageneral para la Semana Santa,«dirigida a todos los murcianos».(Ver la información en página 14de ‘Pasión por Murcia’)

José Ballesta (izq.), portando el paso de La Coronación de Espinas,

de la cofradía del Cristo del Perdón del Lunes Santo.

E l cartel de la Semana Santa2016 fue realizado por Willy

Ramos, pintor nacido en Colombiay residente en Valencia, desdehace muchos, años, pero tambiénmuy relacionado con Murcia. Hasido una obra que, sin duda, haroto con unas escenificaciones másamables de las representacionesy de las imágenes. Las opinioneshan sido muy distintas, porque noha gustado a todo el mundo. WillyRamos acepta que «el cartel no hasido asumido como otros. Quizá hallegado al corazón de no pocaspersonas, y a esto parece que noestamos acostumbrados. No sémuy bien por qué ha surgido esasilenciosa polémica, porque miobra, toda la que he realizado, almargen de este cartel, nunca hasido polémica. Yo hago una pintu-ra suave, porque pinto para hacerfeliz a la gente. La pintura nuncadebe ser un arma de combate,

pese a que sí se la interpretara enalgún momento de la historia. Escomo algo que te sirve para encon-trarte, para ayudarte a caminar y avivir».

¿Por qué, entonces, esta ima-gen tan dolorosa de Cristo? «Loque nadie debe pensar es que yoquiero atacar o desprestigiar la figu-ra de Jesucristo y a la Iglesia, por-que yo respeto muchísimo el sen-tido religioso de las personas. Hehecho un cartel que puede parecerdesgarrador, pero no es violento.En él he querido recoger lo queimplica la Semana de Pasión, algotremendamente importante en lareligión católica. Es la clave. Y yoquise resumir un poco la personade Cristo que me parece maravi-llosa, un personaje lleno de luz,pero también muy humano. Hequerido plasmar la figura de Diosen un ser humano, que sufre. Ycreo que me centré muy bien en

esto, porque deseaba darle comoun contenido muy fuerte, acasotambién trágico».

Por supuesto, «si me hubiesenpedido hacer un cartel del Domin-go de Resurrección, hubiese pinta-do otra cosa, porque no es lo mis-mo la resurrección de Cristo que laSemana de Pasión». ¿Qué haría, sile plantearan realizar otro cartelde Semana Santa? «No lo sé exac-tamente, pero seguro que me sal-dría algo parecido a este. La ver-dad es que, antes de decidirme,realicé varias versiones, algunasmucho más bonitas, pero esta fuela que brotó con más sinceridad.Hay imágenes que resultan muybonitas para fotografiar, pero queno se pueden pintar».

Recuerda que dibujó distintascabezas de Cristo, un boceto delcostado, con la herida abierta,«pero esta imagen sí me parecíaviolenta. No era lo que yo que-ría». También dibujó una mano y unpie de Jesús, atravesados por unclavo, «que no eran lo que yodeseaba», reconoce. ¿Siente WillyRamos, de alguna manera, la reli-giosidad de Semana Santa? «Yosoy una persona muy espiritual, o,al menos, intento serlo, y tambiénsoy una persona muy religiosa.Estos aspectos de la vida sirvenpara que las personas se comuni-quen y den un sentido a su propiavida. Por esto, yo entiendo la reli-gión como un aspecto muy impor-tante en mi existencia, aunque pre-fiero no entrar en más particulari-dades sobre mi propia vida. Endefinitiva, lo que he querido con-seguir con el cartel es que llegaraal corazón de la gente y le sirvierapara interrogarse sobre de dóndeviene y a dónde va».12 13


Quizá hubo un tiempo en elque los llamados carteles

anunciadores eran considera-dos como de segunda catego-ría, muy alejados de lo quedebiera de ser una obra dearte. Acaso influyó en este con-cepto el hecho de que se trata-se, principalmente, de un méto-do de publicidad. Aún así, loscarteles, por muy publicitariosque fuesen, siempre contaroncon autores de primera fila, quesupieron verter sobre ellos susdotes más creativas. También,fueron surgiendo los estudiosde diseño, que dispusieron deauténticos malabaristas en la mate-ria y que confabularon, a la hora deinventar un cartel, atracción artís-tica y convicción publicitaria.

Desde Murcia, podemos decirque su Semana Santa ha contado,para darse a conocer a través de suscarteles anunciadores, con los mejo-res pintores de la región u origina-rios de otras zonas. El Ayuntamien-to conserva entre su riquísimo patri-monio una colección, prácticamen-te completa, de las obras originales,que se convertirían en esos cartelesanunciadores de su Semana Santa.

Y en todos ellos, brillan las caracte-rísticas propias que cada autor haderramado a través de su trayecto-ria artística. En ellos suelen imponer-se los rasgos más personales. Y esnecesario advertir que, si se impo-nen los rostros de las imágenes másfamosas de Francisco Salzillo, quedesfilan en la mañana del ViernesSanto, tampoco faltan enclaves oedificios emblemáticos de la ciu-dad de Murcia, como son la cate-dral, con la fortaleza de su fachaday la elevación de su torre, o el Puen-te de los Peligros. Otras veces, el

cartel se basa en tomas realizadasdurante los desfiles, por conoci-dos fotógrafos.

También sucede que bastan-tes carteles han sido anuncian-tes, a la par, de la Semana San-ta y de las Fiestas de Primavera.Por esto, los hay que mezclan lasimágenes conocidas de los des-files pasionales con el tipismode determinadas actividades delos festejos primaverales.

Luis Garay, Pérez Gil, RamónGaya, José María Párraga, MuñozBarberán, Pedro Cano, Pedro Ser-na, Tomas Lorente, Juan López,Antonio Carbonell, Antonio Laor-

den, José María Falgas… son algu-nos de los autores –no pocos deellos han repetido– que han demos-trado su calidad artística a travésde estos carteles.

La elección del autor es, sinduda, un honor al que es preciso res-ponder con la máxima exigencia,pero también con no poco cariño auna celebración, declarada de Inte-rés Turístico Internacional, que pro-voca la presencia de miles de forá-neos, y que muchos más miles demurcianos siguen cada año condevoción y ternura.

Los carteles, auténticas obras de arteEntre sus autoresfiguran Garay, Gaya,Párraga, MuñozBarberán, PedroCano, Pedro Serna yJosé María Falgas

Manuel Muñoz Barberán, 1977. Juan López, 1963. Mariano Ballester, 1979.

Pérez Gil, 1943.

PEDRO SOLER

Ramón Gaya, 1983.

WILLY RAMOS v Autor del cartel de Semana Santa

«He querido plasmar la figura de Diosen un ser humano, que sufre»S. G.

«Lo que nadie debe pensar es que yo quieroatacar o desprestigiar la figura de Jesucristo

y a la Iglesia»

José Ballesta, alcalde de Murcia,Ramón Sánchez-Parra, presidente del Cabildo, y Willy Ramos, durante la presentación del cartel anunciadorde la Semana Santa 2016.

Fue original llamada la que el sába-do, día 5, protagonizaron tambores,bocinas, burlas y trompetas. Porvez primera se celebró el ‘Via Pas-sionis’, que se convertía en la con-

vocatoria oficial para la celebraciónde la Semana Santa murciana.Miembros de las cofradías delAmparo, la Caridad, de Jesús, elPerdón y la Sangre, junto a los tam-

bores y heraldos de la Salud, parti-ciparon en esta solemne cita, quetuvo su principal punto de vistosi-dad en un espacio tan entrañablecomo el Puente de los Peligros, trassu presencia en la Plaza de Bellugay ante el Monumento al Nazareno

14 15


Es tradicional, en todas lascofradías pasionarias, la

curiosidad por conocer el pesotanto de cada uno de los pasosque procesionan en ellas, comodel que soportan individualmen-te cada uno de los estantesdurante el recorrido del desfile.

En la Cofradía de NuestroPadre Jesús, ya se hizo un inten-to de pesaje, allá por los añossesenta, pero cuyos resultadosno eran del todo fiables dadaslas posibilidades técnicas de laépoca.

Hace dos años, el equipodirigido por Antonio NavarroSánchez, Nazareno de la Cofra-día hermana del Cristo de laSangre, coordinado por José

Cano Martínez, Cabo de Andasde la Samaritana, llevaron a caboel pesaje de todos los tronos delas Cofradías murcianas salvo losde la Cofradía de Jesús porimposibilidad de hacerlo en esasfechas. El Jueves Santo de 2015sí se pudo llevar a cabo la ope-ración mediante dos gatoshidráulicos con capacidad deelevación de 40.000 kilogramoscada uno, que garantizaban,esta vez sí, la fiabilidad de losresultados. El pesaje se llevó acabo con los tronos ya adorna-

dos y con las varas colocadas,para que reflejara exactamenteel peso real con el que los pasossalen por las calles de Murcia.

El más pesado resultó ser laSanta Cena, con 1.310 kilos repar-tidos entre 28 nazarenos estantesa razón de 46’8 cada uno, segui-do muy de cerca por la Oraciónen el Huerto, con 1.206 kilos tam-bién repartidos entre otros 28nazarenos a razón de 43 kilos porestante. El menor peso de otrostronos se compensa al ser tam-bién menor el número de los que

lo soportan. El resultado de todoslos pesajes demostró el gransacrificio que hacen los 212 naza-renos estantes, que tienen laenorme responsabilidad de sacarpor las calles de Murcia, en Lamañana de Salzillo, ese museoitinerante.

Y ello, sin contar el peso pro-pio que cada uno lleva en la senáa lo largo de las casi cinco horasque tardan en recorrer las callesde Murcia.

El peso de los pasosANTONIO GÓMEZ FAYRÉN

Antonio Gómez FayrénPresidente de la Real y Muy Ilustre

Cofradía de Jesús de Murcia

Sonora y original convocatoria para la Semana Santa

16 17

Semana Santa l Marzo 2016 Semana Santa l Viernes de Dolores l Marzo 2016

La Semana Santa de Murcia seinicia el Viernes de Dolores, con

el desfile de la Venerable Cofradíadel Santísimo Cristo del Amparo yMaría Santísima de los Dolores. Salede la parroquia de San Nicolás, enla que tiene su sede. Fue fundadaen 1985, cuando era obispo donJavier Azagra. La iniciativa se debióa un grupo de fieles, que deseabanparticipar de modo directo en lasprocesiones, de las que eran fer-vorosos seguidores. Como repre-sentante destacado de aquel grupofiguraba Emilio Salas.

En el primero de sus desfiles,solo estuvieron presentes tres her-mandades: las de Nuestro PadreJesús del Gran Poder, María Santí-sima de los Dolores y SantísimoCristo del Amparo. Estaban dirigi-das por sus cabos de andas, Anto-nio González Barnés, Alfonso LópezCerezo y Ángel Galiano Meseguer.Con el paso de los años se fueampliando el número de hermanda-des, hasta las ocho que formanactualmente la cofradía.

El mismo Viernes de Dolorespor la mañana, los pasos permane-cen en la parroquia, expuestos a la

contemplación popular, hasta pocashoras antes del comienzo del desfi-le, que se inicia a las siete de la tar-de y finaliza ya de madrugada.

Procesión con rasgos peniten-ciales, el color azul de sus túnicaso el reparto de caramelos no rom-pen sus señas de identidad, por-que se impone el respeto y laentrega al momento que se vive. Eltitular, Santísimo Cristo del Ampa-ro, es también conocido como elCristo de los Toreros, porque esportado por personas relaciona-das con el mundo taurino. María Santísima de los Dolores.

Nace el fervor de la SemanaSanta murciana

GLORIETAPALACIOESPISCOPAL

FRENERÍA

SANTODOMINGO

SANTAISABEL

ROMEA

SANBARTOLOMÉ

TRAPERÍA

GRAN VÍA

CATEDRAL

SAL 19:00hLLEG 23:15h

SANTACATALINA

SANNICOLÁS

Viernes de Dolores 18 MARZOLA PROCESIÓN DEL CRISTO DEL AMPARO

Pasos

¡No te lo pierdas!

Ángel de la Pasión (22 estantes)Rafael Roses Rivadavia, 1995.

Sagrada flagelación (34)José Hernández Navarro, 1994-1996.

Jesús ante Pilatos (32)Antonio Labaña Serrano, 1991-1994.

Jesús del Gran Poder (34)Atribuido a Nicolás de Bussy y Mignan, 1693.

Encuentro en el Camino del Calvario (34)Gregorio Fernández-HenarejosMartínez,2001.

San Juan (34)Gregorio Fernández-HenarejosMartínez, 2001.

María Santísima de los Dolores (34)Atribuida a Francisco Salzillo y Alcaraz, 1741.

Santísimo Cristo del Amparo (32)Atribuido a Francisco Salzillo y Alcaraz, 1739.

] Es necesario dirigir la mirada a la imagen deMaría Santísima de losDolores, obra anónima,pero atribuida a Salzillo.

] Otras dos esculturasanónimas, las del SantísimoCristo del Amparo,también atribuido al granescultor murciano, y la deJesús del Gran Poder, quepudo ser realizado porNicolás de Bussy.

] El canto de saetas y larecogida de la procesiónson momentos deprofundas emociones.

Puesto que estamos en el Añode la Misericordia, «voy a

comenzar rogándoles que algo deesa misericordia alcance a uste-des, al juzgar mis palabras de hoy».Fue el inicio del Pregón de Sema-na Santa, que Francisco Martínez-Escribano pronunció el pasado 28de febrero, en el Teatro Romea.Una intervención llena de emocio-nes, recuerdos, tradiciones y cono-

cimientos sobre la propia celebra-ción, en la que combinó sus pala-bras con la interpretación de variasobras musicales a cargo de la Ban-da Juvenil de Cabezo de Torres ycon la proyección de imágenesrealizadas por el fotógrafo JoaquínZamora.

El decano del Colegio de Abo-gados de Murcia dividió su pre-gón en diversas partes. Explicó aldetalle sobre qué debía versar, ycómo, su intervención como pre-gonero, y afirmó que «el mejorregalo que podemos hacer a losdemás es compartir y proclamartodos juntos la fe que nos une, lamisma de nuestros padres, nues-tros abuelos». Se declaró «prego-nero cristiano, y quiero ser prego-nero alegre, puesto que nuestrareligión es alegría; incluso un acon-tecimiento tan dramático como laSemana Santa concluye en unaexplosión de gozo con la Resu-rrección de Jesús». Añadió que laSemana Santa de Murcia «es ale-gre, como corresponde a nuestrocarácter mediterráneo», y es tam-bién una semana de colores por lastúnicas; de olores, por el incienso,el azahar, las flores; de sonidos,por sus bocinas, tambores y trom-petas; de sabores, por sus cara-melos, pastillas, monas. Y se refirióa la familia, como «cuna de nues-tro ser nazareno«».

Luego descolgó sus recuerdosy vivencias porque fue nazarenoantes de nacer, ya que su padre loinscribió en la Cofradía del Per-dón en febrero del año 1958, y élnació en abril. «Mis padres ade-

más me llevaban desde muypequeño, con mis hermanos, cuan-do éstos fueron naciendo, a verprocesiones».

También rindió homenaje a lamujer nazarena, «un homenaje atodas las murcianas que de una uotra forma se ven reflejadas en lasfiguras femeninas de la Pasión», ya aquellas, «a las que Jesús se lesapareció antes que al resto de losdiscípulos». Se ocupó del juicio aque fue sometido Jesús, en el queHerodes y Pilatos, aunque lo decla-raron inocente, cedieron ante elde «crucifícale, crucifícale» de lamuchedumbre. Fue un juicio «arbi-trario por delitos no probados».

�Se refirió a las tradiciones y a laimportancia de las cofradías, queson «la expresión libre de la fe delcristiano, que manifiestan una con-creta identidad cultural, tradicional,y de piedad auténtica, muy impor-tante para la fe y para la Iglesia».Tras citar a todas las actuales, Mar-tínez-Escribano se ocupó de lasprocesiones, a las que definiócomo un «rito religioso que signi-fica caminar en comunidad, cami-nar unidos, caminar juntos en ora-ción». Y añadió que «Murcia consus procesiones se convierte enuna ciudad de alegría, en museovivo, mostrando en sus desfiles lomejor de esta tierra». También serefirió al cambio que supuso laincorporación de las imágenes deSalzillo. Tras ocuparse de describirlos tronos y la presencia imprescin-dible de la música, terminó hablan-do de la Resurrección de Cristo,como «el júbilo que sustituye alllanto, el día a la noche, y la tinie-bla a la luz».

�Con un entrañable epílogoacabó Martínez-Escribano su pre-gón, cerrado con la más emotivacita a su familia, «pero en especiala mis hijas, Ana, Pilar y Blanca, ya mi mujer Ana, que son el rega-lo de Dios para mí, mi amparo ymi refugio».

