Bermudez - Rasgos (1)

download Bermudez - Rasgos (1)

of 46

Transcript of Bermudez - Rasgos (1)

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    1/46

    \*"^'to

    nsrnucum+''Fslqgtro§lcA

    'DÉ

    LAP8RSÓNmrPA¿D

    I:

    TEORIAE

    DE

    CATIELI

    Y

    EYSENCK

    Pílar

    Saniuán

    t

    I

    :

    ti

    ¿

    +..1

    t--l.

    \

    )

    C

    f'¡

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    2/46

    ul'

    ,t,'

    l

    '

    t

    n'

    f'{-

    "l

    [L-

    1.

    INTRODUCCIÓN

    Desde

    los

    comienzos

    de

    Ia

    psicologla-de

    Ia

    personalidad'

    como

    disci-

    pli";;;il;.icologfa

    ;i""tffiá,

    t"'o

    á"

    los

    objetivos

    predominantes

    ha

    Iiao

    au""¡üir

    la

    estructt¡ra

    de

    la

    personalidad

    y

    los

    elementos

    o

    rasgos

    fundiiméntale§

    que

    la conformirn

    Los

    rasgos

    son

    descriptores

    que utilizamo:

    P*

    caracterizar

    la

    perso'

    "rlidtd

    i"-I;

    indiria"o.'

    Á1,

    por ejemplo-'

    hablamos

    de

    una

    determinada

    ñ;;1;á*"riui-o.

    "o*á

    r""po*"ble,

    sociable,

    ansiosa,

    u

    hostil.

    Allport,

    uno

    de

    los fundadores

    del

    área

    de

    la psicologfa

    de

    la

    perso-

    nalidad,

    ya

    proPuso

    que los

    ra§go§

    eran

    los

    elementos

    fundamentales

    de

    i"

    p"^Jridi¿"á,

    "rrrrqr"

    no

    indlcó

    el

    número

    concreto

    de

    rasgos

    que

    la

    forrnaban.

    Desde

    los

    orlgenes

    de

    la disciplina,

    d

    concepto

    de

    ras-go

    ha

    pasado

    por

    etapas

    ;

    h

    que-su

    estudio

    era

    &encial,

    y

    por otras

    en las

    que

    ha

    estado

    o ,rr"r,os

    dcnostado,

    Sin

    embargo,

    en

    la

    actualidad-y

    desde

    princi-

    pi*

    á"1"áá¿a

    de

    los

    90,

    la

    teola

    de los

    rasgos

    está

    volüendo

    a

    resur-

    gir con

    gran fucrza.

    A

    pcsar

    de

    haber

    pasado

    muchos

    años,

    los

    diferentes

    autores

    no se

    han

    liresto

    d.

    ""ruráo

    en lo

    que

    respc-ctá

    al

    número

    de rasgos

    funda-

    *"rrülo

    que

    conforrnan

    la

    estructura

    la

    personalidad,

    asl Cattell

    pro-

    pone gue

    son

    1ó,

    Eysenck considera que son

    3

    y otros creen

    que Ia per-

    ion¡iaaa

    puede ser

    descrita

    con

    5 rasgos,

    ar¡nque

    también

    hay

    propuestas

    de 7.

    Las

    distintas

    teorfas ofrecen,

    por

    taDto,

    una

    descripción

    de los

    ele-

    mentos

    o rasgos

    que

    configuran

    Ia

    penonalidad.

    Además,

    podemos

    decir

    que,

    las

    teorfas más

    influyentes dent¡o

    de esta área,

    han

    considerado

    la

    técnica

    del análisis

    factorial

    como

    una

    herramienta

    útil

    para

    poder

    llegar

    a

    describir

    esos rasgos

    fundamentales.

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    3/46

    : ¡

    i

    rs¡cotocf¡

    DE LA

    pERSoNAIJDAD:

    TBoRfA

    '

    En este capftulo

    vamos

    a

    detenernos

    en

    dos

    de

    141.ti»Uas,dC:loe

    ras'.

    gos

    más importantes,

    üomo

    son

    la de

    Cattcll

    y

    la de E,

    V¡ur¡cL,

    micqtres:

    que en el capftulo

    que

    sigue

    nos

    centrartmoe

    en la

    que.cónr{ld6¡¡

    qué

    Ioül

    ,Lgo, funda*"nti*

    ron

    cinco,

    por

    lo

    que

    se

    lu

    conoce'toiro

    üodiio'ü"

    los Clnco

    Grandes

    (Big

    Fit¡e).

    2.

    DEFINICIÓN

    DE

    NASGO

    Antes

    de

    comenzar

    a

    describir

    las

    diferentes

    teorfas

    dc

    Ios

    raegos

    más

    imoortantes

    conviene

    definir,

    aunque

    sea

    someramentc,

    qué

    es

    Io

    que

    ."t'."J"-o,

    cuando

    hablamos

    de

    rasgos

    pslcológicos.,Rasgo

    e8 u¡r

    con-

    ""fto

    O""tfnco

    que

    resume

    tas

    conductas

    que.la^s

    perSdiiás

    reallian

    en

    dist¡ntas

    situacio;e§

    y

    ocasiones'

    Asf,

    por

    eJernplo,

    obsofvátlios

    que.8

    una

    f"*or.

    le

    grrsta

    estár

    en

    compañla

    en

    mayor'medipa

    que.s.olo'T"-]",St"-

    ia

    charlar

    án

    l"

    g"nte

    y propicia

    realizar

    actiüdades

    soclales

    e

    inf¿rimos

    que

    es

    una

    p€rsona

    r""iáU1".

    La

    Sociabilidad

    es

    uno-d-e

    los

    rasgos

    psico-

    ügi.",

    que utilizamos

    para

    describir

    la

    personalidad

    de

    la

    gente

    que

    nos

    rodea.

    Los

    rasgos

    son

    conceptos

    o

    constructos

    que permiten

    describir

    las

    diferencias"indiüduales.

    ñe

    esta

    manera

    decimos

    que

    José

    es más

    socia-

    ble

    que Juan,

    o

    que Marfa

    es

    menos

    responsable

    que

    Elena'

    Seg:r1n

    Eysenck

    (Eysenck y

    Eysenck,

    1985),

    los

    rasgos

    son

    disposicio-

    ,,",

    qr-" p"rát"r,

    desjribir

    a

    las

    personas

    y

    predecir

    su

    comportamiento,

    ;;oi"ó"

    si

    nosotros

    hemos

    obse¡vado

    que

    una

    persona

    es

    sociable

    pode-

    mrs

    pá""ir

    que acudirá

    a

    la

    próxima

    ñesta, se

    integrará

    perfectamen-

    te

    y

    hablará

    y

    se

    relacionará

    con

    la

    gente'

    Hay

    que

    tener

    en

    cuenta,

    que el rasgo,

    como

    cualquier otro

    concep-

    to

    cieniffico,

    es

    una abstracción

    y por

    lo tanto,

    no

    es

    obeemable,

    es

    una

    propiedad

    que

    se

    infiere de

    observar

    clertos

    hechos. Nosotros

    no obser'

    vamos la

    Sociabilidad,

    lo

    que nosotros podemos observar

    es

    que

    la

    per-

    sona

    habla mucho, se

    rodea

    de

    gente

    y

    asiste a

    muchas

    reuniones

    socia-

    les. Con

    los conceptos

    empleados

    en otras ciencias, ocurr€ exactamente

    lo mismo, asf,

    por

    ejemplo,

    nosotros

    no

    podemos

    observar la dureza

    de

    las cosas,

    sino

    sólo

    que

    algunas

    se rompen

    y

    rallan

    con

    más

    facilidad

    que

    otras.

    Tanto

    la

    dureza como

    la Sociábilidad

    son

    conceptos

    rltiles

    para

    los

    cientfficos

    puesto que permiten

    predecir,

    como

    ya

    hemos seña-

    lado,

    el

    comportamiento

    futuro

    (ya

    sea el

    de un mineral

    o el de una

    per-

    sona).

    ,

    U

    rasgo

    se

    entiende cóntó una

    dlsposiclón

    de coniportamiento

    expre-

    :ihda

    cn

    pqlro¡es

    có.nslstentes

    de

    funclonamlento

    cn u-n rango

    amplio

    de

    i

    $tuactoná.

    EI rasso constltuye

    """

    _dry:l1l:j_.11,11"-:.]:1-:j:'

    áiJr"

    colocan

    las*pqrsonas,

    L

    Io

    qrru

    es

    lo

    mismo,

    se

    entiende que exis-

    ien

    diferencias

    inüvtduales

    en

    el

    nlvel

    con

    gue

    sc

    presenta'

    Denko

    de

    la

    psicologfa

    de

    los ra§gos

    se

    han

    planteado

    distintasrolé-

    miÁ

    relactopáro

    *iidifurentts

    problemas,

    pcro-¡quf

    yamos.

    a.desta-

    "*qr"

    sea rnuy

    somerarlente,

    lohmente

    dos:

    el

    problema

    de la

    con-

    ,¡.i"""i"

    de

    la

    conáucta

    (que

    será

    tratado

    con

    más detenlmiento

    en

    el

    caprtulo

    18

    de estas

    unidadis)

    y

    el

    del carácter

    c¡usal

    de

    los rasgos.

    2.1.

    Consistencla

    de

    la

    conducta

    La

    consistencia

    se

    puede

    entender

    como

    el

    mantenimiento

    de

    la con-

    ducta en

    dlferentes

    siiuaciones.

    A

    priori,

    puesto

    que

    los

    rasgos

    son

    dis-

    po.sidones

    gue

    el

    indtviduotiene,

    cabfa

    esperar

    bastente

    consistencia

    en

    í"cond,rctt,

    asl

    por

    ejemplo,

    si

    decimos

    qu"

    una

    Ircr§ona

    es

    habladora,

    ,gI{"

    op.*fl"

    qú"

    habta.;

    bestante

    en todas

    las

    situaciones,

    con Ia fami-

    üa,

    los

    amlgos,

    en

    el

    trabajo,

    en

    el

    cine,

    etc. Bs obüo

    que

    la situación

    tie-

    ne

    un

    impacto

    en cl

    comportamiento

    del lndlviduo,

    y

    seguramente,

    una

    persona

    habladora

    se

    estará

    callada

    mientras

    está

    en el cine

    y

    ádemás,

    posiblemente

    hable

    mucho

    más

    cuando esté

    con amigos

    que

    cuando se

    encuentre

    con

    persones

    a

    las

    gue

    no conoce.

    En la

    psicologla

    de

    la

    personalidad

    de la

    actualidad

    se

    reconoce el

    impacto

    de

    la sltuaclón

    en

    el

    comportamicnto

    y

    después

    de

    un amplio

    debate

    que

    ha durado

    bestantes

    años,

    los teóricos

    de los rasgos

    recono-

    cen

    que

    la

    situación

    tiene una influencia

    en

    la

    conducta,

    y por

    lo tanto no

    defienden una consistcncia

    absoluta,

    sino

    que

    considcran

    que

    la conducta

    será semeJante en

    situaciones

    funcionalmente

    similarcs

    a

    través

    del

    tiem-

    po.

    Esta

    idea

    cstá

    avalada

    por

    muchas invesügaciones

    que

    han

    puesto

    de

    manifiesto que

    sf

    que

    exlste

    consistencia

    cuaído

    las

    situaciones

    son

    simi-

    lares

    pero

    no

    cuando

    son dispares.