FRANCISCO MARTÍNEZ-ESCRIBANO GÓMEZ v Pregonero de Semana Santa 2016

«Murcia con sus procesionesse convierte en un museo vivo»El pregonero, «cristiano y alegre», afirmó que la muerte de Jesússe debió a un «juicio arbitrario por delitos no probados»

Francisco Martínez-Escribano Gómez,durante la lectura del Pregón 2016. Viernes de Dolores. Jesús del Gran Poder.

La Cofradía del Santísimo Cristo del Amparo y María Santísima de los Dolores inicia los desfiles

www.cofradiadelamparomurcia.com

PEDRO SOLER

E l silencio procesional se repiteen la tarde-noche del Sábado

de Pasión gracias a la VenerableCofradía del Santísimo Cristo de laCaridad, que es la segunda en des-filar, aunque no hay que olvidarque volverá en la tarde del Sába-do Santo, aunque con imágenesdistintas, por supuesto.

Ocho pasos forman el desfiledel Sábado de Pasión y solo uno,como ya se verá, en el del sábadosiguiente. Entre sus imágenes des-taca la de la Santísima Virgen Dolo-rosa, realizada por Francisco Salzi-llo en 1742, aunque también sonadmiradas las piezas originales deun autor reciente, como José Her-nández Navarro, especialista enesculturas para la Semana Santa. LaFlagelación y la Coronación deEspinas son obras de este artista.

Esta cofradía tiene su sedeen el templo de Santa Catalina.

Fundada el 29 de junio de 1993,comenzó sus desfiles al siguienteaño. Sería en 1996 cuando decidiócumplir fielmente el reglamento,que indicaba la rememoración fer-vorosa de los misterios del SantoRosario. Así fueron surgiendo los

distintos pasos que laintegran.

Para los entendidos entemas procesionales, estaes una cofradía que habuscado «la recuperacióndel más puro estilo tradi-cional murciano», por loque al desfile se refiere.Por esto, entre otras cues-tiones, los pasos se ilumi-nan solo con el encendidode las velas; y los mayor-domos visten a ‘la viejausanza’, y lucen túnicasde color rojo y desfilancon el rostro descubierto,

La Cofradía del Santísimo Cristode la Fe arranca, en la tarde del

Sábado de Pasión, de la iglesia deSan Francisco de Asís, de Los PadresCapuchinos. Fundada en 1999, figu-ra como la más reciente en la histo-ria de la Semana Santa murciana.Profesores del Colegio San Buena-ventura, popularmente conocidocomo el Colegio de los Capuchi-nos, promovieron su puesta en mar-cha. Sus inicios fueron con un solopaso, el Santísimo Cristo de la Fe, alque se uniría el de Santa María delos Ángeles, que desfiló por vez pri-mera en el año 2008. Con esta cofra-día comienzan los que podrían defi-nirse como desfiles del silencio.

Esta es una procesión de largorecorrido, que tras superar espa-cios tan emblemáticos como laPlaza Circular y el Paseo de Alfon-so X, penetra en el corazón de laciudad. Atrae mucho “la impresio-nante salida del cortejo, ya que lapuerta de la iglesia es insuficien-te para que la imagen titular sal-ga sobre el trono”. Por esto, elSantísimo Cristo de la Fe es colo-cado en su paso en la misma puer-ta del templo.

Como singularidad hay quedestacar que el Santísimo Cristode la Fe, de Antonio Dorrego, esla única imagen de Cristo Crucifi-cado sin policromar que desfila entoda la Semana Santa murciana. YSanta María de los Ángeles es laprimera obra de Antonio JesúsYuste, realizada en 2014, que par-ticipa en los desfiles procesionalesde la capital. Sustituyó a otra ima-gen similar de Pedro Arrue.

18 19

Semana Santa l Sábado de Pasión l Marzo 2016 Semana Santa l Sábado de Pasión l Marzo 2016

Pasos

La Oración en el Huerto (28 estantes)Arturo Serra Gómez, 1996.

La Flagelación (28)José Hernández Navarro, 2007.

La Coronación de Espinas (28)José Hernández Navarro, 2009-2013.

Nuestro Padre Jesús Camino del Calvario (26)Manuel Ardil Pagán, 1999.Pedro J. Arrúe de Mora, 2006.

Santa Mujer Verónica (26)José Hernández Navarro, 2003.

San Juan (26)Ramón Cuenca Santo, 2013.

María Dolorosa (24)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1742.

Santísimo Cristo de la Caridad (28)Rafael Roses Rivadavia, 1994.

Pasos

Santa María de los Ángeles (32 estantes)Antonio Jesús Yuste Navarro, 2014.

Santísimo Cristo de la Fe (42)Antonio Dorrego, hacia 1959.

¡No te lo pierdas!

] La salida de la procesión, cuando el Cristo de laFe es colocado en el trono sobre el que desfila, enlas puertas del templo.

] El recorrido por el Paseo Alfonso X suponemomentos de recuerdos e intimidad. Es un espaciopor el que todos los murcianos han paseado y quealberga constantes celebraciones.

¡No te lo pierdas!

] La imagen de MaríaDolorosa, original deFrancisco Salzillo, desprendela belleza que el autor grabóen obras similares.

] Es preciso fijarse también en el calzado de lospenitentes –alpargatas concintas negras– y en susenaguas almidonadas.

] El chisporroteo de los cirios,como un silencio luminoso.


SANTODOMINGO

SANTAISABEL

ROMEA

SANBARTOLOMÉ

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GRAN VÍA

CATEDRAL


SANTACATALINA

Sábado de Pasión 19 MARZOLA PROCESIÓN DEL CRISTO DE LA CARIDAD

Sábado de Pasión. Santa María de los Ángeles.

Santísimo Cristo de la Fe.

Sábado de Pasión. Santísimo Cristo de la Caridad.

Presencia en Sábado de Pasióny Sábado SantoLa Cofradía del Cristo de la Caridadprotagoniza dos desfiles en la SemanaSanta murciana

El Cristo de la Feinvita al silencioCon salida del colegio capuchino, recorre espaciosemblemáticos y penetra en el corazón de la ciudad


Sábado de Pasión 19 MARZOLA PROCESIÓN DEL CRISTO DE LA FE

FRENERÍA

SANTODOMINGO

SANTAISABEL

ROMEA

SANBARTOLOMÉ

TRAPERÍA

GRAN VÍA

CATEDRAL

SANTACATALINA

SAN FRANCISCODE ASÍS

ALFONSO X EL SABIO

CIRCULAR

www.cofradiadelacaridad.comwww.cofradiafe.com

mientras que los penitentes, sinembargo, sí se lo cubren con uncapuz, en el que resalta el escudode la cofradía.

20 21


Fue, durante ocho años, vice-presidente del Cabildo Supe-

rior de Cofradías, al que estabavinculado desde 1998, porque,recuerda, «fue el año en quemurió mi padre, y a mí me nom-braron Hermano Mayor de laCofradía del Refugio». Hace tresaños fue elegido para el cargoque ahora ostenta.

Es Ramón Sánchez-Parra Ser-vet, quien alcanzó el puesto «nopor interés particular o por heren-

cia, sino porque quisieronnombrarme todos miscompañeros del Cabil-do Superior de Cofra-días. Cada cuatro añoshay elecciones paraese cargo, entre todoslos presidentes de las

cofradías, y en lasúltimas

me tocó a mí ser elegido. Ellos medieron su voto de confianza, y laverdad es que acepté el cargo conmuchísima ilusión».

¿Sigue con la misma ilusión?«Sí, porque, de no ser así, hubie-ra dimitido. A seguir ilusionadoayuda muchísimo la colaboraciónque existe entre los catorce presi-dentes de las cofradías en el senodel Cabildo, junto a la de otrasmuchas personas, que también tra-bajan y colaboran desde fuera delCabildo. Creo que es muy impor-tante destacar esta unión entrecuantos, de un modo más o menosdirecto, participamos en la organi-zación de la Semana Santa».

A la hora de concretar, RamónSánchez-Parra afirma que «desdeque la Virgen de la Fuensanta subeal monte, en septiembre, ya esta-mos dedicados a organizar laSemana Santa, porque con la can-tidad de actos que se programan,no nos queda más remedio quecontemplar el panorama con tiem-po suficiente. Este año se han pro-gramado noventa y cinco actos,que demuestran que la SemanaSanta de Murcia está viva, graciasa Dios, durante todo el año. A fina-les de septiembre empezamos conlas reuniones de las distintas comi-siones del Cabildo Superior deCofradía, para planificar las activi-dades de cada parcela». Cita «laorganización de la revista del Cabil-do, la Procesión del Ángel, lasegunda exposición de fotógrafosmurcianos y, por primera vez, elpregón infantil». Respecto a laexposición de fotografía, afirmaque hay venta de fotografías, «ycuanto se recaude ira destinado a

una obra de caridad, que nos indi-que el obispo».

¿Entrañan tantos actos unosgastos considerables? «Sí, pero nopodemos olvidar que también haymuchos colaboradores y distintasentidades que nos apoyan paraque el contenido de todo el pro-grama pueda salir adelante. Poresto, no tengo más remedio quealabar su generosidad y dar lasgracias por su constante colabora-ción, año tras año». También reco-noce que los cofrades «se vuelcanen colaborar, porque son conscien-tes de la responsabilidad queadquieren cuando se hacen miem-bros de una cofradía y, por supues-to, también participan cada vezmás en los actos».

El presidente del Cabildo Supe-rior de Cofradías no destaca predo-minio de sentimientos religiososo tradicionales, entre cuantostoman parte en la Semana Santa.A su juicio, «se conjugan el senti-miento cristiano y nazareno con latradición entre muchísimas fami-lias en las se suceden los deseosnazarenos del abuelo, del padre,de los hijos, de los nietos... Y seestán produciendo también nuevasincorporaciones de gente que, has-ta ahora, no participaba en laSemana Santa».

En las páginas de esta revistase incluyen opiniones de quienescreen que la Semana Santa deMurcia es única. Ramón Sánchez-Parra apoya estas teorías, porque,según confiesa, «nuestra SemanaSanta dispone de una serie dediversidades que no se dan en lasotras regiones españolas. Es únicapor sus túnicas, sus imágenes, sus

nazarenos, sus estantes, sus estan-dartes... La verdad es que tene-mos, en este aspecto, una suerteenorme de contar con una Sema-na Santa muy peculiar, y estamosobligados a cuidarla para que sigaviva, por los siglos de los siglos».

¿Necesita un realce, que no tie-ne? «Pienso que sí lo tiene, por-que, como explicamos en la guíaoficial, hay actos desde las nueve dela mañana hasta que acaban lasprocesiones. Por tanto, cualquiervisitante que nos llegue, cualquierpersona interesada dispone deactos de muy diversa índole paraseguir a lo largo de todos los días

de la Semana Santa y conocerla enprofundidad». Y, si se le indica que,a nivel nacional, en los informativosde las televisiones o en los progra-mas religiosos, no se la cita con laasiduidad, que sí obtienen las deotras ciudades españolas, Sánchez-Parra reconoce que «en esto sí estoyde acuerdo. En las televisiones, ape-nas si, muy de tarde en tarde, apa-rece algún trocito sobre nuestraSemana Santa. Por esto, estamosparticipando ya tres años en FITUR,para promocionarla». Y con enormeesperanza anuncia, para el 2017,la organización del Congreso Inter-nacional de Hermandades y Cofra-días, que ya se celebró en Murcia,en 2005. Añade que «esto puededar un realce muy notable a nues-tra Semana Santa».

Parece casi obligatoria la pre-gunta al presidente del CabildoSuperior de Cofradías sobre el car-tel anunciador de las celebraciones

sacras, que ha levantado una cier-ta polémica. «Es la imagen de unCristo que transmite profundidad,y que encierra la Pasión y la Resu-rrección. Creo que llegará elmomento en que se valorará sufi-cientemente ese pedazo de cartelque ha hecho Willy Ramos, concariño y entrega, porque, además,es una persona muy religiosa, queentiende acertadamente lo que es

la Pasión, Muerte y Resurrección deJesucristo».

Las últimas palabras de RamónSánchez-Parra son para «alabar launión y colaboración que existeentre las cofradías, siempre dis-puestas a servir a cualquier her-mano cofrade, porque, en defini-tiva, son los cofrades los protago-nistas de la vida que desarrollan lacofradías a las que pertenecen».

RAMÓN SÁNCHEZ-PARRA SERVET v Presidente del Cabildo Superior de Cofradías de Murcia

«La Semana Santa de Murcia está viva,gracias a Dios, durante todo el año»«Hemos programado noventa y cinco actos, y, por primera vez, el pregón infantil»

PEDRO SOLER

Ramón Sánchez-Parra Servet, presidente del Cabildo Superior de Cofradías de Murcia.

Ramón Sánchez-Parra Servet.

»Llegará el momento en que se valorarásuficientemente ese

pedazo de cartel que hahecho Willy Ramos»

El Domingo de Ramos sale, des-de un templo tan céntrico,

como la iglesia de San Pedro, y enuna plaza tan recogida, la Cofradíadel Santísimo Cristo de la Esperan-za. Su historia se remonta al sigloXVI, en torno a la desaparecidaermita de San Ginés. Surgió con laintención de socorrer a los pobres,de incitar a la penitencia para laredención de los pecados y de ayu-dar, en las últimas horas de su exis-tencia, a los condenados a muerte.Se caracterizó desde sus inicios portener entre sus miembros a sacerdo-tes, religiosos y laicos, «sin distinciónde sexo». Entre ellos se encontra-ban Francisco Salzillo y su esposa,cuyo ingreso consta en el libro dela congregación, con fecha del día22 de agosto de 1755.

En la Iglesia de San Pedro serendía culto al Cristo de la Esperan-za, que era sacado en procesiónpara pedirle remedio contra lasriadas o las epide-mias que afecta-ban a los habitan-tes de la ciudad ysu huerta, perotambién para queevitara las plagasque podían acabarcon los cultivos.

La Cofradíaconsta de ochohermandades, y seinicia con el trono denominadoDejad que los Niños se acerquena Mí. Uno de los más populareses la Entrada de Jesús en Jerusa-lén, aunque nunca pueden olvi-darse que las imágenes del titular22 23

Semana Santa l Domingo de Ramos l Marzo 2016 Semana Santa l Marzo 2016

Pasos

Dejad que los niños se acerquen a Mí (36 estantes)Francisco Liza Alarcón, 2009.

Arrepentimiento y perdón de Santa María Magdalena (38)Francisco Liza Alarcón y AntonioCastaño Liza, 1983-2014.

Entrada de Jesús en Jerusalén (36)José Hernández Navarro, 1984-1987.

San Pedro Arrepentido (36)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1780.

Nuestro Padre Jesús Nazarenode la Penitencia (34)Santiago Baglietto y Gierra, 1817.

San Juan Evangelista (26)Antonio Labaña Serrano, 1984.

María Santísima de los Dolores (34)Francisco Salzillo y Alcaraz, hacia 1756.

Santísimo Cristo de la Esperanza (34)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1755.

Domingo de Ramos. Santísimo Cristo de la Esperanza.


SANTAISABEL

ROMEA

SANBARTOLOMÉ

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CATEDRAL


SANTACATALINA

Domingo de Ramos 20 MARZOLA PROCESIÓN DEL CRISTO DE LA ESPERANZA

SANPEDRO

SANTODOMINGO

¡No te lo pierdas!

] La naturalidad del paso de ‘La burrica’, en el trono de la Entradade Jesús en Jerusalén.

] El amplio número de portantes del trono Arrepentimiento y Perdón de Santa María Magdalena.

] El encuentro de los pasos en la Plaza de San Pedro, y la entradaen el templo del Cristo de la Esperanza, a pulso de los nazarenosestantes.

Desde la parroquia de San Pedro, Jesucristoprotagoniza su Entrada en Jerusalén

Cristo de la Esperanza, una llamada de socorro

y de la Virgen de los Dolores sonobras del que fuera su cofrade,Francisco Salzillo, o que NuestroPadre Jesús Nazareno es obra deBaglietto.

www.cofradiacristoesperanza.org

San Antolín, volvió la cofradía a ocu-par su antigua sede. Fue en torno alos años sesenta del pasado siglo.

El fervor de los vecinos del barriopor el Cristo del Perdón es hartoconocido, ya que, prácticamentedesde que amanece el día de LunesSanto, son muchos los que partici-pan en la preparación del desfile y

asisten a la contemplación delas imágenes que, por la noche,recorrerán las calles de Murcia.Esta cofradía reúne un elevadonúmero de pasos y una largatradición que la convierten enuna de las más populares y unade las «grandes procesiones dela capital».

y tejedores de la seda. La imagendel Prendimiento luce un manojo decapullos de seda, en recuerdo deaquellos fundadores de la cofradía.Finalizó su inicial trayectoria en1812, cuando desapareció el gre-mio fundador, pero fue recuperadaen 1896 por el sacerdote PedroGonzález Adalid, con la intención de

que volviese a salir desde el temploen el que tuvo su origen.

Pero aún fue más agitada la mar-cha de la cofradía en el siglo XX,debido a la guerra civil española,que ocasionó la destrucción del tem-plo, por lo que hubo de ser trasla-dada a la cercana parroquia de SanAndrés. Reconstruida la iglesia de

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Semana Santa l Lunes Santo l Marzo 2016


FRENERÍA

SANTODOMINGO

SANTAISABEL

ROMEA

SANBARTOLOMÉ

TRAPERÍA

GRAN VÍA

CATEDRAL

SANTACATALINA

Lunes Santo 21 MARZOLA PROCESIÓN DE ‘LOS MAGENTA’

SANANTOLÍN


¡No te lo pierdas!

] El contraste entre imágenes de muy notables escultoresmurcianos de talla nacional e internacional, desde Salzillo aSánchez Lozano, junto a Roque López y Francisco Toledo.

] Las bocinas y los tambores, que interpretan las tradicionales burlas.

] La música de las marchas pasionarias compuestas en sumomento para el desfile del Cristo del Perdón.

Pasos

Ángeles de la Pasión (36 estantes)José Hernández Navarro, 2012

Getsemaní (26)José Hernández Navarro, 1996

El Prendimiento (28)José Sánchez Lozano, 1947-1948

Jesús ante Caifás (36)Damián Pastor y Micó (Cristo), 1897Salvador Castillejos (Tribunal), 1944

La Flagelación (18)José Sánchez Lozano, 1945

La Coronación de Espinas (36)José Hernández Navarro, 1982

Encuentro en la Vía Dolorosa (36)José Sánchez Lozano (Cristo), 1948Miguel Martínez Hernández (Virgen y San Juan), 1924

La Verónica (28)Francisco Toledo Sánchez, 1954

El Ascendimiento (36)José Hernández Navarro, 1988

Santísimo Cristo del Perdón (28)Atribuidos a Francisco Salzillo y Alcaraz. (Cristo), 1733-1734 y San Juan, 1737. Roque López López(Dolorosa), 1793.Francisco Sánchez Araciel (Magdalena), 1897

Virgen de la Soledad (18)José Sánchez Lozano, 1943

Una de las más antiguas de laciudad de Murcia es la Cofra-

día del Santísimo Cristo del Per-dón. Tiene su sede en la parroquiade San Antolín, desde donde arran-

ca el desfile en la tarde del LunesSanto. Los historiadores afirmanque sus orígenes se remontan alaño 1600, impulsada por los com-ponentes del gremio de torcedores

Lunes Santo. Cristo del Perdón.

Fervor popular anteel Cristo del PerdónLa antigua Cofradía desapareció en 1812,pero fue recuperada por el sacerdotePedro González Adalid

www.cofradiadelperdonmurcia.com

Semana Santa l Lunes Santo l Marzo 2016

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Semana Santa l Martes Santo l Marzo 2016 Semana Santa l Marzo 2016

La Cofradía del Santísimo Cristodel Rescate se inició en junio de

1941, gracias a la iniciativa de ungrupo de devotos del que entoncesera conocido como el Cristo de laManos Atadas, que se veneraba enla parroquia de San Juan. Fue amediados del siglo XIX, cuando latalla fue cedida al templo en el queahora permanece. Pese a todo,hubo que esperar hasta 1946 cuan-do se iniciaron las gestiones para laconstitución de la Cofradía.

Como dato muy singular, espreciso rememorar que, pocosaños antes había finalizado la gue-rra civil, y durante la contienda, laimagen del Cristo del Rescate per-maneció oculta en su propia horna-cina, a la que algún piadoso devo-to había colocado un tabique, paraevitar su destrucción. Por entoncesla citada parroquia se había conver-tido en prisión accidental. Estascircunstancias provocaron que alCristo del Recate también se leasignase la denominación de el

Divino Cautivo. Pese aque pudo salvarse de ladestrucción, sufrió nota-bles daños que fueronreparados por el conoci-do escultor José SánchezLozano.

Imagen de autor anó-nimo, aunque sí pareceque fue realizada a lo lar-go del siglo XVII, desfilópor vez primera en loscortejos de Semana San-ta en 1947. Dos añosdespués se uniría la ima-gen y el trono de MaríaSantísima de la Esperan-za, realizada por el cita-

Martes Santo. Nuestro Padre Jesús del Rescate.

Lamirada asombrosadel Divino CautivoEl Cristo de Rescate fue salvado por undevoto anónimo que lo tapió en su hornacina


SANTAISABEL

ROMEA

SANBARTOLOMÉ

TRAPERÍA

GRAN VÍA


SANTACATALINA

Martes Santo 22 MARZOLA PROCESIÓN DE LA ESCLAVITUD

SANTODOMINGO

CATEDRAL

ALEJANDRO SÉIQUER

SAN JUANBAUTISTA

Pasos

¡No te lo pierdas!

Cruz Guía (30 portapasos)Vicente Segura Valls, 1955.

María Santísima de la Esperanza (32)José Sánchez Lozano, 1948.

Nuestro Padre Jesús del Rescate (32)Anónimo, S. XVII.

] La mirada asombrada delCristo del Rescate.

] El inicio del recorrido de laprocesión, a la salida deltemplo de San JuanBautista y en la misma plaza.

] La procesión no acaba conlos pasos. Cientos depersonas siguen, portandovelas, a las imágenes.

] Un detalle: los estantesvisten capas.

do Sánchez Lozano, y sufragadapor el Colegio Oficial de AgentesComerciales. Y, por último, en1956, se sumó La Cruz Guía, quecompleta el conjunto de pasos dela Cofradía del Rescate.

www.hermandaddelrescate.es

Santísima Virgen de la Esperanza.

NOELIA ARROYO HERNÁNDEZ v Consejera de Cultura y portavoz del Gobierno regional

Resuelta y con sentido divulga-tivo, en persona Noelia Arroyo

(Cartagena, 1980) es afable y cor-dial. Es verdad que da el toquejuvenil al Gobierno regional murcia-no, con vestimentas informalespero elegantes en las que es difí-cil reparar si antes que en el vesti-do te has fijado en su rostro. Abun-dante cabello dorado que, median-te raya imprecisa al lado derechodeja caer el mechón de su flequi-llo rubio hacia el lado izquierdode su cara que luce una miradaazul directa y ágil. Pronta. Apre-hendiendo cuanto ve. La joven

consejera, ya está dicho, es rubia,muy rubia, pero de las mujeresgüeras que hace años dejaron cla-ro que las rubias no son tontas. Yemana empatía, lo cual facilita sutarea comunicadora. Se la ve capazde sacar a la Región del bajo lugarque ocupa en el ranking de activi-dades culturales, con presupuestolimitado pero sin esnobismos nipostureo, por la vía franca; su airedesenfadado también aporta fuer-za comunicadora y credibilidad.

Forzó un hueco agradecido enla repleta agenda que tenía esosdías entre Madrid y Murcia paraatender a las preguntas de estarevista.

–¿Qué diferencias encuentraentre ser informadora y ser obje-to de información?

–Soy periodista y seré siempreperiodista. Como portavoz delGobierno regional mi labor esinformar de una forma transparen-te, clara y directa del trabajo quehacemos en beneficio del millón ymedio de murcianos, tanto el pro-pio Gobierno como todos y cadauno de los empleados públicos.

–¿Cómo se vive el periodis-mo desde ‘la otra orilla’?

–El periodismo se basa en darinformación veraz, cercana y útilpara el ciudadano. Este Gobiernoes muy transparente y riguroso,como la labor de cualquier mediode comunicación serio.

–Además de periodista, haejercido como presentadora:¿Puede presentarnos al Gobier-no del que forma parte?

–El Gobierno de Pedro AntonioSánchez es cercano, honesto, sen-sible, con empatía social y abiertoa todos los murcianos y sus nece-sidades. Aportamos soluciones y

nos dejamos la piel para impulsarnuevas iniciativas que generenempleo, bienestar social, las mejo-res infraestructuras, con igualdadpara todos y muy cerca de los másvulnerables y los que más apoyonecesitan.

–¿Qué significado tiene parausted la Semana Santa murciana?

–Murcia es mi tierra de adop-ción, porque soy cartagenera. Esmuy diferente de la de mi tierra,Cartagena, pero precisamenteporque es muy distinta me permi-te disfrutar más de las dos. Graciasa mi trabajo de Consejera hepodido conocer en más profundi-dad la labor de todas las cofradí-as a través de los encuentros quehe tenido con ellas. Tenemos lasuerte de contar con la declara-ción de Interés Turístico Interna-cional en la Semana Santa de Mur-cia, pero también de Cartagena yLorca.

–¿Cuánto de cultura, cuántode religiosidad, cuánto de fiesta?

–Lo mejor de la Semana Santaes que aúna las tres cosas, sin serexcluyentes. Cada uno, según suscreencias y sus experiencias perso-nales, lo vive de una manera o deotra, o incluso juntando las tres.Son diez días que dan juego paratodo. Al fin y al cabo empieza conla alegría del Domingo de Ramos,sigue con el luto de la crucifixión yacaba con el alborozo de la resu-rrección.

–Un secreto ¿prefiere las pro-cesiones de Murcia a las de Car-tagena?

–Las de Cartagena son mi infan-cia, y eso no se puede borrar. Lasprocesiones de Murcia son las dela infancia de mi hija. Así que lasdos son muy especiales para mí.

Franqueza, acción y comunicación«Lo mejor de la Semana Santa es que aúna cultura, religiosidad y fiesta»

Noelia Arroyo.

TITO CONESAPeriodista

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Semana Santa l Martes Santo l Marzo 2016 Semana Santa l Miércoles Santo l Marzo 2016

Destaca, en el desfile que orga-niza la Cofradía del Santísi-

mo Cristo de la Salud el hecho deque participan imágenes conmucha historia y antigüedad. Eltitular es la más antigua de cuan-tas recorren las calles en toda laSemana Santa Murciana. Sinembargo, la propia cofradía alcan-za poco más de medio siglo devida, ya que fue fundada el 15 demarzo del año 1957, y como suce-sora de la Asociación del SantísimoCristo de la Salud, que ya existía enel siglo XVI y que tenía su capilla en

el antiguo hospital de San Juande Dios.

Fue un grupo de estudiantesuniversitarios el que, bajo las direc-trices del capellán del Hospital Pro-vincial, se movilizó para organizaruna hermandad que los represen-tase. El Cristo de la Salud fue laimagen elegida como titular. Aquelaño de su fundación, estaba previs-to que desfilase el Viernes de Dolo-res, pero no pudo hacerlo porquellovía intensamente. Sí lo hizo alsiguiente día, Sábado de Pasión.

Como el deseo de la nuevacofradía era desfilar el Martes San-to, hubo enfrentamiento con la delCristo de Rescate, que se oponía.Por esto, hasta 1966, hubo dehacerlo el Viernes de Dolores,cuando aún no existía la Cofradíadel Amparo, que surgió en 1985.

A la imagen del Cristo de laSalud se unió en 1962 la de la San-tísima Virgen del Primer Dolor, deFrancisco Salzillo; y, en 1988, la deNuestro Padre Jesús de las Merce-des, de Nicolás Salzillo, y el SanJuan Evangelista, de Roque López.

Martes Santo.Santísimo Cristo de la Salud.

Imágenes cargadas de historia y bellezaLa Cofradía del Cristo de la Salud fue fundadapor un grupo de estudiantes universitarios

GLORIETAPALACIO

ESPISCOPAL

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Martes Santo 22 MARZOLA PROCESIÓN DE LA SALUD

SANTODOMINGO

CATEDRAL

SAN JUANDE DIOS

Pasos

¡No te lo pierdas!

Nuestro Padre Jesús de las Mercedes (32 anderos)Nicolás Salzillo y Gallo, 1713-1725.

San Juan Evangelista (32)Roque López López, 1791.

Santísima Virgen del Primer Dolor (32)Francisco Salzillo y Alcaraz, hacia 1740.

Santísimo Cristo de la Salud (50)Atribuido a Gutierre Gierero, S. XV-XVI.

] El encuentro entre los tronosde San Juan Evangelista, laVirgen del Primer Dolor y elCristo de la Salud, al finalizarla procesión, en medio de unsilencio absoluto y a la únicaluz de las velas que iluminanlos pasos.

] El momento en que entranlos tronos en el templo,mientras suena el HimnoNacional.

www.cofradiacristodelasalud.blogspot.com

Martes Santo. San Juan Evangelista.

Miércoles Santo: Santísimo Cristo de la Sangre.

FOTO

: JUANCH

I LÓPE

Z

adquisición de nuevos pasos, queserían encargados a un escultortan notable como SantiagoBaglietto. Otros episodios conde-nables se vivieron durante la gue-rra civil, cuando la iglesia del Car-men fue saqueada y destruidasimportantes piezas de su patrimo-nio artístico y religioso, que obli-gó a un posterior trabajo dereconstrucción y recuperación.

Lo trascendente es que la Archi-cofradía del Cristo de la Sangre, lade los ‘coloraos’, llena de emotividadno solo las horas de la procesión,

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Semana Santa l Miércoles Santo l Marzo 2016 Semana Santa l Miércoles Santo l Marzo 2016

No es de extrañar que fuesedeclarado de Interés Turístico

Internacional el desfile que el Miér-coles Santo protagoniza la Archico-fradía del Cristo de la Sangre. Enél se confabulan tradiciones, reli-giosidad, respuesta ciudadana yun recorrido lleno de profundossentimientos y sinceras emocio-nes. Se le conoce como el desfilede los ‘coloraos’, debido al colorde las túnicas que visten los cien-tos de miembros que participan.

La Cofradía fue fundada en

1411, por lo que es la más antiguade cuantas participan en toda laSemana Santa de la Región deMurcia. Su fundación se vincula ala presencia de San Vicente Ferreren la capital. Aunque inició suandadura en la parroquia de San-ta Eulalia, siglo y medio despuésde su fundación se estableció en elconvento de los frailes trinitarios, yposteriormente en el que los car-melitas descalzos habían levanta-do en el conocido como barrio desan Benito, actualmente denomina-

do del Carmen. Sería en 1689cuando comenzó a desfilar en latarde-noche del Miércoles Santo.

Los encontronazos entre car-melitas y los miembros laicos de lacofradía provocaron que se encar-gase al escultor Nicolás de Bussyla imagen del Cristo de la Sangre,que culminó en 1693. Lo peor fueel desastre que ocasionó una riada,en 1701, que destruyó el puenteque unía el barrio con el centrode la ciudad, y que motivaría elretorno de las imágenes a la igle-sia de Santa Eulalia y al cercanoconvento de San Antonio. Por esto,se inicio un largo pleito, que con-cluyó muchos años después, conunos nuevos estatutos que facilita-ban la independencia de funciona-miento de la cofradía. A lo largo delos años se fue ampliando el núme-ro de pasos, que iban enriquecien-do el patrimonio, con esculturasde Roque López, como La Doloro-sa y La Samaritana.

La Cofradía volvió a vivirmomentos difíciles durante la Gue-rra de la Independencia o conmotivo de la desamortización deMendizábal, que despojó a losreligiosos carmelitas de la pose-sión de su convento, circunstanciasque no fueron obstáculo para lasupervivencia de la cofradía y laMiércoles Santo. El Pretorio.

Cuando los ‘coloraos’ inundan la ciudadDesde mucho antesdel desfile, laArchicofradía delCristo de la Sangreprotagoniza un díade religiosidad y tradiciones

Pasos

San Vicente Ferrer (24 estantes)Ramón Cuenca Santo, 2011.

La Samaritana (26)Roque López López, 1799.

Jesús en Casa de Lázaro (38)José Hernández Navarro, 1985.

El Lavatorio (38)Juan González Moreno, 1952.

La Negación de San Pedro (26)Nicolás de Bussy y Mignan (San Pedro),1689, y Gregorio Molera Torá (Cristo), 1945.

El Pretorio (28)Nicolás de Bussy y Mignan (Cristo), 1696; José Sánchez Lozano (Pilatos y Berrugo),1945; y Ramón Cuenca Santo (Soldadoromano), 2011.

Las Hijas de Jerusalén (36)Juan González Moreno, 1956.