    Además,

    actualrnente

    también

    se

    está

    destacando

    gue-tampoco

    serfa ddaptativo

    que

    las

    personasse

    comporta-

    rán

    siempre

    de

    la

    misma

    rnanera,

    independientcmente

    de las

    demándas

    de

    la.situación,

    puesto

    que

    esto le

    darra

    un

    carácter

    rfgido

    y

    estereotipa-

    do

    a

    la

    conducta,

    asociado

    con patologfa.

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    4/46

    PsrcolocfA

    DE Lr

    PE&SllllAIID4pr

    Que

    una

    per§ona

    Posea

    un

    rasgo

    implica

    gge..S,S

    orvcr:s

    99,

    &¡gnios

    dc,a,,flsió.n,gc,r ?srgE:t,

    po.,lo

    ?3

    t?"_1

    ,

    a

    .§tOs

    lüPicsJ¿

    ienlgs-Cglntos

    con

    pgsrur.ts

    aefe¡xi"as

    u

    hostiles'

    Los

    "

    XiUUrai¿rFoj,por¡er

    otro

    ejemRll,

    dicel

    hece¡.Égi'áe.itr;

    eóbrc

    gpmo

    e,sa§

    ai qg:i-

    u

    "ii¡:U*.o

    en

    la lnteracctón.Eodal

    (McAdams' 1992)'

    i#'Éii

    ¿

    de

    la

    persdn¡t¿"{.rogü¡lrc

    qqe

    se

    especifi-

    ñ;ü,¡*e*;i¿m.iü,ni

    iciiúrlce

    1lf..y'f.3:-1u:-'l*11:"

    f,;#;á;¡i;pá;r"iéqd

    "@"t"s

    v

    geñoo¡-o"

    sc't¡1duée¡r

    en

    una

    con-

    son,1997,1999).

    2.2.

    Carácter

    chueal

    de

    loe

    rasgoe

    Por

    lo

    gue resPecta

    al

    carácter

    causal

    de

    los

    rasgost

    no

    cx]st9.tt'avfa

    un

    acuerdo

    entr€

    sr¡s

    deñ;;'

    i';

    Jg""t'

    "omo

    B¡¡eq

    y

    Craik

    (1983)

    i;;

    ;;;;

    ,o,,

    rimpl"s

    categorlas

    que res'u*en

    actos

    relecionados

    y agr+'

    gados

    sobre

    el

    tiempo-y

    ;;;,-p91il

    tanto'

    no

    expücan

    nada'

    Para

    otrps

    (Allport,

    1937;

    Funder,'f

    S'SS;'M"Crae

    y Costa'

    l9-95'

    1999)'

    sin

    embargo'

    los

    rasgos

    son

    caracterfsüÁ'o"lo

    disujeto'

    es

    deci¡;

    no

    consideran

    que

    sean

    patrones

    a.

    .orr¿,-[I',

    oio

    áUa.a*psicológicas

    roalos

    q¡'e

    sc

    i:nñe-

    ren

    de

    la conducta.

    co,'"iá"o"

    que los

    *igot

    son

    la

    caüsa

    de

    la

    conduc'

    taynosólocategorfassumarias,meramentcdescrlptiÚas'queresumen

    las

    tendencias

    conductuales'

    Desde

    nuestra

    postura

    serla

    totalmente

    necesario

    que

    se

    especiffca-

    sen

    los

    mecanismos

    "";;;;;;;p"t.a"

    los

    cuales'

    uná'dlqposicifn

    abs-

    ;;;

    *-"

    ".

    ."dq"i".áú;ión

    de

    personalidadf

    Ptlde

    dar]Yq*

    "

    un

    comportamiento

    "";;t;i;.

    Prr"

    q,"

    io'ryssos:1drycry1un

    ,_a

    enti:

    dad

    causal

    serla

    necesario

    que se

    esp".iffc".ao

    lós

    mecdlj§mós

    qtre trans-

    forman

    esa

    tendenci"

    ;;;rrl;da

    y

    abstracta

    en

    qnq

    co¡ducta

    colcre-

    ta.

    Por

    ejemplo,

    ,i

    qu"i**

    "xpli""i

    a

    comportamienloagcsil/9

    un1

    ""*"""i*^Ul,

    pod¡amos

    decir

    simplementi

    que

    s9

    comporta

    asf

    porqué

    ir

    ñrrilf,

    prrque

    tiene

    este

    rasgo'

    En

    este

    caso

    utilizamS:1ry'E:-p*

    ;;;ii""t[

    "orrd,r"tu,

    pero

    incu-rrimos

    en

    una

    ctr§ulartd¡d

    G{ffcedvi

    nuesto oue

    el rasgo

    ,"

    irrd,¡o

    det

    comportamiento y

    dcspuás

    utillzamos

    ;i;;r";;;""pñL,

    r.

    Áisma

    conducta

    que uulizam6s

    Fala

    inducirlo.

    ;;;;;;rt"

    probl"ma

    es

    necesario

    quá

    se

    especifiquen

    l.os

    lecanis;

    mos

    a

    partir

    de

    ios

    cuales

    las

    tendencias

    de

    respuesta'

    que

    impucan

    un

    *.go,

    *

    conüerten

    en

    conducta.

    En el

    caso

    que

    hemos

    ÉryO

    como

    ejem-

    ;ú:ódr";os

    explicar

    el

    comportamiento

    agresivo

    porla

    actuación

    de

    I rrr""*it*o

    denominado

    nsisgo

    atributivo

    hostil',

    que

    hace

    gue las

    f"rro.r",

    hostiles

    tengan

    una

    tendencia

    a codificar

    las

    situaciones

    nega-

    ffi;

    "a;;i"iú"a

    eit"ación

    pártIcülar

    (v¿n Mechelen v De

    Raad,

    re99).

    Salvo

    algunas

    excepciones,

    eomo

    la

    de

    Eysenck

    o

    9oy'

    que

    sf

    se

    han

    ocupado

    de

    especlficar

    los

    mec¿nismos,

    en

    cstc

    caso

    de

    carácter

    neuro-

    ñijñ;;;,

    .H;¿"ár

    l"r

    ",r"lu.

    un

    iasgo

    sé'conoreta

    gn

    una

    conducta

    ;;;il;i;';tuól;ó;á"

    l*

    '"'eo',

    genenal' no

    ¡e

    han

    cenrado

    en

    ;il;;ñ

    fu

    *"S*

    producen

    J

    comportamiento,

    lirnitándose

    a desa-

    ñU*

    "r"rrmi"s

    dlictiptiva

    basadas

    en

    la

    observa$ó¡

    de

    patrones

    de

    ;;-"d"",*;".urentes.

    ii

    he"ho

    de

    Que

    la

    mayorla

    de

    las teorlas

    sobre

    ,**,

    ,"

    t"v*

    limit¡do

    a

    deacribir

    y

    no

    a erPlicar

    una

    de

    las

    crlticas

    rneí

    i-p"rt"¡tes

    quc

    se

    le

    hacen

    desáe

    otras

    perspectlvas

    a

    la

    psicologfa

    de

    la

    pcrsonalidad.

    3.

    LA

    TEORIA

    DE

    CATTELL

    3.1.

    tnhoduceión

    Cattell

    comenzó

    cstudiando

    qufmipa,

    y

    todos

    sus

    biógrafos

    están

    de

    "*er¡n

    en

    quc

    este

    hecho

    influyó

    en

    su

    forn-¡a

    de

    cntender

    Ia

    psicologfa,

    puesto

    que

    uno de

    sus

    principales

    objedvos

    fi¡c

    descubrir

    éuántos

    y

    cuá-

    il-"r*-.l;

    ii"n1"nt*

    b¿ri"*

    o rasgos

    que

    gqDfigufaban

    laesEr¡ctura

    de

    la

    pcrsonaltdad.

    Dcl

    rdsmo

    modo

    que

    Mepdclojev

    {ryiñ{

    los

    elementos

    gufrni*.,

    cattell

    3c

    propr§o

    hacer

    r¡na

    taxonomfa

    de

    Ios

    elementos

    o ra§-

    go. qoo

    formaban

    la

    estructura

    de la

    pcrsonalidad.

    Durante

    algunos

    años

    fue

    ayudante de

    invcstlgación

    del

    psicólogo

    inglés

    §pearman,

    crcador

    dol

    análisis factortsl

    ejerciendo

    esta

    circuns-

    tañcia,

    igualmcnte,

    una

    gran

    lnfluencla

    en

    la'obra de

    Canell,

    ya que

    ha

    sido

    un

    áefensor

    a ultranza

    de la

    utilización

    de

    métodos rn:Itivariados.

    En

    uno

    de

    sus

    últimos escritos

    (1990)

    inslste en

    la

    adecuación de

    la uti-

    lización

    del análisis factorial

    para

    descubrir los elementos estructurales

    de la

    personalidad.

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    5/46

    '

    lsz

    eilqoj.ocia

    or

    rr

    pERsoNArrpAp,

    TEoRfA

    e

    rMvBsflcecióH

    e

    '

    Podrfamos

    decir

    que

    todo

    el trabajo

    de

    Cattetl

    se

    ha orientado,

    por

    un

    lado,

    aI

    descubrimiento

    de

    los elementos que

    configuran

    la

    personalidad,

    y por

    otro,

    al desarrollo

    de

    pruebas

    para

    poder

    valorar

    estos

    elementos

    o

    rasgos,

    ya

    que

    ha considerado

    fundamental tener

    buenos

    lnstrumeritós

    de medida

    para

    evaluarlos

    rasgos descritos.

    También ha

    defendido

    rei-

    teradamente

    que

    la

    forma

    para

    poder

    conseguk

    ambas

    metas

    era

    la

    uti-

    lizaciín

    del análisis factorial

    (Cattell,

    t990).

    3.2.

    Loe

    tree

    método8

    de la psicología

    Cattell

    (19ó5)

    disüngue tres métodos de estudio de

    Ia

    personalidadr

    el

    univariado

    (o

    blvartado),

    el

    multir¡¿riado

    y

    el

    clfnico'

    Mediante

    el méto-

    do

    univariado

    se

    establecen

    relaciones entre

    Ia

    variable

    independiente,

    manipulada

    por

    el experimentado¡,

    y

    la

    dependiente,

    que

    es

    medida

    para

    comprobar

    los efectos de

    Ia

    manipulación

    de la

    variable

    lndependiente.

    El método

    multivariado

    üene

    como

    finalidad

    €studiar Ias

    relaciones simul-

    táneas

    existentes

    entre

    gran

    número

    de

    variables.

    El

    investigador no mani-

    pula

    las

    variables, sino

    que

    deja

    que

    se maniffesten

    tal cud son

    en la üda

    real,

    y

    se

    sirve de

    métodos estadfsticos

    para

    estudiar

    las relaciones

    entre

    ellas.

    Ambos

    métodos

    hacen

    énfasis en

    el

    rigor cientffico.

    Cattell

    defiende la

    utilización

    del

    método mulüvariado

    porque

    consi-

    dera

    que

    Ia

    conducta

    humana

    es muy compleja

    y

    entran

    en

    juego

    las

    inte-

    racciones

    de

    múltiples

    variables.

    Además

    opina

    que

    la

    mayorfa

    de las

    variables

    realmente

    relevantes

    se

    escapan a

    Ia

    manipulación

    por

    lo

    que

    en muchas

    ocasiones

    los

    investigadores

    se

    han centrado en aspectos

    tri-

    viales

    del

    funcionamiento

    humano.

    Según

    Cattell

    el

    método

    clfnico

    es

    similar

    aI

    mulüvariado

    ya

    que ambos

    pretenden Ia

    comprensión de

    la personalidad

    total, tal

    y como

    se

    da en Ia

    üda

    real,

    sin

    el

    artefacto

    de Ia

    manipulación.

    Sin embargo, el método cll

    nico carece

    del

    rigor cientlfico requerido

    ya que

    no

    r.rtiliza

    procedimien-

    tos experimentales

    ni

    análisis estadfsticos.

    3.3.

    Pereonalidad:

    tipos

    de

    rasgos

    Cattell

    (19ó5)

    define

    la

    personalidad

    como

    «aquello

    que

    nos

    dice lo

    que

    una

    persona

    hará

    cuando

    se

    encuentre

    en

    una

    situación

    determina-

    da"

    (pág.

    l5).

    Dada

    su afición

    a

    las

    matemáticas,

    expresa

    esta

    definición

    en la

    siguiente

    formula:

    R

    =

    /(S,

    P)

    '

    DEÍBRMINANTES

    ESTRUCTURALES

    Y

    DINÁMICOS

    DE

    Ij

    CONDUCTA

    I53

    ,

    Lo

    que quiere

    decir

    que,

    lo

    que

    hace una

    persona

    (R

    o

    respuesta)

    es

    funclón

    de

    la situación

    en Ia

    que

    se encuentra

    en

    un

    momento

    concreto

    (S

    o

    situación)

    y

    de

    su

    personalidad

    (P).

    Aunque Ia

    mayorfa

    de los

    teóri-

    cos

    de

    los

    Ersgos

    no

    enfaüzan

    el

    papel

    de la siruación, Cattell

    sf

    que

    la ha

    hduido

    en

    sl¡ teorfa,

    y

    considera,

    que

    en conjunción

    con

    Ia

    personalidad,

    dene

    una

    influencia

    en

    el

    comportamiento.

    .

    El

    elemento

    esEuchrral

    básico

    de

    la

    personalidad

    es d rasgo,

    que

    irnpli-

    ia

    rcndencias

    rtacdvas

    generales

    y

    hace

    referencia

    a

    caracterfsticas

    rela-

    dvamente

    permanentes.

    De

    acuendo

    con

    su ongen

    los

    rasgos

    pueden

    ser

    constltucionales

    o

    irmblentales.

    Los rasgos

    consütucionales están

    determinados

    bioló

    gica

    -

    mentc,

    mientras

    que

    los ambientales

    se

    deben a

    Ia

    experiencia, es

    deci4

    a

    intemcciones

    con

    el

    ambiente. Cattell

    ha

    creado un

    procedimiento

    esta-

    dfstico

    complicado, denominado

    Multiple Abstract

    Variance

    Analysis

    (i,IAUA) para

    determina¡

    el

    grado

    en

    que

    los ra§gós están

    determinados

    genética

    o

    ambientalmente.

    Estos análisis

    se

    basan

    en las

    correlacjones

    cntre

    las

    puntuaciones

    de los

    cuestionarios de

    personas

    con diferente

    gra-

    do

    de

    sirniütud

    genética

    (gemelos

    monocigóticos,

    que

    compa-rten

    el 10U/o

    de

    sus

    genes

    o

    gemelos

    dicigóticos

    que

    tienen

    en común,

    aproximada-

    mente

    el

    SWo)

    y

    ambiental

    (hermanos

    criados

    juntos

    o separados).

    En función

    de

    su

    contenido,los rasgos

    se

    pueden

    diüdif

    en

    rasgos de

    capaddad

    o apdtudlndes, de

    ¡rerronalldad

    o

    temperamentales

    y

    ras-

    gos

    álnámlcos.

    Los

    rasgos

    de capacidad

    o

    aptitudinales hacen

    referen-

    cia

    a los recuxsos

    para

    solucionar

    problemas.

    Para

    Cattell, la

    inteligencia

    es

    un rasgo

    incluido

    en esta

    categorfa. Los

    rasgos de

    personalidad

    o

    tem-

    peramentales

    se refieren

    a Ia

    forma

    peculiar

    de comportamiento de

    cada

    persona

    o

    tendencias

    estilfsücas

    y

    los

    rasgos dinámicos

    están

    relaciona-

    dos con Ia

    motivación

    o

    causa del comportamiento.

    Dg acuerdo con el rango

    de

    aplicación, distingue,

    como

    Allport,

    entre

    rasgoc

    comunes,

    o aplicables a todos los indiüduos

    y

    eapedficas

    o exclu-

    sivos de

    una

    persona,

    aunque

    su trabajo

    ie

    centra en los

    comunes.

    Por

    último,

    en

    función

    de su

    significación,

    podemos

    encontrarnos

    con

    rasgor

    superflclales

    y

    rar¡gos

    fuente

    o

    profundos,

    Los

    rasgos

    superfi-

    ciales

    hacen

    referencia

    a

    conductas

    que,

    aparecen

    unidas

    a

    nivel

    superfi.

    cial

    pero

    que

    realmente

    no covarfan

    conjuntamente

    ni tienen

    una

    ralz

    causal

    común.

    un

    rasgo

    fuente

    o

    profundo

    üene determinado

    por

    con-

    ductas

    que

    covarlan

    conjuntamente,

    de forma

    que

    constihryen

    u*

    d.irrr"n-

    sión

    de

    personalidad

    unitaria

    e independiente,

    cattell

    se ha

    focalizu¡;

    ."

    los

    rasgos

    fuente,

    ya

    que

    considera

    que

    constituyen

    los

    pilare;;;il;..-

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    6/46

    '

    154

    ps¡corocf^

    ,e il

    pERsoNAIp^o,

    TEoRIA

    p

    nwEsTIC4cióN

    (I)

    .

    sonalidad,

    utiüzando

    el

    análisls

    factorial

    para desqubrirlos

    y poder dcs-

    cribir

    la

    esfer¡

    de

    Ia

    ¡rereonaltdad

    que quedála

    constituida

    pÓr

    éstbs

    rasgos.

    3.4.

    Concepciones

    Previss

    cattell

    opinaba

    que

    habfa

    que

    determinar

    emplricamc,¡rte

    cuÁles

    eran

    los

    rasgos

    frrndameltdes

    de la

    personalidad'

    Por ello'

    P"o

    o- l11

    ot*

    elementos

    "r,*o"ol"r,

    p*JO?el

    análisis

    del

    lenguaje,

    ya

    quc

    cónsid9-

    i"i"

    á""

    "r

    idioma,

    rt"iáá"l,

    evolución

    de rri.t9¡

    dq

    aflos'

    dtryT

    i:

    oalabras

    que

    recogen

    cualquier

    cualldad,

    utlllzando

    lo

    qr9

    sc

    conocc

    como

    fi;"tt"

    ü;;;:P;1;

    '-jio,

    el

    trabaJo

    de

    cattell

    no se:basó

    en

    unA teo'

    rla

    concreta

    ni

    en

    lo;;;,r.;,"o|"ás

    habfan

    propuestó

    antes

    qud

    él'

    Por

    otra

    parte,

    Cattell

    estaba

    en

    contra

    de

    la utili-zación

    de

    térririnos

    de

    uso

    común

    ""

    "l

    r""g"":"

    i;;"

    sociable,

    responsab-le'

    crc')

    para

    peno-

    mi¡ar

    a los

    elementos

    estructurales

    o

    rasgos-

    Pensaba

    que

    podlan

    Oar

    iü;;

    "

    contusión,

    d;"i;-q""

    ;isignificad-o

    de

    estos

    térmtnos

    es1á

    car-

    ;.ñ;

    ¿

    ililá"

    a"

    á",

    y

    árnotaciánT

    -uy

    extendidas

    socialmentq,

    qt¡e

    ;;;á";

    áar

    pic

    u

    ir,t"rp."t""iones

    erróneas

    o diferentes

    a

    la

    idea

    qIe

    el

    cientffico

    quiere

    t

    "rr"átit

    toando

    los

    t¡sa

    para

    denominar

    un

    rasgg'

    Por

    "ri,

    *rO"

    propuso

    la

    u-tiliáción

    de

    una

    ,rr*"

    no.n"nclatura

    con§isten-

    te

    en

    utilizar

    t."

    l"t

    as]e

    "-U"""á"tio

    (A,

    B,

    C"')

    al

    igud

    que

    se

    ha

    hecho

    ;;üo[l;ñ;-t

    -tnas,

    o

    lndices

    Universales

    (IU)

    seguidos

    de

    un

    .rr1*"ro,

    o

    términos

    griegos, o

    neologismos

    formados

    por

    las

    prirnera's

    ,nuu",

    áe

    las

    palabra"s

    ,iilir.d."

    en

    la

    descripclón

    de estos

    rasgos.

    Asf,

    ;;;

    ;ñü-

    il;

    I

    p;"d"

    d,

    pry

    e1_t

    en.emo

    tio

    nal s

    ensil

    iviry

    (

    sensibi

    -

    iia"a *o"ional

    protegida),

    Haria

    de

    Hard

    realisn

    (realismo duro)

    o

    Par-

    ,"¡"-a"

    p"r"tl^)otheíi"

    inmunity

    (inmunidad

    parasimpáüca)'

    Igualmente,

    cattell

    argumentaba

    que

    en

    ps"1t9199f1

    t"'btl:l-19^1::

    d"

    ,rriltipl"t

    formas

    (autoinfonnes, registros

    fisiológicos'

    csliticac¡ones

    de

    observado.*,

    "o"au"t"t

    oUjetiuus),

    Éero

    dado

    que

    ninguna

    de

    dlas

    es

    .o-pl"tu*"nte

    satisfuctoria,

    ya

    que

    todas

    üenen

    aspecüos

    negativos'

    aun-

    qrr"

    l'

    cada

    caso

    estos

    aspeóto"-

    .on

    distintos,

    serfa

    convenlente

    en la

    ilrestig"ciOn,

    uülizar

    distilntos

    procedimientos pars

    asf,

    compensar los

    aspect;s

    negativos

    de

    unos con

    los

    positivos

    de

    Igs otros.

    De

    la misma

    -rn*.r,

    "."i"

    qu"

    si los

    estudios se

    llevaban

    a cabo de forma

    rigurosa,

    los

    resultados

    alcanzados

    deberfan

    ser

    los mismog,

    independlentemente

    del

    tipo

    de dato

    utilizado.

    Cattell

    distingufa tres tipos

    de

    datos:

    los datoe

    L

    (life

    ovtda).

    Q

    (ques'

    tionnaire

    o

    cuestionarios)

    y

    T

    (obiective

    fesfs o

    pruebas

    objetivas). Los

    y

    DrNAMrcos

    DE

    I-{

    co¡qucrA------

    I

    ordinarios

    de

    la

    üda

    a

    t

    ó

    datos

    dc

    üda

    hacen

    referencia.a

    hechos

    Ií¿,."