El Cristo de las Penas (36)José Hernández Navarro, 1986.

Santísimo Cristo de la Sangre (24)Nicolás de Bussy y Mignan, 1693.

San Juan (18)Juan Dorado Brisa, 1905.

La Dolorosa (24)Roque López López, 1787.

GLORIETAPALACIO

ESPISCOPAL

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Miércoles Santo 23 MARZOLA PROCESIÓN DE ‘LOS COLORAOS’

SANTODOMINGO

CATEDRAL

NTRA. SRA.DEL CARMEN

FRENERÍA

ALAMEDA COLÓN

¡No te lo pierdas!

] El traslado que se realiza por la mañanade la imagen de Nuestro Padre JesúsNazareno, desde el convento de lasAgustinas a la iglesia del Carmen.

] Si puede, contemple la preparación deimágenes y tronos en el citado templo,con el cubrimiento de los tronos conrosas, claveles, y gladiolos.

] Es preciso fijarse en la belleza trágica delCristo de la Sangre.

Miércoles Santo. Bocinas.

sino toda la jornada del MiércolesSanto, porque, desde bien pronto,calles y plazas de la ciudad empie-zan a vivir el anuncio de lo que seráel posterior desfile, inundadas de lostoques de bocinas y tambores quevolverán a sonar, para deleite, pesea su extraño zumbido, de las miles

de personas, que contemplan elpaso del Cristo que emana sangrede su costado.

Es una celebración preparadacon el máximo primor y que encie-rra unos toques con sabores típica-mente huertanos. Es un desfile col-mado de sinceridad. www.coloraos.com

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Semana Santa l Jueves Santo l Marzo 2016

La primera procesión, de lasdos que desfilan el Jueves

Santo en Murcia, está tambiénorganizada por la Archicofradíadel Cristo de la Sangre, que,como ya se ha indicado, salió enla noche del Miércoles Santo. Suprincipal protagonista es la ima-gen de Nuestra Señora de laSoledad, que procesiona acom-pañada de otros dos pasos, querepresentan la Conversión delBuen Ladrón y a Nuestro PadreJesús de la Humillación.

Desfile colmado de intimidad,el silencio y el recogimiento son lasprincipales características que guar-dan cuantos participan. Los cara-melos que los ‘coloraos’ ofrecían amanos llenas en la noche anterior

parecen haber desaparecido demodo definitivo.

Es muy emocionante la llegadade la Virgen de la Soledad al tem-plo de San Juan de Dios, donde laespera el túmulo del Santísimo

Jueves Santo. Nuestro Padre Jesús de la Humillación.

Jueves Santo. Penitentes.

Soledad, Conversióny HumillaciónEmociona el encuentro de la VirgenMadre con el Cristo Yacente, en el templode San Juan de Dios


SANTAISABEL

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Jueves Santo 24 MARZOLA PROCESIÓN DE LA SOLEDAD

CATEDRAL

NTRA. SRA.DEL CARMEN

FRENERÍA

ALAMEDA COLÓN

J. CARRILLO

Pasos

¡No te lo pierdas!

Nuestro Padre Jesús de la Humillación (26 estantes)Anónimo, S. XVII.

Cristo del Amor en laConversión del Buen Ladrón (34)José Hernández Navarro, 2011.

Nuestra Señora de la Soledad (24)Antonio Campillo Párraga, 1985.

] El encuentro de la Virgen de la Soledadcon el Cristo Yacente, muestra del dolor deMaría Santísima ante el cuerpo de su HijoCrucificado.

] El retorno a la iglesia del Carmen, a laaltura del Puente Viejo, una estampa llenade belleza.

] El Cristo de la Humillación es una imagende emocionante pena.

Cristo Yacente. El trono de la Vir-gen penetra en la iglesia en laque descubrirá el cuerpo de suHijo Crucificado. Antes de quese produzca este encuentro, cien-tos de personas ya permanecenen el interior del templo, aguar-dando pacientemente, unmomento tan colmado de senti-mentalismo. Los sonidos del can-to del ‘Stabat Mater’ coadyuvana que se intensifique el recogi-miento interior, solo quebradopor la luminosidad de las velasque rodean a las imágenes.

Después de este dolorosoencuentro se inicia el retorno deNuestra Señora de la Soledad a laiglesia del Carmen, cuando soncerca de las tres de la madrugada.Antes, en medio de un sobrecoge-dor silencio, las imágenes han des-filado por el entorno de la cercanacatedral.

www.coloraos.com www.cofradiadelrefugio.org

Semana Santa l Jueves Santo l Marzo 2016

También desfila, en la noche delJueves Santo, la Cofradía del

Santísimo Cristo del Refugio. Sunacimiento se debió a que, tras laguerra civil, varios feligreses de laparroquia de San Lorenzo –RamónSánchez-Parra García, Enrique Ayu-so Serrano y Jesús López Pujol,junto al párroco, Manuel Nadal–se comprometieron a fundar unacofradía.

Su titular fue una talla anónimadel siglo XVI, la única que apareceen esta procesión. Es, posiblemen-te, la que más fervor levanta y laque expande el recogimiento conmáxima intensidad entre cuantosse encuentran en cualquier puntodel recorrido.

La historia del Santísimo Cris-to del Refugio, en lo que al últimosiglo se conoce, derrocha emo-ciones. Con más o menos realidado leyenda, se cuenta que, increí-blemente, la imagen pudo salvar-se de la destrucción, en plenaguerra civil, pese a que estaba

expuesta a las miradas de cuantosocupaban el templo de San Loren-zo, convertido en improvisado

Jueves Santo. Santísimo Cristo del Refugio.

Cantos de pasión al Cristo del RefugioLos penitentes permanecen arrodillados,cuando la imagen vuelve al templo de San Lorenzo


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Jueves Santo 24 MARZOLA PROCESIÓN DEL SILENCIO

SANTODOMINGO

CATEDRAL

ALEJANDRO SÉIQUER

SAN LORENZO

OLIVER

Pasos

¡No te lo pierdas!

Santísimo Cristo del Refugio (32 portapasos)Anónimo, S. XVI.

] Durante el recorrido,diversos grupos corales ode auroros interpretancanciones alusivas almomento, que se vive en lanoche del Jueves Santo.

] El último tramo del trayecto,con los nazarenospenitentes arrodillados,mientras el trono seaproxima al templo.

] El detalle de los comerciosen mantener susescaparates a oscuras,para cooperar en laintimidad del desfile.

Penitentes del Santísimo Cristo del Refugio.

refugio. Forma parte de la leyen-da-realidad que ante la imagense postraron, solicitando protec-ción, cuantos se hallaban refugia-dos en el templo el día en que unatormenta hizo temblar los murosdel templo y todos creían que sevendrían abajo.

La procesión iniciaba su reco-rrido a las doce de la noche delJueves Santo, hasta que, en 1958,el horario se adelantó a las diez.La razón no era otra que el hechode que muchos de cuantos parti-cipaban en ella también lo hacíanen la del Viernes Santo por lamañana. Les resultaba práctica-mente imposible finalizar un des-file y llegar a tiempo de enrolarseen otro.

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Semana Santa l Marzo 2016

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«Hasta el nombre mismode «cruz» debe quedar

lejos no sólo del cuerpo de losciudadanos romanos, sino inclu-so de su pensamiento, ojos,oídos...» (Cicerón, Pro Rabirio,5,6). Tal era el horror que acom-pañaba el suplicio de la cruz, nosólo por la repulsión que suscita-ba la tortura en sí, sino por loque suponía de desprecio, deescarnio, de indignidad. No era,pues, compatible con la condi-ción de ciudadano. El reo erareducido a la condición de respara el sacrificio.

El problema de nuestra cultu-ra es que se ha despojado a lacruz de su gloria y, como en tiem-pos de Cicerón, la cruz solo es laantesala de la muerte, dintel dela nada, patíbulo en el que el

sufrimiento se muestra especial-mente absurdo. Nuestra culturahace suya la antigua pintada delPalatino romano que dibuja alCrucificado con la cabeza deasno, mientras un cristiano loadora. Minucio Félix completa elsarcasmo de los paganos: «Loscristianos... extraídos de la últimahez, de entre los imbéciles ymujerzuelas crédulas... tramanuna conjura» (Octavius, 8). Nosabía el acusador hasta dóndeiba a llegar la conjura: todavíamillones de cristianos estamosconjurados para restaurar elesplendor de la cruz: madres que

no abortan, familias que acogenla vida en condiciones límite,matrimonios que hacen de suexistencia una oblación de fide-lidad hasta el final, jóvenes quetodavía no han perdido la inocen-cia y se entregan con la genero-sidad de siempre, ancianos queavivan su fe en la práctica religio-sa y todavía se sienten útiles,enfermos que convierten el lechoen altar, religiosos en el claustroo en la misión... todo bajo el sig-no de la Cruz, porque amar nosale gratis: «de los que se hacenviolencia es el reino», dijo Jesús.

Sí, lejos de mí, «gloriarme si

no es en la Cruz de nuestro SeñorCristo, por la cual el mundo estácrucificado para mí y yo para elmundo». San Pablo aprendió lalección del Maestro: «quien bus-ca en este mundo la vida, se pier-de; quien la pierde por mí y porel Evangelio la guarda para lavida eterna».

Comprender el significado delacontecimiento del Gólgota soloes posible si, con los ojos de la fe,sacamos del anonimato de la his-toria la biografía y su desenlacedel Rabbí de Nazaret («escánda-lo para los judíos y necedad paralos griegos»), para encontrar enellos el designio amoroso de Dios.

Nuestra Semana Santa es unaexplosión de belleza, barro-

quismo y pasión, en cuyas cele-braciones se manifiestan lamanera de ser y de sentir delmurciano, su generosidad, sucarácter abierto y extrovertido, ysu profundo fervor religioso.

La admiración que despier-tan las obras de maestros comoSalzillo, Nicolás de Bussy, Anto-nio Dupar… que salen de losmuseos para recorrer en proce-sión calles y plazas es solo unaparte de todo lo que ofrecenuestra ciudad en estos días. Losmurcianos y los que nos visitandisfrutan de una atmósfera mági-ca, en una Murcia plena de vidaque combina momentos de bulli-cio, como el reparto entre losespectadores de caramelos, hue-vos duros y monas, con un reco-gimiento piadoso y sincero. Todolo que rodea a nuestra Semana

Santa confluye en dotarla de unasingularidad que se convierte enun reclamo de primer nivel den-tro de nuestra oferta turística,reconocida con su declaracióncomo de Interés Turístico Interna-cional.

Porque la cultura y la econo-mía no son dos realidades contra-puestas sino que, muy al contra-rio, en las sociedades avanzadas,donde los intangibles y las perso-nas adquieren cada vez mayor

relieve, son dos ámbitos con cre-cientes interrelaciones, que seenriquecen mutuamente.

En la Región de Murcia con-tamos con todas las potencialida-des: el valioso patrimonio y lavitalidad artística de la que goza-mos, unas privilegiadas condi-ciones de climatología y atracti-vos naturales. Todo ello, sumadoa nuestro reconocido espírituemprendedor, puede y debeconducirnos al diseño y la pro-

moción de nuevas ideas y pro-ductos culturales.

Indudablemente, se precisade una adecuada estrategia deapoyo a las iniciativas empresa-riales en este pujante sector, enla que debemos implicarnostodas las instituciones e instan-cias que apoyamos el empren-dimiento, desde la esfera públi-ca y privada. Se produce así laparadoja de que, en la socie-dad contemporánea, podemosconvertir aquello que recibimosde nuestro pasado, de nuestratradición y costumbres secula-res, en un factor estratégico paranuestro futuro.

Con los ojos de la feJOSÉ LUIS MENDOZA PÉREZ

José Luis Mendoza PérezPresidente de la Universidad Católica

San Antonio de Murcia.Pregonero de la Semana Santa de Murcia 2013

Pedro García Balibrea.Presidente de la Cámara de Comercio

de Murcia

PEDRO GARCÍA BALIBREA

Un pasado que nosimpulsa al futuro

Viernes Santo. Cofradía de Servitas de María Santísima de las Angustias.

E l Viernes Santo supone parala Semana Santa de Murcia la

autenticidad y el arraigo de losdesfiles religiosos; y no solo por-que sea este el día en que lospasos de Salzillo repartan belle-za, emoción y fervor; también,porque el día está inundado deimágenes sacras, que colman lasalida de otros tres desfiles. Ade-más, todavía quedan los ecos dela procesión del Cristo del Refu-gio, que, pocas horas antes deque los rayos de sol iluminen elrostro de la Dolorosa, ha reco-rrido, entre el mayor silencio, lascalles de la ciudad.

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Semana Santa l Viernes Santo l Marzo 2016

La genialidad de Salzillo sale a la calle Los detallestradicionalesenaltecen un desfilecon más de cuatrosiglos de historia

PasosLa Santa Cena (28 estantes)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1763.

La Oración en el Huerto (28)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1754.

El Prendimiento (26)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1763.

Los Azotes (24)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1777.

La Verónica (16)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1755.

La Caída (28)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1752.

Nuestro Padre Jesús Nazareno (22)Anónimo, anterior a 1600.

San Juan (18)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1756.

La Dolorosa (22)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1755.

¡No te lo pierdas!

] El inicio del desfile, especialmente, cuandola imagen de la Dolorosa aguarda a que losrayos de sol iluminen su dolorido rostro.

] La belleza de cualquiera de los pasos quedesfilan. Imposible hacer diferencias.

] El tipismo de túnicas, las ensenadas decaramelos de los portantes y el sacrificiode no pocos nazarenos, cargados con doso tres pesadas cruces.

] Las viandas que componen la mesa de la Santa Cena.


La fundación de la Real y MuyIlustre Cofradía de Nuestro PadreJesús Nazareno se remonta al 2de agosto de 1600, cuando eraobispo de la diócesis, Juan deZúñiga.

Fue fundada por los agustinosdel Convento de Santa María dela Arrixaca con participación dealgunos seglares. La imagen de sutitular fue traída de Roma en elsiglo XVIII, según testimonio delos frailes.

La Cofradía desfiló por prime-ra vez el 20 de abril de 1601, aun-que lógicamente con pasos distin-tos a los que actualmente lohacen y que, excepto el titular,se deben a la genialidad del granFrancisco Salzillo. En esos iniciosdel siglo XVII, había otras imáge-nes que fueron destruidas en1651, cuando la riada de SanCalixto –una de tantas que confrecuencia castigaban a Murcia ysu huerta– azotó con enormedureza a la ciudad y su entorno.Fue una de las peores que Mur-cia ha sufrido a lo largo de la his-toria. Sí se salvó la imagen delNuestro Padre Jesús y se consi-guieron otras, porque fueronvarios los gremios que se compro-metieron a recuperar el desfileprocesional de la cofradía.

En torno a 1700 se encargo aNicolás Salzillo el grupo denomina-do la Mesa de los Apóstoles.

Como solía suceder entonces,hubo un pleito entre seglares yagustinos hasta que la cofradíapudo funcionar independiente delos religiosos. Fue entonces cuan-do comenzaron los encargos aFrancisco Salzillo, hijo de Nicolás,de las preciosas esculturas queahora desfilan en la mañana delViernes Santo. El escultor se con-virtió en el gran artista religiosodel momento y también personaapreciada en la alta sociedad mur-ciana, que, en gran parte, se res-ponsabilizó de abonar los costosde cada uno de los pasos de laCofradía, que empezaría a sopor-tar momentos dificultosos durantela Guerra de la Independencia y,sobre todo, con la desamortiza-ción de Mendizábal, cuando perdió

gran parte de su patrimonio. Fuecasi a mediados del siglo XIX,cuando recuperó su fortaleza, conla restauración de imágenes y repa-ración de capillas.

Vivió un momento muy impor-tante cuando, en el año 1903, elrey Alfonso XII llegó a Murcia yvisitó la iglesia de Jesús. La cofra-día, que recibiría el titulo de Real,lo nombró mayordomo. El monar-ca, agradecido, le regaló un retra-to suyo.

A lo largo del siglo XX, se aco-metieron nuevas restauraciones yla fundación del Museo Salzillo,donde actualmente se exhiben lasfamosas imágenes del no menosfamoso escultor, que llenan de her-mosura las calles de Murcia, en lamañana del Viernes Santo.


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Viernes Santo 25 MARZOLA PROCESIÓN DE ‘LOS SALZILLOS’

SANTODOMINGO

CATEDRAL

NTRO.PADREJESÚS

EL PILAR

GARCÍA ALÍX

SAN NICOLÁS

www.cofradiadejesus.com

Viernes Santo. La Oración del Huerto.

Viernes Santo. La Dolorosa.