    ¿á",*"t

    blo,

    csmo

    edqd,

    nlvcl

    cdr¡c¿tivo

    alcanzado,

    i¡rre-

    H;;"*

    ;trmcro.d"

    acctderites

    da

    999'li¿,

    calilcactonel

    escolays'

    ñ;

    d;";ñ

    pt

    id""

    dc

    cuestionartos;

    son

    porlo tanto

    datos

    infor-

    ffi

    oor

    ta

    perlqn,

    qr*re

    pucdc

    por

    ello

    mentir-voly.qdy"it€'

    o auto-

    dos

    por

    n

    pcrsoll4r

    fluc

    PrrE{lE

    Irur

    Euu

    r¡rs¡¡u

    -v

    ffirffi;i;"ná

    üio*ctente'

    Porrlltimo,

    Iosdatos

    T

    o

    de

    pruebas

    ffi;;;;

    fotpt"É¡a*

    pár

    cattell,

    v

    hager-r

    refertncia

    a.

    nru-ebas¡1

    i;"'.""1,

    p"tso"a

    erraluada

    no es

    consciente

    de

    la

    relación

    existente-enre

    ;"6;Hti;"'"rqt""f

    tu?.d"Personaudads¡,:f

    I"-',"1*Ii*^?

    H;á;üñáL[-fi

    ;;

    ""

    hberinto,

    Il.3-p'?"ión

    de

    l"Fi:'1

    :*n-

    ;;;;rz;'áJno-"-t

    o

    palabras

    hmillaros'

    o

    la

    presión

    d-e

    la

    escritu-

    H}]J*;,

    "i"-plos

    dJpruebas

    objedvas

    utiltzadas

    por Cattell.

    .1.5.

    La

    ostructura

    do

    la

    peraonalldad

    Comovahemosindicado,elpuntodepartidadelosestudiosdeCat-

    oU

    f".

    "l

    á"ali.it

    del

    lenguaJe,

    i"

    q'"

    consideraba

    que

    todos

    los

    aspec-

    ;;;;ü*,id

    funcio'r,.miántopersonal

    estaban

    recosidos

    en

    la

    len-

    irua.

    Concretamente,

    so

    baso

    en

    un ástudio

    de

    Allport

    y

    O$b-ert

    en el

    que

     ;;;,I"-;ii-gs¡

    términos

    del

    diccionario

    Webster

    de

    la

    lengua

    ingle-

    ;i"d{ió"

    á;

    iSZSI,

    relativos

    a

    todos

    los

    aspectos

    relevantes

    de

    Ia

    per-

    sonalidad'

    Estos

    términos

    se

    podlan

    clasiñcar

    en

    cuatro.

    diferentes

    categorfas:

    l)

    rassos

    o

    términos

    que

    expresaban

    una

    tendencia

    consistente

    y

    estable

    á'"

    *irp"""miento;

    i)

    estados

    de ánimo

    temporales;

    3)

    términos

    que

    #;;i;;;;cia

    al

    efecto

    que

    la

    conducta

    del

    sujeto

    tenla

    sobre

    otros

    v

    ¿)

    rn"

    categorfa

    mixta.

    Como

    estaba interesado

    fundamentalmente

    en

    áñ ]|t[,cutt"U

    partió de

    la

    primera

    categorf-a

    a

    la

    que añadió

    apro-

    iniadament.

    iOO

    t¿rmirros

    rel¿ciónados

    con

    estádos.

    Con

    esta

    selección

    i;;'"dr-"

    unos

    4.500

    términos,

    que

    consideró

    que eran

    representativos

    ¿rlprÁ

    ¿".*¿sar

    la üteratura

    sobtc

    per-sonalidad

    de

    la

    época'

    No

    obs-

    tanie, a

    partir

    de

    esta

    rrvisión,

    aña{i{

    "lguno.

    términos relativos

    a ras-

    gos

    de

    inteligencia

    y

    diferentcs

    habilidades'

    Mediante diferentes análi3i5

    de

    cluster

    comproM

    que

    estos

    4.500

    tér-

    minos

    aproximadamente

    se

    podfan agrupar en

    171

    grupos

    o

    variables dis-

    tintas.

    Posterlormente,

    100

    adultos fuencn evaluados en

    estas 171

    vana'

    bles

    y

    con

    los datss

    obtenidos

    se realizaron análisis

    faetoriales

    que

    arrojaron la existencia

    de 35

    variables bipolares

    tg.les

    como emotivo-tran-

    quilo,

    considerado-desconsiderado,

    etc.

    Estas se

    incrementaron afladiendo

    algunos

    términos

    psiquiátricos, Después,

    se

    pasaron

    estas

    va¡'iables

    bipo-

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    7/46

    '

    15¿

    psrcol-octA

    DE

    pERsoNALTDA.D:

    tEoRtA

    É.¡¡¡psnc¿-gt[t¡¡

    ,

    '

    lares

    a

    una

    gran muesta de

    adultos

    procedeotes,ao

    pqU¡Uo¡4,¡1¡¡yidi*".

    ,i

    sas

    para

    q"J t""

    evaluaran

    y

    el ar¡áIists

    faatortal:di

    ü,-a$qlcs-ffi::iii

    ¡a

    ti

    factáres.

    En otra serie

    de

    procedimlontos

    stinit${.fU.gbruvlfptf

    $

    ij

    ?actores,

    que

    podfan explicar

    Ia

    mayola

    de

    las

    condüCüis

    de

    la

    csfera de

    :'i

    la

    personalidad,

    Por

    ejemplo, uno

    de

    estos factores

    o

    rasgos

    fugnt$,cncoltra$9:fuc,;ii

    Dominancia-sumisión,

    que

    englobaba

    los

    sigulcntes

    ü

    asertivo-sumiso,

    seguro-insegurr"

    ügorosomanso

    o

    La

    segunda

    fase

    de

    la

    investigación-

    co-nslstió

    e¡"d.i¡Xrmtn$,.-lf

    :9S

    pmibl;

    ;;;;"to.

    Io.

    mismos

    fa

    Jtorcs

    hall ado,s,

    con.{9,.s.d1os,

    t

    (Yde);

    ;;;ü;

    áatos

    procedentes

    de

    los

    datosQ

    (cueellon¡rig¡), Parata.éo5is'

    trucción

    de

    los

    cuestiot

    "Jo",

    Cattell

    se

    basO

    crr

    los

    ruqt$¡:g

    cnlongdos

    '';

    con

    antenoridad,

    que

    l"

    .i*f".""

    como

    fuénte

    pa.a.ldl,fOrotUtaclOrrli,

    r.,

    los

    ftems.

    Se

    escribieron

    ái1""

    d" ltems

    que

    se aámtntig¡¡gn-a

    grandes

    *o"r

    de

    personas

    ,o*d""

    y

    después

    de.I9*t'."

    *tUlis

    fucr1;ftc-l

    con

    las

    contestaciono

    áiárr

    obtutiemn

    1ó fuctorglüc

    pcrsoir$ld4dr

    nrio,

    f""tores

    son

    los

    que fueron

    recogidos

    posterlorff¡ente

    en

    cl

    cono-

    cido

    cuestionario

    I

    6PF-(

    tL

    Personaliry-Facrá;

    Ca6alli'ilbcr

    y

    Tatsuoka,

    1970).

    De

    estos

    l ó

    factores,

    12

    coincidfan

    con

    Ios obtenldos

    ¿nterioqr¡c1le

    con Ios

    datos

    L

    (denominados

    con

    las

    letras A,

    B, C,

    E,

    R

    G,

    H'

    I'

    L'

    -tt'

    ñ,

    Ol,

    y

    4 eran

    exclusivos

    de

    los

    datos

    Q

    (denominados con la

    lctra Q

    y

    ,rUi.¿Í.*

    del

    I

    al 4),

    mientras

    que

    3

    de

    los

    datos

    L, no sc repitleron

    en

    ilr

    d"t";

    ;.*edentes

    de

    los cuestionarios'

    Por

    tanto,

    a

    péssr

    de

    qge

    algu-

    nos

    factores

    son

    propios

    del método

    utilizado,

    se obtuvlérOn

    12

    factores

    que

    son

    comunes

    en

    ambos

    métodos'

    La

    descripción

    de

    los

    factores

    de

    primer

    orden obtenidos

    mcdlante

    1". ;;;;ttb

    (cattell

    y

    Kline,

    1977)

    pueden verse en

    la:T¡bla

    ¿'

    1'

    Estos

    factores

    no

    son

    completamente

    independlcntés

    ya

    que

    aná-

    lisis

    factoriales

    llevados a

    cabo con

    ellos

    arrojan

    soluciones de

    8

    factores

    de

    segundo orden

    (Cattell

    y

    Kline,

    1977).

    §tn

    embargo, Cattcü consldera

    que

    el

    poder

    prcdictivo de

    los hctores

    de

    primer

    orden

    es mucho

    mayor.

    Algunos

    de

    estos hctolEs

    de segundo

    orden serfan Enda-Inüa

    y

    Ansie-

    dad.

    EI

    primero

    serla

    un

    factor

    en

    el

    que

    saturarfan los

    factores

    de

    pri¡

    mer

    orden A,

    E

    H

    y

    Q¿

    y

    que

    serla

    eguivalente

    al

    hctorrii¡

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    8/46

    sonalidad

    a

    partir

    de

    Ios

    datos de

    las

    pruebas, ob,jellv

    deraba

    la

    máneda

    auténtlca

    de

    la

    inrtstigaci§n

    {e

    la,

    ello, se

    crearon

    más de

    500

    pruebas

    otJ-etival,99fS"o;"

    q"á'"f

    *.i*"

    tiene

    que

    Uorrar

    let¡¡s,

    o-Pruebas

    de.tt${C

    á

    ".r

    1.,

    qr. seüáen

    gue

    escriblr

    A,reves

    nrf4Ñi,..,q;

    res, etc. ¡vtediante

    e.stas

    iruebas,

    Catt€ll

    pretendfa

    mdtf,

    tP,{| }

    ;;r;i;t

    de

    personaliád

    tit

    que

    la

    p"*o"

    fue.1a

    conrg,f-grl"

    d:

    19,q11¡

    Posteriormente

    Cau¿ll

    empren{ió

    e 'estudi«i.de

    lai

    se

    estaba

    evaluando.

    il,

    p"r

    rjemplo,Ltar

    i*ri

    egoe-

    ffitlfih+

    ta

    lograr

    que

    se

    produzü

    un

    n¡¿o

    intenso

    "ttr.r-tti,"aI'+;t

    :**li

    timiáez,

    o la

    velocidad

    a

    la

    que

    Ia

    persona

    p-uede leer

    lTct:

    str.a

    col{l:

    á"áiá"

    a"

    rigidez.

    Con

    los

    resuttadós

    dela

    adrnlnistractóñ,de

    esta§

    prye-

    bas a

    muestra,

    a"

    ,,r¡"tol-.t

    ,;iil

    tt*t

    la

    apiicaclon

    a

    est-go

    datos

    $e

    I1s

    técnicas

    de

    anÁtisis

    ft"i"JJ

    ."

    obt'ü"roo

    i I rasgos

    fu

    rt{31e.1tale¡.

    d9'

    pÁo.ralldad.

    Estos

    se

    denominaron

    mediante

    un sistema

    de

    lndiees

    U'ni-

    versales

    (IU)

    seguido"

    i"

    ""

    "rf;Á.

    Como

    los

    factores

    at¡l.doe

    mcdian-

    "

    te

    los

    datos

    L

    y

    Q

    fueron

    ló,

    Ios números

    empleados

    deHs

    de

    los

    lnü-

    .*

    ÚJr"*¡;

    "*

    del

    17

    al

    37,

    aungue

    tarnbifn

    nodggge

    ocontrlr

    euc

    se

    utilizan

    los

    números

    comprenüdos

    entre

    el

    y el 36'

    sl.cs

    q3: no-s€

    ;;;;¡;

    en

    consideración

    il factor

    B

    (obtenido

    medtant¿

    los

    datos

    L

    v

    Q),

    puesto que

    no

    es

    un

    rasgo

    temperamental sino

    de

    inteiigencia'

    que-

    ¿i"i"

    reduiidos

    los

    dieciséis

    factores

    a

    sólo

    qulnce'

    3.6.

    Proceeo

    Cattell

    insiste,

    también

    en

    este

    aspecto,

    en

    Ia

    conveniencia

    de

    llevar

    a

    ".b;;;;onomla

    de

    las

    fuentes

    motivacionalee

    de

    la

    e,onducte

    y

    err

    la

    "iiliá"iot

    del

    análisis

    factorial

    para consegqirlo'

    En

    oe 93¡o'

    habla

    de

    rasgos

    dlnárnlcoa,

    para hacer

    róferencia

    a

    las

    cuesüonel

    de

    lT ?'*:

    orárr",

    de

    la

    conduóta.

    Los

    rasgos

    dinámicos

    los

    dlüde

    en

    actitude§,

    sen'

    iimientos

    y

    ergios.

    La

    unidad

    básica

    es la

    acdtud

    (Cattell,

    1965),

    que

    ;;rp*.;l;

    fuJt

    "

    del

    interés

    por

    seguir

    un

    curso

    de

    aceló¡

    en

    pardcu'

    l*,

    bag.

    175).

    Asf,

    las

    personas

    pueden

    mosuar

    interés

    en

    las

    relaciones

    sociales,

    en el

    cine,

    "tt

    "i

    J"p"tt"'

    en

    Ia

    lectura'

    o en

    el

    frai +ge

    Por ejem-

    ;i.,;";

    persona

    puede expresar

    la slgrriente

    actitud:

    "Quiéiotesar

    a esa

    'hermosa

    chica

    y quedarmi

    junto

    a

    ella el

    resto

    de la

    tardér.

    Esta

    perso-

    na muestra

    un

    intenso

    inteÁ

    (Quiero...),

    €n

    un

    curso deacción

    pardcu-

    lar

    (...

    besar...),

    hacia

    un objeto

    especffico

    (..'

    esa

    hermoea

    chica...)

    y

    en

    una

    situación

    concreta

    (...

    quedarme

    Junto

    a ella el

    resto

    de la

    tarde).

    Sentimlentos

    y

    erdos,

    Ios otros dos

    rasgos dinámicos,

    se

    infieren

    del

    estudio

    factorial

    de

    las actitudes,

    como

    veremos

    posteriormente.

    DBIERMTNANTES

    B§TRUGTURALES

    YDINAMICOS

    DE

    Iá COhIDUCIA

    159

    ,

    Coa

    el

    prcp{gtto'do

    eonoc¡r

    los cornponentes,de

    las

    actitudes

    elabo-

    ró más

    dc,iláátÚo¡t"t ode

    teste

    objiUicls

    qui

    pasó

    a diferentes mues-

    tras

    de

    zuJctas.

    Con

    estag

    pn¡ebas

    preteüdfa medlr diftrentes actitudes

    o

    modt¡os,

    como

    cl,lntcr{e

    por

    la

    religión,

    el clne,

    o el

    gusto por

    el

    vuelo, el

    tabsco

    o

    el

    alcohó]. E§toe

    tcsts eran

    de diferc¡tes

    tipos,

    asf en algunos

    los

    *Jut*

    tenlan

    que

    lndicar

    qué

    preferfan

    (ya

    qul

    suponfa

    que

    Ia actitud

    se

    tidd,r.¿¡.

    en una

    preferencla),

    en

    ot¡oslse

    pedfa

    lnformación

    a los

    suje-

    tou

    (¡ruesto quc

    el sujeto

    acumularla conocimientos

    de

    aquello

    por Io

    que

    tonfa

    Intcrés),

    micntras

    que

    otros se

    basaban en

    la respuesta

    fisiológica

    prcsantada

    ante

    ¡niteriales

    rslaclonadoi con

    lq

    acütud

    §ra

    que

    supu-esta-

    -¿nte

    ¡"

    actiüdrfah

    reÉpuestas

    aütoirómicas

    antd'eité

    tipo de máierial).

    Pa¡a

    averigugn loe

    componentes

    de las actitudes

    se analizaron

    facto-

    riatmcnte

    las puntuaciones

    procedentes

    de

    distintas

    mediciones

    de una

    úniea

    actltud,

    y

    en

    los

    diferentesr

    estudios

    (e¡

    los

    que

    §e

    analizaban

    acti-

    tudcs

    dtstintas)

    se

    obtuvieron cinco

    factor€s componentcs

    (CatteI

    y

    Kli-

    ne,1977.):

    l. Facar

    alfa

    o

    Eüo consciente

    :

    haco rcfrrencia

    a

    la brlsqueda de saüs-

    facclón

    sin

    qon§iderar

    las posibles

    consecuencias,

    por

    lo

    tanto,

    express

    un

    ryo

    quiero,

    o

    ryo

    deseor

    sin

    limitaciones de

    ningún

    tipo, es

    deci¡, sin tener en cuenta

    la

    realidad. Es

    un componente

    que

    se

    corresponde con

    la

    determinación

    de satisfacei

    los

    deseos

    personales

    ubicados en la consciencia,

    aunque sean

    algo irracio-

    nales.

    2.

    Faaor befa o

    pxpresión

    del Yo:

    sg

    reffere-

    a un

    interés

    maduro

    en

    contacto con la

    realidad,

    asf

    como

    a

    Iós

    intereses

    adquiridos

    por

    lqs

    hábitos

    y *

    obllgadones.

    Repfsenta

    Ia fuerza del interés

    cons-

    ciente

    y

    deliberadamente dcsarrollada.

    3.

    Factorgamma

    o

    SuperYo: hacc alusión

    a

    r¡n

    (yo

    delerfa

    estar inte-

    resador.

    Por ejemplo un

    estudiirnte

    que

    va

    a

    entrar

    en la universi-

    dad

    puede

    cr-ecr

    que

    dehrfa

    tenerinquietudes

    intelectuales

    y

    artfs-

    .

    ticas,

    y por

    ello,

    puede

    afirmar

    que

    las dene,

    aunque

    una

    entreüsta

    exhaustiva

    descubrirfa

    una

    profunda

    ignoranciá.

    Cattell

    alude

    a

    algrrnos

    supuestos

    amantes

    á"

    8""h,

    qüe

    cstaban

    convencidos

    de

    que

    habfa

    compuesto

    sinfonfas.

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    9/46

    4.

    Factor deho

    o

    EIlo

    inconsciente.

    lncluye, ir¡

    de

    naturaleza fisiológica

    (prestón

    arte-r{al;

    ca,

    etc,) ante los

    esdmulos

    rrlácio:rádos;to¡

    mos

    observar

    por

    ejemplo,

    qiando,a

    4ltii{6i¡,

    de

    punta

    cuando

    oye

    una determinadá

    rnU¡ica.

    5. Factor

    Cplilon

    o Conflicto

    lnconsclente:

    so

    t ffcrt,a lo

    reprirnldb

    :

    hecho

    inconsciente

    debido

    al conflicto.

    El

    análisis f;actorial

    de

    segundo

    orden

    de

    estos

    clnco

    cornponentcs dcs-

    cubrió

    que están relacionados,

    por

    Io

    que

    se

    pod¡fan

    rrducfr a

    dos com-

    ponentes,

    uno integrado

    o

    conscientc

    CYo

    y

    SupcnYo)

    y'i-otro

    no

    intca¡1-

    do

    o

    inconsciente

    (Ello,

    expresiones fisiológicas

    y

    cómpltjpÉ,repdnildo$.

    :

    Para

    cumplir su

    segundo objetivo,

    determinar los

    difefiiritcs motir¡os

    existentes

    o factores dinámicos,

    Cattell elaboró

    üna ür-ucgtrh

    amplla,de

    actitudes

    y

    las

    midió

    con,

    al

    menos, dos

    ins.r¡1r.prc¡tos.{$dtnt§.

    p}áú.

    .

    lisis

    factorid

    de

    las

    puntuaciones

    arroJó

    dos

    hctorcü: crgtóty{¡cnümtc¡to§

    Los

    erglos

    hacen referencia a

    los

    factores

    que

    reflejaü;iñpUlsos

    §tológr.

    cos

    innatos, mientras

    que

    los sent{¡nle ¡tot

    haccnalugldü

    a

    aquelloe

    gt¡c

    están

    determinados

    por

    el ambiente, adqulridos

    ftirrdañüHt¡lmonte

    a tra-

    vés

    de

    la

    familia

    y

    la escuela.

    Un

    ergio

    es un impulso innato,

    gue

    se activa

    por

    estfmulos

    ambien-

    tales

    y que

    cesa cuando

    Ia

    meta se

    logra.

    Asl

    por

    cjem¡lO,

    el

    ergio,pg¡pn-

    tal

    se

    provoca

    cuando

    los

    hijos

    üenen

    problemas

    y

    qucdri

    saüsfeéhó

    cuan-

    do

    ya

    están

    fuera

    de

    peligro.

    Para

    decir

    que

    los

    ergios son innatos

    se

    basa

    en

    egtud-ios, tanto,clfni-

    cos

    como

    de

    observaclón

    de la naturaleza.

    Estas rildma*inolt¡yen

    la'ot§pr-

    vación de conductas

    análogas

    aJ comportamiento

    humáu.p en mariffcros

    superiores,

    asf como la observación de

    la

    propia

    condt¡Cta

    hu¡r¡aqá

    en

    un

    amplio

    rango

    de situaciones

    y

    culturas.

    Para

    Cattell es

    lnconceblble

    que

    el

    holnbre,

    relacionado

    estructural

    y

    funcionalmcnte con

    los

    primatcs, no

    posea

    un

    equipamlento

    instintivo.

    Los sentimientos

    son actitudes complojas

    gug

    lnco¡poran inte¡eges,

    .

    opiniones y actitudes

    menores. Por

    ejemplo,

    el

    senümti¡rtó,de urlrhótnbre

    .

    hacia

    su

    hágar,

    induirfa

    las actituder

    frrá"

    s,

    "rpo"",lóüffiós

    y

    el

    mati-

    monio en

    general,

    asl como

    su interés por

    las

    repáraCioncs

    de

    la

    casa. Los

    sentimientos

    se

    aprenden durante

    largos perfodos

    de tiempo,

    por

    lo

    que

    son, de

    acuerdo con

    la

    denominación

    de Cattell,

    rasgos"úbiehules.

    Algunos de tos

    ergios

    que

    cattell describe

    son:

    búsqueda

    de arimento,

    em

    parejami

    ento,

    gregarismo,

    protección

    parental,

    eiploraclón,

    seguri-

    dad, autoafirmación,

    sexualidad,

    belicosidad

    y

    ga.r"n.ia.