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José Martínez Tornel (Patiño,5 -IX-1845 /Murcia, 11-V-1916)

maestro de periodistas, abogado,Archivero Municipal, Cronista Ofi-cial de la Ciudad de Murcia, funda-dor y director del Diario de Murcia,fue uno de los más fieles cronistasde la procesión de Jesús, la delViernes Santo por la mañana, hoyconocida por la de los salzillos.

Del entusiasmo que le produ-cía la procesión de Jesús da ideael texto que incluye en ‘El Liberal’del Miércoles Santo 11 de abrilde 1906, dirigiéndose a los visitan-tes que vienen a las fiestas deMurcia en el ‘tren botijo’, que lle-ga los miércoles santos proceden-te de Madrid: «Porque aunque

nos sepamos a Murcia de memo-ria y la conozcamos en todos susdetalles y pormenores, las proce-siones de Semana Santa nos pare-cen nuevas cada año, y cada añomejores. ¿Qué vez se verán esosPasos de Jesús, que no se admi-re en ellos alguna nueva perfec-ción, algún detalle soberanamen-te artístico que no se haya vistoantes? Además, que como esasesculturas son textos vivos en losque se pueden aprender muchascosas, según esté nuestro espíri-tu, así brotan en él unos y otrosconceptos; y así se conmueve máso menos eficaz y dulcementenuestro corazón. Yo he dicho enotra ocasión, «que en Murciahemos aprendido a creer en lostextos de Salzillo, y que por eso lafe de esta ciudad es un sentimien-to nobilísimo, sublime y con todoel esplendor de la belleza sobre-natural hondamente sentida».

En ‘El Liberal’ del Domingo deResurrección, 15 de abril de 1906,en el comentario de Martínez Tor-nel sobre la procesión de Jesúsdedicará también una referenciamuy emotiva al conde de Roche,presidente hasta hacía muy pocode la cofradía, que, gravementeenfermo, presenció la procesión,la última de su vida, en un cochecerrado en la esquina de San Nico-lás con Santa Teresa. El conde falle-ció a los muy pocos días, el 20 deabril. Las palabras de Martínez Tor-nel sobre la procesión son, comosiempre, muy afectuosas: «La pro-cesión de Jesús, la clásica, pudo elViernes por la mañana ofrecer a laciudad de Murcia y a los forasteros,una vez más, la incomparable colec-ción de las esculturas de Salzillo.

Con este motivo, he de dedicar unrecuerdo de justicia al decano delos mayordomos de esa cofradía, alseñor conde de Roche que tanto hatrabajado por hacer de la iglesiade Jesús un relicario digno de esasjoyas del arte cristiano...»

Años después, en ‘El Liberal’, de23 de marzo de 1910, MiércolesSanto, anima a los viajeros madri-leños del ‘tren botijo’ al recomen-darles las procesiones de Murcia:«¡Y no digamos la de Jesús o deViernes Santo, que esa es la proce-sión grandiosa, como no hay otraen el mundo cristiano, porque enninguna parte hay unos pasoscomo los de Salzillo! Ninguna pro-cesión cristiana –¡digámoslo conorgullo!– ni la misma Roma puedepresentar una Cena, una Oracióndel Huerto, un Prendimiento, unSeñor en la Columna, una Caída,una Verónica, un Jesús Nazareno,un San Juan Evangelista y unaDolorosa, como estos y estas quenosotros tenemos, talladas pornuestro gran D. Francisco Salzillo yAlcaraz. Cada una de estas escultu-ras es un prodigio, una maravilla ytodas juntas, el poema de la piedady la Redención».

Cualidades literarias que seadvierten, del mismo modo, en unextenso romance que glosa la pro-cesión, y que inserta en la primerapágina de ‘El Liberal’, el 26 de mar-zo de 1910, Sábado de Gloria. OtroSábado de Gloria, el 15 de abrilde 1911, en su habitual columna de‘El Liberal’, tampoco faltó la cróni-ca de la procesión de 1911: «¡Her-mosa mañana la del Viernes Santode ayer! Cielo azul, sin una nubeci-lla, sol radiante y hermoso. Casitoda la huerta se vino a la ciudad,

llenando las calles por donde habíade pasar la grandiosa procesión.Pocas veces la he visto tan ordena-da y tan majestuosa y pocas vecesha tardado tanto en recorrer lacarrera. Felicito a los mayordomosque han salido rigiéndola y a losque no han salido, aunque les supli-co a todos que el año próximo nodeje de salir ninguno. Desde estepunto de vista, a la procesión deayer mañana no hubo nada quepedirle; bien que sería lo único porlo que podría dejar algo de desear.Porque sus pasos, los grandespasos de Salzillo, recorren siempreen triunfo las calles de esta ciudad,excitando la piedad en los corazo-nes sencillos, la piedad y el entu-siasmo artístico a los que crean ysaben de arte, y la admiración y elorgullo de los murcianos todos.

Ayer fue un día esplendoroso delarte, del cielo, del sol, del clima ydel ambiente de Murcia. Pero notuvo más que mañana el tiempode las rosas». Y, por fin, en 1912, elJueves Santo, 4 de abril, MartínezTornel ofrecería en la primera pági-na de ‘El Liberal’ un interesantetrabajo sobre «Los ángeles de laDolorosa»,

La Semana Santa de 1916, suúltima Semana Santa, acontecióentre los días 16 y 23 de abril yMartínez Tornel, en una de susúltimas columnas,�moría pocodespués, el 11 de mayo, del Lunesde Pascua, 24 de abril, relata su

encuentro con un ‘murcianoausente’, que, desde Filipinas,había venido a ver las procesio-nes, y, al comienzo de su artículo,señala: «Con la del Resucitado,terminó ayer la numerosa seriede nuestras procesiones de Sema-na Santa. Lo mismo las procesio-nes que las solemnidades religio-sas de estos días, se han celebra-do con mucha concurrencia y sinque ningún incidente lamentablevenga a empañar su brillo. Eltiempo hermoso y el ambienteprimaveral han dado mayor real-ce a la Semana Santa murcianatan llena de atractivos».

El periodista Martínez Tornel,gran defensor de los salzillosSe celebra ahora el centenario de quien calificó la procesión de «grandiosa, como no hay otra en el mundo cristiano»

FRANCISCO JAVIER DÍEZ DE REVENGACatedrático de Literatura Española de la Universidad de Murcia. Cronista Oficial de Murcia.Pregonero de la Semana Santade Murcia 1989.

Viernes Santo. La Caída.

«Ninguna procesióncristiana –¡digámoslo con

orgullo!– ni la misma Romapuede presentar

una Cena, una Oración del Huerto, un

Prendimiento, un Señor en la Columna, una Caída,

una Verónica, un JesúsNazareno, un San Juan

Evangelista y una Dolorosa»

«Los grandes Pasos deSalzillo recorren siempre

en triunfo las calles de esta ciudad, excitando...

la admiración y el orgullode los murcianos todos»,

escribía también elperiodista, abogado,archivero y cronista

de Murcia

Portada del diario ‘El Liberal’, de 4 de abril de 1912.

“¡En ninguna parte hay unos pasos como

los de Salzillo!”

«Cada una de estasesculturas es un prodigio,

una maravilla y todasjuntas, el poema de la

piedad y la Redención»

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Viernes Santo:La Santa Cena.

Foto: Juanchi López.

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No era político ni militar, niorquestaba la revuelta en una

colosal hacienda o en las barracasobreras que salpicaban la huerta.Pero el cerebro de aquel golpe deEstado era bien conocido en Mur-cia. Y hasta, en muchas ocasiones,había recorrido las calles rodeadode multitudes que lo vitoreaban.Porque, por muy sorprendente queparezca, tan popular fue siemprela talla de Nuestro Padre Jesús, elde la cofradía morá, que hasta enca-bezó una supuesta asonada en elcorazón de la ciudad. Sucedió en laprimavera de 1822, tras el levanta-miento del general Riego y la llega-da del Trienio Liberal (1820-1823).Por Murcia cundió el rumor de queel Nazareno, obra de Juan de Agui-lera datada antes de 1600, comomuestra de indignación divina porel gobierno de los liberales, habíacomenzado a sudar sangre.

La primera de las noticias fue

publicada en el bisemanal ‘CorreoMurciano’, de corte liberal, el 23de abril. Lamentaba el redactor lasamenazas que suponían para la ciu-dad una partida «de 150 o 200 fac-ciosos» que tenía aterrada la comar-ca con sus asaltos ante la aparentepasividad de la autoridad. Al hilo deesta denuncia, ‘el Correo’ señalabael supuesto milagro de la sangredel Nazareno y situó incluso el ori-gen del fenómeno: «Tres días hace»,esto es, el 20 de abril, ya pasada laSemana Santa. Según la publica-ción, «se extiende la voz que la ima-gen de Jesús Nazareno suda san-gre», lo que provoca que «el fana-tismo» convoque en la plaza de SanAgustín, sede de la cofradía, «a losilusos».

«Ilusos que insultan»El mismo periódico, tantas vecescrítico con la Iglesia Católica aun-que no con la religión cristiana,señala que el milagro es una tretapolítica para desestabilizar el régi-men. Esos «ilusos», en opinión delredactor, «que insultan, que danvivas sospechosos, que apedreana los que tratan de disuadirlos» yque parecían dispuestos a todopues solo les faltaba «una cabezavisible que los dirija para derra-marse por la ciudad».

Otra publicación, ‘El Chismo-

so’, abundó en detalles. Así,denunció que el Correo de Madridhabía sido interceptado y abiertoel mismo día en que «la numerosay turbulenta reunión que produjoel fanatismo y la superstición» atra-jo hasta la capilla de Jesús «a milla-res de ilusos». Gran hubo de ser laafluencia de murcianos cuando eldiario, tan combatiente ante estasprácticas, los cifraba en miles. Elrumor, como también aclaró ‘ElChismoso’, era que la sagrada ima-gen «sudaba copiosamente, yahumor puro, ya sangre». Apartede situar los hechos en la tardedel día 19, el periódico denuncióque la célebre capilla, ubicada enla iglesia privativa de la cofradía,hubiera acogido «frecuentes reu-niones anteriores», sin duda enca-minadas a planear los asombro-sos hechos.

La noticia del supuesto milagrono pasó desapercibida entre elpueblo, bien porque despabilabala rutina o por la profunda venera-ción que se le profesaba a la ima-gen, ni tampoco para aquellos queconsideraban la novedad una pro-vocación y una amenaza.

El Ayuntamiento Constitucio-nal de la ciudad envió de inme-diato –al día siguiente de extender-se el rumor– un oficio al Obispo deCartagena cuyo texto fue publica-do de forma íntegra por el Correo.El Consistorio exigía al preladoque desmintiera el supuesto pro-digio y «se digne rectificar la opi-nión pública con el celo y sabidu-ría que le adornan y que dan eljusto ascendiente en tal materia».

El obispo lo censuraLa respuesta del obispo no se hizode rogar. Aquella noche, en unacelebración en la parroquia de SanJuan, como escribiría más tarde,

«instruí a los oyentes, según misluces y fuerzas, en las funestas con-secuencias de su misma creduli-dad, excitada acaso por la codiciade algunos, por la irreligión deotros, o por las ideas y planes sub-versivos». Pero muchos tenían másfe en el Nazareno, que por algo lla-maban ‘El Abuelo’, que en el mis-mísimo obispo.

La recomendación episcopalprovocó variadas reacciones, entreellas la rebeldía de aquellos que ‘elCorreo’ describió como «mons-truos de iniquidad» y que desauto-rizaron al pastor por considerarloun liberal. Así era, aunque tuvieramás razón que un santo. Antoniode Posada Rubín de Celis habíasido nombrado miembro del Con-sejo de Estado en 1820 tras la revo-lución de Riego y Obispo de Car-tagena en 1822. Su decidido apo-yo a la causa liberal le obligó aexiliarse tras el regreso de Fernan-do VII, aunque más tarde apoyaríaa Isabel II y se convertiría en sena-dor por Murcia en 1837, alcanzan-do en unos años la dignidad deArzobispo de Toledo.

Entre quienes defendían elmilagro se encontraba, como anun-ció ‘el Correo’, el «ex trinitarioconocido por Pico de Oro», quienpredicaba en el convento de losTeresos. Allí defendió lo que elperiódico tildó al día siguientecomo el «diluvio de milagros quese atribuyen a los santos, tan sin crí-tica y tan supersticiosamente». Enesa ocasión, el Correo abundó endetalles sobre los hechos. Porqueademás de la sangre, el titular dela cofradía también parecía llorar «ybajándose de su camarín, se va aun rincón del templo a gemir ysuspirar, como se creyó, pocos díashace». Quizá el Nazareno, más quegimotear, se veía obligado a des-cender de su sagrada peana yesconderse para que nadie lo vie-ra muerto de la risa.

La frustrada asonada del Nazareno de JesúsEra tan popular que le atribuían milagros, que la prensa de la épocacalificaba como treta política para desestabilizar el régimen

ANTONIO BOTÍAS.Periodista. Cronista Oficial de Murcia.Pregonero de la Semana Santade Murcia 2012.

En el centro, la iglesia de san Andrés, a la derecha, la de Jesús.

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La Real, Muy Ilustre y VenerableCofradía de Servitas de María

Santísima de las Angustias, consede en la parroquia de San Barto-lomé, tiene como titular el que esconsiderado «como uno de losgrupos escultóricos más valiososde Francisco Salzillo», según afirmaFrancisco Barceló López, estudio-so de la Semana de Murcia y dequien se han tomado no pocosdatos para la confección de estostextos. Fue la devoción que Fran-cisco Ferrer y Céspedes sentíahacía la Virgen María lo que leimpulsó a encargar al famosoescultor la actual imagen.

Conocida popularmentecomo Cofradía de los Servitas,su origen se remonta a 1665,aunque las investigaciones deJosé F. Iniesta, realizadas haceunos años tratan de su existenciamedio siglo antes. Antiguamen-te, desfi laba el Domingo deRamos, por lo que era la proce-sión que iniciaba la Semana San-ta. Fue en 1874 cuando se incor-poró la imagen de un ángel, queSalzillo realizó para el taberná-culo del templo de San Juan deDios, y que, en este desfile se

transformaba en un ángel pasio-nario, que acompañaba a la Vir-

Viernes Santo. María Santísima de las Angustias.

Más emoción en la noche del Viernes SantoDesfila la imagen de María Santísima de las Angustias, una de las obras más valiosas de Salzillo


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Viernes Santo 25 MARZOLA PROCESIÓN DE ‘LOS SERVITAS’

SANTODOMINGO

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Pasos

¡No te lo pierdas!

Ángel Servita, San Gabriel (24 estantes)Vicente Hernández Couquet, 1858.

María Santísima de las Angustias (28)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1739.

] Grupos de niños marchanvestidos como el Ángel servita, quetambién desfila en laprocesión.

] El rostro de la Virgen y elcuerpo de Cristo reflejan ala perfección, el dolorosotrance, captadomagistralmente por el granFrancisco Salzillo.Impresionante.

Penitentes de la cofradía a su paso por la plaza Belluga.

gen en su dolor, junto al cadáverde Cristo. A finales del siglo XIXlas tres imágenes ocupaban unespléndido trono de estilo roco-có, realizado por Juan MartínezCantabella; en él se inspiró elque ahora, desde 1992, aparece.

Desde 1902, la Santísima Virgende las Angustias procesionó tam-bién junto a la Cofradía del SantoSepulcro. Ya lo había hecho elDomingo de Ramos. Sin embargo,desde 1931, desfila en la actual pro-cesión.

www.cofradiadeservitas.org


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48 www.santosepulcro.net

www.cofradiamisericordia.org


La Cofradía del Santo Sepulcroes otra de las más antiguas que

participan en la Semana Santa deMurcia. Estamos ante el ‘desfilesolemne’ por excelencia, porquede él forman parte las autorida-des civiles y religiosas, y represen-tantes de diversas entidades repre-sentativas de distintos sectoresprofesionales.

Fundada en 1570, en la Iglesiadel que era Hospital de San Juande Dios, en ella permaneció hastaque cambió su emplazamiento aldesaparecido convento de SanFrancisco.

Sería en 1820 cuando se inicia-ra su relación con los comerciantesde la ciudad, que se responsabili-zaron de asumir los gastos de man-

tenimiento de la cofradía y de laprocesión. Aquella relación siguevigente de algún modo, ya que esla Cámara de Comercio la queactúa como organismo responsa-ble del desfile.

A lo largo de su historia ha man-tenido distintos emplazamientos,en gran parte debido a los avataresque los conventos y los organismosreligiosos sufrieron con motivo de lasdesamortizaciones. Por esto, en1838, tuvo como sede el conventode Verónicas, donde permanecióhasta 1846, cuando se trasladó a laiglesia de San Bartolomé, su sedeactual, aunque también la tuvo en laiglesia de Santo Domingo.