    ,h §tE

    2,7.

    entre

    los

    que pode-

    r

    pioplo,

    supcrego,

    interés

    ,

    ,

    i?,1

    cn¡qmado,dlnámleo

    dggcribp

    una

    complicada,red

    de

    interrelacio-

    ,r*

    *t

    t lntereses,

    acdtu'dcs,'¡¿rrtiuUeni;

    ¡,;etai

    ergi""..

    Un

    ergi;

    p,r"-

    de

    ertar

    expÉsado

    cn

    iüflos

    sentlmlg4tos,

    variae

    acdtudes

    converger

    en

    cl

    ml¡mo

    seüüdrlétito,

    algunes

    acttudcr

    pucden

    3ei comunes

    a

    diferen-

    tcs

    sentimlerito§,

    etc.

    íoie¡emplo, cl

    ser,ámjerrto h""i" l"

    ."f"."

    p""a.

    da¡'i*llda

    tanto:aI

    or¿Có:scxüültcorüo

    aI:dc

    protecclón;

    la

    necesidad de

    protecclón

    se

    pucde

    oxpresar cn el sentlmiento

    hacla la

    esposa

    y

    hacia el

    pafs,

    El e¡tram¡ido

    dinárnico

    prede

    cambisr

    como rcsultado

    de

    estados

    emo.

    cionales como htlga,

    cülpa,

    ansledad o depresión,

    o

    por

    cambios

    en

    el

    ambicrrte

    (cambios

    en

    la económfa

    puedcn

    fio¡zar

    drásticos

    cambios

    en

    el

    estilo

    de üda). Cuaudo la

    persona

    se

    hac¡ consciente

    de sus

    necesÍdades

    y

    sentirnientos

    taqlbiéNl

    puedé

    p¿dbif

    Iá uqcqsidad dc

    un

    cambio

    (el

    mari-

    do

    pucde

    deddir dcjar

    dc

    üajar

    continuarncntc

    para

    agradar

    a

    su

    esposa).

    AunEre

    Cattell

    ha hccho

    un

    gran

    csfuqzo

    pgra

    obtcner

    empfricamente,

    tanto la iaxonomfa

    diiloc motlrcs,

    como lcs conipoüentcr-

    de

    los mismos,

    el

    ggnccpto

    de entiar¡ado dlnámico

    ha sldo crldcádo por

    su

    carácter

    espe-

    cr¡lativo.

    3.7.

    Modolo

    oconétlco

    _

    1rl"

    modelo.representa

    el esfuerzo

    de

    Qattell

    porremediar

    el

    probie-

    ma

    del que

    adorece

    srstemáticamente

    Ia

    psicologfa

    de los

    rasgoi,

    al

    no

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    10/46

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    11/46

    164

    .

    rsrcorocli

    ne-u

    r_ensoryermanr

    TEoRIA

    E IrvEsrrcAtrós

    O)

    Tr¡u 4.2.

    -ii"lpl*

    dc clemrnto¡

    del

    Cgcoiqr

    'o

    fgffitd¡,nqrr{{eltdqd

    ,lóPÉ

    dc Colr.ll,

    Eür

    y

    btrtnl«o

    ll970l

    todoprodo

    dc

    b

    ,üiltIr

    üÉdtidü

    rtollzo&

    por

    Ssidedos,

    Corúcro,

    Goirtlc¡

    y

    &

    lo

    G¡,a;

    i97O

    A

    En

    un bonib

    con

    ü&

    rcciol

    (2

    pl;

    B.

    Tármi¡ro mrdlo

    tl

    pll¡r¡rf#iÁd

    bo¿+¡¡

    l0

    p)

    F¡c¡o¡ B:

    cCon¡odo»

    c¡ o

    rhoboion

    conrc

    rorgulbro

    a

    o:

    A.

    Sonrefr

    [0

    p);

    B. Tarcr

    óxr'b

    ll

    pl;

    C.

    Sr

    H,r{0

    p}

    Floon

    C:

    Algunos

    peruoñot porrern

    i¡nomrme

    o wilormc,

    ot fi¡ro

    no

    ¡á

    por q,rát

    A.

    Vordode¡o

    l0

    p);

    B.

    t'b

    csby

    scgruro

    (t

    pl;

    C.

    Follo

    (2

    pl

    Frcroe

    E:

    Hogo

    ogudor

    y

    ¡o¡cósricoc obsrvociona o

    lo gonfc

    d

    ctu'qur

    lo¡ mqtol

    A. Goncrolmentu

    12

    p);

    B. Algunor

    rruco

    (l

    ph

    C.

    Nunco

    l0

    pl

    Fncror

    F: Lo

    *y*

    porla

    de

    lor

    personos

    me con¡idc¡on un lñrlorút{ii.¡{¡bdobL:

    A.

    Sf

    [2

    p);

    B. No aloy

    ¡cgurc

    ll

    nl;

    C.

    Flo

    (O

    pf

    Flc¡or

    G: Cuondo

    roo

    gcnte

    dcroliñodo

    y

    ario:

    A. to

    oc¡ptro

    simplanc¡rh

    l0

    pl;

    B.

    Tórmirrc

    medio

    (l

    p);

    C. lvtc di€udo.y

    m fu¡lidio

    (2

    pl

    Facror H:

    Sicrnpru rr olcgro

    brmor

    porlc

    da

    un

    grupo

    gronda,

    @mo

    rrt,

    uxrlóo,

    ln boi-

    '

    lc

    o uno osomblco

    A. Sf

    (2

    ph B.

    Tórmino

    mcdio

    ll

    pl;

    C. hlo

    l0

    pl

    Flctor

    l: Cuondo

    wy por lo

    collc

    pr¡licro

    dclencrmc

    onta¡

    o

    tor

    utt

    ortlrh

    plntondo

    quc

    o

    cscuchor o

    lo

    genr

    dinfin

    A.

    Vcrdodero

    {2

    p}; B. ¡q" esby

    i€uro

    ll

    p};

    C. Folso

    (0

    pl

    Fa«ot [:

    Cuondo

    lo

    g"nt

    a¡lo¡itorio

    Hs

    dc dominormc, hogo

    [urltnncnh

    lo contrurío

    de lo

    quo

    quicra:

    A.

    Sl

    f2

    pl;

    B. Tórmino

    mcdio

    ll

    pl;

    C. I'lo

    (0

    pl

    Ftoo¡

    M: Poro lor

    podras

    mós

    inporlonb:

    A.

    AF.dor

    o

    los híios o dc$rrollorse

    ofr,ctiysrn

    nlr

    (2

    p); 8. Tármim mcdio

    lt

    pl; C. Ensc

    ñorles

    o

    conholor rus emocioncr

    l0

    p)

    Frcror

    N:

    lv{e grslorlo mór

    ondor con

    pGrsono

    @rhúá

    quc

    or indlvidnr rubcldcr

    y

    rx'

    @s:

    l. St

    (2

    p);8.

    Tármino

    mcd¡o

    ll

    nl;

    C. hlo

    (0

    pf

    Fecror

    O: Dc

    wz

    cn

    cr¡ondo ¡irnlo

    un \ogo türior

    o

    un rugrntino

    mia:ló, dn

    podr

    om-

    pronder

    lo¡ rozonc¡:

    A Sf

    12

    pl; B.Tórmim rrlGd¡o

    ll

    pl; C. l'.¡o

    l0

    pl

    Feoot

    Q,:

    Siando

    odolc¡ccnlo,

    anndo

    mi opinión cro

    dí¡tinto

    &

    h &

    ril¡

    p,cd¡a,

    nor

    molments:

    A. ñlonrsnto

    mi

    opinión

    t2 ph

    B.

    rórrnino modio

    (l

    pl;

    c.

    Ac+tobo

    ¡u

    qqrod#

    l0

    pl

    Froon-Qr:

    lrcforirlo

    lsnár

    un

    ncgocio

    propio,

    no

    comportido

    con

    ofr,ol

    pcnonor

    A. Srf2 pl;

    B.

    l'{o esloy

    rguro

    ll

    pl;

    C.

    }.lo

    l0

    pl

    Fnoot Qr: Cuondo.hoUo

    con

    olguian, mo

    gurb:

    A-

    Decir

    lo¡

    corcs

    i¡lorno

    s6

    rn€

    oclrrneñ

    (o

    pl;

    B. Tármino

    mcdio

    (l

    pl;

    c. ogonirr

    onx

    mis

    idcos

    (2pl

    fST $iO

    r*or

    rn€

    pongo

    €n c¡rodo

    r..riOn-y@

    A. St

    12

    p); B.Tármino

    mcd¡o

    {t

    p);

    C. No

    lOp)

    Y DINAMICOS

    DB

    IJA

    Ió5

    )o

    y

    un

    gran

    impacto

    en la

    psicologfa

    de

    Ias organizaciones.

    Además,

    ci{o

    un

    pioner,

    g:cn:l

    {eqTrolo.de:*tudios *"

    g*,ÍdT

    conductualy

    ,crcsdo,,nt

    cuos

    y:sofisticados

    métodos

    para

    el

    estudio

    de

    la

    personali-

    ai,S't".cmÚsrso,

    e

    pgser'dcl

    fop4

    csfuerzd

    rpallzado,

    y

    sln

    desmerecer

    .i$goluto

    c[

    gran

    yalor

    de

    su

    propuesta,

    podifamos decir

    que

    existen

    pu¡itdsrcñ'¿ue

    nás

    débtles;

    l.

    Aunque exlste bastantc

    base

    empfrlqg para Ia

    mayor

    Párte

    de

    su

    I

    trr¡a;

    su

    Íiodelo

    econéüco

    no ha sldo

    probado,

    quedando

    más

    en

    cl terreno

    esp¿gdativo.

    Además¡'aunqire

    a nfvel teórlco

    reconoce

    el

    papel

    de la

    situactón,

    a

    nlvel

    p¡7gq"irÁtico

    los

    factores ambienta-

    les

    ná se

    hen

    tncluido

    cn la

    prcdtcción

    tle,la

    eonducta.

    2.

    La teorfa

    ha

    gcnerado relativarnentg

    ¡irgca

    lnvcstlgación

    probable-

    mente

    debtdo 8lB

    gran

    diñcultad

    de su

    lenguaje técnico.

    3.

    tós

    ld'factoiés

    {üé-déffende

    Cattell no

    son lndepéndléntés

    entre

    '

    sf,

    por

    lo

    que

    no

    son

    totalmente disdntos.

    4.

    En

    gene¡al, y

    esta

    es

    r¡na crltica

    que no

    sólo

    se

    le

    puede

    hacer

    a

    Cat-

    tell,

    sino

    que va

    dirigjda

    a

    la

    propia

    técnica

    utilizada,

    podrfamos

    decir

    que,

    etrnqu€ la técnica

    es

    objedva,

    en

    úItlma instancia

    depen-

    de

    de clert¡s

    decisloncs

    subjeüvas

    tomadas

    por

    el

    investigador.

    tuf,

    Ios factorcs

    obtcnldos

    y

    su

    número

    dependcn

    de

    qué

    reactivos

    se

    tnduyen,

    del

    procedimfénto de fa4ortzlción

    elegldo

    y-dc

    las

    mues-

    tras utillzadas.

    En

    functón

    de

    qué

    téqnica concreta

    de

    extracción

    dc

    factores

    utilicemos

    o

    de

    qué

    reacüvos

    estemos

    empleando

    pode'

    mos

    obtener

    unos

    factores

    u otros.

    5.

    La importancia

    de

    los factores

    aislados

    (la

    varianza

    que explica

    cada factor)

    decrece

    a

    medida

    que

    el nrlmero

    de hctores

    aumenta.

    fuf

    el

    primcr

    factor

    explica

    más

    varianza

    que

    el

    segundo,

    el segun'

    do

    mái

    gue

    el

    tercero

    y

    asf

    sucegivBmeptc,

    o lo

    que

    es

    lo

    mismo,

    el

    primer

    hctor

    es

    más

    ünportÁnte

    gue

    cl

    scgundo,

    y

    éste

    que

    el ter'

    cero,

    etc.,

    en

    Ia

    predtcción

    de dlferencias

    ihdividuales.

    Según

    Cat'

    tell

    esta

    disminuaOn

    ra

    deoeciendo

    lineahorente

    y

    muy

    poco

    a poco,

    sin

    embargo,

    la

    rcalidad

    cs

    que

    Ia

    disminución

    de la importancia

    de

    los factores

    (varianza

    o

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    12/46

    a

    lgq_'

    ,

    PsrcoLocÍA

    pE

    i. l,a rEoRlA

    DE EYsENCK

    Eysenck

    representa de

    forma

    sustantiva

    al

    clcnüfico

    que

    ha

    sabido

    combinar

    en su

    trabajo

    tanto

    la

    tradición

    corelacionállcorno

    ia

    9¡rpéri1

    mental. Asf,

    encuadrado

    dentro

    de

    la

    prlmera

    tradiciófr

    cstá

    su

    modélo

    descripüro

    o

    taxónómico,

    mientras

    que

    en la

    segunda se lü'duila

    su

    mode'

    lo

    causal

    o

    explicativo.

    Mediante

    el

    modelo

    descriptivo

    propone

    una esEnctura d.imensional

    y

    jerárquica

    de

    la

    personalidad

    basada

    en

    los

    rasgos

    guc la

    conflguran.

    Exactamente

    habla

    de

    tres dimensiones

    independientes

    para

    describir

    Ia

    personalidad: Psicotlcismo

    (P),

    Exeaversión

    (E)

    y

    Neüro{clsmo

    (N).

    A

    esta

    propuesta

    se

    la

    conoce

    con el acrónimo PEN.

    En

    el modelo

    causal

    enlaza

    las

    dimensiones

    identiñcadas

    descripü-

    vamente con

    procesos psicoñsiológigos g ¡g

    explican las-

    {lfg¡en-cias

    con-

    ductuales

    enbe los

    indivlduos. Para Bysenck,

    las

    diftrencias

    tndMduales

    en comportamiento

    se

    deben a

    diferencias

    en

    el

    funciona¡nlento

    del

    sis-

    tema

    nervioso.

    Como

    veremos

    más extensamente,

    propone

    distintos

    meca-

    nismos

    de tipo

    biológico

    para

    explicar

    las

    diferentes

    dimcnsiones

    pro-

    puestas.

    De

    acuerdo

    con

    los

    resultados obtenidos

    en

    la

    gran

    cantidad

    de

    estudios generados

    desde

    el modelo propuesto

    porEpenck,

    se

    puede

    decir

    que

    las

    relaciones

    entr€ los distintos mecanismos

    psicoffsiológicos

    pro-

    puestos y

    las

    dimensiones

    de

    personalidad

    consideradas,

    están más sóli-

    damente establecidas en

    el

    caso

    de

    ExEaversión,

    son más

    insatisfactorias

    por

    Io

    que

    respecta

    a

    Neuroticismo,

    mientras

    que

    en

    la dimensión

    de Psi

    coticismo

    parece

    claro

    que

    serfa

    necesario

    seguir

    investigando,

    puesto

    que

    la teola

    se

    encuentra en

    una etapa

    más

    rudimentaria

    (Andrés

    Pue-

    yo,1999;

    Matüews

    y

    Gilliland,

    1999).

    Segrln

    su

    hijo,

    Michael

    W.

    Eysenck

    (1999),

    Ias

    aportaciones más

    lmpor-

    tantes

    de

    Hans Jürgen

    Eysenck

    serfan:

    a)

    haber

    propuesto

    unas

    dimen-

    siones

    de

    personalidad

    lndependientes;

    á) no haberse

    ümlt¡do

    a descri-

    bir

    estas

    dimensiones

    y

    haber buscado

    explicaciones

    de

    porqué

    existen

    diferencias

    indiüduales mediante

    factores

    fisiológlcos,

    cognitivos o

    gené-

    ticos;

    y

    c/

    su

    gran impacto

    en el

    desarrollo

    de

    la

    terapia

    de

    conducta, ya

    que

    su

    üsión

    de

    la

    adquisición

    y

    eliminación

    de

    Ia

    conducta

    problemáti-

    ca fue

    pionera

    (aunque

    nosotros

    no nos

    detend¡emos

    en este

    punto

    por

    exceder

    los

    propósitos

    del

    capltulo).

    Eysenck,

    también pretendla

    encontrar

    las

    dimensiones

    básicas de

    la

    personalidad

    aI

    igual que

    Cattell,

    pero

    a

    diferencia

    de

    este

    autol con-

    sideró

    que

    debfa empezar

    con

    ideas

    bien

    desarrolladas

    sobre

    ras varia-

    bles

    que

    se

    deseaban

    valora¡;

    y

    por¡Ilq,

    sc basó

    en

    toda

    una

    tradición

    á-J**

    *e

    s9

    habfa

    alá¡mado

    aI

    esti¡di-o

    de

    las

    diferencias-indi-

    írdá;",

    De

    tsta

    ¡iranera,-migntras

    que

    Cattell

    se

    apoyó

    en

    l.os 16'-t'¡-

    ;Jr-*o:a"t"rltrcn

    Ia

    pe*onalidad

    cn-el

    lenguaje

    y

    uo

    partió

    de ningún

    ffiñ;a

    lJJ"o

    i,yr"rr"k

    se

    basó

    en

    teólas

    ya-

    existentes

    sobre

    los

    iuo,áiot

    dc Ia

    persongldad;

    De

    hecho,

    podcmos

    $ecE

    qYe

    las

    tnrluen-

    ;;a;

    E;;"t

    -;;.n

    de

    andguo;

    va

    que

    se

    fundamentó

    en

    la

    tipolo-

    gfa

    htpoórátlco-galénica

    y

    en §u

    posterior

    actuallzaclón

    por

    Kant

    y

    Wtrndt.

    4.1.

    Antecodentos

    o

    influenciae

    BI

    propio

    Eysenck

    (1967,

    1981;

    Eysenck

    y Eysenck,

    I

    9-85)

    ha explica-

    do

    en

    Liti.adas

    ocasiones

    cuáles

    han

    iido

    los

    planteamientos

    que han

    influtdo

    en

    su

    obra.

    Vamos

    a

    pas͡r

    a

    enumerarlos

    para-Posteriormente

    comprobar

    Cómo

    todaSestaS

    lnfluenclas

    culminán

    en

    el desarrollo

    de

    una

    teorl'a

    nueva,

    altamente

    cstructurada

    y

    con

    una

    gran coherencia.

    1.

    Acercamlento

    dPológlco:

    a)

    Ia

    historia

    por

    comprender

    las

    diferencias

    indiüduales

    comien-

    za

    conGaleno, un médico griego al que

    se

    atribuye la-formula-

    cióndelateoladeloscuatrotempsralnentos:melancólico(defi-

    nido

    como sombrfo,

    triste,

    apesadumbrado),

    colérico

    (üolento'

    enojado),

    sangr¡fneo

    (esperanzado,

    optimista)

    y

    flemático

    {cal-

    *"áo,

    *pos"áo,

    Iento)'

    El

    temperamento

    colérico

    equivaldrfa

    al

    extravirddo

    y

    emocionalmente

    inestable

    (o

    alto

    en neuroti-

    cismo),

    el sangr:lneo

    serla

    extraverddo

    y

    estable

    emocionalmente

    (bajoenterroti"l"-o),elmelancólicoserfaintrovertidoyemo-

    cionalmente

    inestable

    (alto

    en

    neuroücismo)

    y

    el

    flemático

    ten-

    drfa

    su

    egulvalcnte

    en

    el introvertido

    y

    estable

    emocionalmen-

    te

    ftajo

    en neuroticismo).

    b)

    De

    igual

    maners,

    una

    gran

    contribuciÓn

    se

    le

    debe

    a Kant'

    ya

    que

    áct"olizó,

    popularizó e hizo

    crefble

    para los

    estudiosos

    del

    momento, la doctrina

    de

    los

    cuatro temperamentos'

    De

    acuer-

    do

    con

    Eysenck

    la

    principai

    dif¿rencia

    entre

    las

    opiniones

    de

    Kant

    y

    las más actuales

    está

    en

    la

    concepción

    teórica de

    ios

    «tipos»

    como

    categorfas

    separad¡s en

    las

    que

    no

    existen

    grados

    .

    intermedios.

    2.

    Aportaciones de Wundt:

    Wundt

    (1874)

    fue

    la

    persona

    que

    dio el

    salto

    y pasó

    a considerar

    las

    categorfas

    separadas como dimensio-

    '1

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    13/46

    ps¡cblocfe

    óE

    r¿

    pERsoNAuDAD:

    TEoRIA

    B

    D.IvEsrIGAcIóN

    o)

    1ó8

    nes

    continuas. Hablaba

    de

    dos

    dimensiones:

    mutable-inmutable

    (extravertido-introvertido

    en

    Ia

    terminologla de Eysenck)

    y

    emoti-

    vo-no

    emotivo

    (equivalente

    a

    Ia

    dimensión

    de

    neuroticismo

    de

    Eysenck).

    Según

    Wundt,

    Ios

    temperamentos

    coléricos

    serfan muta-

    bles

    y

    emotivos,

    Ios

    sangufireos,

    mutables

    y

    no-emoüvos, los

    melan-

    cólicos,

    inmutables

    y

    emotivos

    y por

    últlmo,

    Ios flemáticos,

    serfan

    inmutables y no-emotivos.

    3.

    Ihadiclón

    pslqulátrIca:

    a)

    Otra

    gran

    contribución

    se

    debe a Gross

    (1909),

    que intentó ofre-

    cer el

    fundamento

    ñsiológico

    de

    la

    dimensión

    extraversión-intro-

    versión, aunque de

    forma

    especulativa. Fue

    el

    primero

    en

    rela-

    cionar

    Ia dimensión

    de extraversión

    con una

    propiedad

    funcional

    cerebral

    gue

    se

    denominaba

    .función

    primaria y

    secundariar.

    b)

    También

    es

    importante

    la aportación

    de

    Heymans

    y

    Wiersmá

    (1909),

    ya

    que

    fue

    el

    primero

    en

    darse

    crrenta de

    la

    importancia

    de cuantificar

    las relaciones entre

    variables,

    proponiendo

    el uso

    de

    métodos correlacionales

    y

    desarrollando un

    coeficiente

    de

    '

    asociación, que aunque elemental era

    útil.