En 1896, el escultor Juan Dora-do realizó un trono para el Cristo ori-ginal de Bussy, de «atrevida y espec-tacular composición», por lo queel conjunto del paso fue llamadopopularmente La Cama. Destruidodurante la guerra civil, en 1941 fuesustituido por otro del escultor JuanGonzález Moreno. Representa laintroducción del Cuerpo de Cristomuerto en el sepulcro.

El desfile más solemneEn la procesión de la Cofradía del Santo Sepulcro participan las autoridades, en señal de respeto a la muerte de Cristo


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Viernes Santo 25 MARZOLA PROCESIÓN DEL SANTO ENTIERRO

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Santísimo Cristo de Santa Clara laReal (de la Buena Muerte) (28 estantes)Francisco Salzillo y Alcaraz, 1770.

Santísima Virgen de la Amargura (26)Juan González Moreno, 1946.

Santo Sepulcro (30)Juan González Moreno, 1941.

San Juan Evangelista (24)Juan González Moreno, 1952.

Santísima Virgen de la Soledad (24)Anónimo, S. XVII.

] Impresionante el paso delSantísimo Cristo de SantaClara la Real, de Salzillo.

] El rostro de la Virgen de laSoledad, obra anónima delsiglo XVII, y su miradallorosa hacia el cielo.

] Los pasos de GonzálezMoreno, de mediados delsiglo XX, muestran lacategoría que ya habíaalcanzado el escultor.

Santísimo Cristo de Santa Clara la Real (de la Buena Muerte).

La Cofradía del Cristo de laMisericordia cierra los desfiles

procesionales de este Viernes San-to, que en Murcia es una constan-te presencia de túnicas e imágenespor sus calles. Tuvo su origen en1949, aunque antes había funcio-nado como hermandad indepen-diente, dentro de la Cofradía delSanto Sepulcro. Sus promotoresfueron algunos funcionarios de laantigua Diputación Provincial, res-ponsables del funcionamiento dela Casa de la Misericordia, y quevivían en el cercano Colegio deSan Esteban. El hallazgo de la talla

de un Cristo renacentista, deDomingo Beltrán –una de lasobras de mayor valor artístico dela Semana Santa murciana– fue elmotivo decisivo para su fundación.

Viernes Santo. Santísimo Cristo de la Misericordia.

Pasos

¡No te lo pierdas!

Jesús Nazareno (28 estantes)Roque López López, 1797.

Santísimo Cristo de la Misericordia (36)Domingo Beltrán, 1581.

Descendimiento (38)José Hernández Navarro, 2001.

Nuestra Señora Madre (28)de MisericordiaJosé Sánchez Lozano, 1927.

] El rendimiento del Cristo de Domingo Beltrán,aunque se encuentre rodeado de rosas rojas ygladiolos.

] Para los amantes de los misterios de la naturaleza,es espectacular la salida del desfile, cuando losrayos de sol acarician las imágenes.

] No hay que olvidar el retorno de la procesión altemplo, en medio de un silencio absoluto y con el emotivo encuentro entre los pasos delCrucificado y la Virgen.

Viernes Santo. Descendimiento.

Viernes Santo.Penitentes de la Cofradía del Santo Sepulcro.

Culminación de un Viernes Santo pletórico

Julián Tudela Martínez, adminis-trador de la Casa de la Misericor-dia, fue el primero en desempeñarel cargo de Hermano Mayor. Jun-to a él se encontraban Carlos Val-cárcel Mavor, segundo adminis-trador de la Casa de la Misericor-dia, quien actuó de secretario dela primera Junta de Gobierno dela Hermandad y futura cofradía.

La cofradía tomo parte en lasprocesiones por primera vez en1950. Al cumplirse el veinticincoaniversario de esta celebración, seprodujo su separación definitivade la Cofradía del Sepulcro. Des-de entonces comenzó sus desfilessaliendo desde San Esteban. En1989 se sumó la imagen de la Vir-gen de la Misericordia, original deSánchez Lozano; el Descendimien-to lo hizo en el 2001. En la Sema-na Santa de 2012 sacó un nuevotrono y hermandad, la de JesúsNazareno, con una valiosa imagende Roque López.

Espectacular imagen renacentista del Cristo de la Misericordia, de Domingo Beltrán


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Viernes Santo 25 MARZOLA PROCESIÓN DE LA MISERICORDIA

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SANANTOLÍN


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C incuenta y cinco mil ejempla-res con las procesiones de la

Semana Santa de Murcia,una a una. Diecisiete folle-tos, uno por desfile. Quin-ce, de cuatro páginas y tresmil ejemplares; y dos espe-

ciales, ocho páginas y cinco mil detirada, para ‘coloraos’ y salzillos.

En cada número, fotos,cofradía, cofrades, itinera-rio, pasos, imagineros yun ¡No te lo pierdas! condetalles especiales.

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Semana Santa l Sábado Santo l Marzo 2016

Que solamente desfile unpaso –el de María Santísima

del Rosario en sus Misterios Dolo-rosos– no quiere decir que se tra-

te de una procesión que no des-pierte el interés de la ciudadanía oque pueda parecer un modo derellenar un espacio vacío. No es

Sábado Santo. Nuestra Señora del Rosario en sus Misterios Dolorosos.

Un desfile lleno de pena y dolorEmociona la imagen de María Santísima del Rosario en sus Misterios Dolorosos


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Sábado Santo 26 MARZOLA PROCESIÓN DEL ROSARIO

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Nuestra Señora del Rosario ensus Misterios Dolorosos (26 estantes)Ramón Cuenca Santo, 2013.

] El inicio del desfilerepresenta en la Plaza deSanta Catalina, llena depúblico, un momento defervoroso apogeo y nopocas emociones.

] Hay que escuchar el sonidode las marchas fúnebres,que también invitan alrecogimiento.

] La pena que embarga a laMadre de Cristo se refleja enun rostro lleno de tristeza yen el gesto de unas manosarrebatadas.

así, porque es la segunda salidaque organiza la Cofradía del San-tísimo Cristo de la Caridad, queya desfila el Sábado de Pasión.

Como el nombre de la ima-gen evidencia, es la respuesta aaquel deseo de muchos de loscofrades de que se cumpliese elreglamento interno, en el que seincluía un recuerdo hacia los mis-terios dolorosos del Santo Rosa-rio. Esto demuestra que, en elseno de esta cofradía, laboranpersonas que creen devotamen-te en el sentido religioso de lavida. Basta con recorrer las noti-cias que los directivos difunden,a través de los más modernosmedios de comunicación, paraconocer actividades que se reali-zan, y que pueden ser peregri-naciones, reuniones o campañascon fines caritativos.

Con sede en la iglesia de San-ta Catalina, esta procesión saliópor vez primera en 2013. Comose ha indicado, solo desfila el cita-do paso de María Santísima delRosario en sus Misterios Dolorosos.Antes, en la mañana del SábadoSanto, una comitiva visita a laCofradía del Santísimo CristoYacente, la segunda que procesio-na este día. Es un modo de com-partir «unos instantes de oración yreflexión», y un modo de estable-cer lazos de unión, que fue bauti-zado como ‘Concordia del SábadoSanto’.

www.cofradiadelacaridad.com


No pertenece a cofradía alguna,pero disfruta «viendo las pro-

cesiones de Semana Santa. Siempreme han gustado». Lo afirma JesúsPacheco, concejal de Empleo, Turis-mo y Cultura, quien, tras adentrar-se en el mundo de la política muni-cipal, intenta «transformar mi visión,porque pienso que Murcia siempre

ha estado infraexplotadaturísticamente. Antesse hablaba de la pri-mera procesión deEspaña, que salíaen Cartagena;pero ahora es enMurcia, con laCofradía el Santísi-mo Cristo del

Amparo. Y, si

nos ponemos a especificar distintascaracterísticas, tenemos cofradíasde las más antiguas, procesionesde las más largas y con enorme vis-tosidad y barroquismo, y pasos quetienen un significado muy espe-cial». Para Pacheco, «esto encierrauna historia en la que se implicannuestras tradiciones y las raíces delas que venimos. Mi idea es quehay que darle mayor vistosidad ytransformarlo en verdadero disfru-te para los murcianos y para cuan-tos lleguen a nuestra tierra». Añadeque le ha molestado «ver y oír porla televisión o leer en periódicos,informaciones sobre procesionesde otras ciudades, como Zamora, yme preguntaba dónde estaban lasnuestras en esos informativos.¿Dónde hay un Miércoles Santouna procesión como la de los ‘colo-raos’. No la hay. Hay que dar lavuelta a esto, de alguna forma».

Y, en ese afán transformador,mostraba sus deseos de «meterinnovación, aunque renovar algoque tiene siglos de existencia escomplicado. Además, al tratarse dela Semana Santa, es una celebraciónque está muy planificada sobrecómo y cuándo tiene que ocurrir, ysiguiendo un rito». La ilusión hasuperado las dificultades y, antesde que se hicieran públicos demanera oficial, exponía a esta revis-ta la realidad de creación de «actosnuevos, que den mayor esplendora los que ya están». Anunciaba «elllamamiento a todos los murcianos,en la Plaza de Belluga, para desfi-lar ante el Monumento al Nazarenoy hasta el Puente de los Peligros,para asistir al singular concierto debocina, tambores, burlas, pendo-

nes…»; también hacía público elconcierto de saetas, con Curro Piña-na y la Orquesta de las Musas, deGuadalupe, en la Plaza de la Paja.Jesús Pacheco también mostró suinterés porque, a través de la Pro-cesión del Ángel, «involucremos alos jóvenes, para que vuelvan a sen-tir la pasión de ser cofrade o decontemplar los desfiles». Para con-seguir esto, también nos comunica-ba «algo muy típico y relacionadocon nuestra Semana Santa». Se refe-ría al día que protagonizarán lamona con huevo y esos carameloscon envoltorios que llevan escritobreves poemas huertanos. La Plazade Romea será el centro de celebra-ción. «¿Qué más tradicional queesto?», se preguntaba Pacheco.

Pero las más inesperadas inno-vaciones están relacionadas conlos adelantados sistemas de comu-nicación. «Se van a retransmitir, através de Internet, todos los des-files, con los debidos comentariosde especialistas en el tema. Así,cualquiera, murciano o no, aun-que no pueda ver en Murcia nues-tras procesiones, sí podrá hacerlodesde cualquier parte del mundo.Y digo desde cualquier parte delmundo».

La segunda novedad correrá através de los teléfonos móviles.«Cada trono llevará incorporadoun chip, que permitirá anunciarcuándo está llegando al lugar don-de se encuentre el portador de unmóvil. Esto irá acompañado de untexto informativo sobre el trono yde fotos de los cuatro lados decada trono».

No hay duda: afán innovadorno falta.

JESÚS PACHECO MÉNDEZ v Concejal de Empleo, Turismo y Cultura

«Nuestras procesiones podrán verse,por primera vez, desde todo el mundo»El afán innovador obliga a «crear actos nuevos, que den mayor esplendor a los que ya están».

P. S.

Jesús Pacheco Méndez,concejal de Empleo, Turismo y Cultura delAyuntamiento de Murcia.

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Semana Santa l Sábado Santo l Marzo 2016

Dos imágenes preciosas –la delCristo Yacente y la de Nues-

tra Señora de la Luz en su Soledad–son más que suficientes para con-vertir un desfile de Semana Santaen foco de entusiasmo religioso yatracción. Y es que, junto al dolorque transfieren, no puede olvidar-se que una salió de las manos deDiego de Ayala y la otra del tallerde un gran escultor como fuePedro de Mena, allá por el sigloXVII. Es una procesión que expre-sa un enorme recogimiento y

sobriedad, sin más sonidos y músi-cas que el que desprende la cam-panilla del nazareno que encabe-za el desfile.

La Cofradía del Santísimo Cris-to Yacente y Nuestra Señora de laLuz en su Soledad nació el 5 demayo de 1982, cuando todavíaningún trono recorría las calles dela ciudad el Sábado Santo. Ungrupo de jóvenes mostró sudeseo de llenar este hueco, perola cofradía no fue aprobada has-ta cuatro años después; exacta-mente, el 6 de octubre de 1986.Y fue el 18 de abril del siguienteaño cuando, por vez primera, des-de la capilla del Rosario, anexa ala iglesia de Santo Domingo, apa-reció la «solemne y severa proce-sión del Santísimo Cristo Yacente».Actualmente lo hace desde eltemplo de San Juan de Dios, don-de tiene su sede.

El Sábado Santo de 1991 secreó la Hermandad de NuestraSeñora de la Luz, representadapor una antigua imagen de la Vir-gen que se veneraba en este últi-mo templo, y en el que tambiéntenía su origen la imagen del Cris-to Yacente.

Sábado Santo. Santísimo Cristo Yacente.

Sobriedad y recogimiento, al máximoSolo una campanilla anuncia el desfile de la Cofradía del Santísimo Cristo Yacente

GLORIETAPALACIO

ESPISCOPAL

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Sábado Santo 26 MARZOLA PROCESIÓN DEL CRISTO YACENTE


SAN JUANDE DIOS

CATEDRAL

Pasos ¡No te lo pierdas!

Santísimo Cristo Yacente (26 estantes)Diego de Ayala, 1574.

Nuestra Señora de la Luz en su Soledad (24)Anónimo, S. XVII.

] El cuerpo del Cristo Yacentedebiera ser contempladodesde cualquier lugar.Desde la cabeza a los pieses una imagen patética,pero hermosísima.

] El paso de la procesión porel Arco de Santo Domingo.

] ¿Por qué visten túnicasblancas, para portar elcuerpo de Cristo? Es el colorde luto entre los hebreos.

Penintentes del Sábado Santo.

webs.ono.com/yacente

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Semana Santa l Domingo de Resurrección l Marzo 2016Semana Santa l Domingo de Resurrección l Marzo 2016

E sta es otra historia. Sin que sepierda la sana compostura y

el respeto religioso, el desfile delDomingo de Resurrección entrapor otros vericuetos muy distin-tos a los que se han venidoobservando desde el Viernes de

Dolores. Ahora, el gozo por laResurrección de Cristo inunda loscorazones y desborda los modosde expresarse en la procesión.Bandas de música, con sus inter-pretaciones de pasodobles ymarchas triunfales, siguen a los

ángeles, apóstoles, vírgenes y alpropio Jesús, en las distintassituaciones en que se muestra.El sol de la mañana colabora tam-bién a que este desfile se con-vierta en un festejo lleno de lumi-nosa alegría.

Domingo de Resurrección. La Aparición de Jesús a Santo Tomás.

El día gozoso por la ResurrecciónEl desfile de la Cofradía de Nuestro Señor Jesucristo Resucitado llena de alegría las calles de la ciudad


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Domingo de Resurrección 27 MARZOLA PROCESIÓN DEL RESUCITADO

SANTODOMINGO

SANTAEULALIA

SIMÓN GARCÍASAN ANTONIO

CATEDRAL

Pasos

¡No te lo pierdas!

San Miguel Arcángel (24 estantes)Francisco Liza Alarcón, 1994.

La Cruz Triunfante (38)Clemente Cantos Sánchez, 1917.

Nuestro Señor JesucristoResucitado (36)José Planes Peñalver (Cristo y Ángel), 1949. Antonio GarcíaMengual (Romano), 1972.

Las Tres Marías y el Ángel del Señor (38)Antonio Labaña Serrano, 1993.

Aparición de Jesús a María Magdalena (28)Antonio Labaña Serrano, 1982.

Los discípulos de Emaús (28)Antonio Labaña Serrano, 1983.

La aparición de Jesús a Santo Tomás (36)Francisco Sánchez Araciel, 1912 y JoséHernández Navarro (Cristo), 1994.

Aparición de Jesús en el Lago Tiberiades (40)Antonio Labaña Serrano, 1987-1989.

La Ascensión del Señor (40)José Hernández Navarro, 2000.

San Juan Evangelista (28)Venancio Marco Roig, 1912.

La Virgen Gloriosa (36)José Sánchez Lozano, 1950.

] El asombro de los apóstolesdel paso de La Aparición,frente a la serenidad de unJesús Resucitado.

] La teatral imagen de unBelzebú, encadenado yconducido por los niños. Es la figura del desfile.

] El gozoso estruendo de lasbandas de música, que siguena los pasos en el desfile.