    De

    la misma

    mane-

    ra,

    fue

    uno de

    los pioneros

    en

    reallzar estudios expérimentales

    de

    personalidad.

    c) Jung

    (1921)

    popularizó los

    términos

    de Extraversión-Introver-

    sión,

    aunque

    su

    formulación teórica

    no

    tiene

    nada

    que

    ver con

    la

    propuesta

    por Eysenck,

    que

    indica

    eue

    la

    origrnslidad de

    Jung

    fue sugerir

    que

    la

    extraversión se relacionaba

    con

    la

    histena

    (slntomas

    de

    conversión),

    mientras

    gue

    Ia introversión

    lo hacfa

    con

    Ia

    psicastenia

    (que

    englobarfa

    Io

    que

    hoy

    se

    entiende

    por

    ansiedad,

    depresión

    reactiva, fobias

    y

    trastorno obsesivo-com-

    pulsivo).

    La

    psicastenia

    fue

    denominada

    por

    Eysenck como

    dis-

    timia.

    d)

    Del

    mismo modo, K¡etschmer

    (1948)

    atribufa

    una gran

    importan-

    cia

    a

    Ia

    constitución morfológica

    como

    elemento

    etiológico de

    la

    enfermedad

    mental, apuntando

    la

    relación

    entre

    constitución

    lep-

    tomórfica e introversión.

    4. Aportaclones

    psicomébicas:

    a)

    Spearman

    introdujo

    el

    análisis

    factorial

    en

    psicologfa

    Io que

    per-

    mitió

    sustituü

    Ias

    especulaciones

    y

    creencias

    zubjetivas

    por

    datos

    objetivos

    y

    cuantitativos,

    y

    fue

    eiprimero

    en

    demostra,

    Ia

    exis-

    DETERMINANTE§

    ESTRUCTIIB4I¿§_Y

    DINAI'flCOS

    DE

    tA

    CO{PUCTA

    169

    tencia de

    dos

    factores

    definidos

    y

    medidos

    de

    mane¡z estricta;

    ;;*;Ñ;;i.;;

    ;"

    i"

    t"áinoloefa)

    y

    emocionalidad

    o neuro-

    ticismo

    (.w,)'

    b)

    También

    reconoce

    gue

    es

    deudor

    de

    los uabajos

    de

    Guilford,

    pues

    el

    primer

    cuesüonario

    elaborádo

    por

    E¡'senclc

    para

    medir

    ias

    dimensiones

    de

    Extraversión

    y

    Neuroticismo

    constaba

    de

    ftems

    que

    procedfan

    de escalas

    preüas

    cread¡s

    por

    este

    autor'

    5.

    A¡rortaclonec

    ex¡rerlmentales:

    a) E»enck

    también

    recoge

    la

    influencia

    de Ia

    escuela

    rusa

    que

    desa-

    rmlla

    una

    gran

    canddad

    de

    estuüos

    orperimentales

    sobre

    dife-

    r€ncias individuales

    de

    tipo

    psicofisiológico.

    Asf,

    Teplov

    habla

    de sistema

    nervioso

    fuerte

    (extraversión

    en

    l¡ terminologfa

    de

    Eysenck)

    y

    débil

    (equivalcnte

    a introversión).

    b)

    De

    igual

    manera,

    los

    conceptos

    de'tnhtbfció:r

    reactiva

    y

    condi-

    cionáda

    de Hull

    tuüeron

    úna

    influencia

    importante

    en

    el

    tra-

    bajo

    de Eysenclc

    c)

    EI

    trabajo de

    Duffy en

    el

    que

    habla

    del

    arousal como

    energeti-

    zación no

    especffica

    del sistema

    nervloso

    cenEal

    en

    respuesta

    a

    la estimulación,

    también influyó

    notablemente

    en Ia formula-

    ción

    teórica de

    Eysenck,

    4.2. Estructu¡a

    de la personalidad:

    modelo

    descriptivo

    o

    taxonómico

    Eysenck

    (1967,

    lgg})

    propone

    un

    modelo

    jerárquico

    de

    personalidad

    con

    diferentes

    niveles

    que van

    de

    Io más especffico

    a

    Io

    más

    general:

    l.

    El

    primer

    nivel

    está representado

    por las

    respuestas especlficas

    (conductas

    abiertas

    o encubiertas,

    com'o

    cogniciones)

    que pueden

    observarse

    una vez

    y que pueden

    o no ser

    caracterlsticas

    del

    indi-

    viduo

    (ser{a

    cualquier

    conducta

    de

    la

    üda

    cotidiana, como

    por

    ejem-

    plo

    llegar

    tarde

    a

    una

    cita)

    2.

    El segundo nivel üene definido

    por

    las respuestss

    habltuales,

    que

    serfan respuestas

    especfficas

    que

    se

    repiten

    cuando

    las circuns-

    tancias

    son

    similares

    (ser

    impuntual,

    es

    deci¡

    llegar

    siempre

    tarde

    cuando

    se

    tiene una

    cita).

    3. En

    el tercer

    nivel

    los

    actos

    habituales

    se

    organizan

    en

    rasgos.

    Los

    diferentes

    rasgos

    son

    corutructos

    teóricos qur

    r"

    basan

    en

    rL

    in,.r-

  • 8/18/2019 Bermudez - Rasgos (1)

    14/46

    '

    170

    '

    rslcorocfA

    ps

    L-a isnsoNALrpAD:

    TEoBIA B

    rwEsncec¡Óx

    (r)

    correlaciones

    entre

    las

    respuestas

    habituales

    que

    sf son

    observa-

    bles.

    Asf,

    ¡ror

    ejemplo,

    d

    ralgo

    de

    sociabilidad

    incfuye

    actividades

    habituales

    como asistir a reuniones, hablar

    con

    otlas

    person¡s, pre

    ferencia

    por

    estar acompañado

    y

    sentirse

    eburrido

    si

    se

    está solo.

    ,

    Estos

    rasgos

    serfan el

    resultado

    de

    los

    primeros anáIisis hctoria-

    Ies,

    siendo,

    por

    tanto,

    factores de

    primer o¡tden'

    4.

    El

    ruvel más

    general

    es

    el

    cuarto

    en e¡

    gue

    los

    rasgos

    se

    agruPan'

    e4.lo

    que

    Eysenck

    denomina,

    üpos.

    Estos

    tipos

    surgen

    a

    partir

    de

    las

    intercorrelaciones

    entre

    los

    diferentes

    rasgos.

    Estos

    tipos

    serf-

    ;;

    factores

    de segundo

    orden,

    puesto

    que

    se

    obtienen

    a

    partir de

    los

    análisis

    factoñales

    realizados

    con

    los

    ras8os

    o

    fuctores

    de

    pri-

    *".

    otá"t.

    Eysenck

    los

    denomina

    tipos,

    Pero

    no

    hay

    gue confun-

    dirlos

    con

    los

    tipos

    a

    los

    que

    hemos

    aludido

    en un

    principio.

    Los

    tipos,

    para Eysenck son

    considerados

    como

    dimensiones

    contiuuas

    .

    ulo

    hrgo

    delas

    cuales

    se

    puede

    posicionar

    el

    indiüduo

    y.no aat€-..

    ..

    gorfas separadas

    Y Puras.

    Como

    ya

    hemos

    indicado,

    Eysenck

    proPone

    trcs

    tipos:

    Extra-

    versión,

    Neuroticismo

    y

    Psicoücismo.

    En

    la

    Tabla

    4'3

    podemos ver

    los

    rasgos

    (nivel

    3)

    que

    quedan incluidos

    en

    los

    tres

    tipos

    propues'

    tos

    (niiel

    4). Los raigos

    que

    forman un

    tipo,

    coincidirfa¡

    con

    las

    caracterfsücas

    de

    las

    personas

    extravertidas

    y

    alta§

    en neuroticis-

    mo

    y

    psicoticismo

    respectivamente,

    por el contrario,

    las

    personas

    intróvertidas

    y

    bajas

    en neuroticismo

    y psicoticismo

    tendrfan

    las

    caracterlsticas

    opuestas

    a

    las

    que

    se

    incluyen

    en

    Ia

    tabla.

    Asl,

    por

    ejemplo,

    si

    los extravertidos

    se

    caracterizan

    Por

    ser

    m᧠sociables,

    asertivos

    y

    activos,

    entre otras cosas,

    los introvertidos

    serlan

    bas-

    tante

    menos

    sociables,

    asertivos

    y

    activos'

    Frente a

    otras

    propuestas

    que

    tienen

    en

    consideración

    un número

    de

    msgos más

    elevado,

    como

    puede

    ser

    la

    de

    Cattell,

    gue

    propone

    ló,

    o

    la de

    Guilford

    que

    apuesta

    por

    13,

    Eysenck defiende

    que

    con estos

    tres

    üpos es

    suficiente

    para

    describir

    adecuadamente

    la

    personalldad.

    Si bien

    es

    cier-

    to

    que

    estos

    tres

    superfactores o

    tipos

    engloban

    a 27

    factores

    primarios,

    también lo

    es

    que Eysenck

    concede

    a

    estos

    factores

    primarios

    una

    esca-

    sa

    importancia

    práctica.

    Además,

    y

    segrln el

    propio Eysenck

    (1990),

    los

    factores de

    Cattell

    estarfan

    en el

    te¡cer

    nivel de

    su

    propuesta

    (nivel

    de

    rasgos)

    mientras

    que

    los

    3

    gue propone

    Eysenck

    estarfan

    en

    el

    cuarto nivel

    o de

    tipos.

    Las

    principales

    razones

    por

    las

    que

    Eysenck

    defiende

    la

    utiiización

    de

    los

    superfactores

    o

    tipos

    frente

    a los

    factores

    primarios

    o

    rasgos

    serfan

    (Eysenck

    y

    Eysenck,

    1985):

    DETBRMINA¡¡TES

    ESTRUCTT]RALES Y

    DINAMICO§

    DE

    LJI

    CONDUCXA

    t71

    Iut

    4.3. E¡tructum

    icrtrquico

    do

    E¡arqrrurrirír,

    lüurolicirrno

    y Plcolicfuno

    lodoptodo

    dc Eysrlnd,

    1990¡

    l.

    Diferentes

    análisis conducen

    reiteradamente

    a

    la

    aparición

    de

    estos

    tres

    factores.

    Aunque

    se

    obtengan

    más

    factores,

    estos

    suelen

    ser los

    más

    importantes,

    2.

    Los factores

    de

    primer

    orden

    son

    más inestables,

    es decir, los

    super-

    factores

    son

    factorialmente

    invariantes,

    mientras que

    Ios

    factáres

    de primer

    orden

    varfan

    de

    una

    investigación

    a

    otra.-

    3.

    A

    partir

    de

    estos

    tres

    tipos

    se

    pueden

    hacer

    predicciones

    satisfac-

    torias

    en

    distintos

    niveres

    (como

    veremos

    con

    más

    detenimiento

    posteriormente);

    DfiRAVERSÓN

    Socíoble

    Dominonl¡

    Assrtiro

    Actiro

    virol

    BrillontB

    Ah€¡/ido

    Desoreocr¡oodo

    srr."dor

    Ja sansocionas

    lnocionol

    Tímido

    Tocitr¡rno

    Emocionol

    Tenso

    Ansíoso

    Deprimido

    Scát¡micnto

    do

    culpobilidod

    Eoio outoestimo

    NEUROIICISMO

    PSTCOT|C|S,{O

    Agreríro

    Frfo

    Eg