La Semana Santa en Murcia nose centra en siete días, más

bien en diez, de intensas y bellasprocesiones en las que se une lafe en oración. En ellas se vivenlos recuerdos que reflejan la Pasióndel Señor. Finalizan cuando en lamadrugada del Domingo de Glo-ria se escucha el repique de cam-panas que anuncia que Cristo havencido a la muerte. ¡Aleluya!

Con los primeros rayos delsol amanece una mañana dejúbilo y alegría. Con una juven-tud, en su mayoría mujeres, quevisten túnicas blancas de rasojunto a un amplio abanico de

capas multicolor y gorros hebre-os que diferencia cada una de lasonce hermandades que formanla procesión del Resucitado. Lospasos, llevados a hombros porhombres curtidos, estallan de flo-res para dar un sutil toque de colo-rido junto a las bellas imágenes.Las calles de Murcia no solo sellenan de música y alegría, tam-bién de familias que llevan a sushijos a la ‘procesión del demo-nio’, como la suelen llamar otros.Este feo personaje encadenado,vestido de negro, con amplias alasy lengua roja, es quien abre elcortejo mientras que los niños al

verlo lloran a rabiar. Sin embar-go, las sonrisas se desbordancuando reciben el obsequio delos típicos caramelos que los naza-renos entregan.

Como guinda que llena loscorazones de los murcianos, enun profundo sentir cofrade, estála bella estampa formada por los

tronos del Resucitado, San Juany la Virgen Gloriosa, mientras seescuchan unas sentidas palabrasde cierre sobre nuestra Interna-cional Semana Santa.

Pero no olvidemos que CristoResucitado es quien marca elcamino del cielo, pero no soloen esta festividad religiosa de laPascua de Resurrección, sinocada vez que rezamos el Credo ydecimos... «al tercer día resucitóde entre los muertos, subió a loscielos y está sentado a la derechade Dios, Padre Todopoderoso»...

Cristo ha vencido a la muerte ¡Aleluya!JOSÉ MARIA FALGAS MARTÍNEZ

José María Falgas MartínezMayordomo del Resucitado

Domingo de Resurrección. La Cruz Triunfante.

La Real y Muy Ilustre Archico-fradía de Nuestro Señor JesucristoResucitado, popularmente conoci-da como los ‘blancos’, surgió en

1910 en la iglesia de La Merced,aunque en 1931, con la llegada dela República, dejó de salir a la calle.En 1945, antiguos cofrades deci-dieron recuperarla, pero ahorateniendo como sede la iglesia desanta Eulalia, puesto que el anti-guo convento de la Merced sehabía convertido en sede de la Uni-versidad de Murcia. Al año siguien-te, la procesión del Resucitado vol-

vió a salir a la calle, con solo cincopasos. Actualmente saca once, conlo que se trata de una de las cofra-días con mayor número de tronos.

Reparto de caramelos, obse-quios, flores; el desfile marcial de lossoldados romanos o los sonidos decohetes y tracas, al inicio de la comi-tiva, son estampas muy emotivas;pero nadie olvida la presencia deldemonio, cautivo y humillado.

www.resucito.org

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Importantes efemérides para laSemana Santa de Murcia con-memoramos este año. Dos gran-des cofradías enraizadas en sen-dos barrios tradicionales y casti-zos de la vieja ciudad celebran elaniversario de sus respectivasfundaciones. Por un lado, en SanAntolín, la Real, Ilustre y MuyNoble Cofradía del SantísimoCristo del Perdón celebra losciento veinte años de su refunda-ción. Los herederos del viejo gre-mio de torcedores y tejedoresde la seda, que rendían cultopúblico al Señor en el Prendi-miento en el siglo XVII, resurgie-ron de sus cenizas en 1896 gra-cias a la labor de un sacerdoteinolvidable, Pedro González Ada-lid, que junto a un grupo de fer-vorosos cristianos, en su mayoríadel castizo barrio, rescataron delolvido aquella corporación naza-rena, perdida, y decidieron dar

culto público al que se conocíacomo ‘El Señor del Malecón’ yasí hasta el día de hoy en el que,la de San Antolín, se ha conver-tido por derecho propio en unade las grandes cofradías de laSemana Santa murciana.

La otra es la Hermandad deEsclavos de Nuestro Padre Jesúsdel Rescate y María Santísima dela Esperanza con sede en la parro-quial de San Juan Bautista. Fue enmayo de 1946 cuando un grupode devotos de la imagen de Jesúsdel Rescate, que habían estado

“cautivos” del gobierno de laRepública en el interior de aqueltemplo convertido en cárcel delpueblo y habiéndose salvado, laimagen del Cristo del Rescate,de la furia iconoclasta y destruc-tiva que sufrió el patrimonio de laiglesia, decidieron darle cultopúblico y crearon la Hermandadde Esclavos. No sería hasta el añosiguiente,1 de abril de 1947,cuando Murcia viera en sus callesel solemne y severo cortejo pro-cesional de la Esclavitud que salió,en aquel histórico día, únicamen-

te con la imagen del Rescate.Años más tardes se incorporaríaal cortejo del Martes Santo la ima-gen de la Virgen de la Esperanza.

Por tanto celebramos en estaSemana Santa de 2016 dos gran-des acontecimientos para la his-toria de la ciudad y para dos desus cofradías enraizadas en sen-dos barrios, castizos y tradiciona-les, que tanto lunes como martessanto se transforman por unashoras, gracias a estas entidadesnazarenas, y vuelven a recobraraquella imagen de la antigua ciu-dad que el progreso y la moder-nidad se han encargado de borrarpara siempre.

Arte, tradición, religiosidad yfiesta se entremezclan estos

días en las calles de Murcia.Abandonamos la rutina de cadadía para el encuentro con losotros al paso de las imágenes, lasmiradas inocentes de nuestrosniños y niñas, la seriedad de losnazarenos y la mezcla de coloresy olores. Esta Semana de Pasiónforma parte de nuestra idiosincra-sia. No solo de la ciudad, dondela historia de nuestras hermanda-des y cofradías es patente encada rincón, en cada plaza, encada iglesia. También en nuestraspedanías se vive de manera dis-tinta la fiesta, una conmemora-ción pasional, de muerte y devuelta a la vida.

Desde niño siempre me haprovocado la Semana Santa un

sentimiento agridulce. La oscuri-dad y la sobriedad de los nazare-nos –que, en mi pueblo natal,Yecla, les llamamos ‘capuchinos’–,se mezclaba con la figura deldemonio el Domingo de Resu-rrección, con la explosión de lavida derrotando a la muerte.Recuerdos que, al paso de losaños, aún hoy rememoro cuandome asomo a estas jornadas tansingulares. Aunque las haya vivi-do fuera de Murcia, no puedo pormenos que sentirlas como partede nuestra cultura. Esto es, de

nuestras tradiciones. Tradiciones,además, que merecen el máximode los respetos, porque tocan elcorazón de la gente, el sentimien-to más profundo. Y no digamosde aquellos que la ligan a sus con-vicciones más íntimas.

Cofradías y hermandades sonlas que tienen en su mano lagarantía de salvaguardar estaidentidad de genuina celebra-ción. Mi máximo respeto por sulabor, especialmente en aquelloque tiene que ver con su dimen-sión más social y caritativa, que

deviene del amor por los últimos.Esa fue y sigue siendo su razón deser, tanto en las más centenariascomo las que surgen en cada rin-cón de nuestro municipio, esemunicipio amable que defiendo ypara el que trabajamos muchosdesde las instituciones.

Esa pasión, muerte y vueltaa la vida es el preludio de nue-vas jornadas de f iesta, deencuentro y de gozo que, enMurcia, en sus barrios y pedaní-as, encuentra su razón de serligada a la primavera. Y eseencuentro es al que invito aquienes vivimos aquí y a quie-nes acogemos en nuestrascalles y plazas en estas jornadas.

Importantes efeméridesALBERTO CASTILLO BAÑOS

Alberto Castillo BañosPeriodista

Pregonero de la Semana Santa de Murcia 1995Nazareno del Año 2004

El máximo de los respetosJOSÉ IGNACIO GRAS CASTAÑO

José Ignacio Gras CastañoPortavoz del Grupo Municipal Socialista.

Ayuntamiento de Murcia

Lunes Santo. El Ascendimiento.

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La relación entre arte y teatro esuna vieja cuestión historiográfi-

ca desde la ya lejana similitudadvertida por Emile Mâle entre lafragmentación escénica del teatromedieval y la estructura composi-tiva de un retablo. Tras las llamadasmansions invocadas por Mâle, lostableaux vivants de Kernodle o lacertera visión de Francastel, nohan cesado de aparecer estudiosque consideraron la naturaleza tea-tral de ciertas obras bajo la gené-rica intuición de que en su compo-sición se escondía una voluntadescénica capaz de reproducir losmovimientos, gestos y expresio-nes de los actores o la proximidadcompositiva de la estructura arqui-tectónica de un escenario a losfondos de piedra o madera quemonumentalizaban los espacios ypresidían el ritual.

En otro contexto, la relaciónentre Auto Sacramental, paso ale-górico y de misterio se presentó alos ojos de los historiadores comoexpresiones dotadas de un ele-mento común surgido de su mismacondición escénica, dada la altacapacidad de persuasión del tea-tro y la sugestión provocada por eldramatismo de sus argumentostanto más verosímiles cuanto másadecuada era la exactitud de su

puesta en escena. La capacidadde conmover provocada por aquelteatro real con actores reales y untexto dramatizado prestó grandesrecursos a la escultura procesionaly a la posibilidad de estudiar yanalizar los gestos, la composición,los sentimientos y la tensión argu-mental, favorecidos y acrecenta-dos por el realismo de la escultu-ra. Por otra parte, el énfasis en loemotivo largamente favorecido porla iglesia, el valor visual de la pala-bra y la fascinación del rito, fueronincorporándose a una culturacolectiva, directa y sencilla, plasma-da en los pasos de misterio, en lasfiguras sagradas y sus milagrosasacciones y en representaciones ale-góricas, producto todas de un len-guaje sabidamente dirigido yorientado por la Iglesia.

Imagen y espacio teatralizado Si las relaciones entre las artes visua-les y el teatro tienen mutua corres-pondencia, otro tanto cabría decirde ciertos lugares para los que lasesculturas procesionales fueron pen-sadas. La identidad entre un esce-nario y la distribución de las imáge-nes en su interior, la adecuación deldiseño de un edificio a la especifi-ca iconografía de su principal advo-cación, fueron dos realidades desa-

rrolladas paralela y escalonadamen-te como respuesta a un programacoherente en un espacio unificadopara la representación. Cuando estaidentidad se produjo, la correspon-dencia entre imagen y espacio tea-tralizado fue total, originando lo quese ha llamado «escenario múltiplehorizontal», sugerido por la sensa-ción de encontrarnos ante un teatroen redondo, como fue habitual en laEdad Media.

Este fenómeno fue muy biencomprendido por los responsablesde la cofradía de Jesús de Murcia.En 1679 los miembros de esa insti-tución declaraban estar «haciendodesde sus cimientos una capilla quecostará más de 50.000 ducados conlimosnas de los cofrades». En efec-to, la construcción de la iglesia deJesús, sede de la cofradía y fuentede numerosos problemas, naciócondicionada por quedar su desti-no asociado a la condición pasiona-ria del recinto como custodio delas esculturas de aquel desfile. Yen su misma definición tipológica -una planta octogonal, por lo tanto,centralizada - la simbología del dise-ño tuvo en cuenta la principal advo-cación con la que fue ideado hastaconvertirlo en un espacio teatraliza-do. No queda duda de que talesfueron las intenciones originariasde sus constructores ni de que lacofradía actuara fuera de los usosconocidos por toda Europa desdela Edad Media. La introducción delteatro dentro de la propia iglesia esun fenómeno aceptado sin reservaspara definir la exclusividad del espa-cio teatral medieval. Recuerda Feli-pe Pereda que Lucas Fernándezeditó el Auto de la Pasión en 1514y que su representación tuvo lugaren el interior de la iglesia salmanti-na «bien en la nave central, en unlateral o junto al púlpito».

Los grandes arcos de Jesús Ciertamente, la celebración con-tinuada de Misterios en el interiorde las iglesias y la consecuenteescenografía diseñada para su

representación, sitúan a ciertosejemplos entre los precedentesmás cercanos a la iglesia murcia-na de Jesús. Cuando este tem-plo pasionario fue concluido en1696, los regidores de esta insti-tución iniciaron una etapa intensapara la renovación escultórica desu cortejo, cuya responsabilidadquedó en el siglo siguiente bajola dirección de Francisco Salzillo.En los grandes arcos abiertos encada uno de los lados de aqueloctógono se situaron los pasosque representaban todos los ins-tantes de la pasión previos a lamuerte de Jesús, como corres-pondía al sentido de un cortejomatinal. Junto al gran núcleo cen-tral, cuya cúpula fue recubiertapor las fingidas arquitecturas delitaliano Pablo Sístori, cada capilladaba cabida a un Misterio. Sieteespacios fueron ocupados congrupos o esculturas aisladas (Pren-dimiento, Nazareno, Ultima Cena,Dolorosa, Oración en el Huerto,Flagelación y Caída) como cua-dros vivientes de cada uno de losepisodios acaecidos hasta el cami-no del Calvario.

Aunque la ubicación de cadauno de ellos no permita su inte-gración en un programa icono-gráfico pensado para ser leídocomo una secuencia cronológicacontinua a partir de un puntodeterminado, no puede dudarsede su indiscutible condición escé-nica de efectos similares a los pro-ducidos por las representacionesde la conocida Pasión de Bolzano.

Desde luego, aquellas representa-ciones desarrolladas durante sie-te días en capillas debidamentepreparadas para la ocasión conta-ban con estructuras provisionalestodas convergentes hacia un pun-to central marcado por el Templode Salomón. Esta disposición cen-trípeta y la singularidad de esco-ger capillas diferentes para repre-sentar Misterios que culminabanen la Ascensión, evoca, ya concarácter estable, la solución adop-tada por la iglesia de Jesús, cuyascapillas, centro de atención decada uno de los episodios de laPasión referidos, venerados duran-te los tiempos penitenciales comolugar de culto de cada herman-dad, marcaban la centralidad dela iglesia y el absoluto dominiode su espacio central para el quese ideó un baldaquino que cobi-jara la imagen del titular. Esta dis-posición revela una intención cla-ramente teatral, pues permite dis-poner de siete escenarios simultá-neos continuos, de nítidas condi-ciones visuales al tiempo que elespectador en la actualidad reco-rre por el pasillo anular de sudeambulatorio cada uno de esosámbitos en los que encuentra lapuesta en escena que le facilitaese escenario en redondo y hori-zontal.

Pero la escenificación no queda-ba reducida al ámbito interno, silen-cioso y recogido de la iglesia. Lasalida del cortejo procesional era unacontecimiento teatral en constan-te movimiento por las calles de laciudad por las que emulaba las tra-dicionales representaciones delDesenclavamiento, Descendimien-to, colocación en el Sepulcro,encuentro en la Vía Dolorosa y otrosMisterios habituales. El éxito deestas ceremonias repetidas portoda la geografía española, teníanen el antiguo reino de Murcia talaceptación que no sólo se cele-braron en retiradas ermitas, cuyaorografía recordaba las áridas tie-rras por las que caminó Cristo, sino

que se introdujo en los cortejosprocesionales para hacer más per-suasivo el retórico lenguaje de lasimágenes barrocas.

La imagen procesional barroca El paso tal y como lo concebimosen España es una demostraciónde los componentes teatrales de laimagen procesional barroca. Suforma de composición - piramidalu horizontal - ya recordaba al pro-fesor Martín González la solución alos problemas de visibilidad yarmonía propios de la esculturadesde el Helenismo. La miradahacia lo alto y la composición enredondo fueron algunas de lasnovedades introducidas por la ima-gen en movimiento cuya razón deser se basaba en la multiplicidadde puntos de vista, cambiantes ydistintos, con la que era contem-plada. En cierta medida, estas cir-cunstancias exigidas por el empla-zamiento móvil de las superficiesque servían de base, a menudoevocadoras de la naturaleza o delpaisaje, se integraban en la nove-dades proclamadas por la nueva

escenografía teatral, en la que pre-dominaban las vistas en ángulo,la arquitectura inscrita, la perspec-tiva sobre diagonal única y la pro-yección en infinito, rompiendo elcarácter estático y cerrado de laescena tradicional.

Sólo cabría recordar que entrela imaginería y el teatro distaba, sinembargo, una gran diferencia. Losdecorados teatrales permanecíaninmóviles en el espacio escénico yúnicamente cambiaban al variarla escena. En la escultura procesio-nal, el escenario urbano es cam-biante, formado por la propia ciu-dad, más real a medida que lanaturaleza que la adorna se incor-pora a las escenas de los pasoscomo decorados espontáneos. Eraun recuerdo más del origen teatralde los pasos procesionales y de loscarros con misterios del Corpus. Alfin y al cabo aquél no era más queuna plataforma móvil llevada ahombros de porteadores, que atrechos descansaban, y sobre cuyasuperficie se representaban esce-nas de la pasión o cuadros alegó-ricos.

Imaginería y teatro

CRISTÓBAL BELDA NAVARRO. Catedrático de Historia del Arte. Universidad de Murcia.

Plano de la iglesia de Jesús.

Interior de la iglesia de Jesús.

«En la esculturaprocesional, el escenario

urbano es cambiante,formado por la propia

ciudad, más real a medidaque la naturaleza que la

adorna se incorpora a lasescenas de los pasos comodecorados espontáneos»

«La construcción de laiglesia de Jesús… nació

condicionada por quedarsu destino asociado a lacondición pasionaria del

recinto como custodio delas esculturas de aquel

desfile»

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T iene la Semana Santa murcia-na alguna asignatura pendien-

te. Y puede ser esta tribuna unbuen lugar para hacer una apor-tación desinteresada y con el úni-co objetivo de colaborar y conse-guir una Semana Santa de Murciacon mayor esplendor, accesibili-dad para el espectador (o «Naza-reno de Silla», según denominóCarlos Valcárcel).

Y, finalmente, una Semana San-ta más atractiva para el visitante oturista, que de todo debe haber.

Recorrido oficialTienen las más grandes de lassemanas santas españolas, en sumayoría, lo que se llama carreraoficial o recorrido común de todaslas procesiones. En Murcia seríabien fácil conseguirlo con un pocode buena voluntad por parte delas cofradías y hermandades agru-padas en el Cabildo.

Inicio o fin de ese recorridopodría estar en la Plaza Belluga,esquina a la calle Arenal (lateraldel Ayuntamiento). Todas las pro-cesiones pueden y, de hecho,pasan por este punto.

La carrera oficial pasaría fren-te a Palacio y rodeando la Cate-dral, por la calle Apóstoles, con-tinuaría por Isidoro de la Cierva

y Alejandro Seiquer (popular-mente Correos), hasta SantoDomingo, donde terminaría elrecorrido frente al Colegio Cier-va Peñafiel.

Todas las procesiones, excep-to tres, podrían hacer el recorridocompleto, con alguna pequeñavariación alguna de ellas, comola de Jesús, que dejaría el tradicio-nal paso por Trapería. Y las tresprocesiones que harían el recorri-do en dos partes, lo completaríanigualmente (Martes y Jueves San-to); únicamente el Resucitado ten-dría que realizar su retorno porIsidoro de la Cierva y San Antonio,en vez de hacerlo por Villacis ySimón García.

El diseño y construcción depalcos y tribunas que podríanpermanecer desde Viernes deDolores hasta Domingo de Resu-rrección, daría un aforo de espec-tadores y posibles abonados, quetendrían su lugar fijo para ver lasprocesiones, evitando largasesperas, reservas dudosas e inco-modidades innecesarias.

Y su aspecto ‘romántico’: Larecaudación del alquiler de palcosy asientos sería una importanteinyección económica para elAyuntamiento o el Cabildo encaso de recibir la concesión muni-

cipal para la explotación de estainfraestructura.

Calle CorreosLa denominada popularmentecomo calle de Correos, se conver-tiría así en el ‘procesiódromo’ deMurcia.

Dejando un solo carril para cir-culación de vehículos en horas queno haya desfiles, y dejando pasocómodo por las aceras, que nointerrumpa la circulación y el tran-sito necesario para los comerciosdel recorrido, hay espacio suficien-te para la colocación de palcos otribunas, que darían a esta calle,junto al arbolado existente (naran-jos generalmente en flor durantela Semana Santa), la decoraciónideal para el lucimiento de las pro-cesiones. Está claro que las gran-des avenidas como la Gran Vía,son demasiado amplias y conde-nan a cualquier procesión a versedesangelada. Aprovecho la opor-tunidad para sugerir al Cabildo,que procure evitar los anchuronesen los recorridos, como los quese producen en la entrada a laGlorieta por la Gran Vía o en otrasplazas como Romea. Dando unasnormas a los concesionarios de lassillas, ganaríamos estéticamentepara el desfile y los nazarenosalumbrantes o penitentes, ten-drían más facilidad para guardar elorden y la homogeneidad.

Termino esta colaboración,pidiendo perdón por la inmodes-tia al permitirme opinar. Y mepongo a disposición de quien cre-yera oportuno escuchar mis expli-caciones al respecto, o reprendermi iniciativa. Prometo que solome movió el ani-mus cooperandi.

Una carrera oficial para MurciaMIGUEL MASSOTTI

Sería interesante tenerun mismo itinerariopara todas lasprocesiones, desdeBelluga hasta SantoDomingo

Miguel MassottiPeriodista.

Pregonero de la Semana Santa de Murcia 1997

Viernes Santo. La procesión de ‘los Salzillos’ a su paso por la plaza Belluga.

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Hablar de la ya acreditada coci-na murciana es hablar de Rai-

mundo González Frutos, ‘Raimun-do el del Rincón’ como siemprese le conocerá, quien a sus 91años, mantiene clara la mente yviva la llama de la gastronomía. Elinventor de la cocina murciana yano está ágil de piernas –se ayudacon un bastón– pero no ha perdi-do su risa pícara ni su espíritu cáli-do. Con un íntimo y legítimo orgu-llo su memoria reescribe las hojasde una trayectoria vital digna delmás merecido de los elogios. Lle-gó a la cima partiendo desde elsubsuelo. Constancia e inteligen-cia. Fuerza y mucho amor por lasperolas. Quién lo habría de decircuando, con tan solo 3 años, sus

débiles energías (a esa edad aúnno andaba) hicieron temer lo peora sus mayores.

«Casi estaba desahuciado, memantenían a base de Ceregumil yestoy vivo gracias al MarMenor» –recuerda. «Un médicodijo que me llevasen allí, a sentar-me en la orillica y que me diera elagua del mar en el culico. Y esohicieron. Poco a poco empezarona sentarse las cosas que comía enel estómago y… ¡aquí estoy! [Ríe]

–Se entiende su cariño al MarMenor…

–Yo quería hacer una cocinaemblemática de las tres gastrono-mías murcianas: la montaraz, lahuertana y la del mar. Hablé muchocon mis colegas del Mar Menor e

intenté convencerlesde que dejaran dehacer el fondo delcaldero con morralla yrodajas de mújol queno saben a nada,pero…

–Pero…–Mi teoría es

hacer un fondo conpescado de más cali-dad. Intentaba quetodos lo hicieran así,pero eso requieremás dinero y más tra-bajo y no estuvieronpor la labor... No sé…les daba miedo tenerque cobrar el platoalgo más caro.

–Por cierto ¿essuya la frase «el sabery el arroz no ocupanlugar»?

–Sí. Porque si estábien hecho… te

comes tres platos. No hay mila-gros, la cocina buena hay quehacerla con buenos productos.

–Frescos…–Y congelados también. El pro-

blema no está en el congelado,sino en lo que se congela.

Dice estar educado en la coci-na de la guerra (con 11 años y unabicicleta ya se las ingeniaba enplena conflagración española paraconseguir alimentos y llevarlos a LaHuertanica, donde cocinaba sumadre) y de la posguerra, es deciren la cocina de la imaginación paracombatir la escasez de materia pri-ma. Buscando siempre los sitiospara aprender, su inquietud le lle-vó a Francia donde absorbió lanouvelle cuisine de la que en cier-ta forma fue precursor. Luego reco-rrió toda Europa.

Hijo predilecto de Murcia, Rai-mundo da nombre a una plaza deesta ciudad, su restaurante figura-ba entre los dos de hotel mejoresde España, la Academia Españolade Gastronomía lo situó entre los10 primeros, ha figurado en la GuíaMichelín, Premio Nacional, entreotras muchas distinciones y... sinolvidar la cocina tradicional, queenriqueció con las recetas que bus-có en todos los pueblos y pedaní-as de Murcia.

–¿Qué platos preparaba enSemana Santa?

–La carta habitual y, además,los que se llamaban platos devigilia.

[De entre las más de milrecetas que llevan su firma,Raimundo facilitó a esta revis-ta las ‘de vigilia’ que figuran enla página siguiente. Gracias yque Dios le guarde, maestro.]

RAIMUNDO GONZÁLEZ FRUTOS v Cocinero RECETAS DE RAIMUNDO PARA LOS DÍAS DE CUARESMA Y PASIÓN

Sensibilidad entre perolas«El fondo del caldero hay que hacerlo con pescado de calidad, no con morralla y rodajas de mújol, que no saben a nada»

TITO CONESA

Enriqueció la cocinatradicional con lasrecetas que buscó

en todos los pueblos de Murcia

Raimundo González, en uno de los salones del Casino de Murcia.

En olla al fuego con 4 litros deagua fría ponemos los garban-zos. Cuando rompa a hervir sebaja el fuego y dejamos cocerlentamente.

A los 60/70 minutos agrega-mos judías, patatas, chirivía, cala-baza, peras, hierbabuena, pimien-ta y sal.

En mortero ponemos ajos, aza-frán y pan, se machaca bien yreservamos.

En sartén con el aceite pone-mos la cebolla y cuando éstaempiece a tomar color agrega-mos el tomate.

Diez minutos después incor-

poramos el pimentón y la picadadel mortero, le damos unas vuel-tas y vaciamos en la olla. Conti-nuamos cociendo a fuego lentohasta que los garbanzos esténtiernos.

Si los garbanzos son de buenacalidad, en menos de dos horas elguiso estará terminado y tras diezminutos de reposo se puede servir.

n Es oportuno tener un cazo conagua en el fuego, por si viése-mos que queda algo seco,agregarle agua en lluvia.

n No debe quedar excesivamen-te caldoso.

Olla gitana con perasIngredientes para 8 personas:

Ingredientes para 8 personas:

m ½ kilo de garbanzos lechosos de Castilla puestos en remojo la noche antes.

m ½ kilo de judías verdes, cortadasa 4 centímetros.

m ½ kilo de patatas, cortadas engruesos cascos.

m ½ kilo de calabaza totanera en 8 trozos.

m ½ kilo de chirivías, peladas ycortadas en cascos.

m 8 peras ercoline o blanquillas,peladas sin quitar el rabo.

m 4 tomates maduros, pelados, sinsemillas y picados a cuchillo.

m 2 cebollas medianas fileteadasfinas.

m 4 dientes de ajos.m 1 cucharada colmada de

pimentón murciano dulce.m 1 docena de hierbas

de azafrán.m 1 rodaja de pan frito.m 1 cucharada de hierbabuena

seca y estrujada con las palmasde las manos.

m 100 gramos de buen aceite de oliva, pimienta negra moliday sal.

Elaboración:

Poner los garbanzos a cocer en 4litros de agua. (Los garbanzosnecesitan unos 90 minutos decocción, aproximadamente,dependiendo de la calidad).

Mientras tanto, limpiar las espi-nas del bacalao y los lomos y hacer-los trozos de 3-4 centímetros.

Desmigar los recortes y ventris-ca en bol con molla de pan fres-co, ajo y perejil picados, 2 huevos,pimienta, unas gotas de limón ysal (dependiendo del bacalaodesalado). Con esta farsa, hacerlas albóndigas a tamaño de nuez,pasarlas dos veces por pan ralla-do y huevo batido, freírlas y reser-varlas en escurridera.

Freír los lomos enharinados yreservar junto con las albóndigas.

Freír patatas, bien doradas, yunirlas a lo demás.

Poner la cebolla en sartén conpoco aceite y, cuando empiece atomar color, agregar los toma-tes pelados, sin semillas y pica-dos a cuchillo. Rehogar durante10 minutos sin dejar de removercon cuchara de madera e incor-porar pimentón, azafrán, alca-chofas, habas, pimienta y sal.Darle unas vueltas durante 5minutos y vaciar en la olla. A los10 minutos, echar lo que tene-mos en la escurridera y dejarcocer a fuego lento hasta quelos garbanzos estén en su punto.

Con los cuatro litros de aguacitados será suficiente para lacocción, para que el guiso noesté excesivamente caldoso. Noobstante, tener a mano un caci-to con agua por si fuese necesa-rio añadir.

Guiso de pelotas de bacalaoIngredientes para 8 personas:

m 1 kilo de bacalao (lomo yventrisca, desalado 24 horas)

m ½ kilo de buenos garbanzos(remojados 12 horas)

m ½ kilo de alcachofas limpias ycortadas a cascos.

m ½ kilo de granos de habas muytiernas (recién recolectadas)

m ½ kilo de tomates maduros.

m ½ kilo de cebollas fileteadas.m 1 kilo de patatas cortadas en

gruesos dados.m 8 dientes de ajos.m 1 cucharada de pimentón.m 1 limón.m 4 huevos. m Pan del campo, pimienta, azafrán,

sal (según el bacalao) y perejil.

Elaboración:

Elaboración:Guiso de trigo

m 400 gramos de buenosgarbanzos lechosos.

m 300 gramos de trigo pelado.m 300 gramos de judías verdes,

limpias y cortadas en tres trozoscada una.

m 300 gramos de calabazatotanera, cortada en gruesosdados.

m 500 gramos de patatas, cortadasa cascos.

m 500 gramos de boniatos,cortados igual que las patatas(opcional).

m 2 cebollas medianas, fileteadasfinas + 4 dientes de ajosfileteados.

m 2 tomates maduros rallados +hierbabuena + pimienta reciénmolida y sal.

m 1 decilitro de aceite de oliva + un chorrito de infusiónde azafrán.

Ponemos una olla al fuego con 4litros de agua y garbanzos. Cuan-do rompe a hervir se desespuma ybaja el fuego para que cueza len-tamente.

A los 45 minutos avivamos elfuego y se echa el trigo.

Diez minutos después echa-mos patatas, boniatos, judías,calabaza, pimienta, sal, azafrán yhierbabuena.

En sartén ponemos aceite,cebolla y ajos. Y cuando empiezaa tomar color añadimos los toma-

tes, dejamos sofreír 10 minutos yvaciamos en la olla.

En 40/45 minutos más estaráterminado. Se comprueba el pun-to de sal y tras diez minutos dereposo ya podemos servir.

Nota. La infusión de azafrán sehace poniendo el cazo al fue-go, un vaso de Jerez seco y30 o 40 pelos de azafrán.Cuando empieza a hervir seaparta y reserva en un botellínen frigorífico.

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Eran otros tiempos, muy distin-tos a los que ahora vivimos,

por supuesto, y en los que tambiénhubo momentos en los que la iden-tificación con el presente actual yaquel pasado pudieron coincidir

en no pocas circunstan-cias. Pero no se trata decomparar, sino de con-templar el fervor popularpor la Semana Santa,que ha permanecidoentre los murcianos.Aquí están los ejemplosde unas fotografías lle-nas de polvo temporal,en las que las calles per-manecían a tope cuan-do transitaban los pasosy los cofrades.

Además, con estasfotos con sabor a ranciose recuerda no solo que

la guerra civil había terminado,después de tres años de fratricidioinfame; también aparecen rinconesde esa Murcia que se fue y quenunca volverá. Aparecen edificios

nobles de los que nunca más sesupo y comercios, ahora desapare-cidos, que eran como luego lo fue-ron Galerías Preciados y ahora losigue siendo El Corte Inglés. Erancita casi de obligado cumplimien-to, aunque no tan abrumadora-mente avasalladores.

En estas fotos, también apare-cen imágenes eliminadas con elcorrer de los tiempos, unas vecesdestruidas por los acontecimien-tos, y otras porque las propiascofradías siempre se han conside-rado con derecho a renovar supatrimonio. Los pasos de Salzillo se

nos muestran con todo su esplen-dor, en otra Murcia más recoleta ymenos transformada. Y está el tes-timonio de que los caramelosdesempeñaban un papel, si noesencial, sí buscadamente com-plementario en los desfiles.

Volver a otra época, aunquesea a través de las imágenessacras, suele ser motivo para nopocas evocaciones; pero aquí loque nos interesa es rememoraraquellos otros desfiles procesio-nales, que en Murcia han tenidouna profunda tradición y ha levan-tado muy alto entusiasmo.

Los desfilesde otros tiemposFotos antiguas que recuerdan la devociónpor la Semana Santa, en una ciudad más recoleta y menos transformada

La Cena, todavía en el barrio de San Andrés.


PEDRO SOLER

San Juan inicia el recorrido por Trapería.La primera procesión, tras la guerra civil, por la calle de San Nicolás.

Las senás de caramelos, complementoimprescindible.

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